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NADEL

TEORÍA DE LA ESTRUCTURA SOCIAL


1. CUESTIONES PRELIMINARES

Aspira a una teoría en el sentido de esquema conceptual o estructura lógica: proposiciones que
sirven para clasificar los fenómenos, reducirlos analíticamente a sus unidades relevantes o
indicar sus interconexiones, definiendo reglas de procedimiento.

El término estructura social ha sido aplicado a los rasgos que intervienen en la constitución de
alguna sociedad, siendo sinónimo de sistema, complejo, esquema, organización, tipo, conjunto.
A la interrelación o disposición de partes de una sociedad y, en algunos casos, de una cultura.

Estructura social

- Sobre la naturaleza de sus partes:


o Radcliffe-Brown:
▪ 1ero: “Los componentes de la estructura social son seres humanos” y
“La estructura es una disposición de personas en relaciones
institucionalmente definidas y reguladas”.
▪ Luego: “La estructura social consta de seres humanos no considerados
como organismos, sino en tanto que ocupan posiciones en una
estructura social”.
o Evans Pritchard: Restringe estructura social a las interrelaciones de grupos,
excluyendo las relaciones puramente interpersonales.
o Leach: “La estructura social, en situaciones prácticas, consiste en un conjunto
de ideas acerca de la distribución del poder entre personas o grupos de
personas”.
o Levi Strauss: “La estructura social no puede en absoluto reducirse al conjunto
de las relaciones sociales describibles de una sociedad dada”.
- Los datos empíricos (objetos, hechos, serie de hechos) presentan una estructura en la
medida en que presenta una articulación definible, una disposición ordenada de
partes. → La estructura social es un elemento de la realidad empírica (a diferencia de
Leach y Levi Strauss).
- Contraste con función: adecuación respecto de alguna efectividad previamente
definida.
- Contrasta con contenido, carácter material, carácter cualitativo → El carácter concreto
de las partes que componen una estructura puede cambiar sin alterar la identidad de
la estructura.
- Estructura significa una disposición ordenada de las partes que puede tratarse como
trasponible y relativamente invariante, mientras que las partes mismas son variables.
- Las sociedades constan de hombres que pertenecen a ellas en virtud de las reglas bajo
las cuales se encuentran, imponiéndoles modos determinados y regulares de conducta
entre ellos (relaciones), los cuales son repetitivos en el sentido de que se aplican a
poblaciones sucesivas.
- Cuando identificamos una relación, hacemos una abstracción de los modos de
comportamiento, cualitativamente variables, para conseguir un aspecto invariante, que
es la ligazón entre personas significada por todos esos modos diversos. Sin embargo,
sigue siendo necesario distinguir entre tipos de relaciones de un modo cualitativo, por
sus fines, emociones, etc. (separar amor de amistad, etc.) Cada relación tiene sus
“representaciones concretas” variables entre los individuos.
- La investigación social es un estudio de regularidades y no de accidentes.
- Los individuos llegan a ser actores en una relación determinada en virtud de alguna
orden, tan invariante como las relaciones que dependen de ella. Hablamos de
individuos que desempeñan roles.
- Si las relaciones, en virtud de roles, disponen y ordenan a los seres humanos que
constituyen la sociedad, la colección de relaciones existentes tiene que ser ella misma
ordenada. La naturaleza del orden de las relaciones tiene que corresponder a algo del
tipo de un sistema, red o esquema.
- Así, “llegamos a la estructura de una sociedad abstrayendo de la población concreta y
de su comportamiento concreto el esquema o red (o sistema) de relaciones que
prevalecen entre los individuos en su capacidad de desempeñar los roles unos
respecto de los otros. → dificultad metodológica: presupone una adecuada teoría de
los roles. Se propone hacerla.
- Toda sociedad contiene en su seno réplicas de sí misma, más pequeñas y simples:
secciones, segmentos, subgrupos. La interrelación entre subgrupos es un caso especial
del carácter ordenado de las relaciones en virtud de roles.
- Esquema (distributivo): toda distribución ordenada de relaciones sobre la base
exclusiva de su semejanza o desemejanza. Mejor ejemplo: sociedad segmentaria de
Durkheim, caracterizadas por la repetición de agregados iguales, como clanes. Todo
grupo o subgrupo consiste en un área de relaciones limitadas → si se repiten los
grupos, se repite la distribución de las relaciones. En los límites de los grupos las
relaciones serán sustituidas por interacciones entre los componentes de una sociedad
→ red.
- Red: entretejimiento de relaciones por el cual las interacciones implícitas en una
relación determinan las que ocurren en otras relaciones. Eslabonamiento o
interrelación entre las relaciones entre individuos en virtud de roles. Le interesa su
coherencia y su cierre, su equivalencia con un sistema.

2. PROBLEMAS DEL ANÁLISIS DEL “ROL”

“Rol” designa los diversos papeles que los individuos desempeñan según la expectativa y
“orden” social. Su utilidad reside en ser un concepto mediador entre la sociedad y el individuo,
donde el comportamiento individual se convierte en conducta social. En ella las cualidades y
tendencias distribuidas en una población se traducen en atributos diferenciales que son
necesarios para ejemplificar las normas sociales imperantes.

Instituciones: Frecuencias de comportamiento sobre las que descansa la sociedad. Modos de


acción institucionalizados. Constituidas por fines, expectativas, derechos, deberes, etc. Si bien
se presentan en el comportamiento (o conducta) de individuos concretos, son también
independientes de ellos. Siguen funcionando con un personal siempre renovado (por factores
biológicos en última instancia). No suponen necesariamente la presencia de individuos en
tanto seres humanos plenos, sino sólo una parte de su individualidad y solo ciertas de sus
cualidades.
Rol no refiere a seres humanos concretos sino a individuos concebidos como haces de
cualidades distintivas, que son las que existen y se requieren en las varias tareas, relaciones,
etc., según las frecuencias de comportamiento concretas con las cuales el individuo tiene que
obrar.

Rol: concepto de tipo o de clase, que uniforma y reúne a cierto número de seres humanos
reales y existentes, en virtud de que tienen en común ciertas propiedades (contingentes, es
decir, inevitables, fuera del control de los individuos, o de realización). Rol refiere a
comportamientos diferenciales, y a las características por él constituidas.

Los roles se concretan sólo dentro de un marco de interacción: sus caracteres de conductas
suponen además del modo de comportamiento del actor, el de otros respecto de él.

El concepto de rol refiere a una conformidad normativa: los atributos compartidos se


suponen consecuencia de las leyes de la sociedad.

El concepto de rol requiere de la presencia de una serie de caracteres conexos.

Los roles difieren entre culturas.

El concepto de rol debe suministrar una categorización de los seres humanos que sea
sociológicamente relevante.

Los roles implican atributos ulteriores de naturaleza convencional y normativa. Todo auténtico
rol tiene un efecto de halo.

Hay graduaciones distintas de generalidad de los roles.

Los roles y los cuasi roles (status) se incluyen en su definición de estructura social.

Cuasi roles (status): meras profesionalidades, conjuntos concretos de derechos y obligaciones


que competen a personas. Es susceptible de elaborarse en un rol. Todo rol se funda en un
status. Se da como inserto en un cuerpo de conocimiento (norma, imagen mental) mientras
que el rol representa la ejecución de determinado derechos y obligaciones, un cumplimiento.

Los roles no están presentes como entidades totales, capaces de poner sumariamente en
posición a los actores. El investigador puede encontrarse con la necesidad de componer el rol a
partir de sus fragmentos. Los atributos del rol se implican recíprocamente. Cualquier atributo
funciona como indicio de los demás, aunque hay dos más efectivos:

1. Atributo constituido por los signos diacríticos implícitos en el comportamiento del rol.
(tipo de vestimenta, inisgnias, reglas de etiqueta, gestos) Distinguen a las personas
situadas en los roles.
2. El nombre del rol: en forma de referencia o de títulos habilitantes.
3. Las situaciones en que se ejerce el rol también pueden dar pautas. (aula del docente)
Un atributo puede mostrarse en situaciones distintas (maestro actuando
didácticamente dentro y fuera de la escuela ‘efecto halo’) o pueden actuar dos
atributos distintos de la serie del rol en situaciones distintas (madre cariñosa en el
hogar y agresiva para defender a sus hijos).

Estructura interna de los roles:

- Serie de atributos interconexos que constituyen en su totalidad el carácter de un rol.


- Toda serie de rol tiene una estructura definida de tipo jerárquico. Los diversos atributos
ocupan lugares de relevancia gradual. 3 grados principales:
o Facultativos: su ausencia o cambio no afecta la percepción o efectividad del rol
en la realización. Susceptibles de otras posibilidades alternativas.
o Relevantes: Su variación o ausencia produce una diferencia en la percepción o
en la efectividad del rol. Llevan a una actuación imperfecta.
o Básico o Axial, Pivote: Su variación o ausencia altera toda la identidad del rol y,
por tanto, la interacción que normalmente provocaría su actuación. Implican el
resto de la serie.

Consideraciones metodológicas:

- Identificación de los Pivotes: referirse al contenido semántico del nombre convencional


del rol. Los nombres son símbolos expeditivos y abreviados del conjunto de
propiedades que se supone posee la entidad nombrada. El nombre del rol es
prescriptivo, y ocupa el lugar de la norma del rol con su tolerancia concreta. Cuando un
actor falla en su rol, se lo sanciona con la recusación del nombre de su rol. “Vos no sos
un padre”. No todos los nombres admiten esta identificación, sólo los que guardan la
propiedad rectora:
o Tienen una estructura semántica correctamente informativa
o La propiedad nombrada puede ser tomada como paradigma de la propiedad
básica del rol.
- Las propiedades rectoras nos suministran la base sobre la que se implican las
características ulteriores. Nos interesan porque contemplamos los roles como modos
de actuar adjudicados a individuos, por las normas de la sociedad.

Taxonomía de roles

1) Rol de reclutamiento: La propiedad rectora es contingente, es decir, es un estado


inevitable o fortuito en el cual se encuentran los individuos. Las características
ulteriores (todos los demás atributos de la serie) son consecuentes o concomitantes
(edad avanzada acarrea tales responsabilidades).
2) Rol de realización: La propiedad rectora es un atributo de conducta activo o pasivo que
los individuos son libres de escoger como finalidad u objetivo. Las características
ulteriores están implicadas por ella, ya sea como precondiciones necesarias (incluye el
reclutamiento), ya sea como consecuentes y concomitantes (como en el caso en que el
sacerdocio requiere el celibato y una vida decorosa y promete un status social
elevado).

En los roles de reclutamiento opera el principio de acomodación, en la cual la sociedad


reconoce y absorbe la variedad de seres humanos contenidos en ella, proporcionándoles
lugares legitimados para toda esa variedad.

En los roles de realización opera el principio de atribución, de deseabilidad, donde el incentivo


hace posible la atribución y asegura así que los roles necesarios quedes satisfechos. Subyace la
idea de que ciertas exigencias o necesidades sociales se satisfacen con los recursos humanos
disponibles. Aspecto económico de los roles.

Ambos principios se solaparán frecuentemente pues las cualidades contingentes de los


individuos incluyen dotes y capacidades que la sociedad deseará utilizar y acomodar.
Habrá roles imposibles de incluir en esas categorías (hermano político, enemigo, burócrata).

Formas de transición o complicadas entre ambos tipos de roles

Hay roles que pueden entenderse como de las dos categorías. (Se puede desear ser padre y
puede a la vez realizar acciones prácticas para realizar tal fin).

Los roles de parentesco suelen eliminar en la práctica el aspecto de realización. Pues no se


puede desear ser hermano del padre, o bien no puedes hacer nada para hacerlo.

Hay comportamientos relevantes que no son comportamientos de rol. También el


comportamiento puramente individual tiene su lugar en el dispositivo, siempre presente, de
categorías y convenciones de rol, y por fuerza se ve afectado por el mismo.

Comparemos la asunción de un rol con un conjunto de reglas que entran en acción siempre
que un individuo evidencia el deseo de desarrollar el juego en cuestión, o el hecho de haber
empezado fácticamente a desarrollarlo.

La firmeza o constancia generales con que se aplica el conjunto de reglas corresponde a la


institucionalización de los roles en el sistema social.

Hay roles que no tienen jerarquía precisa, no tienen pivote. Indican un carácter general, una
secuencia de atributos que se hace visible mientras se realiza el rol. Amigos.

Aspecto secuencial de los roles: preguntar.

Proceso de cibernesis recíproca, por el cual la actuación de un rol guía o condiciona la


actuación del otro.

6. Estructura, tiempo y realidad

El análisis estructural implica la abstracción de los rasgos relativamente invariantes de las


situaciones sociales (roles y sus interrelaciones). Presta a los datos sociales un superior grado
de comparabilidad. Los hace más fácilmente cuantificables. Hay datos más difíciles de
cuantificar: aquellos para los que hay que buscar índices de estimación social o deferencia,
signos que indiquen la robustez de creencias, lealtades os sentimientos, o indicios cualesquiera
de estabilidad de relaciones.

Distingue:

1) Estructura social: producto final del análisis estructural.


2) Procedimiento analítico.

Sobre la incapacidad del análisis estructural de recoger la dimensión temporal

Es un problema inexistente.

Estructura social: las posiciones de los actores los unos respecto de los otros, la “red” de sus
relaciones.

Esta definición sugiere estados estáticos, como si las posiciones fueran fijas y atemporales y las
relaciones continuas. Sin embargo, implica al tiempo en tanto las posiciones en términos de
secuencias de comportamiento, consumen tiempo y se enmarcan en una escala temporal. A su
vez, las relaciones se extraen de acciones sucesivas y repetitivas, donde interviene el tiempo.
Invariancia y continuidad refieren a recurrencia y repetitividad. La estructura social es
implícitamente estructura de acaecimiento.
Dos respectos en los que la dimensión temporal es condición explícita de la estructura social:

1) Roles o posiciones que sólo pueden definirse en términos dinámicos, que indican
movimiento y cambio posicional. Roles donde siempre hay expectativa de renuncia o
abandono (novia que será esposa). Roles y relaciones en cuestión que se autoliquidan.
Sus actores los consideran válidos durante un tiempo, y precursores de otros roles.
2) Las relaciones de conflicto que implican un cambio o reajuste anticipado. Competencia
y rivalidad. No sólo conflictos personales sino conflictos intrínsecos a roles
preexistentes, determinados por la constitución institucional de la sociedad, en los
cuales las personas se encuentran en vueltas en virtud de los roles dominantes. Ej: los
derechos de un hombre sobre la mujer, contrapuestos a las obligaciones de ésta
respecto de la familia. Lo mismo ocurre entre grupos. Los conflictos llevan a cambios
en las relaciones futuras (autoliquidación).

Puede haber hiatos reales cuando hay roles y relaciones que faltan en un momento (ej. Que
falten dirigentes). Pero pueden volver a presentarse luego puesto que pertenecen al repertorio
permanente de las sociedades.

Puede haber momentos en que dos conjuntos de relaciones ocupen el lugar que antes ocupaba
sólo uno. (ej. Cuando se escinden grupos de parentesco). Pero siguen perteneciendo al
repertorio permanente.

Roles y relaciones se distribuyen constantemente entre la población. Las personas entran y


salen de roles y relaciones, de tal modo que también éstos y éstas llegan y pasan, dejan de
darse y vuelven a empezar. Las secuencias de acaecimientos que quedan supuestas son
infinitamente repetitivas en la sociedad, reproducen configuraciones de elementos que son
laxamente idénticas (actores en relaciones, entrelazamiento de relaciones), son, en
sustancia, algo que puede situarse en un mapa fijo. Indican siempre invariancia y constancia
admisible, a pesar de la explicita admisión de una dimensión temporal: podemos hablar de
estructura. Hay que conceder que ésta tiene propiedades dinámicas, que contienen los
cambios y fluctuaciones internos que acompañan al desplazamiento y la sustitución de roles
y relaciones.

Estados estacionarios: incluye los cambios y fluctuaciones internos producidos por la aparición
y desaparición de elementos y por la formación o reforma de las interrelaciones. Los
desplazamientos son compensados por sustituciones.

El análisis estructural presenta a las sociedades como si se encontraran en estados


estacionarios. El análisis mismo, si bien no cuenta roles, relaciones y subgrupos en sucesión
temporal, de momento a momento, tampoco es estático ni insensible al tiempo.

Aplica dos conceptos de Levi Strauss a la discusión anterior de si el concepto de estructura


excluye los casos de variación y cambio:

Micro tiempo: suministra la escala temporal adecuada para los desplazamientos, movimientos
y variaciones que siguen dentro de los límites de alguna constancia global.

Macro tiempo: contiene los tipos de acontecimientos que cambian la disposición estructural
preexistente.
Mientras los acontecimientos del micro tiempo no invalidan la estructura, sí lo hacen los del
macro tiempo, pues ese cambio no puede ya representarse en el mismo esquema estructural,
no habría repetitividad. Ocurren ya sea gradualmente, a consecuencia de discrepancias
acumulativas respecto de la norma, ya sea como resultado de una revolución. El feudalismo dio
paso al capitalismo. Una determinada estructura social, tal como se la describe en un
momento determinada, no puede ser adecuada exactamente más que para un período
determinado de tiempo.

Sin embargo, las variaciones graduales producidas por las decisiones individuales también
pueden llevar a cambios estructurales.

El análisis estructural lleva por sí mismo a una excesiva simplificación, concentrándose en torno
de situaciones medidas o típicas. Sin embargo, los estudios que presentan algunos saltos
estadísticos de los rasgos relevantes, es decir, que presentan grados de libertad, o laxitud en las
elecciones y decisiones de los individuos, siguen siendo estudios de estructura. La variación
está definida o construida por la estructura. La dificultad de describir los casos en que la
variación rebasa la existencia de posibilidades de disyunción (de representar y caracterizar
estructuras multivariantes) reside en la deficiencia de nuestros instrumentos simbólicos y no
en el instrumento conceptual.

La estructura social exige un gradiente en la variancia posible de comportamiento. Algunas


opciones tienen que preferirse sobre otras.

El comportamiento del cual se abstrae la estructura tiene que ser concebido por los actores
como comportamiento que sigue de derechos y obligaciones, es decir, que tiene que tener la
implicación de normas en las que se cree. A partir de su estudio estructural, ofrecerá:

- Constancias de conducta: roles y relaciones que se siguen de reglas. Acciones variables


de las que abstraemos una imagen posicional, con sus grados de libertad. Estadísticas.
- Normas empírico-estadísticas: las reglas mismas. Recogemos afirmaciones, creencias e
instrucciones acerca de cómo hay que obrar: un croquis pragmático, del que no
abstraemos nada.

Si el comportamiento observado y las reglas a su respecto cuadran perfectamente, podremos


decir que la estructura abstraída concuerda con la estructura contemplada y creída por los
actores. Pero muchas veces no se dará. La estadística comparada con el croquis evidenciará
modificaciones producto de las elecciones individuales. Reglas ideales versus realidad.

4.

Coincide con Leach: nuestros estudios de campo son generalmente de escasa duración. Si es
verdad que las ciencias sociales manejan lapsos estadísticos cortos como para dar resultados
comparables con los de la ciencia natural, esto tiene que ser aún más verdadero en la
antropología.

El lapso que podría permitirnos identificar la estabilidad de los procesos sociales no es


uniforme. La verificación de la repetitividad, de la restauración tras perturbación, o de duración
plena de alguna institución, suponen escalas o fases muy diferentes.

Nos interesa descubrir la determinación reciproca de una pluralidad de elementos, como un


sistema. Suponemos que existe esa determinación y que existe también la posibilidad de un
estado totalmente determinado por la interrelación de todos los elementos, e incambiable por
tanto mientras los elementos sean los mismos. Definición de equilibrio social de Pareto de gran
valor heurístico.

En verdad, no nos importan las condiciones de equilibrio. No tienen nada inherentemente


importante, salvo en un sentido derivado, como consecuencia lógica de aquella suposición más
fundamental según la cual tiene sentido buscar determinaciones. Si creyéramos en un universo
social enteramente caracterizado por el libre albedrío de todos sus elementos no
necesitaríamos supuestos de equilibrio, ni serían útiles.

La sociedad en equilibrio es meramente la hipótesis del antropólogo acerca de cómo opera el


sistema social, un modelo de realidad social y nada más.

Las constancias empíricas existen y son observables, pues nadie habría pensado en modelos de
equilibrio si la observación no sugiriese algo así. Pero las que vemos los antropólogos son de
escaso alcance. Vemos repeticiones, regularidades, reproducción de roles y relaciones y la
restauración de estados perturbados (en pequeña escala, como riñas), y suponemos que duran
más que el período de observación. Lo hacemos por los mecanismos de conservación
observables, de las continuidades pasadas descubribles con cierto grado de garantía y por
nuestra creencia de que la sociedad no cambiará en cuanto dejemos de mirarla.

Si los estados estacionarios o estructuras dejan de ser lo que son, tiene que haber una razón: si
son perturbados, es probable un nuevo estado que produzca a su vez una estabilidad relativa,
en una nueva estructura o en la vieja restaurada.

Impedimentos del cortos alcance de nuestras observaciones

- No podemos precisar si las opciones y elecciones realizadas representan algún


equilibrio estacionario o un desequilibrio que tienda a producir efectos acumulativos y
tendencias progresivistas.

Será de ayuda la acumulación de datos descriptivos combinada con nuevos estudios de los
mismos campos, así como observaciones continuas sobre periodos realmente largos. Mientras
tanto nuestros juicios acerca de estados estacionarios, estabilidad e inestabilidad, tendencias y
oscilaciones seguirán siendo hipótesis sólo parcialmente verificables (aunque son indicios
útiles, supuestos que confirmar o refutar).

5.

Podríamos llamar a la estructura social modelo estadístico (LS), pues aquella tiene el mismo
grado de realidad (o de irrealidad) que podemos atribuir a una imagen puramente estadística
de una situación social.

En contraposición podemos hablar de modelos mecánicos de las sociedades, ejemplificados


por leyes válidas (ej. Las reglas del matrimonio que prescriben la agrupación fáctica de los
individuos de acuerdo a esquemas de clanes y familias).

Sólo el esquema pragmático de las sociedades, su cuerpo de reglas o normas apoyadas por
sanciones, puede considerarse como dotado de eficacia concreta y consecuencias reales,
positivas al determinar la conducta y negativas cuando dejan de impedir la desobediencia o
la no-conformidad.

El modelo estadístico no puede tener tal eficacia, no puede hacer esfuerzos destinados a
subvertirlo de frente o a evadirse de sus prescripciones. Las variaciones que presenta
respecto del esquema pragmático pueden representarse como grados de libertad o
tolerancia, umbrales (LS), o índices de probabilidad.

La estructura social es un orden abstraído del comportamiento. Esta distinción la ignoran


quienes atribuyen realidad a la estructura social, o quienes dicen que ésta se mantiene y
conserva a sí misma, ejerce una presión o resistencia al choque de cambio, o es algo a través
de lo cual pasan los individuos (RB-EP).

Lo que de verdad influye en la acción o es desobedecido o está sostenido y defendido en


medio de una condición de cambio, son las normas explicitas, las reglas afirmadas y las
creencias conscientes: y sólo de los cargos, roles, tareas e instituciones establecidos por tales
reglas explicitas podemos decir que las personas los asuman o rechazan, o que pasan a través
de ellos durante su vida.

No es grave, pero critica el uso laxo del lenguaje. → necesidad de un NUEVO CONCEPTO
contrapartida del de estructura social, que incluya:

- Las afirmaciones normativas, las creencias y las órdenes o instrucciones explicitas que
son corrientes en la sociedad, en la medida en que todas esas entidades afectan a los
roles y las relaciones.
- Las prácticas institucionalizadas destinadas a producir y mantener la situación en
cuestión. Mecanismos de conservación.

Es el concepto de Organización (Firth): Complementaria de la estructura social, representativa


de los dispositivos activos de la sociedad, por los cuales se mantiene en existencia un grupo (de
tal o cual estructura).

La organización se relaciona con la dimensión de la acción (o cultura). Implica actividades


finalísticamente dirigidas y operando como tales. La estructura social, que se basa en la
abstracción de vínculos de actor a actor pertenece a la dimensión opuesta de relaciones y
agrupaciones (o sociedad).

LS dice que la estructura social no tiene nada que ver con la realidad empírica. Leach lo mismo.
Nadel dice que la abstracción progresiva y los supuestos “como-si” siguen siendo métodos con
los cuales intentamos apresar la realidad a nuestro modo y lo mejor que podemos, y no
expedientes para reconstruirla o idealizarla en nuestra mente.

Un modelo de su tipo no se investiga ni se estudia, sino que se construye en base a


investigaciones empíricas y se manipula para entender mejor los fenómenos empíricos. Los
modelos que constituyen la estructura social son, para LS, modelos de relaciones sociales. Para
Nadel son unidades amplias, redes de unidades y no tantas o cuantas relaciones sociales
discretas e inconexas. Para LS la materia prima son las relaciones sociales, para él es estructura
social.

Para LS y Leach la estructura es una construcción explicativa destinada a suministrar la calve de


los hechos observados de la existencia social, los principios o fórmulas que dan razón de su
carácter y, por tanto, la lógica subyacente a la realidad social.

Para Nadel la estructura social sigue siendo la realidad social misma o un aspecto de ella, y no
la lógica subyacente a la misma; el análisis estructural no es más que un método descriptivo,
no explicativo.
Cuando definimos la imagen posicional de una sociedad no hacemos más que abstraer un
orden a partir de una realidad empírica, sin reconstruirlo ni idealizarlo, ni convertirlo en
modelo. Este es el primer paso para empezar a pensar en explicaciones.

7. CONCLUSIONES: ESTRUCTURA Y FUNCIÓN

Estructura es un instrumento conceptual.

El análisis en términos de estructura es incapaz de presentar sociedades enteras. Ninguna


sociedad presenta una estructura total y coherente.

Para articular los diferentes sectores de la estructura social (o las varias estructuras sociales de
una sociedad) necesitamos 3 términos:

- Reclutamiento: indica la mecánica, los factores organizativos que subyacen a la


asunción de posibles relaciones.
- Mando interpersonal: corresponde al criterio convencional de estructura social, es
decir, relaciones en virtud de la interacción directa.
- Mando relativo sobre recursos y beneficios: induce un punto de referencia alógeno,
que define relaciones de un modo indirecto.

Los últimos dos, criterios de mando, muestran poco más que la distribución del poder y la
autoridad, de tal modo que la estructura social coincide con la estructura de poder y autoridad.

Estructura social va siempre en plural.

Nuestra verdadera ganancia al practicar el análisis estructural reside en el proceso, en la


aplicación de los adecuados métodos analíticos más que en la reunión esquemática de los
resultados. Cada paso en las principales abstracciones y comparaciones que vamos haciendo
nos revela cruciales interdependencias entre individuos en sus roles, entre los roles y el resto
de la sociedad, entre grupos constituidos por roles, que nos van acercando a una visión interna
del funcionamiento de la sociedad. Al eliminar progresivamente los rasgos particulares de las
situaciones sociales (esencia de la abstracción) preparamos el camino para el descubrimiento
de características y regularidades generales y, por tanto, de normatividades (las dominantes)
en el reino de la existencia social.

Lo que hacen los ‘especialistas de la estructura social’ es describir en cualidades tipos de


relaciones y grupos, sus interconexiones por actividades y reclutamiento, los valores y normas
creídos por la población y los dominantes mecanismos de sanción, las concomitancias
psicológicas de las relaciones, etc. Esos estudios no cumplen en modo alguno la pretensión de
la escuela ‘estructuralista’ según la cual sus estudios son de un alto nivel de abstracción y
operan con procedimientos rigurosos. No aplican los últimos grados de abstracción. Tampoco
son un fracaso, tienen un contenido rico.

Las comparaciones amplias, que dependen de un alto grado de abstracción y de nuestra


capacidad de manipular esquemas posicionales, operan, aunque sea sólo tácitamente con los
criterios a los que él llega:

RB: realiza estudios sobre estructuras sociales invariable o persistentes referidos a sistemas de
parentesco y a principios de naturaleza ordenadora (por linajes, ascendencia unilateral o
bilateral, etc.). Reducen la comparación de sociedades a una comparación de los principios de
reclutamiento y sus consecuencias. Y cuando las relaciones entre las personas así reclutadas
para roles y posiciones se exploran ulteriormente, ello se hace en términos de relaciones
jurídicas, jus in rem, jus in personam: una transliteración de mis dos principios de mando.

Sociedad o grupo social: presenta roles, más o menos definidamente atribuidos, relaciones
definibles y sus áreas limitadas y todos los demás rasgos ejemplificadores de una disposición
ordenada y relativamente constante de ciertas unidades.

La existencia social pertenece a un universo del discurso regido por los conceptos de
intención (o finalidad) y utilidad; el planteamiento estructural tiene que estar por fuerza
subordinado a ellos. Las estructuras sociales tienen determinadas tareas que cumplir… y, por
tanto, algunas estructuras serán más eficientes para ciertos fines menos para otros. Las
tareas y los objetivos son fáciles de definir: facilitar la vida, satisfacer cualesquiera deseos y
necesidades que se imponen a los organismos humanos en condiciones dadas. Ningún
aislamiento heurístico (como el sostenido por muchos estructuralistas) puede ocultar el hecho
de que los datos de la estructura social afectan de un modo u otro a las tareas que tiene que
hacer la sociedad y a los objetivos que exigen una acción eficiente. Tiene que haber alguna
articulación entre los criterios del análisis estructural y los conceptos de objetivo y utilidad.
Hemos recogido esta articulación. Al emplear los criterios de mando sobre personas y
beneficios hemos introducido conceptos que connotan objetivo y utilidad, ya que mando
significa siempre mando con algún objetivo.

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