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Nulidad de los contratos

La nulidad es la sanción que se pronuncia a aquellos contratos y actos


jurídicos que se han formalizado sin llenar los requisitos de validez
necesarios para su formación. Existen nulidades virtuales, nulidades
expresas, nulidades relativas y nulidades absolutas.

La nulidad es virtual cuando el legislador establece los requisitos de


formación del acto jurídico, pero no establece de manera expresa cuál sería
la sanción cuando se violan esos requisitos. La nulidad es expresa cuando
el legislador, a través de una disposición en la norma dispone expresamente
la nulidad como una sanción de los requisitos de validez establecidos para
la validez del contrato.

La nulidad absoluta es aquella que está fundamentada en el orden público


y en las buenas costumbres y tiene por finalidad la protección de la
sociedad. La nulidad es relativa cuando se dicta para la protección de los
particulares.

Tanto la doctrina como la jurisprudencia admiten que la violación a los


requisitos de fondo para la validez de los contratos se encuentra sancionada
con la nulidad absoluta, mientras que los requisitos de forma se encuentran
sancionados con la nulidad relativa.

Diferencias entre las nulidades absolutas y relativas

- Cualquiera de las partes, incluso un tercero, puede invocar la nulidad


absoluta.
- La acción en nulidad relativa se encuentra reservada exclusivamente
para la persona a quien la ley ha querido o pretendido proteger.
- Solamente la acción en nulidad relativa es susceptible de
confirmación.
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La confirmación (artículo 1338 CC)

Es el acto mediante el cual una persona hace que desaparezcan los vicios
del contrato cuya nulidad habría podido invocar. Constituye un acto
unilateral que conlleva la renuncia a la acción en nulidad relativa.

Requisitos para la confirmación

- Debe emanar de la persona que tiene derecho a demandar la nulidad


relativa;
- Es necesario que la parte de quien proviene la confirmación conozca
el vicio que afecta el contrato o acto jurídico en cuestión y tiene el
propósito de reparar o subsanar ese vicio;
- La confirmación debe estar exenta del vicio que podrá hacer anulable
el acto confirmado, pues de lo contrario sería tan ineficaz como el
contrato mismo.

Formas de la confirmación

- Expresa, según la disposición general consagrada por el artículo


1338 del CC, párrafo 1º, la confirmación es expresa cuando el
documento que la acredite contenga las menciones siguientes: a) la
sustancia de la obligación, o sea las cláusulas principales del contrato
confirmado; b) la mención del motivo de la acción en nulidad, o sea,
la naturaleza del vicio que afecta el contrato; y c) la intención de
subsanar el vicio.
- Tácita, cuando resulta de hechos que indiquen claramente la
intención de confirmar. El artículo 1338, párrafo 2º del CC lo
concreta en cuanto al cumplimiento voluntario, claro sería necesario
que al momento del cumplimiento voluntario el contratante de quien
se trate conocía el vicio y que tenía la intención de subsanarlo.
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Efectos de la confirmación

La confirmación hace al contrato inatacable al hacer que desaparezca


la nulidad, pero al mismo tiempo tiene un efecto retroactivo: el
contrato se considera válido y como si hubiera producido
regularmente sus efectos desde su origen.

Prescripción de la acción en nulidad

La acción en nulidad absoluta prescribe en el plazo de veinte


años, de conformidad con lo establecido en el artículo 2262 del CC.
Esto se justifica porque la prescripción veinteñal de las acciones
judiciales descansa sobre consideraciones de orden público. El punto
de partida comienza a correr desde el día de la celebración del
contrato.

La acción en nulidad relativa prescribe a los cinco años, de


conformidad con lo establecido por el artículo 1304 del CC. Esta
nulidad se fundamenta en la voluntad tácita de la conformación, no
comienza a correr sino desde el día en que el contratante haya podido
confirmar.

De conformidad con el artículo 1304 del CC la prescripción en caso


de violencia corre desde el día en que la violencia haya cesado; en
caso de error o dolo desde el día en que éstos hayan sido
descubiertos; en caso de minoridad, desde el día en que haya cesado.
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La acción en nulidad que resulta de vicio deducido de la lesión,


denominada rescisión por lesión, prescribe a los dos años y este
plazo comienza a correr a partir de la celebración del contrato, de
conformidad con lo dispuesto por el artículo 1676 del CC.

Efectos de la prescripción

La prescripción extingue la acción. La hace desaparecer. Cuando el


plazo ha transcurrido, la acción en nulidad no puede intentarse, sin
importar que se trate de una nulidad absoluta o relativa. El contrato
se hace inatacable; si se han cumplido las prestaciones realizadas se
hacen irrevocables. Se considera que el efecto es erga omnes, es
decir, frente a todo el mundo. Sin embargo, la acción en nulidad por
vía de excepción siempre puede pedirse, porque los efectos de la
prescripción se refieren a la extinción de la acción principal en
nulidad.

Efectos de las nulidades

Sin importar que la nulidad sea absoluta o relativa, los efectos


siempre serán los mismos:

 Contrato decae por completo, lo que quiere decir que las


obligaciones nacidas del contrato desaparecen.
 La nulidad obra retroactivamente, esto quiere decir que una
vez verificada judicialmente la nulidad se comprueba que ésta
ha existido siempre, por lo tanto, el contrato no se ha
perfeccionado nunca y no ha producido ningún efecto jamás.
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