Trabajo de Historia del Arte

Arte en el antiguo Egipto selección ’Primera Morada de los Muertos’

Clara Machado

5to Arte

Liceo de Lascano ’Maestro Adolfo Rodríguez Mallarini’

Profesor: Reynaldo Carrero

 Las primeras moradas de los muertos: los mastabas de Abydos y Saqqara.

En el III milenio a.C en Egipto se fundaron ciudades a lo largo del Valle y del Delta del Rio Nilo,
allí los proyectos urbanísticos se concentraron en la creación y mejora de las ciudades de sus
muertos.
Los estilos arquitectónicos tenían un claro mensaje ideológico, que era que el faraón seguiría
ejerciendo su poder en el mas allá.
Para los faraones eran creadas dos tumbas, haciendo referencia a que luego de su muerte liderarían
ambas tierras unidas. La primera tumba era simbólica, debido a que allí no se encontraba el cuerpo
del faraón solo su nombre, y esta se encontraba en el cementerio real de Abydos. Abydos era la
lejana ciudad del Alto Egipto de antiguo culto a Osiris, de la que era originaria la I Dinastía. La
segunda tumba, donde se encontraba el cadáver del faraón, estaba en Saqqara. Saqqara era la
necrópolis de la capital Menfis.
La arquitectura funeraria mas utilizada desde el Periodo Arcaico es la mastaba. Esta era una
edificación troncopiramidal con paredes en talud y base rectangular, orientada en torno a un eje
norte-sur.

La mastaba mas antigua del cementerio de Abydos es la del mítico rey Narmer y la primera erigida
en la necrópolis de Saqqara corresponde a Aha. Las mastabas también suponen un paso
fundamental en el progresivo avance hacia la monumentalidad, la complejidad de las estructuras
subterráneas y el uso de la piedra como material constructivo, que culminara en las grandes
pirámides del Imperio Antiguo.
Las tumbas mas primitivas eran fosas modestas, ovaladas al principio y mas adelante rectangulares,
excavadas a pocos metros bajo tierra y divididas con paredes de adobe en varias salas. La
habitación principal era la cámara funeraria, rodeada de otras salas donde de dejaba el ajuar y los
víveres, los espacios se cubrían con vigas de madera y tablas y el volumen sobrante hasta la
superficie con grava y guijo. Sobre esto se levantaba la mastaba hecha de adobe, a imitación de la
casa o palacio del difunto, la entrada se hallaba al este y se marcaba con la colocación de dos
estelas. Las paredes de la fachada de las tumbas de Saqqara estaban muy decoradas con fuertes
colores, por el contrario, las tumbas de Abydos eran lisas y de menor tamaño.
En los primeros tiempos en el interior se ubicaba un nicho
en la cara oriental, que mas tarde se
convirtió en capilla para que los familiares del difunto
dejaran sus ofrendas. Se adornaron con una o dos falsas
puertas en el muro oriental, decoradas con relieves
policromados, por las que el Ka del muerto podía
entrar y salir libremente.

Estos espacios estaban rodeados por salas que tenían la función de almacén, donde estaban los
objetos menos valiosos.
Dentro del muro protector se excavaban tumbas mas pequeñas de paredes lisas para las mujeres y
esclavos del muerto, sacrificados con la intención de que sirvieran a su señor en el mas allá.
Con el paso del tiempo se fueron enriqueciendo las salas con mas salas y decoraciones, algunas de
las cámaras mas lujosas estaban revestidas con piedra caliza, granito o techadas con cedro libanés.