Educación, pedagogía y vocación, las bases del futuro .

A través de la historia, la educación ha sido un proceso en constante evolución,

tomando cada vez más y más importancia ya que influye directamente en el
desarrollo como sociedad y también en el desarrollo del ser humano determinando
hasta cierto limite su estilo de vida. En este punto, la pedagogía, toma un papel
fundamental ya que, a través de esta el profesor intenta transmitir conocimientos
de un área en específico a sus alumnos.
La pedagogía es esta magia que le permite al educador jugar con una
metodología, usar cierta técnica o definir un contenido que se cree puede ser el
más apropiado para el aprendizaje. Pues bien, aunque la pedagogía nos permite
impartir esto, hace falta algo tan importante como esta; la vocación, esta es la
pasionalidad por la cual se deberían caracterizar todos los educadores al impartir
sus enseñanzas, enseñanzas que deben ir a través de metodologías que
enamoren al estudiante y que lo arropen durante todo este proceso aprendizaje al
saber que cuenta con el apoyo de su educador brindándole las herramientas
necesarias para avanzar sin quitarle motivación, por el contrario, lo motiva aún
más por aprender, y le deja claro que aunque a veces hay tropiezos, siempre hay
que seguir avanzando. Pero ¿Qué más hay de importante en la vocación? Creería
que más allá de poseerla es también crucial ayudar a otros a descubrir su propia
vocación, si bien la sociedad no está en el punto más bajo, tampoco lo está en su
punto más alto, y esto es debido a que mucha gente está dedicando su vida a algo
que no disfruta. Un punto también a tener en cuenta, es la relación interpersonal
entre educador y estudiante, personalmente he tenido la fortuna de relacionarme
con algunos profesores que han aportado a mi vida no solo del modo académico,
si no también personal, algo que considero fundamental ya que, si bien no se trata
de una relación amistosa, se trata de una relación en la cual haya la confianza
para tocar ciertos temas y se entienda muchas veces hay factores externos que
puedan afectar al estudiante durante su proceso de aprendizaje, por eso, estos
profesores con los que he tenido la confianza de expresar temas personales, son
mis referentes prácticos desde mi experiencia personal.
Como consecuencia de lo expuesto, considero que la educación debe contar con
maestros con gran vocación en su trabajo de manera que puedan impartir su
pedagogía influenciando no solo académicamente, sino también la vida del
estudiante, queremos un futuro con seres humanos, no con trabajadores, y esto
solo se logra a través de educadores que enseñan, que aman su trabajo y por
sobre todo, de gente que inspira.