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DE LA AUTOANULACIÓN A LA PARTICIPACIÓN

Consideraciones sobre las elecciones del 21N

“El pueblo es sumamente apto


para elegir a las personas a
quienes debe confiar parte de
su autoridad.”
Barón de Montesquieu

Variando entre las distintas acepciones de la palabra, de ese


ideal llamado Democracia, los conceptos coinciden en presuponer la
participación ciudadana en su gobierno a través de distintos
mecanismos: existen las democracias reducidas en las cuales los
ciudadanos se limitan a elegir a sus representantes y en las cuales el
poder del Estado está truncado por otros centros de poder, y por otra
parte, están las democracias en las cuales, la elección de los
magistrados de elección popular es solamente uno de los elementos
de ese proceso mediante el cual el pueblo se autogobierna, pues
presuponen una participación activa de los ciudadanos, control sobre
los cargos, responsabilidad, rendición de cuentas, y distintos
mecanismos de participación: tal es nuestra democracia, la cual se
revitalizará con el siguiente proceso electoral que abrirá nuevos
espacios para el diálogo, para el autogobierno guardando las
diferencias y la revitalización de nuestro Sistema Federal.

Democracia que sin duda dio un salto en el proceso evolutivo del


Estado venezolano con la constitución de 1999, democracia que la
Fuerza Armada hoy se honra en defender. Es importante mencionar
que el próximo proceso electoral guarda una particularidad que hoy los
soldados y soldadas de Venezuela celebramos: el regreso de la
política, el retorno a la realidad y el completo fracaso de aquella
facción subversiva que trató sin disimulo, de crear una Guerra Civil en
Venezuela. Debe saber Venezuela, que aquí en este despliegue se
encuentran hombres y mujeres de la FANB que acudieron a la defensa
de esta Constitución en aquellos días de Abril del 2002, que supieron
preservar la paz en las guarimbas del 2014 y 2017, que han venido
venciendo el vil injerencismo desde el 2019 y que han derramado su
sangre protegiendo material electoral ante aquellos que desprecian
nuestra democracia.

Por esto, vemos con esperanza este ambiente de reconciliación,


de participación y de entendimiento que vuelve a respirarse en nuestra
amada Venezuela ¡Vaya en que momento! Todavía iluminados por el
sol de Carabobo que tiene 200 años iluminando los caminos de
dignidad de Venezuela, 200 años de aquella Constitución de la Villa
del Rosario de Cúcuta en la cual se institucionalizaba el sistema
político de la Patria grande; virtud militar y virtud política, que superaba
todos los obstáculos. Por cierto, para aquellos días del Congreso de
Cúcuta cuando se discutía la Forma de Estado que debía asumir la
naciente república, un diputado neogranadino, Fernández Soto,
intervino de una manera tal que es digna de recordar, en cuanto a las
instituciones que merecen nuestros ciudadanos:

“Un pueblo heroico, un pueblo virtuoso, que eclipsa la fama de la antigüedad, un pueblo,
digo, que arrostra todos los peligros, que desprecia la desnudez y el hambre; que hace la
guerra sin elementos, y que se hace superior a cuanto se le opone, yo no veo como es que
pueda considerársele incapaz de instituciones saludables”.
¡Por instituciones saludables estos próximos comicios, por el equilibrio
institucional, por nuestra democracia! Si bien es cierto que en una
democracia, la oposición política es un ente constituyente de la
soberanía popular, también es cierto que su participación debe
enmarcarse en los mecanismos agonales del juego político ¡Qué poco
saludable resulta cuando los adversos al gobierno deciden
autoanularse! Cuando se salen de los mecanismos constitucionales y
se comportan cual facción subversiva para atacar las instituciones
republicanas.

Afortunadamente, quienes en su ceguedad estúpida continúan


en esta senda, son una ínfima minoría repudiada por la gran mayoría
de venezolanos, que nuevamente haciendo gala de su talante
democrático y soberano, acudirá con gozó a elegir a sus concejales,
legisladores, alcaldes y gobernadores el próximo domingo.

Esa facción subversiva se ha visto reducida, no solo por el


rechazo de la población en general, sino por los constantes llamados
al diálogo, la convicción pacífica del Estado venezolano y del Gobierno
del Presidente Nicolás Maduro Moros, que ha logrado traer al juego
político a dirigentes que hasta hace poco días, pedían una
intervención armada contra Venezuela, auspiciaban magnicidios y
celebraban el brutal bloqueo que todavía se cierne sobre nuestra
Patria ¡El amor a nuestra república que todo lo puede, ha permitido
este logro!

En el marco de estas particulares circunstancias, la Fuerza


Armada Nacional Bolivariana con el apoyo de los demás Organismos
de Seguridad Ciudadana, acatando las disposiciones del Poder
Electoral, se despliega para la custodia de los centros y del material
electoral, para brindar seguridad al pueblo venezolano que una vez
más le dice al mundo: ¡Queremos democracia! ¡Queremos paz!
¡Queremos prosperidad! ¡No queremos injerencismo! ¡No queremos
violencia!

¡VIVA VENEZUELA, SUS INSTITUCIONES DEMOCRÁTICAS Y SU


PUEBLO LIBERTARIO!

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