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es 5 de diciembre 2019

LECTURA 4: El 'lado oscuro' del 'Black Friday'

En solo unos años, el Black Friday se ha convertido en un hito del consumo en España. Llegó como el día del año en el que
se podían cazar las mayores gangas -el último viernes del mes de noviembre- y se ha convertido en una fecha cada vez más
extensa que sirve como excusa a las grandes empresas para bombardear con ofertas a los compradores.
En apenas cinco años, el Black Friday ha pasado de ser una estrategia exclusiva de las grandes multinacionales a dominar el
calendario de campañas promocionales y convertirse en la jornada de más
ventas de todo el año. La inmensa mayoría de empresas se ha sumado a la
jornada promocional y, en consecuencia, el consumidor elabora sus estrategias
y se lanza a aprovechar ofertas y planificar compras de alto presupuesto, como
tecnología o electrodomésticos.
Las ventas han subido cada año a ritmo récord, pero está comenzando a
desinflar. En 2015, hubo un incremento del 42% y registró aumentos del 24% y
el 23% en el 2016 y el 2017, hasta que en el 2018 las ventas crecieron apenas
un 6%. “El boom del Black Friday empieza a tocar techo”.
29 de noviembre, el 'Día Sin Compras'
En estos días, existen muchas organizaciones que advierten que esa gran fiesta de las compras tiene un lado tan "oscuro"
como su propio nombre porque perjudica al medioambiente, desequilibra las ventas del pequeño comercio y promueve un
modelo de "consumo compulsivo" que genera infelicidad.
“El primer problema del Black Friday es que la oferta no está basada en cosas que necesitemos. Hace que la sociedad,
abducida por las ofertas, entre en una rueda compulsiva y compre de forma irracional”, explica a RTVE.es Charo Morán, que
trabaja dentro del Área de Consumo una organización en defensa del consumo responsable.
Desde esa plataforma recuerdan la “encrucijada” en la que se encuentra el planeta y proponen unir el 'Día Sin Compras' a
la movilización por la Emergencia Climática y la COP 25, ya que la mayoría de compras que se hacen durante el Black Friday son
de ropa y de electrónica, dos sectores que tienen un gran impacto ecológico y social.
¿El consumo compulsivo es sostenible?
“Con una mirada cortoplacista consumimos y ya está, pero con una mirada de largo recorrido podemos ver detrás de estos
productos no solo el impacto ecológico, sino también social por el modo de vida que se implanta”, señala Morán, quien
considera que el modelo de consumo compulsivo es un importante factor de infelicidad humana, una teoría que cuenta con el
aval de diferentes estudios psicológicos y que cuenta incluso con una página web propia.
Además, el consumidor también ha aprendido a comprar en el black
friday. Tal como desvela la encuesta de Oliver Wyman, el 62% de los
consumidores españoles comprará artículos que llevan tiempo queriendo
adquirir; el 20% realizará compras sustitutivas de regalos navideños, y
únicamente un 18% de los encuestados comprará por impulso.
“La compra por impulso, que es la que promueve el black friday, es,
además, contradictoria con el creciente movimiento de concienciación
hacia la sostenibilidad que está cada vez más implantado en el
consumidor”, debido a las alertas cada vez más prolongadas y extendidas
sobre el cambio climático.

Las alternativas del pequeño comercio

¿Y qué ocurre con el pequeño comercio? Que debe adaptarse a la vorágine de ofertas y descuentos y apenas puede competir
con los gigantes como Amazon o Media Markt. Los propietarios de fruterías, panaderías, zapaterías o librerías tienen que
ingeniárselas en estos días para vender sus productos y, aunque vendan, a duras penas pueden obtener beneficios por el
aluvión de ofertas que inundan internet y los centros comerciales en esas fechas.
Por eso, empiezan a surgir voces críticas contra la campaña. “La campaña pierde fuelle, ya no es ni tan larga ni con ofertas
generalizadas. Después de varias campañas, muchos operadores han visto que no salen los números; vendes más, pero lo
haces tan barato que apenas ganas dinero”, destaca Calbet.
“Queremos que la gente consuma en cercanía, que sepa que cuando consume en el comercio de su barrio o su pueblo está
manteniendo la vida de su localidad", explica la presidenta de la asociación, María Esteban, sobre un proyecto al que se han
unido 48 establecimientos del barrio.
 Como alternativa a esa celebración y en defensa del comercio tradicional y de proximidad, la patronal ha decidido lanzar
este año una campaña a la que han llamado ‘Un Black Friday diferente’. Los comerciantes que participan en esta iniciativa han
rechazado ofrecer descuentos y promociones, pero intentarán atraer a los compradores con un sorteo de 3.000 euros y con
algo más valioso a lo que no se puede poner precio: atención personalizada, cercanía, y confianza.
En este tsunami consumista, impulsado en gran parte por el e-commerce, hay dos grandes ganadores: Amazon, principal
impulsor de la campaña coincidiendo con su asalto al mercado español, y el sector logístico, que ha pasado de ser el final de la
cadena de valor a ser un eslabón estratégico. Según la patronal de logística UNO, este año el black friday generará un tráfico
de 3,5 millones de entregas de paquetes, un 10% más que en 2018. Tras el colapso del 2016, cuando miles y miles de paquetes
desbordaron la capacidad de las compañías de entrega de paquetería, el sector está más preparado que nunca.
¿Qué recomiendan a los compradores?
Estas son algunas de las recomendaciones que lanzan a los compradores las asociaciones defensoras del medioambiente y
los pequeños comerciantes para hacer más sostenible la jornada más consumista del año:
• Antes de comprar algo, hazte una pregunta: ¿realmente lo necesitas?
• Compra solo lo imprescindible y hazlo en el pequeño comercio
• Reduce el uso de bolsas, paquetes y envoltorios
• Da prioridad a marcas "éticas" que apuesten por la sostenibilidad y el trabajo justo
• Emplea el tiempo que dedicarías a las compras en verdaderos placeres
Por este motivo, ya están comenzando a surgir iniciativas en contra del Black Friday en España, aunque son menores en
comparación con otros países europeos. Por ejemplo, la cadena francesa Fnac, también reniega del black friday porque es
contrario a sus principios de sostenibilidad. “Los movimientos contra el consumismo son todavía incipientes en el mercado
español, pero en los países nórdicos o el Reino Unido hay en marcha campañas como el köpskam –vergüenza de comprar–
o no buy year (un año sin comprar) que muestran que las cosas empiezan a cambiar”, explica Neus Soler, profesora de
Economia y Empresa de la UOC.

1. Busca en Internet el origen del Black Friday.

2. ¿Qué quiere decir que el boom del Black Friday esté tocando techo?

3. Busca en Internet datos sobre las ventas del año 2020 y comenta lo que ocurrió. Cita fuente de información y fecha.

4. Según lo que llevamos aprendido durante el curso y usando conceptos de la asignatura, ¿por qué crees que este
evento es perjudicial para el medio ambiente?

5. Existen al menos dos ODS con los que se podría relacionar la noticia. ¿Podrías decir cuáles son y por qué crees que
se relacionan con la noticia?

6. ¿Sabes lo que significa el consumo compulsivo (o impulsivo)? ¿Qué es el consumo responsable? Escribe un ejemplo
cotidiano de cada uno.

7. ESCRIBE UN TEXTO de mínimo 120 palabras expresando tu opinión sobre qué te ha parecido la noticia tratando de
responder a las siguientes cuestiones: ¿Sueles consumir en el Black Friday? ¿Te ha sorprendido que muchos negocios incluso
pierdan dinero? ¿Sueles hacer compras compulsivas? ¿Crees que existe una conciencia esos días sobre los problemas
medioambientales? ¿Crees que serviría de algo si la sociedad cambiara su forma de consumir? ¿Qué importancia tendría seguir las
recomendaciones de las asociaciones? Tu opinión es libre, lo que se valora es la capacidad que tengas de argumentarla.