Está en la página 1de 5

CAPUTULO PRIMERO

LA ROMANIZACION JURUDICA DE LAS PROVINCIAS

1. CONCEPTO DE ROMANIZACION.

La expansión de romana (siglos V, IV, primera mitad del siglo III) pasó a consolidar la supremacía
en el lazo a la hegemonía de Italia. Luego emprendía su expansión fuera de la península itálica, la
que se inicia con las guerras Púnicas (Cartago era un puerto de los persas) hasta alcanzar su
máxima amplitud territorial con trajano (siglo II). Esta expansión no solo tuvo un significado
meramente militar, sino fue un factor de romanización. Se entiende por romanización el proceso
por el cual roma logra incorporar los territorios y poblaciones conquistados a su estilo general de
vida.

Tres ideas básicas se deben retener desde el comienzo:

a) el derecho representa la vocación por excelencia del genio romano, y por ende, el legado más
valioso que Roma ha transmitido con posterioridad.

b) La difusión del derecho romano llevada a cabo gracias al proceso de romanización constituye la
primera vez que ese derecho impone su presencia en extensos territorios del orbe.

c) La llegada de roma es primero militar, luego cultural.

2. SIGNIFICADO DEL TERMINO PROVINCIA:

Indica la esfera de acción asignada al magistrado con imperio. En cuya virtud se le faculta para
vencer al territorio cuya sumisión se le ha sido encargada.

El vocablo civitas expresa una noción de carácter eminentemente personal, cuya traducción
corresponde al concepto de ciudadano. La civitas representa el conjunto de ciudadanos en
cualquier lugar que ellos se encuentren y no a la porción del suelo formada por murallas, vías y
edificios (urbs). Debido a esto difiere a la imagen que tenemos de estado moderno (territorio,
organización, soberanía). Este carácter aterritorial de las civitas hizo que el derecho romano no
fuera estatal, pues el ciudadano conserva sus privilegios estando en cualquier punto en que se
halle.

3. LINEAS GENERALES DE LA ORGANIZACI”N PROVINCIAL.

El sentido territorial que llega a adquirir la palabra provincia abarca solo el suelo extraitalico
dominado por roma, dado la lejanía de los lugares respecto de la urbe dificultaba su dependencia
de los Órganos centrales, por lo que se hizo necesario contar con agentes permanentes en el suelo
provincial, surgen así los gobernadores provinciales. Estos eran colegiados y fueron asumidos
inicialmente por los pretores, quienes gozaban de suprema potestad en el sector que se les
asignaba. Posteriormente con la reforma Silana, se enviaran a exmagistrados mayores (cónsules o
pretores), los que al cesar sus funciones en roma, se les prorrogaba el imperio para gobernar en
las provincias.
La Lex Provinciae era la carta o estatuto supremo con respecto a la provincia. En ella se describía
su demarcación territorial, organización administrativa, las facultades del gobernador, el régimen
jurídico político.

• Posterior a la reforma de augusto, las provincias se dividieron en imperiales y senatoriales. En las


primeras no están totalmente pacificadas o son zonas importantes de ocupación económica,
tenían un ejército permanente y el emperador asume en ellas una posición de DOMINUS y
gobernadas a través de legados suyos con rango consular. Las senatoriales en cambio, dependen
del senado y eran administradas por procónsules. Este sistema existe hasta Dioclesiano
(dominado).

4. FACTORES DE LA ROMANIZACION JURUDICA:

Al oriundo de las provincias se le denomina peregrino: indica la idea de lejanía respecto a roma,
esta lejanía se manifiesta fundamentalmente en lo jurídico, pues el estatus difiere al del
ciudadano. Son extranjeros que viven dentro del imperio romano (territorios provinciales).

Existe el pretor peregrino QUIEN EN LA PROPIA urbe quien la esfera de la potestad es el Iurisdictio,
quien ve los problemas que existiesen entre los ciudadanos y los extranjeros. En cambio a aquellos
que se hallan fuera del mundo romano se les denomina barbaros (barbari) conglomerado humano
con el cual la urbe no mantenía ningún tipo de relaciones.

Roma en general respeta el hecho físico de las localidades preexistentes a la Época, las
excepciones a esto fueron Cartago (guerras Punicas), Numancia y Sagunto.

5. REGiMENES DE CIUDAD:

Colonias
Ciudades de tipo romano.
Municipios

Ciudades romanos

Estipendiarias
Ciudades de tipo indígenas
Libres.

La diferencia entre ambas radica en la condición jurídica política de cada una de estas.

a) Colonias: se trata de una fundación romana hecha con ciudadanos romanos en los territorios
provinciales.

Representa una avanzada romana que se moviliza a lugares con fines estratégicos. A partir de
Graco la creación de las colonias se convierte en un socorrido medio para asignar tierras al
proletariado urbano o para premiar a soldados veteranos.

b) Municipios: son ciudades preexistentes a la conquista a cuyos habitantes se les concede el


privilegio de la ciudadanía romana (municipios romanos) o de la latinidad (municipios latinos). Esta
calidad de municipios divididos en ciudadanos con plenos derechos de ciudadano romano
(municipiptium optimo iure), a los otros se les priva en cambio de votar en los comicios a roma
(municipium sine sufragii).

La característica fundamental fue su autonomía, primero en la capacidad de elegir a los


magistrados, comicios y curia; y en el reconocimiento en cada municipio de los derechos y
garantías personales propias de romano. Estos habitantes debían ciertos deberes para con roma
tales como la el servicio de la milicia y el pago de tributos.

c) Ciudades latinas (municipios latinos): son ciudades indígenas a las cuales se les concedió el ius
latii, beneficio que importa gozar parcialmente del derecho romano, esto es, del ius commercium
(posibilidad de efectuar todos los actos y negocios jurídicos romanos, tanto para adquirir bienes
como para obligarse) y en casos especiales del ius connubii (facultad para celebrar justas nupcias).
La latinidad se convierte asÌ en una pausa intermediaria en el camino a la civitas y según fueran
aquí las condiciones para llegar a ella se habla del ius latii minus (quienes hubiesen desempeñado
alguna magistratura unipersonal en la ciudad latina (aediles, quastores) y maius (quienes hubiesen
ocupado el cargo de decurión en la curia o concejo municipal) por esto, la diferencia entre estas
dos instituciones radica en la cantidad de personas que podían acceder tanto a una como a otra.

6. ORGANIZACION INTERIOR.

Las ciudades de tipo romana tienen un esquema político jurídico análogo al de la urbe: roma es un
modelo que intenta ser imitado en las provincias. Por lo que su sistema se apoyó en los tres
Órganos romanos: magistrados, comicios y senado.

Entre los magistrados los dos más importantes encontramos a los duoviri, los aediles y los
quastores. Quienes como en roma poseen características comunes tales como la colegiatura,
pluralidad, gradualidad y temporalidad.

Duoviri o quatuuoviri: Colegiados, poseen imperium (capacidad de mando militar sobre las tropas
de la ciudad), convocan y presiden los comicios y el senado local. Son nombrados cada 5 años.
Eran los encargados de la policía de calles, facultados para imponer pequeñas multas y sanciones.

Quastores: no estaban en todas las provincias, y donde los hubo, tenían a su cargo la
administración y cuidado del aeratium de la ciudad.

Curia: Órgano análogo al senado republicano, con carácter de vitalicio designados por el censor
local. Estaba presidida por el duoviri, y entre sus funciones se incluyen algunas de Índole
consultiva y otras deliberativas

Pueblo: forman parte de este los oriundos del municipio y los domiciliados en la ciudad. Se
hallaban distribuidos en curias o tribus.
Ciudades de tipo indígena:

Stipendiarias: se hallaban sometidas a la vigilancia y control del gobernador provincial y obligadas


al pago de un stipendium (de ahí el nombre) o tributo sufragados por todos sus habitantes,
facilitar contingente para el ejercito de la urbe y albergar tropas romanas.

Libres: estaban obligadas a pagar tributos, pero no estaban sometidas a la intervención ni a la


tutela del correspondiente gobernador.

Se dividen en federadas y no federadas.

Las federadas son aquellas que obtienen de roma un tratado (foedus) celebrada entre dichas
ciudades y roma, con lo cual se les garantizaba su individualidad administrativa, instituciones
generales y derecho, pero no podían ejercer soberanía exterior, ya que no podían declarar la
guerra ni concertar la paz con otros pueblos sin la aprobación de la metrópolis. En este tipo de
ciudades rige el derecho indígena y acuñan sus propias monedas.

Las no federadas fueron aquellas que adquirieron su libertad no en virtud de un tratado sino de
una concesión emanada unilateralmente de la urbe, ya sea por medio de una ley o un
senadoconsulto.

7. HOMOGENIZACION JURUDICA DEL ORBE ROMANO.

La romanización jurídica de las provincias fue un proceso totalmente asincrónico ya que las
ciudades sometidas a roma se someten a diversos estatus jurídicos, desde la Época del imperio sin
embargo se comienza a advertir un proceso de homogenización jurídica, dada en el año 74 d.c por
VESPACIANO, quien concedió el IUS MINUS a todos los habitantes de la provincia de Hispania.

Posterior a esta medida viene la promulgación en el año 212 d.c, por Antonino Pio Caracalla, el
edicto caracalla por el cual todos los habitantes libres del imperio se les concedieron la ciudadanía
romana, termina así, la diferenciación entre peregrinos y ciudadanos. Cabe señalar que la
importancia de tal acontecimiento no parece haber sido tal en la realidad, ni en su proyección
jurídico-publica ni jurídico-privada. 70 años después con Dioclesioano se termina por transformar
al popolus en un objeto institucional de dominio.

8. EL REGIMEN MUNICIPAL. ESPLENDOR Y DECADENCIA.

El municipio fue un núcleo de enorme prosperidad e importancia en el mundo romano, no


obstante la crisis que arrecia al mundo romano en la Época del bajo imperio termino también por
gravitar sobre el régimen urbano, esto dado, por las agobiantes cargas que pesan sobre los
habitantes de las ciudades llevaron a la progresiva desaparición de la burguesía.

Expresión de la crisis son la presencia de dos funcionarios que aparecen dentro del ·ámbito local:

1) el curator aparece en el año I d.c como un contralor imperial frente a las finanzas arruinadas.

2) el defensor civitatis fue creado por valentiniano el siglo IV d.c con la misión principal de
proteger de las arbitrariedades y exacciones cometidas por los agentes fiscales. Más tarde se le
encarga a él recaudar los impuestos entre los pobres.
La curia municipal por otra parte degenero en un agente del fisco, denominados también curiales
a quienes se les asigna una función en extremo odiosa: responsabilizarse personalmente de la
percepción de los impuestos, de modo que si no llegaba a completar la cuota prefijada por el fisco,
debía compensarla con su patrimonio particular.

En síntesis el municipio otrora libre y autónomo, se ha transformado ahora, en su etapa de crisis,


en un instrumento de opresión.

Esta decadencia provocara en el territorio un proceso de independización respecto del núcleo


urbano, llegando a adquirir una especial autarquía, económica y política. En el territorio van
surgiendo dominios rústicos o fincas, que gozan de inmunidad, donde sus titulares administran la
justicia, recaudaban impuestos, así en el bajo imperio la vida se desplaza de la urbe al agro.

9. EL DERECHO ROMANO EN LAS PROVINCIAS.

Hasta la constitución de Vespasiano del año 74 d.c. para Hispania y de caracalla (212d.c) para todo
el imperio, el derecho romano en su versión latina o plena era un privilegio que gozaban
únicamente las ciudades de tipo romano. En las ciudades peregrinas en cambio, regía el derecho
indígena. Posterior a caracallas diversos factores permiten explicar la NO vigencia del derecho
romano clásico en la vida provincial:

1) la ubicación cronológica de caracalla, ya que como es sabido el 230 d.c es finalizada la actividad
jurisprudencial y el sistema procesal de formulario.

2) la inexistencia en los territorios provinciales del agere per formula. No hubo jueces privados, ni
formulas, ni bipartición procesal, si no, el juez provincial por excelencia fue el gobernador quien
posee una plenísima Iurisdictio.

3) la creación de relaciones reciprocas entre uno y otro derecho (vulgarización).

También podría gustarte