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CONSTITUCIONAL
EDGAR ANDRÉS QUIROGA NATALE
HERMENÉUTICA
CONSTITUCIONAL
- Segunda Edición -
© 2019
© Ediciones Nueva Jurídica
Hermenéutica constitucional
Edgar Andrés Natale - hermenéutica constitucional
ISBN:
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Nunca sobra recordar el motivo que hace que todo valga la pena:
Las tristezas, los falsos pasos, los errores y condenas se borran, cuando
existe una razón para seguir adelante… para recorrer el camino.
La angustia de saberse solo en medio de la muchedumbre cesa, cuando
la compañía (a veces callada) se hace tangible.
Las dudas, los temores y debilidades parecen pequeñas, cuando la
fuerza, el ímpetu y la alegría conquistan las tierras de gigantes.
La torpeza, la sin razón y falta de luces, se extinguen cuando la
inteligencia natural se hace dúctil en medio de las sombras.
Las emociones secuestradas y el temor al fracaso desaparecen, cuando
el amor y el orgullo se hacen vivos…
Hijo eres un regalo de Dios… Gracias por ser mi motivo, razón,
compañía, alegría, inteligencia, amor y orgullo.
“…Comprender el mundo no es nunca una simple cuestión de registrar
nuestras percepciones inmediatas. Comprender entraña inevitablemente
razonar: Tenemos que “leer” lo que sentimos y lo que parece que vemos,
y preguntar qué indican esas percepciones y cómo podemos tenerlas en
cuenta sin sentirnos abrumados por ellas …”
Amartya Sen. “La Idea de la Justicia”. p3
Introducción ....................................................................... 23
1. Anotaciones preliminares ................................................. 23
2. Delimitación del objeto de estudio ................................ 31
2.1. Delimitación Material. Alcance Del Objeto De Estudio. 32
2.1.1. ¿Porqué el Estudio de un Equilibrio Integral? .............. 32
2.1.2. ¿Porqué la Proporcionalidad y la Ponderación como
Técnicas Jurídico – Económicas de Aplicación para el
Equilibrio Integral? ............................................................. 36
2.1.3. ¿Porqué en el Escenario del Control de
Constitucionalidad? ........................................................... 37
2.1.3.1. El Tipo de Norma Jurídica sobre el cual se Ejerce el
Control ............................................................................. 38
2.1.3.2. Los Métodos de Interpretación Aplicados ................. 39
2.1.3.3. La Forma de Solucionar las Contradicciones o
Colisiones entre normas ...................................................... 40
2.1.3.4. En Cuanto al Referente de Regulación ....................... 41
2.2. Delimitación Espacio – Temporal ................................. 42
2.2.1. ¿Porqué en Colombia a partir de la Constitución de
1991? ................................................................................. 42
2.3. Delimitación Metodológica ......................................... 44
2.3.1. Respecto del Estatuto Metodológico ........................... 44
14 Contenido General
PRIMERA PARTE.
SEGUNDA PARTE.
TERCERA PARTE.
CUARTA PARTE.
1. Anotaciones preliminares
La mayoría de los problemas actuales que abordan las ciencias distan mucho
de ser debates endógeno – disciplinares1; por el contrario, la adopción de
instrumentos analíticos, dogmáticos y metodológicos interdisciplinares genera
una mayor compresión de los fenómenos sociales, jurídicos, culturales, políticos
y económicos que subyacen en el trasfondo de las investigaciones, coadyuvando
en la construcción de una ciencia dotada de un mayor carácter de universalidad
y capaz de dar respuesta a los problemas y retos que enfrentan las sociedades.
1 Sin desconocer el valor que ha tenido la investigación disciplinar cerrada y los avances particulares
en cada campo del conocimiento, entendiendo el concepto “campo” bajo la siguiente acepción: “En
principio como un espacio específico, en donde sucede una serie de interacciones; por otra parte
–lo define Bourdieu- como un sistema particular de relaciones objetivas que pueden ser de alianza
o conflicto, de concurrencia o de cooperación entre posiciones diferentes, socialmente definidas
e instituidas, independientes de la existencia física de los agentes que la ocupan”. MORENO
DURÁN, Álvaro y RAMÍREZ, José Ernesto. Pierre Bourdieu. Introducción Elemental. 2 ed.
Bogotá: Panamericana, 2006. p. 16.
24 Edgar Andrés Quiroga Natale
“(…) Por un lado, la posición liberal de derecha nos dice que solo las fuerzas de
mercado, la iniciativa individual y el crecimiento de la productividad permiten
mejorar en el largo plazo los ingresos y las condiciones de vida –en especial, de
los menos favorecidos-, y que por lo tanto, la acción pública de redistribución,
además de ser moderada, debe limitarse a herramientas que interfiera lo menos
posible con ese mecanismo virtuoso (…) Por otra parte, la posición tradicional
de izquierda heredada de los teóricos socialistas decimonónicos y de la práctica
sindical, nos dice que solo las luchas sociales y políticas pueden aliviar la
indigencia de los mas necesitados producida por el sistema capitalista, y que la
política pública de redistribución, por el contrario, debe llegar hasta la médula del
proceso de producción para cuestionar la manera en que las fuerzas de mercado
determinan tanto las ganancias apropiadas por los poseedores del capital, como
las desigualdades entre asalariados (…)”2.
para efectos del presente trabajo5 resulta imprescindible determinar una compresión
particular de cada campo, para coadyuvar en la delimitación del objeto de
estudio, y a partir de dicha comprensión, circunscribir el debate al marco de una
homologación conceptual ex – ante.
A título introductorio, entenderemos6 por Economía “el estudio del modo en que
la sociedad gestiona sus recursos escasos”7. Al respecto comenta Palacios:
“La ciencia económica parte del supuesto de que los recursos de los que una sociedad
dispone para satisfacer las necesidades de sus miembros son limitados y, en consecuencia,
se ocupa solo de aquellos bienes que son “escasos” en relación con lo que los miembros
de la sociedad podrían desear. Sin “escasez” no existirían problemas económicos” (…)
Supone igualmente que el hombre al cambiar con otras personas unos bienes o servicios
por otros, hace escogencias racionales dentro de restricciones de diversa índole (…) con
el fin de obtener en cada elección la mayor utilidad posible”8.
De las múltiples ramas en las que se divide el estudio de la disciplina jurídica, será
de nuestro especial interés el Derecho Constitucional15 principalmente abordado
desde su enfoque neoconstitucionalista16, dentro del cual uno de sus principales
11
Por eficiencia entenderemos "la relación que existe entre la cantidad de recursos que se
emplean para producir un bien o servicio, y la cantidad del bien o servicio que se logra;
un proceso productivo es más eficiente que otro si, con la misma cantidad de recursos
obtiene mayor cantidad del bien o servicio que desea. Un proceso es ineficiente, o menos
eficiente que otro, en el caso contrario. Los conceptos de eficiencia y productividad
están íntimamente relacionados". BANCO DE LA REPÚBLICA. Introducción al
análisis económico. El caso colombiano. Bogotá: Banco de la República, 1990. p. 55.
Se recomienda también consultar MULLER, Ferdinand. Los enfoques de la economía
liberal. Buenos Aires: Ethos, 2007.
12
PAUCCANI, Generoso. Teorías clásicas y contemporáneas del derecho. (E. Cassani,
Trad.). Milán: Universidad de Milán, 2006. p. 14.
13
A partir de autores como Robert Alexy y Ronald Dworkin, entre otros.
14
Con autores como Seackmann y Kantarowich, entre otros.
15
Por las razones que han de ser expuestas en un acápite posterior.
16
A pesar de no ser un concepto pacífico, y, a contrario sensu, estar sometido a permanente
debate, se ha concebido entre una de sus acepciones como la retoma de los postulados
esenciales del constitucionalismo, entendido este como "un sistema de vínculos
sustanciales, o sea, de prohibiciones y de obligaciones impuestas por las cartas
constitucionales, y precisamente por los principios y los derechos fundamentales en ellas
establecidos, a todos los poderes públicos, incluso al legislativo (
) El resultado es un
nuevo modelo de derecho y de democracia, el Estado Constitucional de Derecho, que
es fruto de un verdadero cambio de paradigma respecto al modelo paleopositivista del
Estado legislativo de derecho”. FERRAJOLI, Luigi. Sobre los derechos fundamentales.
En: Teoría del constitucionalismo. Ensayos escogidos. Madrid: Trotta, Instituto de
Investigaciones Jurídicas UNAM., 2007. p. 71. Al respecto señala PRIETO SANCHÍS:
"El constitucionalismo europeo de postguerra ha adquirido una singularidad tan acusada
que, al decir de algunos, no solo encarna una nueva y peculiar forma política inédita en el
continente, sino que incluso ha dado lugar al surgimiento de una nueva cultura jurídica,
el neoconstitucionalismo (
) no cabe la menor duda de que ese constitucionalismo ha
propiciado el alumbramiento de una teoría del derecho en muchos aspectos distinta y
hasta contradictoria con la teoría positivista que sirvió de marco conceptual al Estado
Hermenéutica constitucional 27
Por el contrario, los juristas partidarios de las tesis garantistas21 que inspiran
el Estado social de derecho, “se basan en principios deontológicos, abstractos y
cuyo epicentro de estudio lo constituye la distribución en términos de equidad,
propio de un modelo continental europeo centrado en un análisis lógico deductivo
fuertemente inspirado en principios de origen social demócrata”22. (…)23.
20
“(…) La distinción entre lo neoliberal y lo posliberal facilita precisar el objeto de la
crítica. Por neoliberal entiendo la filosofía y las prácticas que sustentan el conjunto de
políticas económicas que desde finales de los años ochenta han propuesto las instituciones
de crédito internacional y algunas organizaciones, como el Congreso norteamericano,
que tienen su sede en Washington (Williamson 1990, 1990b, 2000). Esta definición de
lo neoliberal muy cercana al Consenso de Washington, tal y como lo definió Williamson
a comienzos de los años noventa, precisa cuál es el tema de discusión. El enfoque
de Williamson es estrecho, pero si el concepto se extiende más se corre el peligro de
atribuirle al pensamiento posliberal afirmaciones y prácticas que solo caben en el marco
de lo neoliberal. El significado de posliberal, es mucho más amplio, y comprende toda
reflexión filosófica y económica que se ha dado alrededor del pensamiento liberal. En
este horizonte abierto caben autores tan disímiles como Mises, Hayeck, Rawls, Arrow,
Nozick y Sen". GONZÁLEZ, Jorge Iván. No hay falacia neoliberal. Bogotá: Universidad
Nacional, 2003. p. 55.
21
Como las derivadas de la justicia social, las cuales serán desarrolladas más adelante.
22
MONTENEGRO VIDAL, Álvaro. Esquemas y modelos constitucionales. Santiago:
Universidad de Chile, 2009. p. 87.
23
QUIROGA NATALE, Edgar Andrés. La ponderación de los derechos en el estado de
escasez. Entre la dimensión de peso jurídico y la eficiencia económica. En: Revista
Economía del Rosario. Bogotá (2007); p. 76.
24
"Por un lado, se afirma que los magistrados de la Corte Constitucional no tienen la
preparación económica suficiente para entender los grandes problemas que aborda la
economía, que violan permanentemente el principio de separación de poderes cuando
"legislan" positiva y negativamente, que sus decisiones son populistas, que conculcan el
principio democrático debido a la naturaleza contra mayoritaria de sus pronunciamientos
(Clavijo, 2001; Carrasquilla 2001, y Kalmanovitz, 2001); por otro, existen postulados
que sostienen que los jueces acuden a los peritos en la materia para fallar los casos
de los cuáles no detentan el pleno conocimiento, que el poder genérico del control de
constitucionalidad emana del mandato superior de la guarda y supremacía constitucional,
que la democracia no es el poder omnímodo de las mayorías y por lo tanto las minorías
encuentran el reconocimiento de sus derechos en el amparo constitucional, que la actuación
legislativa y administrativa no puede conculcar los postulados constitucionales so-pretexto
Hermenéutica constitucional 29
Por lo tanto, el juez debe tener una comprensión jurídica y económica integral en
la construcción de sus fallos para lograr la pertinencia de sus decisiones fundadas
en derecho (coherencia interna) pero al mismo tiempo un efecto útil al lograr la
mejor asignación desde una función de utilidad (coherencia externa)33.
Sumado a lo anterior, el juez también debe reparar entorno al modelo y/o teoría
económica imbricada a su primera elección, pues como se quiere demostrar
en el presente trabajo, la escogencia de una teoría de la justicia trae consigo la
aplicación de una o varias teorías económicas que la soportan (neoclásica, paretiana,
walrasiana, keynesiana, socialista, etc.), y, dependiendo la elección que se haga,
puede llegar a existir profundas y disímiles diferencias y consecuencias desde el
campo de la asignación y distribución que de los derechos y bienes se hace a través
de la sentencia.
Una vez establecida la teoría y/o modelo de justicia junto con la teoría y/o modelo
económico a utilizar, luego el juez debe encontrar los canales para desarrollarlas
y aplicarlas en la construcción de sus decisiones.
34
Sobre todo, los constitucionales.
35
Técnicas que serán detallas en acápites posteriores.
36
Concepto de creación propia a partir de la articulación y fusión de las teorías de la justicia
con los modelos económicos de la eficiencia, lo cual será objeto de estudio y referencia
en acápites posteriores.
32 Edgar Andrés Quiroga Natale
Con el fin de dar mayor claridad al objeto de estudio y su alcance dentro de éste
trabajo, se desarrollarán algunos aspectos importantes de delimitación a saber:
material, espacial, temporal y metodológico.
37
Ver, entre otros, por ejemplo: CALABRESI, Guido. El coste de los accidentes: análisis
económico y jurídico de la responsabilidad civil. España: Ariel, 1984; COOTER, Robert
y ULEN, Thomas. Derecho y Economía. México: Fondo de Cultura Económica, 2002;
POSNER, Richard. El análisis económico del derecho. México : Fondo de Cultura
Económica, 2007.
38
UPEGUI Mejía, Juan Carlos. "Doce tesis en torno al concepto de Estado social de
derecho". Universidad Externado de Colombia, Bogotá, 2009, pág. 34.
39
Concepto acuñado por el Tribunal Federal Constitucional Alemán y adoptado por
nuestro máximo Tribunal Constitucional en prolijo precedente en punto del cuál ha fijado
algunas pautas y nociones respecto de las cuales se destacan: 1). “(…) La Carta adopta
un modelo de economía social de mercado, que reconoce a la empresa y, en general, a
la iniciativa privada, la condición de motor de la economía, pero que limita razonable y
proporcionalmente la libertad de empresa y la libre competencia económica, con el único
propósito de cumplir fines constitucionalmente valiosos, destinados a la protección del
Hermenéutica constitucional 33
de dos corrientes diferentes (sin ser las únicas) en la misma Carta Política, que ha
generado una dicotomía clara sobre sus alcances interpretativos.
44
"...El Estado Social de Derecho, los principios de la dignidad humana y de solidaridad
social [
] guían la interpretación de la Constitución económica…”.
45
“… La carta no se limita, entonces, a regular la organización supra estructural del poder
público. NO. El constituyente recogió la tradición jurídica occidental de posguerra y
con ella una nueva visión del derecho constitucional, de la que deben destacarse cuanto
menos tres elementos esenciales. En primer lugar, el nuevo derecho constitucional diseña
un marco económico ontológicamente cualificado, que parte del reconocimiento de la
desigualdad social existente [
] No se trata entonces de un texto neutro que permita la
aplicación de cualquier modelo económico, pues las instancias de decisión política deben,
de una parte, respetar los límites impuestos por el conjunto de derechos, y de otra, operar
conforme a los valores y principios rectores que la Carta consagra, así como procurar la
plena realización de los derechos fundamentales"
46
"...La Constitución confiere un mayor valor a los derechos y libertades de la persona que
a los derechos y libertades de contenido puramente patrimonial, ya que expresamente
establece el dirigismo económico, es decir, consagra un mercado de bienes y servicios,
pero bajo la dirección del Estado, mientras que proscribe todo dirigismo en materia
política, ética o intelectual...".
47
"Con respecto a las limitaciones que según nuestro Estatuto Supremo se permite imponer a
la libertad económica, ha dicho la Corte que ´en el marco de un Estado Social de Derecho
(CP art.1), fundado en la dirección general de la economía por parte del Estado (CP
art.334), - tal libertad - está sometida a limitaciones potenciales más severas que las otras
libertades y derechos constitucionales`, pues como se dejó establecido en pronunciamiento
anterior, ´la Constitución confiere un mayor valor a los derechos y libertades de la persona
que a los derechos y libertades de contenido puramente patrimonial, ya que expresamente
establece el dirigismo económico, es decir, consagra un mercado de bienes y servicios pero
bajo la dirección del Estado, mientras que proscribe todo dirigismo en materia política,
ética o intelectual’ y, en consecuencia, debe hacerse una interpretación más amplia de las
facultades regulatorias del Estado en relación con las libertades económicas` por cuanto
la Constitución ha conferido un marco amplio y flexible al Congreso para regular estas
materias’ (sent. 265/94 M. P. Alejandro Martínez Caballero)…”.
48
"..Por consiguiente, los principios constitucionales en asuntos ligados a la economía,
por establecer el marco para el ejercicio de la actividad económica, tienen carácter
vinculante tanto para las autoridades públicas como para los particulares. En especial
dichos principios y reglas permiten confrontar en términos de validez las políticas
económicas y sociales que adoptan el legislador y el gobierno, cuya discrecionalidad
política forzosamente resulta limitada…”.
49
"...La intervención estatal en la economía tiene distinta modulación según el sector
económico sobre el cual recaiga, pues mientras en determinadas actividades o servicios
públicos considerados estratégicos puede ser muy intensa al punto de eliminar la iniciativa
36 Edgar Andrés Quiroga Natale
privada, en otros sectores tiene un menor grado en forma tal que se faculta a los particulares
para desarrollar determinadas actividades económicas con un permiso, autorización o
licencia por parte del Estado, e incluso, en algunos casos no se requiere ningún permiso
o autorización previa para el ejercicio de una determinada actividad, industria u oficio,
pues allí opera como regla general la libre iniciativa sin permisos previos (Art. 333
Constitución Política)...".
50
Por la existencia del bloque de constitucionalidad.
51
SALAZAR MICHELSEN, John. La proporcionalidad como método de interpretación
de principios. Argentina: Paidós, 2009. p. 25.
52
BERNAL PULIDO, Carlos. El principio de proporcionalidad y los derechos
fundamentales. Madrid: Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 2005. p. 519.
Hermenéutica constitucional 37
53
GONZÁLEZ CUELLAR, N. Proporcionalidad y derechos fundamentales en el derecho
penal. Madrid: Tecnos, 2005. p. 17.
54
BARRANTES GÓMEZ, Jorge. La ponderación en la ciencia jurídica. México: Lipsa,
2004. p. 72.
55
TECHEIRA, Gabriel. Instrumentos de argumentación jurídica. Argentina: Centro de
Estudios Políticos y Constitucionales, 2008. p. 22.
38 Edgar Andrés Quiroga Natale
Sin embargo, el interés del presente estudio se dirige al control judicial que se
hace por medio de la sentencia en el control constitucional57 (y no legalidad), por
las razones que siguen58.
Sin desconocer los prolijos debates respecto de la naturaleza de las normas que
se han suscitado en los últimos decenios59, la teoría del derecho contemporánea
estudia la norma jurídica a través de las categorías de reglas y principios como
principal expresión de su tipología.60.
56
PALACIOS MEJÍA, Hugo. La economía en el derecho constitucional colombiano.
Bogotá: Derecho Vigente, 1999. p. 6.
57
Lo anterior no es óbice para que las técnicas de proporcionalidad y ponderación puedan
ser utilizadas en el control de legalidad.
58
Estas categorías de diferenciación fueron objeto de estudio en un análisis preliminar de
este trabajo en QUIROGA Natale, Edgar. "Proporcionalidad y ponderación en la sentencia
constitucional". Ob. Cit. Pág. 30-39.
59
Ver, por ejemplo, Rugmman (1960), Stamber (1972), Balack (1985), Toseau (2001), entre
otros.
60
La aproximación conceptual y las diferencias entre estas categorías se desarrollarán en
un acápite posterior del presente estudio.
61
Pues no es una condición estática, en la medida que las leyes también contienen principios
y la Constitución reglas jurídicas.
62
En punto de discusión sostiene Ardiles "Los diseños constitucionales y legales no obedecen
exactamente a los mismos propósitos; los primeros pretenden generar presupuestos
políticos de convivencia y morigerar las permanentes tensiones entre detentadores y
destinatarios del poder a través del establecimiento de límites a quien tiene el poder y
derechos y deberes respecto de quien funge como destinatario (
) razón por la cual los
Hermenéutica constitucional 39
68
Aplicada a normas infra constitucionales.
69
MORA RESTREPO, Gabriel. Justicia constitucional y arbitrariedad de los jueces. Teoría
de la legitimidad en la argumentación de las sentencias constitucionales. Buenos Aires:
Marcial Ponds, 2009. P. 21, 22.
70
QUIROGA Natale, Ob. Cit. Pág. 33-34.
71
Para profundizar en la aplicación de la "Lex specialis" se recomienda la lectura de Tardío
quien además de considerar la "ley especial" como un principio general del derecho,
también lo define como un criterio tradicional de solución de antinomias. (TARDÍO Pato,
Juan Antonio. "El principio de especialidad normativa (lex specialis) y sus aplicaciones
jurisprudenciales". Revista de Administración Pública No. 162, Madrid, 2003, pág 8.
Hermenéutica constitucional 41
72
FERRERES COMELLA, Víctor. Justicia constitucional y democracia. Madrid: Centro
de Estudios Políticos y Constitucionales, 1997. p. 28.
73
Principalmente integrada por la categoría de normas jurídicas denominadas reglas.
74
Generalmente expresada como un hipotético binario en donde a unos supuestos de hecho,
se les corresponde una consecuencia jurídica.
42 Edgar Andrés Quiroga Natale
Por las razones anotadas (y otras que se harán explicitas en posteriores apartados),
se justifica la delimitación material del objeto de estudio, a las decisiones judiciales
– constitucionales, las cuales se producen como consecuencia del control de
constitucionalidad.
75
Conforme a la teoría expuesta por North sobre su comprensión de las instituciones, la
cual habrá de desarrollarse en el capítulo I del presente estudio.
76
Entorno a la importancia económica de los referidos agregados constitucionales, anota
López: "más allá de la letra escueta están los objetivos estratégicos señalados por el
constituyente. Es la aspiración final o voluntad de la Constitución que hay que edificar,
contando con criterios de control de constitucionalidad que le pongan techo, pero también
piso, al accionar de los distintos órganos del poder". LOPEZ Obregón, Clara. Economía
de los derechos. Bogotá: Colegio Mayor Nuestra Señora del Rosario, 2005. p. 30.
77
En los cuales se encuentre reconocido el principio de supremacía constitucional.
Hermenéutica constitucional 43
Bajo este nuevo ordenamiento, el Estado desde el mismo año de 1991, comenzó
a mutar su política exterior y de apertura económica lo cual paulatinamente fue
consolidando diferentes procesos de integración no solo en el ámbito político,
comercial y financiero, pues concomitante a ello, también se dieron procesos de
integración jurídica.
78
Algunas ideas parciales de éste numeral (2.2.1), fueron expuestas preliminarmente en
el marco del desarrollo de esta tesis en QUIROGA Natale, Edgar Andrés. "Tipicidad
constitucional y control de convencionalidad en Colombia a partir de 1991. Nociones
elementales.". Legis - VC Editores. Bogotá, 2015. Pág. 3.
44 Edgar Andrés Quiroga Natale
Una diferencia preliminar entre estos dos conceptos, que sirve como criterio de
delimitación material y metodológica es la siguiente80:
Entenderemos por Derecho económico a “la disciplina que estudia los efectos
económicos de los mercados explícitos dentro del marco de la regulación jurídica”81.
79
Concepto que será tratado más adelante.
80
Las diferencias existentes entre derecho económico y análisis económico del derecho,
fueron preliminarmente expuestas en el marco del este trabajo en QUIROGA Natale,
Edgar Andrés, Ob. Cit. Pág. 26-27.
81
GRIANI ORDUZ, Luis Vicenzo. Derecho económico y regulación en el marco de la
nueva economía. México: Paidós, 2007. P. 24.
Hermenéutica constitucional 45
“el Derecho Económico proporciona las bases teóricas del entendimiento de ambas
disciplinas para que éstas puedan ser sujetas de ulteriores aplicaciones. Ninguna
de las “metodologías” contemporáneas de aplicación de las ciencias económicas y
jurídicas, parten de la nada (teóricamente hablando), los fundamentos son abrevados
del Derecho Económico que a partir de sus estudios interdisciplinares ha generado un
gran avance en la compresión de escenarios de regulación jurídica pero que son –per
se- escenarios de interacción económica explícita (…) por ejemplo en el campo de los
servicios públicos domiciliarios, el derecho de la competencia, telecomunicaciones,
derecho energético, etc.”82
82
STRECKMAN, John. Derecho y economía en escenarios de mercado. (P. Matheus, Trad.).
USA: Universidad de Michigan, 2009. P. 58.
83
En la medida que existen otros enfoques como la Public Choice, la economía institucional,
la escuela de Chicago, entre otros.
84
RUBIO, Mauricio. Economía jurídica. Introducción al análisis económico del derecho
iberoamericano. Bogotá: Universidad Externado de Colombia, 2007. p. 247.
85
ROEMER, Andrés. Introducción al análisis económico del derecho. México: Fondo de
Cultura Económica, 1994. p. 6, 7.
46 Edgar Andrés Quiroga Natale
86
“Aunque el economista no puede decir a la sociedad si debe tratar de limitar el robo,
sí puede demostrar que sería ineficiente permitir un robo ilimitado; así, puede aclarar
un conflicto de valores demostrando cuánto de un valor -la eficiencia- debe sacrificarse
para alcanzar otro. O bien, tomando como dada una meta de limitación del robo,
el economista debe ser capaz de demostrar que los medios por los cuales ha tratado
la sociedad de alcanzar dicha meta son ineficientes: que la sociedad podría obtener
mayor prevención, a un costo menor, empleando métodos diferentes (
) Por lo que hace
al papel positivo del análisis económico del derecho -el intento de explicar las reglas
y los resultados legales tal como son, en lugar de cambiarlos para volverlos mejores
-(
) muchas áreas del derecho, sobre todo, pero no únicamente, los grandes campos del
derecho común de la propiedad, los cuasidelitos, los delitos y los contratos, ostentan la
marca del razonamiento económico"POSNER, Richard, Op. cit., p. 57.
PRIMERA PARTE.
APROXIMACIÓN A LAS PRINCIPALES TEORÍAS Y/O
MODELOS ECONÓMICOS Y DE JUSTICIA
87
En lo que respecta a la asignación y distribución de derechos a través de la sentencia
constitucional.
88
Con respecto a los paradigmas en cita de algunos modelos de estas disciplinas.
50 Edgar Andrés Quiroga Natale
Resulta de valía anotar que en muchas de las teorías y/o modelos que se exponen,
el concepto justicia se encuentra íntimamente ligado a la igualdad, por el contrario,
el concepto eficiencia tiene como premisa o requisito sine quanon a la libertad.
Bajo este entendido, el bien común no existe, pues lo único común son las
reglas generales para el ejercicio de la libertad; por lo tanto, la justicia no es una
Hermenéutica constitucional 51
categoría que pueda aplicarse a una situación social en general sino a los procesos
que se desarrollaron para llegar a ella, dando una enorme importancia al marco
general de reglas ex – ante de asignación y ex – post de ejercicio.
“(…) El Estado Mínimo nos trata como individuos inviolables, que no pueden
ser usados en ciertas formas por otros como medios o herramientas o instrumentos
o recursos; nos trata como personas con derechos individuales con la dignidad
que esto constituye. Tratándonos con respeto al respetar nuestros derechos, nos
permite, individualmente o con quien escojamos, escoger nuestra vida y alcanzar
nuestras metas y nuestra concepción de nosotros mismos, en la medida en que
podamos, ayudados por la cooperación voluntaria de otros individuos con la
misma dignidad. Cómo se atreve cualquier Estado o grupo de individuos a hacer
más o menos (…)90.
89
¿Qué es la justicia? Una defensa del bien común desde la teoría económica de la justicia
distributiva.
90
NOZICK, Robert. "Anarchy, State, and Utopia", Basic Books, 1974 pág 334.
91
BUCHANAN, James y TULLOCK, Gordon. "El cálculo del consenso: fundamentos
lógicos de la democracia constitucional”, Barcelona, Planeta Agostini, 1993. Pág. 111.
52 Edgar Andrés Quiroga Natale
“(…) Espero haber mostrado que la frase “justicia social” no es, como mucha gente
piensa, una expresión inocente de buena voluntad hacia los menos afortunados, sino
que ha llegado a ser la insinuación deshonesta de que uno debe aceptar las demandas
de algún interés especial para las cuáles no hay razones reales (…) El mayor servicio
que yo les puedo hacer a mis conciudadanos es que logre hacer avergonzar a los oradores
y escritores por usar el término “justicia social” (…)92.
92
HAYEK Von, Friedrich. "Law, legislation and liberty", 1976. Pág. 96, 97.
93
VON MISES, Ludwing. "La acción humana". Traducido del inglés por Reigalbio Joaquín.
Unión Editorial. S.A. Madrid, 1986. Pág. 123.
94
FRIEDMAN Milton y FRIEDMAN Rose. “Free to choose”. Ed. Orbis S.A., New York,
1980.
Hermenéutica constitucional 53
Si la acción de “A” está condicionada solo por las preferencias de “A” para generar
“Z” sin exceder las fronteras propias de las reglas ex – ante a su elección, entonces,
solo puede ser eficiente aquella decisión que proteja “Z” pues no hacerlo supondría
una mengua en la satisfacción de la elección en procura de proteger derechos
indeterminados, lo cual generaría una pérdida irrecuperable de la eficiencia del
derecho.
En igual sentido Arrow (1950) sostuvo que no puede equipararse el bien común
a la “agregación de las preferencias individuales” 96, pues resulta imposible medir de
forma objetiva y veraz la manera como se agregan dichas preferencias al no existir
ningún sistema de votación adecuado y consistente para probar que la agregación
de preferencias individuales es igual a la preferencia colectiva. Lo anterior se conoce
como el “teorema de la imposibilidad de Arrow”97 el cual fue explicitado en un
famoso modelo matemático que sirve de soporte científico a las tesis libertarias,
para sostener la inexistencia de modelos de equidad que vayan mas allá que la
garantía de los derechos y preferencias individuales.
96
ARROW, Kenneth. "Social choice and individual values". New York, Yale, 1963, pág.72
97
ARROW, Kenneth and DEBREU, Gerard. “Existence of and equilibrium for a competitive
economy”, Econométrica, New York, 1954. Pág. 18-32.
98
CASTELLANOS. Ob. Cit. Pág. 46 y 47.
99
FRIEDMAN, Milton. "Lerner on the economics of control". Journal of political economy,
chicago, 1947. Pág. 52.
Hermenéutica constitucional 55
Sin embargo, solo fue hasta que las tesis en cita fueron “matematizadas”, y
comenzaron a darse modelos de aplicación de las mismas, que surgió lo que hoy
conocemos como microeconomía, la cual nace de la retoma del pensamiento clásico
pero con un gran énfasis en la marginalidad, utilidad y el equilibrio general, lo
cual suele identificarse con un pensamiento económico neoclásico.
100
Véase SMITH, Adam. "Investigación sobre la naturaleza y las causas de la riqueza de
las naciones". Trad. Gabriel Franco, México, 1958, pág. 44. SMITH, Adam. "Wealth
of nations", ed. W.R. Scott, 1925, pág. 69. RICARDO, David. "Principios de economía
política y tributación". Fondo de Cultura Económica. México, 1992. Pág. 28.
101
BECKER, William. "Homo economicus". Chicago, 1981, pág 2.
102
Ver MENGER, CARL. "Principios de economía política". Unión Editorial, México, 1997.
Pág. 112-146. JEVONS, William Stanley. 2The theory of political economy". London
1871. Pág 68 -89. WALRAS, León. "Élements d´ économie politique pure". Paris, 1926.
Pág 214 - 269. MARSHALL, Alfred. "Principles of economics". London. 1980. pág 39
- 122.
56 Edgar Andrés Quiroga Natale
103
http://www.economia.ws/oferta-y-demanda.php Consultado el 02 de febrero de 2012.
8:00am
104
http://www.economia.ws/oferta-y-demanda.php Consultado el 02 de febrero de 2012.
8.21am
Hermenéutica constitucional 57
A estos conceptos básicos se les fueron agregando otros cuya utilidad para el
estudio que nos ocupa resulta insoslayable, tal es el caso conceptos como: el
excedente del consumidor, el excedente del productor, las curvas de indiferencia,
la elasticidad y la utilidad marginal.
http://gitetur.wikispaces.com/Las+funciones+de+demanda+y+oferta+y+sus+movimientos.
105
108
http://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Economic-surpluses_es.svg. Consultado el 10 de
febrero de 2012. 5:00pm.
109
MNKIW. Ob. Cit. Págs. 280 y 281.
110
http://jaimesuarez10.blogspot.com/2010/08/el-estudio-del-comportamiento-del.html.
Consultado el 02 de abril de 2012. 10:00pm.
Hermenéutica constitucional 59
Epd: 30/10
Epd: 3
preferencias.
113
Los individuos siempre prefieren mas a menos bienes y/o servicios.
114
MANKIW. Ob. Cit. Pág. 56.
115
MANKIW. Ob. Cit. Pág. 56.
60 Edgar Andrés Quiroga Natale
Epo: 20/10
Epo: 2
http://www.gestiopolis.com/economia/economia-y-sus-conceptos.htm. Consultado
116
El concepto de elasticidad es muy útil para establecer los niveles e impacto de las
variaciones de las cantidades ofrecidas y demandadas ocurridas por la introducción
de variables o determinantes que las hacen modificar.
http://www.gestiopolis.com/economia/economia-y-sus-conceptos.htm. Consultado
118
122
PARETO, Vilfredo. "Manual of political economy". London, 1906, pág. 33.
64 Edgar Andrés Quiroga Natale
menos una situación social a en la que todos los individuos digan unánimemente
que prefieren a a b (…)”123
Esta teoría llevada de forma sencilla al campo del consumo de los derechos,
podría suponer que un derecho (bien) es igual a la sumatoria de los elementos
intrínsecos que lo componen, por ejemplo si el derecho (bien) está compuesto
por los elementos a, b, c y d, es decir X: (a+b+c+d); entonces, si una decisión Y
está mejorando los elementos a, b y c pero empeorando d se podría decir que hay
eficiencia relativa respecto a, b y c pero ineficiencia relativa en d; sin embargo si X
es mirado de forma absoluta, la conclusión será que la decisión Y es ineficiente.
CASTELLANOS García, Daniel. ¿Qué es la justicia? Una defensa del bien común desde
123
“(…) Los sistemas estatales autoritarios hoy en día parecen resolver el problema
del desempleo a expensas de la eficiencia y la libertad. Es cierto que el mundo no
toleraría por mucho tiempo el desempleo que, aparte de breves intervalos de auge,
está asociado –y, en mi opinión, inevitablemente aceptado- con el individualismo
capitalista presente. Pero puede ser posible, mediante un correcto análisis del
problema, curar la enfermedad preservando la eficiencia y la libertad (…)132”.
131
P Por ejemplo el “Tratado de la probabilidad”, “Tratado sobre la reforma monetaria”, “Cómo
pagar la guerra” y “Teoría general del empleo, el interés y el dinero”, entre otras.
132
K KEYNES, John Maynard. “Teoría del empleo, el interés y el dinero”. Fondo de Cultura
Económica, México, 1990. Pág 88.
133
Tosa oferta genera su propia demanda.
Hermenéutica constitucional 67
OA=C+A
A = Inversión producto.
DA = C + Ip + (G-R) + (X-M)
Consumo (C)
134
Siguiendo los postulados desarrollados en Keynes. Ob. Cit.
135
Siguiendo los postulados desarrollados en Keynes. Ob. Cit.
136
Tomado de CUEVAS. Ob. Cit. Pág. 322.
68 Edgar Andrés Quiroga Natale
137
CUEVAS. Ob. Cit. Pág. 322.
138
FERNANDEZ RIVA, Javier. “Modelos clásico y keynesiano. Un enfoque teórico con
especial atención a su relevancia para la economía colombiana”. Universidad Externado
de Colombia. Bogotá, 2007, pág. 61 y 62.
Hermenéutica constitucional 69
Para North las instituciones son “(…) restricciones que surgen de la inventiva
humana para limitar las interacciones políticas, económicas y sociales (…)”141. Estas
a su vez pueden ser formales tales como las constituciones, leyes, decretos, etc.,
pero también existen instituciones informales como los usos y costumbres sociales
que en su conjunto forman el “ambiente institucional” sobre el cual se limitan y/o
permiten las interacciones y/o transacciones.
139
Ver “Instituciones, cambio institucional y desempeño económico”.
140
Ver “Las instituciones económicas del capitalismo”, “Comportamiento y desarrollo
institucional”.
141
NORTH. Ob. Cit. Pág. 24.
142
Respecto a la relación entre costos de transacción y cambio institucional sostiene
Pinzón:“(…) Al analizar las razones por las cuales se generan los cambios marginales
en el ambiente institucional, se observa, que éstos son el resultado de un análisis costo
– beneficio que realiza cada uno de los agentes que se ven afectados por el arreglo
institucional vigente. Así, si los recursos que se deben invertir para propiciar el cambio,
producen beneficios superiores a dicha inversión, el agente tendrá razones para intentar
llevar a cabo esa iniciativa. En caso contrario, es posible que se esté frente a un escenario
de equilibrio institucional (…)” PINZON Camargo, Mario Andrés. “Aproximaciones al
análisis económico del derecho”. Universidad Externado de Colombia. Bogotá, 2010.
Pág. 95.
70 Edgar Andrés Quiroga Natale
reestructurar los acuerdos. Obsérvese que una situación así, no significa que todo
el mundo esté satisfecho con las normas y contratos existentes, sino sólo que los
costos y beneficios relativos de alterar el juego, entre las partes, indican que no es
aconsejable hacerlo (…)”143.
Por ejemplo, hace unos años nuestro ordenamiento jurídico establecía que los
hijos nacidos por fuera del matrimonio eran de “dañado y punible ayuntamiento”
(posteriormente se les denominó “naturales”), y en razón a dicha condición, les
era proscrito la asignación de algunos derechos de los cuales solo gozaba el hijo
“matrimonial”. Lo anterior debido al marcado confesionalismo que regía en la
época tanto en la costumbre como en las normas positivas. En la actualidad,
dichas instituciones formales tuvieron que ser replanteadas conforme también,
cambió la dinámica social para entender que tanto los unos como los otros tienen
los mismos derechos.
143
NORTH. Ob. Cit. Págs. 113 y 114.
144
El cual ha de estudiarse en el presente acápite.
Hermenéutica constitucional 71
145
A saber malformación grave del feto, riesgo médico para la vida de la madre y haber sido
la concepción producto de un acceso carnal violento (Sentencia C-355 de 2006).
146
Bajo el entendido que la eutanasia puede ser vista como una forma negativa de proteger
el derecho iusfundametal a la vida en condiciones dignas (Sentencia C-239 de 1997).
147
Sentencia C-075 de 2007 y C-577 de 2011.
148
Sentencia T-911 de 2009.
149
Sentencia c-577 de 2011.
150
Sentencia SU-617 DE 2014.
151
En obras como “El Capital”, “El manifiesto comunista”, “Del socialismo utópico al
socialismo científico”, entre otras.
152
La cual constituye la teoría económica del valor en Marx.
153
Ya que Marx afirma en “el capital” que en un comienzo dicho orden estaba jerarquizado en
prioridad a quien era el dueño de la tierra (terrateniente), luego a éstos les fue arrebatado
el poder por quienes son los dueños del medio de producción denominado capital (los
capitalistas), pero tanto unos y otros dependen para existir de la fuerza laboral del
proletariado, el cuál resulta ser el mas importante en la relación de producción, entonces
conforme a un nuevo orden social debería ser el proletariado quien detentara el poder.
Lo anterior extraído de las reflexiones de MARX, Carl. “El Capital”. Fondo de Cultura
Económica, México, 1987. Pág. 35 a la 74.
72 Edgar Andrés Quiroga Natale
estudios revelan una clara inclinación igualitaria pero con fundamento en criterios
de eficiencia; sin embargo, sus postulados resultan disímiles entre sí debido a sus
particulares posturas epistemológicas, políticas y económicas, razón por la cual
expondremos su pensamiento de forma separada.
“(…) Los seres humanos están bajo el gobierno de dos amos soberanos, el placer
y el dolor (…) principio que aprueba o desaprueba cualquier acción de acuerdo
con la tendencia que parezca tener de aumentar o disminuir la felicidad de la parte
cuyo interés esté en cuestión, o, lo que es lo mismo en otras palabras, de promover
u oponerse a esa felicidad (…)”155.
154
Por ejemplo John Mill, Sidgwick, Beltine, Cristemuar, entre otros.
155
BENTHAM, Jeremy. “The principles of morals and legilslation”, In: Colection Great
Boocks in philosofhy, Prometheus Books, 1998. Pág 1.
Hermenéutica constitucional 73
En el mismo sentido, Ariely157 afirma que como los seres humanos somos
predeciblemente irracionales (pues repetimos sistemáticamente siempre los mismos
errores), no resulta eficiente crear una función de utilidad con base en suma
agregada de preferencias en términos absolutos, ya que la mayoría de las personas
tomamos decisiones en relación con las alternativas disponibles, es decir, decidimos
en contexto y generalmente eliminando los usos mas difíciles de elección, por lo
tanto, resulta poco factible un método que racionalmente determine bajo efectos
de homologación lo que se debe entender por “felicidad colectiva”.
156
SKIDELSKY, Eduard y SKIDELSKY Robert. “Cuánto es suficiente. Qué se necesita
para una “buena vida”?”. Colección Letras de crítica, Madrid, 2012.
157
ARIELY, Dan. “Las trampas del deseo. Cómo controlar los impulsos irracionales que
nos llevan al error”. Ariel, Madrid, 2008.
158
MCMAHON M., Darrin. “Una Historia de la felicidad”. Traducción Jesús Cuellar y
Victoria Gordo. Taurus, Madrid, 2006.
74 Edgar Andrés Quiroga Natale
colectivo “A” se protege solo si la felicidad total “B” es reducida por la amenaza
y/o violación de “C”, incluyendo para la obtención de “B” la ganancia de “C” o
el aporte de “C” para conseguir “B”.
El juez para solucionar el caso bajo la hipótesis i) debería tener en cuenta tanto
los daños como las bondades que la empresa esté generando con esa explotación,
pues si la felicidad colectiva entorno al ruido se ve disminuida, pero respecto del
trabajo local que genera la empresa dicha felicidad se ve aumentada, entonces,
se debería hacer un análisis comparativo de la felicidad total la cual está siendo
influida por ambas variables.
Por el contrario, bajo la adopción de la hipótesis ii) el juez solo debería corroborar
que la amenaza o violación que se arguye se presente y que esta disminuya la
felicidad total pero solo en relación con el ruido que provoca la actividad de
extracción.
Para que ese consenso sea legítimo debe partir (posición original) de un acuerdo
ex ante sobre una situación hipotética distante o, también llamado por Rawls, unas
reglas distantes detrás de un velo de incertidumbre:
“(…) Cuando a una sociedad se le cuestiona sobre cuáles deberían ser las
reglas que las rijan y no pueden anticipar cómo les iría, o que saldrán ganando o
perdiendo es muy probable que se pongan de acuerdo sobre un marco regulador
que se legitima por el consenso. Es importante el velo de la ignorancia sobre lo que
podría pasar para evitar que la racional choice termine buscando la maximización
del interés individual. Así se alcanza una acción social satisfactoria así no sea
óptima (…)”161
160
RAWLS, John. “Teoría de la Justicia”, Fondo de Cultura Económica, México, 1997.
Pág. 17.
161
RAWLS, John. OB. Cit. Pág. 42.
76 Edgar Andrés Quiroga Natale
En el mismo sentido:
“(…) 1. Cada persona ha de tener un derecho igual al mas extenso sistema total de
libertades básicas compatible con un sistema similar de libertad para todos. 2. Las
desigualdades sociales y económicas han de ser estructuradas de manera que sean para:
a) Mayor beneficio de los menos aventajados, de acuerdo con un principio de ahorro
justo163, y b) Unidos a los cargos y las funciones asequibles a todos, en condiciones de
justa igualdad de oportunidades (…)”164.
162
Tomado del concepto del evaluador anónimo del artículo “La ponderación de derechos
en el estado de escasez. Entre la dimensión de peso jurídica y la eficiencia económica.
QUIROGA Natale, Edgar. Ob. Cit. Pág 140.
163
También llamado principio de la diferencia o criterio maximim.
164
CASTELLANOS. Ob. Cit. 74.
165
“(…) Del principio de igualdad pueden a su vez ser descompuestos en cuatro mandatos:
(i) un mandato de trato idéntico a destinatarios que se encuentren en circunstancias
idénticas, (ii) un mandato de trato enteramente diferenciado a destinatarios cuyas
situaciones no comparten ningún elemento en común, (iii) un mandato de trato paritario
Hermenéutica constitucional 77
Trato Paritario: Si hay igualdades y diferencias, pero las igualdades son mayores.
Plantea una teoría de la justicia por fuera del marco tradicional en donde la
preocupación es hallar la naturaleza de la jusiticia perfecta, por el contrario, su
169
Véase por ejemplo: i) “Bienestar, justicia y mercado”. Paidos, Barcelona, 1997. ii)
“Collective choice and social Welfare”, Colection Advanced Texbooks in Economics,
1979. iii) “Interpersonal agregation and partial comparability”, Econometrica, 1970.
iv) SEN, Amartya. “The Idea of Justice”. Cambridge, 2009. v) “The impossibility of a
Paretian liberal”. Journal of political economy, 1978, entre otros.
170
CASTELLANOS. Ob. Cit. Pág. 52.
Hermenéutica constitucional 79
“(…) Aquí se sotiene que puede haber distintas razones de justicia y cada una
sobrevive al escrutinio de la crítica, pero da pie a conclusiones divergentes. Argumentos
razonables en direcciones opuestas pueden surgir de personas con diversas experiencias
y tradiciones, pero también pueden emanar de una sociedad determinada o incluso
de la misma persona. Existe una necesidad de argumentación razonada, con uno
mismo y con los otros, para lidiar con reivindicaciones enfrentadas, en lugar de lo que
se puede llamar “tolerancia indiferente”, que se escuda en la comodidad de una postura
perezosa, del estilo “tú tienes razón en tu comunidad y yo tengo razón en la mía”. El
razonamiento y el escritinio imparcial son esenciales (…)”171.
“(…) La justicia guarda relación, en última instancia, con la forma en que las
personas viven sus vidas y no simplemente con la naturaleza de las instituciones que las
rodean. En contraste, muchas de las principales teorías de la justicia se concentran de
manera abrumadora en cómo establecer “instituciones justas”, y conceden una función
subsidiaria y dependiente a las cuestiones relacionadas con el comportamiento. (…) El
énfasis en las vidas reales para la evaluación de la justicia tiene muchas implicaciones
de largo alcance para la naturaleza y el alcance de la idea de justicia (…)” 172.
Sin duda alguna los aportes de Sen superan los campos estrictamente filosóficos
y económicos, pues han tenido importante eco y relevancia en el derecho
constitucional y una aplicación notoria en tres escenarios especiales relacionados
con la sentencia constitucional a saber:
171
SEN, Amartya. “The Idea of Justice”. Cambridge, 2009, pag. 14.
172
SEN, Amartya. Ob. Cit. pag. 15.
80 Edgar Andrés Quiroga Natale
Ver por ejemplo sentencias C-022 de 1996, C-470 de 2011, T-555 de 2011, T-141 de
173
174
Cuya obra ha sido objeto de reiteradas citas en el presente acápite.
175
Ver algunos de sus trabajos como: “La Moral por acuerdo”, Barcelona, Gedisa. 1994.
176
Ver algunos de sus trabajos como: “The bargainning problem”. Econometrica, 1950 y
“Non – cooperativegames”, The annals of mathematics, 1951.
177
CASTELLANOS. Ob. Cit. Pág. 81.
178
GAUTHIER, David. ““La Moral por acuerdo”, Barcelona, Gedisa. 1994. Pág. 21 y 25.
82 Edgar Andrés Quiroga Natale
El otro gran exponente del modelo en estudio es John Nash, quien formuló
varios postulados matemáticos de masiva aplicación en el campo de la teoría de
juegos y la negociación. Uno de sus principales desarrollos lo llevó a modelar una
teoría del equilibrio decisional partiendo de la búsqueda de la mayor ganancia
colectiva (utilidad) que puede obtener un grupo de individuos en interacciones
no cooperativas.
179
“(…) Aunque sus antecedentes van, atrás en el tiempo, hasta los trabajos de Cournot
(1838) y Edgeworth (1881), la teoría de juegos sólo llegó a ser un cuerpo coherente con la
publicación, en 1944, del Theory of Games and Economic Behavior del matemático John
von Neumann y del economista austriaco Pskar Morgenstern (…)” MONSALVE, Sergio
y AREVALO, Julián. “Un curso de teoría de juegos clásica”. Universidad Externado de
Colombia, Bogotá, 2005, pág. 13.
180
“(…) En el dilema del prisionero se se analizan los incentivos que tienen 2 presos
encarcelados por un delito menor para delatar al otro a la policía y acceder así a beneficios
penitenciarios, teniendo siempre en cuenta la decisión que podría tomar el otro:
Este ejercicio considera el supuesto de que cada prisionero está encarcelado por separado,
de tal forma que no pueden comunicarse entre ellos, ponerse de acuerdo, pactar sus
decisiones o saber qué hace el otro.
Las posibilidades de condena en función de la decisión tomada por ambos son las
siguientes:
a) NADIE DELATA: si ninguno de los dos delatase al otro a la policía, entonces cada
uno recibiría una condena de 2 años: (-2, -2).
b) UNO DELATA AL OTRO: si uno de los prisioneros delatase al otro, pero este otro
no delatase al uno, entonces el prisionero que delata reduciría su condena hasta solo 1
año, mientras que el prisionero delatado vería incrementada su condena hasta 10 años:
posibilidades (-10, -1) y (-1, -10).
c) AMBOS SE DELATAN MUTUAMENTE: si ambos deciden delatar al otro, entonces
recibirán una condena de 6 años de cárcel para cada uno (-6, -6).
La conclusión que explica este ejercicio, es que el pensamiento lógico por separado de
cada prisionero hace que al final cada uno tome por separado la decisión que es mejor
para él individualmente y no la que sería la mejor decisión para el bien común.
Si nos ponemos en la piel de uno de los dos prisioneros, sabemos que nuestra mejor
decisión será la de delatar al otro en cualquier caso, pues así siempre minimizaremos
nuestra condena, independientemente de lo que el otro haga. Y dado que el otro prisionero
es igual de inteligente y razonará de la misma manera, lo que al final ocurrirá es que
ambos acabarán pasando 6 años entre rejas (-6, -6), mientras que si hubieran cooperado
hubieran sido condenados sólo 2 (-2, -2). (…)”.http://mundodelaempresa.blogspot.
com/2012/12/economia-la-teoria-de-juegos-el-dilema.html Consultado el 15 de octubre
de 2014. 4:35pm.
Hermenéutica constitucional 83
De forma cartesiana Nash establece como primer paso, una lectura integral
del problema a estudiar descomponiéndolo en todas las posibles soluciones y/o
combinaciones de interacción (conjunto de negociación) para tener un panorama
general y segmentado del problema a resolver. Sumado a lo anterior, establecer
los escenarios de desacuerdo y el impacto que se genera si el acuerdo fracasa.
La teoría de juegos como derivación del modelo de justicia por negociación y/o
ventaja mutua, resulta útil al juez constitucional de control en concreto (a través
de la técnica de la ponderación), sobre todo en aquellos escenarios en donde de
conformidad con sus competencias, le es posible proponer una fórmula de arreglo
a las partes en litigio, verbi gracia en la audiencia de pacto de cumplimiento al
interior de una acción popular.
De igual forma, la teoría de juegos puede ser aplicada por el juez constitucional
de control abstracto (a través de la técnica de la proporcionalidad), para establecer
en el juicio de necesidad del instrumento de intervención que se demanda (por
ejemplo una ley), si del conjunto de los instrumentos idóneos posibles para cumplir
con el fin propuesto se escogió el que menos intervención hace en el derecho o
derechos demandados, ya que (como se explicará mas adelante) si no cumple esta
condición el instrumento de intervención a pesar de ser idóneo debe ser declarado
inconstitucional por no satisfacer la condición de necesidad.
181
“(…) La solución debe ser independiente de alternativas irrelevantes. Esta condición
es distinta a la condición de Arrow con el mismo nombre. La intución de Nash (1950)
en este caso es que, si los negociadopres en algunas ocasiones convienen una solución
“S” cuando la solución “T” está disponible. Mejor dicho si usted prefirió badeja paisa
estando el ajiaco disponible, usted nunca debe escoger el ajiaco estando la bandeja paisa
disponible. De manera un poco mas técnica, si la solución de un problema dada por un
conjunto “grande” de opciones pertenece también a un conjunto “pequeño” de opciones
(donde el conjunto pequeño está enteramente contenido en el conjunto grande), entonces
debe ser cierto que la solución del problema dado por el conjunto pequeño de opciones
debe ser igual a la solución del problema dado por el conjunto grande de opciones
(…)”CASTELLANOS. Ob. Cit. Pág. 84.
182
FELBER, Cristian. “La economía del bien común. El modelo económico del futuro”.
Resumen del Autor http://www.christian-felber.at/vortraege/valencia.pdf . Consultado
el 17 de agosto de 2015 a las 5:00pm.
84 Edgar Andrés Quiroga Natale
Las citadas propuestas quieren evitar juegos de suma cero, y por el contrario,
maximizar la mayor ganancia colectiva posible a partir de identificar diferentes
escenarios de ventaja mutua aplicando estrategias de función de utilidad
expansiva.
una técnica.
Ver autores como Letran, Gowens, Atienza, Dueñas, Palacios, entre otros.
184
90 Edgar Andrés Quiroga Natale
La pretensión de hallar la “verdad” a través del uso de la razón, no solo resulta ser
una premisa válida en el estricto campo de la ciencia, pues también es un proceso
moralmente aceptado: “(…) La fe y la razón (Fides et ratio) son como las dos alas con
las cuales el espíritu humano se eleva hacia la contemplación de la verdad (…)185.
“(…) aunque la existencia de casos trágicos suponga que hay situaciones en que el
sistema jurídico no permite llegar a alguna respuesta correcta, ello no quiere decir que
la toma de la decisión en estos casos escape por completo al control racional. El hecho
de que no exista una respuesta que pueda calificarse de correcta o de buena, no quiere
decir que todas las posibles alternativas sean equiparables. O dicho de otra manera,
el que no hay una respuesta buena no significa que no podamos decir que unas son
185
Carta Encíclica Fides et ratio. Sumo Pontífice Juan Pablo II. Tomado de: http://w2.vatican.
va/content/john-paul-ii/es/encyclicals/documents/hf_jp-ii_enc_14091998_fides-et-ratio.
html consultado el 25 de enero de 2015. 10:00am.
186
MACCORMICK, Neil. “Legal reasoning and legal theory”, Clarendon Press, Oxford,
1978. Pág 97.
187
“(…) En el mundo jurídico, se van a manejar con frecuencia criterios de racionalidad
o de razonabilidad. La racionalidad es la coherencia interna. Un ejemplo es el Código
Civil napoleónico que no tiene contradicción alguna en sus textos. La razonabilidad
profundamente ligada al pragmatismo norteamericano es la coherencia externa. Por lo
tanto, factores extraños al mundo jurídico pueden entrar a jugar en la interpretación de
las normas (…)”DUEÑAS Ruiz, Oscar José. “Lecciones de hermenéutica jurídica”.
Universidad del Rosario, Bogotá, 2011, pág. 105.
Hermenéutica constitucional 91
peores que otras, de manera que lo que debemos –lo que un juez debe- hacer en tales
situaciones es, sencillamente, optar por el mal menor (…)”188.
Una de las nociones que de lo racional y razonable resulta mas útil para los
efectos del presente trabajo, subyace en las consecuencias económicas de optar por
uno u otro concepto, como por ejemplo obrar de forma racional prescindiendo
de lo razonable. Por lo tanto, resulta bastante fecunda la discusión que sobre el
particular sostienen Sibley y Rawls:
“(...) Una lectura desde la filosofía política y moral acerca de las interrelaciones
entre racionalidad y razonabilidad puede encontrarse en el libro de JOHN RAWLS
Liberalismo Político. Citando un artículo de W.M. SIBLEY en donde se discuten las
relaciones entre lo razonable y lo racional, RAWLS propone una distinción basada en el
comportamiento de las personas: saber que las personas obran racionalmente no implica
saber qué fines persiguen; sabemos únicamente que persiguen fines inteligentes. Saber,
por el contrario, que obran razonablemente implica saber que las personas obran de
acuerdo con un principio a partir del cual podrán razonar unas con otras. Lo razonable,
por lo tanto, está imbuido según RAWLS de una forma particular de sensibilidad
moral –expresada en el deseo de cooperar socialmente- de la que carece el agente
meramente racional. La idea de derivar lo razonable de lo racional, esto es, derivar
principios de justicia de las decisiones y preferencias de los individuos, es rechazada de
plano por RAWLS. Para éste, lo razonable y lo racional son elementos necesariamente
interdependientes en el marco de una sociedad razonable, en el entendido de que los
agentes meramente razonables no tienen objetivos propios a promover a través de la
cooperación, los agentes meramente racionales carecerían por completo de un sentido de
188
ATIENZA, Manuel. “Interpretación constitucional”, Universidad Libre, Bogotá, 2010,
pág. 150.
189
GOWENS, Cristopher. “Moral dilemas”, Oxford University Press, New York, 1987, pág.
29 y 30.
92 Edgar Andrés Quiroga Natale
190
LAMPREA MONTEALEGRE, Everaldo. El test de razonabilidad en la jurisprudencia
de la Corte Constitucional durante el año 2001. En : Anuario de Derecho Constitucional,
Universidad Externado de Colombia, (2001); p. 37.
191
El estudio del precedente constitucional sobre el particular se hará mas adelante dentro
del presente acápite.
192
Del cual se dará cuenta mas adelante.
Hermenéutica constitucional 93
iv) Respeto por las cargas de argumentación: La decisión racional debe tener
respeto a las siguientes cargas: a) Indubio pro libertate (carga a favor del
derecho – presunción de inconstitucionalidad), y, b) Indubio pro legislatore
(carga a favor de la norma – presunción de constitucionalidad).
si determinada medida resulta adecuada y necesaria para la finalidad perseguida, sin que
se sacrifiquen valores, principios o derechos de mayor entidad constitucional para el
caso concreto que se analiza (…)”.Corte Constitucional. Sentencia C-695 de 2013. M.P.
Nilson Pinilla Pinilla.
194
BERNAL Pulido, Carlos. “El derecho de los derechos”. Universidad Externado de
Colombia, Bogotá 2005. Pág. 25 y 26, 266 y 267. Aunque no se anota la referencia de
forma textual, si se extrae de su contendido los argumentos expuestos.
94 Edgar Andrés Quiroga Natale
iii) Se utiliza para la mayoría de los casos en razón al respeto del principio
democrático (recurrentemente aplicado en normas de carácter tributario,
financiero y en general económico).
1.1.1.2. Intermedio:
1.1.1.3. Estricto:
1.2.1 Idoneidad:
Este sub principio busca establecer si el instrumento de intervención en el derecho
(s) es legítimo desde el punto de vista formal, a partir del análisis de dos aspectos:
195
Algunas reflexiones del presente apartado fueron parcial y preliminarmente expuestas
(en desarrollo de ésta tesis), en QUIROGA Natale, Edgar Andrés. “Proporcionalidad y
ponderación en la sentencia constitucional”. UPTC, Tunja, 2011. Y QUIROGA Natale,
Edgar Andrés “La ponderación de los derechos en el estado de escasez. Entre la dimensión
de peso jurídica y la eficiencia económica. En : Revista Economía del Rosario, (2007);
Bogotá.
196
Como principio, ALEXY; como método de interpretación, CEPEDA; como herramienta
de argumentación, DEWEY, etc.
197
BERNAL Pulido, Carlos. El principio de proporcionalidad y los derechos fundamentales.
Madrid : Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 2005. p. 72.
96 Edgar Andrés Quiroga Natale
1.2.2. Necesidad
El sub principio de necesidad, persigue verificar que el instrumento de
intervención adoptado (que además ya se ha catalogado previamente como
idóneo), haya sido el que menor sacrificio (afectación, mengua o reducción en
satisfacción) produzca en el derecho(s) intervenido(s); es decir, que de todos los
instrumentos idóneos posibles para lograr el fin, se haya elegido el que menos
afecta al derecho(s).
Desde una perspectiva jurídica, el juez debe constatar (en el caso concreto),
si para conseguir el fin perseguido por la intervención solo puede utilizarse el
instrumento propuesto (del cual ya previamente se estableció su idoneidad), y de
ser positivo, el instrumento automáticamente sería necesario. No obstante, por
la textura abierta, indeterminación y nivel de abstracción de los fines, en la gran
mayoría de los casos, para cumplir un fin (por ejemplo la seguridad), se pueden
desplegar múltiples instrumentos; la difícil tarea del juez será, establecer si del
Hermenéutica constitucional 97
Según lo anotado, es importante que el juez (para evitar llegar a una decisión
injusta en términos de equidad e ineficiente en términos de asignación), lleve a cabo
el procedimiento de constatación enunciado a partir de unos criterios objetivos y
una metodología establecida ex – ante, con el objeto de verificar en el caso concreto
la necesidad formal y material del instrumento de intervención bajo examen.
“Una de las deficiencias más notorias que puede apreciarse en la bibliografía que se
refiere al principio de proporcionalidad, radica en su inconsistencia terminológica. El
aspecto en donde éste problema se presenta con mayor intensidad, es el uso intercambiable
y confuso entre los conceptos de ponderación y de principio de proporcionalidad. Con
bastante probabilidad, una de las causas de éste uso inconsistente estriba en la pluralidad
de significados que puede adscribirse al término de ponderación. Por ponderación se
puede entender una forma de tomar decisiones, consistente en sopesar razones que juegan
a favor y en contra de una específica solución, un método jurídico contrapuesto a la
subsunción para aplicar las normas jurídicas, una forma de fundamentar decisiones
en derecho y el resultado que éstas decisiones contienen ”198.
Por lo tanto, y para los propósitos del presente trabajo, es pertinente la distinción
de dos acepciones importantes del término ponderación, en la medida que
dependiendo de la utilización que de cada una de ellas se haga, ha de emplearse
una técnica de aplicación diferente.
198
BERNAL Pulido, Carlos. Op. cit. p. 565.
98 Edgar Andrés Quiroga Natale
“En sentido estricto, la ponderación es uno de los pasos en la aplicación del principio
de proporcionalidad, generalmente el último paso, en el cual el juez lleva a cabo una
evaluación del grado en el cual una norma o situación determinada afecta un derecho
o principio constitucional, por una parte, y de la importancia de los valores, principios,
intereses u objetivos constitucionales invocados para justificar la imposición de dicha
carga, por otra”199.
Desde el modelo clásico o tradicional, éste sub principio busca establecer si los
sacrificios generados por el advenimiento del instrumento de intervención cubren
los beneficios pretendidos por la medida. En punto de discusión anota Bernal:
“…Según éste subprincipio, la importancia del objetivo que persigue la intervención
en el derecho fundamental debe estar en una relación adecuada con el significado del
derecho intervenido. En otras palabras, las ventajas que se obtengan mediante la
intervención en el derecho fundamental deben compensar los sacrificios que ello implica
para su titular y para la sociedad en general”200.
Por lo tanto, el examen jurídico que el juez constitucional suele efectuar en este
juicio, debe dirigirse a verificar que la medida considerada idónea y necesaria,
prima facie represente en términos de bienestar colectivo o general una ganancia
mayor que la mengua, limitación, restricción, afectación, etc., del derecho(s)
intervenidos(s).
2. La ponderación (en sentido amplio) en el modelo clásico
o tradicional.
2.1. Aproximación Contextual. Distinción entre principios
y reglas.
Además de lo preliminarmente anotado sobre éste tópico en el acápite
introductorio del presente estudio, es relevante ahondar sobre la distinción entre los
principios y las reglas, ya que la teoría del derecho contemporánea propone prolijos
debates referentes a la naturaleza, definición y estructura de las normas jurídicas
como prescripciones alusivas al poder de definición, así como instrumentos de
sujeción práctica para el mantenimiento del orden a través del control judicial201.
199
CEPEDA ESPINOSA, Manuel. Op. cit, p.138.
200
BERNAL PULIDO, Carlos. El Derecho de los derechos. Bogotá : Universidad Externado
de Colombia, 2005. p. 136.
201
Ver Gobski (1995), Vellondi (1999), Zagrebelsky (2014), entre otros. Además, vale la
pena recordar el fecundo debate Hart-Dworkin acerca de la existencia, comportamiento,
estructura y aplicación de las normas
Hermenéutica constitucional 99
Bajo el cobijo del pensamiento positivista (entre otros Kelsen y Hart), se llegó
a pensar que el ordenamiento jurídico era la sumatoria de reglas que generaban
consecuencias jurídicas; es decir, que la norma estaba integrada solo por las
categorías de reglas y sub-reglas; a contrario sensu, estudios y teorías como las
expuestas por Dworkin y Alexy, comenzaron a vislumbrar la existencia de otra clase
de norma jurídica cuya estructura, definición y comportamiento dista de la regla; a
esa categoría se le dio el nombre de Principios202. Bajo este nuevo entendimiento,
comienza a estudiarse diferentes tipos de normas jurídicas como los valores y
principios, y a elaborarse una dogmática entorno a su comprensión, definición y
alcance dogmático, así como de sus diferencias con las reglas.
Como punto de encuentro o semejanza puede afirmarse que las reglas y los
principios cumplen dentro del ordenamiento jurídico la misma función: “Principios
y reglas son normas jurídicas que regulan la conducta humana y que se utilizan para
construir y fundamentar las decisiones jurisdiccionales”203; no obstante, las diferencias
que separan las categorías en cita, se fundan en diversos criterios tales como “su
estructura, su carácter, el método de aplicación y la forma de resolver posibles conflictos
normativos”204.
Siguiendo los criterios de distinción expuestos por Arango, podemos concluir
que entre reglas y principios subyacen las siguientes diferencias a saber:
2.1.1. De acuerdo con su estructura
Las reglas jurídicas tienen la forma de un juicio de imputación205; es decir siguen
la fórmula: a un supuesto de hecho le corresponde una consecuencia jurídica (Si
sucede A entonces B).
Por lo tanto, las reglas se presentan como un condicional hipotético, ya que
la asignación de las consecuencias jurídicas se dan en relación causal y directa
con la ocurrencia del supuesto de hecho; por lo tanto, al darse el supuesto debe
Sin embargo autores como MEDELLIN señalan que la nomoárquica o principialística no es una
202
disciplina reciente ni novedosa ya que desde los albores de la ciencia jurídica los principios fueron
objeto de estudio y aplicación. AL respecto sostiene “(…) Podemos entonces en este punto afirmar
que la ciencia jurídica nació de la principialística (…) No estamos entonces ahora presenciando
el nacimiento de la principialística, sino de su renacimiento (…)”. MEDELLIN, Carlos. “La
interpretatio iuris y los principios generales del derecho. Corte constitucional”. Bogotá. Legis,
2018, pág.40.
203
BERNAL PULIDO, Carlos. El principio de proporcionalidad y los derechos fundamentales.
Madrid : Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 2005. p. 572.
204
ARANGO RIVADENEIRA, Rodolfo. Derechos, constitucionalismo y democracia. Bogotá
: Universidad Externado de Colombia. Serie de Teoría Jurídica y Filosofía del Derecho,
Nº 33 (2004); p. 237.
205
KELSEN, Hans. Teoría pura del derecho. (R. Vernengo, Trad.). 7 ed. México : Porrúa,
1993. p. 42-48.
100 Edgar Andrés Quiroga Natale
206
ALEXY, Robert. Tres escritos sobre los derechos fundamentales y la teoría de los
principios. Bogotá : Universidad Externado de Colombia, 2002. p. 95.
207
SIECKMANN, Jan R. El modelo de los principios del derecho. Bogotá : Universidad
Externado de Colombia, Serie de teoría jurídica y filosofía del derecho, Nº 43 (2006); p.
32.
208
ARANGO, Rodolfo. Op cit., p. 238.
209
DWORKIN, Ronald. Es el derecho un sistema de normas. ID. La filosofía del derecho.
México : Fondo de Cultura Económica, 1980. p. 93.
210
Ibid., p. 148.
Hermenéutica constitucional 101
en colisión, razón por la cual, debe tener en cuenta la importancia relativa de cada
uno ya que “La decisión que el juez adopta, no implica un juicio de valor abstracto
sobre la subordinación de un principio a otro, sino solamente un juicio relativo al caso
específico, en donde el principio que tenga mayor peso, determinará el sentido de la
decisión”211. En consecuencia, desde la visión Dworkiniana, las reglas poseen un
carácter de aplicación absoluta, mientras los principios se aplican de acuerdo al
juicio relativo dependiendo de la dimensión de peso de cada uno.
Tanto Alexy como Dworkin aceptan la existencia de una diferencia lógica entre
reglas y principios, pues “las normas contienen determinaciones en el ámbito de lo
fáctica y jurídicamente posible y por lo tanto sólo pueden ser cumplidas o no (…) los
principios son mandatos de optimización”212, por lo tanto éstos pueden ser cumplidos
en diversos grados.213
ALEXY, Robert. Teoría de los derechos fundamentales. (E. Garzón Valdés, Trad.). Madrid
212
Además éstas sub reglas dentro del marco institucional ex ante tienen
mandatos de aplicación: jerarquía se prefiere a especialidad; especialidad se
prefiere a temporalidad, por lo tanto, (de forma silogística); jerarquía se prefiere
a temporalidad.
215
Concepto y técnica que será desarrollada más adelante.
216
ARANGO, Rodolfo. Op cit., p. 238.
217
GONZÁLEZ TRIANA, Eduardo. Reglas y sub reglas de los conflictos normativos.
México : Libertad, 2009. p. 15.
218
Ibid., p. 22
219
ALEXY, Op cit., p. 90.
Hermenéutica constitucional 103
por un lado, cómo ha de construirse una colisión de principios; y por otro lado, qué
criterios existen para la fundamentación de relaciones de preeminencia…”222.
Bajo este uso amplio, debe entenderse la ponderación como una técnica - sistema
de argumentación y aplicación de los principios jurídicos en donde a uno o a
un grupo de ellos, se le otorga un peso adicional con el objeto de solucionar sus
colisiones en el ámbito del caso concreto. Conforme con estas aproximaciones,
la ponderación puede ser utilizada como una técnica de aplicación autónoma e
independiente de la proporcionalidad. Al respecto sostiene Rodríguez: “el principio
de proporcionalidad en sentido amplio solo se lleva a la práctica cuando los derechos
fundamentales son objeto de intervención por parte de medidas estatales, y que, en
cambio, la ponderación se aplica, cuando la intervención en el derecho proviene de
un acto particular”223.
Se comparte la tesis de la autonomía de la ponderación en sentido amplio, sin
ser excluyente con la primera acepción desarrollada, ya que se utilizan en ámbitos
de aplicación diferente a saber: a) En aquellos casos en los cuales se da la colisión
de principios por el advenimiento de un instrumento de intervención estatal, la
ponderación puede servir de apoyo adicional al análisis realizado a través de triada
de subprincipios de aplicación de la proporcionalidad ya estudiados; es decir, en
este escenario la ponderación se utiliza como complemento de la proporcionalidad.
b) En aquellos casos en los cuales existe una colisión de principios generada de facto
(sin instrumento de intervención) por la tensión natural que pueda presentarse
en el ejercicio mismo de los principios, la ponderación se aplica como técnica
totalmente autónoma e independiente de la proporcionalidad224.
2.3. Técnica de la ponderación.
La técnica de ponderación en sentido amplio se desarrolla por medio de tres
“juicios” o fases de examen a saber: i) ley de la ponderación; ii) fórmula del peso;
y, iii) respeto a las cargas de la argumentación.
222
SIECKMANN, Jan – R. Op cit., p. 34.
223
RODRÍGUEZ De Santiago, José María. La ponderación de bienes e intereses en el derecho
administrativo. Madrid : Centro de Estudios Constitucionales, 1998. p. 109.
224
Para ilustrar el segundo escenario de aplicación enunciado (ponderación como técnica
autónoma) por ejemplo, piénsese en la colisión entre el principio a la intimidad y el
principio a la libertad de prensa, en el evento que un periodista sigue constantemente
para tomar fotografías a una persona (podría tratarse de un político) que ostenta la
calidad de “figura pública”. El referido enfrentamiento no se da por el advenimiento
de un instrumento de intervención estatal (ley, decreto, ordenanza, acuerdo, etc.), por
el contrario, éste se produce por el ejercicio particular de los derechos de cada una de
las personas involucradas (el periodista y el político). La técnica para solucionar casos
como el citado no obedece a la “triada” de subprincipios de la proporcionalidad, pues la
autonomía de la técnica adoptada bajo la acepción de ponderación en sentido amplio se
materializa en la creación de una estructura propia la cual se estudiará a continuación.
Hermenéutica constitucional 105
La ley en cita, tiene por objeto crear un marco de condicionamiento que funge
como punto de referencia de todas las ponderaciones, en donde para que exista
equilibrio, lo que pierde en satisfacción el principio no aplicado, debe ganarlo en
mayor satisfacción el principio respecto del cual se pondera en favor. En torno a la
comprensión de la ley de ponderación sostiene Medellín “(…) Lo anterior quiere
decir, que la relación de restricción – protección de un principio es inversamente
proporcional; en cuanto mayor sea la restricción de un principio, el principio en
conflicto protegido debe ser más importante (…)”226.
225
ALEXY, Robert. Ob. cit., p. 37
226
MEDELLÍN Rincón Alexander. “La ponderación y el análisis económico del derecho
integrados”. Universidad Externado de Colombia, Bogotá, 2013, pág. 55.
106 Edgar Andrés Quiroga Natale
del caso concreto debe ponderarse a favor de A; lo que pierde B debe trasladarse
en mayor satisfacción de A.
GAx * PAx * Sx
Px,yC: _________________
GAy * PAy * Sy
El peso del principio “x” con relación al principio “y” en las circunstancias del
caso concreto, es igual al producto entre el grado de afectación (GA), el peso
abstracto (PA), y la seguridad de las premisas empíricas respecto de su afectación
(S) del principio x, dividido por el producto entre el grado de afectación (GA),
el peso abstracto (PA), y la seguridad de las premisas empíricas respecto de su
afectación (S) del principio y.
El grado de afectación (GA), indica que tanto se afecta un principio con respecto
al otro; se refiere al nivel de disminución en la satisfacción del derecho, es decir al
227
Explicitado en su obra “Teoría de los Derechos fundamentales” y en tratándose de la
aplicación de la fórmula del peso en particular “sobre la ponderación y la subsunción:
una comparación estructural”, En: Revista Pensamiento Jurídico, Universidad Nacional
de Colombia, Bogotá, 2006, pág. 157 – 172.
228
Se aclara que la nomenclatura creada por ALEXY para referirse a las variables es la
siguiente: grado de afectación es (IPiC); peso abstracto (GPiA) y la seguridad de las
premisas empíricas (SPiC). De acuerdo con los determinados niveles, las variables de
afectación y peso abstracto son los siguientes: leve: 2 a la 0; medio: 2 a la 1; intenso: 2 a la
2. Con respecto a las escalas y valores relativos a la seguridad de las premisas empíricas
son los siguientes: seguro: 2 a la 0; plausible: 2 a la -1; no evidentemente falso: 2 a la -2.
Hermenéutica constitucional 107
La escala propuesta por Alexy (con las adaptaciones indicadas) para medir la
intensidad de la afectación es:
229
Por ejemplo, en la cultura jurídica latinoamericana que recoge la tradición continental
europea de influencia greco-romana, el “valor” del derecho a la vida se encuentra dentro
del mayor pondus, en la medida que se considera el derecho primigenio, y, por lo tanto,
epicentro natural de la realización de las demás garantías, bajo el entendido que sin vida
es imposible disfrutar de algún otro derecho; sin embargo, por ejemplo, en algunos países
del Medio Oriente el peso abstracto asignado a la religión y al culto va más allá que el
mismo “valor” asignado a la vida como derecho (bajo una racionalidad distinta a la
occidental), razón por la cual tendría un mayor pondus dentro del referenciado contexto
social.
230
Por ejemplo, sería muy poco probable que se le afectara el derecho a la salud a una
persona que se le niega por parte de una EPS una intervención quirúrgica meramente
estética (levantamiento de mentón); por el contrario, sí existiría una gran probabilidad
108 Edgar Andrés Quiroga Natale
Una providencia que devela la especial importancia que la Corte otorga a los
conceptos de racionalidad y razonabilidad, es la sentencia T-330 de 1993 en
donde estudiando el caso de una profesora a la que el Ministerio de Educación
Nacional le negó una petición de traslado de su lugar de trabajo al sitio donde se
domiciliaba (a pesar de sufrir un cáncer que le impedía realizar desplazamientos
largos y continuos), la Corporación arriba a las conclusiones a partir de un
estudio en términos de racionalidad y razonabilidad jurídica de los criterios de
diferenciación y discriminación así:
“(…)15. De otra parte, los medios escogidos por el legislador no sólo deben guardar
proporcionalidad con los fines buscados por la norma, sino compartir su carácter de
legitimidad. El principio de proporcionalidad busca que la medida no solo tenga un
fundamento legal, sino que sea aplicada de tal manera que los intereses jurídicos de
otras personas o grupos no se vean afectados, o que ello suceda en grado mínimo. De esta
forma, la comunidad queda resguardada de los excesos o abusos de poder que podrían
provenir del empleo indiscriminado de la facultad legislativa o de la discrecionalidad
atribuida a la administración(…)”235.
234
Corte Constitucional. Sentencia T-330 de 1993. M.P. Alejandro Martínez Caballero.
235
Corte Constitucional. Sentencia T-422 de 1992. M. P. Eduardo Cifuentes Muñoz.
Hermenéutica constitucional 111
de la sociedad frente al ordenamiento jurídico. Se impone pues, frente al concepto que
reduce el derecho a una mera técnica de aplicación abstracta de las normas. Es quien
debe desentrañar el contenido material de los derechos fundamentales y procurar su
eficacia con base en los límites antes aludidos. Es sobre los criterios de valor legítimante
que debe recaer su sentencia. Esto porque dichos derechos no sólo tienen el carácter de
normas jurídicas en su pleno sentido, sino que son también valores que deben orientar
el ejercicio de la autoridad (…)”.237
237
Corte Constitucional. Sentencia T-124 de 1993. M.P. Vladimiro Naranjo Mesa.
238
Esta ubicación temporal es relativa, pues como se mostrará mas adelante, la Corte no
siempre utiliza unos modelos y técnicas homogéneas.
Hermenéutica constitucional 113
Sin embargo, durante este período fue mas usado el primer modelo en cita
importando los escrutinios racionales desarrollados en la jurisprudencia de la Corte
Suprema de Estados Unidos “en aplicación de la cláusula equal protection, prevista
por la decimocuarta enmienda (…) se funda en la existencia de distintos niveles de
intensidad en los “escrutinios” o “test” de igualdad (estrictos, intermedios, débiles)”240.
A continuación se citarán algunas de las providencias que evidencian la adopción
del comentado modelo.
239
Corte Constitucional. Sentencia C-093 de 2001. M.P. Alejandro Martínez Caballero.
240
BERNAL Pulido, Carlos. El derecho de los derechos. Op cit., p. 266.
114 Edgar Andrés Quiroga Natale
por las autoridades, en virtud de las cuales es legítimo aquel trato diferente que está
ligado de manera sustantiva con la obtención de una finalidad constitucionalmente
importante. (…)241
“El test leve se limita a establecer la legitimidad del fin y de la medida, debiendo
ésta última ser, además, adecuada para alcanzar el fin buscado. En consecuencia, la
Corte se limita cuando el test es leve, por una parte, a determinar si el fin buscado y el
medio empleado no están constitucionalmente prohibidos y, por otra, a establecer si el
medio escogido es adecuado, esto es, es idóneo para alcanzar el fin propuesto. Este es,
por así decirlo, el punto de partida o de arranque en el análisis de la razonabilidad.
La intensidad leve como punto de partida del test de razonabilidad tiene como
fundamento el principio democrático, así como la presunción de constitucionalidad
que existe sobre las decisiones legislativas. La aplicación ordinaria de un test leve en
el análisis de razonabilidad tiene como finalidad exigir que el legislador no adopte
decisiones arbitrarias y caprichosas sino fundadas en un mínimo de racionalidad.
Esta carga que pesa sobre el legislador, al igual que sobre cualquier autoridad pública
y órgano estatal, surge directamente de la razón de ser misma del constitucionalismo
que, desde sus orígenes históricos y su consolidación en el periodo de la Ilustración,
aspira a lograr que el poder sea ejercido de conformidad con la razón no con la fuerza.
De ahí que preguntarse qué se busca con una norma (análisis de la finalidad), cómo
se va a lograr lo buscado (análisis del medio) y qué tan propicia es la medida para
alcanzar lo buscado (análisis de la relación medio-fin), sean criterios elementales para
determinar si la afectación de la igualdad, u otro derecho fundamental, es razonable y,
por lo tanto, constitucional o, arbitraria, y, por lo tanto, inconstitucional. (…) Un test
menos intenso –llamado test intermedio- ha sido empleado por la Corte para analizar
la razonabilidad de una medida legislativa, en especial 1) cuando la medida puede
afectar el goce de un derecho constitucional no fundamental, o 2) cuando existe un
indicio de arbitrariedad que se refleja en la afectación grave de la libre competencia. El
test intermedio involucra elementos más exigentes de análisis que el test leve. Primero,
se requiere que el fin no sólo sea legítimo sino también constitucionalmente importante,
en razón a que promueve intereses públicos valorados por la Carta o en razón a la
magnitud del problema que el legislador busca resolver. Segundo, se exige que el medio,
no solo sea adecuado, sino efectivamente conducente a alcanzar el fin buscado por la
norma sometida a control judicial. (…) Con respecto al test estricto de razonabilidad,
los elementos de análisis de la constitucionalidad son los más exigentes. El fin de la
241
Corte Constitucional. Sentencia C-445 de 1995. M.P. Alejandro Martínez Caballero.
Hermenéutica constitucional 115
medida debe ser legítimo e importante, pero además imperioso. El medio escogido debe
ser no sólo adecuado y efectivamente conducente, sino además necesario, o sea, que
no pueda ser remplazado por un medio alternativo menos lesivo. Adicionalmente, el
test estricto es el único que incluye la aplicación de un juicio de proporcionalidad en
sentido estricto. El juicio de proporcionalidad en sentido estricto es el cuarto paso del test
estricto de razonabilidad. Este exige que los beneficios de adoptar la medida excedan
claramente las restricciones impuestas sobre otros principios y valores constitucionales
por la medida”242.
Carga
Intensidad del Relación
Fin Medio argumentativa
Control medio - fin
aplicable
Indubio Pro-
LEVE Legítimo Legítimo Adecuada
legislatore
Legítimo Adecuada
Indubio Pro-
ESTRICTO Importante Legítimo Conducente
libertate
Imperioso Necesaria
244
Corte Constitucional. Sentencia C-022 de 1996. M. P. Carlos Gaviria Díaz.
Hermenéutica constitucional 117
“(…)En cuanto a los pasos, la Corte ha establecido que se debe establecer: (i) si el
fin perseguido por la norma o medida que se analiza es legítimo desde la perspectiva
constitucional; (ii) si la norma o medida es adecuada para el logro del fin perseguido;
(iii) si la norma es necesaria, es decir, si no existen medios menos onerosos para lograr
el objetivo buscado; y (iv) si la norma es estrictamente proporcional, con lo cual se
indaga si los beneficios que se derivan de su adopción superan las restricciones que
ella conlleva sobre otros derechos y principios constitucionales – en una relación de
costo – beneficio (…)246
245
Corte Constitucional. Sentencia SU-624 de 1998. M. P. Eduardo Cifuentes Muñoz..
246
Corte Constitucional. Sentencia C-417. M.P. Juan Carlos Henao Pérez.
247
La tabla que se presenta es de fuente propia basada en el precedente constitucional.
118 Edgar Andrés Quiroga Natale
“(…) Un análisis elemental muestra que estos dos enfoques, lejos de ser contradictorios,
son complementarios. Así, ambos pretenden determinar si el trato diferente tiene o no
un fundamento objetivo y razonable, para lo cual examinan si dicho trato es o no un
instrumento idóneo para alcanzar ciertos propósitos admitidos por la Constitución. Esta
complementariedad explica que esta Corte, cuando ha tenido que estudiar problemas
de igualdad, ha privilegiado en ocasiones el juicio de proporcionalidad248 mientras que
en otras sentencias ha preferido recurrir a la metodología de los escrutinios de distinta
intensidad(…)”249.
Otro ejemplo que devela la actual utilización del test integrado de razonabilidad
adoptado por la Corte, es la sentencia C-726 de 2014 donde se estudió la
constitucionalidad de los artículos 419 y 421 del código general del proceso
(respecto a la presunta violación de los mismos al principio de igualdad), para lo
cual acudió a la ejecución de un examen mixto así:
248
Ver, entre otras, las sentencias T-230 de 1994 y C-022 de 1996.
249
Corte Constitucional. Sentencia C-093 de 2001. M. P. Alejandro Martínez Caballero.
Hermenéutica constitucional 119
únicamente para los fallos de primera instancia adversos a los derechos del trabajador,
afiliado o beneficiario, siempre y cuando no se haya ejercido el recurso de apelación. Lo
cual, desde el punto de vista constitucional se materializa en los postulados del artículo
228 Superior, a tener una pronta y efectiva administración de justicia, asunto relevante
y significativo para un Estado Social de Derecho, entre otras, porque reafirma la vigencia
de un orden justo. 4.5.4.2. Medio adecuado y efectivamente conducente. En este
punto, es necesario recordar que la institución de la Consulta fue establecida como una
revisión oficiosa del superior jerárquico, conservando hasta la fecha la misma estructura
normativa en lo relativo a su procedencia frente a las sentencias de primera instancia.
En efecto, persiste su limitación a los casos de primera instancia, con exclusión de las
sentencias dictadas por los jueces laborales/civiles o municipales de pequeñas causas y de
competencia múltiple en única instancia. Dicha clasificación se encuentra en el artículo
12 del CPT y SS (…) Ahora bien, por virtud del artículo 15 del Decreto Ley 2158 de
1948, el juez competente para surtir el grado de consulta, son las Salas Laborales de los
Tribunales Superiores de Distrito Judicial, de lo que se evidencia que el juez natural
que surte la consulta de las sentencias de primera instancia son las Salas Laborales del
respectivo Tribunales Superiores del respectivo Distrito Judicial, y sólo las proferidas
por los jueces laborales en primera instancia. Por lo que excluir de su carga laboral
aquellas inferiores a 20 Sml/v proferidas por los jueces laborales en única instancia, los
municipales de pequeñas causas y de competencia múltiple y donde no hay juez laboral
el del circuito civil, efectivamente contribuye en algún grado a la descongestión de los
Tribunales Superiores en lo que respecta a sus salas laborales. Lo cual, cumple con el
propósito de ser un medio adecuado y efectivamente conducente para la descongestión
de la jurisdicción ordinaria laboral. 4.5.4.3. La proporcionalidad de la medida frente
al sacrificio de otros derechos. Por un lado se concluyó que la finalidad de la norma es
la descongestión de la administración de la justicia laboral, y en el caso específico, de
las Salas Laborales de los Tribunales, a través de la reducción de providencias sobre las
cuales se surte el grado jurisdiccional de consulta. Ahora bien, en vista que los derechos
reclamados ante dicha jurisdicción, versan sobre derechos laborales y de la seguridad
social -mínimos e irrenunciables-, los cuales gozan de especial protección por parte de
la Constitución, es necesario determinar, si el sacrificio en razón de la cuantía de los
derechos de los trabajadores es proporcional frente al fin de la descongestión judicial
de la segunda instancia (…)251.
“(…) El test integrado de igualdad permite evaluar las medidas que son acusadas
de contrariar el principio de igualdad. Este test comprende tres etapas de análisis: (i)
la identificación de los sujetos o situaciones reguladas por la medida y el parámetro de
comparación predicable de los mismos; (ii) la escogencia del nivel de intensidad del juicio
de igualdad, de acuerdo con la naturaleza de la medida analizada; y (iii) el escrutinio
sobre la medida, conforme con los grados de exigencia que prevea el grado de intensidad
escogido(…)”253
En recientes sentencias C-091 de 2018 y C-031 de 2019 (las cuales estudiaron
las demandas de incontitucionalidad de: i) los artículos 282 de la Ley 1564 de
2012, Código General del Proceso y artículo 2513 del Código Civil, y, ii) inciso
segundo del artículo 421 (parcial) de la Ley 1564 de 2012 “medio de la cual se
expide el Código General del Proceso y se dictan otras disposiciones”), la Corte reitera
252
Corte Constitucional. Sentencia C-520 de 2016. M.P. María Victoria Calle..
253
Corte Constitucional. Sentencia C-220 de 2017. M.P. José Antonio Cepeda Amaris .
122 Edgar Andrés Quiroga Natale
254
Corte Constitucional. Sentencia C-091 de 2018. M.P. Alejandro Linares Cantillo.
Hermenéutica constitucional 123
Nivel de Aplicación de la
Escrutinio Racional Proporcionalidad
Leve Idoneidad
Idoneidad
Intermedio
Necesidad
Idoneidad
Estricto Necesidad
Proporcionalidad en estricto sentido
255
Corte Constitucional. Sentencia C-031 de 2019. M.P. Gloria Stella Ortiz Delgado.
256
Fuente propia.
124 Edgar Andrés Quiroga Natale
257
Con la revisión jurisprudencial que a continuación se presenta, no se pretende hacer una
investigación exhaustiva del quehacer de la Corte respecto del tema sub–examine; sólo
se realiza una descripción muy breve y general del “estado del arte” jurisprudencial en
torno a la adopción de la ponderación.
258
CEPEDA ESPINOSA, Manuel. Op cit., p. 137.
259
Ibid., p. 140.
Hermenéutica constitucional 125
260
CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia T-466 de 1992. M.P. Ciro Angarita Barón.
261
CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia T-080 de 1993. M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz.
126 Edgar Andrés Quiroga Natale
Las fuertes tensiones entre los partidarios de las tesis conservadoras y liberales
entorno al uso de la ponderación se ven reflejadas en providencias como la
sentencia C-221 de 1994, mediante la cual se despenaliza el consumo de la dosis
personal, en donde el pensamiento liberal representado por los magistrados Carlos
Gaviria Díaz, Jorge Arango Mejía, Antonio Barrera Carbonell, Eduardo Cifuentes
Muñoz y Alejandro Martínez Caballero, acogió utilizar la técnica de ponderación
para demostrar que el principio al libre desarrollo de la personalidad está por
encima del principio de seguridad pública, cuando los efectos del ejercicio del
primero solo impactan a la persona y no se extienden al colectivo, porque, según
esta comprensión, el Estado debe garantizar que el ser humano sea un “fin en sí
mismo” maximizando el criterio de libertad. Por otro lado, y en franca oposición,
se manifestaron los partidarios del pensamiento conservador representado por los
magistrados José Gregorio Hernández, Hernando Herrera Vergara, Fabio Morón
Díaz y Vladimiro Naranjo Mesa, quienes a partir de fuertes salvamentos de voto
argumentaron entorno a la imposibilidad de reemplazar la voluntad del legislador
por la ponderación subjetiva del juez de acuerdo su comprensión subjetiva de la
norma, y se mostraron en total desacuerdo con el concepto de libertad que derivó
la tesis mayoritaria que se impuso en la sentencia. Por su utilidad se extrae el
siguiente abstract de los votos disidentes en cita:
262
Ver sentencias: CORTE CONSTITUCIONAL. C-133 de 1994. M.P. Antonio Barrera
Carbonell, y C-1114 de 2003. M.P. Jaime Córdoba Triviño.
263
CEPEDA ESPINOSA, Manuel. Op cit., p. 141..
Hermenéutica constitucional 127
“(…) No asiste razón a los jueces de tutela, al afirmar que los Gobernadores de
los Cabildos Indígenas de la Zona del Norte de Cauca violaron el derecho al debido
proceso del actor, pues estas autoridades tuvieron extremo cuidado en cumplir el
procedimiento que tradicionalmente se utiliza en la comunidad. Además, se le permitió
ejercer su defensa personalmente durante las Asambleas realizadas el 24 de diciembre
de 1996 y el 10 de febrero 1997 y se le brindó la posibilidad de ser defendido por un
miembro de la comunidad, siempre y cuando conociera la lengua y las costumbres,
como así lo contempla el procedimiento utilizado tradicionalmente en Jambaló. (…)
Las sanciones, por su parte, tampoco sobrepasaron los límites impuestos al ejercicio
“(…)De otro lado, es pertinente manifestar que si bien es cierto la administración está
sujeta al principio de legalidad en su actividad, ella no puede oponerse a hacer efectivo
el mandato constitucional que impone darle prevalencia a los derechos fundamentales
de los niños, reconocidos como tal por el ordenamiento superior, y en particular, por el
principio del Estado social de derecho. En consecuencia, en el caso concreto del menor
cuya protección se solicita, se requiere garantizar la aplicación efectiva de las normas
constitucionales que amparan los derechos a la vida, a la dignidad humana, a la integridad
física, a la salud, y en particular, los derechos de los niños, los cuales no pueden supeditarse
a criterios meramente legales, que al ser evaluados frente a principios, derechos y valores
constitucionales, al tenor del artículo 4o. superior, quedan subordinados a ellos, e implican
por lo tanto, que la administración deba darle aplicación concreta a las normas superiores,
por encima de las legales(…)”266.
Se reitera que esta segunda fase se encuentra matizada por el alto contenido de
deliberación que se dio al interior de la Corte, con respecto a la ponderación como la
técnica para solucionar la colisión de principios en el caso concreto, identificándose
posturas de clara estirpe conservadora, caracterizadas por negar dicha posibilidad
bajo el entendido de que las funciones de asignación se encuentran en cabeza del
legislador y mal haría el tribunal constitucional en subrogar dichas competencias
so pretexto de estar sopesando o balanceando principios; a contrario sensu, las
tesis liberales sobre el particular, apuntaron a identificar la ponderación como
el método óptimo para poder solucionar las colisiones de principios en el caso
concreto, ya que al ser estos “máximas de optimización” su dimensión de peso
no podía ser evaluada bajo el método tradicional de la subsunción (propio de las
reglas), razón de base para impulsar el uso de la ponderación desde su acepción
265
Corte Constitucional. Sentencia T-523 de 1997. M.P. Carlos Gaviria Díaz.
266
Corte Constitucional. Sentencia T-796 de 1998. M.P. Hernando Herrera Vergara.
Hermenéutica constitucional 129
de la mujer gestante, pues resulta a todas luces excesivo exigir el sacrificio de la vida
ya formada por la protección de la vida en formación. En efecto, si la sanción penal
del aborto se funda en el presupuesto de la preeminencia del bien jurídico de la vida
en gestación sobre otros bienes constitucionales en juego, en esta hipótesis concreta
no hay ni siquiera equivalencia entre el derecho no sólo a la vida, sino también a la
salud propio de la madre respecto de la salvaguarda del embrión. (…) Una última
hipótesis es la existencia de malformaciones del feto, certificadas médicamente. Si
bien cabe identificar distintas clases de malformaciones, desde el punto de vista
constitucional las que plantean un problema límite son aquellas que por su gravedad
hacen que el feto sea inviable. Se trata de una hipótesis completamente distinta a la
simple identificación de alguna enfermedad en el feto que pueda ser curada antes o
después del parto. En efecto, la hipótesis límite ineludible a la luz de la Constitución
es la del feto que probablemente no vivirá, según certificación médica, debido a una
grave malformación. En estos casos, el deber estatal de proteger la vida del nasciturus
pierde peso, precisamente por estarse ante la situación de una vida inviable. De ahí
que los derechos de la mujer prevalezcan y el legislador no pueda obligarla, acudiendo
a la sanción penal, a llevar a término el embarazo de un feto que, según certificación
médica se encuentra en tales condiciones”(…)268.
Bajo la misma línea hermenéutica se produce la sentencia T-388 de 2009,
mediante la cual se estudian los límites de la objeción de conciencia en el caso
concreto de su utilización por los jueces en ejercicio de su función de administrar
justicia. En esta providencia es unánime el reconocimiento de la ponderación
como la técnica mas eficaz y eficiente para resolver la colisión propuesta y bajo la
cual se construyeron los argumentos ratio decidendi de los cuales se extraen los
siguientes:
“(…) El nexo entre la objeción de conciencia y el derecho a la libertad de pensamiento,
a la libertad religiosa y a la libertad de conciencia es muy grande hasta el punto de
poder afirmar que la objeción de conciencia resulta ser uno de los corolarios obligados
de estas libertades.. (…) El problema surge cuando la exteriorización de las propias
convicciones morales con el propósito de evadir el cumplimiento de un deber jurídico
interfiere el ejercicio de los derechos de otras personas. Dicho en otros términos: cuando
con el ejercicio de la objeción de conciencia se obstaculiza el ejercicio de los derechos de
terceras personas, entonces el asunto se convierte en un problema de límites al ejercicio de
derechos fundamentales, esto es, “en un problema de colisión entre el derecho individual
y los valores y principios, derechos o bienes protegidos por el deber jurídico”. (…)
Cuando se acepta voluntariamente ostentar la calidad de autoridad judicial e, incluso,
cuando en calidad de particulares se asumen compromisos que implican el ejercicio
de la actividad jurisdiccional, una de las consecuencias, si no la más importante, es el
268
CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia C-355 de 2006. M.P. Jaime Araujo Rentería
y Clara Inés Vargas Hernández.
Hermenéutica constitucional 131
269
CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia T-388 de 2009. M.P. Humberto Antonio Sierra
Porto..
270
CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia T-018 de 2012. M.P. Luis Ernesto Vargas Silva.
132 Edgar Andrés Quiroga Natale
271
CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia T-376 de 2012. M.P. María Victoria Calle
Correa.
Hermenéutica constitucional 133
enviar un mensaje privado teniendo en cuenta que dicha red social lo permite. No
obstante, la accionada resolvió exponer el mensaje al público y divulgarlo a través
del muro de su perfil de Facebook, bajo su control y libre disposición, y al cual
tienen acceso múltiples usuarios de la plataforma. Situación desproporcionada si
se tiene en cuenta el supuesto objetivo del mensaje, pues el verdadero resultado fue
poner en conocimiento a un sin número de personas el supuesto incumplimiento
por parte de la actora de una obligación dineraria, algo que, se repite, no conlleva un
interés público y hace parte de la intimidad de la demandante. Circunstancia que
pone en evidencia la intención malsana de las expresiones publicadas, generando
un descrédito de la honra y buen nombre de la actora de manera injustificada e
innecesaria. Sumado a lo anterior, se observa que junto al mensaje divulgado se
publicó una fotografía de la actora sin que mediara su consentimiento o, a falta
de este, existiera una orden de la autoridad competente para que la misma fuera
objeto de disposición por parte de terceros, lo que, sumado a lo difundido, atenta
en mayor medida en contra de su imagen y su buen nombre. Por lo antes señalado,
la Sala advierte que lo publicado por la demandante no puede enmarcarse dentro de
la protección consagrada en el artículo 20 de la Constitución, sumado a que no se
logró identificar un fin legítimo en la misma. Motivo por el cual, se repite, no existe
un conflicto entre los derechos alegados y la libertad de expresión. No obstante,
se considera pertinente reiterar que cuando se presenta este tipo de situaciones,
dado que la libertad de expresión guarda primacía frente a ciertos derechos, debe
estudiarse en cada caso concreto si las circunstancias fácticas se enmarcan o no
dentro de los límites establecidos para tal garantía y no realizar una censura previa
de manifestaciones como las aquí estudiadas, pues, como se observó, tal actuación
se encuentra expresamente prohibida por nuestra Carta Política. En estos términos,
se observa que los derechos alegados, la honra, buen nombre, e intimidad fueron
afectados de manera importante o, en otras palabras, fueron resquebrajados. En
ese sentido, es necesario tomar las medidas necesarias para que dichas garantías
se restablezcan de manera adecuada. Bajo ese orden de ideas, si bien el juez de
segunda instancia acertó al amparar los derechos de la actora y ordenar el retiro
la imagen y el mensaje publicado en el perfil de Facebook de la demandada, la
Sala considera que dicha medida resulta insuficiente para restablecer los derechos
vulnerados, pues a pesar de la eliminación de lo divulgado, la reputación de la
actora o el concepto que de ella tiene la sociedad, su familia o quienes hacen parte
de su entorno ya ha sido alterado en forma negativa, situación que no va a cambiar
con la sola exclusión de dicho mensaje de la red social.
Es por esto que la Corte en situaciones similares, donde se evidencia la
vulneración al buen nombre, la intimidad y a la honra en el marco de aquello que
no se encuentra amparado por la libertad de expresión, ha ordenado al transgresor
de los derechos realizar una rectificación o el ofrecimiento de disculpas a los
134 Edgar Andrés Quiroga Natale
afectados, según sea el caso, bajo las mismas circunstancias en las que se difundió
el mensaje vulnerador(…)272
Mediante sentencia T-027 de 2018 (que estudió el trámite de revisión del fallo
de única instancia de 8 de junio de 2017, adoptado por el Juzgado Primero Penal
del Circuito de Tunja, dentro del proceso de tutela promovido por la señora Luz
Mary Quintero Carreño en contra de la Universidad Pedagógica y Tecnológica
de Colombia –UPTC–, sede Tunja.), la Corte introduce una novedosa aplicación
extensiva de la ponderación con el fin de estudiar la faceta prestacional de los
derechos fundamentales, y de igual manera, imbrica una “técnica mixta” en
donde parte de las bases metodológicas de la ponderación pero incorporando
al juicio ponderativo las fases o etapas propias del juicio de proporcionalidad.
Por la imnportancia que reporta este cambio metodológico, se citará la referida
providencia in extenso:
272 Corte Constitucional. Sentencia T-050 de 2016. M.P. Carlos Eduardo Mendoza Martelo.
Hermenéutica constitucional 135
definición ya ha sido satisfecho por el sujeto obligado o (ii) cuando se identifique con
el contenido normativo del derecho o pueda considerarse adscrito, prima facie, a él.
En estos casos, el juez debe proceder a verificar si la pretensión ya fue satisfecha o si
existe una razón constitucionalmente legítima que justifique que el obligado garantice
un nivel de satisfacción inferior al pretendido. Una razón constitucionalmente legítima
podría ser, por ejemplo, la satisfacción de otro derecho fundamental o de un fin
constitucional imperioso. En este escenario, el juez debe proceder a evaluar la
proporcionalidad del nivel de satisfacción del derecho en relación con la razón
constitucionalmente legítima. Por el contrario, cuando no exista dicha razón, el juez
debe concluir, sin más, que debe garantizarse el nivel de satisfacción pretendido por el
titular. 115.2. Segundo supuesto. Cuando el nivel de satisfacción pretendido por el titular
(la pretensión) y el nivel de satisfacción provisto por el obligado (la política pública,
programa o medida) se encuentran adscritos, prima facie, al contenido del derecho y,
por lo tanto, ambos son razonables. En este caso, el juez debe proceder a estudiar la
proporcionalidad de esos niveles razonables de satisfacción. Una vez superado el análisis
de proporcionalidad, el juez debe determinar cuál debe ser el remedio judicial más
apropiado que permita lograr la eficacia de los derechos fundamentales, en
consideración a las circunstancias del caso concreto. 115.3. Tercer supuesto. Cuando
el juez encuentre que el nivel de satisfacción pretendido no se encuentra adscrito, prima
facie, al contenido del derecho, pero evidencie que existe una amenaza o vulneración
al derecho fundamental del accionante que amerita la intervención inmediata del juez
constitucional. En este caso, el juez tiene el deber de adoptar medidas que garanticen
la eficacia de los derechos fundamentales, habida consideración de las amplias
facultades con las que fue investido, entre ellas, la posibilidad de interpretar la solicitud
de tutela y la búsqueda de otros elementos normativos que permitan dar una solución
razonable y adecuada al caso concreto. Así, el juez debe estudiar si existen otras
alternativas razonables de satisfacción del derecho, distintas a la pretendida. 115.4. Estas
alternativas deben plantearse de conformidad con los fundamentos fácticos del caso
concreto y los fundamentos jurídicos previstos por el legislador y la administración.
En efecto, como ha señalado la jurisprudencia constitucional, “en tales eventos el juez
debe tomar decisiones que consulten no solo la gravedad de la violación del derecho
fundamental a la luz de los textos constitucionales, sino también las posibilidades
económicas de solución del problema dentro de una lógica de lo razonable, que tenga en
cuenta, por un lado, las condiciones de escasez de recursos y por el otro, los propósitos de
igualdad y justicia social que señala la Constitución[ . Así, una vez se determinen las
otras alternativas razonables de satisfacción del derecho, el juez deberá proceder a
estudiar la proporcionalidad de cada una de ellas. Cuando se supere el análisis de
proporcionalidad, el juez debe determinar cuál debe ser el remedio judicial más
apropiado que permita lograr la eficacia de los derechos fundamentales, en
consideración a las circunstancias del caso concreto. 115.5. Cuarto
supuesto. Excepcionalmente, el juez constitucional puede advertir que el contenido
136 Edgar Andrés Quiroga Natale
del derecho, aplicado al caso concreto, resulta abiertamente irrazonable y, por lo tanto,
inconstitucional. Esto, bien porque el contenido del derecho desconoce la Constitución
o excluye irrazonable y desproporcionadamente a ciertos grupos, entre otras razones.
En este caso, el juez deberá adoptar el remedio judicial más apropiado que permita
lograr la eficacia de los derechos fundamentales, en consideración a las circunstancias
del caso concreto. (ii) El análisis de proporcionalidad 116. El análisis de
proporcionalidad debe aplicarse en atención al supuesto de razonabilidad que
determine el juez para cada caso concreto. Esto debe analizarse a la luz de los
subprincipios de (a) idoneidad, (b) necesidad y (c)proporcionalidad en sentido estricto.
117. En relación con la idoneidad, el juez debe verificar que el nivel de satisfacción
razonable pretendido (la pretensión del accionante) o las otras alternativas razonables
de satisfacción sean adecuados para garantizar el nivel razonable de satisfacción del
derecho, de acuerdo con el contenido exigible, previamente analizado. 118. La
necesidad, por su parte, supone que el juez determine si, de todos los medios posibles
que permiten satisfacer el nivel razonable y exigible del derecho, en el caso concreto,
el nivel de satisfacción razonable pretendido o alguna de las otras alternativas razonables
de satisfacción son menos lesivas de la razón constitucionalmente legítima que justifica
que el obligado no proporcione dicho nivel de satisfacción, sino uno distinto. Sobre
este punto, es necesario advertir que, en razón de las competencias de las autoridades
para definir el contenido de las políticas públicas (párr. 110), la interpretación
constitucional debe ser respetuosa del desarrollo normativo realizado por el legislador
y por la administración. 119. Finalmente, el juicio de proporcionalidad en sentido
estricto se debe realizar en atención a la escala tríadica del juicio de ponderación
empleado por la jurisprudencia constitucional (leve, medio e intenso). En este sentido,
el juez constitucional debe ponderar entre el grado de satisfacción del derecho –ya
sea el nivel de satisfacción pretendido u otro distinto–; respecto de la afectación que se
le causaría al obligado a satisfacer el derecho en ese nivel determinado 120. Así
las cosas, el nivel razonable de satisfacción del derecho –y, por lo tanto, exigible
judicialmente– debe ser: (i) razonable, en la medida en que dicho nivel puede
adscribirse al contenido del derecho en cuestión; y (ii)proporcional, esto es, justificado
en que la satisfacción del titular del derecho al recibir el nivel razonable de satisfacción es
mayor a la afectación que se le ocasionaría al obligado al exigírsele garantizar dicho nivel
razonable de satisfacción. 121. Este modelo de adjudicación de los derechos
fundamentales, fundado en los principios de razonabilidad y proporcionalidad, puede
ser resumido de la siguiente manera:
Hermenéutica constitucional 137
El juez debe
ordenar que se
No existe (R). dé cumplimiento
(a) es razonable*. al contenido del
derecho.
1. El juez debe
verificar la Sí existe (R). El juez
existencia de (R). debe estudiar la
proporcionalidad**
entre (a) y (R).
Que
El juez debe analizar
exista una (a) y (b) son la proporcionalidad
amenaza o 2. El juez deberá
razonables. de (a) y (b).
vulneración adoptar el
a un derecho remedio judicial
fundamental (a) no es razonable. El juez debe analizar
más apropiado, en
Sin embargo, la proporcionalidad
consideración a
existen otras de las otras
las circunstancias
3. alternativas alternativas
del caso concreto.
razonables de razonables de
satisfacción del satisfacción del
derecho. derecho.
El contenido del derecho es abiertamente
irrazonable, desproporcionado y, por lo
4.
tanto, inconstitucional.
Convenciones
(a) – La pretensión del titular del derecho (nivel de satisfacción pretendido)
(b) – La política pública, programa o medida acusada (nivel de satisfacción provisto)
(R) – Razón constitucionalmente legítima para no conceder (a)
* La razonabilidad está determinada por la adscripción, prima facie, de (a), (b) o las
otras alternativas razonables de satisfacción al contenido del derecho.
** La proporcionalidad se determina a partir de la idoneidad, necesidad y
proporcionalidad en sentido estricto. (…)273
273
273
C Corte Constitucional. Sentencia T-027 de 2018. M.P. Carlos Bernal Pulido.
138 Edgar Andrés Quiroga Natale
a) Sieckman sostiene que a pesar que la ponderación puede llegar a ser objetiva
en tanto que la misma sea valorada conforme al criterio de fundamentación
normativa racional; suele no resultar suficiente, pues varios criterios ponderativos
pueden ser al mismo tiempo adecuados para satisfacer la proposición racional sobre
la validez de una norma; además puede llegar a ser difícil que varios examinadores
racionales lleguen a un consenso sobre una única respuesta. En punto de dicha
falencia considera:
275
Sieckman. Ob. Cit. Pág. 149.
140 Edgar Andrés Quiroga Natale
“(…) Una visión bastante superflua del juicio de ponderación ha logrado que muchos
de los operadores jurídicos locales identifiquen en la ponderación de principios una suerte
de panacea para todos los problemas existentes, invocando su aplicación para supuestos
francamente inadmisibles. Ello, a mi criterio, se ha visto alentado por dos situaciones:
i) por una mala comprensión del rasgo de sobreinterpretación de la Constitución, que
supone que todos los aplicadores del Derecho vienen obligados a reconducir, hacia los
principios constitucionales, todos los casos que se les presenten (bien para constatar que
son casos fáciles en los que bastan las regulaciones de las reglas, o bien para constatar
la existencia de una laguna normativa o axiológica que configura un caso difícil); y,
ii) por una deficiente técnica en la imbricación del método de a ponderación a nivel
regulativo (en las disposiciones de la Ley Orgánica de Garantías Jurisdiccionales y
Control Constitucional) (…)”.276
“(…) Una seria objeción que cabe hacer a la exigencia de la ponderación, como
canon de constitucionalidad de las leyes y de actos de los poderes públicos, es
que parece desconocer que el Parlamento y el Gobierno, órganos legítimamente
elegidos por el pueblo, ya han realizado aquella función en las fases previas de la
dinámica política. Desde el momento en que la sociedad manifiesta la existencia
de un problema o la pertinencia de abordar la regulación de algún tema de interés
general, se genera un conjunto de opiniones e intercambios en los medios de
comunicación y en los partidos políticos que supone ya una enorme labor de
delimitación de los pros y los contras de cualquier posible solución política. El
ejercicio de las actividades de gobierno y legislativa es siempre el resultado de
¡ponderar! valores y principios, intereses y derechos. Pero parece que es menester
recordar que “el sentido de los textos normativos es disminuir el ámbito dentro
del cual el juez puede realizar esas opciones valorativas”, y que “la introducción de
una argumentación sobre la base de valores y su ponderación implica precisamente
la pérdida de la función normativa del texto” y, en última instancia, la asunción
de esa función por el juzgador de turno. (…)”277.
276
BAQUERIZO Minuche, Jorge. “Una mirada crítica sobre la ponderación de principios
en la experiencia ecuatoriana”. En: Revista Revista Jurídica de Derecho Público Tomo
4, Universidad Católica de Guayaquil, 2010. Pág. 223. .
277
SANCHEZ González, Santiago. “De la imponderable ponderación y otras artes del
Tribunal Constitucional”. En: Revista Teoría y Realidad Constitucional No. 12, UNED,
Madrid, 2003, pág. 26.
Hermenéutica constitucional 141
285
Ver Herbert Bethge, Zur Problematik von Grundrechtskollisionen, Franz Vahlen, Munich,
1977, p. 276; Hans Schneider, Die Güterabwägung des Bundesverfassungsgericht bei
Grundrechtskonflikten, Nomos, Baden–Baden, 1979, p. 23. Algunos autores utilizan la
expresión “particularismo” para referirse a la objeción de la jurisprudencia ad hoc. Cfr.
José J. Moreso, Conflictos entre principios constitucionales, in: Miguel Carbonell, ed,
Neoconstitucionalismo(s), Madrid, 2003; Bruno Celano, “Defeasibility e bilanciamento.
Sulla posibilita di revisión stabili”, Ragione Prattica, núm. 18, 2002.
286
JARAMILLO, Carlos Ignacio y TAMAYO Jaramillo, Javier. “El precedente judicial en
Colombia. Papel y valor asignados a la jurisprudencia”. Pontificia Universidad Javeriana,
Bogotá, 2012, pág 8.
Hermenéutica constitucional 143
287
SCHOMNI, Klaus. “El juicio de proporcionalidad”. Trotta, Madrid, 1998, pág 76.
288
OTHERMAN, Nicolás. “Técnicas y precedentes constitucionales”. UNAM, México,
2000, pág. 289.
289
ARAUJO RENTERIA, Jaime. “Los métodos judiciales de ponderación y coexistencia
entre derechos fundamentales. Crítica”. En: Anuario de Derecho Constitucional
latinoamericano, UNAM, México, 2006. Pág. 856.
144 Edgar Andrés Quiroga Natale
De igual manera, no pueden ser de recibo posiciones extremas como las tesis
de Jaramillo y Tamayo antes citadas, en la medida que a la luz de nuestra Carta
Constitucional vigente (interpretada de forma sistemática e integradora y no de
manera exegética y restrictiva como lo hacen los autores en comento), podemos
advertir que el precedente se constituye en fuente formal y material del derecho,
no solo por considerarse como una extensión hermenéutica de la Constitución
290
BERNAL Pulido, Carlos. “La racionalidad de la ponderación”. En: El principios de
proporcionalidad y la interpretación constitucional. Serie Justicia y derechos humanos,
neoconstitucionalismo y sociedad, Quito, 2008, pág 44-45. .
291
CLERICO, Laura Patricia. “El examen de proporcionalidad: entre el exceso por acción y
la insuficiencia por omisión o defecto”. En: El principio de proporcionalidad en el Estado
Constitucional. Universidad Externado de Colombia, Bogotá, 2010, pág. 202.
Hermenéutica constitucional 145
o la ley (según sea el caso), sino porque a través del mismo se puede articular la
prescripción estática de las normas con la comprensión dinámica de la praxis social
garantizando una aplicación del “derecho viviente”.
Tal como se expuso en la parte segunda del presente trabajo, existen varias
deficiencias dogmáticas y metodológicas en la aplicación de las referidas técnicas
(las cuales han sido empleadas bajo un modelo que denominamos tradicional o
clásico), pero que podrían superarse y/o morigerase a partir de la propuesta que
se desarrollará en este apartado, siempre en búsqueda de decisiones eficientes en
la asignación pero justas y/o equitativas en la distribución; es decir, decisiones
equilibradas.
¿Cómo deciden los jueces?. Resulta claro que los jueces en la construcción de sus
fallos (máxime los jueces constitucionales), no edifican sus argumentos en razones
estrictamente jurídicas, a contrario sensu, se encuentran fuertemente influenciados
Varias son las teorías que se han propuesto para estudiar dichos escenarios de
influencia en la construcción de la decisión judicial. Al respecto Posner, propone
nueve categorías respecto de las cuales se desprende el núcleo decisional del juez, a
saber “(…)la actitudinal, la estratégica, la sociológica, la psicológica, la económica,
la organizacional, la pragmática, la fenomenológica y, por supuesto, la que he
venido llamando teoría legalista(…)”295.
293
Tales como su formación académica, su postura política, su entendimiento de la justicia,
el grado de aversión o propensión a la crítica y debate público, el nivel de aceptación al
ocio judicial, etc.
294
Algunos de ellos como el origen y presión del grupo académico, económico y/o político
de donde fueron postulados, la presión que puede llegar a generar los medios de
comunicación, el nivel de aceptación a la censura, el nivel del temor reverencial hacia el
superior funcional, etc.
295
POSNER, Richard. “Cómo deciden los jueces”. Traducción de Victoria Roca Pérez. Ed.
Marcial Pons, Barcelona, pág. 31.
296
El juez tiene una “función de utilidad”, que es como los economistas denominan el
complejo de objetivos que guían la acción racional. Los “argumentos” (elementos) de la
función de utilidad judicial incluyen los ingresos recibidos, el ocio, el poder, el prestigio,
la reputación, el autorespeto, la satisfacción intrínseca a su tarea (retos, estímulos) y las
demás recompensas que la gente busca en el trabajo (…). POSNER, Richard. Ibíd. Pág.
47
Hermenéutica constitucional 151
“racionalidad pura” propias de todos los seres humanos; pero tampoco puede
convertirse en una suerte de construcción subjetiva fundada en percepciones
personales de lo que se debe entender por “lo justo”. Respecto del particular
Posner sostiene:
Creemos que la decisión judicial debe ser una decisión racional; no obstante,
teniendo en cuenta las diferentes limitaciones que tiene el desarrollo y aplicación de
una “razón pura”, se pretende construir una metodología que permita al juez operar
racionalmente, a partir de unos criterios objetivos creados ex – ante a través de la
función de utilidad, y dentro de los cuales pueda desarrollar sus propios criterios
hermenéuticos y argumentativos con el fin de no desconocer la autonomía que
debe tener esta clase de decisiones, pero siempre en búsqueda de los caminos que
permitan dotarlas del mayor equilibrio que sea posible.
297
POSNER, Richard. Ibíd. Pág. 47.
152 Edgar Andrés Quiroga Natale
298
Desarrolladas en el capítulo I del presente estudio.
299
La cual parte de la formulación neoclásica de la optimización (aceptada por
mayoritariamente por la comunidad científica U= f (X1, X2, X3 , ... , Xn)), pero agrega
nuevas categorías o condicionantes: i) el relacional (^ T), y, ii) el argumental ( f^), lo cual
da como resultado una función de utilidad creada para la medición de la optimización de
la decisión judicial -constitucional.
Hermenéutica constitucional 153
X: Elementos de la función (x1, x2, x3….. xn). Es decir, los argumentos respecto
de los cuales se construye la decisión, los cuales se mueven dentro del campo de
las curvas de indiferencia.
f^1: proporcionalidad
f^2: ponderación.
300
Expuesto en el capítulo II del presente trabajo.
156 Edgar Andrés Quiroga Natale
301
Este ámbito de aplicación no descarta la posibilidad de las modulaciones, es decir, de
hallar el instrumento de intervención exequible condicionado ó inexequible diferido.
302
Como ya fue estudiado en el capítulo I del presente estudio.
Hermenéutica constitucional 157
U ^ T1 = ∑ T1iii T1v
Se parte del hecho de establecer la libertad como premisa fundamental respecto de la cual se
debe edificar un modelo de convivencia política organizada, y por lo tanto, el papel del Estado
debe ser el de garantizar los mínimos esenciales de esa libertad y no interferir en nada a más,
en la medida que el Estado no le puede imponer al individuo un proyecto “común” de vida
diferente del mismo que él se ha establecido, dentro del marco de las reglas generales, para
evitar que la libertad de uno haga nugatoria la libertad del otro.
Bajo éste entendido, el bien común no existe, pues lo único común son las reglas generales
para el ejercicio de la libertad; por lo tanto, la justicia no es una categoría que pueda aplicarse
a una situación social en general sino a los procesos que se desarrollaron para llegar a ella
dando una enorme importancia al marco general de reglas ex – ante de asignación y ex – post
de ejercicio.
Una vez se haya establecido a partir del análisis del problema jurídico a resolver,
la teoría (s) de justicia aplicable junto con los estatutos económicos que la soportan;
en una segunda etapa, resulta imperioso realizar la elección del escrutinio racional a
emplear (el cual funge como un condicionante argumental de la función de utilidad
“f^”), ya que a partir del mismo se podrá determinar cuáles son los subprincipios
de proporcionalidad aplicables.
303
Descrito en el capítulo II de éste estudio.
304
La fuente es propia con base en lo expuesto en el capítulo II del presente trabajo.
Hermenéutica constitucional 161
305
Como fue anotado en el capítulo II.
306
Tal como se hará explicito en uno de los casos que se trabajarán en el apartado de las
aplicaciones.
307
Aunque el análisis sobre los fines del instrumento (de acuerdo al modelo clásico), se hace
en la fase de “necesidad”; se propone desde el modelo de equilibrio integral, que sea
desarrollado desde la elección del escrutinio, ya que en caso de escoger una intensidad
leve, no se entraría a analizar dicha carga teleológica; a contrario sensu; si el análisis sobre
la misma se hace como criterio de elección del escrutinio, siempre habrá un examen de
los fines perseguidos por el instrumento de intervención con independencia de los niveles
de proporcionalidad seleccionados.
Hermenéutica constitucional 163
Hurley”. Revista Española de Derecho Constitucional ISSN: 0211-5743, núm. 86, mayo-
agosto, Madrid, 2009, pág. 120-121.
Hermenéutica constitucional 165
Teoría (s) de la justicia aplicable con sus corresponsales estatutos teóricos que la soportan.
310
proporcionalidad.
166 Edgar Andrés Quiroga Natale
312
Respecto del diseño institucional que nuestra Constitución de 1991 tiene en el campo de
la competencia funcional podemos anotar lo siguiente: i)El artículo 6 de la Constitución
establece dos cláusulas de responsabilidad de conformidad con la relación de sujeción
con el poder público i) Cláusula de responsabilidad pro-libertate para los particulares
los cuales solo responderán por infringir la Constitución y las leyes (relación general de
sujeción) y ii) Cláusula pro-legislatore para los servidores públicos quienes además de
lo anterior, responderán por omisión y extralimitación en el ejercicio de sus funciones
(relación especial de sujeción). ii) El canon 122 superior estipula que no habrá empleo
público sin funciones expresamente detalladas en la ley o los reglamentos. iii) El artículo
90 Constitucional establece la responsabilidad patrimonial del Estado cuando por la
acción u omisión de sus agentes se cause un daño antijurídico imputable vía causal a la
autoridad pública o a los particulares que cumplen funciones públicas, y, concomitante
a ello, consagra la acción de repetición.
Hermenéutica constitucional 167
Modelos de justicia por elección como la de Sen o la Public Choice trabajan de forma
313
MANKIW, Gregory. Principios de economía. (E., Rabasco, Trad.) Madrid : Mac Graw
Hill, 2004. p. 18.
315
“aquellos cuyas características hacen que su consumo no sea exclusivo ni excluyente; si
está disponible para un individuo lo está para todos. Por lo mismo, reviste gran dificultad
obligar a los individuos a pagar por el goce de bienes públicos”. PÉREZ Salazar, Mauricio.
Economía y fallos constitucionales: la experiencia colombiana durante la vigencia de la
carta política de 1991. Bogotá : Universidad Externado de Colombia, 2004. p. 67.
168 Edgar Andrés Quiroga Natale
El modelo clásico indica que para satisfacer ésta exigencia de idoneidad, debe
hacerse un análisis jurídico respecto de la teleología que acompaña al instrumento
de intervención y su corresponsal contraste con el corpus Constitucional.
Sin embargo, dicho examen puede ser amplificado y/o complementado por el
modelo de equilibrio integral, a través de un análisis del impacto de la intervención
en el marco general316 del derecho o derechos que se verían involucrados dentro
del ámbito de aplicación del instrumento de intervención; puede apelarse a un
estudio comparado de las elasticidades de esos derechos y la utilidad marginal de
los mismos (conforme fue explicado en el apartado del equilibrio neoclásico), ya
que prima facie, se identifica una primera colisión entre los derechos limitados
y los fines de la medida de intervención, la cual puede ser previamente abordada
a través de las citadas herramientas neoclásicas para establecer por ejemplo: i)
la cantidad de derechos que serían limitados vs la cantidad de fines perseguidos
constitucionalmente admisibles; ii) el nivel de elasticidad o inelasticidad de dichas
variables; y, iii) la utilidad marginal que reportan las mismas.
Algunas de las herramientas que podrían ser utilizadas desde el análisis económico
son por ejemplo, comparaciones relacionales de tiempo (propio del modelo
institucionalista), las cuales brindarían al juez una herramienta de comprensión
316
Se aclara que es el impacto general, pues el específico se medirá en la proporcionalidad
en estricto sentido, otras de las fases de ésta técnica.
Hermenéutica constitucional 169
histórica respecto del impacto que han tenido las medidas distributivas de
imposición (en casos semejantes), dentro de un determinado espacio de tiempo,
para ilustrarlo en torno a la capacidad del instrumento para alcanzar el fin
propuesto.
El citado análisis resulta indispensable, ya que con los criterios analíticos propios
de la ciencia jurídica solo se estaría poniendo en un “escenario de supuestos” el
nivel de potencial cumplimiento de la teleología contenida en el instrumento
de intervención; por el contrario, las herramientas económicas nos permiten
acercarnos a través del modelaje, a reducir el margen del supuesto y proyectar
niveles mas fiables para evaluación de la probabilidad de realización de los citados
fines.
“…La constelación más simple se da cuando están en juego sólo dos sujetos jurídicos,
es decir, el Estado y un ciudadano, y sólo dos principios. Cuando están en juego más de
dos principios puede surgir la siguiente situación: M1 y M2 son dos medios igualmente
adecuados para el fin F cuya consecución es exigida por el principio P1 o es idéntico
a P1. M2 afecta la realización de P2 menos que M1, pero M1afecta la realización
170 Edgar Andrés Quiroga Natale
ii) De ese universo, cuáles de esas posibilidades hacen parte del “conjunto
negocial”;
iv) Cuál sería la posibilidad que genera mayor valor social (o menor afectación
de los derechos).
FUNCIÓN DE UTILIDAD
U ^ T = f^ (X1, X2, X3 , ... , Xn)
Elección de la Teoría (s) de Justicia aplicables. T1 (T1i, T1ii, T1iii, T1iv.. T1v).
Condicionante de Relación de la Función de Utlidad T2 (T2i, T2ii, T2iii… T2iv).
“U ^ T” U ^T1 T2 = ∑ T1x T2x
Elección del escrutinio racional aplicable. Condicionante f^1 (f^1i, f^1ii, f^1iii)
argumental de la función de utilidad. “f^” f^2 (f^2i, f^2ii ,f^2iii)
Carga
Determinante(s) de Determinante(s) de la Nivel de
Escrutinio Contenido del juicio argumen
la elección formal elección material Aplicación de la
Racional que se aplica tativa
Regla ex -ante Reglas concomitantes Proporcionalidad
aplicable
Leve Se utiliza para la Teleología del Idoneidad Competencia
mayoría de los casos instrumento. funcional. Indubio
en razón al respeto del Contenido material Verificación de fines Pro-
principio democrático. del cargo de constitucionalmente legislatore
Recurrentemente inconstitucionalidad. admisibles.
aplicado en normas Análisis relacional
de carácter tributario, utilitario. Relación medio–fin
financiero, cambiario, Revisión del Imbricación estatutos
bursátil, contractuales; precedente aplicable. económicos de
y en general, normas aplicación.
de contenido
económico
Intermedio Se utiliza Teleología del Idoneidad Competencia Depende
principalmente para instrumento. Necesidad funcional. del
examinar normas Contenido material del Verificación de fines Caso
que establecen cargo de constitucionalmente
acciones afirmativas; inconstitucionalidad. admisibles.
es decir, aquellas que Análisis relacional
introducen criterios utilitario. Relación medio–fin
de diferencia pero Revisión del precedente Del conjunto de
para mejorar a un aplicable. instrumentos idóneos
determinado grupo. para el fin propuesto
que se hay elegido el
También suele menos gravoso para los
utilizarse respecto de derechos intervenidos.
normas que consagran Imbricación estatutos
derechos colectivos y económicos de
del medio ambiente. aplicación.
“T^” y el criterio analítico aplicable “f^”), como tercera etapa, debe establecerse los
elementos de la función; es decir los argumentos que fungen como las cantidades
consumidas del bien “X”, los cuales se van agregando a la función a partir del
desarrollo de los criterios analíticos previamente establecidos:
321
ALEXY, Robert. Op cit., p. 37.
176 Edgar Andrés Quiroga Natale
Si el principio A está integrado por los núcleos esenciales (ai, aii y aiii), y, el
principio B se encuentra compuesto por los núcleos esenciales (bi y bii); y, en el
caso concreto, entran en colisión ai con bii, entonces podrían plantearse diversos
escenarios de tensión ponderativa (TP):
TP1: A vs B
TP2: A Vs bii
TP3: ai Vs B
322
Ver DWORKIN. Ronald. “¿Es el derecho un sistema de normas?”, en ÍD. La filosofía
del derechos, México, Fondo de cultura económica, 1980.
323
Por ejemplo, el precedente de la Corte Constitucional ha reconocido que el principio
- derecho al debido proceso, se encuentra integrado por varios núcleos esenciales entre
los cuales están: principio de legalidad, juez natural, respeto a las formas propias de
cada juicio, publicidad, contradicción, defensa, nom bis in idem, no reformatio in
pejus, favorabilidad, indubio, nulidad de pleno derecho, etc.). Si en el caso concreto,
presuntamente se encuentra vulnerado el principio de publicidad por una indebida
Hermenéutica constitucional 177
TP4: ai Vs bii
Por las razones que fueron anotadas en el numeral 3.2 del presente apartado,
la ley de la ponderación como fase de ejecución se aplica para valorar la relación
coste – beneficio de un instrumento de intervención a partir de los princpios que
en razón a su advenimiento entran en colisión; por lo tanto, puede decantarse
que existe un valor de satisfacción de cada principio antes de la existencia del
instrumento de intervención, y es precisamente ese valor el que se propone calcular
bajo la categoría “status quo”.
notificación, podría plantearse la afectación del principio bajo tres escenarios: i) violación
del debido proceso, ii) violación de la publicidad, ó, iii) violación del debido proceso y
la publicidad. Ver por ejemplo sentencias T-463 de 1992, T-490 de 1992, T-544 de 1995,
T- 268 de 1996, C-626 de 1996, SU-960 de 1999, C-040 de 1997, T-751A de 1999, C-392
de 2000, T-555 de 2000, SU-1184 de 2001, C-131 de 2002, T-685 de 2003, entre otras.
324
Status quo del principio 1 y estatus quo del principio 2.
178 Edgar Andrés Quiroga Natale
Una vez entra a operar el instrumento de intervención, el status quo de los principios
tiende a mutar, ya sea aumentando o disminuyendo el nivel o valor de satisfacción
inicial (determinado ex – ante para cada principio), y como los principios que se
estudian se encuentran en una tensión de satisfacción inversa (Si se pondera a favor
de A pierde B, y si se pondera a favor de B pierde A), es necesario calcular el aumento
del nivel de satisfacción del princpio que prima facie se beneficia con el instrumento
de intervención, y concomitante a ello, el nivel de afectación del principio menguado
por dicha intervención325.
325
Por ejemplo, con la expedición de la ley 1739 de 2014 (por la cual se imbrica la mas
reciente reforma tributaria), se puede establecer prima facie que el vio aumentado el nivel
de satisfacción del principio de estabilidad fiscal pero al mismo tiempo afectado el nivel
de satisfacción del principio de igualdad.
326
Siendo SM: status modificado; SQ: el status quo; IS: incremento de la satisfacción. (todo
en relación al principio 1).
327
Siendo SM: status modificado; SQ: el status quo; PS: pérdida de la satisfacción. (todo
en relación al principio 2).
Hermenéutica constitucional 179
Es decir, que debemos partir del análisis de las curvas de indiferencia existentes
en el ejercicio de cada principio en colisión (entendidas como las diferentes
328
Los conceptos de curvas de indiferencia y elasticidad fueron desarrollados en el capítulo
I del presente estudio.
180 Edgar Andrés Quiroga Natale
Por ejemplo, si dentro del escenario de consumo (U1, U2, U3, U4…Un),
del principio de libertad religiosa (x), el dueño de un colegio determinara que
no se puede hacer al interior de la institución ninguna expresión de religiosidad
por parte de sus docentes (condicionante de restricción de consumo), en aras de
garantizar la formación laica de los estudiantes (z); y en consecuencia, quien viole
la restricción será destituido332.
329
Formas de hacer realizable el principio por parte de su titular de conformidad con el
ordenamiento jurídico
330
Titular y/o beneficiario del principio.
331
Las reglas que impone el ordenamiento jurídico.
332
Sin entrar a evaluar la constitucionalidad o no de dicha restricción..
Hermenéutica constitucional 181
333
Algunas ideas parciales sobre éste tópico, que se harán referencia desde este momento hasta
el final del cuadro de bloque de constitucionalidad, fueron expuestas preliminarmente en
QUIROGA Natale, Edgar Andrés. “Tipicidad constitucional y control de convencionalidad
en Colombia a partir de 1991. Nociones elementales”. En Derecho Procesal constitucional,
Legis – VC. Editores, Bogotá, 2015.
182 Edgar Andrés Quiroga Natale
a). Política. La Constitución se erige como una Carta que funge de marco
institucional para el desarrollo del poder público, fijando los límites de los
detentadores del poder, los derechos de los destinatarios del mismo, y, la manera
como se articulan las instituciones dentro de la estructura del Estado. En palabras
de Lasalle:
334
GUASTINI, Riccardo. “sobre el concepto de Constitución”. En: “Teoría del
Neoconstitucionalismo”. Edit. Trotta. Madrid, 2007, pág 15, 16).
335
LASSALLE, Ferdinand. ¿Qué es una constitución? Bogotá : Universal, 2008. p. 27.
336
Advirtiendo que el mismo concepto de “norma” de suyo ya es complejo debido a su amplia
polisemia. Respecto del particular anota Pulido: “(…) La ambigüedad de la palabra norma.
La palabra norma es empleada para definir dos objetos con diferencias muy marcadas:
(a) norma como texto legal, es decir enunciados lingüísticos que se encuentran dentro de
un documento normativo; por otro lado, (b) el termino norma se emplea para referirse al
significado del texto legal -de la norma en el primer sentido (R. Guastini, 1999). En la
primera acepción, norma -como texto normativo- se refiere exclusivamente a aquellos
documentos (y cada una de sus partes) que son considerados como fuentes formales de
normas jurídicas (e.g constitución, códigos, decretos etc.). Norma, según la segunda de
las acepciones, puede ser de carácter conceptual, constitutivo y deóntico. Las normas
conceptuales tienen por objeto definir términos legales, las constitutivas determinan
quienes tienen poderes normativos y las deónticas establecen como jurídicamente
obligatorio, prohibido o facultativo un caso. La relevancia de dicha distinción radica en que
los ordenamientos jurídicos están conformados por normas (en el segundo sentido) y no
por textos (normas en el primer sentido) (…)” .PULIDO Ortiz, Fabio Enrique. “El control
constitucional abstracto” En: “Revista Prolegómenos – Derechos y Valores”. Universidad
Militar Nueva Granada. Bogotá, 2011, pág. 167. Aunado a ello, y en tratándose de definir
la ambigüedad semántica y sintáctica del concepto normativo de Constitución, sostiene
Sierra: “(…) Existe la denominada “ambigüedad semántica”, que se verifica cuando una
Hermenéutica constitucional 183
palabra tiene más de un significado cuando es empleada en un texto legal con distintos
alcances semánticos. A título de ejemplo de dicha ambigüedad, es posible citar la
expresión “contribuciones” contenida en el artículo 338 de la Constitución: en sentido
genérico, dicho vocablo denota “tributo”, en sentido específico, significa “contribuciones
parafiscales” (…) Otra peculiaridad de la interpretación constitucional en Colombia es
la denominada “ambigüedad sintáctica”, la cual se advierte siempre que un determinado
precepto o enunciado pueda expresar más de una proposición dado que las conexiones
entre las palabras que lo componen pueden interpretarse de distintos modos. Ejemplo
de este tipo de ambigüedad es la derivada del artículo 42 de la Constitución, el cual
establece las formas en que se constituye la familia en Colombia…” . SIERRA Porto,
Humberto Antonio. “Los factores que determinan las particularidades de la interpretación
constitucional en Colombia”. En: “Diálogos constitucionales de Colombia con el mundo.
VIII Encuentro de la Jurisdicción Constitucional. Corte Constitucional - Universidad
Externado de Colombia, Bogotá, 2013, página 269.
337
KELSEN, Hans. ¿Quién debe ser el defensor de la Constitución? Madrid : Tecnos, 1983.
p. 50.
338
Bajo las premisas teóricas del Neoinstitucionalismo (uno de los enfoques del análisis
económico del derecho centrado en la eficiencia de las instituciones y su relación con el
individuo).
339
NORTH, Douglas. Instituciones, cambio institucional y desempeño económico. México
: 3ª reimp. Fondo de Cultura Económica, 2006. p. 190.
340
Haciendo referencia en exclusivo al contenido normativo, el cual de la Constitución, resulta
importante señalar que la Corte Constitucional a partir de su puesta en funcionamiento en
el año 1992 comenzó a utilizar como parámetro de constitucionalidad normas contenidas
en los tratados internacionales de derechos humanos ratificados por Colombia (Ver
las sentencias T-002 de 1992 sobre criterios para determinar la fundamentalidad de los
derechos constitucionales, T-409 de 1992 sobre obediencia debida y derecho internacional
humanitario, C-574 de 1992 que revisó la constitucionalidad del Protocolo I a los
Convenios de Ginebra y la T-426 de 1992 que, a partir de la Declaración Universal de
184 Edgar Andrés Quiroga Natale
Norma de
Valor o Uso Jurisprudencia
Elemento Integrante Envío en la
otorgado al Constitucional de
del Bloque Constitución de
elemento del Bloque Reconocimiento
1991
C-191 de 1998.
380 artículos C-067 de 2003.
Articulado
permanentes y los Rango Constitucional C-401 de 2005.
Constitucional
transitorios. C-291de 2007.
T-426 de 1992.
C-109 de 1995.
Derechos C-621 de 1998.
Artículo 94. Rango Constitucional
Innominados C-228 de 2002.
T-025 de 2004.
C-191 de 1998.
Tratados Limítrofes C-400 de 1998.
ratificados por Artículo 102. Rango Constitucional C-1022 de 1999.
Colombia.
C-358 de 1997.
C-582 de 1999.
Tratados de Derecho
C-1490 de 2000
Internacional
C-067 de 2003.
Humanitario Artículo 214. Rango Constitucional
C-988 de 2004.
ratificados por
C-291 de 2007.
Colombia.
T-280A de 2016.
C-358 de 1997.
C-191 de 1998.
C-200 de 2002.
Tratados de Derechos
C-067 de 2003.
Humanos (derechos
Artículo 93-1. Rango Constitucional C-401 de 2005.
intangibles) ratificados
C-327 de 2016.
por Colombia.
C-355 de 2016.
C-042 de 2017.
C-147 de 2017
Tratados de Derechos
T-483 de 1999.
Humanos ratificados
C-010 de 2000.
por Colombia Rango
Artículo 93-2. C-067 de 2003.
(diferentes a los que Constitucional.
C-028 de 2006.
reconocen derechos
C-394 de 2007.
intangibles).
Convenios
C-481 de 1998.
Internacionales
Rango T-568 de 1999.
del Trabajo (OIT) Artículo 53.
Constitucional. C-567 de 2000.
ratificados por
Colombia
Principios del C-225 de 1995.
Derecho Internacional Artículo 93. Rango Constitucional C-1189 de 2000.
Consuetudinario C-291 de 2007.
186 Edgar Andrés Quiroga Natale
C-836 de 2001.
T-330 de 2005.
Precedente de la Corte Rango
Artículo 241. T-292 de 2006.
Constitucional. Constitucional.
T-441 de 2010.
342
Dependiendo si el principio bajo examen es de reconocimiento interno, regional o con
tendencia universal.
343
Por ejemplo los principios reconocidos en la Convención Americana de Derechos
Humanos.
344
Por ejemplo los principios reconocidos en la Declaración Universal de los Derechos del
Hombre y del ciudadano.
188 Edgar Andrés Quiroga Natale
345
PÉREZ Salazar, Mauricio. Una aproximación a la teoría económica del derecho
constitucional. Bogotá : Universidad Externado de Colombia, 2002. p. 36.
346
Por ejemplo, cuando se pondera en favor de los derechos de un recluso a que el Estado
le brinde tratamiento odontológico completo. El anterior reconocimiento no solo vincula
al recluso y al establecimiento penitenciario en el cual se encuentra, pues dicha decisión
puede vía principio de igualdad vincular a toda la población carcelaria.
347
Por ejemplo, si la Corte pondera (en sede de tutela) en favor del derecho a la salud
de un ciudadano en contra de la EPS, obligando a ésta última a proporcionar todos los
tratamientos y medicamentos que requiera el paciente con independencia de si los mismos
hacen parte del POS (plan obligatorio de salud), respecto del cual aplica excepción de
inconstitucionalidad, aduciendo que en adelante quien determinará el suministro necesario
(medicamentos y/o procedimiento) es el médico tratante y no el legislador; dicha decisión
tendría un impacto no solo para el referido conflicto paciente – EPS, a contrario sensu, vía
principio de igualdad podría ser aplicada a todos los colombianos y extranjeros residentes
en Colombia.
Hermenéutica constitucional 189
P1,2P ____________________________
democráticas, sociales y de derecho), los cuales van más allá de los principios
en cita 348.
Por lo tanto, se propone reemplazar el “in dubio pro libertate”, por la categoría
“indubio pro esencialis”349 , la cual expresa una regla ex – ante de asignación350
frente a ese conjunto de bienes primarios o esenciales, que integra bajo un solo
corpus de carga, los principios que conforme al reconocimiento normativo y
jurisprudencial han alcanzado el mayor peso abstracto al aplicarlos al caso concreto,
y que de alguna forma se constituyen en los esenciales dogmáticos del modelo.
ii) No ofrece respuesta frente a los casos en los cuales se puedan ver enfrentados
en su aplicación los inbubios pro libertate y pro legislatore; por ejemplo, en
un caso en donde la colisión entre los principios X (trabajo) y Y (libertad),
es producida por el advenimiento de un instrumento de intervención Z,
el cual imbrica o regula X afectando a Y; entonces, conforme a las cargas
expuestas por el modelo clásico, ambas estarían presentes, pues por una
parte, X está contenido en Z, entonces debe aplicarse la carga pro legislatore,
pero a su vez, Y corresponde al principio de libertad lo cual traería como
consecuencia la aplicación de la carga pro libertate.
Para resolver esta situación se propone desde el modelo integral la siguiente regla
argumentativa que resolvería también el caso de enfrentamiento del inbudio pro
esencialis (el cual proponemos como reemplazo del pro libertate), y el inbubio
pro legislatore:
En caso de enfrentarse las cargas pro esencialis (IPE) y pro legislatore (IPL), debe
aplicarse esta última de preferencia a la primera en razón al plus que el principio
democrático le da a dicha carga; por lo tanto: IPE < IPL.
348
Respecto de este conjunto de bienes esenciales, el sistema jurídico continental europeo
los explicita en la Declaración Universal de los Derechos del Hombre y del Ciudadano;
y el sistema de raigambre anglosajón en el Bill of Rigths.
349
Carga argumentativa de fuente propia que expresa la preferencia ponderativa a favor de
los bienes primarios o esenciales.
350
Que debe aplicarse cuando una vez aplicada la fórmula del peso subsista el empate.
351
En el cual se reconoce a la vida, salud, libertad e igualdad como los principios de mayor
peso abstracto en nuestro sistema jurídico.
352
De reciente reconocimiento de estatus esencial autónomo, por medio de la sentencia
T-760 de 2008.
192 Edgar Andrés Quiroga Natale
353
Categoría de creación propia.
354
Sumadas a las tres existentes desde el modelo clásico pero con las reformas o cambios
expuestos anteriormente.
Hermenéutica constitucional 193
355
Ver ATIENZA, Manuel. “Curso de Argumentación jurídica”. Trotta, Madrid. 2013.
CUARTA PARTE.
APLICACIONES DEL MODELO DE EQUILIBRIO INTEGRAL
EN CASOS CONCRETOS
356
La aplicación del modelo de equilibrio integral (con las variables y criterios analíticos
que lo componen), se desarrolla de forma concreta en el presente apartado; no obstante,
algunas de las reflexiones y citas utilizadas en la parte dogmática de éste caso, fueron
expuestas parcialmente en QUIROGA Natale, Edgar Andrés y VILLEGAS Ibañez,
María Alexandra. “La constitucionalidad de los contratos de estabilidad jurídica desde
la perspectiva del análisis económico del derecho”. Revista Vniversitas Universidad
Javeriana, Bogotá, 2008; y, QUIROGA Natale, Edgar Andrés. “Proporcionalidad y
ponderación”. UPTC, Tunja, 2011.
357
Ver por ejemplo: SANCHEZ Acosta, Manuel. “Contratos de estabilidad jurídica y su
incidencia en el crecimiento económico”. Tecnos, Bogotá, 2012.; MENDIVELSO Azuero,
Germán. “Eficiencia material generada por la ley 963 de 2005 en el orden económico
colombiano”, Aurora, Bogotá, 2013.; LLANOS Acosta, Ricardo. “Inversión, desarrollo y
crecimiento con seguridad jurídica. Una revisión del contexto latinoamericano”, Civitas,
Argentina, 2014.
198 Edgar Andrés Quiroga Natale
La referida norma (963 de 2005), fue expresamente derogada por el artículo 166
de la ley 1607 de 2012358 fijando un régimen transitorio de aplicación respecto de
las solicitudes y contratos ya suscritos antes de la derogatoria359.
358
Sin precisar en su corpus ni exposición de motivos las razones o fundamentos que
motivaron dicha derogación.
359
Artículo 166. Deróguese la Ley 963 del 8 de julio de 2005 por medio de la cual se instauró
una ley de estabilidad jurídica para los inversionistas en Colombia.
Parágrafo 1°.No obstante lo anterior, tanto las solicitudes que se encuentren radicadas
ante el Ministerio de Comercio Industria y Turismo, así como los procedimientos
administrativos que se encuentren en curso en el momento de entrada en vigencia de la
presente ley, deberán ser tramitados de acuerdo con la Ley 963 de 2005, modificada por
la Ley 1450 de 2011 y todos sus decretos reglamentarios vigentes, las cuales continuarán
vigentes solo para regular los contratos vigentes y las solicitudes en trámite de aprobación
a la fecha de entrada en vigencia de la presente hasta que se liquide el último de los
contratos.
Parágrafo 2°.Los contratos de estabilidad jurídica en ejecución a la fecha de la
promulgación de la presente ley continuarán su curso en los precisos términos acordados
en el contrato hasta su terminación.
360
Inicialmente la Ley 963 en su artículo 2 estipulaba la suma de 7.500 smmlv, posteriormente
esta cifra fue modificada por el artículo 51 de la Ley 1111 de 2006 ajustando el monto
exigido a 150.000 UVT.
361
“… La finalidad del contrato de estabilidad jurídica haría superflua toda inversión cuando
ella no trascendiera eficazmente en el circuito económico; es decir, cuantías inferiores a
las establecidas por el legislador podrían no resultar eficaces para el fin por él pretendido.
Por lo tanto, diferenciar a los inversionistas atendiendo a una cuantía mínima de capital
para ser cobijados con la ley que se examina, resulta proporcional y adecuado al fin
que se persigue, más aún cuando el mismo hace parte de un proyecto macroeconómico,
para el cual se requieren capitales e inversiones de una magnitud adecuada al desarrollo
económico requerido por la comunidad y auspiciado por el Estado (…)En suma, el monto
mínimo para la inversión exigido mediante la ley 963 de 2005, es adecuado a los fines
previstos por el legislador, como también proporcional al esfuerzo y al riesgo económico
al cual se someten las instituciones públicas y los particulares; en consecuencia, el
Hermenéutica constitucional 199
367
i) La presentación de una solicitud por parte del inversionista, dirigida al Estado
colombiano, a fin de obtener autorización para invertir en una actividad ya preestablecida
o para continuar con una ya existente, a la que deberá acompañarse un estudio de la
procedencia de los capitales que constituyen la inversión, la factibilidad del proyecto,
estudios técnicos y el número de empleos que se espera generar. ii) La evaluación realizada
por un Comité que estudiará la aprobación o improbación del contrato, de conformidad a lo
establecido por el Plan Nacional de Desarrollo y el documento Conpes. iii) Determinación
expresa de las obligaciones del inversionista. iv) Transcripciones del ordenamiento jurídico
como de las interpretaciones administrativas vinculantes sobre las cuales se asegurará la
estabilidad. v) El monto de la prima y su forma de pago. vi) Suscripción del contrato por
el ministerio del ramo en donde se ejecute la inversión. Firma que no podrá ser delegada
y cuyo término es de cuatro meses a partir de la solicitud del inversionista, tiempo que
le permitirá al Estado decidir si suscribe o no el contrato, y de no hacerlo, debe señalar
las razones de la negativa.
368
Las cuales de acuerdo con el contenido normativo en cita, son a saber,: que no se
refiera “[al] régimen de seguridad social, la obligación de declarar y pagar los tributos
o inversiones forzosas que el Gobierno Nacional decrete bajo estados de excepción; los
impuestos indirectos; la regulación prudencial del sector financiero y el régimen tarifario
de los servicios públicos. (…) Tampoco podrá recaer sobre las normas declaradas
inconstitucionales o ilegales por los tribunales judiciales colombianos durante el término
de duración de los contratos de estabilidad jurídica”
369
“(…) En tales contratos debe hacerse una referencia expresa y taxativa a las normas
y a las interpretaciones vinculantes que respecto de ellas hayan efectuado autoridades
administrativas, todo lo cual debe ser determinante de la inversión, vale decir, que las
normas indicadas, cuya estabilidad y vigencia se garantiza por medio del contrato debe ser
de tal entidad que sin su existencia y alcance regulatorio probablemente la inversión no se
hubiera efectuado…”. GALÁN BARRERA, Diego Ricardo. Los contratos de estabilidad
jurídica, un estímulo a la inversión nacional y extranjera. Estudios gerenciales, Vol. 2,
N° 101, Cali, p. 12. [En línea] Disponible en <http. www.scielo.org>
Hermenéutica constitucional 201
Como fue anotado, la ley 963 de 2005 actualmente no tiene vigencia jurídica
debido a la derogatoria ya comentada; no obstante, la utilidad del estudio y
desarrollo de éste caso estriba en dos puntos centrales a saber: i) demostrar que la
aplicación del equilibrio integral produce decisiones constitucionales diferentes
(mas eficientes y distributivas), que las generadas a partir del simple modelo
clásico o tradicional; ii) construir argumentos relacionales que permitan hacer
análisis homólogos respecto de figuras de estabilidad imbricadas en otra clase de
normas370 que reproducen el contenido esencial de los contratos de estabilidad
jurídica. Para lograr dichos objetivos, se utilizará la técnica de proporcionalidad
para el equilibrio integral tal como sigue a continuación.
Por ejemplo la ley 1508 DE 2012 y el decreto 1082 de 2015 en lo que se refiere al
370
i) Resulta incuestionable que uno de los núcleos esenciales sobre los cuales
se edifica el Estado Social de derecho es el reconocimiento, promoción y
371
(Los fundamentos de las referidas teorías se encuentran descritas en el acápite I de este
estudio por lo cual no es necesario reproducirlos).
372
siguiendo el criterio jurisprudencial mayoritariamente aceptado de que los temas
esencialmente económicos (tributarios, cambiarios, aduaneros, bancarios, bursátiles,
seguros, etc.) deben ser examinados bajo la lupa del test leve.
373
Además de lo anteriormente anotado.
Hermenéutica constitucional 203
Este juicio busca verificar que la intervención se haya realizado con respeto al
ámbito de restricción que impone el principio de legalidad; por lo tanto, quien
expide dicha intervención, debe estar revestido de competencia funcional para
hacerlo. Un análisis desde el enfoque de la public choice375, conduce a mirar
la idoneidad como una corrobación del respeto de asignaciones en la relación
principal – agente, con el fin de evitar la cooptación de rentas sociales por medio
de la captura del principal a cargo del actuar del agente.
375
“el estudio económico del proceso de toma de decisiones de no mercado, o, simplemente
como la aplicación de la economía a la ciencia política”, muestra cómo la producción de
un instrumento de intervención, supone la previa existencia de una relación principal–
agente, “en donde el primero detenta el poder primigenio y enviste al segundo de un
poder derivado para la ejecución de diferentes cometidos” FACHED, Peter. Law and
economics: the public choice. USA : Berkeley University, 1995, p. 20. .
206 Edgar Andrés Quiroga Natale
Para en caso sub examine, el instrumento (ley), resulta ser conducente prima
facie, para alcanzar los fines citados, en la medida que la ley funge como un
regulador de segundo piso376por medio del cual con vocación general, impersonal
y abstracta, se puede asignar y distribuir formalmente algunos elementos del
agregado social de preferencias consagrado en la Constitución; es decir, que la ley
resulta conducente para a través de la imbricación de incentivos poder alcanzar
mayor crecimiento económico con la probabilidad concomitante de impactar
positivamente el bienestar general.
Si los fines en cita solo pueden ser realizados a través del instrumento propuesto
(previamente determinado como idóneo), dicha intervención se reputará
automáticamente como necesaria; es decir que, si para lograr X, sólo es posible
utilizar Z; entonces, Z es necesario.
Por el contrario, si para realizar los fines perseguidos existen otros medios
(también idóneos) para alcanzarlos, entonces resulta imperioso identificar
claramente cada uno de éstos instrumentos, para posteriormente verificar el
grado de eficiencia individual frente a la potencial afectación que generarían en
los principios intervenidos con dicho instrumento.
Para alcanzar los fines perseguidos por la ley 963 de 2005, de conformidad
con los estudios del (CCEL), podrían aplicarse (además de la celebración de
contratos de estabilidad jurídica), por lo menos los siguientes instrumentos de
política económica: a) tratamiento preferencial tributario, b) eliminación de
aranceles, c) trato en condiciones homogéneas para inversionistas foráneos, y, d)
concesión de subvenciones. En consecuencia como para realizar X existen varios
instrumentos posibles (Y, Z, F, etc.), entonces se debe determinar si cada uno
de esos instrumentos resulta idóneo bajo el esquema de control propuesto en el
presente modelo, y concomitante a ello, el grado de eficiencia de cada uno de ellos
respecto a los principios afectados con la intervención.
377
Y teniendo como soporte técnico los estudios realizados por el CCEL. CENTRO DE
CONSULTORÍA ECONÓMICA LATINOAMERICA. Impacto económico (micro y
macro) de los contratos de estabilidad jurídica en América Latina. Chile : Centro de
Consultoría Económica Latinoamericana, 2008. p. 167-178. Y de la misma fuente el
estudio de impacto actualizado a diciembre de 2014, p. 240 – 265.
378
tratamiento preferencial tributario, eliminación de aranceles, trato en condiciones
homogéneas para inversionistas foráneos, y, concesión de subvenciones.
208 Edgar Andrés Quiroga Natale
a). todos pueden ser implementados por medio de los mismos instrumentos
adjetivos (leyes);
c). existe competencia funcional del Congreso para poder expedir todos los
instrumentos en cita;
f ). para todos los casos existe una relación medio – fin adecuada, debido a la
paridad adjetiva, orgánica y teleológica que comparten.
379
Por las razones ya expuestas con anterioridad. .
380
Resulta importante aclarar que a pesar de que la ley 963 de 2005 fue derogada en el año
2012, los contratos suscritos en vigencia de dicha normativa se mantienen incólumes; por
lo tanto, el estudio de impacto extendido de 2012 – 2014 es sobre los contratos celebrados
previamente a la derogatoria.
Hermenéutica constitucional 209
Trato en
Contratos Tratamiento
Eliminación condiciones Concesión
Estado: preferencial
de homogéneas
tributario de de
Colombia estabilidad para
(no aranceles subvenciones
jurídica inversionistas
arancelario)
extranjeros
Nivel de
aumento de
la inversión
con la 11.8% 11.6% 12.8% 12.5% 12.0%
utilización
del
instrumento
Nivel de
intervención
38.8% 30.2% 43.5% 42.0% 31.9%
en la
economía.
Eficiencia
27.0% 18.6% 30.7% 29,5% 19,9%
relacional
De lo anterior se colige:
381
CENTRO DE CONSULTORÍA ECONÓMICA LATINOAMERICANA. Op. cit., 2014,
p. 489.
210 Edgar Andrés Quiroga Natale
i) Beneficios de la medida:
a) Se puede establecer razonablemente que la medida de intervención atraerá
la inversión que generará un crecimiento económico para el Estado. Aunado a
ello, de conformidad con los estudios del CCEL (anteriormente anotados), se
determinó que con el advenimiento de la ley 963 de 2005 en el período (2005-
2014) la inversión se aumentó en 11.8% lo cual corrobora el puesto razonable
de beneficio.
b) El Estado recibirá por parte del inversionista, una prima anual equivalente al 1%
del valor de la inversión que realice cada año, la cual (por prescripción normativa),
podrá reducirse a 0.5% si por la naturaleza de la inversión, la misma contempla un
período improductivo en el cual el inversor no reportará utilidad operacional.
ii) Costes de la medida:
a) Rompimiento parcial de la cláusula de igualdad formal, y limitación
fáctica a la libertad de configuración legislativa y/o actuación pro-
actione de autoridad:
El efecto de inmutabilidad jurídica de las condiciones contractuales382,
supone:
382
centradas en las normas que regulan el contrato.
Hermenéutica constitucional 211
383
“(…)Así pues, en esencia, la confianza legítima consiste en que el ciudadano debe poder
evolucionar en un medio jurídico estable y previsible, en cual pueda confiar. Para Müller
(Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas, sentencia del 17 de diciembre de 1992,
asunto Holtbecker, en J. Boulouis y M. Chevallier, Grands Arrêts de la Cour de Justice
des Communautés Européennes, París, Dalloz, 1993, p. 77. En este fallo el Tribunal
consideró que el principio de la confianza legítima se definía como la situación en la cuál
se encuentra un ciudadano al cuál la administración comunitaria, con su comportamiento,
le había creado unas esperanzas fundadas de que una determinada situación jurídica o
regulación no sería objeto de modificación alguna.), este vocablo significa, en términos
muy generales, que ciertas expectativas, que son suscitadas por un sujeto de derecho
en razón de un determinado comportamiento en relación con otro, o ante la comunidad
jurídica en su conjunto, y que producen determinados efectos jurídicos; y si se trata de
autoridades públicas, consiste en que la obligación para las mismas de preservar un
comportamiento consecuente, no contradictorio frente a los particulares, surgido en un
acto o acciones anteriores, incluso ilegales, salvo interés público imperioso contrario. Se
trata, por tanto, que el particular debe ser protegido frente a cambios bruscos e inesperados
efectuados por las autoridades públicas. En tal sentido, no se trata de amparar situaciones
en las cuales el administrado sea titular de un derecho adquirido, ya que su posición
jurídica es susceptible de ser modificada por la Administración, es decir, se trata de una
mera expectativa en que una determinada situación de hecho o regulación jurídica no
serán modificadas intempestivamente. De allí que el Estado se encuentre, en estos casos,
ante la obligación de proporcionarle al afectado un plazo razonable, así como los medios,
para adaptarse a la nueva situación. (… ) De igual manera, la Corte ha insistido en que
la garantía de la confianza legítima, de forma alguna se opone a que el Congreso de la
República modifique las leyes existentes, lo cual iría en contra del principio democrático.
No se trata, por tanto, de petrificar el sistema jurídico. De tal suerte que, en el ámbito
tributario, esta Corporación ha considerado que únicamente es viable predicar la vigencia
del citado principio cuando quiera que existan realmente razones objetivas para confiar en
la durabilidad de la regulación, como por ejemplo, cuando la norma en cuestión ha estado
vigente por un largo período, no ha estado sujeta a modificaciones ni se ha propuesto
su reforma, su existencia es obligatoria “es decir, no es discrecional para las autoridades
responsables suprimir el beneficio” y ha generado “efectos previsibles significativos”,
esto es, que los particulares han acomodado su comportamiento a lo prescrito por la
norma(…)”. Corte Constitucional. Sentencia 1031 de 2002. M.P. Rodrigo Escobar
Gil. En el mismo sentido, para profundizar en el estudio del principio de confianza
legítima que tienen los consumidores del sector económico - financiero, se recomienda
la lectura del profesor Díaz quien en agudo análisis del caso DMG advierte la existencia
de responsabilidad patrimonial administrativa del Estado en aquellos casos en los cuales
212 Edgar Andrés Quiroga Natale
situación privilegiada (los grandes inversionistas). La Corte debió desvirtuar ese indicio
de inequidad mediante un test intermedio de igualdad demostrando que la exclusión de
algunos sectores menos favorecidos de la economía, del beneficio de ser cobijados por
un régimen normativo de estabilidad jurídica, obedecía a una razón de ser que la hiciera
admisible frente a la Constitución…”. CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia C-242
de 2006. Salvamento de voto Magistrado Jaime Córdoba Triviño.
386
“…Al respecto cabe precisar que, la selección de sectores productivos concretos por el
legislador en relación con los cuales se pueden celebrar contratos de estabilidad jurídica
con quienes decidan realizar inversiones nuevas o ampliar las existentes, a condición
de que el monto invertido sea igual o superior a 7.500 smmlv (aproximadamente $
3.860.000.000 de pesos de hoy), no constituye una vulneración alguna del derecho a
la igualdad. En efecto, si bien el artículo 13 Superior le establece al Estado el deber de
propender por la realización de una igualdad material, en el sentido de adoptar medidas
positivas a favor de los grupos discriminados y marginados, el cumplimiento de tal
obligación de rango constitucional no se opone a que el legislador pueda otorgarle un
tratamiento diferente, y más favorable, a un determinado grupo de inversionistas, quienes
(i) asumen elevados riesgos físicos y económicos; (ii) deben suscribir una prima a favor de
la Nación ; (iii) aceptan someter sus controversias a la justicia colombiana; y ( iv ) sobre
todo, con la inversión de sus capitales en el país están impulsando el desarrollo económico
y social del conjunto de la población, incluyendo, por supuesto, la más desfavorecida..”.
CORTE CONSTITUCIONAL. Sentencia C-320 de 2006, M.P. Humberto Antonio Sierra
Porto.
214 Edgar Andrés Quiroga Natale
387
Es importante anotar que no resulta “pacífica” al interior de nuestro ordenamiento la
separación clara de conceptos tales como libertad económica y libertad de empresa. Al
respecto, la profesora Magdalena Correa Henao afirma:“… Esta diferencia nominal no
significa empero que se esté hablando de conceptos distintos, aserción que, es cierto,
antes que supuesto debía ser una conclusión, pero que debe anticiparse para explicar el
lenguaje empleado en la investigación (…) En el derecho colombiano esta postura se
halla confirmada cuando como ha ocurrido de tiempo atrás y en reiterada jurisprudencia
(sentencias C-815 de 2001, C-389 de 2002, C-615 de 2002, y C-992 de 2006), se ha
diferenciado la noción de libertad económica como el genérico de la especie libertad de
empresa. Así cuando al aludir a la libertad económica, se precisa ser una “facultad que
tiene toda persona de realizar actividades de carácter económico, según sus preferencias
o habilidades, con miras a crear, mantener o incrementar su patrimonio” (sentencia T-425
de 1992), mientras que la libertad de empresa aparece más claramente como “aquella
libertad que se le reconoce a los ciudadanos para afectar o destinar bienes de cualquier
tipo (principalmente de capital) para la realización de actividades económicas para la
producción e intercambio de bienes y servicios conforme a las pautas o modelos de
organización típicas del mundo económico contemporáneo con vistas a la obtención de
un beneficio o ganancia” (sentencia C-525 de 1995)…”. CORREA Henao, Magdalena.
Libertad de empresa en el estado social de derecho. Bogotá : Universidad Externado de
Colombia, 2009. p. 65.
388
El ejercicio de las libertades económicas se construye sobre el reconocimiento y protección
de la igualdad material (El concepto de igualdad se erige como un pilar que edifica la
noción Estado social de derecho. Al respecto, la profesora Magdalena CORREA sostiene:
“… Se trata pues de un concepto esencial, de inmediata y directa aplicación, con valor
jurídico de plena validez, que viene a convertirse en la columna vertebral de cualquier
interpretación de la Ley Fundamental y de los diferentes subsistemas y perspectivas de
análisis que sobre ella se requiera…”. Ibid., p. 101), en la medida que solo se puede
predicar la libre iniciativa privada, la libre empresa y la libre competencia en condiciones
ex ante y sine qua non de igualdad, ya que la ausencia de este principio supone la limitación
Hermenéutica constitucional 215
393
Utilizando el modelo clásico o tradicional.
394
Consejo de Estado. Sentencia 32.612 A de junio de 2004.
Hermenéutica constitucional 219
Esta función integra ∑ T1x (∑x) T2x(∑x), con , f^2i ∑ (x), lo cual marca una
tendencia de optimización de utilidad, en la medida que aticula teorías de justicia,
estatutos económicos y criterios analíticos que permiten un análisis jurídico –
económico del caso sub-examine.
2.1.1.3. Ejecución de la técnica a partir del criterio analítico “ley de la
ponderación (f^1i)” de la función de ponderación. (∑ (X).)
Como tercera etapa, deben establecerse los elementos de la función “∑ (X)” ; es
decir los argumentos que fungen como las cantidades consumidas del bien “X”,
los cuales se van agregando a la función a partir del desarrollo del criterio analítico
previamente establecido, es decir, la aplicación de la ley de la ponderación bajo
la siguiente metodología:
2.1.1.3.1. Determinación de los escenarios de tensión ponderativa:
De conformidad con la dogmática del modelo de equilibrio propuesto, el
escenario de tensión ponderativa lo determina la elección del criterio de colisión
respecto del cual se pretenda plantear el enfrentamiento de los principios; es decir,
si se han de poner en colisión los principios como un todo, o, a contrario sensu,
la tensión ha de establecerse respecto de uno o varios núcleos esenciales que los
conforman, existiendo así cuatro (04) probables escenarios de tensión ponderativa
(TP): Si A = ∑(ai+aii+aiii). Vs B = ∑(bi+bii). Entonces, podría plantearse la
colisión como i) TP1: A vs B; ii) TP2: A Vs bii; TP3: ai Vs B; ó, iv)TP4: ai Vs bii.
Como del plantemiento del caso no es posible individualizar de forma concreta
el núcleo o núcleos esenciales de los principios en tensión, ha de escogerse TP1
(A vs B), y analizar el caso en concreto bajo el escenario de tensión ponderativa
de principios como un todo, los cuales de conformidad con los presupuestos
fácticos del caso serían:
Principio 1 (P1): seguridad. Ya que el instrumento de intervención se encuentra
justificado en virtud de maximizar la seguridad de los habitantes del Distrito.
Principio 2 (P2): libertad de locomoción. Debido a que la restricción de
movilidad funge como un condicionante de locomoción.
Por lo tanto:
TP1 = P1 Vs P2
2.1.1.3.2. Establecimiento del Status Quo (SQ) de cada principio:
Entendiendo por “Status Quo” el valor o nivel de satisfacción de los princpios en
colisión ex – ante al advenimiento del instrumento de intervención, para el caso en
Hermenéutica constitucional 221
396
El cual nunca llega a ser alcanzado íntegramente debido a la tensión intra e inter sistémica
que tienen los principios con otros a la hora de ejercerlos en la vida colectiva.
397
Consejo de Estado. Sentencia 32.612 A de junio de 2004.
222 Edgar Andrés Quiroga Natale
ii) Existencia de ocho (8) zonas distritales con restricción total o parcial
de movilidad (reservas naturales, zonas de conservación, sitios de interés
histórico con declaración de amparo, etc.).
Por lo tanto se puede colegir, que la sumatoria de los status quo (SQ) de los
principios en estudio (P1 y P2), es el producto del nivel de satisfacción conjunta
que ofrecen los mismos (ex – ante a la medida de intervención), la cual para el
caso uqe nos ocupa sería la siguiente:
∑ SQ = (SQp1 + SQp2).
∑ SQ = (35% + 60%).
∑ SQ = (95%).
SM: SQ + IS399
SM: 35% + 7%
SM: 42%
SM: SQ - PS400
SM: 38.4%
Por lo tanto se puede colegir, que la sumatoria de los status modificados (SM)
de los principios en estudio (P1 y P2), es el producto del nivel de satisfacción
conjunta que ofrecen los mismos (ex – post a la medida de intervención), la cual
para el caso sub examine, sería la siguiente:
∑ SM = (SMp1 + SMp2).
∑ SM = (42% + 48.4%).
∑ SM = (90.4%).
En el caso concreto podemos advertir que la sumatoria de los status quo de los
principios en tensión es de 95% (∑ SQ (P1 P2) = 95%), y, la sumatoria de los
status modificados es de 90.4% (∑SM (P1 Y P2) = 90.4%); por lo tanto, como
la ∑ SM < ∑SQ, se puede concluir que el instrumento de intervención redujo
400
Siendo PS: pérdida de la satisfacción.
401
“(…) Cuanto mayor es el grado de la no satisfacción o afectación de uno de los principios;
tanto mayor debe ser la importancia de la satisfacción del otro”. ALEXY, Robert. Ob.
Cit. P. 37.
Hermenéutica constitucional 225
Los cuales parten de veinte mil millones de pesos (por estudio y trámite del caso), más
402
El representante legal del consorcio “X” instaura acción de tutela (la cual luego
de haber surtido las dos instancias), es revisada de forma extraordinaria por la
Corte Constitucional, quien luego de aplicar una ponderación (entre el derecho a
la igualdad – prohibición de discriminación Vs la libertad de empresa – autonomía
de ejercicio profesional), desde un enfoque clásico o tradicional, arriba a las
siguientes conclusiones:
Dado que la colisión (prima facie), de los principios es de facto; es decir, como
una consecuencia natural del consumo de los derechos en el mercado, en donde
se presentan escenarios naturales de exclusión (si consumo A, entonces afecto a
B), y, en donde no existe el advenimiento de ningún instrumento de intervención;
resulta aplicable el criterio analítico de la “fórmula del peso” (f^2ii), y, en caso de
ser necesario (si la aplicación de la fórmula arroja resultados paritarios), también
se utilizarán las “cargas de la argumentación” (f^2iii). En consecuencia, la función
de utilidad a ejecutar (imbricando ambos condicionantes), para el desarrollo del
problema jurídico del caso, está compuesta así:
U ^ T (T1i + T1ii + T1iv + T2ii + T2iii + T2iv) = f^2ii f^2iii (X1, X2, X3 ,
... , Xn).
Esta función integra ∑ T1x (∑x) T2x(∑x), con , f^2ii f^2iii ∑ (x), lo cual marca
una tendencia de optimización de utilidad, en la medida que aticula teorías de
justicia, estatutos económicos y criterios analíticos que se corresponden con la
naturaleza y complejidad del problema jurídico en estudio.
ii) P2: Libertad. Expresado bajo sus derivados de libre escogencia y desarrollo
de la profesión y autonomía empresarial; los cuales (a efectos de homologar
los criterios comparativos), también serán estudiados bajo un solo cuerpo
normativo.
P1,2406P = ____________________________
La explicación de cada una de las variables, así como de su gradación se hizo en la parte
405
La curva cóncava curvada hacia fuera (TM) representa las posibilidades fácticas
para la realización de P1 (igualdad) y P2 (libertad). Ella expresa que, mientras
más se realice P2, menos se realizará P1, y viceversa.
Las curvas convexas, curvadas hacia adentro (I1, I2) representan curvas de
indiferencia, éstas presentan resultados que pueden valorarse como igualmente
deseables dentro del campo decisional (por lo tanto, los consumidores de P1 y P2
son indiferentes a ellas). En la medida que más alta sea una curva de indiferencia,
mejor se valorarán las situaciones representadas en ella.
407
El análisis que a continuación se presenta resulta de la interpretación de la gráfica y
argumentos expuestos por Sieckman haciendo referencia in genere a la utilización de
las curvas de indiferencia y el óptimo de Pareto aplicados a la ponderación los cuales
fueron ajustados para estudiar el caso que nos ocupa. Ver SIECKMAN Jan. “El modelo
de los principios del derecho”. Universidad Externado de Colombia, Bogotá, 2006, pág.
127 – 130.
Hermenéutica constitucional 231
En el caso sub examine, el consorcio “X”, quien funge como consumidor del
bien P1, resulta evidente que ve afectado su nivel de satisfacción de consumo al
ser rechazado por el oferente del mismo (firma de abogados “Z”), lo cual sumado
a la precisa cláusula de prohibición de discriminación en razón a la raza (artículo
13 superior), configuran una afectación que no puede ser catalogada como leve.
En relación con la firma “Z” quien funge como consumidor de P2, también
es evidente, que si es obligado a ejercer su profesión en contra de su voluntad, se
estaría sacrificando en parte su libertad - autonomía como agente de mercado, lo
cuál no puede ser catalogado como leve.
PA (P1) = 4 (2 a la 2).
P2 (P2) = 4 (2 a la 2).
413
Corte Constitucional. Sentencia C-934 de 2013. M.P. Nilson Pinilla Pinilla.
414
En términos keynesianos.
415
De conformidad con la denominación dada por el modelo clásico a éste nivel. Ver parte
II del presente estudio.
Hermenéutica constitucional 235
Como fue desarrollado en la parte III del presente estudio, esta categoría
cualitativa se corresponde al nivel de elasticidad que tienen los principios en
colisión, de conformidad con las curvas de indiferencia de cada uno de ellos para
el caso concreto. Es decir, que de la existencia o no de curvas de indiferencia
(diferentes opciones de consumo que reportan al consumidor niveles parecidos
de satisfacción), se puede establecer el nivel de elasticidad de los principios en el
caso concreto.
iv) Declaración Americana de los derechos y deberes del Hombre (artículo 2).
SR (P1) = 4 (2 a la 2).
propiedad resulta relevante para establecer el examen de igualdad por parte del juez.
En consecuencia, un juicio sobre la eventual violación al derecho a la igualdad, o
sobre la mejor forma de aplicar este principio no parte entonces de presupuestos
idénticos, ni tampoco de situaciones por completo diferentes, sino que se efectúa
en relación con igualdades y desigualdades parciales, a partir de propiedades
relevantes desde el punto de vista jurídico-constitucional. En los eventos en que
concurren tanto igualdades como desigualdades, debe el juez determinar si existen
razones suficientes para mantener un trato igual frente a situaciones en alguna
medida disímiles, o si existen razones suficientes para establecer un trato distinto
entre situaciones con algún grado de similitud.(…)”416.
Existe una afectación directa que sufre “X” respecto del consumo de P1 (al ser
excluido del servicio de asesoría jurídica privada en razón de su raza), a causa de
“Z” mediante su corresponsal consumo de P2 (ejerciendo su libertad de empresa
de la cual se deriva la autonomía contractual para escoger con quien realiza
negocios jurídicos).
Tanto “X” como “Z”, son agentes económicos superavitarios; es decir, que
cuentan con una posición económica privilegiada; sin embargo (de conformidad
con los antecedentes del caso), “X” detenta un mayor poderío económico al contar
con un patrimonio 800% mayor al patrimonio de “Z”.
Existen para cada uno de los agentes (“X” y “Z”), diferentes curvas de indiferencia
entorno a su relación de consumo (P1 y P2); por lo tanto, tanto la oferta de “Z”
como la demanda de “X” son agregadas.
416
Corte Constitucional. Sentencia T-629 de 2010. M.P. Juan Carlos Henao Pérez.
417
Prepuestos para la intervención del estado en el status de igual real según el artículo 13
superior.
418
De conformidad con la escala MIT de medición de ingreso empresariales. Estudio caso
Iberoamérica, USA, 2013. Pág. 138.
240 Edgar Andrés Quiroga Natale
2 * 4 * 0.5 * 1* 4 *0.5
P1,2P = 4
= 0.5
8
Ahora, es necesario invertir la fórmula para estudiar la relación de ponderación
de P2 con respecto a P1, así:
P2,1P = GA2 * PA2 * S2 * Q2* SR2 *I2
GA1 * PA1 * S1 * Q1* SR1 *I1
P2,1P = 2 * 4 * 0.5 * 1* 4 *0.5
2 * 4 * 0.5 * 1* 4 *0.25
P2,1P = 8
= 2.0
4
422
lo cual no corresponde al caso que nos ocupa (el cual conforme a lo anotado), pues tuvo
una solución en favor de P2 a partir de la aplicación de la fórmula del peso.
242 Edgar Andrés Quiroga Natale
Tiene una carga de acción, pues en caso de perder tendría un mandato de relación
teniendo que ejecutar (en contra de su voluntad), la representación judicial privada
de “Z” = (+1punto).
En caso de fallarse en su contra, podría llegar a generar efectos inter pares, pues
(respecto de su prelación de mercado e ingreso empresarial), existen otros 104
agentes de mercado en condiciones análogas. = (+1 punto).
i) Se parte de la premisa de que los tres votantes (V1, V2 y V3) son racionales.
iii) Es un juego no cooperativo, es decir, que los jugadores, votarán por separado
y de forma aislada sin tener la oportunidad de reunirse y/o debatir.
Para resolver este caso utilizaremos algunos presupuestos de la teoría del equilibrio
de Nash descritos así423:
a) Dividir el todo del problema en cada una de las partes o soluciones posibles.
423
Idem. Pág. 200.
244 Edgar Andrés Quiroga Natale
S
S
N
S
S
N
N
DECISIÓN S
S
N
N
S
N
N
S N (2,2,3): 7
S S (2,3,2): 7
N
N (-1,0,0): -1
DECISIÓN
S (3,2,2): 7
S
N N (0,-1,0): -1
S (0,0-1): -1
N
N (0,0,0): 0
Para el caso que nos ocupa, de las ocho (08) posibles combinaciones de decisión
colectiva, se reduce el conjunto de negociación solo a tres (03) de ellas, en la medida
que solo éstas respetan la regla de generar la mayor ganacia (utilidad) social; por
lo tanto, aquellas que generan pérdida (SNN, NSN y NNS); aquellas que no
Hermenéutica constitucional 245
V1: Como es racional establece que de las ocho (08) opciones de combinación
posible, solo puede optar por tres (03), las cuales constituyen el conjunto de
negociación al respetar la regla de perseguir la mayor ganancia grupal. Sin embargo,
posee una ventaja negocial frente a los demás, pues según las reglas V1 vota de
primero; por lo tanto, si V1 es racional, escogerá de las tres opciones la que mayor
utilidad individual le reporte (ya que con cualquiera de las tres cumple la regla
de buscar la mayor ganancia social), en consecuencia votará N pues le reporta
una utilidad individual de tres (3) respetando la mayor utilidad social posible de
siete (7).
V2: Como es racional establece que de las ocho (08) opciones de combinación
posible, solo puede optar por tres (03), las cuales constituyen el conjunto de
negociación al respetar la regla de perseguir la mayor ganancia grupal. Pero al
saber que V1 voto de primero y conociendo de antemano que también es racional,
presume que éste voto N para maximizar su utilidad individual; por lo tanto, a
V2 no le queda otra alternativa que votar S para no hacer nugatoria la utilidad
social y obteniendo así una utilidad individual de dos (02), respetando la mayor
utilidad posible de siete (7).
V3: Como también es racional, debe hacer el mismo análisis que V2 y votar de
forma idéntica S, generando una utilidad individual de dos (02), respetando la
mayor utilidad posible de siete (7).
Es una decisión que genera la mayor ganancia colectiva a pesar de no ser igual
para todos individualmente concebida (pues como ya se explicó V1 obtuvo una
mayor utilidad individual por tener el poder decisional de votar de primero), por
lo tanto, es considerado un equilibrio de Nash.
Por lo tanto, los jueces tienen el deber de ser agentes de optimización, ya que
a través de sus decisiones, fungen como operadores de asignación y distribución
de esos derechos - preferencias (bienes); y en consecuencia, a través de su digno
conducto se materializa en el caso concreto, el contenido abstracto y teleológico
tanto de los bienes primarios como del agregado social.
425
En el mismo sentido puede verse: i) ”(…)Ciertamente, es posible que concurran hambrunas
generalizadas sin que se violen los derechos liberales de nadie y sin que deje de operar un
mecanismo de mercado libre. La reivindicación de los derechos liberales de una forma
independiente de los resultados es, pues, susceptible de ser puesta seriamente en cuestión
en términos de su aceptabilidad ética(…)”. SEN, Amartya. Mercados y libertades. Logros
y limitaciones del mecanismo de mercado en el fomento de las libertades individuales. En
: Bienestar, justicia y mercado. S.l. : Paidós, ICE/UAB, 1997, p. 45. ii) “(…) la eficiencia
como valor único para evaluar el bienestar general es injustificablemente vacía, y desde
luego, no está exenta de convertirse en instrumento de grupos de interés aun cuando puede
convertirse en fuente de ineficacia, si se prescinde de ella (…)” LOPEZ Obregón. Ob. Cit.
Pág. 21. ii) “(…) puede señalarse que una decisión es ineficiente, cuando, al final reduce
el bienestar de todas las personas relacionadas con ella […] el mandato de promover el
bienestar general debe ser algo como aumentar el bienestar de todo el mundo, y no solo
de un grupo de personas; y sin duda, no puede ser algo que disminuya el bienestar de
todos (…)”PALACIOS Mejía, Hugo. “En busca de un control constitucional eficiente”.
En Memorias del Seminario Corte Constitucional y Economía. Bogotá: BID-Universidad
de los Andes, 2000, pág. 44.
426
PIKETTY, Thomas. Ob. Cit. Pág 369.
427
VOLPEI, Johan. “El fin del hombre y del capital”. Fondo de cultura económica, México,
1997. Pág. 177.
Hermenéutica constitucional 251
constitucionales (ya sea como agentes de aplicación del derecho y/o agentes de
corrección del mismo), la cuál explicitan a través de sus decisiones.
428
Sumada a la racionalidad limitada y factores exógenos que fungen como condicionantes de
acción (nivel de formación, aversión y/o propensión al riesgo, interés mediático, postura
política, tendencia religiosa, etc.).
429
tal como fue expuesto en la parte introductoria del presente trabajo.
430
“(…) Esta expansión está caracterizada por tres aspectos íntimamente ligados. Primero,
los derechos constitucionales han alcanzado una influencia que va más allá de la relación
entre el ciudadano y el estado. Han adquirido un “efecto de irradiación” sobre el entero
sistema jurídico. El resultado es la ubicuidad de los derechos constitucionales. Segundo,
los derechos constitucionales han sido vinculados de manera intrínseca al principio
de proporcionalidad. La aplicabilidad de este principio presupone que los derechos
constitucionales tienen la estructura de principios o mandatos de optimización. Debido
252 Edgar Andrés Quiroga Natale
(…) La jurisprudencia anglo-americana insiste sobre la regla de la razón, pero esto deja
a un lado la razón de las reglas (…) Las personas tienen que ser conscientes de la razón
de las reglas antes de que puedan entrar en un debate acerca de las cuestiones que se
refieren a la elección entre reglas diversas (…) Si las reglas influyen en los resultados
y si algunos resultados son “mejores” que otros, se sigue que en la medida en que las
reglas puedan ser elegidas, el estudio y análisis de reglas e instituciones comparativas
se convierte en el objeto propio de nuestra reflexión (…) puesto que las sociedades
modernas están mucho más colectivizadas y politizadas, la tasa de descuento implícita
en la asignación de recursos económicos se ha ido elevando continuamente, a medida
que éste proceso iba alcanzando cuotas más altas (…) la concentración política sobre
los beneficios temporales a corto plazo es inherente a la estructura política que se basa
en las mayorías sin limitaciones y en procesos de decisión de gobierno sin restricciones
y con amplia discrecionalidad. Esto puede producir resultados que no son deseados por
ninguna persona o grupo dentro de la comunidad; de ahí el uso de la palabra “trampa”
o “dilema”. En resumen, los resultados producidos por una perspectiva de corto plazo
en la política moderna pueden ser “pésimos de Pareto”(…)”. BRENNAN, Geoffrey
y BUCHANAN, James. La razón de las normas. Colección Biblioteca de Economía.
Barcelona : Folio, 1987. p. 75.
254 Edgar Andrés Quiroga Natale
433
Como por ejemplo: i) el teorema de Coase “En ausencia de costos de transacción el derecho
es irrelevante para la obtención de asignaciones eficientes de recursos”. POSNER, Richard;
LANDES, William y KELMAN, Mark. “Análisis económico del derecho”, Universidad de
los Andes, Bogotá, 2011, p.50. ii) O la fórmula Learned Hand sobre el nivel de diligencia
exigible “El propietario no será negligente si la carga de las precauciones (B) es menor
que la probabilidad de que ocurra el daño por la gravedad de éste (PL); es decir, si B
menor que PL. POSNER, Richard y otros. Ob. Cit. p.180.
434
Lo cual no excluye que las mismas puedan ser utilizadas como antecedente y/o precedente
para la solución de casos futuros; no obstante resulta bastante plausible centrarse en el
caso concreto para poder advertir las especificidades de la situación particular, pues los
agentes (oferentes y demandantes) pueden llegar a tener preferencias disímiles aún ante
situaciones iguales o muy similares. En punto de discusión anotan Amster y Pinasco “(…)
en muchas situaciones resulta clave el punto de vista. En la teoría de juegos, esto no solo se
ve reflejado en los análisis diferentes que hace cada jugador desde su situación particular,
sino también en un aspecto más delicado, que determina que distintas personas (o una
misma en momentos distintos de su vida) tomen decisiones diferentes ante un mismo
Hermenéutica constitucional 255
Tal como fue desarrollado a lo largo del presente trabajo, conceptos como
“interpretación”, “constitución”, “justicia”, “eficiencia”, etc., estriban en
un enorme margen de ambigüedad e indeterminación epistemológica,
dogmática y práctica; sin embargo, esta condición no debe convertirse
en una limitante infranqueable para contribuir a la teoría jurídica y al
permanente debate académico que debe existir en su estudio y aplicación.
La presentación de un modelo de equilibrio integral no tiene la pretensión
ni alcance dogmático y/o metodológico de convertirse en la última ni
única solución a los complejos problemas que presenta la decisión judicial,
sin embargo estimo que se constituye en una valiosa herramienta para
aumentar la probabilidad de obtener fallos constitucionales más eficientes
desde la asignación y justos desde la distribución; es decir, decisiones más
equilibradas.
conjunto de elecciones posibles. Tiene que ver, si se quiere, con aspectos psicológicos
que se traducen en propensión o aversión al riesgo y pueden modelarse matemáticamente
mediante la noción de utilidad(…)” AMSTER, Pablo y PINASCO, Juan Pablo. “Teoría
de juegos. Una introducción matemática a la toma de decisiones”. Fondo de cultura
Económica. Breviarios, México D.F., 2014. P.24.
FUENTES DE CONSULTA
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University Press, Boston, 1980.
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Norton & Company, 1999.
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2011.
• VON MISES, Ludwing. “La acción humana”. Traducido del inglés por
Reigalbiol Joaquín.. Unión Editorial. S.A. Madrid, 1986.
• VOLPEI, Johan. “El fin del hombre y del capital”. Fondo de cultura
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Corte Constitucional.
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salvamentos de voto).
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enc_14091998_fides-et-ratio.html consultado el 25 de enero de 2015. 10:00am.
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