Está en la página 1de 1

Historia de la Sal

La historia de la sal trata del uso y comercio que se le ha dado durante siglos a


la única «roca» comestible por el ser humano. Su uso está generalizado en
todas las gastronomías del mundo, bien sea como condimento, bien
como conservante específico de algunos alimentos, como es el caso de
las salazones de carne y pescado.
No tienen detalles científicos claros acerca de la primera vez que se empleó la
sal, ya sea como ingrediente en las comidas o como conservante. Es muy
cierto que algunos animales de forma instintiva lamen ciertas piedras
con sabor salado y que esta operación les proporciona placer.
Es muy posible que el hombre primitivo tuviera esa necesidad de lamer
ciertas rocas con el objeto de obtener el sabor salino, o que quizás comprobara
que los alimentos rodeados de sal se conservaban durante más tiempo.
Lo cierto es que los usos de la sal por parte de los humanos se remontan a
tiempos muy lejanos y que todas las culturas de la tierra han considerado la sal
como un objeto valioso digno de transacciones comerciales.

El origen del trigo y su historia


El trigo es uno de los tres granos más ampliamente producidos en el Mundo,
junto al maíz y el arroz,  y el más ampliamente consumido por el hombre en la
civilización occidental desde la Antigüedad. El grano del trigo es utilizado
para hacer harina, harina integral, sémola, cerveza y una gran variedad de
productos alimenticios.
El origen del actual trigo cultivado se encuentra en la región asiática
comprendida entre los ríos Tigris y Éufrates, en la zona de Mesopotamia.
Desde Oriente Medio el cultivo del trigo se difundió en todas las direcciones.
Los historiadores y arqueólogos cuentan que las primeras formas de trigo
recolectadas por el hombre datan desde hace más de doce mil años. Las más
antiguas evidencias arqueológicas del cultivo de trigo vienen de Siria,
Jordania, Turquía e Irak.
La palabra trigo designa tanto a la planta como a sus semillas comestibles, tal
y como ocurre con los nombres de otros cereales, por ejemplo, el maíz.
La palabra “trigo” proviene del vocablo latino triticum, que significa
“quebrado”, “triturado” o “trillado”, haciendo referencia a la actividad que se
debe realizar para separar el grano de trigo y de la cascarilla que lo recubre.

También podría gustarte