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El registro fósil de caballos del Estado de Hidalgo

Article · September 2016

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Jaime Priego Vargas


Autonomous University of Hidalgo
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monocultivo: La cara oculta de la reforestación · Las Nuevas Lecciones de Botánica de don
Pío Bustamante y Rocha · El registro fósil de caballos del estado de Hidalgo · La historia de la
vida en la Tierra a través del arte · Inspeccionando el cretácico marino de Hidalgo · Ecología
urbana y herpetofauna en México: Potencial de un nicho poco explorado · La Crisis del agua y
la ausencia de las presas en la normativa mexicana ·
el registro
fósil de
caballos del
estado de
Hidalgo
Jaime Priego Vargas y Victor M. Bravo Cuevas

Museo de Paleontología, Área Académica de Biología, Instituto de Ciencias Básicas e Ingeniería,


Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo

Caballos en tiempo y espacio Eoceno temprano, hace más o menos 56 caballos está relacionado con el surgimiento
millones de años (MacFadden, 1992). de características craneales, dentales y
locomotoras que resultaron favorables
¿En alguna ocasión te has preguntado qué
En sus orígenes, los caballos tuvieron un para habitar ambientes menos arbolados
animales habitaron en lo que hoy es el
tamaño semejante al de un perro pequeño, parecidos a sabanas o pastizales, así como
estado de Hidalgo? Te sorprenderá saber
dientes bajos en altura, así como extremidades para alimentarse de una amplia variedad de
que los caballos fueron un componente
delanteras con tres dígitos y traseras con recursos vegetales. No obstante, los caballos
importante de las faunas que habitaron la
cuatro, por lo que lucían completamente desaparecieron del territorio norteamericano
entidad durante los últimos siete millones de
diferentes de los caballos, asnos y cebras durante el último gran proceso de extinción,
años. En la actualidad, es bien conocido que
actuales. En la primera parte de su historia ocurrido hace alrededor de diez mil años, al
los caballos fueron introducidos a México
evolutiva (hace entre 58 y 20 millones de final del Pleistoceno (MacFadden, 1992).
alrededor de los años 1500, durante la
años), los caballos mostraron una diversidad
colonización española. Sin embargo, estos
integrada por 18 géneros y aproximadamente En México, el registro fósil de caballos es el
animales habitaron el país hace mucho
60 especies. Durante ese tiempo, estuvieron segundo más abundante y diverso para todo
tiempo, incluso, mucho antes de que los adaptados a vivir en ambientes arbolados, Norte y Centroamérica (solo después del
humanos existieran como especie. alimentándose de frutos y hojas de arbustos registro de Estados Unidos). A la fecha, se
y árboles. Sin embargo, hace alrededor 18 conocen 15 géneros y 28 especies en más de
Los caballos son perisodáctilos (animales millones de años, tuvieron un proceso de 200 localidades, con edades que van desde el
con extremidades que terminan en dígitos especiación importante que condujo a la Eoceno temprano hasta el Pleistoceno tardío
impares) que integran formalmente a la diversificación de 20 géneros y cerca de 80 (55 millones de años a 10 mil años), lo cual
familia Equidae. El primer registro de estos especies registradas con una antigüedad indica que una buena parte de su historia
animales para Norteamérica procede de la comprendida entre los 18 y los 0.36 millones evolutiva quedó registrada en el país.
era Cenozoica, en la época conocida como de años. Una parte del éxito evolutivo de los
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En el estado de Hidalgo, el registro fósil muestra
la presencia de seis géneros y al menos ocho
especies de caballos, con edades que van
del Mioceno tardío al Pleistoceno tardío (7
millones de años a 10 mil años) (Figura 1). El
material fósil perteneciente a este grupo
de mamíferos suele ser el más común y
abundante en los yacimientos fosilíferos del
Cenozoico tardío que se conocen para el
territorio hidalguense (Carranza-Castañeda
y Espinosa-Arrubarrena, 1994; Castillo-Cerón
et al., 1996; Carranza-Castañeda, 2006;
Bravo-Cuevas et al., 2011).

Primeros hallazgos de
caballos fósiles en Hidalgo

En el estado de Hidalgo, la presencia de


caballos fósiles es conocida desde hace más
de 130 años. Curiosamente, los primeros
descubrimientos de restos de estos
organismos (al igual que los de muchos
otros) ocurrieron de manera accidental
mientras se realizaban exploraciones
en busca de carbón para las compañías
ferrocarrileras en el sector noroeste de la
entidad (Castillo-Cerón et al., 1996).

Figura 1. Distribución temporal y tamaño relativo de los caballos fósiles del estado de Hidalgo.

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Figura 2.

Mapa índice de las principales áreas fosilíferas

en el estado de Hidalgo con restos de caballos.


A) Zimapán, B) Zacualtipán, C) Actopan-
Ixmiquilpan, D) Santa María Amajac, E) Tula-

Tepeji del Río, F) San Agustín Tlaxiaca, G)


Pachuca-Tulancingo, H) Villa de Tezontepec;
1) Calippus hondurensis, 2) Nannippus

peninsulatus, 3) “Dinohippus” interpolatus,


4) Neohipparion eurystyle, 5) Astrohippus
stockii, 6) “Dinohippus” mexicanus, 7) Equus

simplicidens, 8) Equus conversidens. La estrella


indica la capital del estado.

El primer reporte que documenta la existencia y observó que algunos correspondían a restos el Grande. A partir de ese momento, los
de caballos fósiles en territorio hidalguense fue de caballos pertenecientes a las especies reportes de caballos fósiles para Hidalgo son
realizado por el paleontólogo estadounidense Protohippus castilli, Hippotherium rectidens sumamente escasos y no es hasta principios
Joseph Leidy en 1882. Leidy recibió de parte e Hippotherium peninsulatum (nombres de la década de los 90 cuando la intervención
del Sr. Ellis Clarke Jr. tres dientes y dos no válidos actualmente y que fueron de paleontólogos de la Universidad Autónoma
fragmentos de huesos recuperados de una reemplazados por Calippus hondurensis, del Estado de Hidalgo (UAEH) y del Instituto
capa de arcilla (probablemente mientras Neohipparion eurystyle y Nannippus de Geología de la Universidad Nacional
se buscaba carbón en una de las minas) en peninsulatus, respectivamente) (Carranza- Autónoma de México (IGM-UNAM) permitió
las cercanías del municipio de Zacualtipán Castañeda y Espinosa-Arrubarrena, 1994). hacer nuevos y valiosos descubrimientos de
(Castillo-Cerón et al., 1996). Las piezas No obstante, la información geográfica y caballos fósiles en la entidad.
fósiles fueron estudiadas y descritas como estratigráfica precisa del sitio de colecta
una nueva especie de caballo a la que se de los materiales estudiados por Cope es Caballos fósiles en Hidalgo:
nombró como Hippotherium montezuma incierta y lo único que se conoce es que ¿Quiénes, cuándo y dónde?
(nombre no válido actualmente, remplazado provienen de la ranchería Tehuichila, cercana
por Nannippus peninsulatus) (Carranza- al municipio de Zacualtipán (Carranza- El trabajo paleontológico realizado en el
Castañeda y Espinosa-Arrubarrena, 1994). Castañeda y Espinosa-Arrubarrena, 1994; estado de Hidalgo ha permitido registrar al
Castillo-Cerón et al., 1996). menos ocho diferentes especies de caballos.
Pocos años más tarde, Edward “Drinker” Los ejemplares fósiles han sido colectados
Cope, otro paleontólogo estadounidense, En 1902, el ingeniero mexicano Juan de en más de 30 localidades, cuyas edades van
realizó una visita a México, en la cual tuvo Dios Villarelo y el ingeniero alemán Emil desde la parte final del Mioceno hasta el
la oportunidad de estudiar algunos fósiles Böse reportaron la presencia de dientes de Pleistoceno tardío y se incluyen en alguna de
mostrados por el doctor Santiago Bernard caballo referidos a la especie Equus excelsus, las siguientes áreas: 1) Zacualtipán, 2) Tula-
(Castillo-Cerón et al., 1996). Entre 1885 y que habían sido recuperados de sedimentos Tepeji del Río, 3) Actopan-Ixmiquilpan, 4)
1886, Cope describió los materiales mexicanos ubicados en las cercanías de Atotonilco Santa María Amajac, 5) Pachuca-Tulancingo,

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6) San Agustín Tlaxiaca, 7) mexicanus (≈494 Kg) (Figura 2) tres especies fue relativamente
Zimapán y 8) Villa de Tezontepec (Carranza-Castañeda, 2006). común y se ha constatado
(Figura 2) (Castillo-Cerón et al., Los ejemplares de N. eurystyle también en localidades del norte
1996; Bravo-Cuevas et al., 2009). son relativamente escasos y y centro de México, a saber,
corresponden a un conjunto de en los estados de Chihuahua,
Los caballos más antiguos de dientes aislados. Por su parte, el Zacatecas, Guanajuato y
los que se tiene registro en registro de Astrohippus stockii Jalisco. Adicionalmente, se
Hidalgo datan de la parte final consiste en dientes aislados, conocen restos de N. eurystyle
del Mioceno (7–5.6 millones un húmero fragmentado y y “D.” mexicanus en Nayarit
de años). La evidencia fósil algunas falanges, mientras que y Michoacán (Carranza-
disponible corresponde a la muestra de “Dinohippus” Castañeda, 2006).
un caballo pequeño llamado mexicanus es abundante en
Calippus hondurensis (≈85 Kg) el sitio e incluye numerosos
y uno mediano “Dinohippus” dientes aislados y diferentes
interpolatus (≈228 Kg) huesos de las extremidades
(Carranza-Castañeda, (Carranza-Castañeda, 2006).
2006). Los materiales que se Asimismo, existe evidencia de
conocen para estas especies algunos dientes de N. eurystyle
incluyen únicamente dientes recuperados de la localidad
aislados, recuperados de la Tehuichila (Zacualtipán)
localidad Potrero Zietla (área (Carranza-Castañeda y
de Zacualtipán) (Carranza- Espinosa-Arrubarrena, 1994).
Castañeda y Espinosa- En México, la presencia de estas
Arrubarrena, 1994). Con
relación a esto, C. hondurensis
y “D.” interpolatus se conocen
también de algunas localidades
del centro de México, en los
estados de Guanajuato y Jalisco.
Adicionalmente, existen reportes
de C. hondurensis en Querétaro y
Zacatecas (Carranza-Castañeda,
2006).

Hacia los 5.6–4.5 millones de


años (durante la parte final del
Mioceno y en la transición hacia
el Plioceno), en la localidad La
Plegaria, cercana a la Ranchería
Las Golondrinas (área Tula-Tepeji
del Río), se registran tres especies
de caballos, dos de talla pequeña
Astrohippus stockii (≈127 Kg)
y Neohipparion eurystyle (≈131
Kg) y una grande “Dinohippus”

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El registro hidalguense de un gran número de localidades Hidalgo es valioso, debido a que Agustín Tlaxiaca (Bravo-Cuevas
caballos del Plioceno (4.5-2.5 en las áreas Pachuca-Tulancingo, aporta evidencia de una parte de et al., 2011). La técnica utilizada
millones de años) incluye dos San Agustín Tlaxiaca, Santa María la diversidad biológica ocurrida en dicho estudio se denomina
especies, una de talla pequeña Amajac y Villa de Tezontepec en el pasado geológico de lo que mesodesgaste y consiste en
Nannippus peninsulatus (< (Bravo-Cuevas et al., 2011). hoy es parte del centro de México. revisar la forma que adoptan
100 kg) y una de talla grande Es importante destacar que E. Estos registros han sido utilizados las cúspides de los molares en
Equus simplicidens (≈400 Kg) conversidens ha sido identificado en estudios paleontológicos función del tipo de alimento
(Carranza-Castañeda, 2006). en asociación con Bison en varias como base de comparación para consumido y la interacción
La muestra de N. peninsulatus localidades de Hidalgo, lo cual conocer el grado de similitud entre los dientes al momento
y E. simplicidens incluye, hasta sugiere de manera indirecta entre las faunas de mamíferos de masticar. La presencia de
donde se tiene conocimiento, que estos caballos habitaron el extintos en diferentes partes del cúspides altas y aguzadas se
solamente elementos dentales territorio hidalguense durante territorio nacional (Carranza- asocia al consumo de alimentos
recuperados de las localidades los últimos 36 mil años según Castañeda, 2006). Asimismo, la “suaves”, mientras que las
Las Arcinas (Actopan- la cronología de mamíferos presencia de algunas especies cúspides bajas y planas se asocian
Ixmiquilpan), Los Fragmentos y de Norteamérica. La especie de caballos ha sido importante al consumo de alimentos “duros”
Los Tepalcates (Tula-Tepeji del E. conversidens fue uno de los para estimar la edad relativa de o abrasivos. La realización de
Río), así como en sitios fosilíferos caballos más comunes en el las localidades fosilíferas y su este estudio permitió distinguir
en la región Santa María Amajac Pleistoceno de Norteamérica. En fauna asociada. Se sabe que los que E. conversidens consumió
(Carranza-Castañeda, 2006). México, los restos de esta especie fósiles de algunos caballos están principalmente alimentos
Existe también un registro de están presentes prácticamente a restringidos a un segmento abrasivos (tales como pastos
N. peninsulatus en la localidad lo largo y ancho del país (excepto temporal particular; tal es el que contienen sílice en sus hojas
Tehuichila (Área Zacualtipán) en los estados de Sinaloa, caso de Nannipus peninsulatus y o plantas contaminadas con
(Carranza-Castañeda y Espinosa- Durango, Colima y Tabasco). Equus simplicidens, cuyo alcance partículas de polvo y/o ceniza
Arrubarrena, 1994). En México, biocronológico se restringe a volcánica), mostrando evidencia
la especie Equus simplicidens Cabe señalar que existen los 4.5–2.5 millones de años. indirecta de la presencia de
estuvo distribuida ampliamente registros adicionales de Por lo tanto, la presencia de zonas de vegetación abierta en
en los estados de Baja California, elementos dentales de Equus estas especies en una localidad las áreas de estudio (Figura 3)
Guanajuato, Michoacán y Jalisco. sp. en localidades pleistocénicas indicaría una edad equivalente a (Bravo-Cuevas et al., 2011).
Por su parte, N. peninsulatus en las regiones Actopan- su alcance conocido.
solo se conoce en los estados Ixmiquilpan, Tula-Tepeji del A la fecha, los caballos
de Guanajuato y Michoacán Río y Zimapán. No obstante, En los últimos años, una parte de hidalguenses siguen siendo
(Carranza-Castañeda, 2006). la identidad específica de los la investigación paleontológica considerados en estudios
materiales es desconocida, por que involucra a los caballos taxonómicos y paleobiológicos.
Del Pleistoceno, en Hidalgo se lo que es necesaria una revisión hidalguenses se ha enfocado Lo anterior pone de manifiesto la
conoce únicamente a la especie detallada de los ejemplares en conocer la dieta de estos importancia de estos materiales
de tamaño mediano Equus para conocer a qué especie organismos. Lo anterior atiende y sugiere que la investigación
conversidens (≈285 Kg); sin pertenecen. a que la dieta proporciona paleontológica en Hidalgo sigue
embargo, la evidencia de esta información útil para inferir en una fase de desarrollo.
especie es la más numerosa y ¿Qué información de manera indirecta algunos
mejor representada en el estado. aportan los fósiles parámetros ambientales de un
La muestra fósil incluye cráneos de caballos y por qué sitio en particular. Por ejemplo,
completos, mandíbulas, series es importante su en un estudio se analizó el
dentales, numerosos dientes estudio en Hidalgo? desgaste en los molares de
aislados, vértebras y huesos de Equus conversidens de las áreas
las extremidades, colectados en El registro fósil de caballos en Pachuca-Tulancingo y San

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Figura 3.
Inferencia de la dieta de Equus conversidens. A) Patrón de mesodesgaste en un molar superior (modificado de Bravo-Cuevas et al.,
2011), B) Reconstrucción hipotética del ambiente en el que habitó E. conversidens hace poco más de 10 mil años.

Referencias Carranza-Castañeda, O. 2006. Late Tertiary fossil localities


in central México between 19º 23º N. En Carranza-
Bravo-Cuevas, V. M., Cabral-Perdomo M. A., Ortiz-
Castañeda, O. y Lindsay, E. H. (Eds.) Advances in late
Caballero, E., Priego-Vargas, J. 2009. La Megafauna del
Tertiary vertebrate paleontology in Mexico and the Great
Pleistoceno. En González-Rodríguez, K. A., Cuevas-
American Biotic Interchange. Universidad Nacional
Cardona, C., Castillo-Cerón, J. M. (Eds.). Los Fósiles del
Autónoma de México, Instituto de Geología y Centro de
Estado de Hidalgo. Universidad Autónoma del Estado de
Geociencias, México, p. 45-60.
Hidalgo, Pachuca p. 85-96.

Castillo-Cerón, J. M., Cabral-Perdomo, M. A.,


Bravo-Cuevas, V. M., Jiménez-Hidalgo, E., Priego-Vargas,
Carranza-Castañeda, O. 1996. Vertebrados Fósiles
J. 2011. Taxonomía y hábito alimentario de Equus
del Estado de Hidalgo. Universidad Autónoma del
conversidens (Perissodactyla, Equidae) del Pleistoceno
Estado de Hidalgo, Pachuca.
Tardío (Rancholabreano) de Hidalgo, centro de México.
Revista Mexicana de Ciencias Geológicas, 28(1): 65–82.
MacFadden, B. J. 1992. Fossil horses: systematics,
paleobiology, and evolution of the family Equidae.
Carranza-Castañeda, O., Espinosa-Arrubarrena, L. 1994.
Cambridge University Press, New York.
Late Tertiary equids from the State of Hidalgo, México.
Revista Mexicana de Ciencias Geológicas, 11 (2): 182–192.

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