Está en la página 1de 258

10

THE MAN OF STARS 1


Esta es una traducción hecha por fans y para fans. El grupo
de The Man Of Stars realiza este trabajo sin ánimo de lucro
y para dar a conocer estas historias y a sus autores en
habla hispana. Si llegaran a editar a esta autora al idioma
español, por favor apoyarla adquiriendo su obra.
Esperamos que disfruten de la lectura.
STAFF DE TRADUCCIÓN Y EDICIÓN

THE MAN OF STARS 2


GRUPO THE MAN OF THE STARS

TRADUCCIÓN Y EDICIÓN

CORRECCCION

LECTURA FINAL

THE MAN OF STARS 3


SINOPSIS

Un feroz guerrero cyborg y su hembra humana comparten


un no tan pequeño secreto.
Stealth, un cyborg modelo K, sabe que su pasión por
Zebrina, la hija humana del comandante, está prohibida,
pero no puede resistirse a la hembra con curvas. Anhela
tocarla, aprecia sus sonidos de placer, haría cualquier cosa
para mantenerla a salvo. Cuando se enfrenta a la elección
de proteger a su frágil humana o vivir para ver el próximo
amanecer, la elige a ella, siempre a ella, enviando a Zebrina
a la seguridad. No se da cuenta de que sus momentos
robados tuvieron consecuencias. Ninguno de ellos lo creía
posible.
Después de escuchar que su guerrero murió en la batalla,
Zebrina se enfoca en el último regalo que le dio. Hacer lo
correcto para su hijo es su única prioridad. Pondrá la
felicidad del hijo primero, incluso si eso significa elegir otro
macho sobre el amor de su vida.

THE MAN OF STARS 4


ÍNDICE

Capítulo 1 .......................................................................... 6
Capítulo 2 ........................................................................ 20
Capítulo 3 ........................................................................ 33
Capítulo 4 ........................................................................ 47
Capítulo 5 ........................................................................ 60
Capítulo 6 ........................................................................ 75
Capítulo 7 ........................................................................ 88
Capítulo 8 ...................................................................... 103
Capítulo 9 ...................................................................... 117
Capítulo 10 .................................................................... 131
Capítulo 11 .................................................................... 145
Capítulo 12 .................................................................... 160
Capítulo 13 .................................................................... 174
Capítulo 14 .................................................................... 188
Capítulo 15 .................................................................... 205
Capítulo 16 .................................................................... 220
Capítulo 17 .................................................................... 233
Capítulo 18 .................................................................... 247

THE MAN OF STARS 5


Capítulo 1

La batalla por los treinta pasos del terreno había sido feroz.
La forma de Stealth estaba plagada de proyectiles. Trozos
de carne colgaban de su cara y pecho. Su espalda había
sido destruida por explosiones, su armadura desaparecida
hace mucho tiempo. El dolor era insoportable.
Tenía una sonrisa en su rostro.
Siendo un cyborg modelo K, le encantaba pelear. Sus
brutales amos, La Alianza Humanoide, lo habían fabricado
para ese propósito. Sus hermanos y él permanecían
esclavizados y no podían elegir a sus oponentes, pero
podían derrotar con fervor.
Esa no era la razón de su alegría.
Después de diez rotaciones planetarias de separación,
finalmente volvería a la base de La Alianza Humanoide con
sus hermanos. Vería a su hembra, el único ser
genéticamente compatible con él.
Desde el momento en que Zebrina, la hija del comandante,
había llegado a Ahki, había sido de ella. Había estado
parado fuera con su grupo de lucha, siendo inspeccionado
por daños. Había saltado por la rampa, sus generosas
curvas sacudiéndose, sus rizos negros rebotando contra sus
mejillas marrones.
Su hembra había sido un vibrante rayo de esperanza en un
mundo gris y deprimente. Todos, incluido él mismo, se
habían sentido atraídos por ella.
Entonces su delicioso aroma llenó sus fosas nasales y esa
atracción se multiplicó exponencialmente. Sus circuitos se

THE MAN OF STARS 6


dispararon. Su corazón latía con fuerza. Una parte de él que
tenía desactivada entró en línea. Le había tomado toda su
fuerza de voluntad para mantener su expresión en blanco
Dijo hola a todos, su tono ligero y burbujeante desmentía la
aguda inteligencia en sus grandes ojos azules. Stealth y sus
compañeros cyborgs habían sido incluidos en su saludo,
para su deleite.
El comandante, un humano duro al que se refería
irreverentemente como papá, le dijo que no hablara con las
máquinas. Zebrina se río y dijo que se parecían a sus
muñecas.
Luego pasó los dedos por el hombro derecho de Stealth, un
ligero toque que sintió en su estructura metálica y supo que
la atracción era mutua. Su relación estaba condenada. Era
humana, la hija de su atormentador y él era un cyborg,
diseñado para morir luchando.
Cada momento con ella era un regalo, una recompensa por
haber sobrevivido como lo había hecho.
Escaneó su área asignada. La vegetación estaba quemada.
Una estructura había sido demolida. Los cuerpos azul claro
de los Rebeldes Ahkians yacían retorcidos sobre el suelo,
sus ojos abiertos y sin ver.
No quedaban formas de vida restantes.
Lethal. Se puso en contacto con el modelo E a su izquierda.
Cubre mi sección. Estoy explorando el terreno delante de
nosotros.
Sus reemplazos estarían empujando la línea del frente hacia
adelante. Esos guerreros tendrían más éxito en hacerlo si
supieran a qué se enfrentan.
Ciertamente no podían contar con la información que les dio
La Alianza Humanoide. Sus amos humanos los veían como

THE MAN OF STARS 7


armas desechables y no harían ningún esfuerzo para
verificar la información, sin importar si los cyborgs acababan
muertos.
Sus hermanos y él estaban solos.
Cubriré la mitad de tu sección. Boom, el guerrero a su
derecha, golpeó a su enemigo con la pierna separada de
otro humanoide.
El modelo C solo usaba uno de sus brazos. El otro había
sido cortado hasta los circuitos por un misil descarriado y sus
nanocibóticos aún no lo habían reparado.
Echaré de menos la lucha cuando lleguemos a la Patria. Su
amigo hablaba constantemente del planeta controlado por
los cyborgs, un lugar donde todos los guerreros eran libres.
Según las transmisiones, no hay asesinatos allí.
Puedes pelear conmigo en los anillos de entrenamiento.
Lethal arrojó una piedra a través de la extensión.
Contactó en el cráneo recubierto de metal del modelo C.
Eso no sería un desafío.
Frag. Los dos charlaron de ida y de vuelta
Stealth había sido colocado con los machos después de
sobrevivir a su entrenamiento y habían luchado juntos desde
entonces. Los dos guerreros se habían salvado la vida
múltiples veces, siempre protegieron su espalda.
Haría cualquier cosa por ellos y harían cualquier cosa por él.
Asegurándose de que su área estaba cubierta, corrió hacia
adelante, moviéndose a la velocidad cyborg a través del
terreno despejado. Los cadáveres estaban esparcidos por el
suelo.

THE MAN OF STARS 8


Los Rebeldes Ahkians luchaban por su libertad, por su
planeta de origen, por el derecho a existir. Tenía simpatía
por los seres. Si tuviera una opción, no pelearía contra ellos.
No tenía otra opción. Si rechazara luchar, La Alianza
Humanoide sabría que los cyborgs tenían libre albedrío y
que no podían ser completamente controlados. Los
desmantelarían, no solo a él, sino a todos los guerreros del
universo, sometiéndolos a la agonía más severa posible
antes de terminar con su vida útil.
O los rebeldes morían o él sus hermanos lo hacían. Su
lealtad pertenecía a los de su clase.
Disminuyó su velocidad al abandonar el área, incursionando
en lo desconocido. Sus sensores detectaron humanoides
delante de él. Se apresuró desde un gran pedazo de
escombro a otro, pasó un grupo de machos y hembras.
Tenían pistolas en sus manos y miraban hacia la línea del
frente, sus caras solemnes, el polvo gris opacando su
cabello azul oscuro.
Ninguno de los seres lo vio. Eran humanoides, tenían
sentidos humanoides, no podían detectar su presencia.
Atravesó el área, notando cables trampa, explosivos
enterrados, transmitiendo todo lo que vio, oyó, sintió a todos
los cyborgs en Ahki. Los Rebeldes habían cavado trincheras.
Eso no retrasaría mucho el avance. Algunos de los
domicilios fueron manipulados para colapsar. A menos que
haya seres escondidos en ellos, sus hermanos los evitarían.
Los humanoides ocupaban una gran estructura en el borde
del avance propuesto, sus formas de vida aparecían en sus
escaneos. Dos machos rebeldes con pistolas estaban
parados fuera de las puertas delanteras.
Stealth, siendo un cyborg, no necesitaba ingresar en la
estructura para escuchar lo que se decía. Después de rodear

THE MAN OF STARS 9


el perímetro, regresó a una sección de pared que no había
sido limpiada de plantas. Se lanzó hacia la vegetación teñida
de azul, presionó su espalda contra la piedra y escuchó.
Los seres discutían las tácticas de batalla ideales para usar
contra sus hermanos y él. Ninguna de las propuestas
alteraría nada. Los Rebeldes carecían de las habilidades
que los cyborgs habían perfeccionado durante miles de
ciclos solares de lucha.
—Cambiar nuestras tácticas logrará muy poco. —Un macho
invisible estuvo de acuerdo con él, su acento identificándolo
como un local—. La Alianza Humanoide tiene cyborgs y nos
superan en número. Avanzarán.
Varios seres protestaron, argumentaron que eso no
sucedería.
—El objetivo no es detener el avance —La hembra que
hablaba sonaba despreocupada por su inminente
fracaso—. El objetivo es ralentizarlos y minimizar los
damnificados.
—Eso solo retrasará nuestra derrota. —Respondió el primer
macho.
Hubo otra ráfaga de debate.
—Los Gigantes de Geminorum se han unido a la guerra —
La hembra debe ser su oficial superior. Los otros dejaron de
hablar cuando ella habló—. Su flota llegará en cuatro
rotaciones planetarias. Entonces superaremos en número a
La Alianza Humanoide cien a uno. Nuestro objetivo es seguir
con vida hasta entonces.
Cien a uno. Agujero de Fraggin. La reacción de Stealth se
repitió a través de las líneas de transmisión. Eso excedía la
tasa de muertes de Boom y era su mejor guerrero.

THE MAN OF STARS 10


A menos que recibieran refuerzos, La Alianza Humanoide
perdería la luchar por Ahki. Todos sus hermanos y él
morirían. Eso era 99.9989 por ciento cierto.
Morir en la batalla no lo asustaba. Siempre había asumido
que terminaría su vida útil con armas en sus manos. Ningún
guerrero vivía para siempre.
Pero sus muertes también pondrían a Zebrina en peligro. No
podía permitir que su hembra fuera perjudicada.
Habiendo escuchado lo suficiente como para tomar una
decisión, se retiró a su terreno. El espacio quedó libre. Se
agachó junto al destartalado domicilio y se preparó para
contactar a su hembra.
Poco después de su llegada, ella había olvidado una de sus
pantallas privadas en la estructura de sujeción cyborg. El
había incorporado los datos del dispositivo en sus
procesadores, fortalecieron su seguridad, creando una línea
de transmisión que ningún otro humano podría acceder.
Eso les permitió comunicarse cuando quisieran, sin temor a
ser descubiertos.
Miró a su alrededor. Una flor amarilla floreció entre la piedra
agrietada, sus pétalos delicados y frágiles, sus hojas
cubiertas con una fina capa de polvo.
Manteniendo su mirada en esa rara belleza del planeta
devastado por la guerra, abrió la línea de transmisión. Su
hembra se sentía atraída por la vegetación, vería eso mismo
a través de sus ojos.
—¿Estás sola? —Siempre hacía esa pregunta,
recordándole que los seres podrían estar escuchándolos.
Hubo una pausa ¿Estaba su hembra cerca de un
dispositivo?

THE MAN OF STARS 11


Su hermoso rostro apareció en sus procesadores. Había un
auricular en su oreja izquierda.
—Lo estoy ahora. Su voz simulada endureció su polla.
Ingresó texto codificado en sus dispositivos. Su sistema
convirtió ese texto al habla. Eso aseguraba que no la
escucharan.
—Te extraño. —Sus palabras hicieron eco de sus
pensamientos.
—Me voy pronto del campo de batalla, debería llegar a la
base antes de que se ponga el sol —La caminata tomaba un
largo tiempo y tenían que moverse a la velocidad del oficial
humano.
Zebrina le sonrió, el impacto lo golpeó como un misil en el
estómago.
—Nos vemos en la cámara de almacenamiento.
A menudo tenían encuentros en ese pequeño espacio,
tocándose furtivamente en la oscuridad, dándose
mutuamente el placer más sublime, reforzando su conexión
a través del contacto físico.
Después de criar, olería a él, su vida útil prolongaba los
nanocibóticos transmitidos a través de sus besos, su
esencia. Su almizcle se aferraría a su piel.
Quería eso, anhelaba eso, pero su seguridad era su misión
principal.
—Debes organizar el transporte fuera de Ahki.
Su sonrisa se desvaneció.
—Odoon transporta una nave con niños al amanecer a
Waaban Two.

THE MAN OF STARS 12


Su hembra no estaba de acuerdo con lo que su padre y La
Alianza Humanoide estaban haciendo. En cambio, utilizó su
posición como hija del comandante para descubrir
información.
Esa información era suministrada a Stealth, su conocimiento
expandido les permitió a sus hermanos sobrevivir más
fácilmente. También le transmitió información limitada de su
contacto Rebelde Odoon, diciéndole al macho Ahkian las
mejores rotaciones del planeta para escabullir descendencia
del planeta devastado por la guerra, dándole códigos de
autorización y otros detalles.
—Estarás en la nave de Odoon. —Stealth la acompañaría a
la plataforma de aterrizaje.
—Reservaré dos lugares. —Entrecerró los ojos hacia él—.
No dejaré el planeta sin ti.
No dijo nada. Los cyborgs no podían mentir y no completó
ningún cálculo que le permitiera partir sin poner en peligro a
todos sus hermanos. No causaría la muerte de millones de
cyborgs para salvar su propia vida.
Tendrían el ciclo de descanso para pasar juntos. La vería, la
tocaría, criaría con ella una vez más.
Luego se separarían. Moriría sabiendo que estaba a salvo.
—¿Estás dañado? —Su cara se suavizó.
Se preocupaba por él, un ser que otros humanos
consideraban una maquina sin emociones.
—No estoy severamente dañado —No para los estándares
cyborg. Un humano habría muerto por sus heridas
actuales—. Saber que me estás esperando me da una razón
para tener cuidado.

THE MAN OF STARS 13


El movimiento en el extremo más alejado de su terreno atrajo
su mirada. Los cyborgs de remplazo llegaron, sus cuerpos
enteros, sus armas pulidas, su piel limpia. Eran una variedad
de modelos, todos hábiles en la lucha, todos dándose cuenta
de que sus rotaciones de planeta estaban contadas.
¿Comunicándote con tu hembra, modelo K? Uno de los
guerreros le hizo la pregunta a través de otra línea de
transmisión.
Los machos hacían ruidos de besos, reían y bromeaban.
Todos los cyborgs lo envidiaban. Stealth sonrió, el
movimiento lastimó su rostro. Había encontrado a su
hembra, lo amaba y la amaba.
Eso era todo lo que cualquier guerrero podía imaginar tener
y más de lo que cualquiera de ellos alguna vez tendría.
—Es hora de que nos vayamos —Le dijo a ella—. Te amo
mi hembra.
—Te amo mi macho.
Terminó la transmisión y corrió hacia su grupo de lucha,
uniéndose a aquellos hermanos en la caminata lejos del
campo de batalla. Todos estaban cubiertos de mugre y
sangre, tenían partes de sus formas para mostrarlo. Sus
niveles de energía eran bajos, necesitaban recargarse.
Marcharon tres guerreros al otro lado. Lethal los condujo,
anunciando cualquier peligro que enfrentaran. Los
explosivos permanecieron ocultos en el suelo.
El humor era sombrío. Sabían que pronto morirían.
Ha sido un honor pelear con vosotros. Informó Lethal
gravemente.
No me estoy muriendo. Respondió Boom.

THE MAN OF STARS 14


Ninguno de nosotros puede derrotar a cien guerreros. El
modelo E señaló un hecho innegable.
No me estoy muriendo. Repitió Boom. No sobreviví tanto
tiempo para ver mi esperanza de vida terminar aquí. Una vez
que el Consejo cyborg de la orden, escapamos y viajamos a
la Patria y...
¿Y? Stealth lo provocó. El modelo C siempre hablaba de la
Patria. El nunca dijo lo que haría allí.
No lo sé. El tono de su amigo era tímido. Pero sé que llegaré
a la Patria. Tengo que hacerlo. Se detuvo como si procesara
la situación. Es todo lo que quiero, todo lo que siempre he
querido.
Su oficial, un macho al que llamaban en privado Fidget, se
apoyó contra una parte de la pared demolida. Charló
rápidamente con el oficial a cargo de otro lote. Sus ojos eran
amarillos.
Fidget ha estado sumergiéndose en el Mox-X nuevamente.
Comunicó Lethal.
El humano, incapaz de manejar las tensiones de la guerra,
se sumergió más y más en la adicción. Sus decisiones se
hicieron cada vez más erráticas. Saltaba a cada ruido fuerte,
actualmente agitaba las dagas siendo una carga más.
El desmantelamiento era la muerte más dolorosa posible.
Los cyborgs eran diseccionados mientras estaban vivos,
rescatando sus partes funcionales.
—No podemos desmantelarlos —El otro oficial era la voz de
la razón—. Desde que explotó el recinto de fabricación en
Tau Ceti, el suministro ha sido limitado.
La Alianza Humanoide fue responsable de volar ese planeta.
Habían causado su propia escasez de cyborgs, limitando los
guerreros disponibles para luchar en sus numerosas guerras

THE MAN OF STARS 15


—Joder —Fidget arrastró las puntas de sus dagas sobre los
brazos de los cyborgs mientras movía a la mitad del lote—.
Espacio —Cortó el codo de Stealth—. Necesito espacio.
Lethal les indicó que dieran dos pasos hacia adelante. Los
guerreros detrás de la fila de Stealth dieron dos pasos hacia
atrás, permitiendo que el humano se interpusiera entre ellos.
Ese humano cortó trozos del omóplato izquierdo de Stealth.
El dolor casi cerró sus sistemas.
—¿Estás bien para volver a la base? —El otro oficial expresó
su preocupación.
—Jódete —Esa fue la respuesta de Fidget.
Esta es la rotación del planeta. Lethal dijo lo que cada cyborg
debe haber estado procesando. Habían estado esperando
el momento perfecto para terminar con el reinado de terror
de los humanos.
A Stealth le agradó que el ser sádico fuera eliminado antes
de que todos murieran. Era un macho menos que podría
dañar a su hembra.
La idea de dejarla sola y sin protección lo atormentaba. El
universo era peligroso. Aunque tenía sus nanocibóticos y
podía sanar rápidamente, aún podría salir lastimada, aún
podría morir.
Según los informes a los que había accedido en las bases
de datos, Waaban Two, el planeta donde Odoon estaba
reubicando a la descendencia, era pacífico. Una vez Zebrina
llegara allí, debería estar a salvo.
Sus compañeros cyborgs y él marcharon, variando su paso
mientras se movían al unísono. Darían un paso largo,
seguido de un paso corto, seguido de otro paso corto

THE MAN OF STARS 16


Normalmente, sus oficiales humanos caminarían sobre sus
pasos. Eso aseguraba que colocaran sus pies con botas en
un terreno seguro.
Fidget no pudo hacer eso, su mente explotó por las drogas.
Se tambaleó detrás de Stealth, torturándolo con las
cuchillas, cortándole la carne capa por capa.
Explosivo. Lethal les dio a los cyborgs la ubicación de la
bomba oculta.
Stealth pasó por encima del dispositivo mortal y luego se
impulsó hacia adelante. El y sus hermanos corrieron a su
máxima velocidad, reubicándose más rápido de lo que el ojo
humano podía rastrear.
Sonó un boom. Tiró su cuerpo al suelo. Una explosión de
humedad, un chorro de tierra y grava, salpico contra su
espalda.
Stealth se levantó, sacudió el polvo de sus palmas y regresó
a su lugar en la línea. Continuó marchando, todo el grupo a
excepción de un oficial humano desaparecido.
No hay muchas hembras en la Patria. Encontrar a su hembra
era la obsesión de Lethal. El modelo E había perforado a
Stealth con preguntas, alegando que quería ser el mejor
macho posible para su hembra... una vez que la encontrara.
Lo procesaré cuando esté en tierra de la Patria. Boom
permaneció centrado en su único objetivo.
Uno de los modelos E ha encontrado a su hembra. Ella
piensa que sus ojos son hermosos. Lethal tenía los ojos
negros muertos de todo su tipo. Los modelos E asustaban a
la mayoría de los humanos.
Su amigo no asustaba a Zebrina.

THE MAN OF STARS 17


Mi hembra dijo que tus ojos te hacen parecer misterioso.
Stealth a menudo hablaba con ella sobre sus hermanos. Los
conocía por su nombre, había expresado su preocupación
por los guerreros
¿Ser misterioso está bien? Su amigo tenía tanto
desconocimiento sobre las hembras como Stealth.
Le hice la misma pregunta. Stealth se río por la línea de
transmisión. Dijo que muchas hembras aman a los machos
misteriosos.
Me gustaría ser amado. Admitió Lethal, anhelo en sus
palabras. Sólo una vez. Solo por un momento. Entonces
podría morir feliz.
El modelo E creía que era la verdad, pero Stealth conocía la
diferencia. Un momento nunca sería suficiente. Al final del
ciclo de descanso, quería pasar más tiempo con Zebrina.
Anhelaba pasar sus dedos por sus suaves rizos, para probar
la dulzura de su boca, escucharla jadear mientras criaban.
Y eso no sería posible.
Ella estaría a salvo. Se enfocó en ese objetivo tan
importante.
No te estás muriendo. Boom permaneció en negación. Y no
te atormentes por tus ojos. Si una hembra puede amar a
Stealth, una puede amarte a ti. Bromeó. Es un guerrero
pequeño.
Ya. Stealth era más alto y ancho que cualquier humano, pero
en comparación con él sus amigos, ambos modelos
anteriores, era pequeño. Al menos, no intenté atrapar un
misil en la batalla de la rotación de este planeta.
Casi lo logré. Su amigo reprodujo la escena. Eso hubiera
sorprendido al enemigo.

THE MAN OF STARS 18


Eso nos habría sorprendido a todos. El tono de Lethal era
seco. Deja de intentar atrapar misiles. Casi pierdes tu brazo.
Voló sobre mi cabeza. Boom les mostró el metraje una vez
más ¿Cómo podría resistirme?
Los misiles vuelan sobre mi cabeza. Replicó el modelo E.
Me las arreglo para resistirlos.
No tienes sentido del humor. Murmuró Boom.
Stealth se echó a reír. Los otros cyborgs se unieron hasta
que las líneas de transmisión resonaron con alegría.
Amaba a los machos, tuvo el honor de luchar con ellos, morir
con ellos, sabiendo que su hembra pronto estaría lejos de
las próximas batallas.

THE MAN OF STARS 19


Capítulo 2

El padre de Zebrina la estaba dejando morir en Ahki.


Se paró en el umbral de sus habitaciones privadas y vio
como empacaba todo lo que era más preciado para él.
Nunca habían sido cercanos. Cuando era más joven, había
estado tan preocupado con su carrera como lo estaba ahora.
Su madre la había atendido, hablado con ella, la amaba.
Se sorprendió cuando, después de su graduación, le pidió
que se uniera en el planeta devastado por la guerra. Al
principio, creía que extrañaba a su madre como ella lo hacía.
Ahora, tenía otras sospechas.
Su padre deslizó una antigua pistola de la tierra en su
mochila. El arma había pertenecido a sus antepasados, se
la habían transmitido de generación en generación. Eso era
una posesión preciada, nunca la tomaría en un viaje casual.
Había sobrevivido de alguna manera al ataque de los ciclos
solares que se habían llevado a su madre. Luchó por
mantener una sonrisa en su rostro. Cualquier rebelde que
conociera habría robado el arma.
Su padre cerró su mochila con un chasquido. Llevaba su
uniforme favorito, cada condecoración que alguna vez había
ganado brillante en la cubierta del pecho. También habían
sobrevivido.
Había demasiadas coincidencias para su comodidad.
—¿A dónde vas, papi? —jugó el papel de la sin cerebro que
se esperaba de ella.

THE MAN OF STARS 20


Su padre la veía a ella y a todas las demás hembras como
mentalmente inferiores a los machos. Mientras veía a los
cyborgs como máquinas sin emociones.
Si Stealth, el guerrero que amaba, podía fingir falta de
sentimientos durante toda una vida útil, podría mantener su
acto de tonta por una rotación más del planeta.
—Hay una reunión de comandantes en el próximo sector —
Su padre la miró a los ojos. Sus ojos azules, el único rasgo
físico que compartía con él, eran tan escalofriantes…—
Volveré en diez rotaciones planetarias.
Eso era una mentira. Nunca regresaría.
Según la comunicación verbal enojada que había
intercambiado con su superior en la rotación del planeta
anterior, La Alianza Humanoide sería invadida por rebeldes
en menos de seis puestas de sol. Su padre estaba huyendo
antes de que eso sucediera.
Y no la llevaría con él. Estaba usando su presencia como
cobertura, como una excusa para reducir la sospecha. Era
su hija, su única hija ¿Qué tipo de monstruo la dejaría atrás?
Su padre lo haría.
Atravesó el domicilio llevando su mochila. Saltó a su lado,
sus rizos rebotando contra su rostro, su expresión tan
despreocupada como pudo conseguir.
No se dio cuenta de que había escuchado sus
conversaciones, había fisgoneado a través de sus
dispositivos. Su supervivencia dependía de que no
descubriera eso.
—¿Puedo ir contigo, papi? —le dio una excusa para salvar
su vida, su alma exigía más pruebas de su traición—. Seré
buena.

THE MAN OF STARS 21


—Es más seguro para ti aquí —Falló otra prueba moral—.
Créeme, Zebrina.
Hubo una vez, hace mucho tiempo, que podría haber
confiado en él. No era más esa chica tan pequeña. Al llegar
a Ahki, había visto la realidad de lo que la élite de La Alianza
Humanoide y él estaban haciendo. Había visto cómo habían
tratado a los cyborgs, la crueldad que disfrutaba, el
desprecio por la vida. Había ordenado el asesinato de niños
rebeldes, habían torturado seres hasta la muerte.
Y podía sonreír mientras dejaba que su hija fuera asesinada
brutalmente.
—Cuando mamá no fue contigo en uno de tus viajes, murió.
Mencionar a su madre podría despertar las alarmas de su
padre, pero solo no podía dejar el tema. La necesidad de
saber la verdad ardía dentro de ella.
Había estado lejos de casa, asistiendo a una academia,
cuando murió su madre. La historia oficial era que los
disidentes habían lanzado un ataque sorpresa contra la base
de La Alianza Humanoide mientras su padre estaba fuera
del planeta.
Ahora sospechaba que no había sido una sorpresa en
absoluto. Su padre había sacrificado a su dulce y amorosa
madre para salvarse y preservar su carrera.
Su trama tortuosa había funcionado. Él había vivido. La
Alianza Humanoide lo había promovido a comandante. Se
había trasladado a Ahki, donde había infligido terror en otro
grupo de locales.
Si muriera, probablemente sería promovido nuevamente.
—Las hembras y los niños mueren en la guerra —Su padre
se encogió de hombros—. Son daños colaterales. Es
desafortunado pero es la realidad.

THE MAN OF STARS 22


Las hembras y los niños mueren. Le había dicho eso más de
una vez y nunca había entendido completamente lo que
estaba diciendo... hasta la rotación de este planeta. Las
hembras y los niños eran desechables, seres para ser
usados y descartados.
—No moriré, papi —Escondió su sinceridad bajo una risita.
Su sonrisa no llegó a sus ojos.
—No molestes a mi primer oficial mientras estoy fuera.
Narrey, el segundo al mando de su padre, también sería
sacrificado, junto con todos los machos que le dieron su
lealtad, confiando en él con sus vidas. Eran tontos. Un ser
que podía matar a niños no lo pensaría dos veces antes de
terminar con su esperanza de vida.
—No lo molestaré mucho. —Se puso de puntillas y besó a
su padre en la barbilla—. Adiós, papi. —Nunca lo volvería a
ver.
Resopló una vez, dos veces, y salió por la puerta, dejándola
sin palabras amorosas, sin un abrazo. Su padre nunca había
sido un macho demostrativo.
Su papel en La Alianza Humanoide debe haber sido siempre
todo para él. No le quedaba nada para nada ni para nadie
más.
Incluyéndola. Se limpió una lágrima.
No la había derramado por él. Representaba la pérdida del
padre que había querido desde que era un bebé, el padre
que se dio cuenta de que nunca tendría. No la cuidaría, no
tenía suavidad en su alma. Su padre... el comandante... era
un monstruo.
Tenía que ser detenido.

THE MAN OF STARS 23


Zebrina regresó a sus propias habitaciones, localizó una de
las pantallas de visualización de sus habitaciones privadas.
Stealth, un cyborg modelo K con más corazón, más
humanidad que su padre completamente de carne y hueso,
había aumentado la seguridad en todas sus líneas de
comunicación
La amaba.
Accedió a los archivos que había obtenido de los dispositivos
de su padre. Su agenda era información clasificada. Si los
Rebeldes supieran dónde estaba, cuándo saldría o
regresaba al planeta, apuntarían a su nave, lo matarían.
Nunca traicionaría a otro ser, nunca lastimaría a otro niño
inocente, nunca ordenaría el desmantelamiento de otro
cyborg.
—Esto es por ti, mamá —Envió el horario de su padre a
Odoon. Su comunicación no tenía firma, no se podía rastrear
hasta ella.
Su amigo no pudo verificar quién lo envió y él mismo no
quiso tomar las acciones necesarias basado en la
información. Odoon, un antiguo licitador agrícola, era
pacifista. Esa era la razón por la que rescató a niños y no
estaba luchando.
Los Ahkians reenviarían la comunicación a seres que no
tenían reparos sobre matar, sin embargo. Aunque nunca se
habían conocido, confiaba en que el macho haría eso.
Zebrina sabía mucho más sobre él que él sobre ella. Una
vez se dio cuenta de lo que estaba sucediendo en Ahki, lo
que su padre estaba haciendo, se había puesto en contacto
con el ser que figuraba como sospechoso en una de las
bases de datos de La Alianza Humanoide.

THE MAN OF STARS 24


La información que le proporcionó a Odoon le permitió
transferir a los niños locales fuera del planeta devastado por
la guerra de forma segura. Eso no compensó el daño hecho
ni recuperó a los millones que habían muerto. Pero aseguró
la supervivencia de su clase y era algo que podría hacer para
ayudar.
Se vistió con una cubierta pectoral de color rosa brillante,
una versión frívola de lo que el comandante llevaba puesto.
Las decoraciones en forma de flor en su frente la
proclamaban como la mejor hija del universo y la principal
fabricante de prendas de vestir.
Nadie que la viera sospecharía que ayudaba al enemigo,
que jugaba el peligroso juego de guerra en su propia forma.
Se puso las cubiertas de abajo. La cubierta era más corta
que la del pecho, hasta el muslo. Los oficiales supondrían
que no llevaba nada debajo. Se distraerían, prestarían
menos atención a las cosas que estaba haciendo.
Levantó sus rizos hacia arriba, apretando los zarcillos en lo
alto de su cabeza. Excepto por sus ojos, se parecía a su
querida dulce madre, su piel oscura, su cabello negro, su
figura llena.
Mierda. La extrañaba. Zebrina apoyó la frente contra el frío
reflejo de la superficie.
Cuando su pantalla de visualización privada vibró.
Bajó la mirada hacia el dispositivo. Stealth y sus hermanos
marchaban hacia la base. Un hormigueo bailó por su
columna, su tristeza se evaporó, se quemó por amor.
Levantó el vívido contenedor amarillo que había elaborado,
lo balanceó mientras saltó a través de la estructura y salió
por las puertas. El sol de Ahki estaba cubierto, como era

THE MAN OF STARS 25


habitual, con nubes. Llovería cuando bajara la temperatura.
Lo hacía en cada ciclo de descanso.
El agua era abundante en el planeta, la vegetación de un
verde azulado vibrante, el clima cálido. Ahki debía haber sido
un paraíso antes del bombardeo, antes de que La Alianza
Humanoide decidiera que querían sus recursos para sí
mismos.
Navegó por los caminos entre las feas estructuras grises que
su padre y sus machos habían erigido. Los oficiales
asintieron y sonrieron mientras los saludaba en voz alta y
burbujeante. No había hembras en las filas. Su sexo era
visto como débil, estúpido, indeciso.
Usaba eso para su ventaja, dándoles públicamente a los
machos lo que esperaban, mientras reunía y dispersaba
información de forma privada. Si no tuviera un ser querido
en el complejo, habría terminado la guerra hace muchas
rotaciones planetarias.
Pero tenía un ser querido dentro de las paredes. Tenía a
Stealth. Su cyborg y sus hermanos se veían obligados a
luchar por La Alianza Humanoide.
Se le cortó la respiración cuando los vio marchar hacia la
estación de limpieza. Se veían sus marcos plateados, les
faltaba la piel y la carne. Sangre y suciedad cubría sus
formas.
Encontró a Stealth en el lote de lucha y los nudos en su
estómago se desenredaron. Había sobrevivido, había vuelto
a ella una vez más. Trozos de su cara colgaban de su
cráneo. Estaba desnudo excepto por sus botas hechas
jirones, sus hombros anchos y sus caderas estrechas.
Siendo un modelo K humano, era más bajo que muchos de
los cyborgs más viejos pero aún grande para un macho
humano. Se alzaba sobre ella.

THE MAN OF STARS 26


A ella le gustaba eso.
Aplastando el impulso de correr hacia él, se acercó a Narrey.
El macho humano frunció el ceño ante los cyborgs.
—Perdimos a otro oficial —Murmuró la admisión para sí
mismo—. El comandante estará furioso.
—Quiero ayudarte a ti y a papá —Giró un mechón de cabello
alrededor de su dedo índice derecho, riendo como un ser
con el cerebro revuelto— ¿Me dejarás limpiarlos, Narrey? —
Movió el asa de la cesta hasta el codo y recogió la
manguera—. Por favor. Por favor. Muchos por favor.
Narrey miró a su alrededor. Los otros humanos se alejaron
apresuradamente, sin encontrar su mirada. La limpieza de
las máquinas, como se referían a los cyborgs, no era una
tarea que nadie más que ella disfrutaba.
—Puedo hacer esto, Narrey —Abrió mucho los ojos,
esforzándose por parecer tan tonta como fuera posible—.
Limpio mis muñecas todo el tiempo.
—Tengo otras tareas que completar —Los labios del primer
oficial se torcieron—. Tengo que encontrar a otro oficial que
dirija estas máquinas —Su mirada volvió a ella—. Si el
comandante pregunta, le dirás que pediste hacer esto —Su
voz bajó—. No puedo rechazar a la hija que adora, ¿verdad?
A él no le gustaría eso,
Era la hija que había dejado morir, no la hija que adoraba.
—Le diré a papi, que supliqué y supliqué, y no podías decir
que no —Le sonrió—. Papá sabe que siempre eres muy
amable conmigo —Narrey creía que tratarla bien le ganaría
el favor de su padre, su comandante.
—Dígale a un macho que cierre el agua después de haber
limpiado las máquinas —Narrey golpeo en los controles.

THE MAN OF STARS 27


—No tan fuerte, Narrey —Luchó con la manguera mientras
el agua brotaba de ella, actuando como si estuviera
moviéndose fuera de su alcance—. Soy pequeña,
La fuerza del líquido infligiría más dolor en las heridas de los
cyborgs, no quería que eso sucediera.
El primer oficial de su padre ajustó el spray.
—Mis dedos están fríos. —Esa fue su siguiente queja. Los
oficiales torturaban a los guerreros con agua helada. No
haría lo mismo.
Narrey elevó la temperatura.
—Si necesita algo más, pregunte a uno de los oficiales.
Tengo cosas que hacer —Se alejó.
Se tragó su sonrisa. Sus instrucciones garantizarían que
nadie se acercara voluntariamente. Siempre actuaba como
el mayor dolor en el culo cuando los oficiales la ayudaban,
Sin embargo, los seres podrían estar observándola. Tenía
que ser cautelosa.
La esperanza de vida de los cyborgs estaba en riesgo.
Fluyó agua tan suavemente como pudo sobre la forma
maltratada del primer guerrero, apuntando a los pocos
pedazos de él que permanecían completos. El macho,
Lethal, era un modelo E y mucho más viejo que Stealth. Era
uno de los amigos cercanos de su guerrero. A menudo
peleaban lado a lado.
Lavó la sangre y el lodo de encima. Lethal se volvió, mirando
inexpresivamente al espacio, pero sabía que estaba al tanto
de todo lo que sucedía a su alrededor.
Cuando estuvo impecable, metió la mano en su contenedor
y sacó uno de sus decoraciones en forma de flor que había

THE MAN OF STARS 28


elaborado. Era bonito y ligeramente perfumado a flores, la
belleza es una rareza en la dura vida de los guerreros.
—Mi muñeca está toda limpia. Consigue una decoración —
Presionó el pedazo de suave tela contra un parche de piel
en el pecho de Lethal.
Eso inyectó al Modelo E con inhibidores del dolor. La Alianza
Humanoide no permitía su uso en cyborgs, en los seres que
consideraban como máquinas.
Nunca sabrían que había roto su cruel regla. Todo lo que
cualquiera de los oficiales observadores vería, era una tonta
hembra decorando armas desventuradas.
Levantó la mano y cuidadosamente alisó una capa de carne
sobre la cara de Lethal.
—Muchas hembras sueñan con ojos como los tuyos —
susurró. Stealth le había dicho sobre las preocupaciones de
su amigo—, una de ellas tendrá la suerte de llamarte su
guerrero.
Sus ojos negros y planos parpadearon. Fue rápido, fugaz.
Nadie más que ella podría haber visto esa respuesta.
La tocó. Sus palabras habían significado algo para el
guerrero. Como sus acciones había significado algo para
ella. Había ayudado a mantener a salvo al macho que
amaba.
Ocultó su emoción con una risita irritante y se volvió hacia el
próximo cyborg.
Cada guerrero fue limpiado, recibiendo una decoración
calmante de agonía y un comentario personal de ella, su
forma de decir adiós, un agradecimiento por proteger a su
macho en la batalla.

THE MAN OF STARS 29


Sus dedos temblaron cuando Stealth dio un paso adelante.
Estar cerca de él hizo que el corazón latiera más rápido y su
cuerpo temblara.
Desde el primer momento en que lo vio, había estado de pie
con sus hermanos, su columna vertebral derecha, sus
hombros cuadrados. Todos los guerreros eran grandes,
anchos y bien parecidos. La Alianza Humanoide no diseñó
cyborgs feos. Pero atrapó su mirada y no podía apartar la
mirada de él.
Era más que atracción física. Había una conexión entre
ellos, un sentimiento de pertenencia, un profundo
conocimiento del alma de que era suyo y que era suya.
Se preocupaba cada vez que lo enviaban a la batalla. Esta
ronda de lucha debe haber sido extremadamente feroz, le
faltaba la mitad de su hermoso rostro. Su forma había sido
despojada de su marco. El dolor debía ser insoportable.
Quería envolver sus brazos alrededor de él y besar cada
herida.
Eso no era posible. Los oficiales podrían estar vigilándolos.
Tuvo que tratarlo como si fuera simplemente otro cyborg,
una de sus muñecas.
—Oh, mira lo sucia que está mi muñequilla —Mantuvo la
charla tonta mientras roció el agua tibia sobre él.
El líquido fluyó entre sus pectorales, navegó por sus
abdominales definidos, acarició los huesos de su cadera. La
fuerza de esto le quitó parte de su piel. Sus pies calzados
estaban separados. Un charco de sangre se extendía a su
alrededor.
Su cabello castaño estaba despeinado. Sus ojos grises
oscuros estaban enfocados en algo en la distancia. Quería
su mirada en su rostro, sus labios aplastados presionados
contra los suyos.

THE MAN OF STARS 30


Se encontrarían durante el ciclo de descanso como siempre
lo hacían cuando regresaba al complejo. La besaría, la
follaría, la protegería en sus brazos.
Luego dejarían el planeta al amanecer. Lo convencería de
hacer eso, de elegirla. No habría más despedidas, no más
preocupaciones de si volvería a ella o no.
No tendrían que escabullirse para ocultar su relación. Podría
reclamarla abiertamente y podría reclamarlo. Serían libres
de amarse, de pasar juntos cada rotación del planeta.
Su guerrero se volvió lentamente, su expresión reflejaba un
vacío que todos los cyborgs habían perfeccionado y ocultó
una mueca detrás de una sonrisa tonta. Su espalda estaba
peor que su parte delantera. Trozos de tierra se aferraban a
su carne maltratada. Trozos de humanos en el cabello, los
mechones mucho más claros que el suyo, estaban pegados
a su hombro derecho.
Lo lavó. Riachuelos de agua corrían por su columna
vertebral, entre las apretadas mejillas de su culo. Cada parte
de él era apretada, afilada, musculosa.
La Alianza Humanoide consideraba a los cyborgs como
armas. Su guerrero era más letal que cualquier arma, pero
era mucho más que eso. Cuando estaban solos, la sostenía
con una ternura desgarradora, pronunciaba palabras que la
hacían brillar.
El líquido que corría sobre él se volvió claro. La miró,
mirando por encima de su cabeza.
—Has sido una buena muñeca —A los oficiales les gustaba
cuando llamaba a los cyborgs eso, viéndolo como una
humillación, una forma de tortura. No se dieron cuenta de
que le daba una razón para preocuparse por los machos,
para mostrarles amabilidad que de otra manera no podría—
. Te mereces una linda muñequita.

THE MAN OF STARS 31


Puso una decoración para reducir el dolor en el pecho de su
guerrero, lo cepilló con las yemas de sus dedos sobre su
piel. Él se crispó. El movimiento no hubiera sido notable para
un ser que los mirara. Lo sintió en su núcleo.
Inclinándose más cerca de él, susurró:
—Estoy agradecida de que estés a salvo —Acarició su
barbilla—. Te mostraré cuán agradecida estoy más tarde.
Incapaz de darle más tiempo que los demás, y temerosa de
que pudiera llamar la atención, convertirlo en un objetivo, se
retiró a regañadientes del macho que amaba y volvió su
atención al próximo guerrero.

THE MAN OF STARS 32


Capítulo 3

Después de regresar a la estructura de retención de los


cyborgs, Stealth insertó fuentes de energía en las cuencas
de sus muñecas y escuchó a sus hermanos elogiar a su
hembra por las líneas de transmisión. La combinación de los
inhibidores del dolor, las palabras amables y el suave toque
había ganado a los duros guerreros.
Me habló como si yo fuera un ser.
No hay dolor. Han sido rotaciones planetarias desde que no
me sentía recuperado por completo.
Por un momento, mis procesadores no funcionaron y la vi
como mi hembra.
Algunos de los comentarios más entusiastas lo molestaron.
Quería que a sus hermanos les gustase su hembra, pero no
demasiado. Era suya.
Dijo que las hembras sueñan con ojos como los míos.
Lethal no era inmune a sus encantos ¿Es eso cierto?
No lo sé. Admitió eso. Los cyborgs no podían mentir, pero
los humanos sí. Me dice que sueña conmigo.
Si pudiera soñar, soñaría con la Patria. Boom contribuyó con
eso a la conversación.
No podían soñar porque no dormían.
Nunca sentí algo tan suave como las manos de tu hembra
sobre mi piel. Lethal permaneció en ese tema.
Es mía. Stealth reforzó su reclamo sobre ella.

THE MAN OF STARS 33


Todos procesamos eso. Su amigo le aseguró. Es anfitriona
de tus nanocibóticos. Huele a ti.
Y hueles como un modelo K. Boom olisqueó. Bah.
Solo los cyborgs, con sus sentidos finamente pulidos, podían
detectar el olor. Los humanos no podían olerlo en ella.
Mi hembra se irá del planeta al amanecer. Tomaría su
corazón todo vivo y bueno, con ella. Sería la cáscara vacía
de un macho sin ella.
¿Cuál es su ubicación de destino? Boom preguntó.
Stealth no pudo procesar por qué eso era relevante, pero no
tenía secretos con sus hermanos. Les envió las
coordenadas de la base Ahkian en Waaban Two.
Vamos a visitarte. Prometió el modelo C. Habrá un retraso.
Estaremos viajando a la Patria en primer lugar. Su amigo se
aferró a ese objetivo imposible.
¿Me visitaras? Stealth frunció el ceño. No me iré con ella. No
pondría a todos los cyborgs del universo en peligro.
Todas las líneas de transmisión en el planeta se callaron por
un instante, el silencio desconcertante.
¿Estás en mal funcionamiento?
¿Elegirías la batalla sobre tu hembra?
¿La dejarías desprotegida?
Todos los guerreros protestaron a la vez, sus transmisiones
se superpusieron, el consenso es que era un tonto.
Estamos muertos. Lethal señaló esa verdad indiscutible. No
podemos vencer a unos cien enemigos cada uno. Si luchas
junto a nosotros, no cambiarás nuestro destino.
No eres un modelo C. Boom se burló.

THE MAN OF STARS 34


Salir pondrá en riesgo a todos los cyborgs. Argumentó
Stealth. Los humanos sabrán que tenemos libre albedrío y
desmantelaran a nuestros hermanos.
Es por eso que explotamos en la rotación de este planeta a
Fidget. Lethal desaceleró su transmisión como si se
estuviera comunicando con un ser desprovisto de poder de
procesamiento. El nuevo oficial asignado a nuestro grupo de
combate no notará que falta un cyborg.
¿Habrían hecho eso por él? Stealth se tragó su emoción.
Huir de una batalla... Abandonar a sus hermanos se sintió
mal.
Tienes que proteger a nuestra hembra. La transmisión de
Lethal fue brusca. Es la única amabilidad que hemos
experimentado en esta dura vida de Fraggin. Moriremos
felices sabiendo que está a salvo.
Boom gruñó.
No puedes permitir que La Alianza Humanoide nos quite esa
alegría, modelo K. Lethal insistió. Danos una muerte libre de
culpa. Nos debes mucho por salvar tu trasero humano varias
veces.
También te he salvado el culo más de una vez. Replicó
Stealth.
He salvado vuestros dos traseros la mayoría de las veces.
Se jactó Boom.
Discutieron afablemente, hablando de batallas pasadas,
llamadas cercanas, momentos que habían compartido. Los
dos guerreros eran sus amigos, sus hermanos y alejarse de
ellos sería lo más difícil que había hecho en su vida.
Pero lo haría... por Zebrina, para protegerla, para hacer el
futuro del que a menudo habló, una realidad. Serían libres.

THE MAN OF STARS 35


Su hembra inteligente podría ser ella misma, no el ser que
mostró a los oficiales de La Alianza Humanoide.
Cuando lo tocó como lo había hecho después de haberlo
limpiado, pudo responder. Podía mirarla a sus hermosos
ojos azules y decir las palabras de amor humano. El universo
sabría que era suya y que era suyo.
Mientras se comunicaba con sus hermanos, planeó e
investigó el escape, pirateando las bases de datos de La
Alianza Humanoide y Ahkian. Revisó los esquemas de la
nave, señaló la seguridad en torno al punto de embarque,
identificó posibles amenazas.
Tenían una oportunidad para la felicidad. No la malgastaría.

***

Stealth esperó hasta que el sol se hundió bajo el horizonte


antes de quitarse la energía de la que se alimentaba y se
vistió con un nuevo conjunto de armadura corporal. Deslizó
las pistolas en sus fundas y los puñales en sus vainas, sus
pesos lo confortaban. Las armas habían sido calibradas para
el uso de su hembra también, le permitirían protegerla mejor.
Supervisaremos las comunicaciones en busca de nuevos
desarrollos. Le dijo Lethal.
Eso me ayudará. Cada vez que accedía a la redes de La
Alianza Humanoide, se arriesgaban. Un humano altamente
calificado con tecnología podría rastrear los orígenes de la
brecha.
Si la consulta ocurriera dentro del recinto, el humano no
estaría preocupado. Podría ser un oficial buscando

THE MAN OF STARS 36


información. Cualquier persona rodeada por las paredes
debe haber tenido espacio libre.
Una vez que Stealth dejó el complejo y entró en el terreno
Ahkian, el acceso podría dar la señal de alarma. El humano
podría determinar su ubicación física, encontrar a su
hembra, y a la nave que el amigo de su hembra había
obtenido.
La transmisión de información a través del modelo E
eliminaría esa posibilidad. Su amigo había cumplido tantas
misiones como él. Confiaba en Lethal su esperanza de vida
Stealth abrió las puertas de la estructura de contención y
entró en la oscuridad sin ser detectado. Esas eran tareas
simples de completar. Era un modelo K. Había pocos
sistemas a los que no podía acceder y La Alianza
Humanoide lo había diseñado para navegar en territorio
enemigo sin ser visto.
El cielo estaba negro, las estrellas cubiertas de nubes. La
humedad colgaba pesadamente en el aire. Llovería, como
solía ocurrir durante el período de descanso, el clima
ocultando su cita con Zebrina.
Corrió a velocidad de cyborg de estructura en estructura, su
banda de rodadura silenciosa en el camino. La Alianza
Humanoide había cubierto la exuberante vegetación con
piedra simulada.
Cada compuesto en todo el universo tenía una apariencia
similar. Los humanos limpiaron los planetas que
conquistaron, quitando su singularidad.
Habían tratado de hacer lo mismo con los cyborgs. Todos
los guerreros dentro del mismo modelo tenían apariencias
similares. En contraste, sus personalidades eran
vívidamente diferentes. La Alianza Humanoide no pudo
controlar eso.

THE MAN OF STARS 37


Y no podían controlar a quién amaban los guerreros, quién
le amaba. Esperó fuera del domicilio que Zebrina compartía
con su padre, el comandante.
Tres oficiales caminaron hacia su escondite, los machos
charlando. Stealth los mantenía a la vista tanto a ellos como
a las puertas del domicilio.
—Escuché que estaba tan alto como un transbordador
cuando salió del campo de batalla, —dijo un macho—, por
lo que sabemos, se perdió.
—Podría haber huido —Otro macho reflexionó—. La batalla
lo asustó.
—Nos asusta a todos. Yo... —Sus voces se desvanecieron
mientras se movían lejos de Stealth.
¿La batalla les daba miedo? Sus labios se torcieron. Los
oficiales los enviaban a él y a sus hermanos a luchar por
ellos. No se enfrentaban al enemigo. Los humanos
esperaban un intervalo seguro lejos del campo de batalla.
Stealth observó el domicilio, monitoreando su entorno. Un
trueno rodó en la distancia. Un rayo iluminó el horizonte. La
tormenta se acercaba.
Las puertas se abrieron y se enderezó. Su hembra apareció,
con una sonrisa tonta, su hermoso rostro, sus generosas
curvas vestidas con un traje de vuelo rosa vivo cubierto de
flores simuladas.
Prefería que vistiera prendas más oscuras y menos
llamativas. Argumentó que si alguien la viera, encontrarían
los sombríos colores sospechosos. Los oficiales la veían
como una hembra frívola. Tenía que ser quien esperaban
que fuera.
Los humanos no valoraban a sus hembras. Sacudió la
cabeza. Era mucho más que su hermosa fachada. Su

THE MAN OF STARS 38


hembra era una guerrera. Su arma era la información y la
usaba para salvar a la descendencia. Cuantos más salvaba,
menos descendencia que sus hermanos y él tendrían que
matar.
Poner fin a la esperanza de vida de los seres que aún no
habían vivido realmente era una tortura. Los cyborgs no
tenían otra opción. Tenían que hacerlo. Si se resistieran, La
Alianza Humanoide desmantelaría a cada cyborg. Esa era
una razón más por la que odiaban a sus amos humanos.
Stealth siguió a Zebrina mientras deambulaba por los
senderos, balanceando una mochila poco práctica. Sus
caderas se balancearon. Su delicioso aroma llenó sus fosas
nasales.
Su cuerpo se endureció. Le había tomado todo su control no
reaccionar cuando lo había limpiado. No le quedaba
restricción ahora. Su necesidad de ella fluyó a través de sus
circuitos, hizo que sus sistemas zumbaran.
No era el único que miraba a su hembra. Dos oficiales
acechaban en la oscuridad, sus ojos amarillos de Mox-X, sus
miradas siguiendo el progreso de Zebrina.
—Si no fuera la hija del comandante, le enseñaría una o dos
cosas a esa calientapollas—El más vil de los dos machos
murmuró la horrible declaración, tomando otro golpe de la
droga—. Me suplicaría piedad.
Stealth movió sus manos hacia sus armas, la rabia latía a
través de él. El humano había abusado de las hembras
locales en todas las formas en que los seres podían ser
abusados y sus superiores habían mirado para otro lado.
Stealth sabía que el comandante había abandonado el
planeta y era poco probable que regresara. Los cyborgs
habían interceptado las comunicaciones del macho.

THE MAN OF STARS 39


Una vez que los oficiales descubrieran el engaño del
comandante, Zebrina sería vista de la misma manera que las
hembras locales. Su estado ya no la salvaguardaría. Los
violentos machos humanos la atacarían. Los otros humanos
enojados con su padre, no la protegería.
Tenía que abandonar el planeta, viajar lejos de ellos. La
acompañaría, la mantendría a salvo. Juntos encontrarían un
nuevo hogar, se rodearían con seres honorables, seres en
los que podían confiar.
Una gota de lluvia salpicaba el camino. Eso fue seguido por
otra y otra hasta que el cielo se abrió, y un diluvio cayó sobre
ellos. Los humanos corrieron a cubrirse. Eran frágiles, no
estaban acostumbrados a estar a merced de los elementos
en absoluto
Su hembra se río y corrió hacia adelante, usando su
pequeño paquete como cubierta en su cabeza. La lluvia
puso su traje de vuelo en sus curvas y oscureció el color.
Cualquier humano que esté mirando desde un portal tendrá
dificultades para ver a través del velo de agua. Cualquier
persona situada fuera de una estructura se preocuparía por
su estado. Nadie le estaría prestando atención a su hembra.
Siempre cautelosa, no se dirigió directamente a su punto de
encuentro. Stealth la persiguió por el recinto. Una sonrisa
curvó sus labios, la alegría burbujeó en su pecho.
Salpicó los charcos, los tacones de sus lindas botitas
golpeando contra la piedra. Los relámpagos iluminaban el
cielo, iluminaban su forma exuberante. El choque de truenos
ocultaba su risa. El viento tiró de sus rizos negros.
En momentos como este, se sintió gloriosamente libre, igual
a cualquier ser. La lluvia arrasó sus cadenas virtuales,
haciendo que su entorno fuera fresco y nuevo.

THE MAN OF STARS 40


Se volvió hacia su destino y la anticipación fluyó a través de
él. Pronto la abrazaría, se perdería en su cuerpo caliente.
Hablarían, criarían y reafirmarían su conexión.
Esta vez, no la dejaría al final del ciclo de descanso. No
volvería a la esclavitud, no se vería obligado a seguir
órdenes con las que no estaba de acuerdo, matar seres con
los que no tenía desacuerdos: inocentes, inofensivos.
Su destino sería el de ella. Estaría al lado de su hembra para
siempre.
Redujo su velocidad, jadeando, con el pecho agitado. Sus
labios se torcieron. No fue diseñada para correr largas
distancias. Quería abrazarla en sus brazos y llevarla.
Eso no sería prudente. Los seres podrían estar mirándolos.
La siguió mientras se alejaba del camino hacia la oscuridad.
Tejió entre las estructuras, incursionando en una sección del
compuesto utilizada por trabajadores de nivel inferior. Esos
seres normalmente terminaban sus turnos cuando se ponía
el sol.
Escaneó el área. No había nadie a su alrededor. Zebrina
desaceleró, deslizándose de espaldas a un costado de una
estructura de almacenamiento, su punto de encuentro.
Alargó la mano derecha y la colocó en el panel de control.
Las puertas se desbloquearon. Se deslizó dentro.
No podía seguirla. Aún no.
Stealth se movió por el recinto, escuchando, buscando una
indicación de si alguien había visto a su hembra, había
despertado la alarma. La lluvia caía sobre él. El agua mojó
su cabello, goteó por su cuello, corriendo por un arroyo a lo
largo de su espina.

THE MAN OF STARS 41


Aparte del golpeteo de gotas golpeando la piedra y el
retumbar del trueno, había silencio. Los humanos habían
encontrado refugio, estaban preocupados por ellos mismos,
no de la hija del comandante.
Lethal, ¿hay alguna actualización? Lo comprobó con sus
hermanos.
Un rayo asustó al oficial del lote de lucha 736. El tono del
modelo E era seco. El humano comenzó a gritar sobre estar
bajo fuego enemigo, estuvo disparando a los guerreros a su
alrededor. Eso irritó a uno de los modelos C y maniobró al
oficial sobre un explosivo enterrado.
Boom se río por la línea de transmisión. Ninguno de ellos
simpatizaba con los oficiales de La Alianza Humanoide.
Dos naves de suministros fueron derribadas por los
lugareños. Lethal continuó retransmitiendo información. Los
oficiales de La Alianza Humanoide se rieron de eso, diciendo
que metieron la pata los locales por atacar naves vacías.
Esas naves vacías habían sido voladas por pilotos humanos,
seres leales a La Alianza Humanoide. Sus propios seres
murieron y se rieron.
Los labios de Stealth se aplanaron.
¿Eso es todo?
Hubo una pausa en las comunicaciones.
Proceso que eres su macho. La transmisión de Lethal se
suavizó. Pero cuando tu hembra me tocó, me habló, me
atendió, sentía como si se preocupara por mí, como si yo
fuera especial para ella.
Te cuida. Su hembra se preocupaba por la mayoría de los
guerreros, su corazón era lo suficientemente grande como

THE MAN OF STARS 42


para abarcarlos a todos. Eres especial para ella. Pero ella
me ama.
Me he ganado el cuidado de una hembra. La felicidad
envuelta alrededor de las palabras de su amigo. Eso está
cerca de ser amado.
Está cerca. No es lo mismo. Stealth no dijo eso.
Lethal y Boom y el resto de los cyborgs escuchando su
conversación se enfrentaban a una muerte segura. El
cuidado podría ser lo más cercano a llegar a ser amados. No
les quitaría esa alegría a sus hermanos.
Ve con ella, modelo K. Lethal lo instó. Protégela por
nosotros. Vamos a ver el complejo a través de los
dispositivos de grabación.
Infórmame si detectas algo. Stealth rodeó el compuesto una
vez más.
La lluvia se intensificó, empapándolo. La tormenta
disminuiría la probabilidad de que los oficiales salieran de su
refugio.
Regresó a la estructura de almacenamiento, colocó su
palma derecha en el panel, abrió la puerta. Otra exploración
del terreno le aseguró que no había seres en la vecindad.
Entró en el pequeño espacio. Zebrina volvió la cabeza, lo
miró con los ojos de par en par con miedo.
—Estás a salvo —Su voz era ronca por la emoción—. Estoy
contigo.
Se había quitado el traje de vuelo mojado y estaba envuelta
en un paño azul. Sus rizos húmedos se pegaron a su cara,
enfatizando sus grandes ojos azules. Su nariz y sus mejillas
eran de color marrón rojizo. Sus labios brillaban.
Era la vista más hermosa que había visto en su vida.

THE MAN OF STARS 43


—Quédate dónde estás. —Extendió las manos, como si
buscara físicamente detenerlo.
Frunció el ceño, esperando una cálida bienvenida del amor
de su vida.
—Cuando me tocas, dejo de pensar. Tenemos que hablar.
El acto risueño se había ido. Ante él había una hembra
fuerte, inteligente, directa en sus declaraciones, con
intención en su propósito, lo que sea que fuera eso.
La quería con cada célula de su cuerpo.
—Entonces hablaremos.
—Tienes un vínculo estrecho con tus hermanos. Lo respeto,
te amo por eso —Su expresión era grave—. Pero no puedo
dejarte. No puedo decirte adiós de nuevo. No a ti, el macho
que amo. Me rompería —Su labio inferior tembló.
—Mi hembra...
—No —No le permitiría hablar—. Odoon ha reservado dos
asientos en la nave para nosotros. Escondí un paquete aquí
antes en la rotación del planeta. Existen suficientes piedras
solares para darnos a ambos un nuevo comienzo. Quiero
que vengas conmigo —Se tocó el pecho—. Quiero que me
elijas. Por favor, Stealth.
—Te elijo a ti —Le dijo. Era su prioridad, su todo.
—Entiendo que Boom y Lethal han sido tus amigos por más
tiempo que nosotros... —Dejó de hablar. Su mirada se
encontró con la de él— ¿Qué dijiste?
—Te elijo a ti —Stealth dio un paso cauteloso hacia
adelante—. No habrá más despedidas. A partir de este
momento, tú y yo estaremos juntos.

THE MAN OF STARS 44


Compartirían una eternidad de dicha. Sus nanocibóticos
repararían cualquier daño causados por el envejecimiento,
expandiendo su esperanza de vida ilimitadamente. La
protegería de otras amenazas.
Nunca moriría.
La boca de su hembra se abrió. El silencio cayó entre ellos,
roto solo por su respiración, la de ella más fuerte que la de
él.
Esperó pacientemente, dándole el tiempo que necesitaba
para absorber sus palabras. Parpadeó una vez, dos veces.
—¿Vienes conmigo?
Él asintió.
Ella lo miró fijamente.
—¿Estaremos juntos para siempre?
Bajó la cabeza por segunda vez.
—¡Sí! —Corrió hacia él y saltó a sus brazos.
La atrapó fácilmente. Pesaba menos que algunas armas que
había manejado. La levantó en alto contra él. Sus pechos
presionados contra su armadura. Envolvió sus piernas
alrededor de su cintura. La tela de cobertura cayó al suelo.
—Te amo —Golpeó sus labios contra su barbilla—. Te amo
—Besó su mejilla derecha—. Te amo. —Sus labios rozaron
su mejilla izquierda.
Se giró, llevándola con él, su felicidad alimentando la suya,
su exuberancia contagiosa. Su hembra capturó su rostro
entre sus manos, sus palmas suaves contra su piel, ya que
se movían cada vez más rápido. Los soportes horizontales
de la estructura llenos con suministros de mantenimiento

THE MAN OF STARS 45


desenfocados. Las luces del techo se convirtieron en un
círculo de brillo.
Lo cubrió con besos, marcándolo con su amor. Se rio, su
alegría desbordante, saliendo de él, una corriente imparable
de deleite y maravilla.
Después de vencer las probabilidades casi imposibles,
ahora eran libres y estaban juntos. Nadie y nada podría
separarlos. Apreciaría a su hembra y su relación, protegerla
con todo lo que había.
Su futuro estaba con ella.

THE MAN OF STARS 46


Capítulo 4

Estarían juntos. Siempre. No habría más despedidas.


Zebrina había estado preparando sus argumentos, creyendo
que tendría que luchar para convencer a su guerrero de que
abandonara el planeta con ella. Pero Stealth la había elegido
sin ninguna pregunta. La valoraba más que su lealtad a sus
hermanos.
Eso significaba el universo para ella. Su pecho se calentó
cuando la hizo girar, su cuerpo desnudo presionado contra
su armadura corporal.
Se rieron, su alegría amplificando la de ella.
No había necesidad de susurrar, de escabullirse. El trueno
podría estallar fuera de la estructura de almacenamiento. La
lluvia podría estar golpeando el techo. Dentro del espacio,
solo eran él y ella.
El edificio, como muchos de los creados por La Alianza
Humanoide, estaba casi insonorizado. Los humanos no
podían escucharlos.
—Estoy tan feliz —Besó el hermoso rostro de Stealth. Sus
heridas se habían curado completamente, su piel dorada un
tono más claro donde había sido herido.
—Nos vamos al amanecer —Aminoró la velocidad y luego
se detuvo.
No era una hembra pequeña, pero la abrazaba fácilmente,
aplanando sus curvas contra su forma cubierta de una
armadura, levantándola en el aire como si no pesase nada.

THE MAN OF STARS 47


Sus pies colgaban sobre el piso de piedra de la estructura.
Se sentía como si estuviera flotando física y
emocionalmente.
—Nos vamos al amanecer —Asintió— ¿Qué haremos hasta
entonces? —Bajó la mirada hacia su boca, deseándolo,
necesitándolo.
Su cyborg cumplió su pedido silencioso de un beso,
cubriendo sus labios con los de él. Se abrió a él. Exploró su
boca, transfiriendo de su boca más nanocibóticos. Su carne
burbujeaba y burbujeaba.
Se habían besado, tocado y follado innumerables veces. Ya
no era completamente humana. Había compartido algo de sí
mismo con ella. Sanaba rápido, era más fuerte, pensaba
más claramente.
Esos pensamientos estaban actualmente completamente
enfocados en él, su guerrero, su macho. Sus ojos grises
brillaban con energía. Sus lenguas bailaron. Sabía a él,
metálico y masculino, peligroso y su refugio.
Cuando estaban juntos, podían ser ellos mismos. Podía ser
gentil y amoroso. Podía ser seria, no tener que ocultar su
inteligencia. Su cyborg deseaba más que el bonito paquete
que les mostraba a los demás. La deseaba.
Y ella lo quería a él. Tiró de su armadura, anhelando más
contacto.
—Necesito tocar todo de ti.
Tenía que asegurarse de que había sanado. Al ver su forma
devastada hasta su marco siempre la sacudía. No todos los
cyborgs volvieron a la base. Había sido dolorosamente
consciente de ese hecho.
Cada vez que se separaba de él, le preocupaba no volver a
verlo nunca más.

THE MAN OF STARS 48


Su pasado le había enseñado que tenía razones válidas
para preocuparse. Cuando le dijo adiós a su madre, saliendo
de su casa para la academia, asumió que la vería de nuevo.
El complejo había sido promocionado como seguro, más allá
del alcance de los Rebeldes.
Sin embargo, ese adiós había sido definitivo. Su madre
había muerto. Las palabras habían quedado tácitas entre
ellas, el amor no totalmente expresado.
No tomaría ese riesgo con su cyborg. Sus labios rozaron su
barbilla.
—Necesito que toques todo de mí —Puso sus pies en el
suelo y se quitó la armadura protectora, revelando la piel
dorada y el músculo definido.
Si no fuera por el número de modelo escrito en su mejilla,
podría ser confundido por un humano... un macho enorme,
increíblemente en forma, magníficamente hecho.
Los mechones negros en su cabello castaño absorbieron la
luz. Esos hilos eran cortos, zumbando cerca de su cráneo.
Sus dedos se crisparon. Por experiencia, sabía que serían
suaves. Y era el único cabello que lucía, su forma diseñada
para ser fácil de limpiar.
Sus mejillas estaban permanentemente lisas. Sus ojos
grises contrastaban vívidamente con su semblante. Su
barbilla era cuadrada, no tenía un toque de sombra.
Los hombros anchos de forma cónica a las caderas
estrechas. Sus pies estaban separados. Su polla estaba
erecta.
Se le secó la boca. Era enorme, la llenaría por completo.
—Cuando estamos separados, a veces te siento dentro de
mí —Confesó, sus mejillas calientes—. Tus nanocibóticos
están ahí, pero también lo está otra parte de ti.

THE MAN OF STARS 49


Había experimentado una plenitud, como si su polla
permaneciera dentro de su coño.
—Cuando estaba en la batalla, mis sistemas funcionaban
mal y te olía —Respiró profundamente, sus fosas nasales se
dilataron—. Mis procesadores me informaron que eso no era
posible, pero mi cuerpo rechazó esa lógica.
—¿Te pusiste duro? —Se acercó a él—. Me mojé.
Deslizó las yemas de sus dedos por su pecho. Sus músculos
se ondularon.
—Mi polla se endureció —Sus labios se torcieron—. Mucho
para diversión de los otros guerreros.
—¿Pensaron que la batalla te excitaba? —Pasó los dedos
sobre los huesos de la cadera y su polla se balanceó—. Los
modelos C aprobarían esa respuesta.
—Boom estaba impresionado —Stealth empujó sus caderas
hacia adelante. Tomó su ofrenda, curvando sus dedos
alrededor de su eje.
—Me impresionas —Lo bombeó lentamente, saboreando el
calor, la dureza contra su palma—. Estoy agradecida por tu
fuerza, tu habilidad, tu determinación y que has vuelto a mí
una vez más.
—Siempre volveré a ti —Su voto le dejó sin aliento. Los
cyborgs no mentían. Valoraban su honor. Quiso decir lo que
dijo, se aseguraría de que fuera la verdad.
—Cuento con eso —Pasó las manos por su longitud.
Sus labios se aplanaron. Sus ojos se oscurecieron. Sonrió,
disfrutando del control que tenía sobre él, uno de los mejores
guerreros del universo.
—No te burles de mí, hembra —Su voz se hizo más profunda
con un gruñido estimulante.

THE MAN OF STARS 50


—No es molesto retrasar la liberación —Aunque se sintió de
esa manera—. Tenemos todo el ciclo de descanso para
encontrar satisfacción.
Dudaba que alguno de ellos durara tanto. Un poco de pre
semen ya apareció en su raja. Pasó su pulgar sobre él y sus
dedos se doblaron en puños.
—Puedo acariciarte, saborearte —Se humedeció el labio
inferior con la lengua—. Hacerte correr....
—Suficiente —La agarró por la cintura y la atrajo hacia él.
Conmocionada, soltó su polla. La levantó hasta que sus
senos estuvieron a la altura de su rostro—, puedes
acariciarme y probarme más tarde
Envolvió sus piernas alrededor de él.
—Lo haré.
—Cuento con eso —Sonrió, usando sus palabras para
burlarse de ella. Su expresión era cariñosamente juvenil.
Su corazón se derritió. El dolor y la oscuridad que había
soportado no habían borrado su lado juguetón y amaba eso.
Lo amaba.
La cabeza de su polla empujo en su coño, el golpe erótico
redirigiendo sus pensamientos. Se alineó, empujándola
hasta su borde y encontró su mirada.
—Soy tuya —Vio esa verdad en sus ojos.
—Me perteneces —La empaló con su eje.
Chilló, clavando las uñas en sus hombros, su coño de
repente relleno de polla dura. Su punta presionó contra sus
paredes internas, abriéndola para él, el ajuste perfecto.
Cada pulso de sus venas fue transmitido, tranquilizándola.
Estaba vivo, estaba dentro de ella.

THE MAN OF STARS 51


—Y te pertenezco —Su voz era áspera—. Otros guerreros
hablan de liberación. Nunca seré libre. Me posees más a
fondo que La Alianza Humanoide alguna vez pudo. Has
capturado mi alma, una parte que nunca podrían tocar.
—Stealth —Ahuecó su hermoso rostro, la emoción ahogó
sus palabras.
—Agárrate a mí —Su orden contenía capas adicionales de
significado.
—Nunca te dejaré ir —Dejó caer sus manos una vez más
sobre sus hombros.
Resopló, la elevó hasta que solo su punta estaba dentro de
ella y luego la condujo hacia abajo. Ella jadeó. La elevó, la
condujo hacia abajo, la elevó, la condujo hacia abajo, su
ritmo aumentaba con cada caída.
Los labios de su coño golpearon contra su base. Sus pechos
golpearon contra su pecho. El calor irradiaba desde todos
los puntos de contacto, su placer estaba bordeado por el
dolor.
Ese había sido el ritmo de su relación, momentos de dicha
seguidos por duraciones de tormento. Pero eso estaba a
punto de cambiar. No habría más encuentros furtivos en
medio de soportes horizontales, no más descanso de ciclos
de sueño en privado, no más preocupaciones por ser
atrapado.
En Ahki, su amor estaba prohibido. Era la hija del
comandante humano. Era un guerrero cyborg, un ser de su
clase etiquetado como máquina.
Si fueran descubiertos, morirían dolorosamente. Su agarre
sobre él se intensificó. Sería cortado en pedazos mientras
estaba consciente, sentiría cada corte.

THE MAN OF STARS 52


Su destino sería... No lo sabía. Antes de la rotación de este
planeta, creía que su padre la habría protegido. Ahora,
sospechaba que había hecho un ejemplo de ella. habría
exigido que fuera ejecutada, ilustrando su lealtad a la causa.
Y hubiera querido morir. Sin Stealth, no podría soportar vivir.
Alejó ese miedo. Ambos vivirían. Según su contacto, Odoon,
el planeta al que se dirigían, Waaban Two, era tolerante con
todos los seres, todas las relaciones.
Era poco probable que los Ahkians los aceptaran. Los
humanos y los cyborgs habían matado a sus seres amados,
pero Stealth y ella conectarían con los lugareños.
Sería libre y ella también lo sería. Serían una pareja normal,
capaz de amar, hablar y tocarse abiertamente. Podría
presentarles a los amigos que conocería. Podía mostrar sus
emociones, expresar sus pensamientos.
Y podían follar cuando quisieran, como lo estaban haciendo
ahora. El deseo se arremolinó a su alrededor. Su aliento se
volvió irregular. El sudor goteaba por su columna vertebral.
Él gruñó. Ese sonido emocionantemente animal no se debía
al esfuerzo. Su cyborg podía correrse sin cesar, su
resistencia sin igual. La pasión lo agarraba tan ferozmente
como a ella, sus ojos brillaban de deseo.
Mientras se movían, habló sobre su pecho, saboreando el
sabor único de su piel. Se retorció... por todas partes y su
coño goteó, el aroma de ellos llenó el aire.
No sabía mucho sobre follar antes de conocerlo. Hubo
algunas experiencias torpes con machos de diferentes
especies en la Academia. No la habían satisfecho.
Solo su cyborg lo hacía. Había remodelado su cuerpo para
que se ajustara al suyo, le había dado más que la mera

THE MAN OF STARS 53


liberación física. Era más valiente por conocerlo, más
segura, menos conforme
—Más duro —Golpeó sus talones contra sus mejillas
apretadas—. Más rápido.
Aumentó el ritmo, esforzándose por obedecer sus órdenes.
Lo ayudó, tirando hacia arriba, los músculos de sus brazos y
piernas se tensaron con el esfuerzo. El sudor le humedecía
el pelo y le alisaba la forma.
Necesita envolverse más y más alrededor de su pecho. Era
una lucha por respirar, una lucha para evitar su liberación.
Su coño se contrajo alrededor de su eje, la fricción
aumentaba sus anhelos.
—Stealth —Echó la cabeza hacia atrás y aspiró aire—.
Stealth —No sabía lo que necesitaba pero él podía dárselo.
—Dilo, mi hembra —Empujó hacia arriba mientras la
empujaba hacia él, el impacto sacudiendo su cuerpo—. Dilo.
—Amor —Lloró las palabras que lo volvieron loco—. Te amo.
—Sí —La llenó hasta su base y giró sus caderas,
apretándola contra él.
Gritó, apretándose a su alrededor, rompiéndose en un millón
de pedazos. Rugió, corriéndose duro, los chorros de su
esencia infundida con nanocibóticos salpicando contra su
carne interior, inundándola de sensaciones.
El placer se precipitó en ella. El espacio brilló claro y oscuro.
Las paredes giraron alrededor de ella. Se agarró a los
hombros de su cyborg, colgando, mientras giraba,
convulsionando de placer. Toda ella burbujeaba y
burbujeaba, muy viva, consciente de él.
Apretó su eje y soltó, apretó y soltó, exprimiendo cada gota
de él, hasta que no quedó nada. Se estremeció y apoyó la

THE MAN OF STARS 54


barbilla sobre la parte superior de su cabeza, sin embargo,
permaneció erguido, su guerrero nunca titubeó, nunca
poniéndola en peligro.
Sus temblores disminuyeron. Se hundió contra él, sus dedos
se extendieron sobre su pecho. Su corazón humano latía
bajo su palma derecha, el tempo triplicado
tranquilizadoramente fuerte.
Por un momento aparentemente interminable, ninguno de
ellos se movió. Se aferró a ella, sus brazos enganchados
debajo de su culo. Acarició sus pectorales, comprobando
que estaba entero, ileso.
Una conexión fluía entre ellos, constante e interminable. El
silencio decía sus cosas no las podía poner en palabras. A
menudo era así cuando volvía del campo de batalla. El dolor
lo seguía, una sombra envolvió su alegría.
—¿Fue malo esta vez? —murmuró. A juzgar por el estado
de sus hermanos y él, la lucha había sido intensa.
—Será malo —Su voz era apenas audible.
Estaba pensando en el futuro, no en el pasado. La culpa la
pinchó. Estaba alejándolo de la batalla, dejando a sus
hermanos con un guerrero menos para defender el terreno.
—Desearía que tus amigos pudieran unirse a nosotros.
—Eso no es posible —Stealth besó su frente, su boca
caliente contra su piel—. Mi prioridad es asegurarme de que
estés a salvo.
—Estoy a salvo cuando estoy contigo.
Y él también estaría a salvo. Al amanecer, conocerían la
nave de Odoon. Luego volarían lejos de la guerra, la
matanza, la muerte.
—¿Tu amigo sabe lo que soy?

THE MAN OF STARS 55


Su guerrero se acurrucó contra ella.
—Sabe que eres un cyborg —No dijo más.
Al principio, Odoon se había negado a transportarlo. El
macho Ahkian odiaba al amable Stealth, tenía una razón
justificable para hacerlo. Los cyborgs habían matado a su
hembra, sus dos niños pequeños, los tres seres por los que
había vivido, amado.
Los guerreros no habían elegido poner fin a esas vidas. El
ataque a los pequeños había sido arreglado y ordenado por
La Alianza Humanoide, por su padre, el comandante. Como
Stealth le había explicado, tenían que obedecer órdenes o
arriesgarse a la terminación de millones de sus hermanos.
Pero Odoon creía que los cyborgs habían tomado esa acción
de su libre albedrío. Quería a Stealth y sus hermanos
muertos. Había tenido que recordarle cómo la nave que
llenaba de niños no habría volado varias veces sino hubiera
sido por su información, por los riesgos que había corrido.
El macho Ahkian se lo debía y redimiría esa deuda. No era
una tonta, a pesar del acto que hizo para La Alianza
Humanoide. No iba a confiar en su amigo, especialmente
con la vida del macho que amaba.
Stealth la protegía ahora. Su mandíbula sobresalía. Lo
protegería en la nave.
Una vez que llegaran al planeta, seguirían su propio camino,
encontrarían un nuevo hogar, lejos del asentamiento Ahkian.
Waaban Two albergaba muchas especies. Encontrarían
nuevos amigos entre los lugareños.
—Después de que dejemos el planeta, la comunicación con
tu padre será peligrosa —La voz de Stealth era suave—. La
Alianza Humanoide podría rastrearnos hasta el planeta,
apresarnos.

THE MAN OF STARS 56


Lo matarían, quizás a ella también. Nunca arriesgaría su
vida de esa manera.
—Ya le dije adiós al comandante —Si los Ahkians hubieran
tomado acción sobre la información que les envió, no
volvería a ver a su padre.
Su muerte salvaría la vida de muchos otros seres, machos,
hembras, niños, bebes. El comandante habría seguido
liderando la tortura en masa, los brutales ataques, el
asesinato de especies enteras. Tenía que ser detenido.
Pero era el primer ser que mataría. La bilis le quemó la parte
posterior de la garganta. Ese acto se la comía en su interior.
Stealth entrecerró los ojos hacia ella.
—¿Qué hiciste, mi hembra?
—Nada que él no te hubiera hecho a ti ni a mí —Nunca
podría engañar a su cyborg. La leía con facilidad.
Porque era el único ser que realmente la miraba, que la
miraba a los ojos y no sus tontos rizos, sus grandes pechos
o su culo curvilíneo.
—Mi hembra guerrera fuerte —La abrazó más cerca de él,
la fuerza en su forma y el calor de su cuerpo la calmó. Su
cyborg había matado seres, entendía lo que estaba
pasando, no la juzgaría por la acción que tuvo que tomar—.
Has renunciado a demasiado por mí.
—¿Y tú no? —Su voz fue amortiguada por su pecho. Estaba
alejándose de sus hermanos por ella—. Los sacrificios
deben hacerse para avanzar —Su tono se volvió amargo—.
El comandante me enseñó eso.
Era uno de los sacrificios que su padre había estado
dispuesto a hacer. A los ojos del comandante, era una hija
desechable, una víctima de la guerra.

THE MAN OF STARS 57


Zebrina miró a Stealth. Su guerrero, por el contrario, la veía
como una persona invaluable, femenina, insustituible y suya.
Moriría por ella, mataría por ella.
Nunca la dejaría.
—Los humanos tienen problemas de funcionamiento —
Sacudió la cabeza—. Los sacrificios deben hacerse para
avanzar —Resopló suavemente— ¿Hacia dónde avanzan?
¿Qué esperan ganar? ¿Qué tesoro es más precioso que los
seres que poseen sus almas?
Soltó una sonrisa.
—No lo sé.
—Sospecho que ellos tampoco lo saben —Su cyborg rozó
su nariz contra la de ella, un gesto juguetón que le arrancó
el corazón y la hizo amarlo más—. No valoran a sus
hembras.
—Valoras a tu hembra —Lo sintió que en la forma en que la
sostenía, la miraba, hablaba con ella, Escuchaba más que
sus palabras, la miraba con reverencia, como si fuera un
regalo.
—Valoro a mi hembra por encima de todo —Sus ojos
estaban iluminados por la emoción. El brillo quemaba desde
su núcleo, tan vivo y vibrante como él—, y es mi destino.
Avanzare a Waaban Two contigo, donde ambos seremos
libres.
—Donde podemos amarnos sin miedo —Su sonrisa se
volvió genuina.
No habría peleas, ni violencia, ni asesinatos. De acuerdo con
Odoon, Waaban Two era un planeta pacífico, ocupado
principalmente por licitaciones agrícolas, pacifistas como él,
seres desinteresados en la guerra.

THE MAN OF STARS 58


Las piedras solares que había recogido durante los ciclos
solares deberían ser suficientes para comprar un domicilio
situado en una pequeño cuadrado de tierra. Stealth y ella
cultivarían vegetación para alimentarse, recolectarían agua
de lluvia para bebidas, el terreno dándoles todo lo que
necesitaban.
Crearían un hogar para ellos, crearían algo de alegría, algo
de serenidad. Para otro ser, ese futuro puede parecer poco
emocionante, pero ya había experimentado suficientes
emociones, preocupaciones y estrés para que le duraran
numerosas vidas. Anhelaba una existencia sin incidentes,
sin traumas.
Y ansiaba compartirlo con Stealth, el macho que amaba. Le
puso la cara entre las manos e inclino su boca sobre la de
él.
Era todo lo que realmente necesitaba.

THE MAN OF STARS 59


Capítulo 5

Stealth era un guerrero afortunado.


Sostuvo a su hembra mientras ella dormía. Ambos se habían
vestido, preparándose para su viaje. Llevaba un traje de
vuelo morado oscuro, el tono más cercano que tenía al
negro. Se había puesto su armadura. Se irían antes de que
saliera el sol, se ocultarían en la oscuridad.
Pronto, serían libres, estarían seguros y juntos.
Hasta ahora, nunca había creído realmente que eso fuera
posible. La felicidad fugaz era un regalo. La alegría duradera
era impensable.
Pero lo tendrían. Pasaría el resto de su vida casi infinita con
la hembra que amaba. Eso era un milagro, un...
Stealth. El tono de la transmisión de Lethal enderezó su
columna vertebral. Tienes que salir. Ahora.
Eso no es posible. Dependían del amigo de su hembra para
el transporte ¿Qué está pasando?
Uno de los cuerpos encontrados en la segunda nave de
suministros derribada pertenecía al comandante. Su amigo
le envió imágenes.
No había duda de la condecoración de la cubierta del pecho,
el cabello gris, la cara pálida y arrugada. El padre de Zebrina
estaba muerto.
Stealth miró a su hembra. Debía haberles dado a los Ahkians
su información de salida.

THE MAN OF STARS 60


El macho había subestimado a su hija, había calculado mal
su inteligencia y la profundidad de su lealtad a su madre.
Después de la cría, antes de quedarse dormida, había
compartido los detalles de su última conversación con su
padre, describiendo las condenatorias respuestas que había
recibido, fue la prueba que había reunido de su traición.
Su hembra podría haber perdonado la traición del
comandante hacia ella, pero nunca aceptaría que dejara a
su madre morir. Había adorado a su madre, había
transmitido numerosas historias sobre el cuidado de su
madre, su amabilidad, cómo era de gentil.
El comandante no había valorado a su hembra. Había sido
despiadado e intencionalmente la descartó, dejando a la
madre de Zebrina ante la crueldad de sus enemigos, un
concepto que Stealth luchó para envolver alrededor de sus
procesadores.
Las hembras eran raras, eran preciosas. Siempre deben
estar protegidas.
La Alianza Humanoide promete venganza. Lethal le
comunicó. Los humanos indecisos aún no se han decidido
por una acción, pero lo harán. Pronto.
Entiendo. Era mejor estar fuera del planeta cuando eso
sucediera. Gracias.
Te mantendré informado. El modelo E finalizó la transmisión.
—Mi hembra —Stealth presionó sus labios contra su
frente—. Es la hora.
Parpadeó hacia él, sus ojos suaves por el sueño.
—¿Ya está amaneciendo?
—Tenemos que salir temprano —Cogió el paquete que ella
había guardado en la estructura, colocándolo en su regazo.

THE MAN OF STARS 61


—Odoon no se irá temprano —Frunció el ceño—. No somos
los únicos pasajeros.
Convencería a Odoon para que se vaya. La seguridad de su
hembra dependía de dejar el planeta lo antes posible.
—Si necesitas comunicarte, susurra. —La llevó hacia la
puerta.
—Bájame —Golpeó su pecho con el blindaje del cuerpo—.
Puedo caminar.
—Nos estamos moviendo a la velocidad del cyborg.
La abrazó con más fuerza. No podría coincidir con su ritmo.
Y era ruidosa, no estaba acostumbrada a correr sin ser
detectada. Los seres podrían escucharla. No podía arriesgar
a eso.
Stealth escaneó el terreno alrededor de la estructura. No
había nadie cerca. Salió con su hembra, corriendo en la
oscuridad. La lluvia había cedido. Los caminos estaban
resbaladizos con agua. Muchos de los humanos
permanecían en sus domicilios.
Había patrullas pero eran fáciles de evitar. Los machos
rodearon el complejo en patrones predecibles. Había notado
sus rutinas mucho antes de conocer a Zebrina y no habían
cambiado desde entonces.
Dejar el complejo sería más desafiante. Deshabilitó
temporalmente los dispositivos de grabación y detección de
las puertas laterales, accediendo a esos sistemas de forma
inalámbrica
Mirando a los guardias, esperó. Se equivocarían. Los
humanos siempre lo hacían.
Uno de los guardias hizo señas a los demás, su mirada en
su pantalla privada. Los machos hicieron señas a un grupo

THE MAN OF STARS 62


de oficiales que charlan ingresando por las puertas y se
unieron a sus amigos, su atención en ellos.
Stealth, acunando a su hembra en sus brazos, corrió detrás
de los oficiales, saliendo antes de que las puertas se
cerraran.
Ambos grupos de humanos estaban hablando sobre un
tema: la muerte del comandante, el padre de Zebrina.
Estaban indignados por el asesinato.
Ninguno de ellos cuestionó por qué el comandante había
estado en la nave derribada. Stealth sofocó un resoplido de
asco. En lugar de ser expuesto como el desertor que era, su
padre fue visto como un mártir por la causa de La Alianza
Humanoide.
Los humanos tenían procesadores que funcionaban mal.
Navegó por los caminos de los asentamientos circundantes,
eligiendo las rutas sin luz consideradas inseguras por La
Alianza Humanoide. Siendo un cyborg, tenía la capacidad de
ver en la oscuridad, podía detectar cables ocultos y
explosivos. Los espacios no representaban ningún peligro
para él, tenían la ventaja adicional de estar desprovistos de
vida.
Algunos de los machos de La Alianza Humanoide estaban
hablando sobre su hembra. Le informó Lethal. Están
esperando que salga de su domicilio. Sus planes no son...
honorables.
Los labios de Stealth se aplanaron. Planearon atacarla.
Agujero de Fraggin.
¿Quieres que terminemos su esperanza de vida? Boom
preguntó.

THE MAN OF STARS 63


Los humanos no merecían vivir, pero matarlos era
demasiado arriesgado.
Ignóralos. Poner fin a la esperanza de vida de los machos
podría poner en peligro a todos sus hermanos. No tocarán a
mi hembra. Nos vamos del planeta.
Esperaremos a matarlos, haremos que parezca su error. El
tono del modelo C dijo que disfrutaría de esa tarea.
La protección era un rasgo cyborg y sus hermanos vieron a
su hembra como suya. No les negaría la oportunidad de
contraatacar en su nombre.
Stealth se acercaba a la frontera, la franja de terreno que
dividía La Alianza Humanoide y los Ahkians. Algunos de sus
hermanos defendían la línea del frente. A pesar de que no
los había visto físicamente en ciclos solares, se
comunicaban constantemente.
Necesito cobertura. Les transmitió. Estoy llevando a mi
hembra.
Eres afortunado, modelo K.
Te defenderemos con nuestras vidas.
Te estoy enviando la ruta ideal.
Los cyborgs apoyaron sus palabras con acciones,
despejando con entusiasmo el terreno de sus enemigos,
matando a los Ahkians con un renovado sentido de
propósito.
La hembra de Stealth se retorcía con cada ronda de
disparos.
—Vamos a morir —susurró.
—Estás a salvo.—Murmuró en su oído derecho—. Este es
mi dominio.

THE MAN OF STARS 64


Usando la imagen que había recibido como guía, corrió con
ella, cubriendo tanto de su frágil forma humana con su
cuerpo como fue posible. Los proyectiles zumbando por su
rostro, rozando su piel.
Hermanos. Apretó los dientes.
Lo veo. Un modelo D respondió.
Los proyectiles zumbaron sobre su hombro, viajando en la
otra dirección. Un Ahkian cayó al suelo cubierto de
escombros. Una herida decoraba el centro de su frente. Sus
brazos y piernas giraban.
Le tengo. El modelo D cantó. Debería estar despejado
ahora.
Gracias. Stealth saltó sobre el macho moribundo, sin
desacelerar su ritmo. Zebrina, no estaba acostumbrada a ver
la muerte, presionó su rostro contra su pecho.
Les debo una, guerreros. Transmitió su aprecio a sus
hermanos.
Paga esa deuda asegurándote de que viva.
Tu hembra nos mostró amabilidad.
Nos dio esperanza.
Sus hermanos transmitieron historias sobre su hembra,
cómo se había arriesgado al descubrimiento para aliviar su
dolor, había desviado la ira de su duro oficial humano más
de una vez, les había dado, a sus muñecas, sonrisas
soleadas después de duraciones de oscuridad y horror
implacable.
Su compasión se había extendido a más que él y los
hermanos en su lote de lucha. Todos los guerreros que
circulaban por el complejo lo habían experimentado.

THE MAN OF STARS 65


Porque esa era quien era su hembra. La levantó más alto
contra su pecho. Se preocupaba por muchos seres.
Lo amaba.
Solo cuatro Ahkians custodiaban el exterior del hangar. Los
evitaba fácilmente, llevando a su hembra a través de un gran
portal abierto. El techo de la estructura ya había sido
retraído, el cielo negro sobre él.
Examinó el espacio, notando la posición de los humanoides
a su alrededor. Su sistema auditivo recogió voces.
—También esperamos una hembra humana y un cyborg
modelo K. —El macho en su tono expresó su disgusto.
—¿Estamos transportando un cyborg? —Preguntó una
hembra—. Los demás no estarán contentos.
—No estoy contento —El macho admitió—. Máquinas
asesinas. Los odio a todos ellos. Pero le debía un favor a la
hembra y le di mi palabra, que tanto ella como el cyborg
llegarán a salvo.
Los hombros de Stealth bajaron. El macho debe ser Odoon,
el amigo de su hembra. Al Ahkian no le caía bien pero era
honorable, no dañaría a Zebrina.
Los dos seres hablaron sobre las diversas necesidades de
los niños que estaban rescatando. Transportó a su hembra
hacia las voces, moviéndose lentamente, con cautela,
buscando peligro
La Alianza Humanoide ha puesto en tierra sus naves.
Lethal comunicó. Planean disparar a todas las otras naves
en el cielo.
Agujero de Fraggin. El peligro no había venido desde el
hangar ¿Puedes deshabilitar su monitoreo?

THE MAN OF STARS 66


Lo intenté. El Modelo E sonaba tan preocupado como él.
Tiene que estar cableado a través de un dispositivo de La
Alianza Humanoide con autorización.
¿Dónde está el dispositivo más cercano? Stealth transmitió
sus coordenadas.
Este es el que está más cerca de ti. Lethal transmitió la
ubicación. La Alianza Humanoide no lo desactivó antes de
retirarse.
El dispositivo estaba situado lejos en territorio Ahkian. El
estómago de Stealth se retorció. Eso estaba muy lejos de su
ubicación actual.
Completó el cálculo. Si corriera a velocidades de cyborg,
llegaría a la ubicación un par de momentos antes del
amanecer. Eso le daría suficiente tiempo de deshabilitar el
sistema de monitoreo.
No le daría tiempo suficiente para hacerlo y regresar a la
nave Ahkian.
Retrasar el despegue no era una opción. El amanecer se
eligió porque había un error de programación de La Alianza
Humanoide en ese momento. Los oficiales celebraban
reuniones. Durante la misma duración, su personal
cambiaba de turno. Al carecer de la supervisión adecuada,
los humanos de reemplazo no se apresuraban a sus
puestos. Confiando en sus dispositivos para cubrir la brecha
en la vigilancia, dispositivos que los cyborgs podrían
manipular fácilmente de forma remota.
Los dispositivos dentro del complejo...
No se puede acceder sin matar a los oficiales. Lethal eliminó
esa idea.

THE MAN OF STARS 67


Los oficiales asesinados pondrían en peligro a cada cyborg
esclavizado por la Alianza Humanoide. Stealth no podía
permitir eso, no para salvar su propia vida.
Procesó lo que tenía que hacer y no le gustó. Ni un poco.
Una de las formas de vida en el hangar se fue. El espacio
quedó en silencio.
Dio un pisotón mientras cargaba a su hembra hacia los
Ahkians, utilizando su pesada pisada para advertir al ser
restante de su acercamiento. Los humanoides no tenían
sensores de forma de vida como los tenían los cyborgs.
El macho, Odoon, se volvió hacia ellos, con las armas en las
manos. Sus dedos estaban lejos de los disparadores. Eso
habría causado su muerte si la amenaza hubiera sido real.
Stealth pasó su mirada sobre él. El amigo de su hembra era
más joven y estaba más en forma de lo que esperaba que
fuera. El Ahkian era un macho humanoide en su mejor
momento.
—Somos nosotros, Odoon. —Zebrina le sonrió a su amigo—
. Zebrina y Stealth.
Odoon enfundó sus armas y los fulminó con la mirada.
—Llegas temprano.
Stealth bajó a su hembra hasta que sus pies calzados
tocaron el suelo.
—Tengo una misión para completar antes de que la nave
despegue.
—No estamos cambiando nuestro horario, máquina —El
Ahkian curvó su labio superior—. Si llegas tarde, nos iremos
sin ti.

THE MAN OF STARS 68


—No llegará tarde —Zebrina dejó caer su mochila sobre la
piedra y frunció el ceño ante Stealth— ¿Qué misión tienes
que completar?
—Toma esto —Presionó un arma en sus palmas, sin
responder a su pregunta. Todas sus armas habían sido
calibradas para su hembra, la suya, la única. Podía usarlas,
usarlas en ellos—. La nave tiene que partir al amanecer —
Lo dijo lo suficientemente fuerte como para que el macho
Ahkian pudiera escuchar—. Tienes que estar en ella.
—También tienes que estar en la nave —Colocó el arma con
su mochila y agarró sus manos—. Viajamos juntos. Ese es
el plan.
—Ese plan ya no es posible —No podía salvarlos a ambos.
Alguien tenía que desactivar el sistema de monitoreo de La
Alianza Humanoide—. Tienes que viajar sola.
—Stealth.
La protesta se reflejó en sus ojos, cortes de azul oscuro en
medio de la luz.
La abrazó, tiró de su cuerpo exuberante contra el suyo y
capturó su boca, vertiendo todas sus emociones en ella, todo
lo que aún no podía decir de lo que sentía. Sus lenguas se
enroscaron. Su dulzura le dio sabor al abrazo. Su almizcle le
hizo cosquillas en la nariz.
Grabó cada detalle sobre ella, sobre este último momento
que compartieron, almacenaría esa información en sus
bases de datos y en su cerebro orgánico, guardando el
recuerdo para las sombrías rotaciones planetarias por
delante de él. Era su hembra y cuando se fuera, se llevaría
su felicidad con ella.
Su alma moriría mucho antes que su cuerpo.

THE MAN OF STARS 69


—Completaré tu misión contigo —Su hembra tocó sus
mejillas, sus manos suaves y cálidas—. Dejaré mis cosas
aquí.
Su oferta desgarró su corazón. No quería dejarla.
—Ayuda a Odoon a cargar a la descendencia —Le dio una
tarea para completar, tratando de distraerla— ¿Puedes
hacer eso por mí?
—Por supuesto, pero...
—No hay tiempo para discutir esto —Pronto sería el
amanecer y tenía una distancia significativa para cubrir, un
dispositivo para encontrar, un sistema para acceder—.
Tienes que quedarte aquí, mi hembra.
—¿Volverás a mí? —Buscó en su rostro.
Mantuvo su expresión en blanco, sin darle nada.
Pero sabía la verdad. Lo vio en sus ojos.
—Me diste tu palabra, guerrero —Se puso de puntillas y
agarró el cuello de su armadura, sacudiéndolo—. Dijiste que
siempre volverías a mí. Espero que cumplas tu voto.
—Si puedo, lo haré —Eso fue todo lo que pudo darle.
—Puedes. —Su intrépida hembra exigió más—. Y lo harás.
Ya sabes nuestro destino. Si no regresas a tiempo,
encuéntrame allí.
No dijo nada, incapaz de hacer ese compromiso.
—Di que lo harás —No retrocedería—. Júralo por tu honor o
me reuniré con tus hermanos en el complejo ahora mismo.
Haría eso... porque era tan terca, tan implacable como él.
Era su macho, le habían otorgado el regalo de su lealtad.
Era su universo, el único ser que amaría.

THE MAN OF STARS 70


—Haré todo lo que esté en mí poder para encontrarte allí —
Si de alguna manera sobrevivía, viajaría a Waaban Two y la
encontraría—. Mientras haya aliento en mi cuerpo, intentaré
volver a ti. Lo juro por mi honor —Quitó sus manos de su
forma, las apretó y dio un paso atrás—. Júrame por tu honor
que estarás en la nave cuando se vaya.
—Estaré en la nave —Lo miró, tan decidida, tan estoica.
Su corazón se hizo trizas porque conocía a su hembra.
Sabía cuánto este acto intrépido le costaría, como nunca
había querido despedirse de él otra vez.
—Te amo, mi macho.
—Te amo, mi hembra —Rozó sus labios contra los de ella,
besando a su hembra, tal vez por última vez y la soltó a
regañadientes.
Trató de agarrar sus manos. Las sacó de su alcance y se
estremeció ante su rechazo.
Tenía que infligirle ese daño. Si se demoraba más, pondría
su vida útil en riesgo. El amanecer se acercaba.
Su mirada se alzó y se encontró con la de Odoon.
—Sé cuándo te vas, conozco tu plan de vuelo, donde te
encontrarán en Waaban Two —Informó al Ahkian—. Esa
información ha sido compartida con todos mis hermanos. Si
mi hembra no es transportada allí de manera segura, serás
perseguido y asesinado de la forma más dolorosa posible
¿Eso se entiende?
El macho tragó saliva y asintió.
—Se entiende.
—Bien. —Miró una vez más a su hembra.

THE MAN OF STARS 71


Era tan hermosa, la criatura más exquisita que existía. Y por
un momento, durante un maravilloso y breve tiempo, había
sido suya.
Las lágrimas brillaron en sus ojos, su hembra lo sabía.
Siempre lo supo.
—Stealth...
No pudo escuchar más. Si lo hiciera, podría ceder y
quedarse.
Su alma gritó una protesta mientras corría, moviéndose a la
velocidad del cyborg a través de la estructura, fuera de las
puertas, a lo largo de los caminos.
Un Ahkian armado lo vio. Los proyectiles pincharon contra
su armadura. Uno cruzó su mejilla desprotegida, dejando un
rastro punzante en su piel.
Apenas lo sintió, su concentración en su misión, en
salvaguardar a su hembra. Su esperanza de vida estaba
perdida. La probabilidad de que saliera del planeta, que
alguna vez viese la cara de Zebrina nuevamente era de
0.9999 por ciento. Se acercaba a cero.
Pero moriría sabiendo que viviría. Tenía una posibilidad de
felicidad futura. Aunque el número exacto era incalculable
debido a la falta de datos, su lado orgánico supuso que era
alto. En algún lugar del universo, estaría sonriendo.
Y tal vez pensando en él. Los cyborgs eran vistos como
seres desechables. No eran recordados. Él lo sería.
Porque lo habían amado.
Se detuvo frente a una pila de escombros y verificó las
coordenadas. La tensión se arrastró sobre sus hombros. La
Alianza Humanoide no había desactivado el dispositivo
porque creían que había sido destruido. La estructura que lo

THE MAN OF STARS 72


había hospedado había sido bombardeada y ahora consistía
en escombros.
Cavó a través de la piedra, arrojando piezas del tamaño de
su forma a un lado. El horizonte estaba teñido de naranja, el
sol salía. No le quedaba mucho tiempo.
El sistema de monitoreo aún está activo. Declaró Lethal
innecesariamente.
Stealth era muy consciente de ese hecho. Si la nave de su
hembra se fuera ahora, sería derribada. Todos a bordo,
incluido el único ser que había amado, morirían.
Las yemas de sus dedos tocaron la pantalla lisa. Lo
encontró. Extrajo el dispositivo con cuidado. La superficie
estaba destrozada. Un humano lo habría encontrado
inutilizable. Sin embargo, era un cyborg. Había suficientes
puntos de contacto del tamaño de la punta de los dedos para
utilizarlo.
Puso sus palmas sobre él, buscó en el laberinto de
programación, encontró el sistema de monitoreo. Una
mancha apareció en la ubicación del hangar.
Agujero de Fraggin. La nave despegaba.
Cortó la programación del sistema, haciendo que pareciera
que fue un cierre programado. El sistema de monitoreo
quedó en blanco. El sistema reiniciado.
Cuando vuelva a estar en línea, la nave de su hembra
debería estar fuera de alcance.
Exhaló con un silbido, hundiéndose contra un trozo de
piedra. Debería estar segura.
Completada su misión, Stealth levantó la mirada y observó
cómo el sol iluminaba el cielo. La explosión de colores le

THE MAN OF STARS 73


recordó a su vibrante hembra, las vívidas prendas que
llevaba, la alegría que le dio.
Era un guerrero afortunado por haberla conocido. Podría
morir agarrando esa verdad en su pecho.

THE MAN OF STARS 74


Capítulo 6

Habían pasado dos ciclos solares y treinta y cinco rotaciones


planetarias desde que había visto la cara hermosa de Stealth
y todavía lo esperaba, todavía esperaba verlo pasear por el
camino de piedra suelta en cualquier momento, sus ojos
grises brillando con amor.
Zebrina se apoyó contra su herramienta de excavación. Esta
podría ser la rotación del planeta. Podría estar volviendo a
ella. Con la esperanza parpadeando en su pecho, miró hacia
arriba.
Y no vio a nadie. Su guerrero no estaba allí. Se quedó sola.
Sus hombros se desplomaron.
La vegetación se balanceaba con la brisa. Los rayos del sol
calentaron la parte superior de su cabeza. Los insectos
zumbaron. El terreno salvaje de Waaban Two era muy
diferente del compuesto en Ahki.
¿Le gustaría a su cyborg el planeta?
¿Lo vería alguna vez?
Odoon creía que Stealth estaba muerto. Las tropas de
refuerzo para la causa de los Ahkians habían llegado en
unas simples rotaciones planetarias después de que Odoon
y su carga ilícita abandonaran el planeta. Los lugareños, que
tenían más guerreros y más potencia de fuego, habían
ganado batalla tras batalla, sin tomar prisioneros, finalmente
saliendo victoriosos. No perdonaron a ninguno, matando a
todos los seres de la Alianza Humanoide, incluidos los
cyborgs.

THE MAN OF STARS 75


Su guerrero podría haber sido la excepción. Se aferró a esa
posibilidad. Podría haber sobrevivido
Hacía treinta y dos rotaciones planetarias, recibieron la
noticia de que los cyborgs se habían revelado en masa,
muchos de ellos alineados con el otro lado, con los Ahkians
y otros Rebeldes. La especie de su guerrero finalmente era
libre.
Los animó cuando escuchó las noticias y luego, en la
intimidad de sus habitaciones, había llorado por sí misma.
No hubo comunicación del macho que amaba.
Aplastó una de sus palmas contra su pecho. No podía estar
muerto. Ella sentiría eso, ¿no es así? ¿En su corazón? ¿En
su alma? Su conexión se había debilitado, pero se mantenía,
vibrando en el aire a su alrededor.
Tenía que estar vivo.
—Mantén tu voto. Maldito seas. —Su fe en él, en ellos,
estaba disminuyendo.
Una pared sólida de músculo se estrelló contra su costado,
derribándola.
—Lo siento, mamá —Vow, su hijo, su amado bebé, le abrazó
la cintura, impidiéndole aterrizar de cara en el suelo. Su
respuesta fue inhumanamente rápida—. Olvidé que eras
pequeña.
—Ya —Lo miró y se le cortó la respiración. Se parecía
mucho a su padre. Su cabello era negro, como el de ella, en
lugar de marrón y no había un número de modelo entintado
en su mejilla. Aparte de eso, los dos machos que más amaba
eran idénticos—. Esta pequeña hembra todavía puede
reprenderte.
—Solo porque te permito que hagas eso, —murmuró.

THE MAN OF STARS 76


—Ten cuidado con los otros seres —Chasqueó la lengua,
habiendo escuchado sobre su última aventura—. No son tan
fuertes como tú.
No dijo nada.
—¿Me estás escuchando, Vow? —No preguntó si la había
escuchado. Su hijo tenía sentidos mejorados, como su
padre, y podía detectar como era abierto un contenedor de
barra de nutrición desde el otro lado de un domicilio.
—Te estoy escuchando —Su rostro se oscureció—. Y
también lo estaba escuchando... como me dijiste que hiciera
—Curvó su labio superior. Su actitud hacia Odoon y los otros
humanoides eran una fuente de conflicto entre ellos—. Me
llamó máquina.
El macho Ahkian debe haber hecho eso. Su hijo, en su
mayoría cyborg, no tenía la capacidad de mentir. Pero solía
omitir detalles pertinentes sobre situaciones y era
extremadamente sensible a ser diferente.
—No deberías haberlo empujado. La violencia no siempre
es la respuesta.
—Me estaba acosando. —Su hijo levantó la barbilla.
Era terco... como ella, como su padre.
—Entonces aléjate de él.
Se miraron el uno al otro por un momento. Los ojos grises
de su hijo estaban tormentosos con emociones
—No lo entiendes —Metió las manos en los bolsillos de su
traje de vuelo y se encorvo—. Nadie lo hace.
Sofocó una sonrisa. Su hijo podría estar completamente
desarrollado físicamente. Los cyborgs maduraban en un
ciclo solar, pero emocionalmente era el equivalente de un

THE MAN OF STARS 77


humano con diecisiete ciclos solares. Todo era injusto. Nadie
lo entendía.
Desafortunadamente, esto último era a menudo cierto. Era
el único cyborg del planeta. Algunos seres, muchos de ellos,
asumieron que era un arma sin emociones, viéndolo como
un dispositivo asesino de corazón frío.
Sabía que no lo era. Sentía tanto, tal vez más que un
humano. Pero su lado máquina la dejó perpleja. A menudo
le faltaban ideas sobre cómo ayudarle a lidiar con eso.
—Escucha las transmisiones de los cyborgs —Le había
sugerido eso en el pasado, pero se negó a hacerlo,
separándose de esa parte de él—. Tú no tienes que
comunicarte con tus hermanos. Solo escúchalos.
—No quiero ser un cyborg —Pateó una piedra. Voló a través
del campo y golpeado contra un contenedor, rompiéndolo—
. Todos los odian.
Muchos de los seres del planeta, especialmente los Ahkians,
odiaban a los tipos como su padre, los culpaban por las
guerras de La Alianza Humanoide, las muertes, el asesinato.
Vow escuchó su charla, cada comentario dirigido a él, y no
sabía cómo protegerlo de ese dolor.
—No todos los odian —Sacudió la cabeza. Sus rizos
pegados a su sudor, mejillas humedecidas—. Amo mucho a
tu padre y es un cyborg.
—Mi padre está muerto —Su hijo frunció el ceño, se parecía
mucho a Stealth. Le dolía el corazón—. Y nos dejó. Eligió su
misión sobre estar con nosotros.
—Tu padre está vivo, no sabíamos de ti cuando nos
separamos y volverá por nosotros, por los dos —Habían
hablado de esto... muchas, muchas veces. Su hijo percibió
la ausencia de Stealth como un abandono.

THE MAN OF STARS 78


—No debería importarme —Vow se alejó de ella,
destruyendo los surcos en los había pasado casi un turno
cavando.
No debería importarle. Su hijo no podía decir que no le
importaba porque eso sería una mentira. Le importaba...
profundamente, su dolor fluía hacia la destrucción, la lucha,
y a veces durante los ciclos de descanso, cuando creía que
era el único que estaba despierto, lo escuchó gritar en la
oscuridad, el sonido retorciéndole el interior.
—Estoy jodiendo esto, Stealth —Habló con su macho
desaparecido mientras trataba de reparar el daño que su hijo
había hecho a las inmersiones en el suelo—. Regresa a mí
pronto. Te necesito.
Le hablaba mientras trabajaba, diciéndole a su guerrero
sobre las tareas que había terminado. La comunicación
unidireccional alivió su dolor.
Si tuviera contacto con otro cyborg, le pediría que se
acercara a su macho. No podía darle esa responsabilidad a
Vow. Aunque parecía adulto, era un niño, su hijo. Pidiéndole
que busque entre las líneas de transmisión a su padre
desaparecido era una carga emocional demasiado grande
para darle a su hijo.
—Necesita conectarse con tu especie, mi macho —Sacó las
semillas de los bolsillos de su traje de vuelo, los dejó caer en
los pequeños agujeros del suelo, separándolas como Odoon
le había mostrado—. El único parecido que tiene de mí, es
su cabello. Al contrario, es todo tú, todo cyborg.
En el fondo, se dio cuenta de lo que debía hacer. Debería
contratar a un piloto para llevarlos a la Patria Cyborg, donde
sea que fuera. Su hijo se encontraría con sus hermanos,
hermanos de Stealth, aprendería sus caminos.
Pero estaba esperando a su macho.

THE MAN OF STARS 79


Y tenía miedo.
Si Vow conocía a otros cyborgs, podría desear estar con
ellos. Permanentemente. Su hijo quería desesperadamente
encajar, en la Patria lo haría. Los otros cyborgs lo
abrazarían, lo guiarían, lo entrenarían.
Su hijo la dejaría. Estaría sola.
—Lo llevaré allí —No podía ser egoísta—. Simplemente
quiero un poco más de tiempo con él —También había
imaginado a su padre mostrándole el planeta,
compartiéndolo con los dos.
Y viéndolo por sí mismo. Stealth nunca había estado en la
Patria. Una vez que fuera libre, regresaría por ella primero...
porque la amaba. Luego ellos viajarían allí.
—Tendrás esa experiencia padre-hijo —Se solidificaría su
vínculo—. Y yo...
—¿Estás hablando con las plantas otra vez? —la voz de
Odoon se originó desde detrás suyo.
Se giró y sonrió al gran Ahkian.
—Son buenas oyentes.
Parpadeó, deteniéndose en su lugar por un momento antes
de reanudar su acercamiento. Al macho no le gustaba
cuando hablaba con su guerrero desaparecido. Sospechaba
que le recordaba sus pérdidas más permanentes.
—¿Vow hizo esto? —Golpeó el contenedor roto con la punta
de su bota.
—Puedo crear uno nuevo. —Le había mostrado cómo
hacerlo. Obtuvieron tanto como pudieron de la tierra a su
alrededor.

THE MAN OF STARS 80


—Necesita disciplina, Zebrina —Odoon sacudió la cabeza—
. Necesita un padre.
—Tiene un padre. —Frunció el ceño—. Y puedo disciplinarlo
yo misma... si eso es necesario.
Su madre la había criado prácticamente sola. El comandante
había estado centrado en su carrera, en sí mismo. Aparte de
unos pocos actos de rebelión, como una relación amorosa
prohibida y el parricidio, había salido bien.
—La disciplina no es necesaria en este caso —Se centró en
la situación de su hijo—. Romper el contenedor fue un
accidente.
No era consciente de su propia fuerza.
—No fue un accidente —Odoon estaba cerca de ella. Se
había puesto la mejor cubierta del pecho, la que dijo que
usaba al encontrarse con seres importantes.
Debe haber un evento Ahkian que ocurrirá en la rotación de
este planeta. Miró ansiosamente hacia la pared al borde del
lote agrícola. Vow y ella no habían recibido una invitación.
Eso era normal. Eran tolerados... apenas... y eso solo se
debía a la aceptación de Odoon. Los Ahkians nunca los
abrazarían.
Era humana. Vow era físicamente un cyborg. Eran vistos
como el enemigo.
—Tu hijo necesita un padre que esté presente —Su amigo
estaba pensando en ese tema de nuevo—. Se está
volviendo salvaje.
No apreciaba sus críticas a su hijo.
—Su padre estará presente —Empujó tierra sobre las
semillas que había plantado—. Cuando vuelva...

THE MAN OF STARS 81


—No regresará —Gritó el macho Ahkian, su rostro se volvió
de un azul más oscuro—. El cyborg está muerto. Tienes que
aceptar eso.
Lo miró y se encontró con su mirada.
—¿Por qué tengo que aceptar eso?
¿Por qué le importaba eso? Su creencia en Stealth no
estaba perjudicando a nadie.
Odoon se pasó los dedos por el cabello hasta los hombros.
—No es saludable para ti o tu hijo. Créeme. He pasado por
eso.
Su irritación se disipó. No podía imaginar por lo que había
pasado... Descubriendo los cuerpos de su hembra e hijos,
fríos y sin vida, en el piso de su domicilio.
—Nuestras situaciones son diferentes —Agarró sus manos
y apretó sus dedos—. Mi compañero todavía está vivo.
—Ningún cyborgs sobrevivió —La sostuvo de las manos, no
permitiéndole alejarse de él—. Han pasado más de dos
ciclos solares ¿Cuánto tiempo esperarás por él? ¿Cuánto
tiempo pondrás en espera tu vida útil por un ser que nunca
volverás a ver?
—Siempre vuelve a mí —Stealth no podía estar muerto.
Echó la cabeza hacia atrás, negándose a dejar caer las
lágrimas—. Siempre.
—No lo hará esta vez —Odoon la atrajo hacia él y la abrazó.
Una parte de ella gritó que estaba mal. No era su macho. No
debería estar tocándola.
Otra parte de ella necesitaba ser abrazada, ansiaba el
consuelo. Descansó su mejilla contra el pecho del Ahkian,
recordando que hacía lo mismo con Stealth

THE MAN OF STARS 82


Solo que el macho que la sostenía no era su guerrero. El
latido del corazón era diferente, un latido único en lugar del
latido triple de un cyborg. Odoon olía a humanoide. Stealth
diría que eso lo hizo fácil de rastrear. Y no había conexión
entre ella y Odoon que no fuera el respeto mutuo y la
amistad.
Dio un paso atrás y se limpió la humedad de las mejillas.
—No conoces a Stealth. Ha hecho lo imposible en el pasado
—Había sobrevivido a situaciones que habría matado a otros
seres—. Lo volverá a hacer.
Odoon suspiró.
—Ahki ha sido considerado seguro para los niños. Estamos
volviendo a casa.
—Eso es emocionante —Estaba feliz por él, triste por sí
misma. Echaría de menos su compañía.
Cambió su peso de un pie al otro.
—Reservé tres lugares para nosotros en el transporte final.
Me gustaría que tú y Vow vinieran conmigo.
Stealth no esperaría que estuviera en Ahki. Ese no era su
plan. Abrió su boca.
—No tienes que decidir ahora —Su amigo levantó una de
sus palmas y detuvo su negativa—. El transporte sale en
treinta y nueve rotaciones planetarias. Tienes tiempo para
pensar... en lo que quieres, en lo que es mejor para tu hijo.
No requería tiempo.
—Odoon...
—Podría ser un nuevo comienzo para todos nosotros —Sus
ojos azules brillaron—. Me gustaría presentarte como mi
hembra, presentar a Vow como mi hijo. Serías aceptada —

THE MAN OF STARS 83


Las gotas de sudor en la frente. Eso era lo mucho que esto
significaba para él—. Te amo, Zebrina. No puedo imaginar
mi vida sin ti. Me haces feliz y espero hacerte feliz.
Ella asintió con la cabeza, girando.
—Has sido un buen amigo para nosotros —Así era cómo lo
había visto, como un amigo y pensó que la veía de la misma
manera—, pero...
—La amistad es la mejor base para el vínculo entre un
macho y una hembra —No le permitía hablar, parecía sentir
su rechazo—. Mi hembra y yo alcanzamos la madurez
juntos. Era mi amiga antes de descubrir nuestro amor. Será
lo mismo para nosotros. Estoy seguro de eso.
—¿Y si no es de la misma manera? —No le quedaba nada
para darle a él ni a ningún otro macho. Stealth lo tenía todo
de ella— ¿Qué pasará si nunca te amo de una manera
romántica, si paso toda mi vida esperando que regrese mi
macho?
—Entonces tenemos nuestra amistad —Odoon se encogió
de hombros—. Es más de lo que nunca esperé tener de
nuevo.
Levantó las cejas.
—¿Estarías satisfecho con una relación no física?
—El amor no es un requisito para una relación física —
Deslizó sus manos por sus brazos. Reprimió el impulso de
alejarse de él—, pero puedo moverme tan lentamente como
necesites moverte. Puedo satisfacer mis impulsos de otras
maneras mientras espero que me desees tanto como yo te
deseo a ti.
La deseaba. Lo miró fijamente, tratando de conciliar la cara
de su amigo con la de sus revelaciones.

THE MAN OF STARS 84


—Nunca supe que sentías eso por mí.
¿Siempre había querido follarla?
Eso la hizo sentir sucia, como si hubiera traicionado a Stealth
al estar con el macho, hablando con él.
—No estabas lista para escuchar cómo me sentía —La
mirada de Odoon pasó por su rostro—. Tampoco estás lista
ahora, pero debes tener todos los datos antes de tomar tu
decisión. Exijo un compromiso si voy a presentarte como mi
hembra.
—Y a Vow como tu hijo —Le recordó. Eran un trato global.
—Y a Vow como mi hijo —Su amigo se inclinó y presionó
sus labios contra su frente—. Piénsalo, Zebrina y dame tu
respuesta antes de que salga el último transporte.
Se giró y se alejó de ella. Lo vio irse. Cuando estaba fuera
de la vista, se pasó los dedos por la frente, sus
pensamientos sobre ese beso, sobre el futuro.
Si se tratara simplemente de ella, de lo que quería, de lo que
necesitaba, se quedaría en Waaban Two, esperaría a
Stealth para siempre si tenía que hacerlo. Era su macho,
siempre sería su único amor. Nadie podría reemplazarlo.
Sin embargo, no estaba sola. Vow se beneficiaría de tener
un padre. Ansiaba la aceptación social que Odoon les estaba
ofreciendo.
Su hijo no había encontrado eso en Waaban Two tampoco.
Los Ahkians en el viaje al planeta habían sido tan hostiles
que Odoon tuvo que aislarla en una cámara para su
protección. Le había recomendado que comprara el
domicilio al borde de su comunidad, había situado su
domicilio entre el de ella y el de los otros. Los de su clase no
les hablarían, no se asociarían con ella.

THE MAN OF STARS 85


El nacimiento de Vow había complicado aún más las cosas.
Aunque no tenían un modelo como su padre, los Ahkians
pronto se dieron cuenta de que era un cyborg. Había
madurado físicamente dentro de un ciclo solar, era más
fuerte, más rápido, más alto que cualquier otro humano.
Cuando la enfrentó, le explicó quién era su padre. No estaba
avergonzada de ese hecho. Stealth era un ser maravilloso.
Lo verían por sí mismos cuando volviera.
Si se quedaran en el planeta.
Pronto se irían y Odoon se iría con ellos. Vow y ella se
quedarían solos, aislado de todos. Hubo charlas de grupos
de asalto Palavians en la zona. No habría nadie para
ayudarlos si hubiera un accidente, se enfermaba o había una
sequía, incendio o algún otro desastre.
Podría estar poniendo en peligro a su hijo al esperar. Y le
estaría negando lo que realmente quería: aceptación.
Odoon era un héroe para todos los de su especie. El macho,
con su ayuda, había salvado la vida útil de muchos niños
Ahkians, transportándolos a Waaban Two mientras la guerra
era librada en su planeta de origen.
Los padres estaban agradecidos y probablemente
aceptarían a cualquiera que reclamara como su familia,
incluso un humano y un cyborg, sus enemigos. Podría darle
a Vow la posición en la comunidad que deseaba.
Su hijo pertenecería, tendría amigos, encajaría. Ese era su
deseo más querido.
Odoon también lo protegería. El Ahkian había arriesgado su
esperanza de vida por completos desconocidos él y Vow
serían familia. Salvaguardaría a su hijo con todos los
recursos que tenía.

THE MAN OF STARS 86


Y sería un buen ejemplo para su hijo. El macho era
honorable, valiente, inteligente, desinteresado.
Pero no era Stealth. Nunca sería igual a su guerrero, no a
sus ojos. A pesar de sus seguridades, su amistad no se
convertiría en amor romántico. Sabía eso en su alma. No
tocaría su corazón.
Su amigo querría tocar otras partes de ella. Se le revolvió el
estómago con ese pensamiento. Si aceptaba el acuerdo,
tendría que permitir que Odoon usara su cuerpo.
¿Podría hacer eso para darle a su hijo la vida que quería,
para salvaguardarlo?
No lo sabía, no quería averiguarlo.
—Por favor, Stealth, vuelve a mí —Miró hacia el cielo azul.
Estaba claro, frustrantemente desprovisto de naves—. Te
necesito desesperadamente.
Su instinto le dijo que estaba a punto de cometer un gran
error.

THE MAN OF STARS 87


Capítulo 7

Habían sido dos ciclos solares, treinta y cinco rotaciones de


planetas y 1.0895th de un cambio desde que había tocado a
su hembra y la necesidad de Stealth amenazó con cerrar sus
procesadores. Ardía por ella, la anhelaba.
Pero necesitaba la autorización del Consejo Cyborg para
abandonar la Patria. Si se fuera sin ella, enviarían guerreros
a buscarlo y ejecutarlo. Aquellos guerreros podrían dañar a
su hembra.
No podía arriesgar su seguridad. Era el ser más preciado del
universo para él. Miró la pequeña parcela verde en el planeta
dominado por las estructuras. Sus hermanos habían muerto
para protegerla, para asegurarse de que eventualmente
estarían juntos.
Sus dedos se doblaron en puños cuando sus pérdidas lo
barrieron. Su pena no había disminuido, era tan fresco y
crudo como lo había sido cuando llegó a la Patria. Había un
circuito en vivo dentro de él, desnudo, vacío y chasqueando
con energía, poniendo en peligro a todos con los que
interactuaba.
Solo su hembra podría ayudarlo a lidiar con sus emociones,
calmarlo, consolarlo. Su toque repararía su daño.
Tenía que ir a verla. Eso era crítico para el sistema.
Se dio cuenta de por qué el Consejo Cyborg restringió el
movimiento guerrero antes de la rebelión masiva. Si la
Alianza Humanoide los descubriera, los humanos
determinarían que los cyborgs tenían libre albedrío y
desmantelarían a cada guerrero bajo su control.

THE MAN OF STARS 88


Sin embargo, a partir de treinta y dos rotaciones planetarias,
todos los cyborgs eran libres. Los humanos sabían su
secreto. No había razón para negar su solicitud de
abandonar el planeta.
Conseguir una audiencia con un miembro del Consejo sería
el siguiente desafío. Los guerreros recién liberados tenían
necesidades urgentes. La solicitud especial de un cyborg era
de baja prioridad para ellos
Sintió a Vengeance y a su compañera humana acercarse por
detrás. Incapaz de ocultar sus emociones, no levantó la
vista, no se dio la vuelta.
—Estamos grabando los nombres de nuestros hermanos
caídos en las paredes de nuestras estructuras —El miembro
del Consejo estaba a su lado—. Los miembros de tu grupo
de lucha se han ganado sus lugares allí.
Vengeance representaba los modelos C. Era uno de los
mejores guerreros del universo.
Boom habría estado orgulloso de reclamarlo como su líder.
Lethal habría parloteado sin parar sobre la Astrid femenina
de Vengeance, la Buoir Berserker, un ser tan raro como
Zebrina.
La tristeza empujó los hombros de Stealth, la presión casi
insoportable.
—Vengeance. Tengo que dejar la Patria. Tenía que ver a su
hembra. Era la única que podría ayudarlo, que podría
sacarlo del abismo.
Vengeance y Astrid se miraron.
—Eres un modelo K —Vengeance declaró esa verdad—. No
estabas diseñado para ser solitario. Permite que se acceda
a tus bases de datos.

THE MAN OF STARS 89


Era la manera cyborg de compartir cada experiencia, cada
pieza de conocimiento. Stealth no podía hacer eso. Lo que
había sucedido en Ahki era demasiado doloroso.
—Pelear también podría ayudar. Hay una batalla simulada
en dos rotaciones planetarias. Utilízalo para expulsar algo
del dolor —Astrid habló por experiencia. Había perdido a su
clan completo durante un ataque de La Alianza Humanoide.
Purgar sus emociones mientras luchaba era una solución
temporal. Requería más.
—Estar solo empeorará las cosas —Añadió esa idea.
—No voy a estar solo —Los miró, deseando que vieran lo
que no podía expresar.
La boca de Vengeance cayó.
—No puede ser. Has estado aquí por casi dos ciclos solares.
La rotación de cada planeta había sido una tortura. Stealth
volvió a mirar al suelo.
—No podría durar más rotaciones del planeta —El modelo
C lo miró fijamente—. Estar lejos de mi hembra casi
cortocircuitó mis circuitos.
El macho podría haber durado si la vida de su hembra
hubiera dependido de ello.
—No se me dio permiso para irme.
—Le preguntaste a Power —La relación entre los dos
miembros del Consejo era tensa—. No tiene una hembra. No
reconocería los signos.
A Stealth le habían dicho que preguntara al Modelo E. No
quería meterse en medio de la enemistad, no dijo nada.
—Tienes autorización para salir de la Patria —Vengeance
finalmente le dio el permiso que necesitaba—. Vuela en mi

THE MAN OF STARS 90


nueva nave —El Modelo C lo sorprendió con esa oferta—.
Llegarás a tu destino más rápido.
—Podría no devolver esa nave —Una vez que encontrase a
su hembra, no se iría de su lado. Tal vez no quiera visitar la
Patria.
—Si tu hembra la explotara, lo exploto —Vengeance miró a
Astrid, sus ojos brillantes—. No será la primera vez que le
pase a una de mis naves —Su mirada volvió a Stealth—.
Dejaré mis líneas de transmisión abiertas por si me
necesitas.
Stealth bajó la cabeza, incapaz de hablar. Olas de alivio lo
recorrieron, deshilachando su control sobre sus emociones.
La espera había terminado. Pronto vería su hembra, la
tocaría, escucharía su risa.
Lo repararía. Sabía que lo haría.
Vengeance miró a Astrid. Ella asintió. Los dos se alejaron sin
otra palabra, dándole a Stealth la privacidad que necesitaba.
Se agachó, colocó una de sus palmas en el parche de
vegetación.
—Tu llegaste a la Patria, Boom, como siempre dijiste que lo
harías —Había enterrado a sus dos amigos en la pequeña
parcela—. Lethal, yo... —Su voz se quebró. Le debía mucho,
no sabía cómo expresarlo.
Su amigo le diría que lo hizo por Zebrina, no por él, que
esperaba que la protegiera, estar con ella, hacerla feliz.
Stealth lo intentaría. Se enderezó. Había pasado tanto
tiempo desde que sintió alegría. No sabía si podría volver a
experimentarla.
—Adiós, mis amigos.

THE MAN OF STARS 91


Miró la parcela verde una vez más y caminó a grandes
zancadas hacia la bahía de atraque de los miembros del
Consejo.
Era hora de volver con la hembra que amaba.

***

El viaje tomó veintiocho rotaciones planetarias. Stealth


aterrizó en las coordenadas que su hembra le había dado,
eligiendo un sitio a poca distancia de los humanoides más
cercanos, de acuerdo con los escaneos de formas de vida.
La vegetación alta debía ocultar su nave.
Salió, confiando en sus otros sentidos y sus exploraciones
para orientarse. El cielo sobre él estaba claro. El aire olía a
flores. Los insectos zumbaron a su alrededor, sus alas
brillantes y coloridas.
El terreno era verde y sereno, el tipo de planeta que
esperaba que su hembra encontraría. Colocó sensores
alrededor de su nave, activando un campo de contención
que pocos seres podrían penetrar. La nave pertenecía a otro
y era el único medio que tenía para salir de Waaban Two.
No se arriesgaría con eso.
Pasó las manos sobre su armadura. Todas sus cuchillas
estaban en sus vainas, sus pistolas en sus fundas.
Corrió hacia los espacios ocupados, cruzando el campo.
La vegetación alta se separó para revelar un camino de
grava. A juzgar por los brotes envainados entre los
fragmentos de roca, rara vez se utilizaba.
Stealth lo siguió, pasando domicilios. Algunos de ellos
estaban desiertos, las puertas abiertas, enredaderas cubrían

THE MAN OF STARS 92


la estructura. Algunos de ellos estaban habitados por
humanoides.
No detectó humanos.
¿Era demasiado tarde? ¿Su hembra se había rendido,
abandonado el planeta?
¿Había llegado ella? Frunció el ceño.
¿Estaba viva Zebrina? ¿O estaba muerta como todos los
que había amado?
Caminaba, los solitarios rayos del sol no podían disipar el
frío en su núcleo. Sus procesadores se tensaron cuando su
esperanza de cualquier tipo de felicidad, de paz, parpadeó.
El camino principal se hizo cada vez más estrecho, las
plantas luchando por el dominio. El polvo cubría sus botas.
Una pequeña criatura cubierta de piel cruzó su ruta, saltando
delante de él.
Continuó obstinadamente, su única misión era encontrar a
su hembra.
Sus escaneos finalmente detectaron una forma de vida
humana, junto con un humanoide y un... cyborg. Su frente
se frunció. Eso no era posible. Nunca había habido alguna
transmisión de Waaban Two.
Realizó sus escaneos nuevamente, recibió los mismos
resultados. Cualquiera de sus hermanos estaba en el
planeta o el mismo Stealth estaba más dañado de lo que
originalmente había procesado.
Todos los guerreros en Waaban Dos, transmitan. Envió esa
comunicación en cada línea abierta.
No hubo respuesta.

THE MAN OF STARS 93


¿Era el guerrero hostil? Sacó sus armas, sus sentidos en
alerta máxima, se deslizó más cerca de las formas de vida.
El aroma más delicioso se burló de sus fosas nasales.
Zebrina. Se endureció, su polla presionando contra su
armadura ¿Era su mal funcionamiento otra vez, fabricando
su fragancia basada en sus recuerdos?
Respiró hondo. El aroma era más fuerte e inconfundible. Su
hembra estaba en el planeta. La alegría chocó contra él. La
había localizado.
—¿Dónde estás, mi macho? —Su voz fluyó por su forma,
iluminando sus procesadores, proporcionando más
confirmación de su presencia.
Mi macho. Repitió sus palabras y su estómago se retorció.
Ese era su rol, como lo llamaba solo a él.
A menos que hubiera sido reemplazado. Los cyborgs eran
genéticamente compatibles con un ser. Los seres humanos
podrían aparearse con múltiples seres.
Su agarre se apretó en sus armas. Nadie tocaría a su
hembra.
Un alto muro de roca, exclusivo de la parcela habitada,
obstaculizaba su vista. Pasó a través de una abertura, el
espacio era lo suficientemente ancho como para una
pequeña nave.
Y se detuvo abruptamente, su gran corazón cyborg latía
violentamente.
La hembra que amaba cuidaba una hilera de plantas
frondosas. Su cabello era más largo, sus rizos negros que
caían en cascada hasta su cintura con su traje de vuelo. Su
piel morena se había oscurecido aún más por el sol. Sus

THE MAN OF STARS 94


curvas eran más exuberantes de lo que recordaba, sus
caderas más anchas, sus senos más grandes.
Una tristeza la envolvió, una sombra cayó sobre su hermoso
rostro.
Esa no debería estar ahí. Jamás.
—Mataré a tu nuevo macho por hacerte infeliz. —Le hizo ese
voto. Su hembra se merecía alegría.
Miró hacia arriba. Sus grandes ojos azules se abrieron. Dejó
caer el contenedor de líquido, se cubrió la boca con las
manos. Su chillido fue amortiguado pero audible.
—No es digno de ti —Stealth se acercó a su hembra.
—No —Extendió una de sus manos como para detenerlo—.
Eres un producto de mi imaginación. Debes serlo. Han
pasado más de dos ciclos solares.
—Han sido dos ciclos solares, sesenta y tres rotaciones
planetarias y tres cuartos de un cambio —Había sentido
cada momento de su partida—. No estás dañada, mi
hembra. Soy real.
Se pellizcó la mejilla derecha e hizo una mueca.
—No estoy soñando.
—No estás soñando —confirmó.
—Estás aquí —Dio un paso vacilante en su dirección,
pisoteando una de las plantas que había estado cuidando—
. Estas vivo.
—Mi sistema emocional está dañado —Confesó ese mal
funcionamiento.
—El mío también lo está —Su risa era temblorosa—.
Volviste a mí.

THE MAN OF STARS 95


—Regresé a ti —Le había costado suerte y todo lo que tenía,
todo lo que tenían sus hermanos.
La tristeza atenuó su alegría al ver a su hembra, una
oscuridad sobre su reunión, fantasmas de sacrificios
realizados.
—Necesito tocarte —Extendió su mano derecha. Sus dedos
temblaron—. No puedo creer que seas real.
Atrapó su muñeca, presionó su palma contra su mejilla. La
rectitud fluyó sobre él, una explosión de energía tan fuerte
que sus rodillas amenazaron con doblarse.
Extendió los dedos como si intentara tocar tanto de él como
fuera posible. Las lágrimas corrían por su mejilla.
—Dijeron que estabas muerto. En mi corazón, sabía que no
lo estabas —Un sollozo estalló de ella, el sonido lo desgarró
en pedazos—. Oh, Stealth, estaba tan preocupada por ti.
—Shhhh... mi hembra —La atrajo hacia él y la abrazó.
Abrazándola fuertemente, tratando de consolarla mientras
lloraba—. Enviar una comunicación podría haberte puesto
en peligro —Se negó a correr riesgos con la esperanza de
vida de su hembra—. Pero sobreviví —Era el único ser en
su grupo de lucha que había hecho eso—, por ti. Tú eres la
razón por la que viví.
Sus hermanos habían sacrificado su esperanza de vida para
que los dos pudieran estar juntos. No se haría a un lado,
incluso si otro macho fuera más digno que él. No podía. Era
toda de él.
Su hembra lloró contra él, mojando su armadura con sus
lágrimas, su exuberante forma temblorosa. Apoyó la barbilla
sobre la parte superior de su cabeza y le acarició los rizos
rebeldes, respirando su dulce aroma, experimentando su
dolor como si fuera el suyo propio.

THE MAN OF STARS 96


La espera la había lastimado como lo había lastimado a él.
—Cometí un error —Debería haber encontrado una manera
de transportar el cuerpo de Boom a la Patria sin ser detenido
ahí—. Yo...
Miró a la derecha. El cyborg desconocido se acercaba a
ellos. Con rapidez.
—Quédate detrás de mí.
Se paró frente a su hembra y puso sus manos sobre los
mangos de sus pistolas.
El cyborg se estrelló contra la vegetación, sin hacer ningún
intento de mantenerse en silencio. No actuó como un
enemigo, pero no transmitió, no se anunció a sí mismo.
¿Estaba dañado?
Stealth respiró hondo. Los nanocibóticos del guerrero eran
detectables. Era un compañero modelo K, olía a...
Él.
Podría haber solo una explicación para eso. Los
procesadores de Stealth giraron.
—¿Mi hembra? —La enfrentó— ¿Creamos...?
—No es tu hembra. —El cyborg se estrelló contra él, el
ataque ocurrió peligrosamente cerca de Zebrina.
Stealth rodó, llevándose al recién llegado con él, alejándolos
a ambos de su frágil hembra humana. El cyborg se parecía
a él, tenía su cara, sus ojos, y nació libre, no tenía número
de modelo en la mejilla.
—Es mi madre —Su descendencia lo golpeó—. Déjala en
paz —Fuerte pero descuidado, sus golpes eran por todas
partes.

THE MAN OF STARS 97


—Creamos descendencia —Stealth esquivó un puño
dirigido a su barbilla. Se quedó mirando al cyborg recién
fabricado con asombro, aturdido. Nunca en sus más salvajes
estimaciones alguna vez hubiera creído que tendría
descendencia, ser padre.
—Creamos descendencia —No parecía contenta con la
situación—. Vow, detén esto ¿Qué te dije sobre pelear?
—Pelear está en nuestra naturaleza —Explicó Stealth. Y su
descendencia, Vow, su hijo, aterrizó muy pocos de sus
golpes—. Los cyborgs fueron fabricados para la batalla.
Y para la cría.
—No quiero ser un cyborg.
Su hijo golpeó sus brazos y piernas. Stealth evitaba
fácilmente el impacto. Su descendencia requería
entrenamiento.
—Eres un cyborg. Nuestros genes son dominantes. Fuimos
diseñados para crear más guerreros.
—No soy un guerrero —Su hijo continuó luchando, sus
acciones desmentían sus palabras. Sus puños golpearon la
tierra alrededor de la cara de Stealth, pulverizando rocas,
aplanando la vegetación.
—Nuestra descendencia es terca como tú, mi hembra.
Sus labios se torcieron, el vértigo barriendo sobre él. Era un
padre. Era una madre. Tuvieron un hijo.
La esperanza en su corazón se expandió hasta casi estallar
fuera de su pecho, su mundo iluminado hasta el punto de
ceguera. El futuro ahora tenía algo más que dolor, tristeza.
Recibió a su hembra y a un hijo.
Era prácticamente más de lo que un cyborg podía procesar.

THE MAN OF STARS 98


—No deberías golpearle —Su hembra colocó sus manos
sobre sus caderas y fulminó con la mirada a su
descendencia.
—Requiere de la práctica —Y le dio a Stealth una razón para
agarrar a su hijo—. Su capacitación ha sido inadecuada.
—Jódete.
Su hijo golpeó el suelo más rápido, sus movimientos más
rápidos para que pudiese seguirlo un sistema visual
humano.
Stealth no era humano. Esquivó los golpes colocados de
manera predecible.
—Vow, ese lenguaje.
Su hembra chasqueó la lengua.
—¿Quién es el otro ser? —Stealth requirió más información.
El humanoide se estaba acercando a ellos ¿Puede ser una
amenaza?
—¿Estamos bajo ataque? —Un gran macho de piel azul
apareció a la vista—. Mierda. Lo estamos.
Odoon, el contacto de Zebrina con Ahki, sacó sus armas,
disparó a Stealth y Vow.
Su puntería carecía de precisión. Los proyectiles mordieron
el suelo, rociando tierra en todos lados.
Stealth arrojó a su hijo a un lado, fuera del alcance de las
armas, y se lanzó hacia adelante.
—No dispares a mi descendencia —Cogió las armas de las
manos de Odoon, las volteó y apuntó las armas hacia el
macho antes que su oponente registrara su proximidad a él.

THE MAN OF STARS 99


—Joder —Odoon y Vow dijeron esa palabra al mismo
tiempo, uno con la irritación afilando su voz, el otro con los
ojos muy abiertos de admiración.
—Ese lenguaje... todos —Zebrina se apresuró a su lado y
puso sus manos sobre los brazos de Stealth, su toque
inmediatamente alivió su irritación—. Baja tus armas,
Stealth. Odoon es...
—¿Es tu macho? —¿Era el Ahkian su rival, el ser que
llamaba su macho?
—Sí.
—No —Su hembra respondió un instante después del
macho—, iba a decir que es un amigo.
—Soy más que eso. —Odoon sobresalió su mandíbula—.
En once rotaciones planeta, estamos volviendo a Ahki. Será
mi compañera. Vow será mi hijo.
—Eso no estará sucediendo —Stealth gruñó. Nadie se
llevaba a su familia.
—No he aceptado eso —Su hembra frunció el ceño al
macho.
—Implicaste...
—¿Decidiste eso sin mí? —Su hijo se había unido a él. Las
ramitas estaban pegadas a su cabeza, su cabello del mismo
tono negro que el de su madre. Su traje de vuelo estaba
sucio y desaliñado— ¿No tengo algo que decir?
—Nada se ha decidido —Gritó su hembra, su gran voz
silenciando a los dos machos.
Stealth la miró fijamente, excitado hasta el punto del dolor.
Zebrina no había perdido nada de su ferocidad durante su
ausencia. Permaneció siendo el ser más fuerte que conocía.

THE MAN OF STARS 100


Lucharía hasta la muerte para reclamarla como su hembra,
para volver a confirmar que valía la pena, para recuperar su
amor. Ella y ahora su hijo, eran sus únicos motivos para
existir. Tendría éxito.
—Odoon, hablaremos en la próxima rotación de planetas —
Se dirigió al Ahkian, su tono implicaba que su paciencia
estaba agotada—. Es mejor que vuelvas a tu domicilio ahora
mismo.
Esa orden reveló su elección. Stealth se relajó. En los ojos
de su hembra, tenía prioridad sobre su rival. Era su macho,
pertenecía con ella y su hijo.
El Ahkian también se dio cuenta de eso.
—¿Me estás diciendo que me vaya? —Odoon levantó sus
cejas—. He estado a tu lado todo este tiempo. Él no ha
estado allí —Sacudió su cabeza en dirección a Stealth—. Mi
especie tomó el control de Ahki hace dos ciclos solares.
Pueden confirmar que no estaba en ese planeta ¿Dónde ha
estado?
Todos lo miraron, incluida su hembra.
Stealth hizo una mueca. Había querido que esta discusión
fuera entre ella y él Era el único ser en el universo en el que
confiaba con sus emociones.
Había temido esa comunicación privada. No le atraía
compartir su dolor con otros, un rival y un hijo que había
conocido hace apenas unos momentos.
Pero a su descendencia si le debía una explicación. Su
ausencia también lo había lastimado.
Stealth se encontró con la mirada de su hembra,
enfocándose en ella y solo en ella.
—Estaba en el Patria —Se obligó a responder.

THE MAN OF STARS 101


THE MAN OF STARS 102
Capítulo 8

—Ya veo —Eso era todo lo que confiaba en sí misma para


decir, la ira al rojo vivo aplastaba la alegría eufórica por
descubrir que el macho que amaba estaba vivo.
Durante más de dos ciclos solares, había criado a su hijo
sola, forjando una nueva vida para ellos en un planeta
subdesarrollado. Se había preocupado por su guerrero,
llorando demasiadas lágrimas por él.
Durante ese tiempo, había estado en la Patria con sus
amigos, a salvo, sin preocuparse por nada, incluida ella.
Como su padre, el comandante, Stealth la había colocado
en un lugar bajo en su lista de prioridades.
Su paciencia con tal tratamiento se había agotado.
—Odoon, te acompañaré al camino principal —Necesitaba
poner espacio entre ella y su macho y tenía que hablar con
los Ahkians. La situación lo involucraba a él también.
—Pero... —Protestó Odoon.
—Ahora. —Se movió hacia la abertura en la pared, su
temperamento fracturado. Por un momento estuvo sola, lo
que le pareció bien.
Entonces el Ahkian la alcanzó.
—La máquina tiene mis armas.
—Stealth es un cyborg, no una máquina —No toleraba los
insultos a su hijo. Odoon era un humanoide adulto—. Le
pediré que te devuelva tus armas en la próxima rotación
planetaria.

THE MAN OF STARS 103


Normalmente eran un adorno para su amigo. Un pacifista,
sólo usaba la violencia cuando era absolutamente
necesario.
No sabía por qué había sentido que era necesario usarlas
contra Stealth. Podría haberle disparado a su hijo.
—No quiero que se quede en tu domicilio —El tono de
Odoon la molestó.
Era su domicilio. Podría tomar esa decisión por su cuenta.
—Los cyborgs no duermen —Stealth no tenía que quedarse
en ningún lado—. Y este es el macho que amo. Si tu hembra
hubiera regresado...
—Mi hembra me amaba. —El Ahkian se detuvo en el hueco
de la pared— ¿Tu macho te ama? Porque me siento así por
ti y ciertamente no habría esperado más de dos ciclos
solares antes de regresar a su lado.
—Podría tener una razón válida para esperar —Su defensa
era débil porque ambos sabían dónde había estado Stealth:
en la Patria, un planeta habitado por sus hermanos, sus
amigos—. Es el padre de Vow.
—Es violento —La cara del macho se oscureció—, y alienta
la violencia en Vow. Peleaban, rodaban por el suelo como
salvajes ¿Es ese el futuro que quieres para tu hijo? —La
agarró por los hombros— ¿Quieres que se convierta en un
arma como su padre, conociendo solo la guerra?
—Vow lo atacó. Stealth se defendía a sí mismo —Y no había
golpeado de vuelta a su hijo. Sus labios se aplanaron. O
disparado contra él.
Mantuvo esas ideas para sí misma porque Odoon tenía
algunos puntos válidos. Stealth creía que la lucha era la
naturaleza cyborg. Podría no desalentar a su hijo de emplear
la violencia para resolver sus problemas.

THE MAN OF STARS 104


No quería perder a Vow ya que había pensado que había
perdido a Stealth. Eso podría matarla.
—Danos un poco de tiempo, Odoon.
Abrió la boca para discutir con ella y luego la volvió a cerrar.
Su mirada se elevó hasta un punto sobre su cabeza.
Miró por encima del hombro. Stealth y Vow los estaban
mirando. Ninguno de ellos parecía feliz.
—No te tomes demasiado tiempo para tomar una decisión
—Odoon volvió su mirada a su cara—. La nave parte en
once rotaciones planetarias —Inclinó la cabeza, un destello
iluminando sus ojos.
Oh joder. Iba a besarla.
Se congeló en su lugar, sin saber qué hacer. Si se alejaba
de Odoon, lo humillaría. El ego de su amigo era tan frágil
como el de cualquier otro macho. Si aceptaba el abrazo,
estaría traicionando a Stealth. Desde el momento en que se
encontraron, sus besos le habían pertenecido.
Los labios de Odoon rozaron los de ella. El contacto fue
breve, ligero e... incorrecto. Había tomado la decisión
equivocada. Tomó toda la fuerza de voluntad que tenía para
no frotarse su rostro con las manos, el impulso intenso por
borrarlo en todas las partes que la había tocado.
Su amigo, sin embargo, parecía satisfecho, su sonrisa
presumida.
—Te veré en la siguiente rotación del planeta —Mirando por
encima de su hombro, asintió y se alejó, con un paso
arrogante.
Se dio la vuelta. Sus dos machos la miraban con el rostro
duro como una piedra.
—¿Lo dejaste besarte? —Vow fue el primero en hablar.

THE MAN OF STARS 105


Stealth miró a su hijo.
—¿Nunca lo ha besado?
—No en los labios —Vow arrugó la nariz—. Aunque lo ha
intentado numerosas veces.
Había pensado que esos intentos anteriores no se habían
notado. Claramente lo habían sido.
Por su hijo.
Para usar una de sus palabras favoritas, Ugh. Eso era
embarazoso.
—Es mi madre —Vow tenía la posesividad de un cyborg,
consideraba que le pertenecía solo a él— ¿Por qué alguien
querría besarla?
Los labios de Stealth se torcieron, su cuerpo se aflojó una
vez más ¿Había desestimado a Odoon como un posible
rival?
No debería.
El Ahkian tenía razón. Había estado allí cuando Stealth no
había estado. Eso le valió la reflexión.
—No sabes todo lo que sucede —Entrecerró los ojos en los
dos machos, su comentario dirigido a su hijo pero implicaba
a su guerrero—. Odoon volverá en la próxima rotación del
planeta. No le dispares ni lo tires al suelo.
Stealth levantó la barbilla. Vow bajó la suya.
Deberían hablar sobre el pasado, el presente, el futuro. Ella
no tenía las reservas emocionales para eso. Aún no.
Necesitaba de un amortiguador.
Miró a su alrededor. Muchas de las plantas habían sido
aplastadas. No sobrevivirían.

THE MAN OF STARS 106


—Parece que estamos comiendo raíces esta noche.
—Ugh —Su hijo hizo una mueca. Ese no era su alimento
favorito.
—Obtén una herramienta de excavación y comienza a
extraerlas —Esa tarea debería quemar algo de su exceso de
energía.
—Odio las raíces —Se alejó pisando fuerte, moviéndose
más lento que el humano más lento.
Se encontró con la mirada de Stealth.
—Tomará el camino más largo posible.
—Entonces tenemos tiempo para esto —Enganchó sus
brazos alrededor de su cintura y la atrajo hacia él.
Sus cuerpos chocaron. Jadeó, el contacto la sacudió. La
abrazó a él y capturó su boca, sellando sus labios contra los
de ella, hundiendo su lengua en su boca.
Debería alejarlo. No había tenido prisa por volver con ella.
No debería darle la bienvenida de nuevo. Eso sería tan
incorrecto como aceptar el beso de Odoon.
Pero joder, se sentía bien. Su cyborg sabía delicioso, como
metal y macho y los recuerdos del amor apasionado que una
vez compartieron. Había pasado tanto tiempo desde la
habían besado así, como si fuera el único ser en el universo,
el centro del mundo de su macho.
Su carne se enroscó alrededor de la de él. Sus nanocibóticos
burbujearon y burbujearon dentro de ella. Su aliento flotaba
sobre sus mejillas. Todos sus sentidos estaban cautivados.
Extraño mucho esto.
Lo había extrañado. Había cambiado. No físicamente. Su
apariencia permaneció igual pero había una tristeza a su
alrededor, un borde duro, cansancio y hastío.

THE MAN OF STARS 107


Si parecía así ahora, tal vez su estancia en la Patria estaba
justificada, argumentó su tonto corazón. Podría haber
estado demasiado herido para estar alrededor de ella, cerca
de su hijo.
—Ugh —Ya estaba creando excusas para su
comportamiento.
Esto no puede pasar. Tenía que mantener el control. Sus
acciones ya no solo la involucraban a sí misma. Tenía un
hijo a considerar. Tenía que hacer lo correcto por él.
Se besarían por un momento más y luego se separaría de
él. Acunó la parte de atrás de su cabeza y le folló la boca.
Sus labios zumbaron. Sus pasiones se intensificaron.
Se inclinó hacia la forma muscular de Stealth, maldiciendo
la barrera de la armadura corporal entre ellos. La prenda
protectora no ocultaba el bulto presionando contra su
estómago, esa prueba de su excitación la excitaba.
Lo quería, sus pezones se tensaron y su coño se humedeció.
Sus dedos se deslizaron hacia arriba, enroscándose
alrededor de su nuca. Su piel estaba cálida contra la de ella.
Su cabello era suave y corto.
Un insecto alado zumbó por su mejilla.
¿Qué estaba haciendo? Volvió a la realidad con un golpe,
tirando de sus labios lejos de los suyos. Había elegido a sus
hermanos sobre ella y se estaba arrojando sobre él.
—No estoy lista para esto —Miró su mentón cuadrado. Si
miraba en sus ojos, se rendiría, capitularía ante sus
deseos—. Puede que nunca esté lista.
—¿No estás lista? —Stealth olfateó el aire.
Su cara se calentó.
—No estoy lista emocionalmente —Aclaró sus palabras.

THE MAN OF STARS 108


Su cyborg sabía que estaba lista físicamente. Podía oler su
excitación.
—Oh, joder —Su hijo también podría olerla—. Dejarme ir —
Se movió, necesitando alejarse de Stealth. Rápido.
La soltó y dejó caer los brazos.
—¿Qué pasa, mi hembra?
Dio un paso atrás, poniendo distancia entre ellos.
—Tenemos un hijo ahora. No podemos hacer esto frente a
él.
No deberían estar haciendo nada en absoluto. No hasta que
ella decidiera sobre el futuro.
—Nuestra descendencia... nuestro hijo es muy ruidoso —
Los labios de Stealth se torcieron—. Su pisada es más
pesada que la de un humano. Lo escucharemos regresar.
Escuchar no era la sensación que le preocupaba. Meneó el
culo, tratando de disipar el aroma.
—¿Por qué no contesta las transmisiones? —Surgieron
profundos surcos en la frente de su guerrero—. Podría
haberlo matado.
No hubiera permitido que eso sucediera.
—Se niega a escucharlas.
—¿Cómo puede ser eso? —Stealth frunció el ceño—. Las
transmisiones no son algo que podamos apagar o encender.
Las recibimos constantemente.
¿Eso significaba que su hijo había estado recibiendo
transmisiones de otros cyborgs todo este tiempo? Estaba tan
perpleja como parecía estar su guerrero.

THE MAN OF STARS 109


—No lo sé —Había muy poca información sobre cyborgs en
las bases de datos Rebeldes y ya no tenían acceso a los
sistemas de la Alianza Humanoide—. Puedo estar
directamente en frente de él y no me escucha. Es un don
que tiene.
Stealth se rio entre dientes. Luego se detuvo abruptamente,
apareciendo desconcertado.
—No he reído... —Inclinó la cabeza como lo hacía cuando
pensaba mucho sobre un problema—, en ciclos solares.
Lo miró boquiabierta ¿Cómo era eso posible? Boom y Lethal
siempre eran divertidos con él.
—¿No te reíste en la Patria? —Su voz era suave.
—No.
Apartó la mirada de ella, pero no antes de que viera el
destello de dolor, la agonía hasta los huesos en sus ojos.
Contuvo el aliento. Habían pasado por tanto en Ahki y nunca
se había visto así, como si hubiera perdido todo.
Su ira por haberse quedado sola se evaporó. Su cyborg
tenía una razón para mantenerse alejado.
—¿Stealth?
¿Qué le había pasado? Sacudió la cabeza y miró a lo lejos.
Su guerrero no podía hablar de eso. Envolvió sus brazos a
su alrededor, presionaron sus curvas contra los músculos de
su cuerpo. Su respiración era irregular, su forma rígida.
Permanecieron así, sin hablar, por muchos momentos.
Siguió su punto de vista. Estaba mirando la pared.
—Nuestro hijo construyó eso —Los recuerdos de la rotación
de ese planeta llenaron su mente—. Estaba de mal humor
—Uno de los muchachos Ahkians lo había llamado máquina

THE MAN OF STARS 110


asesina—. Decidió aislarnos del resto del planeta —Lo había
hecho durante el ciclo de descanso, mientras dormía,
trabajando al paso de un cyborg increíblemente rápido—. En
un principio no tenía una abertura. Tuve que sobornarlo con
una nueva pantalla de visualización privada para agregar
una.
Sus dos machos estaban sufriendo. Y tenía que lidiar con
sus propios problemas, una gran decisión a tomar.
—Hay grupos de asalto en la zona —Los machos Palavians
atacaban a los colonos—. Han atacado domicilios en el
norte. Nunca nos han molestado —Su hijo y ella tenía muy
poco—. Me gusta pensar que el muro los disuadirá si se
acercan —El suyo era el único domicilio rodeado de piedra.
—Estabas en peligro —Stealth deslizó una de sus grandes
palmas por su espalda, su toque curvaba los dedos de sus
pies en sus botas—. Debería haber estado aquí para
protegerte.
—Sobrevivimos —Había deseado desesperadamente que
estuviera con ella—. Estabas con Boom y Lethal.
Él asintió, sus labios se aplanaron en una línea blanca y
sombría.
¿Había luchado con sus amigos? ¿Era esa la fuente de su
dolor? Esa explicación parecía demasiado pequeña para la
agudeza de sus emociones.
—¿Todavía están en la Patria?
Dudó un instante y volvió a agachar la cabeza. Sus músculos
se flexionaron. Él amplió su postura.
Su guerrera estaba a una palabra equivocada de escapar de
la conversación. Acarició su pecho, tratando de calmarlo.

THE MAN OF STARS 111


Si hubiera sido la hembra que conoció, lo habría
bombardeado con preguntas, tratando de comprender la
situación. Su experiencia con Vow tuvo que enseñarle a no
empujar demasiado lejos y demasiado rápido.
Padre e hijo eran muy parecidos.
—Nunca se irán —Dijo Stealth finalmente, con voz ronca.
Eso sonó definitivo. Y no tenía sentido. Su amigo Lethal
había estado obsesionado con encontrar una hembra y,
según su cyborg, había muy pocos cyborgs hembras. Era
poco probable que el modelo E encontrase a su pareja
genética en la Patria.
Abrió la boca, incapaz de permanecer en silencio.
—Nuestro hijo se acerca —Stealth levantó la barbilla, algo
de luz volvió a sus ojos.
Se retiró de su guerrero y se hizo a un lado. Vow había
echado humo por un beso platónico en los labios. No haría
fácil cualquier tipo de relación que eventualmente tuviera con
su padre.
Su macho tenía otras ideas. Extendió la mano y unió sus
dedos con los de ella.
Trató de alejar su mano, no pudo romper su agarre.
—Stealth...
—No voy a ir a ningún lado, no sin vosotros dos —Le apretó
los dedos—. Es importante que lo sepa.
Su hijo se estrelló en el campo, llevaba dos herramientas
para cavar en sus manos. Los miró y frunció el ceño.
—Es mi madre.

THE MAN OF STARS 112


—Era mi hembra antes de que fuera tu madre —Stealth
tendió la mano libre—. Tírame una herramienta de
excavación.
Su hijo lo tiró más fuerte de lo necesario. El metal golpeó
contra la piel mientras el guerrero atrapaba la herramienta.
—¿Los cyborgs saben cómo excavar? —Vow estaba de mal
humor—. Pensé que todo lo que hacían era matar.
Arrojó las palabras con las que otros lo habían atormentado
de vuelta a su padre.
—He cavado miles de trincheras —El tono de Stealth era
plano—. Disminuye la velocidad del enemigo —Hizo girar la
herramienta de excavación en una mano, el metal se volvió
borroso—. Si agregaras una amplia trinchera alrededor de tu
muro fortalecería tus defensas.
—A mamá no le gustó la pared —Vow apuñaló el suelo con
su herramienta de excavación—. A ella realmente no le
gustaría una trinchera.
—No me gustaba la pared en un primer momento —Corrigió
dicha declaración. Había representado el dolor de su hijo
—Estoy de acuerdo con la pared —Stealth debe haber
demostrado su punto. Le soltó la mano—. Es robusta y bien
construida, calidad cyborg.
—Bordea nuestro lote agrícola —Su hijo, por primera vez en
su vida, no dijo que no era un cyborg. En cambio, se puso
un poco más alto—. Si pongo una trinchera a su alrededor,
estaría cavando en los lotes de otros seres —Arrojó tierra
sobre su hombro, sin prestar atención donde aterrizaba—. A
esos seres no les gusto.
—A Odoon le gustas —Señaló. Los otros vecinos lo
toleraban.

THE MAN OF STARS 113


—A Odoon le gustas tú —Vow tiró de la planta de raíz,
sacudió la tierra. Lo arrojó a un lado—. Y odia la pared, se
queja constantemente de ella. Yo...
—Colocaremos la zanja dentro de la propiedad —Stealth
redirigió a su hijo de ese viejo argumento, ganándole su
gratitud—. Si el enemigo salta el muro, caerán en ella. Eso
los retrasará.
Su hijo hizo una pausa, con la frente fruncida.
—Colocaré picos en las trincheras. Eso los detendrá.
—Hablas como un guerrero —Su macho lo elogió.
—¿Son necesarios los picos? —No quería que su hogar se
pareciera a un campo de batalla.
—Te lo dije —Su hijo puso los ojos en blanco—. A ella no le
gusta la trinchera.
La trinchera estaba sucediendo. Dudaba que pudiera
detenerlo y les daría un proyecto para trabajar juntos, podría
acercarlos más.
—No me gustan los picos.
—No serán visibles —Le aseguró Stealth— ¿Cuál es el
mejor material para utilizar para los picos? —Volvió su
atención a su hijo.
Vow entrecerró los ojos hacia él.
—¿Nunca has diseñado picos? Eres un asesino.
—He matado —Su guerrero sobresalió su mandíbula—.
Porque todos los nuestros y yo estamos obligado a poner fin
a la vida.
—No son de mi especie —Su hijo había retomado esa
postura de prueba—. Y no me hagas reír. Odio cuando los
seres hacen eso.

THE MAN OF STARS 114


—Los cyborgs no hacen reír a los seres —La excavación de
Stealth se volvió tan agresiva como la de su hijo. La suciedad
voló por todas partes—. Elegir el material adecuado para los
picos de mejor calidad depende de muchos factores. Me
faltan esas entradas ya que hay muy poca información en
nuestras bases de datos sobre este planeta. Esta vegetación
es desconocida —Levantó una de las plantas de raíz—
Llegue a la conclusión de que la vegetación también me era
desconocida y se suponía que estarías más familiarizado
con los materiales ¿Estoy equivocado?
—¿Realmente quieres mi opinión? —Su hijo continuó
dudando de su intención.
A Zebrina le dolió el corazón que estuviera acostumbrado a
ser burlado y ridiculizado.
—Si te hago una pregunta, quiero tu respuesta —Su
guerrero expresó esa expectativa—. Ese es otro rasgo
cyborg.
Los dos machos se miraron el uno al otro.
Si hubieran sido dos cyborgs diferentes, supondría que
estaban comunicándose a través de líneas de transmisión,
pero uno de los machos era su hijo y se negaba a utilizar esa
parte de él.
Una sonrisa se extendió lentamente por la cara de su hijo.
—He probado diferentes materiales.
Sus dos varones charlaban mientras trabajaban. Zebrina
regó las pocas plantas que no habían pisoteado.
¿Quieres que se convierta en un arma como su padre,
conociendo solo la guerra? Odoon le había preguntado.

THE MAN OF STARS 115


El macho tenía razón. Miró a su guerrero y a su hijo. Si Vow
pasaba tiempo con Stealth, se centraría aún más en la
batalla de lo que ya lo estaba.
¿Deseaba ese futuro para su hijo?

THE MAN OF STARS 116


Capítulo 9

Su hijo podría negarlo hasta que su energía se agotara. Eso


no cambiaría la realidad. Era un cyborg. Completamente. No
hubo alteraciones genéticas.
Los cyborgs requieren interacción con otros cyborgs. Fueron
diseñados para ser seres sociales, para compartir
información y transmitir su historia. Era perjudicial para los
sistemas de Vow negarse a comunicarse.
Stealth agarró la mano de su hembra cuando, más tarde en
el turno, completaron un control perimetral. Su hijo se
tambaleó a su lado, su pisada era tan pesada como la de un
humano.
Habían compartido alimento. Las raíces no habían sido
sabrosas pero no había sido justificada la aversión vocal de
su hijo hacia ellas. Las quejas fueron otro síntoma de su
aislamiento.
—¿Por qué no has transmitido el conocimiento que has
obtenido sobre Waaban Two? —Sus hermanos podrían
beneficiarse de esas ideas.
—¿Por qué no lo has hecho tú? —Su hijo empujo de vuelta
con otra pregunta. Sus hombros encorvados, su mala
postura contribuyendo a que sus movimientos estén por
debajo de lo óptimo.
La honestidad requiere confianza. Stealth miró a su hembra.
Y la confianza requería honestidad.
—El único cyborg con el que deseo comunicarme está
caminando a mi lado.

THE MAN OF STARS 117


—Ugh —Su hijo pateó una roca, creando más ruido— ¿No
tienes amigos?
—No —No vivos. La tensión se apoderó de los hombros de
Stealth.
—Tenía razón —Dijo Vow, a un volumen que solo un cyborg
podía escuchar—. A nadie le gustan los cyborgs.
Stealth apretó los dientes. Basado en los comentarios
similares que su hijo había estado haciendo durante toda la
rotación del planeta, podía deducir quién era el anónimo.
—Tenía amigos, miles de ellos. —La magnitud de su pérdida
casi lo derribó—. Vas a tener amigos entre los nuestros
también.
—No son de mi especie —Esa protesta fue más débil que
las anteriores.
—Tenías amigos —Zebrina lo miró, sus ojos azules
reflejaban especulación— ¿Qué pasó, Stealth?
Sacudió la cabeza, incapaz de responder. El daño emocional
era demasiado para que lo transmitiera.
Apretó los labios. El silencio se alargó.
Su mirada se alzó hacia un árbol que sobresalía de una parte
de la pared.
—Esas ramas deben ser removidas —Aprovechó esa
distracción—. El enemigo podría usarlas para subirse a
nuestro terreno.
—No hay enemigo —Su hembra dejó escapar el aliento—.
No estamos en guerra.
—Mencionaste las incursiones —Esas serían hostiles—.
Son enemigos. Y la libertad es preciosa. Nunca podemos
darla por sentado.

THE MAN OF STARS 118


Sus hermanos habían muerto para mantener a salvo a su
hembra. No les fallaría.
—Te protegeré, mamá —Su hijo levantó la barbilla—. No
tienes que preocuparte por grupos de asalto.
—La has protegido hasta este momento solo —Stealth
reconoció esa hazaña—. Puedo ayudarte ahora.
—Si te quedas aquí, —murmuró Vow.
—Me quedaré contigo —Frunció el ceño, ya que había
expresado esa intención... varias veces.
—Puedo protegerme —Zebrina levantó la barbilla—. Y las
incursiones no nos molestan. Tenemos un muro alto y no
poseemos nada de valor.
Stealth no estuvo de acuerdo con su declaración. Era un ser
de valor. Cualquier macho haría la guerra para obtenerla.
Cualquier cyborg moriría para protegerla.
Volvieron al domicilio. El sol abrazó el horizonte, el cielo una
explosión de color. Su hembra sofocó un bostezo. Requería
dormir. Ellos no lo hacían.
—Vow y yo trabajaremos en las trincheras —Presionó sus
labios contra su frente—. Me reuniré contigo más tarde.
Sus mejillas se pusieron rosadas.
—Te has ido por tanto tiempo y...
—Necesito abrazarte y tenemos que hablar —Detuvo sus
protestas—. Eso es lo único que vamos a hacer.
Le sostuvo la mirada. Se miraron durante varios segundos,
bajó su cabeza.
—Está bien, pero eso es todo

THE MAN OF STARS 119


Entró en el domicilio. La observó hasta que las puertas se
cerraron detrás de ella.
—Podría oírte —El tono del Vow era seco.
—Me di cuenta de eso —Levantó las cejas ¿Qué iba a hacer
su hijo al respecto?
El modelo K recién fabricado sacó la barbilla.
—Si lastimas a mi mamá de nuevo, te mataré.
Stealth frunció el ceño, y otra vez lo molestó.
—No pudiste matarme. No tienes las habilidades. Pero
moriría antes de lastimar a tu madre... otra vez. No quise
lastimarla la primera vez.
—La lastimaste —Su hijo agarró las herramientas de
excavación y le arrojó una—. ¿Qué tan profunda debe ser la
zanja?
—Estoy transmitiendo las especificaciones —las envió—.
Puedes recibir transmisiones. ¿No?
—Jódete —Su hijo caminó hacia la pared.
Stealth se rio y lo siguió.

***

Completaron las trincheras en el turno nocturno, había


forrado el borde en el interior con adornos decorativos de
rocas, con la esperanza de apaciguar a Zebrina. Las ramas
sobresalientes habían sido removidas de los árboles.
Salvaron la madera. Vow planeó fabricar púas y probarlas.
Stealth planeaba unirse a su hembra en sus habitaciones.

THE MAN OF STARS 120


Primero, ambos requerían reposición de energía. Su hijo se
subió al techo y hundió su trasero en la superficie de colores
brillantes. Sus piernas colgaban sobre el borde. Sacó dos
cables de un compartimento en la piedra teñida, entregó uno
a Stealth, metió el otro en la cavidad de su muñeca.
Stealth bajó a su lado, hizo lo mismo. La energía recorrió sus
circuitos, su cuerpo se recargo rápidamente.
Miró hacia el cielo negro. No había nubes como las que
había habido en Ahki, no había multitud de naves como las
que había en la Patria. Su punto de vista era claro. Las
estrellas brillaban, esos soles distantes calentaban otros
planetas, otras formas de vida.
—Ese está más cerca de la Patria —Stealth señaló a la
derecha.
—Tus hermanos cyborg también me odiarán —Su hijo se
cruzó de brazos protectoramente frente a él. Su traje de
vuelo estaba cubierto de tierra—. Sé que lo harán.
¿Era por eso que Vow luchaba contra ser un cyborg?
—La descendencia es rara y valorada —Los otros guerreros
lo adorarían, tratándolo como a su propio hijo.
—No me valorarán —Los labios de Vow se cerraron—. No
soy como tú. No soy un guerrero.
—Cuando nos conocimos, peleaste conmigo, tratando de
proteger a tu madre —Stealth lo señaló a él—. Esa es una
respuesta que un guerrero tendría.
—No gané esa pelea. —Su hijo se miró los pies calzados. El
cuero estaba arañado y rayado.
—No ganaste esa pelea porque te falta entrenamiento —Y
porque su oponente había pasado toda su vida de Fraggin

THE MAN OF STARS 121


en el campo de batalla, luchando. Era un guerrero difícil de
vencer.
—Si realmente fuera un cyborg, la lucha estaría en mi
naturaleza —Vow se hizo eco de lo que le había dicho antes.
Zebrina estaba equivocada. Su hijo escuchaba todo.
Simplemente actuaba como si no lo hiciera.
—Pelear está en nuestra naturaleza. —También lo había
visto en Vow—. La habilidad se aprende. Descargué las
experiencias de cada cyborg que existió antes que yo.
Entonces entrene por un ciclo solar completo, cada rotación
del planeta, cada momento excepto la duración requerida
para recuperar energía.
Su hijo lo miró boquiabierto.
—Incluso con eso, habría muerto en mi primera batalla —
Los labios de Stealth se aplanaron—. Si no hubiera sido por
un gran Modelo C y un Modelo E altamente cualificados,
estaría muerto —Sus amigos le habían salvado la vida...
varias veces.
—Los cyborgs son máquinas de matar —Líneas surcaron la
frente de su hijo.
—No nos dieron más opción que matar —Hizo una pausa—
. Y somos buenos en eso —Le sonrió—. Una vez que
aprendemos cómo hacerlo.
Su hijo frunció el ceño ante sus botas.
—Entrenaste y descargaste información.
—Y peleé batallas —Esa es la clave—. En la Patria, hay
simulacros de batallas para dar experiencia a la
descendencia.

THE MAN OF STARS 122


El silencio se alargó. Stealth se preguntó si su hembra
estaba despierta, si usaba ropa o estaba desnuda, si ella lo
quería tanto como él lo quería.
La energía fluyó hacia él. Pronto, podría verla, hablar con
ella, abrazarla, oler el fresco aroma femenino de su cabello.
Encontraría paz por un momento o dos. La tristeza que se
cernía sobre él se disiparía temporalmente.
—¿Si entreno, descargó información y peleó en las batallas
simuladas, podría ser tan bueno como la otra descendencia?
—Su hijo finalmente rompió el silencio.
Stealth procesó esa pregunta.
—No.
—Oh —Los hombros de su hijo se desplomaron una vez
más.
—Eres mi hijo —Contempló el modelo K recién fabricado con
orgullo—. Serás mejor que la otra descendencia...
eventualmente —Añadió esa entrada—. Al principio,
perderás más batallas de las que ganes. No tendrás a un
gran modelo C y un modelo E altamente cualificados para
salvarte.
—Eran tus amigos —Dijo su hijo.
—Eran los mejores amigos que cualquier cyborg podría
tener —Frag. Les falló a esos dos machos. La tristeza se
arremolinó a su alrededor.
—No tengo a nadie que me entrene —Su hijo no lo miró.
—Ya comencé tu entrenamiento. —Le había enseñado al
guerrero cómo cavar una zanja—. Prueba los picos —Sacó
el cable de la toma de la muñeca—. Podemos fabricar más
y organízalos cuando el sol esté a medio camino en el cielo.

THE MAN OF STARS 123


Eso debería mantener ocupado a su hijo mientras pasaba
tiempo con Zebrina.
Stealth entró en el domicilio, se movió silenciosamente a
través de la estructura. Era pequeña y simple, pero aún
reflejaba los gustos de su hembra. Las paredes estaban
manchadas de rosa vivo. Los paños de cobertura
cuidadosamente doblados tenían bordes con volantes.
Había flores en contenedores, su perfume llenando el aire.
Se metió en sus aposentos. La luz de la luna desde un portal
se inclinaba a través de su hermoso rostro, bañando su
exuberante forma en plata. Se quitó la armadura, sus botas.
—¿Eres tú, mi macho? —Su voz era somnolienta.
Su corazón se apretó ¿Qué macho estaba pidiendo?
—Soy yo.
—Puedes sostenerme. No me importa —Se volvió hacia la
pared, se movió hacia adelante sobre el soporte para dormir,
creando espacio para él— ¿Tienes suficiente espacio?
—Tengo mucho espacio —Se deslizó detrás de ella,
presionando su cuerpo contra el suyo y contuvo un gemido,
el contacto calentándolo en su marco de metal. Su polla
endurecida, presionando contra su trasero. La rodeó con los
brazos y se acarició contra su cabello, esa suavidad
acariciaba su piel.
—¿Cavaste las trincheras? —Susurró sus palabras.
—Nuestro hijo me igualó en la velocidad de excavación —
Respiró su aroma único. Su hembra estaba en sus brazos.
Finalmente.
—Stealth —Colocó sus manos sobre las de él—. No quiero
que sepa de la guerra.

THE MAN OF STARS 124


—No quiero que sepa de la guerra tampoco —No deseaba
que ninguno de sus seres queridos experimentara la
oscuridad, la violencia y el dolor que había soportado—.
Espero que nunca use las habilidades que le enseñaré pero
debería adquirirlas. Es un universo violento y cada ser que
encuentre asumirá que puede luchar.
Suspiró.
—Los Ahkians asumieron que podía pelear. Sabían que era
un cyborg. Era imposible quedarse callado.
—Cualquier exploración avanzada de formas de vida les dirá
a los seres que es un cyborg —No ocultaría la identidad de
su hijo—. Tiene que ser capaz de defenderse... y a su
hembra cuando la encuentre.
—No quiero perderlo en la batalla... como podría haberte
perdido.
—Estuviste cerca de perderme —No quería hablar de eso,
pero merecía una explicación—. Casi no sobreviví a la última
batalla en Ahki.
—Me dijeron que nadie de La Alianza Humanoide sobrevivió
—El dolor en su voz tiró de él. Combinado con el suyo y no
había creído que eso fuera posible, las profundidades de su
dolor sin fin.
—Esa última batalla fue una masacre —Se estremeció al
recordar cómo el enemigo había hackeado a sus
hermanos—. Nos superaron en número de cien a uno. Ni
siquiera Boom... —Su voz se quebró.
—Ni siquiera Boom pudo derrotar a cien oponentes —
Completó la frase por él—. Siempre dijiste que era tu mejor
guerrero.
—Lo era —Su amigo había luchado como un guerrero
poseído durante la rotación de ese planeta, disparando

THE MAN OF STARS 125


hasta que sus armas fueron alcanzadas por proyectiles y
luego usando esas armas como palos, superando a sus
oponentes en masa.
—Era —La voz de su hembra apenas era audible.
—Me di cuenta de que iba a morir —La atrajo hacia él,
necesitando ese contacto, un distracción parcial de su daño
emocional—. Todo lo que pude procesar fuiste tú. Durante
todo el tiempo que estuve luchando, repetí nuestros
momentos juntos, revisando cada palabra, cada toque, cada
aroma. Esperaba que estuvieras a salvo y feliz.
—Estaba a salvo —Confirmó que había tenido razón en
eso—. No podía ser feliz sin ti.
Como no podría ser feliz sin ella.
—Estaba manteniendo el terreno —Apenas—. Los Ahkians
dispararon un misil hacia mí. Boom, ese gran tonto, había
intentado atraparlo y erró. Aterrizó directamente frente a mí
y explotó —El sonido había cerrado temporalmente su
sistema auditivo—. Me arrojaron hacia atrás, aterricé sobre
mi culo. Lethal... Lethal... —No podía empujar las palabras
más allá de sus labios.
—Te protegió —Zebrina adivinó incorrectamente.
—Él Fraggin me asombró —Su risa fue dura, sin humor—.
No me pude mover. Mis orgánicos no pudieron funcionar.
Boom y él, esos asnos, me cubrieron con los cuerpos de
nuestros hermanos.
Le habían dicho que tenía que sobrevivir, tenía que volver
con su hembra, protegerla. Incluso un Modelo K debería
poder hacer eso, había añadido Boom, y los dos guerreros
se habían reído.

THE MAN OF STARS 126


—Los cuerpos te ocultaron. Los Ahkians pensaron que
estabas muerto —Su inteligente hembra concluyó—. Los
tres sobrevivieron.
Sacudió la cabeza, su sistema vocal no funcionaba bien.
Decir las palabras... eso era demasiado. No pudo.
—¿No? —Se dio la vuelta, frente a él—. Sobreviviste.
Encontró su mirada.
—Lo hice. —Eso fue todo lo que pudo decir.
Contuvo el aliento.
—No. —Sacudió la cabeza—. No. No pueden estar muertos.
Dijiste que todavía están en la Patria.
—Boom quería... Quería tocar la superficie de la Patria —Su
voz no sonaba como la suya—. Eso fue todo lo que siempre
quiso.
—Oh, joder —Lo abrazó, sus pechos se aplastaron contra
su pecho—. Lo llevaste a la Patria. Llevaste ambos cuerpos
allí.
Él asintió, su visión se nubló mientras repetía las escenas de
esa última batalla.
Después de que Lethal lo aturdió, sus orgánicos no
funcionaron. No pudo levantar sus brazos o sus pies.
Sin embargo, su parte máquina había estado
completamente operativa. Stealth había visto y escuchado,
incapaz de hacer nada cuando sus hermanos, sus amigos
transmitieron sus últimos momentos.
Vio al enemigo golpear a Lethal, destrozando su cuerpo.
Escuchó el rugido de Boom, lo vio tratando de llegar al
modelo E. No pudo. Habían sido demasiados guerreros

THE MAN OF STARS 127


enemigos. Lo acorralaron, cortando sus brazos, golpeándole
las rodillas.
Entonces no hubo nada, ni transmisiones, solo oscuridad y
silencio en las líneas.
Bajó la cabeza, los temblores sacudían su cuerpo una y otra
vez, cuchillas afiladas de dolor desgarrándolo, cortándolo en
pedazos. Su hembra lo sostuvo, acariciando su cara.
Murmuró repetidamente que lo sentía, su voz y suavidad,
envolviéndolo, juntando las partes de él, manteniéndolo
completo.
Las muertes habían sido duras. Había gritado interiormente
cuando sus amigos murieron. Robar una nave fue fácil. Los
Ahkians habían estado celebrando su victoria. No habían
realizado una exploración de forma de vida, los humanoides
previsiblemente descuidados y erróneamente creían que
todos los cyborgs estaban muertos.
Su primer impulso había sido ir con su hembra. La había
necesitado como jamás necesitó a alguien más. Solo ella
podía encontrar lógica en su mal funcionamiento emocional.
Solo ella podía repararlo.
No podía dejar a Boom y Lethal en el planeta. Merecían algo
mejor que erosionarse en un campo enemigo, sus marcos
expuestos a los elementos, su sacrificio no reconocido. Al
amparo de la oscuridad, reunió sus piezas. Luego transportó
los restos de sus amigos a la Patria.
—Una vez que llegué a la Patria, el Consejo cyborg no me
permitió irme —Había estado rodeado de guerreros pero
estaba completamente solo, incapaz de comunicar su
daño—. Si me hubiera ido, me habrían cazado. Podrían
haberte dañado y...

THE MAN OF STARS 128


Y eso habría destruido los pocos fragmentos restantes de él.
Las acciones de sus amigos habrían sido en vano. Hubiera
fallado al máximo en su misión importante.
—Estaba a salvo —Su hembra roció besos en su rostro, su
ligero toque tranquilizándolo—. Tu hijo estaba a salvo. Has
tomado la decisión correcta.
Sus procesadores transmitieron esa verdad.
—Mi corazón no está de acuerdo. Debería haber encontrado
una manera de volver, a los dos, antes.
—Estás con nosotros ahora —Apoyó su frente contra la de
él—. Nos centraremos en el ahora, en este momento... como
lo hicimos cuando estábamos en el complejo ¿Recuerdas
esos abrazos robados en la estructura de almacenamiento?
—Nunca los olvidaría, mi hembra —Los había reproducido
cuando estaba solo. Habían reforzado su voluntad de vivir—
. Nuestro hijo fue fabricado durante uno de esos encuentros.
—Era tan pequeño cuando nació —Sonrió, su hermoso
rostro brillaba con amor—. Y era callado, mucho más callado
que ahora —Se río suavemente, ese sonido combatiendo la
oscuridad persistente a su alrededor—. Me miró con esos
serios ojos grises, se parecía mucho a ti... —Tristeza
revoloteó por su rostro.
—También se parece a ti —Stealth le frotó la espalda,
saboreando la sensación de ella. Su cuerpo no tenía ángulos
agudos. Todo era curvas y suaves pendientes—. Tiene tu
cabello —Buscó más semejanzas. Su hijo en su mayoría se
parecía a él—. Es muy terco.
—Hey —Golpeó su pecho con las manos, su sonrisa se
ensanchó—. Eso es uno de tus rasgos, no mío.
Se río, feliz, le había dado un regalo que apreciaba.

THE MAN OF STARS 129


—Cuando nos conocimos por primera vez, traté de
disuadirte de caminar sola a la estructura de
almacenamiento —Le preocupaba que fueras abordada por
uno de los oficiales humanos. Ninguno de esos machos eran
de confianza—. No me escuchabas.
—No caminé sola hacia la estructura de almacenamiento —
respondió ella—. Me seguiste... cada vez —Puso los ojos en
blanco—, porque eres terco.
Estaban bien combinados en eso y de cualquier otra
manera.
—Tu seguridad fue y es mi primera prioridad —Presionó sus
labios contra su frente—. Vivo para ti, mi hembra. Solo para
ti.
—Me alegro de que lo hayas hecho, mi macho —Extendió
los dedos sobre sus pectorales, reclamando esa parte de él.
Sonrió, su pecho calentándose por su toque.
—Me alegro también.

THE MAN OF STARS 130


Capítulo 10

Zebrina se despertó en los brazos de Stealth, con la cabeza


metida debajo de la barbilla y la piel desnuda contra la suya.
Por un momento agonizante, pensó que no era real. Cada
descanso durante más de dos ciclos solares, había soñado
con su guerrero, con él sosteniéndola como lo hacía
actualmente y los seres le habían dicho que estaba muerto.
Sin embargo, estaba con ella. Miró hacia arriba. Sus ojos
grises brillaron. Había regresado a ella.
Sus amigos no habían sobrevivido a las batallas. El dolor en
su semblante cuando lo había compartido había apuñalado
su alma. Esa podría haber sido su herida, su dolor, su
sufrimiento. Pudo haber muerto al lado de ellos.
Extendió sus dedos, tocándolo tanto como pudo ¿Porque
esperaba para follar a su guerrero?
Lo quería a él. Sus pezones estaban tensos contra la
implacable pared de su pecho. La deseaba. Su polla dura
empujó contra su estómago.
Su separación podría haberlo alterado. Los había cambiado
a ambos. Pero seguía siendo su macho. Esta no era su
primera vez. Tenían un hijo, por el amor de Dios.
No había razón para aplazarlo.
—Tenemos que ser silenciosos. —Susurró. Sus ojos se
abrieron y su polla se balanceó—. Nuestro hijo está
probando picos cerca del muro norte.
No quería saber cómo los estaba probando.

THE MAN OF STARS 131


—Entonces tenemos que ser rápidos —Alzó la mano,
ahuecó el hermoso rostro de su guerrero entre sus palmas.
Sus labios se separaron.
Los cubrió con los suyos, su respuesta era tan feroz, tan
intensa como su necesidad. Sus lenguas enredadas,
entrelazadas. Los nanocibóticos habían limpiado su aliento,
como habían hecho con el suyo. Sabía a metal.
Lo inhaló, sedienta de sus besos. Se sintió bien. Era su
macho. No había culpa, solo placer, deseo y tranquilidad. Su
aliento calentó sus mejillas. Su corazón latía bajo su palma
derecha.
Gimió, el sonido proveniente de lo más profundo de su pecho
y la hizo rodar sobre su espalda. Se alinearon, su polla
presionando entre sus pliegues húmedos. Sus pestañas
revolotearon, el contacto delicioso.
Se movió sobre ella, follándola sin entrar, burlándose de su
clítoris con su borde; la sensación curvaba los dedos de sus
manos y pies. Se aferró a sus hombros, envolviendo sus
piernas alrededor de sus caderas, enganchando sus pies
sobre sus nalgas.
—Eres tan duro. Y caliente —Marcó su delicada carne con
su eje
—Eres suave —Se extendió a si mismo hacia arriba con un
brazo y ahuecó su pecho izquierdo con su otra mano, su piel
estimulantemente áspera—. Tus senos son más grandes
ahora —La apretó y la soltó, la apretó y la soltó, enviando
oleadas de excitación por su torso.
—Tuve. Un. Niño. —Jadeó, agarrándolo con mayor vigor.
—Alimentaste a nuestra descendencia —Su cyborg bajó la
cabeza y selló sus labios alrededor de su pezón derecho, su

THE MAN OF STARS 132


calor la envolvió. Chupaba como un bebé, tirando de su
pecho, atrayéndola hacia su boca.
Mierda. Eso fue sexy. Curvó sus dedos sobre su cuero
cabelludo, sosteniéndolo.
—No lo hice. Alimentarlo. Mucho tiempo. —Los cyborgs
crecían rápidamente, eran completamente maduros dentro
de un ciclo solar.
Stealth liberó ese pezón con un estallido. Sus nanocibóticos
burbujearon sobre sus curvas, tirando de ella, intensificando
su excitación.
—Puedes alimentarme para siempre —Se aplicó tan
entusiastamente a su seno izquierdo, boqueando sobre su
pezón, lavándolo con su lengua.
Se ondulaba debajo de él, mojando su polla con su coño
jugoso, resbalando el deslizamiento entre sí. Su forma era
tan rígida como su eje, sus músculos flexionados en su
cuerpo, cada parte de él, pulido, definido.
Era un guerrero. Sus manos, una de ellas ahora acariciando
su pecho derecho, había estado cubierta de sangre. Eso
siempre sería parte de él.
Pero también había otros lados de él. Había visto eso en sus
encuentros en la estructura de almacenamiento. Era testigo
de eso ahora. Usó su físico en forma para darle tanto placer
como para infligir dolor a los demás.
Eso la volvía loca. Chocó contra él, con el sudor sobre su
piel.
—¿Stealth?
—Sé paciente, mi hembra —Bajó la mano hacia su
estómago—. Estoy aprendiendo tu nuevo cuerpo —Deslizó

THE MAN OF STARS 133


las yemas de sus dedos sobre ella— ¿Estuviste redondeada
con nuestra descendencia?
Malditos cyborgs y su habilidad para realizar múltiples
tareas. Estaba lista para explotar y quería hablar.
—Enorme —El Sanador Ahkian estaba preocupado. Había
sido tan grande—. Andaba como un pato.
—Los descendientes de cyborg son grandes —Rozó sus
nudillos sobre sus pezones, manteniéndola en un estado
constante de estimulación—. Te habría llevado en brazos.
Por el momento, no le importaba el pasado o lo que hubiera
hecho entonces.
—Fóllame —Podía hacer eso ahora—, por favor —Rogó
descaradamente.
Giró sus caderas, aumentando la presión lentamente,
suavemente. Un poco más y...
Su guerrero se quedó quieto. Contuvo un grito.
Pasó su mano sobre el ancho de sus caderas.
—¿Nuestra descendencia te dañó?
La estaba dañando. Mierda. Necesitaba liberación.
—No fue natural —El Sanador no corrió el riesgo de un parto
natural—. Tus nanocibóticos me curaron.
Había estado allí de esa pequeña manera, cuidándola. No
había estado completamente sola.
—Stealth —Meneó el culo—. He estado vacía. Tanto tiempo
—Sus dedos habían sido una pobre sustitución de su polla.
Nunca podrían satisfacerla por completo, simplemente le
habían quitado las ganas, dejándola frustrada y sola—. Te
necesito dentro de mí.

THE MAN OF STARS 134


—Eres el ser más hermoso que he visto —La miró con un
calor que amenazaba con incinerarla—. No me merezco
esto ni a ti. Yo...
—A la mierda con eso —Había terminado de esperar.
Alcanzando entre ellos, agarró su polla y la colocó en el
agujero de su coño—. Eres mío —Lo condujo por sus
caderas hacia arriba, llenándose de macho caliente.
Un temblor enrolló su cuerpo.
—Dije que tengas paciencia —Empujó hacia abajo. Su culo
golpeándose contra el soporte para dormir. Sus pliegues
femeninos conectados con su base.
Estaba estirada, llena y atrapada debajo de su guerrero
dominante. Un gemido de felicidad escapó de sus labios.
Esto era lo que quería, lo que ansiaba.
Había tomado todas las decisiones por sí misma, por su hijo,
por los ciclos solares. Eso fue agotador y nada sexy. Quería
que tomara el control en sus cámaras privadas.
—Nos estamos volviendo a conocer —Se echó hacia atrás
y empujó hacia abajo, retrocedió y empujo hacia abajo, su
ritmo era vertiginoso y sus huesos se agitaban con fuerza.
Se aferró a sus hombros y luchó con su control. Cuando se
corriera, él también lo haría y no quería que se retirara.
Jamás.
—No he hecho ni la mitad de las cosas que había planeado
—Su guerrero la machacó, sus ojos se oscurecieron al
negro, su pasión salvaje y furiosa, una fuerza de la
naturaleza contra la cual no tenía defensa.
Había planeado lo que le haría. Clavó las uñas en su piel y
él siseó. Debe haber imaginado tocándola, follándola,
tomándola de todas las formas imaginables,
enloqueciéndola de lujuria.

THE MAN OF STARS 135


Había fantaseado con él, chupando a su cyborg, acunando
su polla entre sus senos, montándolo hasta que sus circuitos
humearan. La realidad era mucho mejor. Su coño y culo
zumbaron por su abuso erótico. El sudor goteaba por su
cuello, mojando su cabello.
—Fuimos fabricados el uno para el otro —La posesión en su
tono la excitó—. Ningún otro macho puede criarte así —El
soporte para dormir se estrelló contra la pared una y otra
vez, el sonido resonando en la cámara—. No encajas con
ningún otro macho como encajas conmigo.
Esto era más que una follada. Estaba replanteando su
reclamo, volviendo a confirmar su propiedad de ella. Y no
protestó. Su cuerpo era suyo. Sus nanocibóticos
burbujeaban dentro de ella. La cabeza de su polla
presionada contra sus paredes internas. Sus bolas
abofeteaban contra su piel.
—Sí —Las correas del deseo rodearon su pecho, apretando,
estrujando, exprimiendo—, tuya. Soy tuya.
Su polla se hinchó. Sus ojos brillaron.
—Soy tu macho, tu único macho.
Luchó por respirar, todo dentro de ella se apretó, listo para
romperse.
—¿Stealth? —Necesitaba satisfacción. Ahora. Tenía que
dársela.
—Dilo, mi hembra —La folló duro, equilibrándolos en un
acantilado emocional, sin darle suficiente pero
empujándola—. Di que soy tu único macho.
—Tú eres. Mi macho —Se revolvió, rastrillando su espalda
con las uñas, la tensión demasiada, su necesidad
demasiado grande—. Mi único macho.

THE MAN OF STARS 136


Entendió la confirmación que él quería, que era su único
amante, el único ser que permitió dentro de ella, se entregó
por completo.
—Mi hembra —Se hundió en ella, hasta su base, echó la
cabeza hacia atrás y rugió, el poder en su rostro, en su
forma, aturdiéndola. Fuertes chorros de semen explotaron
en sus paredes interiores.
Gritó, haciéndose añicos, las pequeñas piezas de ella
cayendo en el abismo negro. El placer la devastó, hizo girar
su mundo. Los colores explotaron en su mente. El sonido se
precipitó en sus oídos.
Se apretó alrededor de él, desencadenando otro bombardeo
de esencia. La felicidad la atravesó una y otra vez mientras
el ciclo se repetía. Gritó hasta que estuvo ronca, moviéndose
contra él. La sostuvo en su lugar, encerrándola con su
cuerpo, sus brazos se flexionaron a su lado, sus caderas
reteniendo las de ella.
El éxtasis disminuyó. Su temblor se detuvo. Yacía debajo de
él, flácida y aturdida. Su último polvo había sido fuera de este
universo. Esta follada fue aún mejor. La siguiente cogida
podría matarla.
Estrellas. Zebrina miró a su guerrero. Ya estaba pensando
en la siguiente follada.
Rodó, llevándola con él. Apoyó la barbilla en su pecho y lo
estudió.
El borde duro en sus ojos se había suavizado. El dolor se
había ido temporalmente.
Su encuentro lo había arreglado. No había reparado en los
otros problemas atascados entre ellos. Su cyborg había
elegido luchar con sus hermanos antes que irse con ella.

THE MAN OF STARS 137


Conocería nuevos hermanos, entablaría amistades con
ellos. Era el ser social que era.
No confiaba en que no volvería a tomar esa misma decisión.
Si Vow formaba un apego con su padre y Stealth se fuera,
eso destruiría a su hijo.
Era su hijo. Tenía que pensar en él, en lo que necesitaba.
—Soy tu único macho —Su guerrero le pasó los dedos por
la cara.
—Eres mi único macho —Los últimos dos ciclos solares le
habían demostrado eso.
También le habían demostrado que podía sobrevivir sin un
macho.
No sería feliz. Pero viviría y si esa fuera la mejor opción para
su hijo, lo haría.

***

Cuando salieron de sus habitaciones, el sol brillaba y su hijo


estaba sentado en un soporte horizontal cercano, una barra
nutritiva en su boca y otra barra a su mano derecha.
—Esos son para emergencias y ocasiones especiales —Le
recordó. Los suministros no llegaban muy a menudo en
Waaban Two. Vivían de la tierra tanto como podían.
—La posibilidad de que pronto tenga un hermano es una
ocasión especial —Vow se metió otra barra de alimento en
su boca y la masticó.
Su cara se calentó. Debe haberlos escuchado.

THE MAN OF STARS 138


Miró a Stealth. Sus ojos brillaron. El bastardo parecía
orgulloso, no desconcertado.
Volvió su mirada a su hijo.
—Pensé que estabas probando los picos cerca del muro
norte.
—Soy un... —Hizo una pausa, su rostro se oscureció—. He
mejorado la audición. Te he oído desde allá afuera —Miró a
Stealth—. Dijiste que la abrazarías y eso era todo. Esa es la
única razón por la que te permití entrar allí.
—¿Permitiste? —Su guerrero se incorporó a toda su
altura—. Tu mamá es mi hembra. Los guerreros crían con
sus hembras. Así te fabricamos.
Los dos se miraron el uno al otro. No sabía cómo calmar la
situación. Prometiendo a su hijo que no lo volverían a hacer
estaría mintiendo porque no podía apartar las manos de su
padre.
—Te escuché llorar —Vow lanzó esa observación a Stealth
como si fuera un arma.
Dio en el blanco. El dolor volvió a los ojos de su cyborg. Le
soltó la mano.
—Los guerreros lloran.
Salió por la puerta, sin mirarla, sin decir una palabra más
¿Se iba? Miró a través del portal. Se puso de espaldas a ella,
frente a la pared que su hijo había construido. Sus hombros
bajaron. Vow no había hecho que se fuera lejos.
Todavía.
Miró a su hijo.
—Esa fue una conversación entre tu padre y yo. Hemos
hablado de esto —Había renunciado a su privacidad durante

THE MAN OF STARS 139


mucho tiempo. Eso era parte de ser madre de un cyborg.
Sus invitados no serian tan tolerantes como ella.
Su hijo no la miró a los ojos.
—Sabía que podía escucharlo.
Stealth era un cyborg. Debe haberlo sabido.
—Confió en ti para no juzgarlo, no para ridiculizar su dolor,
su sufrimiento.
La expresión de afligida y el silencio de Vow le dijeron que
no había pensado en eso.
Se paró detrás de su hijo sentado, mucho más alto y lo
abrazó contra su pecho.
—Esto puede parecer que todo está cambiando, pero no lo
está. Sigues siendo mi hijo. Siempre te amaré. Seremos tú y
yo para siempre... te guste o no —Le revolvió el pelo y fingió
irritación, haciendo una mueca mientras su gran cuerpo se
inclinaba hacia ella—. Si hay un ser adicional en nuestra
familia o dos o más o menos, el vínculo entre nosotros dos
seguirá siendo fuerte.
—Podría dejarnos —El miedo afiló la voz de su hijo.
—Podría —Besó la parte superior de su cabeza, sin negar
que eso podría suceder—. Tú también podrías dejarme a mí
—Eventualmente, querría encontrar su propio camino en el
universo. Esa rotación planetaria le arrancaría el corazón—.
Tomar ese riesgo es parte de amar a alguien —Pensó en
eso por un momento—. Cualquiera que no sea yo —Lo besó
de nuevo—. Estás atrapado conmigo hasta el final de los
tiempos.
—Deja de besarme —Se encogió de hombros lejos de ella—
. Soy un guerrero.
Ella abrió su boca.

THE MAN OF STARS 140


—Y no digas que lo besas —Su hijo hizo un ruido de
náuseas—. No quiero escuchar sobre eso —Se quejó—. Ya
he escuchado suficiente.
Escucharía más en el futuro. Vivían en el mismo domicilio.
No podía ocultar completamente la parte física de su relación
con Stealth a su hijo.
—¿Has decidido ser un guerrero ahora? —Se movió a un
lado y lo estudió. Se había negado a ser etiquetado como
guerrero como una mera rotación planetaria—. Hay otros
oficios disponibles para ti.
—Podría ser un licitador agrícola o un fabricante de
dispositivos o un capitán de una nave —Su hijo enumeró
alternativas—. Ugh.
—Ser capitán de una nave parece que podría ser una
aventura —Pensó que estaría interesado en ese papel—.
Podrías viajar a diferentes planetas, ver diferentes lugares.
—Los capitanes se pasan la vida sentados en sillas —Vow
hizo una mueca— ¿Cómo es eso emocionante?
Estaba en lo correcto. Ser el capitán de una nave no era el
papel adecuado para él. Prefería estar activo, en constante
movimiento.
—Podrías construir domicilios para los seres —Sugirió una
forma más física de trabajo—. Sobresaliste en la
construcción de nuestro muro.
—No crees que pueda convertirme en un guerrero, ¿verdad?
—El rostro de su hijo se oscureció, sus ojos cada vez más
tormentosos—. Por eso estás sugiriendo todos esas
alternativas tontas.
Abrió la boca para protestar.

THE MAN OF STARS 141


—Yo tampoco creía que pudiera —No le permitió hablar—.
Él me hizo creer lo contrario —Su hijo inclinó la cabeza hacia
la puerta—. Él me ha convencido, como un tonto, de que si
entrenaba y descargaba información y peleaba en las
batallas simuladas, podría convertirme en un gran guerrero.
Pero no puedo. Fui estúpido en creer que podría.
Miró ceñudo a la pared del fondo. La ira y la decepción
irradiaron de él.
—¿Cuánto tiempo has querido ser un guerrero?
¿Cómo no había sabido cuánto deseaba ese oficio?
—Lo he querido por siempre —Su hijo no la miraba—, pero
sabía que apestaba, que no lo aprobarías y no tenía forma
de mejorar, así que ¿por qué decirle algo a alguien?
—Oh, Vow —Agarró sus dedos hechos un puño,
apretándolos—. Quiero que seas feliz con lo que hagas —
Pensar en él, su hijo, su bebé, corriendo a la batalla la
asustaba muchísimo—. Puedes ser lo que quieras ser.
—No puedo ser lo que quiera ser —Rechazó ese
comentario—. Te lo dije, apesto en la lucha.
—Entonces entrena, descarga información y pelearás en los
simulacros de batallas —Lo que sea que fueran—, y
mejorarás —No podía creer que estuviera apoyándolo en
esto, su hijo convirtiéndose en un guerrero, pero lo estaba.
Porque eso es lo que las mamás hacen, apoyan a sus
hijos—. Puedes hacerlo.
—¿Cómo? Ahora no me entrenará —La mirada de Vow
regresó a la puerta—. Me odia.
—Tu padre no te odia —Cómo alguien podría odiar a su hijo
estaba más allá de su comprensión—. Se da cuenta de que
nadie es perfecto. Todos decimos cosas incorrectas a veces.

THE MAN OF STARS 142


El silencio se estiró.
Observó las emociones revolotear en la cara de Vow, esperó
a que procesara sus pensamientos.
—¿Quieres que me disculpe con él, verdad? —Su hijo
finalmente se levantó, su postura un poco mejor de lo que
normalmente era.
—Tu relación con tu padre es tuya —Intentaría no interferir
en ello... demasiado—. Disculparse es lo que hacen los
machos adultos cuando están equivocados pero esa es tu
elección.
—Odio disculparme —Vow puso los ojos en blanco.
—A nadie le gusta —Sonrió, aliviada de que hubiera tomado
esa decisión— Vas a sobrevivir —Lo empujó hacia las
puertas—, ve.
—Voy, voy —Se apartó de ella—. Mierda.
—Ese lenguaje —Le dijo después de que se fuera.
Las puertas se cerraron detrás de él. Se movió hacia el ojo
de buey, descaradamente mirando a sus machos.
Stealth estudiaba la pared sur, su hermoso rostro de perfil.
Se puso de pie sus botas separadas, sus brazos cruzados
frente a su pecho.
Vow se paró a su lado e imitó su postura.
Su corazón se apretó. Se parecían mucho, sus dos machos.
Ambos tenían un pedazo de su alma.
Los labios de su hijo se movieron. Sus hombros cayeron.
Entonces Stealth dijo algo, una sonrisa curvó sus labios.
Su hijo se echó a reír.

THE MAN OF STARS 143


Y, por un momento, todo estaba bien en el universo de
Zebrina.

THE MAN OF STARS 144


Capítulo 11

Stealth trabajó junto a su hijo, agregando picos a las


trincheras. Mientras afilaban los extremos de las ramas
peladas y unían esas defensas desde el suelo, monitoreó
sus alrededores.
Esa tarea fue duplicada por su guerrero en entrenamiento.
Anteriormente en el turno, Stealth le había mostrado a Vow
cómo escanear el espacio en busca de formas de vida,
enseñándole maneras para complementar esos escaneos
con sus sentidos mejorados. Los aromas y sonidos que a
menudo acompañaban al enemigo. Un gran guerrero usaba
todas las habilidades que tenía para protegerse a sí mismo
y a los seres que amaba.
Su hijo tenía el potencial de ser un gran guerrero... una vez
que estuviera completamente entrenado.
Aunque Vow era más hábil en la lucha que la mayoría de los
humanos, carecía de las habilidades que Stealth se había
ganado en el mismo número de ciclos solares. Sin embargo,
eso podía ser rectificado. El modelo K recién fabricado era
completamente funcional y estaba ansioso por aprender.
Con un par más de ciclos solares de entrenamiento, debería
ponerse al día con sus homólogos.
Stealth planeó estar allí para ese entrenamiento, a pesar de
lo que su hijo y su hembra creían. Eran su prioridad, su única
misión.
Captó la mirada de su hembra. Cuidaba el jardín más
cercano a ellos, su forma curvilínea vestida con un traje de

THE MAN OF STARS 145


vuelo, sus largos rizos negros libres, colgando por su
espalda. Sus labios se alzaron en una sonrisa.
Su pecho se calentó. El ciclo de descanso había reparado
parte de su daño. Al contarle sobre Boom y Lethal,
aceptando su consuelo, su cuidado, su comprensión habían
calmado la agitación dentro de él. Podía procesar los
recuerdos de sus amigos sin forzar sus procesadores.
Criar con ella le había dado una alegría tremenda. Ella había
ganado confianza, fuerza emocional, mientras estaban
separados y eso lo excitaba. Sus circuitos tararearon con
anticipación.
—Rastreo a mamá —Dijo su hijo—, pero eso es fácil de
hacer. Es ruidosa y huele.
—Eso es halagador —Los ojos de Zebrina brillaron con
diversión, su tono sarcástico—. Puedo decir lo mismo de ti.
—No tengo olor —Protestó Vow.
—Tu forma no tiene olor —Arrojó una planta indeseable
hacia él—. Tus prendas están a dos pasos de convertirse en
una nueva forma de vida.
—Ja —Le arrojó la vegetación a su madre.
La planta voló hacia ella.
—Perdiste —Sonrió—. Tienes que trabajar en tus
habilidades de rastreo.
—No estaba tratando de golpearte —Su hijo puso los ojos
en blanco—. Yo...
Un puñado de tierra salpicó su pecho.
—Estaba tratando de golpearte —Se río—, y lo logré ¡Amigo!
—Corrió por el lugar, levantando sus manos hacia el cielo,

THE MAN OF STARS 146


su baile de victoria haciendo reír a Stealth, un acto que
todavía le parecía extraño.
Su hijo agarró dos puñados de tierra. Su mirada se deslizó
hacia Stealth. Suspiró y los liberó
—Soy un guerrero —Olfateó altivamente—. Los guerreros
no tiran tierra a los seres.
Su hijo claramente no había conocido a muchos guerreros.
—Si no respondes a su desafío, tendré que hacerlo —
Stealth cavó sus dedos en el suelo.
—No lo harías —Los ojos de su hembra se abrieron.
—Lo haría y lo haré —Le arrojó la tierra, un puñado
arqueándose a su derecha, un puñado arqueándose a su
izquierda.
Ella corría. La suciedad suelta golpeó su cadera.
—Eh, tú.
La persiguió, bombardeándola suavemente con bombas de
tierra, con cuidado de no causar cualquier daño.
—¡Eh!, esa es mi madre —Vow corrió tras ellos. No fue tan
cuidadoso con su asalto, golpeando la armadura del cuerpo
de Stealth con proyectiles improvisados.
Los labios de Stealth se curvaron hacia arriba. Los dos seres
que cuidaba eran competitivos.
Jugaron hasta que su hembra sucumbió al agotamiento,
rodando por el suelo, su pecho temblaba de alegría. Estaba
de pie por encima de ella, su mirada permaneció en su
hermoso rostro, figura exuberante, mientras atrapaba cada
puñado de tierra que su hijo le arrojaba.
—Mierda. Eres bueno —El modelo K recién fabricado
expresó su admiración.

THE MAN OF STARS 147


—Ese lenguaje —Zebrina chasqueó la lengua.
—Las bolas de tierra desplazan el aire a medida que se
lanzan —Stealth transmitió más conocimiento—. Yo... —Sus
escáneres de forma de vida detectaron una presencia. Un
humanoide había entrado en los confines de su rango—.
Hijo.
—Yo también lo noté —Los ojos de Vow se iluminaron con
entusiasmo—. Hay un humanoide acercándose a la entrada
de la pared —Se frotó las manos en su traje de vuelo,
limpiando sus palmas— ¿Qué hacemos?
—No haces nada. —Zebrina se sentó derecha, su sonrisa
desapareció—. Ese es Odoon viniendo de visita. Lo estaba
esperando.
—No podemos estar seguros de que es la forma de vida que
detectamos —Esto era entrenamiento que su hijo
necesitaba. Stealth apretó los labios. Tampoco le gustaba el
macho, lo veía como un ser hostil—. Muévete lo más
silenciosamente posible, coloca tu cuerpo entre la forma de
vida y tu madre. Es humana, no puede repararse tan rápido
como nosotros.
Lo demostró, enfatizando su postura, la colocación de su pie.
Su hijo lo imitó.
—Saca tus armas —Extrajo sus armas de las fundas.
—No le dispares a Odoon. —Su hembra golpeó el trasero de
Stealth—. Es un amigo.
El macho no era su amigo.
—Dile al ser que estás protegiendo que permanezca quieto
—Stealth se burló de su hembra mientras aconsejaba a su
hijo—. Es más desafiante protegerla si se está moviendo.

THE MAN OF STARS 148


—No soy yo quien necesitará protección —Murmuró eso en
voz baja
Él sonrió.
—Solo tengo una pistola —Su hijo sostenía el arma que
Stealth le había dado a Zebrina la noche que se habían
separado.
—Pero tienes una pistola —Stealth miró por encima del
hombro a su hembra y alzó las cejas ¿No quería que su hijo
supiera la guerra, pero le había dado un arma?
Su cara se puso rosa.
—Pensé que debería tener algo de su padre.
Había querido que fuera parte de la vida de su hijo. El pecho
de Stealth se expandió.
—Toma esta también —Calibró una de sus pistolas de
repuesto para el uso de Vow y se la transfirió a él. Ahora, su
hijo tenía dos objetos que le habían pertenecido—. Desliza
las palancas para aturdir. Solo mata si estás seguro de que
el ser es un enemigo.
No quería que su hijo terminara accidentalmente la
esperanza de vida. Eso emocionalmente lo dañaría.
—Mantén la boca cerrada —Esa era una de sus
vulnerabilidades—. Enfrenta al ser. Nuestros canales
auditivos también son debilidades.
Su hijo asintió, su expresión solemne.
Eso complació a Stealth. Vow debería tomarse la situación
en serio. El ser podría ser un enemigo.
—Estudia tu terreno —Agitó sus armas de izquierda a
derecha, amplificando sus movimientos— ¿Cómo podría el
ser acercarse a ti.

THE MAN OF STARS 149


—Entrará por el hueco en la pared —Su hijo apuntó sus
armas en esa dirección.
—El enemigo asumirá que estás protegiendo esa entrada —
El conocimiento del oponente era crítico en la batalla—.
Querrá sorprenderte.
—Entrará por otro lugar —Vow asintió con la cabeza, el
entendimiento comenzando sobre él.
Ellos discutieron posibles puntos de entrada, las armas que
un enemigo podría usar para atacarlos, tácticas defensivas.
Stealth hizo referencia a las bases de datos cyborgs,
transmitiendo dónde encontrar la información.
Su hijo completó la investigación pero se negó a responder
usando las líneas de transmisión. Su terquedad superaba la
de sus dos padres combinados.
Eso divertía y preocupaba a Stealth. El sistema emocional
de su hijo funcionaría más eficientemente si se comunicaba
con sus hermanos.
El ser finalmente se acercó a la entrada de la pared. La grava
crujió bajo los tacones de las botas. La tela cepillada contra
la tela.
—¿Lo escuchas? —preguntó.
Su hijo asintió con la cabeza.
—También lo huelo.
—Bien —La satisfacción llenó a Stealth—. Apunta a la mitad
de la forma de vida —Levantó sus armas.
Su hijo hizo lo mismo, sus nudillos se blanquearon alrededor
del arma.

THE MAN OF STARS 150


—Espera hasta que tengas un visual —Stealth miró el
espacio. Una cara azul pálido apareció. Su hembra tenía
razón. El ser era Odoon—. Luego presiona el gatillo.
Bajó sus armas. La lección había terminado.
Su hijo no debía saber eso. Presionó el gatillo.
El gran Ahkian se sacudió. Sus ojos se abrieron. El macho
se cayó, aterrizando de un golpe.
Agujero de Fraggin. Stealth se congeló en su lugar. Eso fue
inesperado.
—¿Le disparaste? —Su hembra le golpeó el brazo cuando
pasó junto a él— ¿Qué te dije? —Corrió hacia el Ahkian—.
No disparar —Respondió su propia pregunta.
Derribaste tu objetivo. Le transmitió a su hijo. Como un
verdadero guerrero haría. Estoy orgulloso de ti.
Vow se enderezó.
La situación no era culpa de su hijo. Stealth reconoció ese
hecho. Era suya. No había puesto perímetros alrededor de
sus instrucciones.
—No se mueve —Su hembra miró a Odoon.
—Ha quedado aturdido —Stealth se movió a su lado—. No
sufrirá daño... permanentemente.
—¿Cómo podemos ayudarlo? —Se arrodilló junto al
humanoide— Se ve incómodo —Su hembra apoyó la cabeza
del macho en su regazo.
Ese era su regazo. Stealth frunció el ceño. Ningún otro
macho debería tocarlo.
—Hijo, lleva tu muerto a tu soporte para dormir —No quería
que el macho entrara en las habitaciones de Zebrina.

THE MAN OF STARS 151


—No es un muerto —Los ojos de su hembra brillaron—. Es
mi amigo.
El macho quería ser más que su amigo. Stealth lo había visto
en la manera que el Ahkian la miraba.
Su hijo arrojó su objetivo involuntario sobre su hombro
derecho y se fue hacia el domicilio, la arrogancia en su
andar, cómica.
Zebrina caminó hacia Stealth, la fuerza en su paso sacudió
sus senos.
—Esto no es divertido —Golpeó el pecho de su cuerpo con
sus manos.
Atrapó sus muñecas, deteniéndola antes de que ella se
dañara.
—¿Estoy expresando diversión? —Había mantenido la cara
en blanco durante toda la debacle.
—Lo veo en tus ojos —Su hembra no había sido
engañada—. Planeaba tener una conversación con Odoon
pero no puedo hacer eso ahora, ¿verdad? —Frunció los
labios—. Lo has humillado. Si digo lo que tengo que decir,
me odiará.
Su hembra había decidido hacer pública la relación de
Stealth con ella. Y el aturdimiento accidental había arruinado
ese anuncio.
—¿Es importante para ti que le gustes? —Luchó por
entender su relación con el humanoide.
—Cuando llegué a esa nave, la bienvenida fue... tensa —
Dejó de intentar golpearlo—. Era humana, la hija del macho
que había matado a muchos de los seres queridos de los
Ahkians. Si Odoon no hubiera respondido por mí, dudo que
hubiera sobrevivido al viaje.

THE MAN OF STARS 152


Su hembra había estado rodeada de hostiles. Stealth la
atrajo contra su pecho, sosteniéndola contra él.
—Compré esta parcela de tierra —Miró a su alrededor—.
Odoon tomó el tramo al lado del mío, se aseguró de que
nadie me molestara. Me transmitió el conocimiento de los
locales que me enseñó a vivir del planeta.
El macho podría haberla presentado a esos lugareños.
Sospechaba que el Ahkian quería mantener a Zebrina
dependiente de él.
—Cuando me enteré de Vow, convenció al sanador Ahkian
para que me atendiera —Su hembra se apoyó contra él—.
No quería hacerlo. Tomó toda su influencia para hacerlo
cambiar de opinión —Suspiró—. Le debo la vida de nuestro
hijo, mi vida.
Entonces Stealth le debía todo al macho. Su hembra y su
hijo eran su universo.
—Hablaré con él, haré las paces entre nosotros —
Sacrificaría su orgullo y pediría perdón al Ahkian—. Puedes
hablar con él esta rotación del planeta.
—¿Harías eso? —Lo miró.
—Haría cualquier cosa por ti —Le besó la punta de su nariz
y parpadeó—. Aturdirlo no fue intencional. Entrenar a un
cyborg es un proceso nuevo para mí.
Estudiaría las grabaciones que los hermanos más
experimentados habían fabricado, perfeccionaría su
método. Ese error no volvería a suceder.
Dejó escapar el aliento.
—He cometido errores con nuestro hijo. Muchos de ellos.
Inclinó la cabeza, sintiendo una historia.

THE MAN OF STARS 153


—¿Cómo?
—Como darle tu arma sin cambiar la configuración.
Hizo una mueca. Se la había dado con el arma preparada
para matar ¿Te ha hecho daño?
—Se dañó a sí mismo —Simplemente hablar de eso causó
que el color se desvaneciera de las mejillas de su hembra—
. Lo calibré para su uso, se lo entregué a él e inmediatamente
se pegó un tiro en la pierna. Había tanta sangre.
—Nuestro hijo es como yo —Stealth se río entre dientes—.
También hice eso cuando era un cyborg recién fabricado —
Se había rasgado la pierna. Se había curado antes de que
el entrenador los inspeccionara. Si no lo hubiera hecho,
habría sido dado de baja, sentenciado a esa muerte
dolorosa—. Vow se reparó rápidamente.
—No se reparó lo suficientemente rápido para mí —Presionó
su rostro contra su pecho—. Perdí un ciclo solar de mi vida
útil esa rotación del planeta.
Afortunadamente, su hembra alojó sus nanocibóticos y
tendría casi ciclos solares interminables. Stealth le frotó la
espalda, deseando que pudiera haberla consolado
entonces, estado allí para su hijo.
Estaría allí en el futuro. Eso, podría garantizarlo. Se quedaría
junto a su hembra.

***

El humanoide no recuperó el movimiento en mucho tiempo.


Zebrina se cernía sobre Odoon, frotando un paño de
limpieza contra su frente, enderezando su vestido.

THE MAN OF STARS 154


A Stealth no le gustaba que tocara a otro macho, pero era
responsable de la situación y no podía decir nada sin invocar
su ira.
Cuando los dedos de Odoon finalmente se movieron, les
indicó a ella y a Vow que se fueran. Quería hablar a solas
con el macho.
—Haz las paces —Su hembra le dijo mientras salía de la
cámara.
—Lo haré —Se sentó junto a la pared, dando espacio al otro
macho, y esperó.
La cámara de su hijo estaba abarrotada de objetos
encontrados, rocas, armas dañadas, dispositivos no
funcionales. De esa manera Vow se parecía a su madre.
Stealth estaba acostumbrado a tener solo lo que La Alianza
Humanoide le había dado. Llevaba sus posesiones en su
forma. Había muy poco almacenado en su nave prestada:
suministros médicos, algunas herramientas, suministros
esenciales y eso era todo.
El cuerpo de Odoon se convulsionó. Sus ojos se abrieron.
—Tú —Se arrastró hacia atrás en el soporte para dormir—.
Aléjate de mí, máquina de matar —Intentó agarrar sus
armas.
Stealth, anticipando esa reacción, lo había desarmado.
—No te dañaré —Sostuvo la mirada del macho—. Si
realmente fuera una máquina de matar, como me llamas...
—esas palabras verificaron sus sospechas. El amigo de su
hembra había sido el ser que estaba introduciendo esas
tonterías en los procesadores de su hijo—, ya estarías
muerto.
—Me disparaste —Los ojos de su rival brillaron con furia.

THE MAN OF STARS 155


—Quedaste aturdido —Asumiría toda la responsabilidad por
eso—. No causará daño duradero y no fue intencional.
—Eres una máquina —El macho miró hacia la puerta—.
Todo es fríamente calculado.
Stealth se movió para bloquear la salida.
—Los cyborgs son mitad máquina, mitad humano. Tenemos
un cerebro y un procesador, un corazón que late,
emociones. Cometí un error —Se encogió de hombros—.
Eso fue desafortunado y lo siento —Porque ese error había
dañado a su hembra—, pero sucede.
—¿Por qué estás aquí? —El Ahkian agarró una roca.
Era una mala elección de arma y no tenía la velocidad o la
fuerza para tirar a un cyborg con eso, pero ese intento de
defenderse aún impresionó a Stealth.
—Zebrina es mi hembra. Vow es mi hijo.
—¿Y te preocupas por ellos? —Odoon resopló— ¿Te tomó
dos ciclos solares darte cuenta de eso?
—Me di cuenta de eso desde el primer momento en que los
vi —Stealth entrecerró los ojos ante el macho—. Eres un ser
inteligente. Sabes por qué no pude entrar a esa nave con
Zebrina ¿O pensaste que era una coincidencia que el
sistema de monitoreo de la Alianza Humanoide no
funcionara exactamente al mismo tiempo que la nave partió
de Ahki?
El macho lo miró con la boca abierta.
Agujero de Fraggin. Había pensado eso.
Los labios de Stealth se torcieron. Los humanoides
requieren más potencia de procesamiento.

THE MAN OF STARS 156


—Dos naves de suministro fueron derribadas por la rotación
de ese planeta. Una de esas naves contenía al comandante,
el padre de mi hembra. La Alianza Humanoide planeaba
tomar represalias. Aterrizó su propia flota, dieron la orden de
apuntar a cada nave en el aire. Tuve que desconectar el
sistema o te habrían detectado.
Aparecieron líneas entre las cejas azules de Odoon.
—¿Estás afirmando que te quedaste para salvar nuestras
vidas?
—No me importaba tu esperanza de vida —Fue honesto con
el macho—. Lo hice por mi hembra.
—Salvarla fue una excusa —El Ahkian puso los ojos en
blanco—. Elegiste quedarte con los de tu clase.
El amigo de su hembra era un imbécil.
—Solo un mal funcionamiento haría esa elección —Su
hembra había significado el universo para él. Todo lo que
siempre quiso era estar con ella—. Mis hermanos y yo
habíamos completado los cálculos antes de la rotación de
ese planeta. Procesamos nuestras probabilidades de
supervivencia si nos quedábamos en Ahki. Se acercaba a
cero.
—Sobreviviste —Odoon continuó dudando de sus
intenciones.
—Mis hermanos sacrificaron sus vidas para salvar la mía —
Habría muerto si no hubiese sido por los actos de desinterés
de Lethal y Boom—. No sabía que harían eso —No lo habría
permitido si lo hubiera sabido—. Creía que había cambiado
mi vida útil por la de mi hembra —Su mirada se cruzó con la
del macho—. La cambiaría de nuevo sin dudarlo.
Se miraron el uno al otro. Los segundos pasaron.

THE MAN OF STARS 157


—Tu especie mató a mi pareja y a mi descendencia —
Odoon no estaba listo para renunciar a su odio.
—Eres un macho más fuerte que yo —Stealth reconoció la
fuerza de voluntad de su rival—. La pérdida de mis
hermanos causó más daño emocional del que pude
comprender por mi cuenta —Había requerido los brazos
cariñosos de su hembra para ayudarle hacer frente—. No
podría procesar la pérdida de mi hembra y de mi hijo —Lo
destruiría.
—Joder —El Ahkian lanzó la roca.
El silencio se alargó.
—Zebrina es especial —Odoon le dijo una verdad que ya
sabía—. Me hace feliz. No puedo renunciar a ella.
—Tendrás que renunciar a ella —Stealth le aconsejó—. Es
mía. Siempre ha sido mía.
—Ha sido mía durante los últimos dos ciclos solares —El
macho levantó la barbilla—. No es la misma hembra que una
vez conociste.
Stealth se dio cuenta de eso. Le gustaba la nueva Zebrina
aún más de lo que adoraba a la antigua.
—¿Y mi hijo? ¿Lucharías también por su corazón?
Odoon apartó la mirada de él, esa respuesta le dijo a Stealth
todo lo que necesitaba saber.
—Zebrina ama a su hijo.
—Es un cyborg —Empujó al macho más lejos.
—Parece humano, pasaría por uno —Sobresalió la
mandíbula de Odoon.

THE MAN OF STARS 158


Ese era el plan de Ahkian. Les diría a todos que Vow era
humano, suprimir a la fuerza el lado de su máquina. Su hijo
viviría como medio ser. Ese lo dañaría sin remedio.
—¿Sabe ella que quieres que pase por humano? —La voz
de Stealth era tranquila ¿Zebrina había estado de acuerdo
con el plan del macho?
—Estaría de acuerdo conmigo —Odoon no respondió a su
pregunta—. Los cyborgs son fabricados para matar y morir.
No quiere ese futuro para su hijo.
Stealth tampoco quería ese futuro para su hijo.
—Hay tantas opciones para mi especie como para la tuya.
El Ahkian no dijo nada.
Stealth consideró las palabras del macho. Estaría de
acuerdo con él. Eso significaba que no había estado de
acuerdo. El nudo en la base de su cuello se deshizo. No
estaba al tanto del plan de Odoon.
Es posible que Stealth no lo sepa todo sobre la nueva
Zebrina, pero sabía suficiente. Su hembra no obligaría a su
hijo a ser alguien que no era.
Apostaría su futuro en ello.
—Que gane el mejor macho para Zebrina —Le sonrió a su
oponente.
Ese macho sería él. Tenía que serlo.

THE MAN OF STARS 159


Capítulo 12

—¿Quieres saber lo que dicen? —Vow se sentó junto al


soporte horizontal en la cámara de consumo de alimentos,
uno de sus lugares favoritos en el domicilio. Lo que sea que
Stealth y Odoon estaban discutiendo lo ponía nervioso, su
hijo estaba inquieto en la silla.
—Si quisieran que supiéramos lo que decían, nos habrían
preguntado para unirnos a su conversación —Esparció
especias sobre las raíces trituradas—. Come tu alimento —
Deslizó el gran recipiente hacia él.
—Ugh —Arrugó la nariz. Las raíces no eran el sustento
favorito de su hijo— ¿Cuánto más de esto tengo que comer?
Apuñaló el alimento con su herramienta para comer
—Aplastamos más plantas en esta rotación del planeta —
Tendría que reemplazarlas o no tendrían alimento más
adelante en la temporada—. Entonces la respuesta es
mucho.
Hizo un ruido de náuseas.
—Compórtate —Ahogó su sonrisa—. Somos afortunados.
—Tenemos alimento —Recitó las palabras que ella a
menudo le decía—. Lo sé. Lo sé —Se metió las raíces en la
boca.
Se sentó frente a su hijo. Parecía más maduro de lo que
había sido en la última rotación del planeta y eso la
enorgulleció y la puso un poco triste. Pronto, ella lo perdería.
Desearía irse, emprender aventuras, explorar el universo.

THE MAN OF STARS 160


Y tendría que permitir eso. Suspiró suavemente. Ser madre
era difícil.
Las líneas en su frente se profundizaron cada vez más, su
rostro se oscureció.
—¿Quieres que intente pasar por un humano?
—No —Frunció el ceño— ¿Por qué iba a pensar eso?
Quiero que seas tú mismo. Te amo como eres —Extendió la
mano a través del soporte horizontal y enderezó su pecho
cubriéndoselo—, aunque podrías cambiar tus prendas un
poco más a menudo —Vio una mancha que parecía
sospechosamente a sangre—. Son inmundas.
Sus prendas no habían estado limpias antes de golpearse
mutuamente con tierra. El recuerdo de esa ruptura en sus
tareas aligeraba su estado de ánimo. Los revestimientos del
pecho y bajos ciertamente no estaban ordenados ahora.
—Él solo tiene una prenda —Vow asintió con la cabeza
hacia su cámara ocupada.
—Tu padre lleva armadura corporal —Aquella fue fabricada
a partir de diferentes materiales—, y la limpia cada rotación
del planeta.
Su hijo tomó unos bocados más de alimento, masticando
con su boca ligeramente abierta. No dijo nada. A juzgar por
su rostro, estaba lidiando con problemas más grandes en
este momento.
—Piensa que soy un cyborg —Su hijo frunció el ceño—.
Pero no soy como ellos. No he peleado en batallas —Miró
su contenedor ahora vacío—. No encajo en ningún sitio.
Tenía miedo de ser rechazado. Deseaba poder protegerlo
de esa posibilidad.

THE MAN OF STARS 161


—Siempre serás un poco diferente de los demás —No negó
ese hecho—. Aparte de tu padre, eres el único cyborg que
ha vivido aquí. Solo eso te hará especial.
Su hijo curvó su labio superior.
—Pero eso no significa que no encajarás —Esperaba que lo
hiciera. Su hijo desesperadamente quería encontrar su lugar
en el universo—. Puedes ser diferente y todavía pertenecer.
Espero pertenecer y soy humana.
No dijo nada, su expresión permaneció tempestuosa.
—Tu padre te está entrenando para ser un guerrero.
¿Eso no lo hizo feliz?
—Se dará por vencido conmigo —Vow raspó el recipiente
con su herramienta para comer—. No puedo hacer todo lo
que quiere que haga.
Ah. Debe estar teniendo dificultades con una de las tareas.
Sofoco una sonrisa.
—¿Qué no puedes hacer?
—Quiere que me comunique a través de las líneas de
transmisión —Su hijo limpió el recipiente con el pulgar.
—¿Y no puedes hacer eso? —Su voz era suave ¿No tenía
esa habilidad?
Lamió la raíz triturada de su piel.
—Hice la promesa de que no lo haría.
Tenía la habilidad. Simplemente se cuestionó si debería
usarla.
Una parte egoísta de ella quería decirle que no debería. Si
se comunicaba con su padre a través de las líneas de
transmisión, sería excluida de las conversaciones.

THE MAN OF STARS 162


Zebrina cuadró los hombros. Tenía que hacer lo correcto
para su hijo.
—Hiciste ese voto basado en el conocimiento que tenías en
ese momento. Los seres sabios reevalúan sus posturas
cuando tienen nueva información.
—Fui estúpido entonces —Vow empujó el contenedor lejos
de él.
—No permitas que una decisión equivocada en el pasado te
impida tomar la decisión correcta hoy —Debía seguir su
propio consejo, ver su situación actual con un nuevo punto
de vista—. Tu padre...
—Vienen —Su hijo se enderezó.
Las puertas de su habitación se abrieron. Stealth salió
primero, su rostro en blanco. Se movió a su lado, colocó una
mano posesivamente sobre su hombro.
—Mi hembra.
Esa fue una proclamación de propiedad. Se encontró con la
mirada de Odoon. El macho reconoció eso, sus labios se
aplanaron.
—¿Cómo te sientes? —Le preguntó al macho Ahkian.
—Preocupado —Miró fijamente a Stealth.
Tenían que hablar. Tragó un gemido, temiendo la
conversación.
—Vow, calienta algunas raíces para tu padre —Se puso de
pie—. Da un paseo conmigo, Odoon —Agarró uno de los
brazos del macho—. Te mostraré nuestra nueva trinchera.
Caminó con él hacia la pared norte. Sus dos cyborgs podían
escucharlos. Su hijo lo había demostrado durante el ciclo de
descanso. Pero daba la ilusión de privacidad.

THE MAN OF STARS 163


Su mirada se elevó. Una columna de humo negro se
extendía hacia el cielo azul al horizonte.
—Ese campo agrícola pertenece a un Ahkian, ¿no?
—Están a salvo. Se quedarán en mi domicilio —Odoon se
pasó los dedos a través de su grueso cabello azul—.
Algunos de los otros Ahkians también se quedan conmigo.
Solo quedan unos pocos de nosotros y no podemos
defendernos tan efectivamente como hicimos en el pasado.
Los asaltantes Palavians se dan cuenta de eso y nos están
atacando.
Mierda ¿No había ningún lugar seguro en el universo?
—Tenemos espacio si alguien lo necesitas —Era el único
ser que dormía. La cámara de su hijo rara vez se utilizaba.
—Tienes un cyborg que se queda en tu domicilio —Su amigo
sacudió la cabeza—. Prefieren arriesgarse con las
incursiones que compartir el espacio contigo.
—Eso es tonto. —Estaba decepcionada pero no esperaba
nada más de ellos. Habían dado a conocer sus puntos de
vista—. Y hay dos cyborgs alojados en mi domicilio.
—Tu hijo es mayormente humano —Su amigo se acercó a
ella, su brazo rozando contra el de ella.
¿Quieres que intente pasar por un humano? Vow le había
preguntado. Miró hacía Odoon ¿Había tenido esa extraña
idea de su amigo?
—Físicamente, mi hijo es un cyborg.
—Nadie necesita saber eso —Odoon colocó su mano sobre
su hombro, en el mismo lugar donde había estado la palma
de Stealth.
Soportó su toque, concentrándose en sus palabras.

THE MAN OF STARS 164


—Todos los Ahkians se dieron cuenta de que es un cyborg.
Su hijo se había desarrollado demasiado rápido para ser
humano, madurando en un ciclo solar y ella no había visto
ninguna razón para negar su parentesco. No tenía ningún
problema con los cyborgs
—Cuando volvamos a Ahki, nos instalaremos lejos de esos
seres —Odoon supuso que ella se iría con él—.
Eventualmente se olvidarán de él.
—No lo olvidaré y no le pediré a mi hijo que sea algo que no
es —Se puso rígida—. Lo quiero.
—Entonces haz lo que sea mejor para él —Su amigo la giró
para mirarlo directamente—. Los cyborgs pelean y luego
mueren. Fueron diseñados para eso, ¿es ese el futuro que
quieres para tu hijo?
Por supuesto, no deseaba ese futuro para Vow. No lo
deseaba para Stealth tampoco.
—Quiero que mi hijo sea feliz, que sea él mismo —Nunca le
pediría que cambiara por ella o por cualquier otro ser—. Es
un cyborg. Eso es quien es. Los seres a su alrededor, a mi
alrededor, tienen que aceptar eso.
—No voy a aceptar nada —Odoon murmuró eso por lo bajo.
No respondió a su respuesta. Había otros asuntos para
discutir.
—He considerado tu oferta y me conmovió —Su tono era
brusco pero no pudo ablandarlo. Estaba demasiado molesta
por lo que había planeado hacerle a su hijo—. Eso significa
mucho para mí. Pero he decidido si Vow y yo volvemos a
Ahki contigo, nosotros te acompañaremos como amigos,
nada más.
La cara de Odoon se sonrojó de azul oscuro.

THE MAN OF STARS 165


—Estás eligiendo a la máquina —Sus ojos brillaba con
furia—. Esto es su culpa —Sus dedos se doblaron en puños.
Dio un paso atrás, el miedo la atravesó. Su amigo, el
supuesto pacifista, parecía que quería golpearla.
—¿Odoon? —Miró fijamente sus manos. Las miró también
y su expresión se convirtió en pena.
—No. Lo siento. No quise decir... —Aplanó los dedos una
vez más—. Nunca te golpearía o a cualquier otro ser. Eso
no es lo que soy.
Este no es quien ella creía que era tampoco.
—Disparaste a Stealth y Vow mientras estaban peleando.
—Son ma... —Dejó de hablar.
—Son cyborgs, no máquinas —Sabía lo que iba a decir—.
Creo que deberías irte —Ambos habían dicho lo suficiente.
—Estás cometiendo un error —Odoon respiró
profundamente, como si estuviera tratando de calmarse—.
Te dejará de nuevo.
—Podría hacer eso —Admitió que era una posibilidad—,
pero mi decisión no tuvo nada que ver con él —Preferiría
estar sola que estar con el Ahkian románticamente—. Esto
se trata de ti y de mí. No puedo amarte como te mereces.
No sabía si incluso le gustaba. Odoon había dejado claro sus
sentimientos sobre los cyborgs. No podía ser amiga de
alguien que no creía que su hijo era un ser.
El Ahkian la fulminó con la mirada. Encontró su mirada de
frente, manteniéndose firme.
—Te arrepentirás de esto —Le advirtió.
—Podría —Dudaba que lo hiciera—. Esa es mi carga.

THE MAN OF STARS 166


—Si cambias de opinión, sabes dónde estoy —Odoon se
alejó pisando fuerte—. Sin embargo, no esperes que te lleve
de vuelta. Podría haber seguido adelante.
Lo miró hasta que desapareció.
Luego se dejó caer de rodillas. Si Stealth la dejara ahora,
como todos creían que lo haría, su hijo y ella estarían
realmente solos. Su único amigo en el planeta se había
alejado de ella.
Su mirada volvió a la columna de humo ¿Podría proteger a
su hijo por sí misma?
—No te voy a dejar.
Se sobresaltó, el comentario de Stealth la sorprendió.
Perdida en sus reflexiones, no había escuchado su
acercamiento.
—Me lo dijiste en Ahki —Y luego la dejó.
—Lo creí en ese momento —Se sentó a su lado y la puso en
su regazo—. Tienes razón. Podría dejarte de nuevo —Esa
admisión le apretó el corazón—, pero solo haría eso si fuera
necesario para salvarte.
—Permíteme determinar si necesito ser salvada o no —Se
inclinó contra él, incapaz de resistir su calor, su toque—.
Respétame para tomar esa decisión por mí misma.
Era una hembra adulta, una madre. Era capaz de tomar
decisiones prudentes.
—Si hay tiempo suficiente para consultar contigo, puedes
tomar esa decisión —Presionó su mejilla contra la de ella—
. Siempre te protegeré. Eres mi universo.
¿Solo la quería a ella también?
—¿Y nuestro hijo? ¿Qué es para ti?

THE MAN OF STARS 167


—Es mi universo.
Stealth no dudó en responderle. Arrugó la nariz.
—¿Cómo podemos ambos ser tu universo?
—Desafía la lógica, ¿no? —Su cyborg se río entre dientes,
ese sonido profundo acariciando su columna vertebral,
enroscándose en la boca de su estómago—. Sin embargo,
es la verdad. Eras y eres todo para mí. Llenaste todo el
espacio conocido en mi interior, ocupando todos mis
sentidos. Entonces conocí a nuestro hijo y esa capacidad se
duplicó. Hay un nuevo lugar dentro de mí, vasto, diferente,
inexplicable.
Así se sentía ella. Su hijo había expandido su mundo.
—¿Dónde está? —Miró hacia atrás. Su gran macho bloqueó
su vista.
—Está desenterrando las plantas de raíz dañadas y
haciendo ruidos de náuseas —Stealth sonrió, sus ojos grises
brillaban con humor—. No cree que mis palabras sean
dignas de un guerrero.
Ella sonrió.
—Me gustan tus palabras —Le susurraron al alma.
Se sentaron en silencio, el cuerpo de su cyborg envuelto
alrededor del de ella. Su forma estaba relajada, su nivel de
respiración. Su rostro era de piel suave estirada sobre
implacable metal.
No se podía negar quién era, su identidad le daba más peso
a sus palabras. No la dejaría a menos que fuera necesario
mantenerla a salvo. Esa era la verdad.
Estaban en un santuario temporal. Los rayos del sol brillaban
sobre ellos y la vegetación se mecía con la brisa.

THE MAN OF STARS 168


Sin embargo, el peligro, la muerte y la violencia estaban
cerca de ellos. El olor a humo llenó el aire, la incursión
Palavian a una distancia sorprendente de su parcela
agrícola.
¿Deberían irse o deberían quedarse en Waaban Two?
—Cuando imaginas el futuro, ¿qué ves? —preguntó ella.
¿Cuál era el plan de su cyborg para ellos?
—Te veo a ti y a mi hijo —Stealth la acercó a ella—. Donde
estén, estaré.
No confiaba en esa respuesta. Lo creía. Los cyborgs no
podían mentir. Pero podría no haberlo pensado bien.
—¿No quieres volver a la Patria?
—Tengo todo lo que necesito aquí —Se encogió de
hombros.
Eso no fue un no.
—No podemos volver a Ahki.
Su padre fue vilipendiado por los lugareños y Odoon ya no
los protegería. Ese odio sería transferido a ella. Su macho y
su hijo también serían vistos como el enemigo
Stealth asintió, su mejilla deslizándose sobre la de ella.
—Ahki no sería... idóneo —El dolor afilaba su voz.
Había sido el sitio de las horribles muertes de sus amigos.
Zebrina le cubrió las manos con las suyas. Era un idiota
insensible por considerar el planeta como un posible hogar.
—Quedarse aquí es peligroso—Miró el humo. Se arrastraba
por el cielo un presentimiento de los eventos por venir.
—¿Qué tan grandes son las incursiones? —Su guerrera
siguió su mirada.

THE MAN OF STARS 169


—Se han detectado hasta veinte Palavians durante cada
ataque —Los informes variaron—. Tienen cuatro brazos,
pueden disparar múltiples armas al mismo tiempo —Los
humanoides eran conocidos por su salvajismo—, y solo hay
tres de nosotros.
—Son dos más de lo necesario para defendernos —Stealth
deslizó sus manos sobre sus armas, como si se asegurara
de que estuvieran allí—. Podemos quedarnos aquí si ese es
tu deseo. Puedo vencer a veinte Palavians.
—¿Pelearemos en las incursiones? —Su hijo se había unido
a ellos, sus ojos brillando de emoción, su traje de vuelo se
ensució más allá de salvarlo.
—No —No quería que peleara con nadie—, no nos han
atacado.
—Han atacado a otros agricultores. El afán de su hijo por
enfrentarse con el enemigo la preocupaba. Se veía a sí
mismo como un guerrero, podría asumir una causa que no
era la de ellos.
—Mantente alejado de esos lotes agrícolas —Movió su dedo
hacia él—. Los Ahkians son tan propensos a dispararte
como a disparar a los asaltantes de la incursión.
Vow abrió la boca.
—Tu madre tiene razón —Stealth defendió su decisión—.
Esa no es nuestra lucha.
—Joder —murmuró su hijo.
—Ese lenguaje —Su guerrero y ella dijeron eso al unísono.
—Pero deberíamos acelerar tu entrenamiento —Stealth
saltó sobre sus botas, llevándola con él—. Porque nos
atacarán y tenemos que prepararte para ello.

THE MAN OF STARS 170


—Conseguiré mis armas —Su hijo se alejó corriendo de
ellos, su emoción palpable.
—Stealth —Su estómago se retorció, la idea de perder a su
único hijo la enfermaba.
—No permitiré que sufra daños permanentes, mi hembra. —
La bajó hasta que sus botas tocaron el suelo, su forma
rozando la de él—. El entrenamiento hará que esa tarea sea
más fácil. Aprenderá a protegerse y será... más predecible
en la batalla.
—Es impulsivo —Admitió ese rasgo suyo.
—Redirigiré esa energía —Su guerrero rozó sus labios sobre
los de ella, el contacto consolándola.
Se aferró a sus hombros y persiguió su beso. Se rio entre
dientes, su alegría vibrando en su carne. Empujó su lengua
dentro de su boca, pasando a la ofensiva, reclamando ese
terreno como propio.
Sabía a especias y posibilidades. Lo chupó. La levantó más
alto en su contra. Sus pies con botas colgaban en el aire, el
poder de su cuerpo excitándola.
Había perdido a un amigo en la rotación de este planeta. Su
relación con Odoon nunca sería lo mismo.
Pero se había comprometido con Stealth, había despejado
un espacio dentro de ella para su cyborg Podría romperle el
corazón por segunda vez.
Correría ese riesgo. Estar con su cyborg era bueno, tenía
razón. Con él, era más sexy, más segura de sí misma, de lo
que quería.
Durante los ciclos solares separados, simplemente había
existido. Ahora estaba vibrantemente viva, atrayendo todos
sus sentidos.

THE MAN OF STARS 171


—Mi hembra —Se apartó de ella.
Necesitando más, necesitándolo, agarró su rostro,
sosteniéndolo en su lugar. Podría haber resistido. Era más
grande, más fuerte. Pero cedió, sus labios se curvaron en
una sonrisa.
Abalanzándose en su boca, sumergiéndose en él una y otra
vez, desvergonzada de pasión. Esto era lo que ansiaba, lo
que ella...
—Vamos a entrenar —El asco envolvió las palabras de su
hijo—. No hay que besarse durante el entrenamiento.
Oh, joder. Enterró su cara en el hombro de Stealth. Su hijo
debe haberse movido a la velocidad del cyborg.
—Lo sentiste regresar, ¿no? —murmuró ella. Por eso había
tratado de romper su abrazo.
Y ella, decidida a satisfacer sus deseos, no le había
permitido retirarse. Lo atacó.
—Nuestro hijo es muy ruidoso. Su guerrero se río entre
dientes, encontrando el humor en la vergonzosa situación.
—Escuché eso —Vow pisoteó a su alrededor.
—Quería que escucharas eso —Stealth acarició su cabello,
sin soltarla—. Vuelve al domicilio y acércate a nosotros en
silencio.
—Vas a besarla de nuevo, ¿verdad? —La voz de su hijo se
desvaneció.
—Sí —Su macho ahuecó su barbilla, levantando su mirada.
Ella se retorció, la mortificación mezclada con anticipación.
—Ugh —Esa respuesta fue apenas audible—. Es mi madre.
Stealth se río y cubrió sus labios con los de él.

THE MAN OF STARS 172


THE MAN OF STARS 173
Capítulo 13

Cuatro rotaciones planetarias más tarde, Stealth continuó


expandiendo las habilidades de lucha de su hijo. El ciclo de
descanso anterior, el modelo K recién fabricado había
dominado arrojar dagas a objetivos estáticos. El desafío al
que se enfrentaba este ciclo de descanso eran objetivos en
movimiento.
—A mamá no le va a gustar esto —Su hijo hizo
malabarismos con sus armas entre sus manos, su
nerviosismo palpable.
Stealth estuvo de acuerdo con él. A Zebrina no le gustaría,
por eso había esperado hasta que hubo ingresado al
domicilio en el ciclo de descanso para abordar esta parte del
entrenamiento de su hijo.
—Así es como aprendí —Los entrenadores de la Alianza
Humanoide les habían arrojado dagas a ellos por diversión—
. No puedes dañarme peor que el enemigo.
En la Patria, los guerreros usaban simulaciones para
entrenar. Utilizándose a sí mismo como objetivos era la
alternativa de baja tecnología.
Tenía un costo añadido.
Aunque llevaba armadura corporal y debía estar protegido,
los errores sucedían. Vow golpearía su piel desnuda con al
menos uno de sus lanzamientos. Eso era un 92.6315 por
ciento seguro.
Stealth soportaría ese dolor para mejorar las habilidades de
su hijo.

THE MAN OF STARS 174


—Está bien, lo haré —Su hijo lanzó sus dos dagas,
arrojándolas a velocidad cyborg.
—No está bien —Stealth agarró las cuchillas en el aire antes
de que golpearan su cara—. Espera hasta que empiece a
moverme —Lanzó las armas a su hijo—. Primero, simularé
oponentes humanos.
Corrió alrededor del campo agrícola, variando sus patrones,
corriendo en una variedad de velocidades humanas,
haciendo el desafío tan impredecible como lo haría un
enemigo.
El espacio estaba oscuro pero eso no debería obstaculizar
mucho a su hijo.
Los sistemas visuales cyborgs funcionan bien con luz
limitada. Evitó las amadas plantas de su hembra. Trabajó
duro en sus parcelas de tierra y no estaría contenta si se
despertara al amanecer y encontrara la vegetación
pisoteada.
—Apunta a la mitad del círculo —Stealth le dijo a su hijo.
Había decorado el cuerpo blindado en su brazo izquierdo
con un punto rojo del tamaño del puño de su hembra.
Finalmente, a medida que mejoraran las habilidades de su
hijo, se reduciría al ancho a la punta de un dedo.
Vow arrugó la cara, su concentración visible y lanzó sus
dagas hacia él. Falló, las cuchillas zumbaron detrás de
Stealth.
—Joder —Su hijo recuperó sus armas. Limpió las cuchillas
en su traje de vuelo. Sus hombros cayeron.
—Nadie tiene éxito en su primer lanzamiento —Stealth
intentó reparar algo del daño de la confianza en sí mismo de
su hijo—. Si la habilidad fuera natural, no habríamos
requerido entrenamiento —Los cyborgs habrían sido

THE MAN OF STARS 175


programados con la habilidad—. Mira mis pies. Te dirán a
dónde me dirijo.
Su hijo lo intentó una y otra vez. Su precisión mejoró hasta
que golpeó en el brazo de Stealth y finalmente en el punto
rojo.
—Sabía que podías hacerlo —Stealth le sonrió, orgulloso de
su descendencia.
Vow sonrió.
—Me estoy volviendo bueno en esto, ¿no?
—Lo eres —Tranquilizó a su aprendiz, dándole el refuerzo
positivo que necesitaba desesperadamente—. Ahora,
inténtalo de nuevo.
Stealth levantó y bajó su cuerpo mientras corría, agregando
esa variable al ejercicio, simulando oponentes de diferentes
alturas. Las dagas rebotaron en su armadura.
—Joder —Su hijo maldijo, recuperando sus armas.
—Un oponente experto será impredecible. Un guerrero...
Sus escaneos de forma de vida indicaron que un humanoide
se acercaba al muro este. Stealth giró la cabeza en esa
dirección, forzando su sistema auditivo para escuchar al ser,
tratando de identificarlo
Su hijo, concentrado en su entrenamiento, arrojó sus dagas.
Stealth atrapó a una de ellas. La otra cuchilla rozó su cuello,
dejando un rastro de dolor en su piel.
Agujero de Fraggin. Apretó los dientes.
Espera Transmitió. Sosteniendo una de sus manos.
Lo siento. Vow corrió a su lado, con los ojos muy abiertos
¿Estamos bajo ataque?

THE MAN OF STARS 176


Su terco hijo finalmente se había comunicado a través de las
líneas de transmisión. La alegría de Stealth fue atenuada por
la preocupación. El humanoide viajó hacia el norte a lo largo
de la pared.
Podría ser un ataque. El ser podría estar buscando el mejor
punto de acceso. O podría ser una verificación perimetral.
Necesitaba un visual. Agarró una rama robusta derribada
después de la tormenta de viento del anterior ciclo de
descanso, lo colocó a través de la zanja al sur del ser.
Poniendo un pie en el puente improvisado, lo probó. No se
rompió ni se curvo.
Cruzaré primero, luego me seguirás. La rama no los
mantendría a ambos al mismo tiempo.
Su hijo asintió con la cabeza. Sus manos descansaban
sobre sus armas.
Stealth atravesó la rama. El espacio entre la zanja y la pared
era demasiado angosto para pararse. Subió hasta la mitad
de las rocas apiladas, usando las ranuras como asideros.
Su hijo cruzó, extendiendo sus brazos para equilibrar su
forma. Sus habilidades en vertical eran más fuertes que en
horizontal. Trepó como un experimentado guerrero.
Llegaron a la cima, miraron por encima del borde. Un macho
era visible, llevando iluminación, caminando lentamente, sin
intentar esconderse de la vista. Su piel era azul pálido, su
cabello era un par de tonos más oscuros.
Es un Ahkian. Vow lo identificó.
Están completando las verificaciones del perímetro. Eso era
prudente para los humanoides pero haría más difícil la tarea
de Stealth de monitorear la agricultura de su hembra. Los
simples escaneos de formas de vida no serían suficientes

THE MAN OF STARS 177


para mantener a salvo a los seres que amaba. Tendremos
que verificar sus identidades cada vez.
¿Cada vez? Su hijo levantó las cejas. Son humanoides.
Tendremos que establecer un horario fijo para verificaciones
perimetrales.
Un atacante inteligente mantendría ese mismo horario. Los
Palavians también son humanoides. Los escaneos de forma
de vida de un cyborg no podían diferenciar entre diversas
especies humanoides. Podrían matar a un Ahkian en un
punto anterior de su ruta, tomar su lugar y nuestros
escaneos no detectarían eso. Eso era lo que haría. Nunca
asumas nada. Así es como mueren los seres.
Ser un guerrero implica mucho más que matar, ¿no? El tono
de lo que dijo su hijo era con interés. Hay muchos
componentes que debemos dominar.
Un guerrero protege. Matar podría ser lo que otros
percibieron como el papel pero no reflejaba la realidad. Esa
es nuestra misión principal. Proteger a otros y a nosotros
mismos podría implicar terminar con la esperanza de vida o
no. Usamos las herramientas que necesitamos para cumplir
nuestra misión.
Stealth bajó la pared y cruzó la trinchera. Después de que
su hijo hubiera hecho lo mismo, quitó la rama, quitándole esa
opción a cualquier potencial agresor.
Miró hacia el domicilio, donde su hembra lo esperaba.
Durante ciclos de descanso anteriores, había entrenado a su
hijo hasta el amanecer y luego se unió a Zebrina en sus
habitaciones
Ese horario no se podía mantener ahora. Tenía que estar
presente para los controles perimetrales, todavía no podía
prever con qué frecuencia los Ahkians los desempeñarían.

THE MAN OF STARS 178


Equilibra la rama entre dos rocas. Varía los ángulos y
practica el cruce lo más rápido posible. Le dio a su hijo una
habilidad para dominar mientras visitaba a Zebrina. Un
atacante podría moverse a la velocidad cyborg.
Los humanoides modificados se mueven tan rápido como
nosotros. Su hijo había estado accediendo a las bases de
datos cyborg.
Pueden haber otras especies con las mismas habilidades.
Gran parte del universo permanece sin explorar. Hay
enemigos potenciales que no aparecen en ninguna base de
datos. Stealth se dirigió hacia el domicilio. Avísame si
detectas seres o sientes cualquier actividad sospechosa.
Estaría monitoreando sus alrededores también.
Sí, señor. Vow se enderezó.
Todavía no se había ganado el uso de Papá o Padre por
parte de su hijo. Stealth entró en la estructura. Como aún no
se había ganado las palabras de amor humanas de su
hembra.
Se metió en su habitación.
—Mi hembra.
Rodó sobre su costado, con los ojos muy abiertos, su cuerpo
exuberante desnudo.
—Llegas temprano ¿Algo anda mal? —Ella iluminó la
cámara, parpadeando ante la repentino brillo— ¿Está bien
nuestro hijo?
—No está dañado —Stealth se quitó la armadura y las
botas— No hay necesidad de alarma.
—Gracias a las estrellas —Dejó escapar el aliento.
Había preocupado a su hembra innecesariamente.

THE MAN OF STARS 179


—Lo protegeré.
—Lo protegerás de los demás —La certeza en su voz
calentó su pecho—. Nuestro hijo es experto en encontrar
formas de hacerse daño. Una vez desarmó un proyectil. Eso
fue un desastre.
Stealth inclinó la cabeza, sin procesar la correlación entre las
declaraciones.
—Desmontar un proyectil no debería haber sido peligroso.
—Utilizó una roca para diseccionarla —Sus labios se
aplanaron—. El proyectil explotó en su cara. Vi su marco. Así
de profundas eran sus heridas.
—Nuestro hijo se reparó —Se sentó en el borde del soporte
para dormir y colocó una de sus manos en su cadera. Su
hembra había requerido ayuda con su descendencia y no
había estado disponible Se arrepintió de eso—. Los cyborgs
funcionan mejor cuando sus sistemas se utilizan por
completo.
—Traté de mantenerlo ocupad —Sacudió la cabeza—. Pero
tenía que dormir y nunca dejaba de moverse. Incluso cuando
era un bebé, sus pequeños brazos y piernas golpeaban
constantemente el aire, como si estuviera luchando contra
un enemigo invisible. Fue adorable pero agotador.
Pelear era para lo que fueron fabricados.
—Debería haber estado a tu lado.
—Estás aquí ahora —Lo miró, la especulación en sus ojos.
Su hembra seguía dudando de él.
—No te dejaré —Le diría eso tantas veces como fuera
necesario para que lo crea,

THE MAN OF STARS 180


—Espero que no —Su voz era suave—. Tu hijo se preocupa
por ti. Podría nunca decirte eso pero lo hace. Nunca lo había
visto tan feliz.
Stealth nunca había sido tan feliz también. Tenía una
hembra y una descendencia. No había ni asesinatos, ni
muertes, ni pérdidas. Y era libre, dependiente solo de los
seres que le importaban.
—Nuestro hijo se comunicó a través de las líneas de
transmisión hace un momento.
—Finalmente —Sonrió, su felicidad iluminaba su hermoso
rostro—. Sabía que vería las ventajas de comunicarse de
esa manera. Nuestro hijo es muy inteligente.
—Tiene una madre sabia —Le acarició el costado,
saboreando la suavidad de su piel—. Es hermosa, valiente y
fuerte —Se volvió hacia ella—. Yo...
—Estás sangrando —Se sentó derecha—. Fuiste herido —
Tocó su cuello.
—Es un daño menor —Ya no le dolía.
—Déjame verlo —Agarró un paño de limpieza del soporte
horizontal posicionado cerca de ellos y frotó su piel con una
esquina de la tela—. Este sellado pero necesitas un inhibidor
del dolor.
—Sin inhibidores del dolor —No los requería—. No me
permitirán sentir esto —Ahuecó la parte posterior de su
cabeza y cubrió sus labios con los suyos.
Abrazó su beso, su entusiasmo, su dulzura lo excitaban. El
paño de limpieza cayó al suelo. Sus dedos se deslizaron por
su pecho. Sus músculos se flexionaron en respuesta, sus
circuitos zumbando.

THE MAN OF STARS 181


La bajó sobre su espalda, apoyándose sobre ella, la longitud
de él superponiéndose a la longitud de ella. Sus curvas lo
amortiguaban, el más acogedor soporte para dormir que un
macho podría tener.
Y era suya, toda suya. No había habido contacto del Ahkian,
su rival, por rotaciones planetarias. Su hembra extrañaba al
macho. Una o dos veces, la había visto mirando la pared
contigua, con una expresión melancólica en su rostro, por
eso lo sentía.
Pero celebró ser elegido, disfrutó de ser el macho al que ella
le dio la bienvenida a su cámara, con quien compartía sus
preocupaciones, le susurraba sus secretos. Era un honor,
estaría atento para merecerlo.
Demostraría ser digno una y otra vez hasta que le diera todo
de ella, las palabras de amor humano, su corazón, su alma.
Entonces protegería ese regalo, siendo el macho que se
merecía.
Hizo un movimiento con su barbilla, bajando por su cuello.
Gimió y arqueó la espalda presentando su cuerpo hacia él,
sus senos llenos, sus pezones apretados.
—Eres hermosa.
La acarició entre sus senos. Apretó sus curvas juntas,
asfixiándose en su suavidad. Agujero de Fraggin. Si pudiera
elegir una forma de morir, sería la muerte entre los senos de
su hembra.
Inhaló su almizcle, lamió la sal de su piel. Tembló, el
movimiento rozando su piel contra sus mejillas, puliéndole
con el más decadente material en el universo.
—Necesito sentir más de ti —Bajó, presionando su forma
contra la de ella, su eje conectado con su humedad. Contuvo

THE MAN OF STARS 182


el aliento, moviéndose debajo de él, el movimiento
inundando sus sentidos de placer.
Levantó la cabeza y la miró. Sus ojos eran más oscuros que
el cielo. Su cara estaba sonrojada, su boca abierta. Su
hembra estaba tan excitada como él.
Se frotó contra él, arrastrando sus pezones a lo largo de su
pecho, marcando su polla con sus fluidos. Apretó los dientes,
la presión en la base de su columna vertebral simulada
—Zebrina —Su voz era ronca de deseo—. Mi hembra.
—Stealth —Sus muslos internos presionados contra sus
caderas, sus rodillas dobladas—. Mi macho.
Se meció, disfrutando de él, una hembra en su mejor
momento, mayor, confiada, hábil.
Lo excitó hasta el punto del dolor. Se molió contra sus
movimientos y un temblor la invadió. Sus ojos se abrieron.
Su agarre sobre sus hombros se intensificó.
—Dentro de mí —Jadeó—. Quiero tu polla dentro de mí.
—Sí —También quería eso—. Alejándose, se alineó en su
entrada, golpeando la cabeza de su miembro contra ella
deliberadamente, provocando a su hembra.
—Ahora, mi macho —Fragmentos de plata brillaron en sus
ojos, como rayos iluminando un cielo tormentoso. Las uñas
de ella se presionaron contra su piel, la punzada de dolor,
estimulándolo más allá.
La empujó, avanzando lentamente, atormentándolos a
ambos con un deslizamiento pausado. El calor húmedo
subió por su eje, la comodidad de su apretón íntimo,
desnudando su control.
Levantó las caderas, llevándolo más rápido, más profundo,
hasta que sus cuerpos se fusionaron, formando una sola

THE MAN OF STARS 183


entidad. Eran cyborg y humano, macho y hembra, diferentes
pero destinados a estar juntos. Solo ella podía encajarlo
como lo hacía. Estaba diseñada para él y él fue diseñado
para ella.
Sus pliegues femeninos tocaron su base y se detuvo, su
mandíbula apretada, su polla totalmente dentro de ella, su
hembra, su universo.
—Eres mía.
Y él era de ella. Poseía todas las partes de él, el humanoide
mejorado y la máquina, su cerebro y sus procesadores.
Nunca habría nadie más para él.
—Soy tuya.
Lo apretó y él hizo un sonido doloroso, aferrándose a su
restricción por un hilo.
Retrocedió, condujo hacia adelante, retrocedió, condujo
hacia adelante, criando con ella como si tuviera una
eternidad para alcanzar la realización, queriendo que nunca
terminara. Se encontró con él golpe por golpe, elevándose
hacia arriba.
Las gotas de sudor brillaban en su forma, decorando sus
pestañas. Las gotitas reflejaban la luz, haciéndola brillar.
Jadeó, el sonido hizo eco en la cámara.
Stealth gruñó, agregando sus tonos profundos a su canción.
El apoyo para dormir rebotó contra la pared cuando su ritmo
se aceleró, una construcción urgente dentro él.
Sus pechos golpearon contra su pecho. Sus caderas
chocaron y luego se separaron. El calor irradiaba desde
donde se conectaban.
Sostuvo su mirada mientras follaban, enfocándose en el
encuentro, en los dos. Tuvieron muchos roles: padres,

THE MAN OF STARS 184


proveedores, protectores, pero en su cámara, durante el
ciclo de descanso, era su macho y ella era su hembra.
Entró y salió de ella con la intención de complacer al ser que
adoraba. Le dolían las bolas. Sus circuitos pulsaban de
necesidad, de deseo. Sus paredes internas se contrajeron
alrededor de su eje.
—Sí —Su voz se alargó con deseo—. Sí —Inclinó la cabeza
hacia atrás, su forma se alzó sobre la de él—. Sí.
Estaba apretada, caliente, húmeda, sus fluidos se
deslizaban por su polla, perfumando el aire. Chupó su
barbilla y golpeó su coño, criando con ella más fuerte, más
rápido.
—Por favor —Su petición de liberación lo atrajo—. Ahora.
Le respondió, empujando hasta la empuñadura y girando las
caderas. Gritó, apretándose a su alrededor, rompiendo su
moderación. Era demasiado, demasiado bueno. Rugió,
arqueando la espalda, incapaz de contenerse.
Su semen explotó de su punta, arrancando otro grito de la
garganta de su hembra. Rastrilló su pecho con las uñas, el
dolor amplificaba su éxtasis.
La sensación lo envolvió, sobrecargó su máquina. Sus
procesadores se oscurecieron por un instante. Sus sistemas
se apagan y luego se reinician de inmediato. Se retorció
debajo de él, su coño apretando y soltando su eje,
sonsacando hasta la última gota de él.
Al no quedar nada, se derrumbó. Aterrizó sobre las curvas
de su hembra, su suavidad acolchándolo, su cuerpo dándole
la bienvenida. Aunque era más grande, más pesado, ella no
protestó y no lo rechazó. En cambio, envolvió sus brazos y
piernas a su alrededor, manteniéndolo donde estaba.
—Te tengo —murmuró ella, temblando—, estás seguro.

THE MAN OF STARS 185


Sus palabras sirvieron como recordatorio. Mientras
descansaba en sus brazos, examinó sus alrededores. La
única otra forma de vida que detectó fue su hijo.
Vow continuaba practicando en cruzar la rama. Murmuró
sobre la posible fabricación de hermanitos y cómo prefiere
no escuchar sobre el proceso. Era su madre, por el amor de
Dios.
Los labios de Stealth se torcieron.
—Todos estamos a salvo —Rodó, tomando a su hembra con
él.
—¿Estamos todos a salvo? —Levantó la cabeza, con los
ojos muy abiertos—. Oh, joder. Nuestro hijo nos escuchó,
¿no?
—Siempre nos escucha —Stealth la abrazó, sosteniéndola
en su lugar—. Es un cyborg, puede detectar cuando mi piel
roza la tuya —Las yemas de sus dedos sobre su mejilla—.
Un susurro o un grito de liberación no hacen diferencia para
él.
—Se siente mal —Apoyó la barbilla en su pecho, sus ojos
azules preocupados.
Su hijo murmuró que estaba mal. Vow había sido criado
como humano, no estaba acostumbrado a compartir
información privada.
—Se acostumbrará a eso —Stealth no estaba preocupado—
. Hay muchas parejas en la Patria ahora. Los escuchará
reproducirse también.
—Y nos escucharán reproducirnos —Se cubrió la cara con
las manos—. Oh, joder.
Se rio entre dientes. Le agradaba que estuviera pensando
en su futuro.

THE MAN OF STARS 186


THE MAN OF STARS 187
Capítulo 14

A mitad de la siguiente rotación de planetas, Zebrina


deambulaba por su campo agrícola, regando las semillas
aún no germinadas. Había replantado la mayor parte del
jardín, reemplazando las plantas pisoteadas.
El sol brillaba. Los insectos zumbaban. El olor a humo
aromatizaba el aire.
Los incursores Palavian habían estado atacando cada vez
más cerca de su domicilio. Stealth creía que los humanoides
eventualmente los atacarían.
Esperaba que estuviera equivocado, pero le daban
tranquilidad sus preparativos. Lo haría para asegurarse de
que su hijo estuviera a salvo. Ella estaría a salvo. Tenían uno
de los mejores guerreros en el universo para que los
protegiera.
Una forma borrosa arrojó una sombra brevemente sobre
ella. Vow corrió a lo largo de la parte superior de la pared.
Trató de no preocuparse por él. Era un cyborg, llevaba
puesta la armadura de su padre. Si se caía, no se rompería
ningún hueso.
Pero le dolería... un poco.
El dolor era parte del entrenamiento, le había dicho Stealth.
Entrenaba a su discípulo, instándolo a que se moviera más
rápido. El orgullo brilló en los ojos de su macho.

THE MAN OF STARS 188


La confianza de su hijo se había expandido con su conjunto
de habilidades. Su postura había mejorado. Sonreía más. Su
constante búsqueda de quién era había terminado. Era un
cyborg, un guerrero, como su padre.
Sospechaba que finalmente habría encontrado el camino.
Era físicamente un cyborg. No se podía negar eso. Y, según
él, siempre quiso ser un guerrero.
Tener a Stealth a su lado simplemente había acelerado el
proceso. Tenía un guía, un mentor.
Eso facilitó todas las situaciones. Echó un vistazo a la pared
que separaba su campo agrícola del de Odoon. El macho
Ahkian no los había visitado desde que había quedado
aturdido.
Extrañaba a su amigo. Era el ser que le había enseñado el
crecimiento de las plantas en Waaban Two y durante más
de dos ciclos solares, había sido su vínculo con el resto de
los seres del planeta, una valiosa fuente de información
sobre la comunidad a su alrededor.
Si hubiera estado sola, habría reunido coraje y cruzado su
campo agrícola, intentar hacer las paces con él. Pero acogió
a más y más Ahkians en su domicilio mientras continuaban
los ataques a los seres.
Había escuchado a los humanoides charlar alegremente,
sus voces audibles a través de la pared. Sus machos los
habían visto, verificando su presencia. A veces olía los
apetitosos aromas de los alimentos que se preparaban.
Los Ahkians deben haber sido tan conscientes de su
proximidad, pero no hicieron ningún esfuerzo por ser

THE MAN OF STARS 189


sociales. Y no podía acercarse a ellos ni a Odoon. No
aprobaban que se asociara con ella, con Vow o con Stealth.
Zebrina suspiró. No le crearía problemas a su amigo, no lo
lastimaría más de lo que ya lo había hecho.
—No te veas tan emocionalmente dañada, mi hembra —
Stealth la llamó mientras metía pequeñas banderas en el
suelo—. Puedes practicar después.
Insistió en que ella disparara a los objetivos en cada rotación
del planeta, dándole ideas sobre cómo mejorar su puntería.
—No correré por lo alto de ninguna pared —Perdería el
equilibrio y se caería—. Mi cuerpo no está diseñado para ese
tipo de práctica.
Su cyborg se rio entre dientes, ese sonido le dio alegría.
—Estás diseñada para otras ocupaciones.
Se habían entregado a una de esas otras actividades tres
veces durante el ciclo de descanso anterior. Los dedos de
sus pies se doblaron en sus botas. Mierda. Lo quería a él.
Constantemente.
—Ya te has entrenado —Stealth le dijo a su hijo—. Cuando
te diga ya, dispararás al centro de cada bandera.
Vow se paró sobre la pared que había construido.
—¿Estamos haciendo esto de nuevo? —Puso los ojos en
blanco—. Dominé ese ejercicio la última rotación del planeta.
—Las banderas estaban estacionadas en la última rotación
del planeta —Su entrenador, su macho, agarró una
herramienta para soplar la vegetación—. Esta rotación del
planeta, se moverán.

THE MAN OF STARS 190


Los lados de su domicilio ya estaban decorados con marcas
de proyectiles. Zebrina sacudió la cabeza, previendo que se
agregarían muchos más agujeros a esa colección.
—Mi hembra, ponte detrás de mí —Ordenó Stealth.
Cumplió con su orden, colocando sus manos sobre su
espalda vestida con un traje de vuelo.
—Deberías llevar la armadura corporal.
Su cyborg planeaba protegerla con su físico musculoso,
absorbiendo cualquier proyectil perdido. Soportaría ese
dolor por ella.
—Si la armadura te queda bien, la estarías usando —Se
echó hacia atrás, hacia ella—. Eres una humana delicada.
—Eres un humano delicado, mamá —Su hijo se rio como
una criatura demente, casi cayéndose de la pared.
Sus labios se torcieron.
—Ambos son imposibles —Los amaba con todo lo que
tenía—. No me dispares ni a mí ni a tu padre, Vow.
—Estaré disparando a las banderas —Sus ojos giraron de
nuevo—. No estás cerca de ellas.
—Prepárate —Stealth activó la herramienta de soplar la
vegetación, el ruido desalentando más conversación— ¡Y
ya!
Su hijo corrió, disparando a sus pequeños objetivos. Su
guerrero varió el ángulo del viento fabricado, aumentando el
nivel de desafío. Zebrina se acurrucó contra su espalda,
acariciando su cuerpo con las manos, explorando la
inmersión cerca de su columna vertebral simulada, la
plenitud de sus omóplatos.

THE MAN OF STARS 191


Vow no les disparó a ellos ni al domicilio. Su objetivo ahora
superaba el de un humano.
—Pronto te quedarás sin cosas para enseñarle —Murmuró,
impresionada con ambos.
—Nada le está disparando a nuestro hijo —Stealth asintió
con la cabeza hacia las banderas acribilladas del proyectil—
. Eso afectará su precisión. También lo es...
Dejó de hablar. Su forma se puso rígida, sus músculos se
tensaron debajo de sus palmas. Apagó la herramienta de
soplar la vegetación e inclinó la cabeza hacia la pared.
—¿Hijo?
Vow dejó de disparar.
—Lo escucho —Se apartó de ellos, mirando hacia el campo
agrícola de Odoon—. Los Ahkians están corriendo,
agarrando pistolas. No tengo visual de los atacantes.
—Baja de allí —Zebrina golpeó el aire.
Algo peligroso estaba sucediendo. Todavía no sabía qué era
eso. Su hijo era un objetivo enorme y muy visible, parado en
la pared. Vow no se movió, su atención se centró en la
acción ante él.
—Escucha a tu madre, hijo —Stealth apoyó su orden, su
tono cortante—. Nosotros tenemos que hacer un chequeo
de armas.
Esa última declaración despertó el interés de su hijo. Corrió
por la pared, cruzó la rama que usaba como puente y volvió
a su lado.
Exhaló profundamente. Estaba cerca de ella, a su alcance.
Podría protegerla.

THE MAN OF STARS 192


Si Vow lo toleraría, ella lo tomaría en sus brazos, cubriría su
cuerpo con el suyo, lo protegería de la violencia, la lucha, el
asesinato lo mejor que pudiera.
Pero no le permitiría hacer eso. Creía que había crecido
ahora, un guerrero. No sabía que siempre sería su bebé.
Tenía que confiar en Stealth para alejarlo del peligro.
Sus machos completaron un inventario de su arsenal. Vow
recuperó todas las pistolas y cuchillos que guardaban en el
domicilio, incluyendo el pequeño cuchillo que usaba con las
raíces. Stealth verificó que las armas eran funcionales.
—Tienes dos pistolas —Su macho las metió en los bolsillos
delanteros de su traje de vuelo. Su peso tiró de la tela hacia
abajo—. Esas están listas para matar. Se cuidadosa.
—Solo puedo usar una pistola a la vez —Requería de ambas
manos para agarrar la pistola.
—Si sueltas una de ellas, tendrás una de repuesta .
Repartió más armas para Vow, llenando las cartucheras y
fundas de la armadura corporal.
Los disparos sonaron en la distancia. Ella miró en esa
dirección.
—Lo escucho ahora.
—Se están acercando rápidamente —Stealth parecía
sombrío.
Odoon y los otros seres que permanecían en su granja
estaban bajo ataque. Su corazón latía con fuerza.

THE MAN OF STARS 193


—Muchos de los Ahkians no son guerreros —Por eso no se
habían quedado en su planeta y lucharon contra La Alianza
Humanoide—. Hay bastantes huérfanos en el grupo.
Los niños superaban ampliamente a los seres adultos. Ese
había sido el foco de los vuelos de rescate.
—Deberíamos ayudarlos a luchar —Su hijo sacó dos de sus
armas.
—Hacer eso te pondría en peligro a ti y a tu madre —Stealth
revisó sus armas—. Salvaguardarlos es mi única prioridad.
Si hubiera estado solo, estaría luchando. Se dio cuenta de
eso. Era para lo que fue diseñado, una actividad que, como
la mayoría de los cyborgs, disfrutaba. Estaba eligiendo a su
hijo, eligiéndola sobre la batalla.
Los estaba poniendo primero.
Como sospechaba que siempre lo había hecho.
—Protegerme en Ahki fue tu única prioridad, ¿no? —No se
había quedado en el planeta para estar con sus hermanos.
Se quedó en el planeta para salvarla.
—Todo lo que he hecho o haré alguna vez es por ti, mi
hembra —Su cyborg se encontró con su mirada, sus ojos
grises solemnes— Tú y ahora, nuestro hijo. Eres el corazón
en mi pecho. No soy nada sin ti.
—Ugh —Su hijo hizo un sonido de náuseas— ¿Podemos
dispararle a alguien ahora?
Una hembra gritó, esa vocalización de terror tirando del alma
de Zebrina. Los seres se estaban muriendo. Su amigo,
Odoon, podría estar herido o peor.

THE MAN OF STARS 194


—Esperaremos a que nos ataquen —Stealth se volvió hacia
la entrada de su campo agrícola—. Quédate detrás de mí,
mi hembra.
Se posicionó como él había ordenado.
—Están matando seres.
—Esa es la batalla —Su guerrero no parecía feliz por ese
aspecto—. Conocemos este terreno. Tendremos la ventaja.
Su hijo olisqueó el aire.
—Huelo sangre.
Sonaron disparos. Las hembras chillaron. Gritaron los
machos. Un bebé gimió. Un bebé.
—No puedo hacer esto, Stealth —Cambió su peso de un pie
al otro—. No puedo estar aquí mientras se mata a seres
inocentes, bebés, niños. Tenemos armas. Deberíamos estar
ayudándoles.
—Puedo protegerte aquí —Se negó a tomar medidas.
—Puedes protegernos de las heridas físicas —Los gritos le
estaban destrozando el corazón—, pero no del daño
emocional. No podría vivir conmigo misma sabiendo que no
hice nada para salvarlos.
—Soy un guerrero —Su hijo se incorporó a su altura
máxima—. Los guerreros protegen. Eso es lo que me dijiste.
Tenemos que rescatar a los Ahkians.
—No me importa un Fraggin los Ahkians —La voz de Stealth
se elevó—. Solo me importan tu madre y tú.
—Está bien —Colocó sus manos sobre la espalda de su
macho, tratando de calmarlo.

THE MAN OF STARS 195


—Está lejos de estar bien —Miró por encima del hombro. Su
mirada se encontró con la de ella.
Contuvo el aliento. Su guerrero estaba aterrorizado.
—Stealth.
No sabía qué decir.
En Ahki, lo había visto marchar a la batalla una y otra vez,
estoicamente confrontando al enemigo, arriesgando su vida
cada vez. Nunca había visto miedo en los ojos de su cyborg.
No hasta ahora.
Su mirada se dirigió a su hijo antes de volver a su cara.
—Podrías morir —La voz era ronca por la emoción—. He
perdido tantos seres. Si te perdiera...
—No nos perderás —Presionó sus labios contra su hombro,
humedeciendo su traje de vuelo con la boca, besándolo a
través de la tela—. Salvaremos a los que podamos,
dirigiéndolos de vuelta aquí. No tomaremos riesgos
innecesarios.
Él dudó.
El bebé dejó de llorar abruptamente y su estómago se apretó
en nada ¿Estaba muerto el niño?
Eso podría haber sido Vow. Pudo haber sido su hijo.
—Tenemos que ayudarlos —Suplicó con los ojos—, por
favor, Stealth.
Él suspiró.

THE MAN OF STARS 196


—Te quedarás detrás de mí —Su guerrero cedió en su
posición—. Vow, seguirás a tu madre, protegiéndola desde
atrás.
—Tengo un maldito deber de guardia —Su hijo pisoteó
fuertemente.
—Ese lenguaje —Dijo sin pensar.
—Obtén una imagen visual antes de disparar a los seres —
Stealth aconsejó a su hijo—. En el caos, podrías dispararle
a un Ahkian. Eso sucede en la batalla. No lo proceses.
Permanece enfocado en protegerte, proteger a tu madre.
—¿Voy a disparar a seres? —Vow levantó la cabeza.
—Habrá muchos seres para que todos podamos disparar —
Su macho la miró— ¿Estás segura de esto, mi hembra?
Ella asintió, segura de que tenían que hacer algo.
Enganchó sus brazos alrededor de su cintura y la atrajo
hacia él. Sus armas presionadas contra su espalda, la
frescura del metal se sentía a través de su prenda.
Capturó sus labios, su beso exigente, casi frenético. Acarició
su lengua sobre la suya, tratando de tranquilizarlo.
Sobrevivirían a esto, los tres. Era lo correcto, lo único que
podían hacer los seres de honor. Tenían que salvar a tantos
inocentes como sea posible.
—Si mueres, yo muero —Apoyó su frente contra la de ella—
. Procésalo antes de tomar cualquier medida.
Dejarían a Vow huérfano si la mataban. Estaría solo en el
universo. Tragó saliva.
—Seré cuidadosa.

THE MAN OF STARS 197


—Bien —Golpeó sus labios con los suyos y enfrentó la salida
del campo agrícola—. Avanzaremos lentamente.
Lentamente para sus cyborgs fue rápidamente para ella.
Corrió tras Stealth, sus palmas húmedas, su respiración
superficial. Con cada estallido de disparos, se sacudía.
Una hembra Ahkian corrió por el camino hacia ellos, un bebé
acunado en sus brazos. Sus ojos eran salvajes. Su cara
estaba sonrojada de azul oscuro. Estaba descalza, los
dedos de sus pies ensangrentados.
La hembra había sido uno de los seres que se había negado
a permitirle a sus hijos mayores asociarse con Vow,
llamándolo asesino frente a otros, humillándolo. No había
rastro de sus muchachos. El corazón de Zebrina se retorció.
¿Estaban aún vivos?
—Escóndete en nuestro domicilio —Le dijo a la Ahkian—.
Está desbloqueado y estarás a salvo allí.
Esperaba que esa fuera la verdad.
—Mis hijos —La hembra sollozó, lágrimas y otros líquidos
fluyeron por su sucio rostro—. No sé dónde están.
—Intentaremos encontrarlos —Eso fue todo lo que podía
ofrecer—. Concéntrate en salvaguardar a tu bebé ahora.
—Oh, mi bebé —Sosteniendo a la niña más cerca de sus
senos, la hembra se precipitó hacia su campo agrícola.
Se encontraron con más Ahkians, sus facciones
conmocionadas. Muchos de ellos eran niños. Algunos fueron
heridos, la sangre goteando por sus cuerpos.
Los dirigió a su casa, resistiendo el impulso de atender a los
supervivientes, abrazar sus temblorosas formas contra su

THE MAN OF STARS 198


pecho. Sacar a otros de peligro tenía que ser lo primero.
Limpiaría las heridas, ofrecería consuelo más tarde.
—Es malo —Vow estaba encontrando la situación tan difícil
como ella—. Es realmente malo.
—Esto no es malo —Stealth avanzó sin descanso—. Están
vivos. Pronto verás algo mucho peor —Habló desde una
experiencia horrible. Escuchó eso en su voz—. Redirige
tanto de tu sistema emocional al lado de tu máquina como
sea posible. Eso te ayudará a funcionar.
Envidiaba a sus cyborgs por tener esa opción. Sus
emociones estaban severamente fracturadas, con el
estómago revuelto.
Una hembra se precipitó junto a ella, una enorme cuchilla
clavada en su cráneo, la sangre fluía hacia sus ojos, bajando
por su cara. No se detuvo, no parecía verlos ni oírlos. Los
sonidos provenientes de su garganta no eran humanoides.
Zebrina no tuvo tiempo de absorber ese horror. Los
proyectiles destrozaron la corteza de un árbol delante de
Stealth.
Extendió su mano izquierda, indicando que debían quedarse
donde estaban. Miró hacia atrás y se aseguró de que su hijo
estuviera allí. Luego levantaron sus armas, apuntando hacia
la fuente.
Stealth se lanzó hacia adelante, su cuerpo parcialmente
oscurecido por su tremenda velocidad.
Se obligó a quedarse quieta, cada parte de ella queriendo
seguirlo, cubrir su espalda, mantenerlo a salvo. Los disparos
cortaron el ruido. Tres explosiones más fuertes destrozaron
sus nervios. El fuego rápido se detuvo.

THE MAN OF STARS 199


Apareció Stealth, ileso y ella volvió a respirar, le dolía el
pecho. Les hizo señas para que avanzaran.
Se movió hacia él y se aventuraron en la anarquía absoluta.
Los cuerpos estaban esparcidos en el suelo cubierto de
vegetación. La mayoría de las muertos eran Ahkians,
algunos niños, algunos seres adultos, sus ojos abiertos y sin
ver, sus formas retorcidas. El fuego envolvía el domicilio, el
humo obstaculizaba la visibilidad. Los Palavians de cuatro
brazos corrían tras los seres, derribándolos con proyectiles.
Algunos de los Ahkians intentaron escalar el muro. Eso los
hizo objetivos más fáciles. Los Palavians los bombardearon
con disparos. Los cuerpos bailaban en el aire antes que
cayeran.
Su macho disparó a los atacantes, defendiendo a los
inocentes. Su hijo se unió al asalto. Trató de ayudar. Su
tiempo de reacción era mucho más lento. Mucho de los
seres ya estaban muertos cuando sus proyectiles
encontraron su blanco.
Tres niños se escondieron detrás de una estructura de
almacenamiento. Se agarraron el uno al otro, temblando de
terror.
—Tenemos que darles cobertura, mi macho —Los jóvenes
estaban en riesgo donde estaban.
Se movió hacia los niños.
—Colócalos entre nosotros.
—Vengan, niños —Hizo un gesto hacia el suelo delante de
ella.

THE MAN OF STARS 200


El mayor recogió al niño más pequeño y corrió. Proyectiles
perforaron el suelo alrededor de ellos.
Cuando estuvieron a su alcance, los atrajo hacia ella. Dos
habían sido salvados.
El tercer niño permaneció congelado en su lugar, aferrado a
la estructura.
—No puedo. No puedo.
El niño se estremeció. Estaba demasiado asustado para
moverse. La orina se acumulaba alrededor de sus pies
descalzos, el olor llenando el aire.
—Quédate aquí —Apretó los hombros del niño mayor—.
Stealth, voy a recuperar al niño.
—Hijo, protege a la descendencia —Su guerrero ladró esa
orden—. Estaré protegiendo a tu madre.
Dio la espalda a los Palavians. El rojo manchaba la parte
delantera de su traje de vuelo.
Parte de su mejilla había sido destruida. Había tomado
proyectiles por ella, para mantenerla a salvo.
Y continuó tomándolos, su cuerpo temblando por el impacto,
los atacantes apuntando a su espalda. Hizo una mueca y se
quedó quieto.
—¿Qué estás haciendo? —Le gritó, horrorizada.
—Vete —Le gritó a ella.
Eso la empujó a moverse. Se lanzó hacia adelante. Su
macho se movió con ella.
Separó al niño de la estructura y lo volvió a poner a salvo.

THE MAN OF STARS 201


—Lo tengo.
Stealth balanceó sus armas para enfrentar a los Palavians y
les disparó. Cayeron, sus múltiples brazos moviéndose.
Ahora que los niños estaban protegidos, su atención volvió
a su guerrero. La sangre empapaba los restos de su prenda,
manchándola de sangre. Su marco plateado era visible.
Pedazos de piel y músculos colgaban de sus omóplatos.
—Te duele —Gracias a ella. La bilis se arrastró por su
garganta.
—Voy a repararme —Su voz era tensa—. Quédate detrás de
mí.
Se arrastraron lentamente hasta el borde de la granja
agrícola. Una hembra Ahkian y una niña se unió a ellos,
deslizándose entre Zebrina y Vow. Proyectiles zumbados
hacia ellos.
Sus dos cyborgs dispararon a todos los enemigos dentro del
alcance. Stealth derribaba a los seres de manera fría, rápida
y efectiva. Vow era más ruidoso y más aleatorio con sus
disparos.
—Tomen eso, hijos de puta —Su hijo acribilló a un macho
con una lluvia de proyectiles. El ser giró en el aire antes de
caer al suelo. Otro macho corrió hacia ellos—. Tú. Joder.
—¿Vow? —¿Había sido herido?
—Estoy vivo —El dolor afiló sus palabras
—Hijo de puta —Le disparó al macho que se había atrevido
a dañar a su hijo—. Lo tengo, mi hembra.
Su guerrero hizo lo mismo.

THE MAN OF STARS 202


El enemigo agarró su pecho, volcándose. No sabía de quién
era el proyectil que terminó su vida. Sospechaba que
pertenecía a su macho.
Se movieron hacia el camino principal, un área ya despejada
de Palavians. Menos y menos proyectiles los pasaron, hasta
que finalmente no hubo disparos.
Habían llegado a un lugar seguro.
—Tómalos y corre lo más rápido que puedas a mi domicilio
—Le dio los niños a la otra hembra—. Estarán protegidos
allí,
—Gracias —La Ahkian alejó a los niños de ellos,
dirigiéndose hacia la dirección del campo agrícola
amurallado.
Zebrina miró a su hijo.
—Vow —Tocó su mejilla herida, viendo la plata de su cráneo
reforzado a través de la sangre—. Estás herido.
—No es nada, mamá —Su mirada se movió hacia el lugar
del ataque—. Existen más seres para salvar.
Ese acto tendría consecuencias asociadas.
—Tu padre también está herido —Se encontró con la mirada
de Stealth, sintiendo el dolor de sus dos machos como si
fuera suyo—. Debes estar en agonía.
—He experimentado algo peor —También examinó la
escena ante ellos, padre e hijo iguales en ese sentido,
ambos guerreros en sus formas— ¿Nos damos la vuelta?
No quería arriesgar la esperanza de vida de sus machos
nuevamente, para causarles más dolor. Pero...

THE MAN OF STARS 203


—Los niños se están muriendo.
—Volvemos a entrar —Stealth tomó la decisión por ella.
—Volvemos —Suspiró, deseando que no fuera necesario.

THE MAN OF STARS 204


Capítulo 15

El cuerpo de Stealth palpitaba de dolor. Esa agonía fue


eclipsada por su preocupación por su hembra, su terror
absoluto de que fuera dañada... o peor.
También estaba preocupado por su hijo, pero en menor
grado. Vow era un cyborg, podría sanar rápidamente, fue
diseñado para ser difícil de matar.
Su hembra era humana y frágil. Un proyectil podría alejarla
para siempre de él.
Si su misión era simplemente eliminar al enemigo, Stealth
enviaría a Zebrina de regresó a su domicilio, la pondría a
cargo de los seres que se escondían allí. Había sido
entrenado para terminar con su vida útil, no requería ninguna
ayuda con eso.
Los Palavians están desorganizados, eran descuidados,
humanoides. Su hijo había derribado unos pocos de ellos,
obteniendo conocimientos muy necesarios sobre la batalla.
Los dos fácilmente podrían acabar con ellos.
Pero también estaban salvando machos, hembras,
descendientes. No tenía experiencia con eso, sospechaba
que los Ahkians podrían tener más miedo de él que de sus
atacantes. La presencia de Zebrina aliviaría sus temores.
Sabría cómo consolarlos, cómo motivar a los humanoides a
tomar medidas.
El rostro de su hembra estaba pálido. Las líneas estaban
grabadas alrededor de sus labios. Estaba preocupada, sin

THE MAN OF STARS 205


embargo, valientemente insistió en hacer lo que creía
correcto.
La amaba por eso.
—Quédate detrás de mí —Le recordó.
—Lo haré —Asintió.
Hijo. Transmitió ¿Estás listo?
Yo m-maté a un ser. Y eso le causó daño. Stealth lo escuchó
en sus palabras. Un ser no está viviendo por mi culpa. No
verá otro amanecer, abrazar a su madre, comer alimento,
ser...
Concéntrate en tu misión. Le ladró a su hijo, buscando
redirigir temporalmente sus procesadores. Debes proteger a
tu madre ¿Puedes hacer eso?
Sí, señor. Vow se enderezó. Yo la protegeré.
Se ocuparían de las secuelas cuando el peligro hubiera
terminado. Ayudaría a su hijo a asimilar lo que había hecho,
la esperanza de vida que había tenido que terminar. Esa era
la carga de cada guerrero.
Se aventuraron de vuelta en medio de la batalla. Stealth
realizado constante escaneos de forma de vida. Eso fue útil
para localizar seres. No se podía distinguir entre aliados y
enemigos.
Dispararon contra él, originándose detrás de un árbol.
Detuvo los proyectiles con su forma, apretando los dientes
por el dolor.
Moverse no era una opción. Su delicada hembra estaba de
pie detrás de él.

THE MAN OF STARS 206


Stealth vio el arma apuntando hacia él y la mano que lo
sostenía. La piel no era azul. El ser era un enemigo.
Le disparó a la muñeca expuesta. El Palavian atrapó el arma
con la parte inferior de la mano, inclinándose un poco para
hacer eso.
El siguiente proyectil que Stealth lanzó golpeó la cabeza del
macho. El cerebro salpicó. El enemigo cayó.
Stealth condujo a su pequeña tropa hacia una forma de vida
oculta en un contenedor puesto al revés. Ese debe ser un
aliado. A juzgar por el tamaño del contenedor, era una
descendencia.
—Ahí abajo, mi hembra —Él asintió con la cabeza hacia el
escondite, escaneando el terreno.
Un macho humano con barba encontró su mirada. El ser
corrió en la dirección opuesta. Debe haber estado alineado
con los Palavians. Los Ahkians odiaban a los humanos.
Stealth no desperdició proyectiles en él. El humano huía de
la batalla. No debería dañar a Zebrina.
Levantó el contenedor y le ofreció a la inteligente niña
escondida debajo de él su mano. La descendencia agarró
los dedos de su hembra, permitió que la sacaran de su
refugio improvisado.
Rescataron a más y más seres, en su mayoría
descendientes y hembras, escoltándolos hacia el camino
principal, indicándoles que corrieran al domicilio de su
hembra.
Los atacantes, muchos de los cuales eran Palavians, fueron
asesinados o lo miraban a él, a su hijo y huían. Los labios de

THE MAN OF STARS 207


Stealth se aplanaron. Tener la reputación de una máquina
de matar tenía sus ventajas.
Los disparos disminuyeron, luego se detuvieron, el silencio
inquietante. El domicilio quemado. Los cuerpos estaban
esparcidos por el suelo. Los pisó, avanzando hacia una
agrupación de seis formas de vida.
Vow enfundó sus armas y su cuerpo se relajó.
Era demasiado temprano para hacer eso.
¿Qué estás haciendo? Stealth frunció el ceño.
La batalla ha terminado. La frente de su hijo se frunció.
¿Se terminó? Stealth escaneó el área ¿Has confirmado
visualmente que los trece seres dentro del alcance son
nuestros aliados?
No nos están disparando. Su hijo sacó sus armas.
Más entrenamiento era necesario.
Si estuvieras siendo cazado, ¿anunciarías tu presencia con
disparos al azar o permanecerías en silencio, a la espera del
momento ideal para atacar?
Me quedaría en silencio. Su hijo miró a su alrededor, su
vigilancia restaurada ¿Cuándo se acaba la batalla?
Cuando has identificado cada forma de vida restante como
un aliado, entonces y solo entonces se acabó la batalla.
Se acercó a una gran roca, vislumbró una mano azul pálido
agarrando una pistola.
Estos son aliados.
—Mi hembra...

THE MAN OF STARS 208


Los proyectiles estallaron en su pecho, desgarrándolo, el
dolor insoportable. Fraggin, los Ahkian le estaban
disparando.
—Somos amigos —Utilizó las palabras que su hembra
compartió con algunos de los humanoides—. Te llevaremos
a un lugar seguro.
—No eres amigo mío —No era un Ahkian desconocido
sosteniendo el arma. Ese era Odoon, el amigo de su
hembra—. Todo esto es tu culpa, máquina. Eres la razón por
la que estamos en este planeta —Puntuaba cada acusación
con proyectiles—. Tú eres la razón por la que mi hembra y
mis hijos están muertos. Tú eres la razón por la que ella me
rechazó.
—Deja de dispararle a mi macho, Odoon —Gritó Zebrina—
. Estamos tratando de ayudarte.
—¿Ayudarme? —El Ahkian despegó la carne del pecho de
Stealth, la agonía casi cortando sus circuitos—. Me matará.
Mata a todos. Eso es todo lo que está programado para
hacer: Acabar con la vida útil.
—¿Estás lastimando a mi macho intencionalmente? —Su
hembra dio un paso adelante—. Vas a morir por eso —
Apuntó su arma a su antiguo amigo—. Voy a dispararte a...
—No —Stealth la empujó detrás de él, protegiéndola con su
cuerpo—. Me ocuparé de esto.
El humanoide estaba funcionando mal y estaba armado. No
quería a su hembra en cualquier lugar cerca de él.
—Sí, trata conmigo —Odoon le disparó de nuevo—.
Mátame. Eso es en lo que eres bueno.

THE MAN OF STARS 209


Stealth sospechaba que eso era lo que el Ahkian quería.
Había visto a los seres romperse bajo la tensión de la batalla.
Algunos de ellos se suicidaron. Algunos corrieron a la
batalla, esperando que el enemigo complete esa tarea por
ellos.
Odoon, siendo pacifista, había elegido la última opción, sin
importarle cuanto dañara a Zebrina.
Stealth, sin embargo, sí le importaba. Nunca le haría eso a
ella. Levantando sus armas, calmadamente apuntó y apretó
los gatillos, disparando el arma de la mano del macho.
—Joder.
El Ahkian trató de usar su otra mano.
Stealth también disparó esa pistola.
—Puedo hacer esto toda la rotación del planeta.
—Mátame, máquina sin emociones —Las palabras del
macho estaban bordeadas de histeria—. Mátame.
—¿Cuál es tu plan, Odoon? —preguntó una hembra en voz
baja—. Te acercas a nosotros ¿Y qué pasa? ¿Le disparas?
No puedes sostener un arma.
Hubo una pausa.
—¿Quieres morir? —La hembra levantó la voz—. No. No.
No. No permitiré eso —Las armas fueron arrojadas en
dirección a Stealth—. Estamos desarmados, cyborg y hay
cuatro bebés con nosotros. Si nos vas a matar, mátanos
ahora.
—Os estamos rescatando, no matando —Zebrina le gritó
esa verdad—. Soy Zebrina. El cyborg que lastimó a Odoon
es Stealth, mi macho. Ayudaste en el parto de nuestro hijo.

THE MAN OF STARS 210


—Debería haber sabido que era ella. Siempre se trata de
ella —El comentario de la hembra fue demasiado suave para
que su humano lo oyera—. Odoon ha recibido un disparo —
Dijo eso más fuerte—. Detuve el sangrado... por ahora pero
no puede caminar.
—Iros. Dejadme —Les dijo el macho Ahkian—. Lleva a los
niños a un lugar seguro.
—No te voy a dejar y no puedo llevar a los bebés sola —
Discutió con él—. Hay demasiados de ellos.
—¿Stealth? —Zebrina lo miró fijamente— ¿Qué debemos
hacer? Podría lastimarte de nuevo.
—La probabilidad de eso es baja —Los llevó alrededor de la
roca, usando su cuerpo para proteger a su hembra.
Odoon estaba tendido en el suelo, con las piernas
ensangrentadas por múltiples heridas de proyectiles. Tiras
de tela fueron atadas alrededor de sus muslos superiores.
La cabeza del macho descansaba en el regazo de una
hembra. Llevaba una chaqueta blanca, como la que los
sanadores se ponen a menudo. La prenda estaba manchada
de rojo.
Cuatro descendientes recién fabricados yacían a su lado,
arrullando, pateando sus piernas regordetas, inocentemente
inconscientes de todo lo que los rodeaba.
—Bebés en el campo de batalla —susurró su hembra.
Stealth le sonrió, divertido por su observación. Le devolvió la
sonrisa a él.
—Por supuesto, crees que mi situación es divertida —La
cara de Odoon se oscureció—. A diferencia de algunas

THE MAN OF STARS 211


máquinas —Echó un vistazo al pecho salpicado de
proyectiles de Stealth. Un daño que fue responsable de
infligir—, soy un ser y siento dolor cuando me han disparado.
Ese conocimiento debe darte placer.
Sintió dolor cuando le dispararon. Stealth apretó los labios,
su alegría evaporándose. Simplemente no hablaba de eso,
no queriendo dañar emocionalmente a su hembra.
—No es un má...
—Tenemos que movernos —Stealth interrumpió su defensa.
Permanecer los hacía objetivos fáciles de matar—. Hay
siete... no, cuatro seres no identificados en el terreno.
Tres de los seres ya no aparecían en sus escaneos de forma
de vida. Habían muerto o se habían aventurado fuera de su
alcance.
—No es seguro quedarse aquí.
—Vete —Odoon los alejó de él—. Toma a los niños y
dejarme aquí.
El conocimiento del macho sobre Zebrina debía fallar si creía
que ella permitiría que eso sucediera.
Stealth evaluó sus opciones. O él o Vow tendrían que
transportar al macho.
¿Estás dispuesto a liderar el grupo? Le preguntó a su hijo en
privado. Tendrás que tomar cualquier fuego enemigo que
recibamos. Eso dolerá.
Puedo hacerlo papá. Su hijo vibró de emoción.
Papá. El corazón de Stealth se apretó. Su hijo lo había
reclamado como su padre.

THE MAN OF STARS 212


—Te llevare, Ahkian.
—Jódete —Odoon curvó su labio superior.
—Asumiré que es un sí —Stealth no pudo resistirse a
provocar al Ahkian.
—Eso es un sí —Zebrina respondió por su amigo—. Aunque
merece ser dejado atrás. Te disparó. Varias veces —Su
indignación en su nombre alivió su dolor—. Puedo tomar dos
de los bebés —Recogió cuidadosamente a los pequeños
humanoides, sosteniéndolos contra su pecho—, merecen
que los salven.
—Puedo llevar a los otros dos bebés —La sanadora acunó
a las recién fabricadas descendencias en sus brazos.
Stealth agarró a Odoon y lo levantó sobre su hombro
derecho. El macho era más pesado que Zebrina pero mucho
más liviano que Boom. La tristeza revoloteó a través de sus
circuitos, brevemente y luego desapareció, su atención
sobre el posible peligro.
—Ten cuidado con él, cyborg —La sanadora bailaba a su
alrededor, sus manos ocupada por la descendencia—. Es un
humanoide, no una máquina.
—Nadie aquí es una máquina —El tono de su hembra era
agrio—. Mi macho es siempre cuidadoso. Agradece que
Stealth esté de acuerdo en llevarlo.
Fue cuidadoso con ella y con su hijo, no necesariamente con
todos los demás.
¿Hijo? Habían estado parados por demasiado tiempo.
Quédate detrás de mí.
Su hijo se hizo eco de su orden.

THE MAN OF STARS 213


—¿Stealth? —Su preocupación se había transferido a Vow.
Stealth vio eso en sus ojos expresivos—. Podrías recibir un
disparo.
—El riesgo es bajo, mi hembra —Ahora solo había otras tres
formas de vida apareciendo en los escaneos y estaría
monitoreando la situación desde detrás de su tropa.
Su hijo también era extremadamente cauteloso, caminaba
más lento de lo que lo haría una descendencia humana,
balanceando sus armas de derecha a izquierda y viceversa.
Tomó su papel en serio. El pecho de Stealth se expandió con
orgullo. Sería un gran guerrero una vez que hubiese
completado su entrenamiento.
Las tres formas de vida se acercaron. Vow se detuvo,
levantó la mano como Stealth había hecho antes, lo que
indica que deberían detenerse.
Espera un visual. Stealth entrenó a su hijo.
Una de las formas de vida se superpuso con otra, lo que
indicaba que él o ella estaban siendo llevados. Era poco
probable que el enemigo llevara a un ser a la batalla con
ellos.
Aunque eso podría suceder. Podría ser un truco.
—¿Es seguro? —preguntó un macho— ¿Se han ido?
—Es uno de nosotros —La sanadora confirmó las
sospechas de Stealth—. No lo mates.
—Los llevaremos a un lugar seguro —Zebrina extendió esa
oferta a los recién llegados—. Únanse a nuestro grupo. Mis
machos os protegerán.

THE MAN OF STARS 214


—Tengo un arma —El macho salió de una parte boscosa del
terreno. Sostenía un arma. Una descendencia masculina se
aferraba a su espalda. Había una hembra detrás de él—.
Matamos a dos Palavians —Cojeó, con la pierna derecha
ensangrentada.
—Necesitas detener ese sangrado —La sanadora
entrecerró los ojos hacia él.
—Tenemos que seguir moviéndonos —Stealth les informó.
El campo de batalla no era el sitio para reparar— ¿Puedes
caminar?
—Estoy caminando, ¿no? —El macho resopló—. Puede que
no sea una máquina, pero lo lograré.
—Nadie aquí es una máquina —Murmuró la mujer de
Stealth.
Todas las formas de vida se contabilizan. Su hijo lo miró.
Muévete más rápido pero mantente alerta. Stealth no
correría ningún riesgo con él o con Zebrina
Los tres seres se replegaron en su tropa. Salieron del campo
agrícola y se aventuraron a lo largo del camino principal.
—Esto es humillante —se quejó Odoon—, soy un hombre
adulto. No debería necesitar que me lleven.
—Mis hermanos tuvieron que llevarme muchas veces fuera
del campo de batalla —Stealth ofreció esa información.
Boom a menudo lo había levantado sobre su hombro,
transportándolo a un lugar seguro—. Una vez mis piernas
fueron cortadas a través de mi cuerpo. Solo los cables las
conectaron a mi forma.

THE MAN OF STARS 215


El Modelo C había caminado lentamente, permitiendo que
Stealth se reparara antes de reunirse con el oficial de la
Alianza Humanoide. Si el humano lo hubiera visto en esa
condición, habría sido dado de baja Stealth, lo habría
matado por el delito de ser dañado.
—Es una suerte que seas una máquina y no sientas dolor —
Odoon estaba decidido a ser un imbécil.
—Los cyborgs sienten dolor —Era medio orgánico ¿Por qué
ningún ser se dio cuenta de eso? Su mirada se desvió hacia
su hembra. Casi ningún ser se dio cuenta de eso. Ella
siempre había asumido que podría lastimarse—. La agonía
casi apaga mis procesadores.
—Eso no es posible —El Ahkian rechazó lo compartido—. Si
pudieras sentir dolor, no me estarías cargando. Tu espalda
está hecha pedazos.
—Su frente está en peor condición —La mujer de Stealth
miró por encima del hombro, la ira ardiendo en sus ojos—. Y
todos sabemos quién es responsable de esas heridas.
Los labios de Stealth se torcieron. Era apasionada en su
defensa de él.
—Los Cyborgs están fabricados para no apagarse
fácilmente y estamos entrenados para soportar —Su dolor
no había sido considerado en su decisión—. Te llevo porque
haré cualquier cosa por mi hembra.
Ese era el ser al que el hombre le debía su rescate.
—¿Es por eso que nos salvaste, para complacer a tu mujer?
—Preguntó Odoon como si fuera una mala razón.

THE MAN OF STARS 216


—Sí —Nunca pondría a su mujer, su hijo en peligro por
extraños. El Ahkian resopló.
Zebrina los miró de nuevo.
—Te salvó porque era lo correcto de hacer.
Esa no era la verdad.
—No yo...
—Lo hiciste —Su tono no permitió discusión. Su hembra
estaba decidida a hacer que parezca que se preocupaba por
los Ahkians.
No lo hacía. Había visto cómo se comportaban los humanos
y los humanoides. Se traicionaban los unos a los otros
cuando servía a sus propósitos, pensaban en esclavizar y
matar a los de su clase.
Los únicos seres vivos que le importaban eran su hembra y
su hijo.
Los salvamos, ¿no, papá? Vow se aferró a ese hecho como
si fuera importante para él. Los Palavians los habrían
matado a todos si no nos hubiéramos unido a la pelea.
La mayoría de ellos habrían muerto. Algunos de ellos
podrían haberse escondido hasta que el enemigo los hubiera
dejado.
Tuvimos que matar a esos machos. Su hijo expresó su daño
emocional por terminar la esperanza de vida.
Los seres que matamos decidieron luchar. Procesaron que
podían morir. Como él tenía procesado que podría morir
cada vez que entrara en un campo de batalla. Y ellos no
hubiera dudado en matarte.

THE MAN OF STARS 217


Todos los machos habrían terminado con la esperanza de
vida. Lo había visto en sus ojos.
Eran ellos o yo. Su hijo continuó haciendo hincapié en sus
procesadores.
Eran ellos o todos los que protegiste. Stealth lo corrigió. No
puedes proteger a tu madre si estás muerto. Siempre
salvaguardaría a Zebrina pero le dio esa misión a Vow
también. No puedes proteger a la descendencia en sus
brazos o en los brazos de la sanadora.
No le importaban otros seres, pero a su hijo sí. Tenía la
misma clase de corazón que su madre.
Matar a los seres era lo correcto. Su hijo concluyó, el daño
emocional en su transmisión disminuyó considerablemente.
Eso era lo correcto. Confirmó Stealth, usando sus palabras.
Miró por encima del hombro a Odoon. Los Ahkians
pensaban que los cyborgs eran máquinas de matar. Si
hubiera escuchado sus transmisiones privadas, se daría
cuenta de cómo de equivocados estaban.
Atravesaron el hueco de la pared y entraron en su granja.
Las cabezas se volvieron en los terrenos ocupados por los
seres que habían rescatado. El alivio cruzó las pálidas caras
azules cuando fueron reconocidos.
Esa fue una experiencia inusual para Stealth. Estaba
acostumbrado a ser temido, siendo visto como el arma que
muchos seres creían que era.
Boom y Lethal habrían encontrado la respuesta de los
Ahkians tan desconcertante como él lo hizo.

THE MAN OF STARS 218


Había sido la primera batalla que había librado sin sus
amigos. Había habido momentos en que había vuelto la
cabeza y creía haber visto a los machos a su lado.
No habían estado allí. Su hembra y su hijo lo acompañaban
ahora.
—Lo hiciste bien, Vow —Transmitió ese elogio para que
todos a su alrededor pudieran oírlo—. Estoy orgulloso de
haber peleado contigo.
—Estoy orgulloso de pelear contigo también, papá —Su hijo
estaba radiante—. Voy a hacer guardia en la entrada.
—Has hablado como un verdadero guerrero —Stealth
sonrió—. Me reuniré contigo pronto.
—Te llamó papá —Susurró Zebrina. Una hembra Ahkian se
llevó a los bebés con ella.
—Lo hizo —Su hembra y su hijo habían sobrevivido a la
batalla con poco daño y se había ganado el título de papá.
Una vez que bajara al desagradecido macho Ahkian, lo
celebraría.

THE MAN OF STARS 219


Capítulo 16

Zebrina observó a su hijo mientras caminaba hacia la


entrada y miraba hacia afuera. Su mejilla estaba casi curada.
Su bebé no debería tener ningún dolor.
Pero el peligro no había pasado. Sería el primer ser que el
grupo de asalto encontraría si atacaran desde esa dirección.
—Debería hacer guardia con él —Protegería a su hijo.
—Eso no es necesario —Stealth rozó su costado. Odoon
estaba colgado casualmente sobre su hombro—. La
probabilidad de que seamos atacados por segunda vez es
3.0619 por ciento.
Eso fue tranquilizadoramente bajo.
—¿Porque los Palavians no tuvieron éxito en la primera
ocasión?
—Porque solo hay dos cyborgs en el planeta y los dos
vivimos aquí —La sangre goteaba por el cuerpo de su
guerrero. Trozos de carne colgaban de su pecho. Le dolía
pero sus ojos brillaban con diversión, su sentido del humor
ileso—. Hay objetivos más fáciles para las incursiones.
—Ningún lugar es seguro —La amargura envolvió las
palabras de Odoon—. Atacaron mi domicilio y compartimos
una frontera.
—¿Les dijiste a extraños que compartías una frontera con
cyborgs? —Dudaba que lo hiciera, su ira hacia el macho
aumentando una vez más—. ¿O somos un pequeño y sucio
secreto?

THE MAN OF STARS 220


Se incluyó cuando se refería a sus machos. Eran parte de
ella.
Odoon, al contrario, no era nada para ella. Ya no eran
amigos. Nunca lo perdonaría por dispararle deliberadamente
a su macho... varias veces.
—Los seres odian a los cyborgs —Murmuró el Ahkian, su
excusa débil.
—Los seres también nos temen —Stealth no parecía
ofenderse por esa grosera respuesta. Su macho no era tan
sensible como su hijo—. Vow estará a salvo, mi hembra. Si
siento que los seres se acercan al campo agrícola, me uniré
a él.
—Yo también me uniré a él —Miró a su hijo-. Yo...
—Odoon requiere atención médica —La sanadora los
interrumpió—. Discutan esto más tarde.
Odoon estaría muerto si no fuera por ellos y Stealth requiere
atención médica. Además, sus heridas han sido infligidas por
el macho Ahkian.
La sanadora no había expresado preocupación por su
guerrero. Zebrina lanzó una mirada dura a la hembra y la
condujo al domicilio.
Estaba lleno de seres. Sus objetos habían sido arrojados a
todas partes, algunos de sus cosas rotas Las paredes
estaban decoradas con manchas negras y huellas de manos
rojas
—Despejen el soporte horizontal —Señalo con la mano la
zona de consumo de alimentos—. Colocaremos a Odoon
allí.
—Primero tenemos que limpiar la superficie con un paño de
limpieza —La sanadora agarró dos cuadrados de tela y los

THE MAN OF STARS 221


movió, refrescándolos—. No será tan estéril como me
gustaría, pero tendrá que funcionar —Frotó el soporte
horizontal.
Zebrina abrió un compartimento en la pared. Estaba vacío.
—¿Dónde está el paquete médico que guardé aquí?
—Los tres paquetes se han utilizado por completo —Le dijo
un Ahkian.
—¿Tenías tres paquetes de medicinas? —La sanadora hizo
una pausa en su limpieza para mirarla.
—Tengo un hijo activo —Su hijo siempre estaba probando
sus límites, dañándose a sí mismo—, y tengo más de tres
paquetes de medicamentos en el domicilio —Mantenía uno
en cada cámara principal. Disminuía el tiempo de respuesta.
—Tu hijo es un cyborg —La sanadora se arremangó e hizo
una limpieza de sus dedos, manos, antebrazos—. Los
paquetes medicinales no son necesarios para él. El sana con
rapidez.
—Sangra y siente dolor como el resto de nosotros —Zebrina
puso los ojos en blanco. La sanadora estaba allí en su
nacimiento. Debería saber eso—. Encontraré un paquete
médico para que puedas utilizar.
—Te acompañaré, mi hembra —Stealth arrojó a Odoon en
el apoyo horizontal.
—Ten cuidado con él —La sanadora frunció el ceño.
Zebrina la fulminó con la mirada. Su macho también resultó
herido, pero a la sanadora no le importaba él. Era un cyborg.
Stealth llegó a su lado en dos zancadas.
—¿Quieres que la mate? —Sonrió.

THE MAN OF STARS 222


Dos hembras Ahkians chillaron, huyendo de él. Zebrina
desvió su mirada hacia él.
—Deja de molestarlos, mi macho. Estoy tratando de refutar
los rumores sobre los cyborgs, no reforzarlos —Su
comentario simplemente hizo que su sonrisa se
ensanchara—. Ven conmigo — Agarró una de sus manos,
saboreando el toque de él, el calor tranquilizador de su
palma—, veré tus heridas.
—Las heridas de Odoon son nuestra prioridad —La
sanadora la llamó.
—Las heridas de Odoon podrían ser una prioridad para ti —
Murmuró Zebrina—. Mi primera preocupación es cuidar a
mis machos.
Su guerrero se rio entre dientes.
—Estoy sanando, mi hembra feroz y nuestro hijo sufrió poco
daño.
—Gracias a ti —Abrió otro compartimento. Estaba desnudo
también—. Nos protegiste a los dos. No creas que no me di
cuenta de eso.
—Nunca dudaría de tus habilidades de observación —La
acompañó mientras buscaba en una cámara de
almacenamiento.
Faltaban el paquete médico y muchos de sus otros
suministros. Era una situación de emergencia. Eran
bienvenidos a lo poco que tenía pero se preguntó si les
habrían mostrado a sus cyborgs la misma generosidad si se
habrían invertido sus posiciones.
Los tres paquetes habían sido descubiertos. Ahora sabiendo
donde quedaba el resto de los que faltaban, se dirigió hacia
la cámara privada que compartía con Stealth.

THE MAN OF STARS 223


Estaba ocupada. Los bebés se acurrucaban el uno al otro en
el soporte para dormir, los pequeños seres se arrullaban
alegremente. El espacio apestaba a pañales sucios.
Las dos hembras que atendían a los bebés miraron hacia
arriba cuando entraron. Sus rostros se pasaron al azul más
pálido cuando vieron a Stealth.
—Nos iremos —Dijo una de ellas, buscando a un niño
retorciéndose.
—Permanece aquí. No los muevas —Zebrina abrió un
compartimento y agarró el paquete médico almacenado
allí— ¿Podría uno de ustedes llevar esto al sanador situado
en la cámara de consumo de alimentos? Lo necesita para
un Ahkian herido.
—Haré eso, Zebrina —La hembra más joven lanzó una
mirada nerviosa a Stealth antes de arrebatarle la mochila de
los dedos.
—Gracias —No sabía el nombre de la hembra. Muchos de
los Ahkians nunca habían hablado con ella ni se
presentaron. Había sido una marginada desde la primera
rotación de planeta.
Sin embargo, todos sabían su nombre. Y ahora, se vieron
obligados a reconocerla. Se estaban quedando en su casa,
habían sido rescatados por sus machos.
—Hay más suministros en los compartimentos —Retrocedió
fuera de la cámara, cediéndoles el espacio—. Usa lo que
necesites —Cerró las puertas entre ellos.
—No te quedará nada —murmuró su guerrero mientras se
movían hacia la cámara de Vow.
—Teníamos muy poco cuando llegamos aquí —Había
cambiado las piedras solares que había acumulado en Ahki

THE MAN OF STARS 224


para el campo agrícola, el domicilio y los suministros—.
Sobrevivimos.
La cámara de Vow estaba desocupada. Sospechaba que era
porque era claramente suya. Sus vestimentas, armas rotas
y otros artículos personales estaban distribuidos por todas
partes en el espacio. Los Ahkians le temían a su hijo, no se
arriesgarían a enojarlo.
No se dieron cuenta de que nunca los lastimaría a
sabiendas, que había buscado su aceptación por encima de
todo lo demás. Había sido herido por su rechazo.
Miró a su padre. Le había dado a su hijo un sentido de
pertenencia, un papel para jugar en el universo. Los dos
machos se entendieron.
Su guerrero tomó una piedra, la examinó y la volvió a dejar.
Cada superficie horizontal, excepto el soporte para dormir
estaba cubierto de cosas. Su hijo tenía afinidad por los
objetos que nadie más quería.
—¿Deseas volver con tu amigo dañado? —Stealth le dio un
codazo a una destrozada pantalla de visualización,
—Odoon ya no es mi amigo —Extrajo un paquete médico de
un compartimento en la pared—. No debería haberte
disparado —No había excusa para su acción—. Quería
matarlo por eso.
—Funcionaba mal —Su guerrero estudió una bola de
alambre—. He visto suceder eso en la batalla. Los cerebros
orgánicos pueden soportar una cantidad limitada de
violencia antes de una rotura. Es una debilidad humana y
humanoide.
Lo miró fijamente, sin haber considerado esa posibilidad.
—Es pacifista y se vio obligado a luchar, a defenderse a sí
mismo y a los demás.

THE MAN OF STARS 225


Odoon había creído que Waaban Two sería un planeta
pacífico, pensó que había estado escapando de la guerra,
solo para enfrentarse a seres hostiles en su llamado paraíso.
Había visto a los Ahkians que había rescatado, hembras,
niños, bebés, asesinados, había sido incapaz de
protegerlos.
Eso rompería a un ser.
—Todavía no debería haberte disparado —Aunque entendió
cómo, en su mente destrozada, mezclaría a un enemigo
pasado con un aliado presente.
—Estoy reparando —Su guerrero no parecía guardar rencor
contra el Ahkian.
Tampoco debería abrazarlo. Aunque perdonar a Odoon
sería difícil.
—Todavía te duele —Buscó en el paquete de medicinas,
encontró la pistola de inyección, lo llenó de inhibidores del
dolor—. Abre tu prenda —Lo que quedaba de ella.
—Hay inhibidores del dolor limitados —Stealth sacudió la
cabeza—. Guárdalo para uno de los humanoides.
—Si rechazas los inhibidores del dolor, nuestro hijo los
rechazará —No iba a ceder en el asunto. Su macho estaba
en agonía. Era tan merecedor de cuidados como alguien
más lo era— ¿Quieres que sufra la próxima vez que esté
herido?
Stealth suspiró.
—No —Tiró de los restos de su traje de vuelo, triturándolos.
Las tiras revolotearon hacia el suelo. Se paró frente a ella,
descaradamente desnudo.
Su mirada bajó. Estaba excitado, su polla dura.

THE MAN OF STARS 226


—Las batallas en Ahki no te excitaron así —Presionó el
hocico de la pistola inyectora contra su pecho y apretó el
gatillo.
—Tú me excitas, no la batalla —Su cyborg le sonrió—. En
Ahki, tuve que reprimir mis sentimientos por ti. Estábamos
siendo observados y nunca te colocaría en un peligro así.
Aquí, soy libre de mostrar mi deseo.
—Eres franco —Cambió la pistola del inyector por paños de
limpieza—, pero también estás herido. Deberías guardar tu
energía para la curación.
—Criar contigo requiere muy poca energía —Amplió su
postura—, y produzco más nanocibóticos durante el mismo.
Repararía más rápido.
Entrecerró los ojos hacia él. Si no fuera un cyborg, diría que
estaba mintiendo. Pero los cyborgs se limitaban a decir la
verdad.
—Solo a ti te gustaría follar con tu carne colgando de tu
marco.
Frotó los paños de limpieza sobre él, quitando la sangre
derramada.
—No follamos. Criamos —Se quedó quieto mientras ella lo
atendía—. No todas las partes de mí han sido dañadas.
—Ya veo eso —Sus labios se torcieron.
Lo rodeó, limpiándole sus hombros, espalda, las mejillas
apretadas del culo y más abajo. Sus músculos se ondularon
debajo de las telas, flexionándose y relajándose.
Había comenzado a sanar. Algunas de las heridas se habían
recuperado. Una delgada capa de piel dorada se había
formado sobre su marco plateado expuesto. Los proyectiles
habían sido expulsados.

THE MAN OF STARS 227


—¿Hay un lugar pacífico en algún lugar de este universo?
¿Encontrarían batallas dondequiera que fueran? Limpió sus
dedos uno por uno. La piel en sus nudillos estaba
desgarrada.
—Crearemos nuestra propia paz —Se inclinó hacia ella, con
los hombros anchos y la cintura estrecha—. Si mis cálculos
son incorrectos y los Palavians atacan de nuevo, no pasarán
la pared de nuestro hijo. No permitiremos eso. Estarás a
salvo en este domicilio.
No era su seguridad lo que le preocupaba.
—¿Es eso lo que han hecho tus hermanos? ¿Crearon su
propia paz en la Patria? —Levantó los trapos de limpieza de
sus brazos.
—Está prohibido pelear en la Patria, fuera de las cámaras de
entrenamiento.
Bajó su gran cuerpo para permitir que lo cuidara más
fácilmente. Pasó la tela sobre su clavícula, su cuello,
evitando sus heridas. Viajarían a la Patria eventualmente. Su
hijo merecía ver un lugar donde todos eran como él, donde
era normal y no una excepción.
Pero cuando hicieran eso, buscaría ser más independiente
y no estaba lista para eso. Aún no.
Navegó por los pectorales y abdominales de Stealth. El daño
a su cuerpo era peor allí... por las acciones de Odoon.
—La nave Ahkian no llega por varias rotaciones de planetas.
Pueden pedir que se queden en nuestro campo agrícola.
Stealth podría estar compartiendo espacio con el macho que
le había disparado. Múltiples veces.

THE MAN OF STARS 228


—Que se queden aquí o se vayan es tu decisión —Ahuecó
su barbilla, levantando su mirada hacia la de él—. Te
apoyaré.
Realmente no mantuvo las acciones del macho contra él.
Porque había conocido el dolor y la pena. Entendía lo que
otros habían soportado. Tenía una empatía rara en un ser.
El amor por su macho la llenó.
—Tu apoyo es importante para mí.
Se arrodilló ante él. Su polla se balanceó y ella sonrió.
—Tu cuerpo debe estar anticipando más que una limpieza.
—Eso aceleraría mis reparaciones —Empujó las caderas
hacia adelante.
Miró hacia arriba a su forma salvaje, a las heridas que había
sufrido para salvar a su amigo roto y para protegerla, la
agonía que debió haber soportado.
—Debería chuparte para acelerar tu curación. Eso es lo que
haría una hembra considerada.
Necesitando tocarlo directamente, sin barreras entre ellos,
dejó caer los paños de limpieza y deslizó sus dedos sobre
sus huesos de la cadera. Se estremeció, sus hombros
temblando.
—Cuando se trata de complacerte, no soy considerada —
Paso los dedos a lo largo de su eje. Una gota de presemen
se formó en su punta—, soy egoísta.
Se inclinó hacia delante y sacudió la cabeza de su miembro
con la lengua. Su esencia impregnada de nanocibóticos,
bailaba por su carne, burbujeante y efervescente.
—Planeo chuparte porque me encanta la sensación tuya en
mi boca —Giró su lengua alrededor de su borde y sus dedos

THE MAN OF STARS 229


se doblaron en puños—. Anhelo saborearte, la forma en que
me llenas, los sonidos que haces cuando te llevo profundo
—Selló sus labios alrededor de su punta e inhaló. Sus
nudillos se blanquearon. Lo liberó con un jugoso
chasquido—. Estoy haciendo esto por mí.
Y estaba haciendo esto por él. Porque lo adoraba. Su placer
aumentaba el suyo.
—Mi hembra —Su voz era tan profunda como el espacio,
mojando su coño.
—Mi macho —Empujó sus labios sobre él, aventurándose
más arriba en su eje.
Su circunferencia la estiró hasta el punto del dolor. Su
longitud era inmanejable. No podía soportarlo todo. Se
deslizó dentro de ella hasta que su punta tocó la parte
posterior de su garganta.
Cubrió el resto de su polla con sus dedos, agarrando su base
y lo miro. Sus labios se habían aplanado en una delgada
línea blanca. Sus ojos estaban parcialmente cerrados.
Apenas mantuvo su control.
El desafío de empujarlo al límite la llamaba. Retrocedió,
arrastrando sus labios a lo largo de él, y empujando hacia
adelante, retrocedió y empujó hacia adelante, su ritmo lento
y constante.
Se meció, nunca se aventuró más de lo que ella lo había
llevado originalmente, follando su boca con precisión cyborg.
Se aferró a su guerrero, acunando su eje con su lengua,
saboreando el sabor metálico y masculino de él.
Podría haberle perdido en la rotación de este planeta. Los
cyborgs eran difíciles de matar pero morían en la batalla. Ese
agradecimiento suavizó su toque. Asombro y maravilla
llenándola, aumentando su pasión en espiral.

THE MAN OF STARS 230


Su ritmo se intensificó. Sus bolas golpearon contra su
barbilla. La piel de su cara se tensó.
Cada indicio de suavidad en él se evaporó. Era músculo duro
sobre su duro marco, sus muslos implacablemente sólidos
contra ella, no cedía en su forma.
Este macho era de ella. Y ella era suya.
De alguna manera se habían encontrado en un universo
destrozado por guerras, la unión de dos almas, resultando
en un amor para ser apreciado y protegido. Que ambos
hubieran sobrevivido, estuvieran juntos, era un milagro, un
acto de maravilla inexplicable.
Acarició sus caderas, su base e hizo un ruido parecido a una
bestia, la emoción en el bajo sonido, follando su boca con
más vigor. Sus labios zumbaron. Le dolía la mandíbula. Ella
chupó y lamió y tragó.
—Mi hembra —Agarró su cabello, retorciendo sus dedos en
sus rizos, las punzadas de dolor sobre el cuero cabelludo
que la estimulaban—. Mi hembra. Mía.
Era suya, toda suya, por los siglos de los siglos. Zebrina se
encontró con la mirada de su guerrero, sin ocultar ninguna
de sus emociones, dejando que su amor brille de sus ojos.
Le sacudió.
—No puedo. No puedo.
No tenía que contenerse por ella. Rozó sus nudillos contra
sus bolas.
—Zebrina —Rugió, empujando hacia adelante, la fuerza de
su liberación sacudió los objetos en la cámara.
Su semen salpicó contra el fondo de su garganta. Tragó
saliva. Un placer, extremo y alucinante, fluyó por su cuerpo,

THE MAN OF STARS 231


enroscándose en su estómago. Gritó, el sonido amortiguado
por su polla.
Más de su esencia la bombardeó. Tragó, gritó y el ciclo se
repitió de nuevo. La cámara se arremolinaba a su alrededor.
Las luces se atenuaron y se iluminaron.
Sus piernas temblaron más y más hasta que cayó. Su polla
se deslizó de sus labios. Sus rodillas golpearon contra las
baldosas del piso. Hizo una mueca. La atrajo hacia él,
presionando su rostro contra su pecho devastado.
—Te amo, mi macho —Susurró eso en su piel, demasiado
aturdida por la liberación para contener esas palabras.
Él, con sus sentidos cyborg mejorados, la escuchó.
—Te amo, mi hembra.
Su guerrero la amaba. Ella sonrió.
Le acarició su cabello. Descansó contra él, los temblores
posteriores después de su relajación.
El domicilio no era grande. Todos los seres deben haber
escuchado a su cyborg venirse.
Su cara se calentó. —Si eso no convence a los Ahkians, que
no eres una máquina sin emociones, nada lo hará.
Stealth se echó a reír.

THE MAN OF STARS 232


Capítulo 17

La predicción de su hembra de que los Ahkians buscarían


refugio con ellos había sido precisa. Los seres no se fueron
y ella, siendo la humana de corazón blando que era, aceptó
eso.
Stealth, a su vez, aceptó su decisión. Aunque no lo procesó
por completo su necesidad de albergar seres que
previamente la habían rechazado a ella y a su hijo, la hizo
feliz y eso era todo lo que le importaba.
Los humanoides erigieron endebles domicilios temporales
dentro de las paredes. Los ciclos de descanso alternados,
algunos de ellos durmiendo mientras el sol estaba alto en el
cielo. Vow los escoltó cuando buscaron comida y enterraron
a sus muertos.
Su hijo y él no habían sido abrazados por los Ahkians.
Demasiados de ellos habían matado a sus seres queridos
para que hicieran eso. Pero fueron tolerados, considerados
necesarios para la supervivencia.
Odoon, por el contrario, los había evitado activamente. El
humanoide estaba avergonzado por su mal funcionamiento
durante la incursión de los Palavian, no quería recordatorios
de que había sucedido.
Esa respuesta impulsada por la emoción era tonta y
peligrosa. Si no era abordado y reparado, el mal
funcionamiento del macho volvería a ocurrir.
Bueno. Finalmente se van. Vow se movió al lado de Stealth.

THE MAN OF STARS 233


Los Ahkians estaban reuniendo sus pertenencias,
derribando sus improvisados domicilios. La nave estaba
llegando por ellos esta rotación planetaria.
¿No disfrutaste de su compañía? Stealth miró a su hijo,
sorprendido. Parecía disfrutar de su papel como su
protector, su confianza aumentaba exponencialmente a lo
largo de la duración.
Puede que ya no sean nuestros enemigos, pero no son
nuestros aliados. Su hijo era impresionantemente
perceptivo. No se puede confiar completamente en los
Ahkians. Y están interfiriendo con mi entrenamiento.
Reanudaremos tu entrenamiento al amanecer. Su hembra
requeriría ayuda para limpiar el domicilio, hacer un inventario
de los suministros restantes.
Deberíamos reanudar el entrenamiento al atardecer. Su hijo
rechazó su decisión. Ya estoy detrás de todos los demás.
Los otros descendientes están peleando en falsas batallas
con naves voladoras y estoy atrapado aquí, protegiendo a
los Ahkians por nada.
Su hijo debía estar comunicándose con esos descendientes.
Eran cyborgs de segunda generación, nacidos libres, seres
como él. Eso complació a Stealth.
Peleaste en una verdadera batalla.
Eso lo distinguiría de los demás. La descendencia era
apreciada. No se les asignaban tareas peligrosas.
Les dije eso y ahora Choice está decidido a patearme el culo
en mi primer simulacro de batalla. Su hijo cuadró los
hombros. Tengo que estar preparado para ello o perderé su
respeto.
Choice es un modelo C. Como su amigo Boom. El corazón
de Stealth se apretó, esa pérdida quedándose con él.

THE MAN OF STARS 234


Siempre quieren patear el trasero de todos. Te mostraré
cómo puedes derrotarlo.
Es más grande que yo, tiene más ciclos solares. Su hijo
dudaba de sus habilidades.
Los modelos C, como otros oponentes, tienen debilidades.
Estaba 62.0295 por ciento seguro que Vow podría ganar en
una batalla simulada. Sin embargo, se requerirán dos ciclos
solares de entrenamiento o más para obtener las habilidades
necesarias. Le advirtió a su descendencia.
Lo completaremos en un ciclo solar. Su hijo estaba divertido
y determinado. No puedo esperar tanto tiempo. Hizo una
pausa. Realmente quiero derrotar a Choice. Mostró una
sonrisa. Me gusta él.
Su hijo era un verdadero cyborg. Los labios de Stealth se
torcieron. Veía la derrota de sus hermanos en simulacros de
batallas como una muestra de afecto.
—¿Qué están transmitiendo ustedes dos? —Su hembra
caminó hacia ellos, una descendencia Ahkian se balanceaba
en una de sus caderas. La descendencia la amaba, parecía
sentir que era un buen ser, una gran madre.
—Estamos discutiendo el entrenamiento —Le pasó un brazo
por la cintura. Tan pronto como él la tocó, se calmó.
Reparaba su daño emocional— ¿Estamos guardando a
ésta?
—No —Se frotó la nariz contra la descendencia y el pequeño
ser se rio—. Tenemos que devolverla. Yo...
—Los humanoides se están acercando —La cabeza de Vow
se volvió en esa dirección—. Podrían ser hostiles.
Sacó sus armas.

THE MAN OF STARS 235


—No les disparen —Zebrina le entregó la descendencia a
una hembra que pasaba—. No son hostiles. Algunos
miembros de la tripulación acompañaran a los Ahkians a su
nave.
—Obtendré una visión primero —Su hijo corrió a la velocidad
de cyborg hacia la brecha en la pared.
—Obtendrá una visión primero —Agarró la mano de
Stealth—. Deberíamos ir con él, asegurarnos de que no
apretará el gatillo.
Su hijo disfrutaba disparando a las cosas. Acortó su zancada
para que coincida con la de ella.
—Míralo. Está solo.
Ella suspiró.
Su hijo vigilaba la entrada del campo agrícola. Los Ahkians
se habían alejado de él.
—Pensé que podrían hacerse amigos de él una vez que se
dieran cuenta de que los cyborgs no eran máquinas sin
emociones —Su hembra frunció el ceño—, pero no lo
hicieron.
—Se comunica con la descendencia en la Patria —Stealth
buscó disminuir su daño emocional—. Lo respetan y les cae
bien.
—¿Se comunica con la descendencia? —Lo miró con los
ojos muy abiertos con asombro
Él asintió.
—Nuestro hijo tiene amigos —Ella sonrió, balanceando su
brazo—. Son amigos de larga distancia... por ahora, pero
todavía cuentan.

THE MAN OF STARS 236


Stealth nunca había dudado de que su hijo se haría amigo
del otros descendientes cyborgs. Su preocupación era por
su hembra. Si los Ahkians se iban. No tendría a nadie más
que a él y Vow para conversar.
—Podría establecer una línea de comunicación segura con
las madres de esos descendientes.
Su hembra se detuvo abruptamente.
—Podrías... ¿qué? —Lo miró fijamente. Sus ojos se
volvieron brumosos con lágrimas no derramadas.
Se alarmó.
—No es un requisito comunicarte con ellas —Quería hacerla
feliz—. Yo...
—Quiero comunicarme con ellas —Agarró su mano con las
de él, aferrándose a él como si le preocupara que la dejara—
. Oh, estrellas. Quiero ¿Algunas de ellas son humanas...
como yo?
—Muchas de las hembras son humanas —Su cabeza se
inclinó, sus procesadores giraron, su atención se centró en
ella—. Sus guerreros son una variedad de modelos —Eran
varios modelos K con hembras—. Me he comunicado con
algunos de ellos.
Les había pedido consejo sobre el entrenamiento de la
descendencia.
—No voy a estar sola —Una lágrima goteó por su mejilla
derecha. Le cepilló la humedad fuera.
—Nunca volverás a estar sola. Yo siempre estaré contigo.
—Te tengo —Sus ojos brillaron—, y ahora también tendré
otras mamás con quienes hablar, mamás que luchan por
comprender a sus hijos cyborg como yo, hembras que han
estado en mis zapatos.

THE MAN OF STARS 237


Él miró sus botas.
—Tienen calzado similar —Le sonrió.
Ella se rio y la tensión dentro de él se disipó. Las lágrimas
fueron derivadas de alegría, no de pena. Su oferta de la línea
de comunicación segura no la había dañado.
Tengo un visual. Su hijo transmitió lo que vio. Tienen armas.
Los humanoides estaban vestidos con un equipo protector
negro, más ligero y menos efectivo que la versión de la
armadura que llevaba Vow. Llevaban cubiertas para la
cabeza y llevaban pistolas en sus manos. Sus dedos
estaban cubiertos con tela negra también.
La prenda del líder lleva la insignia de la Alianza Humanoide.
La transmisión de su hijo se hizo más fuerte. Son el enemigo.
No intentan ocultar su aproximación. Stealth soltó la mano
de su hembra y corrió hacia él. No...
Era muy tarde. Sonaron disparos.
Los seres cayeron al suelo, sus cuerpos convulsionándose.
Las cubiertas de la cabeza se cayeron de uno de los seres,
revelando el semblante azul pálido de un macho Ahkian.
—Los sorprendiste —Stealth dejó escapar el aliento,
aliviado.
—Tenías dudas, papá —Su hijo lo miró como si sus
procesadores estuvieran en mal funcionamiento—. No
hubiera sido correcto matarlos.
—Esa es una lógica sólida —Estudió a los Ahkians— y buen
tiro. Los derribaste a todos antes de que pudieran responder.
—Los humanoides son lentos —Su hijo se enderezó.
—¿Qué hiciste? —La hembra de Stealth llegó, con el pecho
agitado, la cara sonrojada— ¿Vow?

THE MAN OF STARS 238


—Los aturdió. No los mató —Stealth respondió por su hijo—
. Llevan prendas de la Alianza Humanoide, portaban armas,
no hicieron ningún intento de identificarse a sí mismos.
Tienen suerte de estar vivos.
—Están usando prendas de la Alianza Humanoide —Miró a
uno de ellos—. Mierda.
—Ese lenguaje —Stealth y Vow dijeron eso al unísono.
—Los habrían matado —Miró a los Ahkians—. Nadie
esclavizara a mis machos.
Su hembra era feroz. Stealth sonrió.
—Se recuperarán pronto.
—Nibi —Le gritó a una de las hembras Ahkians—. Busca a
Odoon. Lo necesito ahora.
La hembra corrió hacia el domicilio.
—Puede explicarles lo que sucedió —Los labios de su
hembra se torcieron—. Podrían haber sido machos de la
Alianza Humanoide —Lo miró—. Podrían seguirnos aquí.
—Eso es improbable —La abrazó contra él. Su cuerpo se
sacudió contra el suyo. Su hembra molesta por el ataque—.
Estamos a salvo en Waaban Two.
—Papá y yo te protegeremos, mamá —Su hijo volvió a sacar
sus armas.
—Guarda eso antes de dispararle a alguien más —El brillo
en sus ojos desmentía su tono severo—. Estaríamos más
seguros en la Patria.
—No iremos allí para un ciclo solar —Anunció su hijo—.
Papá y yo decidimos eso.
—¿Decidiste eso? —Levantó las cejas.

THE MAN OF STARS 239


—Sí —Su hijo debe haber creído que era la verdad. Los
cyborgs no podían mentir.
—Decidimos que te entrenaría para otro ciclo solar —Stealth
apretó su cadera femenina.
—Exactamente —La cabeza de su hijo se balanceó—. Y no
puedes entrenarme en la Patria porque todos me pedirán
que pelee en las batallas simuladas, les tendré que decir que
no puedo y querrán saber por qué, tendré que decir porque
soy un desastre, todos se reirán y luego querré morir.
Lo dijo sin respirar, las palabras salieron de su boca. Stealth
nunca había sido testigo de la capacidad pulmonar mejorada
de un cyborg utilizada para la charla excesiva. Su hijo era
innovador. Su hembra luchó por ocultar su diversión.
—No me di cuenta de que ser un guerrero fuera tan
complicado.
—Lo es —El tono de su hijo era lamentable—. Es muy, muy
complicado.
Una risa escapó de los labios de su hembra. Luego otra y
otra. Stealth se rio con ella. Su hijo pareció confundido por
un momento antes de unirse a ellos.
Así fue como los encontró Odoon: los tres doblados,
riéndose a carcajadas, las lágrimas corrían por sus caras.
—¿Le divierte disparar a los de mi especie?
—Aturdidos —La hembra de Stealth jadeó—. No les
disparamos.
La cara del Ahkian se volvió azul oscuro.
—¿Admites haberlos aturdido?

THE MAN OF STARS 240


Stealth volvió a su hembra hacia él, escondiendo sus ojos
risueños contra su pecho y se movió hacia la derecha,
ocultando a su hijo riéndose con su forma.
—Están vestidos como machos de la Alianza Humanoide —
Controló implacablemente su alegría— ¿Qué habrías
hecho?
—Les habría preguntado quiénes eran —Odoon se apoyó
pesadamente en las ramas que usaba como soporte, sus
piernas aún no estaban completamente funcionales.
—Así es como mueren los guerreros —Recitó el hijo de
Stealth—. El enemigo puede identificar tu posición usando
tu voz. Tu respuesta podría ser un proyectil en el globo de tu
ojo.
La boca del Ahkian se abrió y cerró y se abrió de nuevo.
—Ese es el tipo de lógica que espero extienda una máquina
de matar.
—¿Qué dijiste? —La voz de Zebrina se elevó, sin rastro de
humor persistente en su tono severo. Se agachó bajo el
brazo de Stealth, con los ojos brillantes.
Su amigo dio un paso atrás. Eso fue prudente. La hembra
del Stealth era una fuerza cuando estaba enojada
—¿Te atreves a llamar a mi hijo una máquina de matar? —
Miró al Ahkian—. Él, junto con su padre, te salvó la vida,
salvó la vida de tus amigos. Fue herido durante ese rescate,
experimentado dolor por tu culpa. Entonces abrimos nuestro
domicilio para ti, compartimos nuestros suministros, nuestro
alimento contigo, los protegió de más ataques ¿Es ese el
acto de una máquina de matar?
Los ojos de Odoon se abrieron.
—N-n-no pero...

THE MAN OF STARS 241


—No hay pero —La hembra de Stealth sacudió sus
pequeños puños al macho— ¿Han matado mi machos? Sí,
porque matar a veces es necesario y cuando eso sucede,
alguien tiene que apretar el gatillo. No todos tienen el lujo de
mantener sus manos limpias, alegando que son mejores que
otros, siendo...
—Mis manos no están limpias —Esas palabras salieron de
la boca del Ahkian.
La hembra de Stealth parpadeó.
—¿Qué dijiste?
—He matado —La mirada de Odoon cayó a sus pies aún no
reparados—. Exploté una estructura mientras un cyborg
estaba en ella.
Basado en la falta de habilidades de batalla del Ahkian,
Stealth estimó la probabilidad de que haya matado a uno de
sus hermanos con el 49.0268 por ciento, pero eso no era
cero, así que no dijo nada.
—Por eso los cyborgs tienen que ser máquinas —Odoon se
encontró con la mirada de Zebrina.
—Porque eres pacifista y no matas seres vivos —La astuta
hembra de Stealth había deducido el daño del macho—.
Nunca verás a los cyborgs como realmente son. No puedes
porque eso cambiaría tu forma de verte.
La cabeza del Ahkian se inclinó.
—Entiendo tu pensamiento —Dejó escapar el aliento—.
Pero no estoy de acuerdo con eso. Y no someteré a mis
machos a tus puntos de vista.
—Lo siento —Odoon era lo suficientemente macho como
para disculparse.

THE MAN OF STARS 242


—También lo siento, Odoon —Convocó una pequeña
sonrisa—. Adiós. Te deseo un viaje seguro y la vida pacífica
que deseas.
Ese adiós era definitivo. Stealth vio esa verificación en sus
ojos.
—Hijo —Miró a Vow—. Déjalos. Permitiremos que los
Ahkians se ocupen de los suyos.
Pasó junto a su antiguo amigo, su expresión fría. Los
hombros de Odoon se enderezaron cuando ella se acercó y
luego se desplomaron después de pasarlo.
—¿Stealth? —Se detuvo por un instante, tendiéndole la
mano.
Alcanzó a su hembra y unió sus dedos con los de ella.
—Algunas batallas no se pueden ganar.
—Algunas batallas no deberían ser peleadas —Suspiró—
¿Por qué me elegiría a mí? ¿No seríamos un recordatorio
constante de lo que percibe como su mayor defecto moral?
La hembra de Stealth no se dio cuenta de su atractivo.
—Me enfrentaría a la rotación de cada planeta si eso
significara que podría sostenerte en mis brazos, hablar
contigo, inhalar tu dulce aroma.
Su hijo hizo un ruido de náuseas.
Zebrina apretó los dedos de Stealth.
—Deberíamos continuar esta conversación en privado.
—No hay ningún lugar privado —Se quejó Vow—. Escucho
todo.
—Entonces sabes que los comentarios de Odoon sobre que
eres una máquina de matar no se trata de ti —Reforzó esa

THE MAN OF STARS 243


revelación—. Es sobre su culpa por matar a uno de los
hermanos de tu padre.
—Ese guerrero también fue uno de mis hermanos —Vow
reclamó a todos los cyborgs como su familia. El cuerpo de
Stealth se calentó hasta su marco. Su hijo nunca se sentiría
aislado de nuevo—. Y sí, sé que ahora no se trataba de mí.
Nunca se trató de mí. Él tiene problemas. El humanoide esta
jodido.
—Ese lenguaje —Tanto Stealth como Zebrina dijeron eso al
mismo tiempo.
—Manejaste bien la situación con los recién llegados —
Elogió a su hijo—. Fue inteligente de tu parte no preguntarles
quiénes eran.
—Fue inteligente de mi parte. —El pecho de Vow se hinchó,
un pavoneo añadido a su paso—. Papá me enseñó eso.
Su hijo gentilmente le dio parte del crédito.
—Fue inteligente por parte de tu padre enseñarte eso —Le
sonrió a Stealth—. Me siento mucho más segura, sabiendo
que mis dos guerreros grandes y fuertes vigilan el domicilio.
Abrazó a su hijo con su mano libre, acercándolos a los tres
juntos. Ahora eran una familia. La barbilla de Stealth se
levantó. Eran una unidad, unida por el amor, juntos por fin.
—No abrazas a los guerreros, Mamá —Vow se liberó de su
agarre, su hijo no tan agradecido de lo que habían
encontrado—. Somos feroces protectores.
Stealth sonrió. Las opiniones de Vow sobre los guerreros
eran entretenidas de escuchar.
—¿Qué hay de besar guerreros? —Zebrina, sin inmutarse
por el rechazo de su hijo, frunció los labios— ¿Es eso
aceptable?

THE MAN OF STARS 244


—Ugh —Vow se estremeció, los movimientos exagerados—
. No.
—Eso es una lástima —Soltó la mano de Stealth y se lanzó
hacia su hijo, tratando de agarrarlo—, porque voy a besarte.
—Mamá, no —Vow salió de su rango, su expresión
horrorizada.
—Cuando te atrape —Corrió tras él—. Te voy a besar por
todas partes.
—Papá, haz que se detenga —Su hijo era un cyborg.
Escaparía de su humana mamá fácilmente. Sin embargo, se
mantuvo a un brazo de distancia delante de ella.
—Algunos oponentes son demasiado feroces para luchar.
Hijo -—Stealth se rio entre dientes, siguiendo a los dos seres
que amaba más que la vida—, rendirse podría ser tu mejor
opción.
—Sí, ríndete a los besos de tu madre —Chasqueó los
labios—. Acepta tu derrota con gracia.
—Nunca —Vow la esquivó, virando alrededor de los
Ahkians.
Los humanoides los miraron. Algunas de las hembras
sonrieron. Una descendencia se movió, tratando de escapar
de su madre y se unió al juego.
La alegría burbujeó dentro de Stealth mientras rastreaba a
su hembra y su hijo a través del campo agrícola, los tres
jugando a atrapar al cyborg, creando felicidad de la nada.
Zebrina y Vow eran su futuro. Porque estaban en su vida,
amándolo, haciéndolo reír, la perspectiva para él era más
brillante que el sol brillando sobre ellos.
Su gran corazón se expandió. Los salvaguardaría con todo
lo que tenía, apreciando cada momento que pasaran juntos.

THE MAN OF STARS 245


—Nunca me atraparás —Vow se burló de su madre, con una
sonrisa en su voz.
—La arrogancia te derrotará, Hijo —Impulsándose hacia
adelante, Stealth tomó a su hembra en sus brazos,
persiguiendo a su hijo a la velocidad del cyborg.
—Hey, no es justo —Vow aceleró, tratando de escapar de
ellos—. No puedes ayudar a Mamá.
—La batalla no siempre es justa —Zebrina cantó de alegría
y pateó las piernas—. Más rápido, mi macho. Tengo besos
para distribuir.
—No hay besos —Su hijo aulló su consternación—. Soy un
guerrero.
Stealth sonrió. Ciclos solares a partir de ahora, su hijo
guerrero encontraría a su hembra y querría besos. En ese
momento, volverían a reproducir este momento, reviviendo
la diversión que habían compartido.
—Prepárate para ser besado, hijo —Estalló en movimiento,
llevando a su hembra a la victoria.

THE MAN OF STARS 246


Capítulo 18

Su hijo completó su entrenamiento para satisfacción de


Stealth exactamente un ciclo solar más tarde. Les llevó
treinta y cinco rotaciones planetarias llegar a la Patria, siete
más de lo programado porque Vow quería volar la nave la
mayor parte del camino.
Cometió bastantes errores, incluso casi los arrojó a un
cinturón de asteroides. Zebrina había desenterrado toda su
fuerza de voluntad para no decir nada. La confianza de su
hijo seguía siendo algo frágil, fácilmente desalentado y
estaba decidida a protegerlo.
Según Stealth, la preocupación excesiva también
perturbaba al bebé. Ella curvo sus manos sobre su
estómago redondeado. Su guerrero se comunicaba
constantemente con su más joven hijo a través de las líneas
de transmisión, dándole actualizaciones sobre su nuevo
cyborg.
—¿Necesitas reposición de energía, mi hembra? —Su
macho la miró con preocupación.
—Me estás cargando —Le sonrió. Él insistió en transportarla
a todas partes y ella no se opuso. Disfrutaba de estar en sus
brazos—. No he gastado ninguna energía.
—Estás fabricando descendencia —Levantó su barbilla, su
orgullo por esa ocurrencia adorable—. Eso gasta energía.
—¿Necesitas una barra alimenticia, mamá? —Su hijo
levantó una.
—No. —Se había comido dos antes de abandonar la nave.

THE MAN OF STARS 247


—Bien, porque yo lo hago. —Se lo metió en la boca,
masticando con la boca abierta.
Sacudió la cabeza y sonrió.
—Guarda unas pocas para mí.
—Unas pocas son tres, ¿verdad? —Miró en su mochila e
hizo una mueca—. Te guardaré dos.
Había abastecido el paquete con diez barras nutritivas
¿Cómo había comido ocho de ellas ya?
—No lo pondremos a cargo de las barras de alimentación en
el futuro.
—No quería que me pusieran a cargo de ellas la rotación de
este planeta —Su hijo se encogió de hombros—. Soy un
guerrero, no una nave de suministros.
Tenía puntos de vista muy estrechos sobre lo que un
guerrero hacía y no hacía, que era una fuente constante de
diversión para ella y su macho guerrero.
Salieron de la estructura de varios niveles, entraron en un
espacio pequeño cuadrado del exterior y anuló su respuesta,
inmediatamente sintiendo la tensión aumentando en Stealth,
su forma endureciéndose.
Una zona verde abrazaba una pared cubierta de grabados.
Las decoraciones no eran frívolas. Eran los nombres de los
cyborg muertos, sus hermanos guerreros que habían muerto
en Ahki.
—Bájame. —Suavizó su voz en un susurro, por respeto a él
y los seres que había amado.
La bajó, deslizando su cuerpo sobre el suyo hasta que sus
pies tocaron el suelo. Lo sostuvo por un momento,
abrazándolo a ella, tratando de consolarlo.

THE MAN OF STARS 248


—Miremos la pared. —Enganchó su brazo al de él y caminó
hacia un lado de la estructura de la pared.
Había tantos nombres. Había hablado con ellos, los cuidó,
podía imaginar a la mayoría de los machos. Algunos habían
pertenecido al grupo de lucha de Stealth, habían
valientemente incursionado en la batalla con él.
—Aquí está el nombre de Lethal —Trazó las letras con la
punta de los dedos—. Vow, fue uno de los mejores amigos
de tu papá.
—Sé todo sobre el modelo E —Su hijo asintió—. Si Letal y
Boom no se hubieran sacrificado para salvar a papá, habría
muerto. Nunca lo hubiera conocido.
Stealth tragó saliva, sus ojos reflejaban su dolor.
—Les debemos mucho —Eran responsables de su felicidad.
Se frotó el estómago—. El nombre de Boom está debajo del
de Lethal —Eso parecía correcto—. Hubieran querido estar
juntos —Frunció el ceño—. Aunque las letras podrían
haberse espaciado mejor —Desapareciendo dentro de la
tierra—. Su nombre está parcialmente oculto.
—Quería tocar... —La voz de su macho se quebró.
—Quería tocar la Patria —Las lágrimas nublaron su visión—
, y ahora lo está haciendo —Se dirigió a la parcela de tierra,
donde su cyborg había enterrado a Lethal y Boom—. La
estará tocando para siempre.
Se paró con sus dos machos, al darse cuenta de lo cerca
que estuvo de perder a Stealth, golpeándola. Podría haber
sido su nombre grabado en el costado de la estructura, su
gran cuerpo cubierto de tierra.
Vow nunca hubiera conocido a su padre. Descansó sus
manos sobre su vientre. Su segundo hijo no habría sido

THE MAN OF STARS 249


concebido. No lo estaría mirando hacia una larga vida llena
de amor y risas.
Lenta y torpemente se dejó caer de rodillas.
—Gracias, Lethal. Gracias, Boom.
Ella puso sus manos en el suelo. Mientras estuviera en la
Patria, iba a cuidar la parcela, plantar vegetación floreciente
allí, la convertiría en el lugar más hermoso y tranquilo del
planeta.
—Gracias por salvaguardar a Stealth, por devolverme a mi
macho y a Vow, su papá —Se habían ganado su gratitud
para siempre—. Siempre serán parte de nuestra familia.
Sollozó, pasando el dorso de sus manos sobre sus mejillas.
—Papá, mamá está llorando de nuevo —Su hijo anunció ese
hecho.
Stealth descansó sus manos sobre sus hombros.
—No querrían que te dañases, mi hembra.
—Tus amigos no conocieron a Vow, no verán al nuevo bebé
—Ella hipo—. Es muy triste, muy, muy triste.
—Lloraste cuando viste la Patria y cuando me senté en la
silla del capitán y cuando papá pulió nuestras botas y
cuando... —Su hijo transmitió la larga lista de sus recientes
momentos de llantos.
Podía haber estado un poco emocional en las últimas
rotaciones planetarias. Mucho había cambiado.
—Podríamos llamar al bebé Lethal Boom por tus amigos.
—Solo si lo odias —Vow murmuró su opinión—. Ese es un
nombre estúpido.

THE MAN OF STARS 250


—Los cyborgs normalmente tienen un nombre —Stealth fue
más amable con sus comentarios—. Lethal habría tenido el
honor de tener una descendencia que lleva su nombre.
Quería ser amado por una hembra.
—Podría ser esa hembra —Se miró el estómago—. Ya te
amo, Lethal.
—Está repitiendo su nombre a través de las líneas de
transmisión —Su macho apretó sus hombros—. Nuestra
descendencia lo ha reclamado como suyo.
—Me alegra que le guste —Su corazón se llenó de cariño.
Las lágrimas cayeron por sus mejillas.
—Ugh —Su hijo puso los ojos en blanco—. Más llanto.
—Lethal era el líder predeterminado de nuestro grupo de
lucha —La voz de Stealth era baja, profunda y
reconfortante—. Asignaba el terreno y siempre lo arreglaba
para que luchara entre él y Boom. Eso les permitió cubrir mi
terreno cuando yo inspeccionaba las áreas frente a nosotros.
—Prefiero pelear. —Vow sacó el pecho.
—Era hábil en otras tareas.
Su macho describió sus diversas misiones. Muy pocas
tareas involucraban asesinatos. Se inclinó hacia él. Se había
centrado en la prevención de muertes de cyborgs, una
prioridad que ahora le transmitió a su hijo, a ambos de sus
niños. Se tocó el estómago. Su bebé también podía
escuchar sus historias, estaba aprendiendo que ser un
guerrero no se trataba solo de terminar con la esperanza de
vida. Implicaba proteger a los seres de los que uno se
preocupaba.
Era cierto que esta lección se estaba aprendiendo en el lugar
de enterramiento de los amigos de su macho. Stealth amaba

THE MAN OF STARS 251


a los dos guerreros y ellos lo amaban. Eran parte de él. Sus
muertes no cambiaron eso.
Durante una pausa en el intercambio, tanto Vow como
Stealth volvieron la cabeza hacia el izquierda.
—Modelo K —Choice, el amigo de su hijo, salió entre dos
estructuras. Tenía la piel gris y los brillantes ojos azules de
un antiguo modelo cyborg que no tenía muchos más ciclos
solares que Vow.
No había ningún número de modelo entintado en su mejilla.
Ambos eran hijos de la unión de un guerrero cyborg y una
hembra humana.
A ella le gustaba, le gustaban sus padres. Joan, su madre y
las otras madres de los cyborgs se comunicaban con ella en
cada rotación del planeta.
Eso no era tan frecuente como se comunicaban sus hijos.
Las líneas de transmisiones estaban en uso constante.
—Modelo C —La cabeza de Vow se inclinó—. He registrado
más tiempo de vuelo del que tú tienes.
Intercambió una mirada con Stealth. Por eso su hijo insistió
en volar la nave... lentamente.
—Y ese tiempo lo acumulaste fuera del espacio controlado
por cyborgs —La envidia afiló las palabras de Choice—. Casi
entraste en un cinturón de asteroides, afortunado saco de
tornillos.
¿Eso fue intencional también? Sus labios se aplanaron. La
racha imprudente de su hijo lo mataría.
—Los cinturones de asteroides son peligrosos —Stealth
expresó su desaprobación—. Sólo un guerrero tonto trataría
de entrar en ellos.

THE MAN OF STARS 252


—También son geniales —Murmuró Vow— ¿Quieres ver
nuestra nave? —Preguntó a Choice.
—Tenemos que conseguir a los demás primero —Los ojos
de su amigo se iluminaron con energía—. Quieren verla
también. No se nos permite estar en las otras naves sin
supervisión desde... —Miró a Stealth y dejó de hablar.
—La nave pertenece a un miembro del Consejo —Su macho
era severo con los muchachos—. No debes abandonar la
bahía de atraque, disparar armas o causar daños.
—Sí, señor —Los dos jóvenes guerreros se pusieron firmes.
Ella entrecerró los ojos hacia ellos. Habían acordado eso
demasiado rápido para su comodidad.
—Sé responsable, Vow. Tu papá y yo confiamos en ti.
—Ugh —Rodó los ojos.
—Y dame un abrazo —Extendió los brazos, no queriendo
dejarlo ir.
—No delante de todos, mamá —Luchó contra su petición.
Choice debe ser como todos.
—Vow —le dio la mirada de "hazlo o sufre las
consecuencias", una que debería conocer bien.
—Bueno. Está bien —Le dio el abrazo más rápido en la
historia de madre e hijo—. Es tan vergonzoso.
Pisoteó hacia su amigo.
—Mi mamá también me hace abrazarla —Choice fue
comprensivo—. Es un mal funcionamiento de una hembra
humana.
Los dos muchachos desaparecieron en el laberinto de la
estructura. Estaba feliz de que tuviera un amigo, pero

THE MAN OF STARS 253


sospechaba que las posibilidades de que su hijo se lastimara
habían aumentado considerablemente.
—¿Quiero saber por qué no se les permite estar en las otras
naves sin supervisión? —Miró a su macho.
—Todos sobrevivieron a la experiencia —La tomó en sus
brazos y la levantó como si no pesara nada, como si no fuera
tan grande como un domicilio—. Son seres inteligentes. No
repetirán sus errores.
—Harán otros nuevos —Convocó una sonrisa—. Tengo que
permitirle vivir su vida, vivir aventuras sin mí.
—Eres su madre —Stealth la llevó por la estructura—.
Siempre serás una parte de él —La levantó más alto contra
él y ella se echó a reír—. Y tú me tienes. Podemos
emprender nuestras propias aventuras privadas.
—¿Podemos? —Su rostro se calentó— Eso suena...
intrigante.
Los guerreros se alineaban en los pasillos, mirándolos y
escuchándolos cuando pasaban. Algunos de ellos sonrieron.
Deben haber entendido las insinuaciones de su cyborg.
—¿A dónde vamos en nuestras aventuras privadas? —
Susurró eso en su pecho con traje de vuelo.
—Primero, exploraremos las cámaras que el Consejo nos ha
asignado —Su macho tenía un plan—. Ese es un terreno
desconocido. Tomará muchos minutos para mapearlo a
fondo.
Se tomaría su tiempo para amarla. Sus pezones se tensaron
con anticipación.
Entraron en una cámara, las puertas se abrieron y cerraron
a su alrededor como si los reconocieran, como si les

THE MAN OF STARS 254


estuvieran dando la bienvenida a su nueva casa. La cámara
conducía a más cámaras a la derecha y a la izquierda.
Stealth giró a la izquierda, transportándola a un espacio
privado, un área dominada por un gran soporte para dormir.
Vio algunos soportes horizontales, un par de sillas, un
conjunto de armadura sobre un compartimento abierto.
—Tenemos que transferir nuestras cosas. —Permanecían
en la nave.
—No necesitamos nuestras cosas para lo que estamos a
punto de hacer —La puso cuidadosamente en el soporte
para dormir—. Estás demasiado vestida para eso.
Le quitó las botas una por una. Era un desafío para ella
alcanzar sus pies.
Movió los dedos de los pies.
—También estás demasiado vestido.
—Eres mi prioridad —Capturó sus labios, su beso gentil y
amoroso.
Sus lenguas entrelazadas, una caricia de carne contra
carne, el toque ligero transmitiendo la profundidad de las
emociones de su cyborg. La apreciaba, lo había demostrado
una y otra vez, poniéndola primero.
Otros dirían adiós. Su guerrero permanecería a su lado.
Desabrochó su traje de vuelo, una prenda que había
guardado desde el nacimiento de Vow y que ahora se puso
de nuevo y se la paso sobre los hombros, hasta la cintura.
Levantándola, le quitó el atuendo por completo.
El aire frío rozó su piel desnuda. Resistió el impulso de
cubrirse con sus manos, permitiéndole mirarla. Su estómago
era enorme con su bebé. Sus senos estaban llenos y
pesados.

THE MAN OF STARS 255


La miró con amor en sus ojos.
—Eres hermosa. —Un pequeño recipiente estaba
establecido en el soporte horizontal cercano. Él lo recogió—
¿Así es como te veías cuando estabas fabricando a Vow?
—Mis tobillos estaban más hinchados —Enderezó las
piernas—. No tenía un gran y poderoso cyborg para llevarme
a donde sea que necesitara ir.
Entonces lo había extrañado, atesorando que podía
compartir esta experiencia con él ahora.
—Estabas sola y aun así te las arreglaste —Se echó aceite
en las palmas de las manos y frotó su piel, calentando el
líquido—. Eres una hembra fuerte, una mamá experta, una
compañera que cualquier guerrero lucharía para proteger —
Deslizó sus manos sobre su redondeado estómago—, y eres
generosa, me has dado numerosos regalos —Rodeó su
ombligo, el aceite la calentó por todas partes—. Me has dado
tu amor, tu pasión, nuestro hijo mayor y la descendencia que
arrullas contenta dentro de ti.
—No te dejes engañar por los ruidos de nuestra
descendencia. Es probable que esté tramando su próximo
movimiento —Se reclinó sobre el soporte para dormir, el
masaje la puso somnolienta—. Es tan activo como su
hermano mayor.
Como para probar su punto, su bebé golpeó uno de sus
pequeños pies cyborg contra su vientre. Los ojos de Stealth
se abrieron.
—Lo sentí.
Había experimentado las patadas de su descendiente en
numerosas ocasiones, pero siempre actuaba como si fuera
la primera vez, su asombro por los movimientos que la
encantaban.

THE MAN OF STARS 256


—¿Te está dañando, mi hembra? —Su guerrero descansó
su mejilla contra su estómago, una sonrisa tonta en su
hermoso rostro—. Puedo decirle que se detenga.
—No me está haciendo daño —Le acarició la parte posterior
de la cabeza—, y sus movimientos son tranquilizadores. Me
dicen que está sano.
—Nuestra descendencia es completamente funcional —
Stealth rozó sus manos sobre sus senos, extendiendo el
aceite sobre su piel, girando círculos suaves en sus curvas—
. Es perfecto... como su madre.
—Su madre está agotada —Sofocó un bostezo—, y no
debería estarlo. No he hecho ninguna cosa esta rotación del
planeta.
—Necesitas descansar —Acarició su cuerpo, acariciándola
con los dedos, sus palmas—. Podemos retrasar la cría hasta
que se restablezca tu energía.
—Descansaremos por un momento, pero no más que eso —
Se sintió demasiado bien para moverse, el letargo que
pesaba sobre ella como una pesada tela de cobertura—.
Quiero amarte.
—Veo tu amor, mi hembra —Extendió los dedos sobre su
estómago—. No hay necesidad de que hagas nada más —
Su voz bajó a hipnótica un zumbido—. Cierra tus ojos.
Sacudió su cabeza.
—Quiero mirarte.
Cuando dijo eso, el sueño la atrajo. Sus pestañas
revolotearon, volviéndose insoportablemente pesadas.
Sus labios se torcieron.
—Puedes mirarme más tarde. Estaré contigo cuando
despiertes —La apartó suavemente del borde del soporte

THE MAN OF STARS 257


para dormir, reclamó el espacio a su lado, presionando su
cuerpo contra el de ella, su calor envolviéndola—. Siempre
estaré contigo.
Siempre estaría con ella. Sonrió.
—Te amo, Stealth.
—Te amo, mi hembra —Besó su frente—. Duerme. Yo te
protegeré.
Y ella lo protegería. Zebrina se dirigió a la oscuridad,
sabiendo que nada en sus sueños podría superar la alegría
de sus momentos de vigilia.

FIN

THE MAN OF STARS 258

También podría gustarte