Está en la página 1de 2

Algunos Padres de la Iglesia y el culto a las

imágenes
Clemente de Alejandría (A. D. 200) dice: “Es una necedad extrema rogar como dioses a
aquellos que no son dioses, pues que hay un solo buen Dios; nosotros y los ángeles
suplicamos únicamente a Él “ (Contra Celsum, v.4, Mg 11, 1185). Y en otro lugar: “Toda
imagen o estatua debe llamarse ídolo porque no es otra cosa que materia vil y profana, y
por eso Dios, para quitar de raíz la idolatría, ha prohibido en su culto cualquier imagen o
semejanza de las cosas que están en el cielo o en la tierra, prohibiendo igualmente su
fabricación; y es por esto que nosotros los cristianos no tenemos ninguna de aquellas
representaciones materiales”.
Orígenes (A. D. 230). “Los ángeles siguen con interés tu salvación. Han sido dados como
ayudadores del Hijo de Dios; pero toda oración que se dirija a Dios, ya sea rogativa o en
acción de gracias, debe elevarse hacia Él por Cristo, el Sumo Sacerdote, quien está sobre
todos los ángeles...los hombres no conocen a los ángeles y, por lo tanto, no es razonable
que se dirijan a ellos en lugar de dirigirse a Cristo, a quien conocen. Aunque tuviésemos el
conocimiento de ellos, no nos sería permitido dirigir nuestras oraciones a ningún otro ser
sino a Dios, el Señor de todo lo creado, quien es suficiente para todos, y venimos también
a Él por nuestro Salvador, el Hijo de Dios”. Y también: “Nadie de nosotros confié en su
padre justo, en su santa madre, en sus castos hermanos. Bienaventurado el hombre que
pone su esperanza en sí mismo y en el camino recto. A los que confían en los santos diré
como amonestación: “Maldito el varón que confía en el hombre” (Jeremías 17:5), y: “Mejor
es esperar en YHVH que esperar en el hombre” (Salmos 118:8). Si fuera necesario
confiarnos a alguien, dejemos a todos los demás y confiemos en el Señor”. Ezequiel 17.
Homilía IV, MG 13, 702-703. 

San Cipriano declara: “¿Para que postrarse delante de las imágenes?. Eleva tus ojos al
cielo y tu corazón; allí es donde debes buscar a Dios”. Ad Demetr. Pág.191. 

San Agustín (A. D. 389). “Que no sea nuestra religión el culto de las obras hechas por
mano de hombre...que no sea nuestra religión el culto de los animales. Pues son mejores
que ellos los más ínfimos hombres a quienes, sin embargo, no debemos rendir culto. Que
no sea nuestra religión el culto de los difuntos, porque si vivían una vida santa, es
imposible creer que deseen tales honores, antes desean que demos nuestro culto a Aquel
a quien debemos ser participantes con ellos de la salvación. Por lo tanto, tenemos que
rendirles honor imitándolos, y no rindiéndoles culto religioso”. De vera. Rel,. LV, 108; Ml
24,169 

Y también... 

“La única imagen que nosotros debemos hacernos de Cristo es tener siempre presente su
humildad, su paciencia, su bondad, y esforzarnos para que nuestra vida en todo se
parezca a la suya. Aquellos que andan en busca de Jesús y de sus apóstoles pintados en
las paredes, lejos de conformarse con las Escrituras, caen en el error” De consens, Evang.
Lib.1, cap.10 

San Jerónimo. Nos relata una carta de san Epifanio en la cual este santo narra: “En un
sitio de la campaña que yo visité, hallé colgado en la puerta de la iglesia un velo sobre el
cual se hallaba pintada la imagen de Cristo, y otra de un santo, y no bien vi que, a
despecho de la Sagrada Escritura, la imagen de un hombre estaba colgada en la iglesia de
Cristo, yo corté aquel velo, aconsejando al sacristán que lo usara más bien para la
sepultura de algún pobre”. Obras de San Jerónimo, tomo II, carta 52. 

Eusebio de Cesarea dice: “que le repugna la sola idea de que pueda haber pinturas en los
lugares destinados al culto”. Eusebio. Epis. A Constancia Augusta. 

También podría gustarte