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Modelos teóricos actuales del trastorno

de ansiedad generalizada (TAG):


revisión conceptual e implicaciones
en el tratamiento
Evelyn Behar a,1, Ilyse Dobrow DiMarco b,1, Eric B. Hekler c,1,*,
Jan Mohlman b,1, Alison M. Staples b,1

a
University of Illinois at Chicago, Dept. of Psychology (M/C 285),
b
Rutgers, the State University of New Jersey, Department of Psychology,
c
Stanford Prevention Research Center, Stanford University School of Medicine,

Resumen
Las conceptualizaciones teóricas del trastorno de ansiedad generalizada (TAG) siguen sometidas a control y refi-
namiento. Este artículo critica los modelos contemporáneos de TAG: el modelo de evitación de la preocupación
y TAG [Borkovec, T.D. (1994). La naturaleza, las funciones y los orígenes de la preocupación. En: G. Davey & F.
Tallis (Eds). Preocupación: perspectivas sobre la evaluación de la teoría y el tratamiento (pp. 5-33). Sussex,
Inglaterra: Wiley & Sons; Borkovec T.D.; Alcaine O.M. & Behar, E (2004). Teoría de la evitación de la preocupa-
ción y el trastorno de la ansiedad generalizada. En: R. Heimberg, C. Turk & D. Mennin (Eds), Trastorno de ansie-
dad generalizada: avances en la investigación y la práctica (pp. 77-108): Nueva York, NY, US: Guilford Press];
Modelos de Intolerancia a la Incertidumbre (Dugas M.J., Letarte, H. Rheaume, J., Freeston, M. H. & Ladouceur,
R. (1995). Preocupación y resolución de problemas: evidencia de una relación específica. Terapia cognitiva e
Investigación, 19, 109-120; Freeston, M.H. Rheaume, J., Letarte, H., Dugas, M.J. & Ladouceur, R. (1994). ¿Por
qué se preocupa la gente? Personalidad y diferencias individuales, 17, 791-802); el Modelo Metacognitivo
[(Wells, A. (1995). Meta-cognición y preocupación: un modelo cognitivo de trastorno de ansiedad generalizada.
Psicoterapia Conductual y Cognitiva, 23, 301-320)]; el Modelo de Desregulación de la Emoción [Mennin, D. S.,
Heimberg, R.G., Turk, C.L. & Fresco, D.M. (2002). Aplicación de un marco de regulación de la emoción a enfo-
ques integradores para trastorno de ansiedad generalizada. Clinical Psychology: Science and Practice, 9 85-90];
y el Modelo basado en la Aceptación del TAG [Roemer, L., & Orsillo, S.M. (2002). Ampliación de nuestra con-
ceptualización del trastorno de ansiedad generalizada y su tratamiento: integración de enfoques basados en la
atención/aceptación con los modelos cognitivos conductuales existentes. Clinical Psychology: Science and
Practice, 9, 85-90]. Se revisan críticamente pruebas en apoyo a cada modelo y se discuten las intervenciones tera-
péuticas basadas en la evidencia correspondientes a cada modelo. En términos generales, los modelos compar-
ten un énfasis sobre la evitación de experiencias internas afectivas (es decir, pensamientos, creencias y
emociones). Los modelos se clasifican en tres tipos: modelos cognitivos (esto es, MII, MMC), emocional/expe-
riencial (esto es, MDE, MBA) y un modelo integrado (MEP). Esta clasificación ofrece direcciones para futuras
investigaciones y nuevas estrategias de tratamiento.

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1. Introducción Introducción
1.1 La evolución del TAG y su tratamiento
Las conceptualizaciones teóricas del trastorno de
ansiedad generalizada (TAG) permanecen bajo estudio
2. Modelo de evitación de la preocupación y refinamiento y es un momento excitante para la inves-
y TAG (MEP) tigación de las causas y los factores de mantenimiento
2.1 Apoyo empírico de esta patología. Modelos recientes ofrecen perspecti -
2.2 Tratamiento vas únicas e innovadoras sobre la teoría y el tratamien-
to del TAG. Empezando por la innovadora teoría de
3. Modelo de intolerancia a la incertidumbre Borkovec de la evitación de la preocupación, cada
(MII) modelo posterior ha hecho hincapié en varios mecanis-
3.1 Apoyo empírico mos patogénicos (por ejemplo, intolerancia a la incerti-
3.2 Tratamiento dumbre, creencias positivas acerca de la preocupación,
desregulación de la emoción) que han conducido a
4. Modelo Metacognitivo (MMC) diversas nuevas estrategias para el tratamiento.
4.1 Apoyo empírico Este artículo revisa críticamente cinco modelos
4.2 Tratamiento contemporáneos de TAG con especial atención sobre
sus similitudes y diferencias conceptuales, seguidas por
5. Modelo de Desregulación de la Emoción una breve descripción de los tratamientos basados en
(MDE) cada modelo. Los modelos de interés son el Modelo de
5.1 Apoyo empírico Evitación de la Preocupación y el TAG (MEP;
Borkovec, 1994; Borkovec, Alcaine & Behar, 2004), el
5.2 Tratamiento
Modelo de Intolerancia a la Incertidumbre (MII;
Dugas, Letarte, Rheaume, Freeston & Ladouceur,
6. Modelo basado en la aceptación del Trastorno
1995; Freeston, Rheaume, Letarte, Dugas &
de ansiedad generalizada (MBA)
Ladouceur, 1994), el Modelo Metacognitivo (MMC;
6.1 Apoyo empírico Wells, 1995), el Modelo de Desregulación de la
6.2 Tratamiento Emoción (MDE; Mennin, Heimberg, Turk & Fresco,
2002), y el Modelo Basado en la Aceptación del
7. Limitaciones de la investigación existente Trastorno de Ansiedad Generalizada (MBA; Roemer &
Orsillo, 2002, 2005). En este artículo se evalúan crítica-
8. Comparación de modelos mente los principios básicos de cada modelo y las prue-
bas en su apoyo seguido por una discusión de las
9. Direcciones futuras y conclusión estrategias de seguimiento derivadas de cada modelo.
No se incluyó en esta revisión el Modelo del Estado de
Ánimo como de Entrada de Preocupación Perseverante
(Davey, 2006) debido a la limitada evidencia de apoyo
y la falta de un tratamiento basado concretamente en los
principios centrales de este modelo.
Actualmente se están probando a priori por prime-
ra vez algunos de los supuestos básicos de estos cinco
modelos. Dado que nosotros nos centramos concreta-
mente en los niveles clínicos de preocupación, la revi-
sión actual sólo incluye estudios que o bien incluían a
participantes que cumplían los criterios diagnósticos

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para TAG usando entrevistas clínicas, o bien muestras comparación con comprimidos placebo, con no trata-
clínicas similares basadas en los resultados obtenidos miento, con lista de espera y con terapia de apoyo no
empíricamente en mediciones continuadas. También directiva y que las mejoras con la TCC se mantienen un
pusimos nuestra atención en estudios en los que las año después de la terapia (Borkovec & Ruscio, 2001;
hipótesis a priori estaban probadas, en oposición a los Gould, Safren, Washington & Otto, 2004). Un metaná-
análisis post hoc realizados . El objetivo principal fue lisis reciente realizado por Covin, Oiumet, Seeds y
comparar los modelos sobre una base conceptual más Dozois (2008) que incluyó sólo aquellos estudios que
que proporcionar una revisión exhaustiva del apoyo utilizaron el Cuestionario de Preocupaciones del
empírico para cada modelo. Estado de Pensilvania (PSWQ; Meyer, Miller, Metzger
& Borkovec, 1990) como una medida del resultado (un
indicador válido y fiable de preocupación patológica)
La evolución del TAG y su tratamiento encontró que la TCC fue efectiva en reducir la preocu-
pación con un amplio tamaño de efecto medio de -1.15.
El TAG se introdujo inicialmente como diagnósti-
A pesar del progreso que se ha hecho en la creación de
co único en la tercera edición del Manual Diagnóstico
terapias eficaces para el TAG, se precisa un conoci-
y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-III;
miento más completo de los mecanismos subyacentes a
Asociación Americana de Psiquiatría (APA), 1980),
este trastorno para la mejora adicional de los efectos del
pero se usó con más frecuencia como diagnóstico resi-
tratamiento.
dual para individuos que no cumplían los criterios diag-
nósticos para otros trastornos de ansiedad (Barlow,
Rapee & Brown, 1992). No fue hasta la publicación del
Modelo de evitación de
DSM-III-R (APA, 1987) cuando se definió únicamente
la preocupación y TAG (MEP)
al TAG como una preocupación crónica y persuasiva
(Barlow, Blanchard, Vermilyea, Vermilyea & Di Nardo, El Modelo de Evitación de la Preocupación y el
1986). Según el DSM-IV-TR (APA, 2000), el TAG se TAG (MEP; Borkovec, 1994; Borkovec y col., 2004) se
caracteriza por una preocupación excesiva no controla- basa en la teoría del miedo en dos fases de Mowrer
da en relación con diversos temas que se presenta en la (1974) y también deriva del modelo de procesamiento
mayoría de los días durante al menos seis meses. La emocional de Foa y Kozak (Foa & Kozak, 1986; Foa,
preocupación causa malestar y/o deterioro funcional y Huppert & Cahill, 2006). El MEP afirma que la preo-
se asocia con al menos tres de los siguientes aspectos: cupación es una actividad lingüística verbal basada en
inquietud o sensación de excitación o nerviosismo, fati- el pensamiento (Begar, Zuellig & Borkovec, 2005;
ga de fácil aparición, dificultad de concentración o que- Borkovec & Inz, 1990) que inhibe las imágenes menta-
darse con la mente en blanco, irritabilidad, tensión les vividas y la activación somática y emocional asocia-
muscular y trastorno del sueño (APA, 2000). das. Esta inhibición de la experiencia somática y
La medicación psicotropa y la terapia cognitiva emocional evita el procesamiento emocional del miedo
conductual (TCC) parecen ser eficaces para el trata- que es teóricamente necesario para una exitosa habitua-
miento del TAG (Anderson & Palm, 2006; Borkovec & ción y extinción (Foa & Kozak, 1986; Foa y col.,
Ruscio, 2001; Fisher 2006). Sin embargo, las tasas de 2006).
respuesta son inconstantes a lo largo de los estudios. La Por otra parte, la mejora de la experiencia somáti-
evidencias actuales sugieren que la farmacoterapia ca y emocional puede conducir al procesamiento eficaz
puede ser eficaz para reducir los síntomas de ansiedad de señales emocionales. La habituación y la extinción
pero no parece tener un impacto significativo sobre la se hacen posibles por medio de la exposición al espec-
preocupación (Anderson & Palm, 2006), la característi- tro completo de señales de miedo, incluido el propio
ca que define el TAG. Los ensayos clínicos han demos- estímulo temido, así como el significado potencial
trado que la TCC es un tratamiento eficaz en detrás del miedo (Foa & Kozak, 1986). Por tanto, la

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preocupación puede ser vista como un intento cognitivo colaboradores han sugerido el posible impacto de
ineficaz para la resolución del problema y consecuente- pobres habilidades interpersonales en el mantenimiento
mente de eliminar una amenaza percibida, mientras se del TAG (Sibrava y Borkovec, 2006). Además han plan-
evitan simultáneamente las experiencias somáticas y teado la hipótesis de que acontecimientos en las prime-
emocionales aversivas que se producen instintivamente ras etapas de la vida, tales como un trauma pasado y
durante el proceso de confrontación del miedo estilos de apego inseguros, pueden conducir al conse-
(Borkovec y col., 2004). Además, la experiencia de pre- cuente desarrollo de TAG (Borkovec y col., 2004).
ocupación se refuerza negativamente. Según el MEP, Algunos investigadores han sugerido que un estilo de
imágenes mentales catastróficas que hacen su propio apego inseguro (Bowlby, 1982) pueden derivar en pro-
camino en el proceso de preocupación son reemplaza- blemas difusos de ansiedad en la infancia que persisten
das por una actividad lingüística oral menos angustiosa, en las relaciones de adulto (Cassidy, Lichtenstein-
menos somáticamente activadora. Por tanto, la preocu- Phelps, Sibrava, Thomas & Borkovec, 2009; Sibrava &
pación se refuerza negativamente por la eliminación de Borkovec, 2006). Se ha planteado la hipótesis de que un
imágenes aversivas y temerosas (por Ej. Borkovec, apego inseguro ocasiona que los individuos perciban el
1994; Borkovec y col., 2004). Además, la preocupación mundo como un lugar peligroso y los individuos con
se refuerza aún más por creencias positivas, tal como TAG no tienen recursos suficientes para afrontar acon-
una creencia que preocupa es útil para la resolución de tecimientos inciertos. Se precisa más trabajo empírico
problemas, motivar el rendimiento y evitar futuros usando métodos longitudinales para testar los potencia-
resultados negativos. Las creencias positivas se refuer- les papeles etiológicos del apego inseguro y de un trau-
zan cuando no se producen futuros acontecimientos ma anterior en el TAG.
negativos o se gestionan eficazmente, reforzando aún
más la preocupación (para una representación visual del
MEP véase la Fig.1). Apoyo empírico
La evidencia que apoya el MEP ha sido revisada
extensamente (por Ej. Borkovec y col., 2004) y sólo la
Fig.1. El Modelo de Evitación de la Preocupación y el TAG.
No se ha publicado una representación visual del Modelo de resumiremos brevemente. Existen evidencias que
Evitación de la Preocupación. Este modelo visual fue creado apoyan el concepto de que la preocupación es ante
por los autores actuales y aprobado por el Dr. Borkovec. todo un proceso verbal-lingüístico opuesto a un pro-
Disposición ceso de imágenes (Behar & Borkovec, 2005;
a
educid Percepción
Amen
aza r
in cremen
tada
de amenaza
característica: Borkovec & Inz, 1990). Además, la preocupación
Amena
za estilo de apego
parece amortiguar la excitación somática en reposo
Procesamiento
Resolución de Preocupación (Hoehn-Saric & McLeod, 1988; Hoehn-Saric ,
problemas ineficaz verbal-lingüística
emocional McLeod & Zimmerli, 1989; Lyonfields, Borkovec &
Respuesta somática reducida
da

Respuesta somática

Thayer, 1995; Thayer, Friedman & Borkovec, 1996) y


a

Reforzamiento de
ent

la preocupación

Resolución de
um

reducida

problemas eficaz tras la consecuente exposición a material relacionada


aa

*
átic

con la amenaza (Behar & Borkovec; presentado para


som
sta

publicación; Borkovec & Hu, 1990; Pe Ashley-Miklus


pue
res

Creencias positivas & Vrana, 2000). En comparación con individuos sin


Imágenes periódicas sobre la
preocupación TAG, los individuos con TAG pueden necesitar más
* Impide una eficaz resolución de problemas / procesamiento emocional
tiempo para volver a los niveles basales de excitación
tras un estresante (por Ej. Hoehn-Saric y col., 1989),
Además de destacar el proceso básico de la preocu- sugiriendo una hiporreactividad prolongada. También
pación, Borkovec y colaboradores han explorado posi- hay investigación descriptiva que sugiere que la preo-
bles factores etiológicos de la preocupación (Borkovec cupación se refuerza entre los individuos con TAG
y col., 2004; Sibrava y Borkovec, 2006). Borkovec y por medio de creencias positivas aumentadas acerca

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de la preocupación (Borkovec y Roemer, 1995). En incluyen: (a) auto monitorización de situaciones exter-
concreto, los individuos con TAG creen que la preo- nas, pensamientos, sentimientos, reacciones psicológi-
cupación sirve como una distracción de temas más cas y conductas; (b) técnicas de relajación tales como la
emocionales, proporcionando más evidencia de que relajación muscular progresiva, la respiración diafrag-
se utiliza como estrategia para evitar el procesamien- mática e imágenes de descanso agradable; (c) auto con-
to emocional. trol de desensibilización, el cual implica el uso de
métodos (por Ej. ensayo imaginal) para facilitar la
Trabajos más reciente sugieren que un estilo de
adquisición habitual de respuestas de afrontamiento; (d)
apego inseguro es más prevalente entre los individuos
control gradual de los estímulos alcanzado mediante el
con TAG en comparación con controles sanos (Eng &
establecimiento un tiempo y un lugar específico para la
Heimberg, 2006), aunque esto también puede ser ver-
preocupación; (e) restructuración cognitiva dirigida a
dad para otras formas de psicopatología y no necesaria-
incrementar la flexibilidad de los pacientes en pensar y
mente específico de TAG. De forma similar, en una
acceder a perspectivas múltiples, flexibles; (f) monito-
muestra de universitarios de pregrado, (Viana &
rización del resultado de la preocupación en la que los
Rabian, 2008) así como en adolescentes (Hales, Engels
pacientes guardan entradas regulares diarias para moni-
& Meeus, 2006), los síntomas aumentados de preocupa-
torizar preocupaciones específicas, sus resultados temi-
ción y TAG se han asociado con la alienación de la per-
dos y los resultados reales de esas preocupaciones; (g)
cepción de las figuras de los padres y compañeros. Se
la promoción de la atención en el momento presente y
necesitan estudios prospectivos para apoyar con más
(h) expectativas de vida libre (Behar & Borkovec, 2005;
fuerza el concepto de que un estilo de apego inseguro es
Behar & Borkovec, en prensa). En la Tabla 1 se puede
una predisposición característica que incrementa el
ver un resumen de los componentes claves del trata-
riesgo de la persona de desarrollar TAG. Finalmente,
miento basado en MEP.
hay evidencia que sugiere que los individuos con TAG
centran mucha de su preocupación en las dificultades Las evidencias que indican que los pacientes con
interpersonales (Roemer, Molina & Borkovec, 1997) y TAG centran muchas de sus preocupaciones en las
un gran parte reportan estar excesivamente nutridos y relaciones interpersonales (Roemer y col., 1997;
explotados en sus relaciones (Salzer y col., 2008) facto- Salzer y col., 2008) y que la presencia de problemas
res que se cree relacionados con un estilo de apego inse- interpersonales posteriores a la TCC predicen pobres
guro. Además, los problemas interpersonales (medidos resultados a corto y medio plazo (Borkovec y col.,
por el Inventario de Escalas de Problemas 2002), así como la evidencia señalando a déficit de
Interpersonales Circunflejos; Alden, Wiggins & Pincus, procesamiento emocional en el TAG, estimularon a
1990) que permanecen tras la terapia han demostrado Borkovec y colaboradores a integrar un enfoque sobre
predecir un pobre resultado tras TCC (Borkovec, las relaciones interpersonales y el procesamiento
Newman, Pincus & Lytle, 2002). Sin embargo, otro emocional en la TCC tradicional para la preocupación
estudio utilizando el análisis estructural de comporta- crónica. Recientemente ha concluido un ensayo clíni-
miento social (SASB; Benjamin, Giat, & Estroff, 1981) co aleatorizado en el que se comparaban los efectos
fracasó en replicar el hallazgo de que los procesos de de añadir terapia interpersonal y emocional a la TCC
las conductas interpersonales predicen el resultado de (TCC + PIE) con TCC más escucha de apoyo (TCC
la TCC para los pacientes con TAG (Critchfield, Henry, +EA en la que la EA se usó para controlar factores
Castonguay & Borkovec, 2007). comunes relacionados con la psicoterapia). Los análi-
sis indicaron que, contrariamente a las expectativas,
la adición de PIE a la TCC no mejoraba la eficacia del
Tratamiento tratamiento tal como indicaban la mayoría de medidas
Los componentes específicos del tratamiento para de los resultados principales en la valoración del post
el TAG se han desarrollado basados en los pilares cen- tratamiento. Sin embargo, 24 meses después del final
trales del MEP. Estas técnicas cognitivo conductuales del tratamiento, la estrategia de TCC+PIE evidenció

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una tasa significativamente más alta de funciona- (MII) los individuos con TAG encuentran las situacio-
miento de nivel alto. De manera destacable, análisis nes de incertidumbre o ambigüedad como “estresantes
secundarios indicaron que los pacientes que tenían y molestas” (Dugas & Koerner, 2005, p. 62), y experi-
estilos de apego altamente desdeñosos (una variedad mentan preocupación crónica en respuesta a esas situa-
de apego inseguro en el que un adulto parece estar ciones. Estos individuos creen que la preocupación les
minimizando la importancia de las relaciones de servirá o para ayudarles a afrontar más eficazmente los
apego y el apego relacionado con las experiencias) y acontecimientos temidos o para prevenir que se produz-
que recibieron TCC+PIE tenían un resultado signifi- can esos acontecimientos (Borkovec & Roemer, 1995;
cativamente mejor en el post tratamiento y en el Davey, Tallis & Capuzzo, 1996; Tallis, Davey &
seguimiento que los otros pacientes, mientras aque- Capuzzo, 1994). Esta preocupación, conjuntamente con
llos que no habían tenido relaciones enredadas con los sentimientos de ansiedad que la acompañan condu-
sus principales proveedores de salud en su infancia ce a una orientación negativa al problema y a evitación
(una situación en la que un padre confía en un niño cognitiva, los cuales a su vez sirven ambos para mante-
para ayudar en la gestión de la angustia, lo que es una ner la preocupación. Concretamente, los individuos que
tarea que está más allá de la capacidad del niño y que experimentan un orientación negativa al problema (1)
por tanto es muy angustiante) también evolucionaron tiene falta de confianza en su capacidad para resolver
particularmente bien cuando PIE era parte de su tra- problemas, (2) perciben los problemas como amenazas,
tamiento (Newman, Castonguay, Borkovec, Fisher & (3) se frustran fácilmente cuando se enfrentan a un pro-
Nordberg, 2008; Newman, Castonguay, Fisher & blema y (4) son pesimistas acerca del resultado de los
Borkovec, 2008). Por tanto, aunque la administración esfuerzos para resolver el problema (Koerner & Dugas,
rutinaria de componentes de procesamiento interper- 2006). Estos pensamientos sirven para exacerbar su
sonal y emocional no es adecuado para pacientes con preocupación y ansiedad. Igual que en la conceptualiza-
TAG, estas técnicas pueden ser útiles con pacientes ción original del TAG de Borkovec (Borkovec, 1994), la
concretos con historias interpersonales particulares. evitación cognitiva se refiere al uso de estrategias cog-
Con suerte, la investigación futura trazará las diferen- nitivas (por Ej. sustitución del pensamiento, distrac-
cias individuales que predigan una respuesta mejora- ción, supresión del pensamiento) que facilita la
da al tratamiento siguiendo los componentes de PIE. evitación de la excitación cognitiva y de imágenes ame-
nazantes asociadas con la preocupación (Dugas &
Posteriormente al desarrollo de MEP, se han des-
Koemer, 2005). Dugas y col. En 1998 observaron que la
arrollado diversos modelos alternativos de TAG y preo-
II sirve para disparar la cadena de preocupación, orien-
cupación en un intento de expandir el alcance de
tación negativa al problema, la evitación cognitiva y
formulaciones previas. Cuatro de estos modelos se han
para argumentar que la intolerancia a la incertidumbre
desarrollado y evaluado sistemáticamente en estudios
también afecta directamente a los problemas de orienta-
controlados, tal como se revisa a continuación.
ción y al grado de evitación cognitiva del individuo. De
este modo, los individuos con II aumentada serán más
propensos a participar en el proceso de preocupación.
La Fig. 2 presenta una representación del MII (Dugas &
Modelo de intolerancia
Robichaud, 2007).
a la Incertidumbre (MII)
El primero de estos modelos destaca el papel de la
Apoyo empírico
intolerancia a la incertidumbre (II) en el desarrollo y el
mantenimiento del TAG (por Ej. Dugas y col., 1995; El MII postula la importancia de cuatro factores en
Dugas, Buhr & Ladouceur, 2004; Dugas, Gagnon, la distinción entre individuos con TAG y controles sanos
Ladouceur & Freeston, 1998; Freeston y col., 1994). y otras muestras clínicas: II, pensamientos positivos
Según el modelo de intolerancia a la incertidumbre acerca de la preocupación, evitación cognitiva y orienta-

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Tabla 1. Resumen de los componentes del tratamiento

Modelo teórico Componentes teóricos Componentes claves de intervención

Evitación cognitiva Auto monitorización


Creencias positivas sobre la preocupación Técnicas de relajación
Ineficaz resolución de problemas / procesa- Auto control de desensibilización
miento emocional Control gradual de estímulos
Modelo de evitación de la preocupación
Problemas interpersonales Monitorización resultado de la preocupación
Estilo de apego Focalización en el momento presente
Trauma previo Esperanza de vida libre

Auto monitorización
Intolerancia a la incertidumbre
Intolerancia a la incertidumbre
de la educación
de la educación
Modelo de intolerancia a incertidumbre Orientación negativa al problema
Evaluación creencias de la preocupación
Evitación cognitiva
Mejora de la orientación al problema
Creencias sobre la preocupación
Procesamiento de los miedos básicos

Formulación del caso


Creencias positivas sobre la preocupación Socialización
Preocupación tipo 1 Discusión de falta de control
Terapia metacognitiva Creencias negativas sobre la preocupación de la preocupación
Creencias tipo 2 Discusión peligro de la preocupación
Afrontamiento negativo Discusión creencias positivas preocupación

Ejercicios de relajación
Hiperexcitación emocional
Creencia de replanteamiento
Pobre comprensión de las emociones
Educación de la emoción
Reacciones cognitivas negativas
Modelo de desregulación de la emoción Entrenamiento de las habilidades
a las emociones
emocionales
Gestión y regulación inadaptada
Ejercicios de exposición experiencial
de las emociones
Experiencias internas
Psicoeducación sobre MBA
Relación problemática con las
Ejercicios de atención y aceptación
Modelo de TAG basado en la aceptación experiencias internas
Cambio conductual y acciones valoradas
Evitación experiencial
Restricción conductual

Fig.2. El Modelo de la Intolerancia a la Incertidumbre del TAG. Adaptado con permiso de Dugas y Robichaud (2007).

Situación

¿Qué pasa si…

creencias positivas
sobre la preocupación
Estado Eventos
de ánimo Preocupación vitales

Orientación
Evitación
negativa al ansiedad
cognitiva
problema

Desmoralización
Agotamiento

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ción negativa al problema. Dos estudios (Dugas, Buhr y Dugas (2002) hallaron que los participantes
Marchand & Ladouceur, 2005; Ladouceur y col., 1999) similares a TAG (identificados como TAG según las
exploraron la especificidad de los cuatro aspectos cen- puntuaciones del Cuestionario de Preocupación y
trales del modelo para TAG, para probar si estos cuatro Ansiedad [WAQ]; Dugas y col., 2001) puntuaron signi-
constructos distinguían fiablemente a individuos diag- ficativamente más alto en la Escala de Intolerancia a la
nosticados de TAG de aquellos diagnosticados de otros Incertidumbre (IUS; Freeston y col., 1994) de lo que lo
trastornos de ansiedad. Ambos estudios (Dugas y col., hicieron los participantes control o los individuos que
2005; Ladouceur y col., 1999) hallaron que de estas cua- cumplían sólo los criterios somáticos para TAG; ade-
tro facetas, la II era la única específica para TAG en opo- más, aquellos que cumplían los criterios somáticos pun-
sición a otros trastornos de ansiedad. Además, Dugas y tuaron significativamente más alto en la IUS que los
col., (2007) hallaron que la II y la orientación negativa participantes control. Sin embargo, cuando se valoraron
al problema predecían la severidad de los síntomas de los resultados de la muestra del estudio como un todo
TAG entre una muestra clínica de individuos con TAG. (16% de los cuales cumplían los criterios de TAS), se
Holaway, Heimberg y Coles (2006), hallaron que los halló que el IUS no se correlacionaba más fuertemente
individuos con TAG y TOC análogos experimentaron un con la preocupación que la depresión (medido por el
mayor grado de II que los controles de no–ansiedad; sin Inventario de Depresión de Beck [BDI]; Beck & Steer,
embargo, no hubieron diferencias significativas en II 1987) o con la ansiedad (medida por el Inventario de
entre los grupos de TAG y TOC. Estos resultados son Ansiedad de Beck [BAI]; Beck & Steer, 1990). Además,
consistentes con otros estudios de II en individuos con la evidencia sugiere que los individuos con TAG expe-
TOC (Stekeete, Frost & Cohen, 1998; Tolin, rimentan niveles elevados de pensamientos positivos
Abramowitz, Brigidi & Foa, 2003), y sugieren que la II acerca de la preocupación, la evitación cognitiva y la
puede no ser un fenómeno específico de TAG, si no que orientación negativa al problema (Buhr & Dugas, 2002;
puede caracterizar también a aquellos con un TOC. Dugas y col., 1998) pero la evidencia es mixta en rela-
ción con la especificidad de estos elementos para la
Ladouceur, Blais, Freeston y Dugas (1998) compa-
TAG con diversos estudios sugiriendo buena especifici-
raron estudiantes pregraduados identificados como una
dad para la orientación negativa al problema
muestra análoga de TAG (puntuación por encima del
(Robichaud & Dugas, 2005) mientras otros indican
percentil 80 en el PSWQ y cumplían los criterios cog-
sólo a la II como ligada concretamente a TAG (Dugas y
nitivos y somáticos en el Cuestionario de Trastorno de
col., 2005; Ladouceur y col., 1999).
Ansiedad Generalizada (CTAG; Roemer, Borkovec,
Posa y Borkovec, 1995) para la búsqueda de tratamien- El apoyo a la II como una vulnerabilidad cognitiva
tos individuales en diagnosticados de TAG. Consistente contribuyendo al desarrollo de TAG se ha examinado
con el MII, los resultados indicaron que estos dos gru- también en términos de cuatro cualidades específicas
pos reportaron dificultades significativamente mayores necesarias: manipulabilidad, antecedente temporal,
con la orientación negativa al problema (pero no real de estabilidad y validez de concepto (Koerner & Dugas,
solución del problema), confianza en la solución del 2008). Utilizando un juego de tareas para manipular la
problema, II y creencias positivas acerca de la preocu- II, Ladouceur, Dugas y col., (2000) demostraron que
pación que no los preocupados moderados no clínicos. incrementando la II se incrementaba posteriormente la
Igualmente, Dugas y col., (1998) hallaron que la II, las preocupación a lo largo de la finalización de la tarea en
creencias acerca de la preocupación, la supresión del comparación con una condición en la que los niveles de
pensamiento (evitación cognitiva) y la orientación II estuvieran disminuidos. En términos de antecedente
negativa al problema discriminaban a los individuos temporal, se ha encontrado una relación unidireccional
diagnosticados de TAG de los participantes no clínicos entre los niveles de II y los consiguientes niveles de pre-
en un análisis de la función discriminante; sin embargo, ocupación entre pacientes con TAG que estaban siendo
la II fue la variable que más fuertemente se distinguió tratados con TCC (Dugas & Ladouceur, 2000). Análisis
entre los dos grupos. de series de tiempo indicaron que los cambios en las

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puntuaciones de II precedían a cambios en la cantidad miedos clave. El procesamiento de los temores
de preocupación reportada, pero no se halló la relación clave, un componente que se ref iere a la influen-
inversa. Se ha visto también que la II es independiente cia de la evitación cognitiva en el mantenimiento
del estado de ánimo (por Ej. síntomas de ansiedad o de la preocupación, supone la exposición de los
depresión) una indicación importante de estabilidad pacientes a imágenes de amenaza mental como un
(Buhr & Dugas, 2002, 2006; Dugas, Freeston & camino para afrontar sus miedos y prevenir la
Ladouceur, 1997). Finalmente, en un estudio que exa- evitación (Robichaud & Dugas, 2006). El tera-
minaba la utilidad de una condición de la exposición a peuta investiga un temor principal subyacente en
la escritura en relación con una condición control de una preocupación recurrente del paciente y poste-
escritura, los resultados sugirieron que las mejoras en la riormente construye un escenario de exposición
preocupación estaban precedidas por mejoras en II, descriptiva que puede registrarse y usarse en
sugiriendo que las mejoras en II pueden ser un media- futuras sesiones de exposición (véase la Tabla 1
dor clave para reducir la ansiedad (Goldman, Dugas, para un resumen de los componentes específ icos
Sexton & Gervais, 2007). del tratamiento basados en el MII).
Algunos ensayos controlados aleatorizados
(ECAs) han evaluado el tratamiento basado en el
Tratamiento
MII para TAG individualmente (Dugas &
El tratamiento del TAG basado en el MII gira Robichaud, 2007; Gosselin, Ladouceur, Morin,
alrededor del tema central de desarrollar un Dugas & Baillargeon, 2006; Ladouceur, Dugas y
incremento a la tolerancia para la incertidumbre col., 2000; van der Heiden, 2008, septiembre) y
y de su aceptación (Robichaud & Dugas, 2006). en formato de grupos (Dugas y col., 2003) con
Los componentes específ icos del tratamiento unos resultados que apoyan generalmente la ef i-
incluyen la auto monitorización, la educación en cacia clínica de los tratamientos para el TAG
relación con II, la evaluación de las creencias de basados en el MII en comparación a lista de con-
la preocupación, la mejoría de la orientación al trol (Dugas y col., 2003; Dugas & Robichaud,
problema y el procesamiento de los miedos clave 2007; Ladouceur, Dugas y col., 2000). Además,
(Robichaud & Dugas, 2006). Basado en la com- los resultados preliminares de un ECA en curso,
prensión de que los pacientes con TAG tienen sugieren que el tratamiento para el TAG basado
mayor probabilidad de tener actitudes negativas y en el MII supuso mejoras clínicamente signif ica-
disfuncionales acerca de la solución de proble- tivas de la preocupación y la ansiedad en compa-
mas, un componente importante del tratamiento ración con el control de lista de espera y la
que emerge del MII implica ayudar a los pacien- relajación aplicada (Dugas & Robichaud, 2007).
tes a adquirir una orientación más positiva hacia
Gosselin y col., (2006) examinaron la utilidad
los problemas. Esto incluye enseñar a los pacien-
del tratamiento para TAG basado en el MII para
tes a como discriminar adecuadamente entre una
reducir el consumo de benzodiacepinas entre los
situación problemática y las emociones alrededor
individuos con TAG que habían consumido ben-
de una situación, animándoles a percibir los pro-
zodiacepinas durante al menos 1 año y tenían el
blemas como una parte normal de la vida y sugi-
deseo de dejar la medicación. Los resultados
riendo que los problemas pueden ser vistos como
sugirieron que el consumo de benzodiacepinas
oportunidades más que como amenazas
disminuyó más en el grupo de tratamiento basado
(Robichaud & Dugas, 2006). Una vez que el tera-
en el MII en comparación con un grupo control
peuta educa al paciente sobre el marco de cogni-
de escucha activa. En contraste con estos positi-
ciones subyacentes a su preocupación y se han
vos resultados, se comparó un tratamiento para el
abordado las percepciones específ icas anormales,
TAG basado en el MII con un tratamiento meta-
un paso f inal implica el procesamiento de los

RET, Revista de Toxicomanías. Nº. 63 - 2011 23


cognitivo y una lista de espera control (Van der ocupación de acontecimientos no cognitivos tales como
Heiden, 2008, septiembre). Los resultados no situaciones externas o síntomas físicos (Wells, 2005).
sugirieron diferencias en la ef icacia entre el tra- La Preocupación Tipo 1 estimula inicialmente una res-
tamiento MII y el metacognitivo; igualmente, no puesta de ansiedad pero más tarde puede incrementar o
se encontraron diferencias en la reducción de la reducir la ansiedad dependiendo de si el problema que
ansiedad y la preocupación cuando se comparó el ha estimulado la preocupación se ha resuelto. Durante
tratamiento MII con la lista de espera control. el curso de la Preocupación Tipo 1, se activan las creen-
cia negativas acerca de la preocupación (para las teorí-
as de Wells sobre cómo se desarrollan las creencias
El Modelo Metacognitivo negativas acerca de la preocupación inicial, véase Wells,
(MMC) 1995). Los individuos con TAG empiezan por preocu-
parse acerca de su Preocupación tipo 1; ellos temen que
El modelo Metacognitivo (MMC) de TAG propues-
la preocupación sea incontrolable o que incluso puede
to por Wells (1995, 1999, 2004, 2005) postula que los
ser inherentemente peligrosa. Este “preocuparse por la
individuos con TAG experimentan dos tipos de preocu-
preocupación” (es decir, meta-preocupación) es llama-
pación. Cuando los individuos se enfrentan inicialmen-
do por Wells: Preocupación Tipo 2.
te con una situación de provocación de ansiedad, se
generan creencias positivas acerca de la preocupación Según el MMC, son las creencias negativas acerca
(por Ej. la creencia de que la preocupación les ayudará de la preocupación y la Preocupación Tipo 2 resultante
a afrontar la situación). Este proceso es conocido como las que distinguen a los individuos con TAG de los pre-
Preocupación Tipo 1, la que Wells define como una pre- ocupados no clínicos (Wells, 2005). Se ha postulado la
hipótesis de que la Preocupación Tipo 2 se asocia con
un conjunto de estrategias ineficaces dirigidas a evitar
Fig.3. Modelo Metacognitivo del TAG. Adaptado con per-
miso de Wells (1997). la preocupación por medio de intentos de controlar
comportamientos, pensamientos, y/o emociones (por
Ej. búsqueda de tranquilidad, comprobación de com-
Desencadenante
portamiento, supresión del pensamiento, distracción y
evitación de situaciones inquietantes; Wells, 1999,
2004). La participación en estas ineficaces estrategias
Meta-creencias positivas activadas
de afrontamiento excluye la experiencia de eventos que
podrían proporcionar evidencia para refutar la creencia
de que la preocupación es peligrosa e incontrolable.
Preocupación Tipo 1 Además, los grandes esfuerzos usados por aquellos con
TAG para controlar sus pensamientos (por Ej. supresión
de pensamiento, distracción) son a menudo infructuo-
Meta-creencias negativas activadas
sos. Como resultado, pueden perder confianza en sus
habilidades para controlar sus preocupaciones, sirvien-
do, por último, para reforzar la creencia de que la preo-
Preocupación Tipo 2
(Meta-preocupación) cupación es incontrolable y peligrosa (Wells, 1999).
Finalmente, Preocupación Tipo 2 conduce a un incre-
mento de los síntomas de ansiedad, que pueden cumplir
Conducta Emoción entonces una función de mantenimiento si los indivi-
duos interpretan estos síntomas de ansiedad como sig-
Control del
nos de que su preocupación es peligrosa o incontrolable
pensamiento (Wells, 2005). La Fig. 3 presenta una representación
visual de este modelo (adaptado de Wells, 1997).

24 RET, Revista de Toxicomanías. Nº. 63 - 2011


Apoyo empírico cupados sin TAG obtuvieron puntuaciones menores en
las creencias negativas acerca de la falta de control y el
Un subgrupo de principios del MMC han sido apo-
peligro de la preocupación que los que tenían TAG, los
yados por estudios de preocupación no clínica (para una
muy preocupados sin TAG obtuvieron puntuaciones
revisión, véase Wells, 2004). Sin embargo, relativamen-
más altas sobre estas creencias que los de un grupo no
te pocos estudios se han dirigido concretamente a pro-
seleccionado de universitarios, sugiriendo que tales cre-
bar el MMC en muestras clínicas. Los resultados de
encias pueden ser relevantes para todos lo muy preocu-
estos estudios indican que los individuos con TAG no
pados y no únicamente para aquellos con TAG.
difieren sustancialmente en las creencias positivas
reportadas acerca de la preocupación en comparación Aparte de las investigaciones que examinan el
con otros grupos, tales como los individuos ansiosos no papel de las creencias negativas sobre las preocupacio-
preocupados (Davis & Valentiner, 2000) y muy preocu- nes y la Preocupación Tipo 2 en el TAG, la relación
pados sin TAG (Ruscio & Borkovec, 2004). La literatu- temporal entre los constructos sugeridos por el MMC
ra existente que evalúa el MMC sugiere que los junto con el papel de estrategias de afrontamiento inefi-
individuos con TAG apoyan las creencias negativas caces en la perpetuación del TAG, esperan una evalua-
acerca de la preocupación y reportan la participación en ción a priori. No ha habido trabajo longitudinal para
meta-preocupaciones (Cartwright-Hatton & Wells, examinar ninguno de los componentes de este modelo a
1997; Davies & Valentiner, 2000; Ruscio & Borkovec, pesar del hecho de que el modelo fue creado como una
2004; Wells & Carter, 2001). Aunque las metacognicio- forma de conceptualización del desarrollo y el manteni-
nes (es decir, la auto conciencia de procesos cognitivos) miento del TAG. Además, algunas de las características
se han usado para describir y tratar otras formas de psi- principales del modelo de Wells permanecen definidas
copatología (por Ej. TOC; Fisher & Wells, 2008), el menos a fondo. El modelo especifica que “la activación
MMC para TAG especifica la importancia de las creen- de creencias negativas [acerca de la preocupación] con-
cias negativas acerca de la preocupación como un com- duce a una valoración negativa de la preocupación o
ponente central del TAG. Sin embargo, la evidencia Preocupación Tipo 2” (Wells, 2004, p. 169). Por tanto,
apuntando a la especificidad de las creencias negativas las creencias negativas acerca de la preocupación y la
acerca de la preocupación y la meta-preocupación para Preocupación Tipo 2 se distinguen como dos entidades
el TAG es mixta. Los individuos con TAG experimentan separadas, con la primera precediendo temporalmente a
más creencias negativas acerca de la preocupación y la la segunda. Sin embargo, estudios y medidas asociadas
Preocupación Tipo 2 en comparación con los individuos con el modelo, tales como el Inventario de
sin diagnóstico de trastorno de ansiedad (Cartwright- Pensamientos Ansiosos (AnTI; Wells, 1994), el
Hatton & Wells, 1997; Davis & Valentiner, 2000; Cuestionario de Metacogniciones (MCQ, Cartwright-
Ruscio & Borkovec, 2004; Wells, 2005; Wells & Carter, Hatton & Wells, 1997), o el Cuestionario de Meta-pre-
2001), o con los que tienen ansiedad o preocupación ocupación (MWQ; Wells, 2005) no distinguen de
subclínica (Davis & Valentiner, 2000; Ruscio & manera fiable entre creencias negativas sobre la preocu-
Borkovec, 2004; Wells, 2005), trastorno de pánico pación y Preocupación Tipo 2.
(Davis & Valentiner, 2000), trastorno de ansiedad social
Adicionalmente, la mayoría de los estudios que
(Davis & Valentiner, 2000; Wells & Carter, 2001) y
investigan creencias negativas acerca de preocupa-
trastornos del estado de ánimo (Cartwright-Hatton &
ción/meta-preocupación usan el MCQ (Cartwright-
Wells, 1997). Además, otros estudios sugieren que los
Hatton & Wells, 1997; Wells, 1994) y el AnTI (Wells,
individuos con TAG experimentan niveles similares de
1994), el cual, tal como señala Wells, es potencialmen-
creencias negativas acerca de la preocupación y la
te problemático dado que estas dos medidas se centran
Preocupación Tipo 2 tal como le pasa a aquellos con
en la aparente falta de control sobre la preocupación, las
TOC (Cartwright-Hatton & Wells, 1997) y con trastor-
cuales están en la definición de criterios de TAG del
nos de pánico (Wells y Carter, 2001). Además, Ruscio
DSM-IV (Wells, 2005). Por tanto, los estudios que
& Borkovec (2004) hallaron que aunque los muy preo-

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emplean estas medidas afirman que un diagnóstico las creencias disfuncionales de los pacientes acerca de
establecido para TAG discrimina a los individuos con la preocupación en sus vidas diarias, el MMC usa diver-
TAG de aquellos sin TAG. Con el objetivo de resolver sas tareas de estrategia para reducir la preocupación
esta circularidad, es importante que se definan los cons- tales como: la estrategia de desajuste (en la que se pide
tructos de la Preocupación Tipo 2 y las creencias nega- a los pacientes que comparen la preocupación relativa a
tivas acerca de la preocupación, o que se empleen la situación con el resultado real de la situación) o expe-
diferentes enfoques metodológicos. Finalmente, aunque rimentos de modulación de la preocupación (en la que se
Wells afirma que hay una relación causal entre las pre- instruye a los pacientes a incrementar o disminuir su
ocupaciones Tipo 1 y Tipo 2, y entre creencias negati- preocupación en diferentes ocasiones, con el objetivo de
vas acerca de la preocupación y la Preocupación Tipo 2, disipar las creencias positivas acerca de la preocupación,
hasta la fecha ninguna investigación ha testado estas Wells, 2006).
hipotéticas relaciones causales.
Se ha evaluado la eficacia de la TMC para TAG en
un ensayo abierto (Wells & King, 2006) y un ECA (Van
der Heiden, 2008). Los resultados del ensayo abierto
Tratamiento
sugieren reducciones significativas en ansiedad, estado
El objetivo inicial de la Terapia Metacognitiva de ánimo y preocupación con un 75% de los individuos
(TMC) para TAG no es reducir la cantidad de preocupa- tratados cumpliendo los criterios de recuperación exito-
ción si no modificar la Preocupación Tipo 2 (es decir, las sa a los 12 meses post tratamiento (Wells & King,
creencias negativas que mantienen los pacientes hacia la 2006). Como se ha mencionado anteriormente, se pre-
preocupación; Wells, 2006). Además, se introduce al sentaron evidencias preliminares de un ECA que com-
paciente en otras estrategias de afrontamiento para hacer paraba TMC, Tratamiento de MII y una lista control.
frente a la preocupación (véase Tabla 1). En general, Los resultados sugieren que la TMC pero no la MII
hay un énfasis sobre la modificación de las cogniciones obtuvo mejoras significativas sobre la preocupación y
relacionadas con la confianza del paciente acerca de la la ansiedad en comparación con la lista de espera.
preocupación como una fuerza positiva en su vida así Además, no hubo diferencias significativas en la reduc-
como de las percepciones negativas de la preocupación ción de síntomas entre el TMC y el tratamiento MII
como no controlables y peligrosas. Los componentes (Van der Heiden, 2008). Se ha completado y el manus-
específicos del tratamiento incluyen la formulación del crito está en preparación, un ECA que compara el TMC
caso, la socialización, la discusión en relación con el no con la relajación aplicada (Wells, comunicación perso-
control de la preocupación, el peligro de la preocupa- nal, enero 2009).
ción y las creencias positivas de la preocupación (Wells,
2006). La formulación del caso implica una serie de Modelo de Desregulación
cuestiones de sondeo en relación con los pensamientos de la Emoción
que dispararon el episodio de preocupación del pacien- El modelo de desregulación de la emoción
te, sus reacciones hacia el episodio y cualquier intento (MDE) se basa en la literatura sobre la teoría de
de controlar o reprimir la preocupación. Las respuestas la emoción y la regulación de los estados emocio-
a estas cuestiones permiten al terapeuta comprender las nales en general (por Ej. Ekamn & Davidson,
situaciones que disparan la preocupación, así como las 1994; Gross, 1998; Mayer, Salovey, Caruso, &
creencias negativas y positivas del paciente acerca de la Sitarenios, 2001; Mayer, Salovey, Caruso &
preocupación. La socialización puede entenderse como Sitarenios, 2003). El MDE también comparte
el componente de educación del TMC, ya que los características con la conceptualización de los
pacientes son introducidos a los objetivos del TMC y el déf icits emocionales en el trastorno de personali-
terapeuta enfatiza la importancia de modificar las creen- dad límite (borderline) de Linehan (Linehan,
cias acerca de la preocupación frente a la reducción de 1993a, 1993b). El MDE se compone de cuatro
la propia preocupación. Dado que el MMC se centra en componentes centrales (Mennin, Turk, Heimberg

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& Carmin, 2004). El primer componente af irma & Fresco, 2005). Además, quizás debido a la hipótesis
que los individuos con TAG experimentan una de una mayor intensidad y un menor umbral para las
hiperexcitación emocional o emociones que son emociones, también se espera que los individuos con
más intensas que las de la mayoría de las perso- TAG expresen las emociones más frecuentemente que
nas. Esto compete tanto a los estados emociona- otros, y esto es particularmente el caso para las emocio-
les positivos como negativos, pero nes negativas.
particularmente a los negativos (Turk, Heimberg,
El segundo componente (pobre comprensión de las
Luterek, Mennin & Fresco, 2005). Segundo, los
emociones) incluye déficits en la descripción y el eti-
individuos con TAG tienen una comprensión más
quetado de las emociones, así como en el acceso y la
pobre de sus emociones que la mayoría de las per-
aplicación de la información útil que conllevan las emo-
sonas. Tercero, tienen actitudes más negativas
ciones (Mennin y col., 2005). Existe la hipótesis de que
acerca de las emociones (por Ej. la percepción de
la combinación de los componentes 1 y 2 conduce al ter-
que las emociones son amenazantes) que los
cer componente, que estipula que los individuos con
demás . Finalmente, evidencian una regulación de
TAG llegan a estar abrumados, ansiosos o incómodos
la emoción maladaptativa y estrategias de manejo
cuando se producen emociones fuertes, de modo que se
que les dejan potencialmente en estados emocio-
crea un ciclo de retroalimentación. Existe también la
nales que son incluso peores que aquellos que ini-
hipótesis de que los individuos con TAG muestran hiper-
cialmente pretendían regular (Mennin y co.,
vigilancia extrema para la información amenazadora y
2004).
atención aumentada bien hacia las emociones o lejos de
Cada uno de los cuatro pilares del MDE tiene ellas y de las creencia negativas pertinentes (McDonald,
varios principios. Por ejemplo, incluidos en el primer Hahn, Barefiled, Smith & Williams, 2005). Finalmente,
componente del modelo (intensidad de emociones) esta secuencia culmina en el cuarto componente, que
están los supuestos de que los individuos con TAG tie- especifica que los individuos con TAG hacen intentos
nen un menor umbral para la experimentación de emo- fracasados o maladaptativos, para minimizar o las emo-
ción que los demás, y que las emociones se producen ciones o el sobre control de las emociones, o la excita-
más fácil y más rápidamente y no sólo con más fuerza, ción emocional inadecuadamente expresada (por Ej.
entre los individuos con TAG (Mennin, Heimberg, Turk preocupación excesiva, supresión de emociones, arre-
bato emocional). Como tal, la preocupación juega un
papel fundamental en este modelo como una estrategia
Fig.4. Modelo de Desregulación de la Emoción. No se ha
publicado una representación visual del Modelo de ineficaz para afrontar las emociones. Sin embargo,
Desregulación de la Emoción. Por tanto, este fue creado por según Mennin y col. (por Ej. Mennin y col., 2005), estas
los autores y aprobado por el Dr. Mennin.
sucesiones de eventos se pueden producir en la dirección
Percepción de
opuesta (es decir, estrategias de regulación de emocio-
amenaza de la nes maladaptativas conducen a una emoción negativa
seguridad
Disposición incrementada), dando lugar así a un ciclo bidireccional
característica:
Hiperexcitación de desregulación emocional y afecto negativo. La Fig. 4
emocional presenta una representación visual de este modelo.
Emociones
Intensas

Gestión Comprensión Apoyo empírico


maladaptativa pobre
de las emociones de las emociones La evidencia actual soporta el concepto de que los
individuos con TAG experimentan emociones negativas
Reacción cognitiva
negativa a las pero no positivas más intensamente que los controles
emociones sanos (Mennin y col., 2005; Salters-Pednault, Roemer,

RET, Revista de Toxicomanías. Nº. 63 - 2011 27


Tull, Rucker & Mennin, 2006; Turk y col., 2005) y que sión (Mennin y col., 2007) o con ansiedad social
aquellos con otras psicopatologías incluyendo la depre- (Mennin y col., 2007; Turk y col., 2005).
sión (Mennin, Hollaway, Fresco, Moore & Heimberg,
Futuros estudio de la MDE deberían evaluar otros
2007) y el trastorno de ansiedad social (Mennin y col.,
aspectos del modelo que no han sido sujetos aún a
2007; Turk y col., 2005). Además, la investigación pre-
escrutinio empírico (por Ej. que el TAG se caracteriza
via sugiere que los individuos con TAG tiene aumenta-
por un menor umbral emocional o que los individuos
da la dificultad para identificar, describir y comprender
con TAG fracasan al utilizar la información de adapta-
sus emociones en comparación con pregraduados sanos
ción derivada de los estado emocionales). Además, la
(Mennin y co., 2005, 2007). La evidencia actual apoya
información sobre este modelo se ha centrado casi
el concepto de que los individuos con TAG exhiben un
exclusivamente en datos de participantes análogos cuyo
miedo aumentado a las emociones intensas en compa-
grado de severidad de TAG puede estar por debajo del
ración con controles sanos (Mennin y col., 2005;
nivel clínico. Adicionalmente, una cualidad deseable en
Salters-Pednault y col., 2006; Turk y col., 2005).
un modelo es que este haga sólo una predicción dado un
Finalmente, los resultados sugieren que los individuos
conjunto específico de circunstancias (Kepple, Saufly
con TAG emplean más estrategias emocionales de
& Tokunaga, 1992). El MDE postula que los individuos
afrontamiento (es decir, preocupación excesiva, arreba-
con TAG pueden mostrar infra control (por Ej. expre-
to emocional, supresión emocional) en comparación
sión inapropiada) de estados afectivos negativos, super-
con los controles sanos (Mennin y col., 2007) e indivi-
control (por Ej. evitación de supresión) de aquellos
duos con otras psicopatologías incluyendo depresión y
estados o una combinación de los mismos; sin embar-
ansiedad social (Mennin y col., 2007).
go, no se ha formulado la hipótesis ni se han examina-
Otros estudios han fallado en apoyar los compo- do empíricamente los distintos precursores de estos
nentes de la hipótesis del MDE. No se encontraron dife- patrones de respuesta diferente. Tampoco ha habido
rencias significativas entre TAG y los grupos control en investigaciones de la manera en la que los cuatro com-
la capacidad de identificar y describir emociones en un ponentes pueden interactuar temporalmente. A pesar de
estudio (Novick-Kline, Turk, Mennin, Hoyt & estas limitaciones, los datos preliminares que apoyan a
Gallagher, 2005) que usó una medida evaluada por un varios de los componentes claves del modelo (como se
observador (Niveles de Conciencia Emocional); (Lane, ha citado aquí) sugieren que están garantizados más test
Quinlan, Schwartz, Walker & Zeitlin, 1990), o un estu- del MDE y que este modelo tiene el potencial de mejo-
dio (Decker, Turk, Hess & Murray, 2008) que usó una rar nuestra comprensión conceptual del TAG.
técnica diaria para valorar la conciencia emocional.
Estos resultados sugirieron que las medidas auto-repor-
tadas pueden ser problemáticas en la valoración de la Tratamiento
capacidad de los individuos con TAG de identificar y/o Actualmente se está desarrollando una interven-
describir sus experiencias emocionales. Esto puede ción terapéutica basada en MDE (terapia de la regula-
deberse a la tendencia de los individuos con TAG a ción de la emoción para TAG [TRE]), que se construye
subestimar sus habilidades para controlar las emocio- sobre el supuesto de que las mejoras en la regulación de
nes. Además, no parece haber diferencia en la identifi- la emoción conducen a mejoras en los síntomas de TAG
cación, descripción o comprensión de las emociones (Mennin, 2004). La intervención combina elementos de
entre los individuos con TAG y los individuos con otras TCC (por Ej. auto-monitorización, relajación) con téc-
formas de psicopatología incluidas la depresión nicas diseñadas para abordar problemas con la regula-
(Mennin y col., 2007) y el trastorno de ansiedad social ción de la emoción (por Ej. incremento de la conciencia
(Mennin y col., 2007; Turk y col., 2005). Finalmente, la emocional) y evitación emocional (por Ej. exposición).
evidencia empírica no sugiere diferencias significativas Los componentes específicos del tratamiento de la TRE
entre el miedo a emociones intensas de los individuos (tal como figuran en la Tabla 1) incluyen ejercicios de
con TAG en comparación con los individuos con depre-

28 RET, Revista de Toxicomanías. Nº. 63 - 2011


relajación, replanteamiento de la creencia, psicoeduca- Un programa de investigación que investiga la efi-
ción acerca de las emociones, entrenamiento de las cacia de este tratamiento se encuentra actualmente en
habilidades emocionales y ejercicios de exposición las primeras etapas y los resultados se han presentado
experiencial (Mennin, 2004). La educación de la emo- durante una conferencia profesional (Mennin, Fresco,
ción se centra en enseñar a los individuos con TAG la Ritter, Heimberg & Moore, 2008, noviembre). Los
importancia de las emociones en la toma de decisiones resultados anticipados de 8 de los 14 participantes ini-
y en las relaciones interpersonales. El entrenamiento de ciales de este ensayo abierto son prometedores, indican-
las habilidades emocionales equipa al paciente con do reducciones significativas en la preocupación y
varias técnicas diseñadas para mejorar la comprensión síntomas de TAG entre los pacientes tratados. Además
y la regulación de las emociones. Tales habilidades este ensayo abierto, un ECA está en la fase inicial de
incluyen la mejora del conocimiento somático de las recolección de datos (Mennin, comunicación personal,
emociones propias, aprender a identificar y diferenciar enero 2009).
emociones y aprender la motivación detrás de las emo-
ciones propias. Llegar a familiarizarse con estas carac-
terísticas emocionales personalmente relevantes, Modelo Basado en la Aceptación del
prepara a los pacientes para las habilidades de regula- Trastorno de Ansiedad Generalizada (MBA)
ción emocional por medio de las cuales pueden apren-
der a reconocer situaciones emocionalmente Roemer y Orsillo (2002, 2005) se han basado en el
abrumadoras y a cómo gestionarlas (Mennin, 2004). Modelo de Evitación Experiencial de Hayes y colegas
Durante la sesión de terapia se completan ejercicios de (Hayes, Wilson, Fifford, Follette & Stroshal, 1996) y
exposición experiencial cuyo objetivo es revelar y sobre el MEP de Borkovec (Borkovec y col., 2004) pro-
explorar temas emocionales básicos temidos (Mennin, poniendo un modelo preliminar basado en la
2004). Aceptación del Trastorno de Ansiedad Generalizada

Fig.5. Un Modelo Basado en la Aceptación del TAG. No se ha publicado una representación visual del Modelo Basado en la
Aceptación del TAG. Por eso, este fue creado por los autores y aprobado por los Dres. Roemer y Orsillo. Aunque el ciclo puede
empezar con la percepción de una amenaza externa negativa, éste también puede ser provocado por una experiencia interna sola.
Además, una vez el ciclo comienza las experiencias internas percibidas juegan un papel más importante que las amenazas exter-
nas percibidas en la perpetuación del ciclo.

Amenaza externa percibida

Experiencias internas
estar

aumentado
Malestar
Reducido mal

Males
a corto plazo

ta
r aum

Relación problemática con las


Experiencias Internas
entad
o

Evitación Experiencial Restricción Conductual


(por Ej. preocupación)

RET, Revista de Toxicomanías. Nº. 63 - 2011 29


(MBA). De acuerdo con Roemer y Orsillo (Roemer & mente evitadores de sus experiencias internas. A menu-
Orsillo, 2002, 2005; Roemer & Orsillo, comunicación do generalizan esa evitación a otras actividades de sus
personal, enero 2009; Roemer, Salters, Raffa & Orsillo, vidas que son valiosas, tales como pasar tiempo con sus
2005) el MBA implica cuatro componentes: (a) expe- familias. Una consecuencia de la restricción conductual
riencias internas, (b) una relación problemática con las puede ser la reducción de la conciencia del momento
experiencias internas, (c) evitación experiencial y (d) presente, lo que puede limitar la conciencia que experi-
restricción conductual (véase Fig. 5). mentan los individuos con TAG cuando se involucran
realmente en acciones valoradas.
Según este modelo una relación problemática con
experiencias internas (pensamientos, sentimientos o Los creadores de la MBA sugieren que “los indivi-
sensaciones corporales) se compone de dos aspectos duos con TAG tienen reacciones negativas hacia sus
específicos, a saber, (1) reacción negativa a experien- propias experiencias internas y están motivados para
cias internas y (2) fusión con experiencias internas. El intentar evitar estas experiencias, lo que hacen tanto
primer aspecto, reacción negativa a experiencias inter- conductual como cognitivamente (por medio de la par-
nas, implica cualquier pensamiento negativo (por Ej. ticipación repetida en el proceso de preocupación)”
juicio de respuestas emocionales como extremas o (Roemer & Orsillo, 2005, p. 216). Concretamente, un
indeseables) o meta-emociones (por Ej. temor de individuo puede percibir una amenaza externa o puede
miedo) que puede surgir cuando un individuo tiene una tener una experiencia interna desagradable que le con-
experiencia interna. Cuando ocurre esto, los individuos duce a participar en la evitación experiencial. Esta evi-
experimentan dificultades de monitorización, acepta- tación reduce el malestar causado por la experiencia
ción e interpretación de las emociones. Es notable que interna a corto plazo. Sin embargo, a largo plazo esta
este primer problema es conceptualmente similar al evitación sirve para reforzar la restricción conductual
énfasis del MDE sobre las actitudes negativas (por Ej. dado que el individuo llega a estar menos comprometi-
percepción de que las emociones son amenazantes; do en actividades (ya sea por su menor implicación en
Mennin y col., 2002). El segundo problema, fusión con actividades, ya por estar menos experiencialmente
experiencias internas, implica llegar a estar enredado o consciente durante las actividades) que él/ella encuen-
“fundido” con la reacción negativa o las experiencias tra valiosas. Esto ocasiona un aumento de la angustia
internas. En otras palabras, la fusión con experiencias que puede disparar más experiencias negativas internas,
internas es una creencia de que estas reacciones negati- perpetuando de este modo el ciclo.
vas transitorias a las experiencias internas son perma-
nentes y por tanto una característica definitoria del
individuo. Soporte empírico
El tercer componente de este modelo, evitación Estudios recientes han examinado explícitamente
experiencial, se define como evitación activa y/o auto- los componentes del MBA en la predicción de los sín-
mática de las experiencias internas percibidas como toma de TAG (Lee, Orsillo, Roemer & Allen, en pren-
amenazantes o si no como negativas. Los ejemplos sa; Michelson, Lee, Orsillo & Roemer, 2008,
incluyen preocupación acerca de futuros posibles acon- noviembre; Roemer y col., 2005, 2009). Roemer y col.
tecimientos o preocupación acerca de asuntos menores (2005) llevaron a cabo dos estudios para examinar la
para evitar preocupaciones más serias. relación entre la evitación experiencial, las reacciones
El componente final de este modelo, restricción negativas a las emociones (es decir, miedo a la ira,
conductual, es la reducción de la implicación en accio- depresión, ansiedad y emociones positivas), y severidad
nes valoradas o en actividades que el individuo encuen- de los síntomas de TAG en una muestra no clínica de
tra significativas (por Ej. pasar tiempo con la familia). mujeres (estudio 1) y una pequeña muestra clínica de
La restricción conductual se desarrolla a medida que individuos con TAG (estudio 2). Los resultados sugie-
los individuos con TAG llegan a ser más experiencial- ren que la evitación experiencial y las reacciones nega-
tivas a las emociones se asociaban ambas positivamente

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con la severidad de los síntomas del TAG en la muestra examine la fusión de experiencias internas; por tanto,
no clínica (estudio 1) pero no en la muestra clínica este constructo requiere más investigación.
(estudio 2), aunque esta falta de asociación significati-
va en la muestra clínica puede ser parcialmente atribui-
ble al pequeño tamaño de la muestra (N = 19; Roemer Tratamiento
y col., 2005). Roemer & Orsillo han desarrollado una terapia
Roemer y col. (2009) llevaron a cabo dos estudio conductual para TGA basada en la aceptación (TCBA;
para examinar la relación entre la regulación de la emo- Orsillo, Roemer & Barlow, 2003 Roemer y Orsillo,
ción, la atención y la severidad de los síntomas del TAG 2005, 2007; Roemer, Orsillo & Salters-Pedneault,
en una muestra no clínica (estudio 1) y entre individuos 2008). La TCBA se compone de tres amplios compo-
con TAG y un grupo de control no clínico (estudio 2). nentes de tratamiento, concretamente (a) psicoeduca-
Los resultados del estudio 1 de Roemer y col. (2009) ción acerca del MBA, (b) ejercicios de atención y
sugieren las dificultades en la regulación emocional se aceptación y (c) cambio de conducta y acciones valora-
asociaban positivamente con la severidad de los sínto- das (Roemer & Orsillo, 2005). La psicoeducación
mas de TAG y que la atención se asociaba inversamen- implica la enseñanza al paciente del MBA, con particu-
te con la severidad de los síntomas de TAG en una lar énfasis en enseñarle sobre el uso de la preocupación
muestra no clínica obtenida de una universidad urbana. como una táctica para evitar más experiencias internas
Los resultados del estudio 2 (Roemer y col., 2009) angustiosas que conducen a una reducción de la impli-
sugieren que los individuos con TAG reportaban niveles cación en las acciones valoradas. Además, la psicoedu-
más elevados de dificultad con la regulación de la emo- cación se centra también en la función de las emociones
ción y niveles significativamente menores de atención en la preparación para la acción, la comunicación con
en comparación con un grupo control no clínico. Lee y otros y la mejoría de las experiencias vitales.
col. (en prensa) hallaron que los individuos con TAG Finalmente, la psicoeducación se centra en definir el
reportaban mayores niveles de evitación experiencial y objetivo del tratamiento mediante la promoción de las
malestar acerca de las emociones en comparación con acciones valoradas más que en la reducción de las expe-
el grupo no clínico control. Finalmente, Michelson y riencias internas angustiosas tales como la ansiedad
col. (2008, noviembre) hallaron que los individuos con (Roemer & Orsillo, 2005).
TAG se comprometían menos en acciones valoradas en Los ejercicios de atención y aceptación se centran
comparación con el grupo control no clínico. en la promoción de la conciencia activa, compasiva, sin
Hay diversas limitaciones para la investigación prejuicios y expansiva de las propias sensaciones inter-
existente sobre el MBA. Primero, el modelo está toda- nas y externas como una manera de experimentar ple-
vía en sus etapas de desarrollo y por tanto muchos de namente el momento presente. Esto se consigue por
sus componentes y etiquetas identificadas en este artí- medio de técnicas usadas en otros tratamientos del TAG
culo se basan en comunicaciones personales con los (por Ej. el tratamiento MEP) tales como auto monitori-
autores y en artículos en revisión más que en artículos zación y relajación. Además se le pide al paciente que
publicados (Lee y col., en prensa; Roemer & Orsillo etiquete las experiencias internas (por Ej. “estoy tenien-
comunicació n personal, enero 2009). Además, no ha do sentimiento de tristeza”, “estoy teniendo el pensa-
habido pruebas de la relación temporal entre los cons- miento de que soy inútil”). Esto está destinado a ayudar
tructos específicamente identificados en este modelo. al paciente por separado o a “desactivar” la propia per-
La mayoría de los principios de MBA esperan una eva- cepción de los pacientes de las experiencias internas. El
luación a priori usando diseños más rigurosos incluyen- componente final del tratamiento es un cambio de con-
do análisis longitudinales y experimentos en los que los ducta y de acciones valoradas. Para ello, se le pide al
constructos sean manipulados. Finalmente, hasta donde paciente que identifique los valores (es decir, aspectos
sabe el autor, hay poca investigación sobre el TAG que de la vida que él/ella encuentran importantes) y a valo-

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rar cuán consistente son sus accione actuales con esos momento presente, probablemente proporcionarían
valores. Tras esto, se le pide al paciente que participe en resultados discrepantes de aquellos basados en los
series de tareas de escritura para incrementar más la recuerdos emocionales al largo plazo. Además, los indi-
conciencia de la relación entre las conductas actuales y viduos con TAG responden de manera diferente a las
los valores. Por medio de estos ejercicios, el paciente y medidas psicológicas y de auto informe (por Ej.
el terapeuta trabajan para identificar acciones valoradas Borkovec & Hu, 1990; Behar & Borkovec, presentado
concretas en las que el paciente puede implicarse y que para publicación), lo que subraya aún más la necesidad
pueden ser auto monitorizadas, con el objetivo de de utilizar medidas objetivas de funcionamiento en esta
aumentar la frecuencia de esas acciones valoradas a lo población.
largo del tiempo (Roemer & Orsillo, 2005).
Aunque los auto informes proporcionan una eficaz
Los resultados de un ensayo abierto llevado a herramienta para testar las hipótesis preliminares, se
cabo con pacientes diagnosticados de TAG indican necesita un movimiento hacia el uso de medidas más
que la TCBA produjo una mejora significativa de la objetivas de las experiencias internas. Estos métodos
preocupación, la ansiedad y la depresión en el post podrían incluir datos complementarios e históricos,
tratamiento y que la mayoría de los beneficios eran medidas observacionales, monitorización psicológica y
todavía evidentes a los 3 meses de seguimiento un prolongado seguimiento naturalístico por periodos
(Roemer & Orsillo, 2007). Además, un ECA reciente de tiempo continuados. Por ejemplo, dos estudios
que examinaba la TCBA en comparación con una lista emplearon o una medida valorada por un observador, o
de espera control en una muestra clínica obtuvo resul- una técnica diaria para valorar la conciencia emocional,
tados similares, con grandes tamaños de efecto y una un constructor clave del MDE (Decker y col., 2008;
reducción significativa de los síntomas de TAG valo- Lane y col., 1990). Como se ha revisado anteriormente,
rados por el clínico y auto reportados (Roemer y col., estos estudios obtuvieron resultados diferentes en com-
2008). Actualmente se está realizando un ECA que paración con el auto informe, lo que subraya aún más la
compara TCBA con la relajación aplicada (Roemer & limitación potencial de las medidas de auto informe.
Orsillo, comunicació n personal, enero 2009). Estos tipos de técnicas deberían usarse con mayor fre-
cuencia para valorar mejor los constructos clave de
cada modelo.
Limitaciones de la
Otra limitación compartida por muchos de los estu-
investigación existente
dios revisados en este artículo se refiere a su excesiva
Aunque los modelos revisados aquí prometen una dependencia en la identificación de las muestras de
profundización de nuestra comprensión del TAG, los TAG basándose en medidas continuas, tales como el
estudios que examinan los modelos comparten diversas TAG-Q-IV (Newman, Zuellig, Kachin, Constantino &
limitaciones metodológicas. Muchos de los estudios se Cashman-McGrath, 2002) en lugar de en entrevistas
basan en gran parte en medidas auto reportadas, que diagnósticas. Dado que las muestras análogas pueden
requieren que los individuos recuerden los estados estar menos severamente deterioradas por la preocupa-
emocionales previos. Como ha hecho evidente la inves- ción y otros síntomas de TAG, deberían usarse cuando
tigación previa, los recuerdos a corto plazo de las emo- fuera posible para una clasificación adecuada de indivi-
ciones de los individuos parecen implicar procesos duos con TAG las entrevistas de diagnóstico tales como
cualitativamente diferentes en comparación con el la 4ª Edición del Programa de Entrevista para el
recuerdo de las emociones pasadas a largo plazo (por Trastorno de Ansiedad (ADIS-IV; Brown, DiNardo &
Ej. Robinson & Clore, 2002). De este modo, los enfo- Barlow, 1994) y la Entrevista Clínica Estructurada para
ques metodológicos en los que a los participantes se les el DSM-IV-TR (SCID-IV; First, Spitzer, Gibbon &
pide participar en el recuerdo a corto plazo o en pre- Williams, 2007).
sentación de informes de los estados emocionales del Quizás de manera más importante, la vasta mayo-

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ría de las investigaciones examinando los cinco mode- los modelos incluyendo la psicoeducación acerca del
los han empleado diseños no experimentales en pruebas TAG, la auto monitorización y un énfasis en el entrena-
de hipótesis. Este hecho contrasta fuertemente con las miento de los pacientes para afrontar las experiencias
diversas hipótesis causales específicas presentadas por internas. Además de estas similitudes, hay también
los modelos. En futuros test de los nuevos modelos de importantes diferencias conceptuales que impactan en
TAG serán necesarios estudios experimentales con una los tratamientos diseñados para cada modelo. Estas
clara hipótesis a priori. Por ejemplo, (Ladouceur, Dugas diferencias conceptuales puede destacarse clasificando
y col., 2000; Ladouceur, Gosselin & Dugas, 2000) las teorías en tres campos: modelos cognitivos (es decir,
emplearon una manipulación experimental en la que MMC, MII), modelos emocionales/conductuales (es
utilizaron un juego de tareas para manipular la intole- decir, MDE, MBA) y un modelo integrado (es decir,
rancia de la incertidumbre. Este tipo de diseño metodo- MEP).
lógico innovador debería usarse más ampliamente para
Aunque los modelos cognitivos incluyen cierta-
proporcionar valoraciones rigurosas de las previsiones
mente focos secundarios sobre componentes emociona-
causales hechas por cada modelo. Además, para delimi-
les y conductuales, los pensamientos / cogniciones
tar las utilidades teóricas y prácticas de cada teoría, se
específicas se identifican como el mecanismo patogéni-
requiere el uso de ECAs con controles activos y un
co primario del TAG. Por ejemplo, el MII destaca la
apropiado examen de moderación y mediación (por Ej.
intolerancia a la incertidumbre como el primer cons-
Kraemer, Wilson, Fairburn & Agras, 2002), tal como se
tructo de interés, lo que los autores identifican como
plantea en la sección posterior de futuras direcciones.
una vulnerabilidad cognitiva para la preocupación, la
evitación cognitiva y una orientación negativa al proble-
ma. Además, la orientación negativa al problema se
Los modelos en comparación
define como pensamientos negativos y creencias funda-
A pesar de estas limitaciones, los modelos ofrecen mentales que los individuos con TAG tienen acerca de
colectivamente valiosas perspectivas acerca de la natu- su capacidad para la resolución de problemas (Dugas y
raleza básica del TAG y los pasos necesarios para su tra- col., 1995). De forma similar, el MCC destaca la impor-
tamiento exitoso. De hecho, la verdadera explosión en tancia de las meta-creencias negativas acerca de la pre-
la investigación del TAG en los últimos 15 años ha des- ocupación y la consecuente Preocupación Tipo 2 (es
embocado en muchos modelos teóricos complementa- decir, preocuparse por la preocupación; Wells, 1995).
rios y en vastas mejoras de nuestra capacidad para tratar Como tal, estos focos primarios de estos dos modelos
esta condición (Covin y col., 2008). Los cinco modelos apuntan a las cogniciones como los componentes que
teóricos comparten un énfasis común en la importancia dirigen y mantienen el TAG. Este enfoque en las cogni-
central de la evitación de experiencias internas. Por ciones tiene un impacto directo sobre los tipos de técni-
ejemplo, el MEP afirma que la preocupación es una cas de tratamiento usadas. Por ejemplo, los tratamientos
estrategia para evitar estímulos cargados de emociones basados en estos modelos se enfocan principalmente
tales como imágenes vividas y activación somática, sobre el conocimiento y la evaluación de las cognicio-
mientras el MII identifica la preocupación como una nes fundamentales (es decir, creencias y pensamientos)
estrategia para evitar la incertidumbre. El MMC se cen- acerca de experiencias internas tales como la veracidad
tra en la participación de los individuos en estrategias de creencias negativas de la resolución de problemas
para evitar preocuparse sobre la preocupación, y el (MII) meta-creencias negativas acerca de la preocupa-
MDE identifica la preocupación como una de varias ción (MCC) y creencias positivas acerca de la preocu-
ineficaces estrategias de afrontamiento para gestionar y pación (MII y MCC).
probablemente evitar emociones. Finalmente, el MBA Por el contrario, los modelos emocionales / con-
sugiere que la preocupación es un tipo de evitación ductuales se centran principalmente en el impacto de
experiencial de experiencias internas. Además, hay las emociones y conductas en el desarrollo y manteni-
diversos componentes del tratamiento comunes entre

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miento del TAG. Por ejemplo, en el DME, una pobre los. Además, se precisan ensayos clínicos aleatorizados
comprensión y regulación de las emociones se identifi- para testar más profundamente la utilidad práctica de
ca como el constructo clave en la conceptualización de cada modelo y su impacto sobre los individuos que
la etiología y el mantenimiento del TAG (Mennin y col., padecen TAG. Concretamente, nosotros recomendamos
2002). El MBA destaca la importancia de la evitación el aumento del empleo de diseños adicionales (también
experiencial, o la implicación en comportamientos para llamados constructivos) como medio para evaluar los
evitar experiencias internas desagradables, lo que con- componentes específicos de los tratamientos que pue-
duce a restricción conductual o a una reducida implica- den mejorar la eficacia de las terapias existentes para
ción en conductas que de otro modo aportan un valor TAG. Los diseños adicionales empiezan con un trata-
significativo a la vida de los individuos (Roemer & miento básico que se sabe que es eficaz (por Ej. TCC
Orsillo, 2002). Aunque las cogniciones juegan un papel tradicional) y entonces se añade un nuevo componente
importante en los tratamientos basados en estas concep- del tratamiento que por razones teóricas y/o empíricas
tualizaciones teóricas del TAG, las emociones y los se ha postulado la hipótesis de que mejora potencial-
comportamientos son el enfoque principal del trata- mente la eficacia del componente del tratamiento bási-
miento, tal como se evidencia en estos paquetes de tra- co (para una descripción detallada del diseño adicional,
tamientos el enfoque predominante se pone en la véase Behar & Borkovec, 2003). Este enfoque para eva-
educación de la emoción (es decir, la capacitación emo- luar la eficacia del tratamiento permite conclusiones
cional, la función de las emociones en la vida y el papel claras en relación con el impacto de cada componente
de las emociones en la toma de decisiones; el MDE y en del tratamiento sobre los resultados y por tanto puede
menor medida el MBA) ejercicios de exposición expe- avanzar más nuestro conocimiento de los teóricos cons-
riencial (MDE y MBA), atención / aceptación (MBA) y tructos subyacentes que impactan en el TAG.
acciones basadas en valores (MBA).
Adicionalmente, los futuros ECAs deberían conti-
El MEP pone la misma importancia en los elemen- nuar examinando el análisis de moderación para identi-
tos cognitivos (por Ej. creencias positivas de la preocu- ficar las diferencias individuales en las respuestas
pación) que en los elementos emocionales / diferenciales al tratamiento para terapias particulares
conductuales (por Ej. evitación de estímulos cargados para TAG (Kraemer y col., 2002). Por ejemplo, algunos
emocionalmente) como los componentes clave en el individuos con TAG pueden puntuar particularmente
desarrollo y el mantenimiento de TAG (Borkovec y col., alto en las medidas de intolerancia a la incertidumbre y
2004). Además, el MEP ha evolucionado para incluir consecuentemente pueden responder mejor a los com-
nuevos componentes que enfatizan otros factores tales ponentes del tratamiento con un énfasis sobre las cog-
como las relaciones interpersonales, el estilo de apego niciones, mientras otros individuos con TAG pueden
y traumas previos (Borkovec y col., 2004). El tratamien- puntuar alto en medidas de pobre regulación de la emo-
to basado en MEP incorpora restructuración cognitiva ción y por tanto responder mejor a componentes del tra-
(cognitiva), auto control de la desensibilización (con- tamiento emocional/ conductual. El examen de estas
ductual), habilidades de relajación (conductual) y pro- hipótesis de moderación se podría usar entonces para
cesamiento interpersonal y emocional (afectivo) como adaptar individuos concretos a tratamientos concretos
componentes centrales del tratamiento. para TAG. Basado en los modelos actuales, los modera-
dores importantes a evaluar comprenden la intolerancia
a la incertidumbre, el estilo de apego, las meta-creen-
Direcciones futuras y conclusiones cias negativas acerca de la preocupación y la evitación
experiencial entre otros.
Aunque se han hecho avances importantes en la
comprensión teórica del TAG, permanece la necesidad La eficacia de la TCC para el tratamiento del TAG
de una mayor cantidad de investigación básica exami- ha obtenido resultados prometedores (Covin y col.,
nando los componentes predictivos de los cinco mode- 2008; Mitte, 2005) aunque aún se necesita mejorar la

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eficacia de las intervenciones basadas en la evidencia.
Todos los modelos actuales destacan la importancia de
la preocupación como una estrategia de evitación de
experiencias internas. Además, los modelos se pueden
conceptualizar en tres tipos: modelos cognitivos (es
decir, MII, MCC) modelos emocionales / conductuales
(es decir, MDE y MBA) y un modelo integrado (es
decir, MEP). Está garantizado el trabajo futuro para
examinar los componentes de cada uno de estos mode-
los con una mayor dependencia de los diseños experi-
mentales que examinan los elementos predictivos de
cada modelo. Además, testar los componentes del trata-
miento que se basan en estas teorías debería depender
más de los diseños adicionales, como una manera de
tratar de mejorar las terapias actuales con componentes
adicionales que pueden incrementar la eficacia de esas
terapias. Finalmente, estos ECAs deberían incluir tam-
bién análisis de moderación para determinar los tipos
de individuos que responden mejor a cada tipo de trata-
miento. Estos pasos ayudarán a nuestra mejor compren-
sión de los factores etiológicos y de mantenimiento del
TAG, así como nuestra mejor capacidad para tratar indi-
viduos que sufren esta condición.

La Bibliografía de los artículos las pueden pedir a:


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