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La muerte: Inspiración y Destrucción

Wilmar Antonio Zuluaga Arango

Ingeniería Mecánica

Literatura Latinoamericana

Orlando Araujo Fontalvo

21 de mayo de 2021

Barranquilla, Atlántico
La muerte: inspiración y destrucción.

En algún momento se ha pensado en el significado de la muerte, en qué sensaciones


logra causar en nosotros esta palabra. Es tan impredecible conocer de qué forma llegará el
día del adiós y aún más como partirán nuestros seres queridos. Sin embargo, para Horacio
Quiroga este tema no es de mucho tabú, pues en la mayoría de sus cuentos toca la ausencia
de la vida de tantas formas diferentes, en donde unas son más impactantes que otras, pero
aun así todas se resumen en lo mismo la pérdida y el dolor del ser amado a través del
sufrimiento.

Ahora bien, para Quiroga el sufrimiento estuvo acompañándolo a lo largo de su vida,


a sus seis meses de edad en un accidente infortunado perdió a su padre. Después de una
jornada de caza, al volver de una embarcación, se le disparó por accidente la escopeta delante
de su mejor amigo. Una escena similar a este suceso se puede ver reflejada en su cuento El
hijo. (Sin embargo, se dice que este cuento también refleja la angustia que tuvo el uruguayo
en un día de caza con su hijo). Tiempo después, su padrastro sufrió́ una embolia que al final
lo condujo a suicidarse, al igual que unos años más tarde su primera esposa también se auto
privó de la vida. Como si fuese poco, un día manejando un arma de fuego dispara a un íntimo
amigo y así muchas más catástrofes prescindieron en su vida. Por otro lado, el novelista vivió
durante un tiempo en la selva, la cual es fuente de inspiración para muchas de sus obras, ya
que aprendió el drama que suele darse dentro de este espacio al mismo tiempo en que
comenzó a experimentar tendencias autodestructivas, se dice que durante este periodo el
célebre le perdió el miedo a la muerte por lo cual en su instancia en la jungla paso desafiando
al destino.

Por otra parte, este escritor centra su momento literario en el siglo XX, sin embargo,
tiene una fuerte corriente influenciada por el modernismo de Edgar Alan Poe, por lo que sus
obras van en busca de imitar la realidad de lo observado y vivido, así como se busca transmitir
y describir las pasiones humanas, las debilidades, lo espiritual y lo físico. No obstante, este
escritor no tiene una corriente fija, puesto que en cada historia jugó con el dinamismo y la
renovación. De la misma forma el autor maneja los finales sorpresivos o inesperados, como
brevedad en sus relatos. Por esta razón, la naturaleza que tanto estudió es lo que le permite
crear escenarios llenos de agonía, Quiroga usa las descripciones del paisaje como en la época
del modernismo, pero con sus toques modernistas y góticos. Su forma de ver la muerte está
definida como los procesos necesarios por los cuales va a atravesar el ser humanos y sus
conflictos, los escenarios llenos de sufrimiento y muerte son mejor aceptados por los
personajes de Quiroga que por él mismo. Todos sus personajes mueren en escenarios fatales
sin ayuda, siempre haciendo un énfasis en los límites entre la naturaleza y el ser, resaltando
a la naturaleza sobre todo y todos. En los escenarios en que no hay naturaleza igual se
encuentra el terrible final de la muerte, esta obsesión con la muerte se remonta a todos los
escenarios en los que la vivió́ de cerca, para él es una situación más, solo que siempre la
relaciona con causas macabras. Historias con finales cerrados en las que desea plasmar el
valor de la naturaleza, la fragilidad del ser al lado de esta y el ineludible destino de fallecer.

Como es evidente, el autor, mostró mucho de su vida en todos los cuentos que
escribió, dando rienda suelta a mostrarnos una parte de su vida en donde, todos los malos
momentos y traumas por los que pasó, fueron centro de inspiración, expresando y dejando a
flor de piel todas sus emociones, siendo el miedo, el dolor y el malestar las sensaciones que
marcaron de forma contundente su influencia en el mundo literario. Para Jitrik, N. (1959) Las
muertes sirven para apresurar el proceso de su literatura que, gracias a estos accidentes, se
enriquece con una dimensión asustadora pero suficiente por sí sola. Así mismo era
reconocido por su característico matiz angustiante, logrando de esta forma unas obras
pesimistas, trágicas, inevitables y que absorben al lector. Quiroga obtuvo integrar lo siniestro
en su entorno diario, escondido en maneras que nadie imaginaria, inclusive en el interior del
ser. En sus historias lo tétrico y fatal está ligado con procesos físicos y químicos corporales,
por esa razón las alteraciones de los personajes generan emociones. Presentado el proceso
de madurez del uruguayo como autor y además como persona, comienza a hacer un auto
hallazgo y sus historias se tornan cada vez más íntimas, relata mucho de los traumas de su
niñez y otros de una vez que era maduro inconscientemente en sus historias, acercándose
cada vez más a un estado de tranquilidad en el cual finalmente mencionaba que había
encontrado la plenitud de la mente, construyendo historias con objetivos más bien
individuales que artísticos y perdiéndole el temor a el deceso. En casi todos sus cuentos en
que se refiere a animales, muestra un lado tierno, empático y respetuoso por los diferentes
seres que habitan en el planeta. Su horroroso final ha sido como el que explicaba en muchas
de sus historias, en soledad, dolor y miseria. Él no pone a sus héroes en un pedestal, es por
ello que concluye con las alucinaciones mortales y el constante círculo adicto en el cual se
mantienen otros personajes.

En la escritura de Quiroga se evidencia el uso de los colores para representar de


manera realista la naturaleza, se genera de manera repetitiva el factor sangriento para
referenciar la muerte, presenta el morbo hacia la violencia, terror y muerte como algo normal;
y a las enfermedades ya que son transgresiones del ser, como un argumento para justificar
las tendencias violentas. En 1917 Quiroga empieza a realizar un cambio en los colores que
siempre utilizaba. Empezó a utilizar blancos que causan cegueras y escarlatas sangrientos.

Quiroga sufría tendencias esquizofrénicas demostradas en las alucinaciones


constantes que poseía, en relación con sentimientos y situaciones traumáticas del pasado, su
hipersensibilidad llegaba a extremos, la literatura fue su forma de descubrirse como persona
y empezara a superar sus miedos. El creador usa anacrónicos temporales como por ejemplo
analepsias donde se crea una sensación de desplazamiento, produciendo que el lector se
envuelva más en la historia, lo que le permitió́ al escritor captar la atención de no solo adultos,
sino chicos. Otra de las propiedades usuales en medio de las historias es la aparición de la
selva en la narrativa, además existe ausencia de personajes femeninos adultos, que se puede
relacionar por la atracción del creador hacia damas mucho menores que él.

El camino para llegar a tu arte más que el simple hecho de llegar, siempre está
volviendo al tema de la necesidad de humildad por parte de los escritores para así́ poder
encontrar sus estilos. Quiroga consigue armonizar la fantasía en historias reales, sacudiendo
al lector con sus historias en las que cuenta su historia, consume el lector y lo lidera hacia el
horroroso final de la muerte. Conocer sobre este creador es primordial gracias a sus gigantes
aportes a la literatura, es necesaria la presentación de un gran exponente como este para poder
comprender la corriente modernista que tendría muchos de sus antecedentes en el
modernismo de Quiroga. El autor abrió́ un sinnúmero de posibilidades para experimentar de
formas diferentes con la literatura y la forma de contar una historia, hace sentir a cualquier
persona que lea su decálogo capaz de escribir arte, siempre se dedicó́ a motivar a los
escritores que venían luego de él para que el legado de la literatura no muriera o retrocediera.

Finalmente, Quiroga, en cada cuento busco transmitir todos los traumas los cuales lo
acechaban en su vida, No obstante, fue la literatura la que ayudó a expresar sus sentimientos.
En historias como A la deriva podemos encontrar las principales características de la vida de
este autor, centrándonos en el lugar donde suceden los hechos que es una selva, la cual puede
ser la completa realidad de sus años sumergidos en ese lugar y el cual es de su total atención.
Así mismo el relato finaliza por la muerte del protagonista después de una larga agonía
concluida por la tristeza y soledad. Por ende, se puede decir que para Quiroga la muerte era
la única forma de encontrarse con el alma humana y dar fin al sufrimiento y el tormento que
se vive. Por otro lado, en sus narraciones busca llevar de la mano al personaje principal del
comienzo a final, en otras palabras, Horacio centra todo el relato en el o los protagonistas
principales. Sin embargo, los personajes son un reflejo del carácter frustrado y desabrido del
autor en donde demuestra cada vez más esta propensión hacia lo anormal, la locura y la
muerte. Su única fe valedera fue en un eterno amor. Crow, J. A. (1939).
Referencias y bibliografía.

Lafforgue, Jorge, “Introducción biográfica y crítica”, En: Quiroga, H., Los desterrados y
otros textos, Madrid 1990, p. 27.

Collard, A. (1958, septiembre), “La muerte en los cuentos de Horacio Quiroga”, en


Hispania, vol. 41, núm. 3, pp. 278-281.

Francisco Torres, V. (2013). Horacio Quiroga.

Crow, J. A. (1939). La locura de Horacio Quiroga. Revista Iberoamericana, 1(1), 33-45.

Jitrik, N. (1959). Horacio Quiroga: una obra de experiencia y riesgo.

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