Está en la página 1de 3

26 de Abril de 2020

Revaluar la edad de retiro


forzoso para maestros podría
salvar vidas
En una eventual apertura de las escuelas, los maestros activos que ya tienen la edad para
pensionarse, o que ya están pensionados, son quienes tendrían mayor riesgo de
desenlaces fatales. Esto podría agudizar por la configuración del sistema de salud del
magisterio.

Hernando Bayona Rodriguez

Seguir
Desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el 30 de enero de 2020
la existencia de un riesgo de salud pública de interés internacional, el mundo vive un
hecho sin precedentes en la sociedad moderna, una pandemia global.

El covid-19 nos afecta a todos pero no por igual, son los adultos mayores los más
vulnerables a la pandemia. Por esta razón, el Gobierno Nacional ha decretado que las
personas mayores de 70 años no pueden salir de la casa, medida que podría ser duradera
mientras no haya vacuna. Además, no todos los sectores tienen igual riesgo para la
propagación del virus, los sectores con mayor afluencia de personas son las que tienen
un mayor riesgo.

El sector educativo es sin duda uno de los más riesgosos para la propagación del virus.
En las escuelas, colegios y universidades es difícil mantener rigurosamente las medidas
y recomendaciones hechas por los especialistas ¿Qué niño no va a querer jugar y correr
con sus amigos que hace semanas no ve? Con la gran cantidad de estudiantes que tiene
Colombia, el distanciamiento físico no es una posibilidad dentro de las escuelas y
colegios; tampoco lo son las otras recomendaciones de los especialistas. Muestra del
alto riesgo de propagación del virus en este sector es que fue uno de los primero en ser
enviado a realizar actividades desde la casa.

Por otro lado, el magisterio tiene un número importante de maestros que están en una
franja etaria de alto riesgo, lo cual debe ser analizado con lupa en esta crisis. 2,8% de
los profesores tiene más de 65 años y 22,4% tiene entre 57 y 64 años de edad. Además,
la edad de pensión de los docentes puede ser de 55 años o 57 años según el régimen por
el cual hayan ingresado al magisterio. Esto indica que los maestros con más de 57 años
cumplen con la edad para pensionarse; sin embargo, no lo han hecho pues la edad de
retiro forzoso en Colombia es de 70 años desde 2016.

En una eventual apertura de las escuelas y colegios, los maestros activos que ya tienen
la edad para pensionarse, o que ya están pensionados, son quienes tendrían mayor riesgo
de desenlaces fatales. Lo cual se podría agudizar por la configuración del sistema de
salud del magisterio.

Es importante destacar que el régimen especial del magisterio hace que tanto salud
como riesgos laborales están cubiertos a través del Fomag (Fondo Nación de
Prestaciones Sociales del Magisterio). Esto ha impedido que los maestros sean afiliados
a alguna de las 10 ARL del país, incluida Positiva que es pública. También es
importante indicar que el servicio de salud de los maestros se ha venido deteriorando, en
parte, por “tener todo en una sola bolsa”, salud más riesgos laborales más cesantías más
pensiones.

Aunque la actual Ministra ha trabajado fuertemente en tratar de resolver este tema, el


problema no es sencillo. Por un lado, esta situación viene de muchos años atrás y
resolverlo en un par de años es difícil; por otro lado, hay gran interés detrás de mantener
esta estructura, principalmente de aquellos que viven de gestionar trámites ante el
Fomag, lo que perjudica de manera importante a los maestros.

Es extraño que la regulación sobre riesgos laborales le permite al empleador elegir la


mejor alternativa de ARL, y que esto no pase con el régimen especial del magisterio
(¿especial?). Es importante decir que el Fomag actúa como ARL pero no lo es, en el
país solo hay 10 ARL. Los problemas derivados de esta situación se evidencian en los
reclamos, que los maestros del magisterio vienen haciendo desde hace años, sobre no
poder tener un servicio adecuado para atender los riesgos laborales.

Esto último es clave en estos momentos, ya que los profesores que se contagien de
covid-19 en sus lugares de trabajo, podrían argumentar que se materializó un riesgo
laboral. Esto sin contar los riesgos derivados de la carga emocional generada por la
actual situación. Ya se reportan incrementos importantes de carga laboral y estrés
generado por el uso intensivo de la tecnología, especialmente entre los trabajadores de
mayor edad.

Teniendo en cuenta lo anterior, es clave evaluar varias líneas de acción en esta


coyuntura global y especialmente nacional. Primero, se debe pensar en la posibilidad de
establecer una edad de retiro forzoso para los maestros que: 1) actualmente ejercen en el
magisterio; 2) están en la franja etaria de mayor riesgo y 3) están pensionados o
cumplen con las condiciones para pensionarse.  Segundo, contratar los servicios de
riesgos laborales con las entidades que realmente están diseñadas para tal fin, una ARL,
que en el caso de los maestros del magisterio debería ser naturalmente Positiva, la ARL
pública.

Esta pandemia, además de preocupaciones, ha aflorado un sentimiento de solidaridad


maravilloso que se debe seguir reflejando en las acciones y políticas que se tomen para
salvar vidas. Los intereses políticos o individuales no pueden estar por encima del bien
social.

En concordancia con lo anterior, esta columna busca abrir un debate, que considero
oportuno, en estos momentos donde debemos ser creativos para tomar las mejores
decisiones en búsqueda de proteger la vida.

También podría gustarte