Análisis crítico sobre la aplicación de la amonestación escrita como sanción,

como medio preventivo y como mecanismo de seguimiento del desempeño

de la labor del servidor público

Presentado a:
Especialista: Esperanza Penagos Ruiz

Presentado por:
CD Glenllyr Yulibeth Romero Cárdenas
CD Norvey Mora Suarez
CD Jhon Steven Atehortúa

Policía Nacional de Colombia

Dirección Nacional de Escuelas
Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula Santander

Pregrado en Administración Policial

Derecho Disciplinario

Bogotá
2020
 Los derechos humanos juegan un papel fundamental en el hombre ya
que, su objetivo es mostrar las acciones inteligibles, siendo valores irreductibles
que proyectan la libertad para tomar decisiones y fundamentar un fenómeno
jurídico en el que encontramos la vida, la religión, la razonabilidad, la
sociabilidad y los demás derechos que se encuentran plasmados en la
Constitución política de Colombia. Estos derechos no tienen un orden jerárquico
toda vez que las personas pueden agotarlos para alcanzar la felicidad mediante
actos de razonabilidad, necesidad y proporcionalidad, distinguiendo los actos
razonables de los irrazonables (correcto e incorrecto), los cuales dictan las
nociones fundamentales de todo lo que uno razonablemente puede querer,
hacer, tener y ser.
La norma se caracteriza por ser impersonal y abstracta la cual busca
regular los comportamientos de las personas y determinar los límites de los
derechos humanos, buscando de forma razonable y proporcional el
cumplimiento de los derechos de los individuos, y de esta forma salvo
guardarlos y protegerlos de toda posible vulneración, es decir, las leyes no
limitan los derechos, si no que los delimitan, ante esto, el ser humano tiene el
deber de cumplirlos y hacerlos cumplir siempre que su interpretación se
encuentre en los principios legales , la ley expedida por la autoridades
competentes está encaminada a la protección, es así como el Estado garantiza
el deber que tiene como fin esencial en cuanto a los derechos de todas las
personas, de igual forma garantizar mediante un control constitucional el
respeto por los procedimientos estandarizados y la legalidad de los mismos.
Estas interpretaciones permiten orientar las acciones de los
funcionarios de la policía, quienes están legalmente constituidos para hacer
cumplir los fines del Estado, no obstante, existe una variedad normativa
mediante la cual se regula los comportamientos de los uniformados al interior
de la institución con el ánimo de determinar las acciones preventivas y
sancionatorias, a través de unos mecanismo de seguimiento de desempeño o
disciplinarios que dan lugar como medio preventivo y correctivo ante las
acciones que van en contra de la disciplina y comportamiento del personal
uniformado, sin que esto represente una acción inconstitucional que viole el
debido proceso que debe tener toda persona frente a un proceso disciplinario.
Los medios para causar la disciplina hacen referencia a los llamados de
atención que es aplicado mediante en artículo 27 de la ley 1015 del 2006,
donde se busca orientar los comportamiento del personal uniformado de la
Policía Nacional mediante trabajos escritos, trabajo pedagógico, asistencia a
cursos de formación ética, sin que de ello constituya una acción disciplinaria,
haciendo parte de medios disuasivos, siendo aquellos que no afectan la función
pública, y los correctivos donde hace parte las conductas en las que incurren
los funcionarios, descritas en la ley anteriormente mencionada. Es de anotar
que, para esta ley, la responsabilidad de la disciplina es de todos y se ejerce a
través de dos componentes de cumplimiento, el primero, los derechos y como
segundo los deberes. De este modo se enmarca la disciplina y comportamiento
en los lineamientos de la institución, sin embargo, existen funcionarios de la
institución que, ante el desconocimiento e interpretación de la norma, la cual
actúa de forma inequívoca y alineada a la constitución política, quebranta el
artículo 29 de esta carta magna, en el que se contempla “el debido proceso se
aplicará a toda clase de actuaciones judiciales y administrativas”. Haciendo
alusión a uno de los derechos fundamentales de las personas, en el momento
en el que se ejerce sin veracidad los fundamentos jurídicos que dan lugar a la
utilidad del principio de proporcionalidad al o soporte aplicar la norma, siendo en
este sentido la ponderación entre los derechos humanos relevantes donde cada
uno toma un peso y valor frente al otro, para así llegar a la armonización de
derechos vulnerados. El principio de necesidad donde mide mediante una
escala de costo – beneficio, permite orientar al funcionario en la toma de
decisiones al momento de resolver conflictos de interés, y por último la
razonabilidad, dando la oportunidad al funcionario para que se determine a
través de la razón es necesario o indispensable el medio empleado.
Siguiendo como ruta estratégica en forma jerárquica la pirámide de
Kelsen, en el que se estable que las normas expedidas son un sistema jurídico
escalonado, se busca proteger los derechos humanos que tiene toda persona
sin que de esto se derive una mala interpretación de las normas. Siguiendo esta
línea, existe una norma que orienta el mantenimiento de la disciplina y
comportamiento de la institución y se realiza a través del decreto 1800 del 2000
“por el cual se dictan normas para la evaluación del desempeño del personal
uniformado”, esta busca establecer y valorar los logros del personal que integra
la Policía Nacional mediante un periodo determinado, utilizando anotaciones de
seguimiento, para que de este modo sea posible crear perfiles ocupacionales y
profesionales que permita cubrir las necesidades de auto realización, necesario
en el desarrollo de competencias dentro de la Policía Nacional y del personal
que la integra la institución.

Es así, que dando aplicabilidad a este decreto y con el fin de dar un

proceso acorde a las leyes y a la constitución, mediante la resolución 04089 de
2015 se busca regular los comportamientos a través de ITEMS de medición de
la calificación los cuales están alineados a las anotaciones de seguimiento,
tomando como guía de orientación a los evaluados, logrando así, un
direccionamiento estratégico para la clasificación según los cargos y
competencias de los policiales. De igual forma, se pretende estandarizar el
procedimiento al que está sujeto el evaluador que por su función y cargo
compete brindar el seguimiento al realizar anotaciones en los formularios de
seguimiento, cabe resaltar que para dicho proceso, se parte de la premisa que
hace referencia a que la norma está sujeta a los derechos humanos,
blindándolo mediante instrumentos jurídicos que se encaminan al debido
proceso, en la que el libre albedrio se ejerce por medio de la razonabilidad y la
proporcionalidad que permita dar interpretación a la norma y la protección de
los bienes jurídicos de las personas.
En ese sentido los uniformados que por su cargo les compete dar
aplicabilidad a esta norma con el fin de mantener la disciplina y el
comportamiento por las acciones de los uniformados, debe estar sometido al
uso de razonabilidad a partir del momento en el que se pretenda afectar la
imagen, dignidad y buen nombre del personal, mediante un control
constitucional que examina específicamente la relación entre los medios y los
fines de una medida. Pero no se limita única-mente a esto; además, se debe
analizar la constitucionalidad de la finalidad, ya que no cualquier finalidad
propuesta es compatible con la Constitución, de modo que permita el logro de
los objetivos constitucionales. Así mismo, debe determinar la posible
vulneración de otros derechos con las acciones que se está tomando en pro de
hacer cumplir una norma, pero que puede afectar el bien humano protegido,
siendo la ruta para que de manera se acoja a la máxima eficiencia
constitucional y así lograr la armonía entre los deberes y los derechos, es así
como es válido realizarse las siguientes preguntas para identificar dicha
medida.
 ¿La finalidad es constitucional?
 ¿Es socialmente relevante?
 ¿Es necesario o indispensable el medio empleado?
 ¿Es proporcional la medida con respecto a los fines?
 ¿Respeta el contenido esencial de los derechos?
 ¿La adecuación de la norma’
 ¿La necesidad?
Siguientes los hechos presentados en la tutela T 152/17 en el que es
inmerso en la aplicación de un medio correctivo para encausar la disciplina por
parte de un señor Capitán en el que repercute contra el uniformado, toda vez
que, esta tiene una disminución cuantitativa en la evaluación y calificación de su
formulario de seguimiento con disminución, por una conducta en la que los
supuestos toman relevancia apartando la razonabilidad y proporcionalidad que
daba lugar al parecer incumplimiento de una orden, pero desde una perspectiva
en la que prevalecía la función policial en la que se aseguraba la vulneración de
la función pública del servicio de policía, ante este dilema, el evaluador no
denotaba la vulneración del principio de laicidad del que Colombia como Estado
social de derecho acogió y por ende hace parte de praxis de las personas al
libre albedrio y libertad de culto. En este caso, el patrullero como uniformado de
la policía Nacional, al afectar uno de sus bienes jurídicos reclama el
restablecimiento del mismo, determinado por parte del comandante, como acto
de insubordinación y es así como procede a llamar la atención de forma verbal
por parte del señor Capitán quien le informa y efectúa este registro negativo,
contrariando un debido proceso para el uniformado, dado que se ha tomado un
correctivo al realizar el llamado de atención, afecta el principio “non bis in idem”
toda vez que se tomaron correctivos diferentes por la misma falta. Es así como
las actuaciones no se encuentran enmarcadas en la norma, ante la visible
vulneración de derechos, así como la insuficientemente contextualización de
aplicabilidad de la norma afectando de manera grave el debido proceso
administrativo al que toda persona tiene.
En conclusión, para lograr una armonía entre los derechos y los deberes
como agentes garantes de los mismos, en el respeto por la persona o
subalternos, se debe extenuar los recursos de interpretación estableciendo los
motivos fundados que dan lugar a la acción disciplinaria, sin que esto viole el
debido proceso de las personas, o que tomen una vía inconstitucional por la
afectación a un bien jurídico tutelado. Si bien, la ley 1015 del 2006, el decreto
1800 del año 2000 y la resolución 04048 del 2015, buscan unos mecanismos
para encausar los comportamientos y la disciplina de los uniformados, no se
puede escoger una razón o motivo que interponga la vulneración de otro
derecho, por tal razón no se basa en la aplicación de la norma taxativamente,
toda vez que al realizarse se puede afectar a la persona o la constitución, y por
el contrario mediante la aplicabilidad de la razón y la objetividad de la
interpretación del lugar a una solución que mida el costo y el beneficio de la
acción aplicada , por consiguiente, se encuentran en la capacidad y facultad de
realizar este examen de valoración mediante motivación fundada en la
interpretación de la norma que día a día conocen y que al aplicarse delimitan el
accionar y la discreción tanto legislativa como judicial.