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Colegio Ambrosio O’Higgins- Vallenar

Lengua y Literatura
Débora Núñez

PECES LICUADOS EN UNA BATIDORA COMO OBRA DE ARTE


Copenhague, Dinamarca. El director de un museo danés ha sido absuelto de los cargos que le
acusaban de haber permitido matar dos peces con una batidora.
La Asociación de Amigos de los Animales había denunciado al artista y al director del museo, Peter
S. Meyer, por maltrato a los animales durante una controvertida exposición.
El artista danés Marco Evaristti organizó la exposición en el año 2000 en el museo de arte moderno
de Trapholt, en Kolding.
Evaristti puso peces rojos en batidoras, dejando que los visitantes apretaran "el botón de la muerte".
El artista quería "poner a la gente en un dilema: elegir entre la vida y la muerte".
Tras la muerte de dos peces rojos en nombre de la "libertad artística", la policía remitió al director y
al artista a los tribunales, que consideraron que el único culpable era el director.
Un técnico del fabricante de batidoras y un veterinario alegaron que los peces "murieron sin dolor",
debido a la velocidad con que giran los aparatos. "Un artista tiene derecho a hacer obras que
desafían nuestro concepto de lo que está bien y lo que está mal", declaró el director.

Una reflexión
"¿Quién eligió en última instancia sobre la vida y la muerte de los peces? No fue el director ni tan
sólo Evaristti... sino el público que apretó el botón... ¿por qué? ¿Resulta quizá más fácil no
oponernos a algo que consideramos injusto (o inmoral) por temor a ser diferentes, a llevar la
contraria que alzar nuestra voz para defender a los que no pueden? De nuevo vemos otro triste
ejemplo en el que seres sin capacidad de defensa han muerto innecesariamente por un capricho
estúpido de un mal llamado artista que necesita rizar el rizo porque carece de capacidad creativa (al
contrario... posee la capacidad de destrucción), por el mal aplicado concepto de "libertad" y...
seguramente...por la cobardía o crueldad del público que asistió. Sea cual fuere el motivo que llevó
al público a apretar el botón (miedo a enfrentarse a quién, aparentemente, tiene el poder...curiosidad
malsana...crueldad) creo que este hecho debe servir para que nos planteemos de nuevo la
importancia que tienen nuestros actos en nuestra vida cotidiana. Como dice Jean Ziegler: «Si al
despertar no ves a quienes mueren de hambre, careces de sentimientos» ... ése mismo concepto es
extensible a otros ámbitos...nuestra capacidad de decisión marca una diferencia para todos los seres
que sufren y es nuestro derecho y deber tomar las decisiones que pueden hacer la vida menos cruel
para los seres que sufren. Es cuando tomamos esas pequeñas y sencillas decisiones cuando
realmente podemos llamarnos seres humanos".

por Núria Querol

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