ANÁLISIS SOBRE EL CAPÍTULO “LA MODERNIZACIÓN Y SUS

SECUACES 1884-1930”

La corrupción es un fenómeno que ha afectado al Perú a lo largo de su historia. El

ofrecimiento y la recepción de sobornos, la malversación y mala asignación de fondos
públicos, los escándalos financieros y políticos, el fraude electoral, el tráfico de
influencias, son algunas de las formas en que se ha manifestado. Pero, más allá de las
repercusiones mediáticas, ¿cuánto sabemos sobre las causas específicas de la corrupción
en el país y los costos económicos e institucionales que ha generado?

Manuel Gonzales Prada (1844-1918) Fue testigo presencial de la caída y ocupación de

Lima. Culpa del desastre a la dirigencia política y social del país.

Concluida la guerra del Pacifico, el Perú atravesaba una crisis política y moral. La clase
dirigente quedó destruida y era incapaz de afrontar la recuperación y el desarrollo del
país, al finalizar la guerra, González Prada forjo su acerba crítica en diversos discursos,
artículos periodísticos, libros y manuscritos.

Convertido al anarquismo, al anticlericalismo e incluso al ateísmo, Gonzáles Prada se

definió como un "libre pensador" y se perfiló en uno de los intelectuales de mayor
trascendencia en el desarrollo de las ideas políticas del siglo XX.

Sostenía que la guerra, el desastre económico y una sustancial pérdida del territorio no
había servido de lecciones para enmendar los males heredados.

Expuso con claridad el legado y las raíces históricas corrupto, inepto e irresponsable.

Habla sobre la disipación de oficiales de reserva abandonando sus puestos, y vándalos y

soldados descarriados saquean tiendas y casas de residentes chinos. Permanece
encerrado en su casa durante los dos años y medio que duró la ocupación militar hasta la
firma del oneroso tratado de paz de Ancón, el 20/01/1883.

Se convierte en uno de los luchadores y críticos más implacables contra la corrupción en

la historia moderna peruana, los partidos políticos eran meros clubes electorales de
malsanas ambiciones mercantiles.

Comenzando con el gobierno de Miguel Iglesias que fue un gobierno entreguista y

anticonstitucional ya que en este gobierno se entregó gran parte del territorio del Perú a
los chilenos como Arica, Tacna y Tarapacá en el tratado de Ancón, pasando luego al
gobierno de Cáceres en la cual se firmó el contrato Grace y así pasamos por varios
gobernantes ineptos, pero cabe resaltar que el peruano era tan ciego y olvidadizo que
elegían nuevamente elegían a los que no les interesaba tanto el pueblo. La corrupción de
los presidentes fue tanta, que se aprovecharon del poder que poseían para poner en altos
cargos a sus parientes y amigos cercanos cómo es el caso del gobierno de Leguía.

Definitivamente el gobierno de Miguel Iglesias se dedicó a la tiranía y violó los

derechos individuales tal como en el caso de la opresión política y militar en Trujillo, se
había presentado en un levantamiento favor de Cáceres en consecuencia de ello hubo
deportaciones y muertes, toda esta falta de transparencia en concesiones con empresas
se hizo presente, las empresas que poseían la monopolización lo cual siempre ha sido
grave, pero esto no quedaba ahí, está cobranza de altos impuestos a barcos de vapor
claro obviamente menos a los ingleses y a los chilenos a cambio de un préstamo de
medio millón de soles al gobierno de Miguel Iglesias definitivamente dieron un
problema en lo que respecta la economía, como es el caso de Grace Brothers y la cual
poseía una línea de ferrocarril Lima – Chicla, además de esta prolongación a los centros
mineros de la Oroya y cerro de Pasco, todo esto favoreció siempre al gobierno de
Inglés, ya que recibía préstamos y ayuda a su mandato.

Michael P. Grace, negociador y piedra angular del arreglo con los acreedores
extranjeros del Perú conocido como el contrato Grace, M.P. Grace mantuvo relaciones
amistosas y estrechas con cada uno y todos los gobiernos que iban llegando, lo cual era
un signo de la gran corrupción que se vivía.

Todos estos contratos de empréstitos al Perú, que no tenía como devolverlos, se

traducen en cesiones de líneas ferroviarias u otras concesiones a largo plazo empeñando
al país.

Con respecto a la corrupción se presentaron extorsiones por parte de oficiales militares

aquellos que justificaron sus actos heroico sinecuras pagadas por intereses extranjeros
en el gobierno de Andrés Avelino Cáceres, lo que ahora creo a razón propia son parte de
las famosas “coimas”, solo que cambian de forma, pero siempre provienen de las
mismas personas.

Todos los abusos financieros como es el caso que se narró, en el Legado de Califa
llamado, fue el culpable por así decirlo de implementar los nuevos puestos y carros en el
gobierno para sus amigos, y eso de nuevo asemeja una realidad que aún se vive, no es
novedad ver como congresistas, o personas que pertenecen a la administración pública,
suelen involucrar a sus familiares, amigos y personas cercanas a la misma, otorgándoles
un “privilegio” por encima de las leyes y normas, y el control que debería seguir cada
ciudadano, todas esas ambiciones presidenciales siempre repercutían a los civilistas.

Después de que se reunió el expresidente Piérola para financiar la revolución antes de

que comiencen las elecciones, ya las condiciones no nos eran favorables bueno para los
Pierolistas ya que las corporaciones extranjeras se iban a oponer a la insurrección, por lo
tanto, la legación francesa no quiso brindar su ayuda porque cubrir semejante préstamo
no iba a ser posible.

Efectivamente en El legado del Califa, se argumenta que el verdadero héroe de la

reconstrucción nacional fue Nicolás de Piérola, quien rectificó sus errores del pasado y
lidió con un país “empírico, desorganizado e improvisado”.

Sin embargo, Manuel Gonzales Prada lo clasifica como uno de los peores líderes
políticos de la historia, al no ser capaz de cambiar sus errores anteriores, y ser uno de
esos políticos nacido para la ruina y vergüenza de su gente, pues con una mano dejaba
manchas de sangre, y con la otra, rastros de lodo.

Podemos afirmar que las fuerzas armadas fueron totalmente cambiadas y

profesionalizadas, la inversión en las obras públicas realmente fue muy limitada, así
como el gasto presupuestario y el ámbito político fueron reordenado, caso como El
Jurado Nacional de elecciones. Definitivamente eso muestra el gran conflicto que
existía entre los poderes del estado, lo difícil que es resurgir de la economía,
definitivamente en la modernización que se vivía en ese momento no ayudo en lo
absoluto.

Y hasta ahí no para la mala inversión y el retroceso que aún se mostraba en lo que
respecta a la economía, pues los malos manejos de la deuda externa se veían reflejados
siempre, así como el manejo del fondo público y también por parte de los gastos extras
de las obras públicas. Obviamente que no beneficiaba a todo el sector, todo esto se
incrementó hasta llegar a un punto que los gastos y costos eran tan incrementados, nos
referimos al onceno de Leguía, nunca los actos de corrupción cesaron fueron más
meticulosos en elecciones próximas, el control del sistema electoral, los fraudes, las
compras de votos, medidas directorales, todo iba de viento en popa para la corrupción.
Ciertamente la intolerancia del pueblo se veía reflejada pues, el levantamiento militar
que puso fin al gobierno de Leguía y propuso acabar con la corrupción que se echaba el
país se vio sancionado pues en el nuevo gobierno, ya que se impulsó a los ex
funcionarios a cargo del tribunal de sanciones.

Este capítulo comprende la Reconstrucción Nacional y el Oncenio de Augusto B.

Leguía. Quiroz contrasta los avances durante los diferentes gobiernos civilistas con la
corrupción incontrolada del mandato leguiista, el lapso más corrupto de esta etapa a
causa del mal manejo de la deuda externa, así como por el soborno en las compras
civiles y militares y en las inmensas obras públicas.

En el ámbito político, la corrupción ha favorecido el crecimiento de la inestabilidad

institucional y el persistente desgaste de las relaciones tanto entre individuos como entre
instituciones y Estados. La pérdida de legitimidad política que experimentan muchos
gobiernos, la polarización del poder, la ineficiencia burocrática, etc., son algunos de los
problemas políticos que se atribuyen a la acción de la corrupción. El creciente desarrollo
de bloques políticos da nuevos aires a esta cuestión, poniendo en la agenda internacional
como una prioridad relevante la necesidad de una acción colectiva anticorrupción.

En análisis podemos ver que todo en exceso siempre es dañino, además que así como la
corrupción ha evolucionado, puede parecer gracioso, pero es verdad, así como
evoluciono, debemos hacerlo también para combatirla.

El exceso de poder, la concentración de este, los malos usos del poder, pero sobre todo
la ideología de un estado que juega a creer que la sociedad es ignorante, aunque no nos
manifestemos expresamente, la sociedad ha mostrado siempre rechazo a cualquier tipo
de corrupción pues no hay que ser experto en el tema para saber cuándo se están
vulnerando derechos.

La lucha contra la corrupción requiere de liderazgos decididos y claros al interior de las

organizaciones, en particular dentro del poder ejecutivo, los responsables de los
sistemas de control, con iniciativa para conducir las instituciones, a diferencia de los
líderes de las organizaciones, debe existir pues la voluntad política, pero no sólo existir
sino que ésta se construye, todo este proceso es el reflejo de las complejas
circunstancias que reúnen las aspiraciones de los líderes individuales, todo el cálculo de
beneficio que pueden derivar de los cambios de las normas y del comportamiento y
además de la creencia en la capacidad para reunir el apoyo apropiado para vencer la
resistencia a las reformas contra la corrupción, resulta voluntad política.

Claramente en este capítulo, muestra que la corrupción no solamente sea de manera

política sino también social y peor aun cuando es económica.

Porque la corrupción es un tópico que está siendo discutido de manera creciente en el

contexto del desarrollo económico, no solamente hoy sino desde tiempos atrás, porque
para algunos la corrupción general reduce la efectividad y calidad de las políticas
económicas, pero sin embargo existen momentos donde la corrupción resulta natural,
pues el proceso del desarrollo político y económico de un país a manos de la corrupción
es de temer.