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TEMA 4.

FUTURIMO Y EXPRESIONISMO
FUTURISMO
Fue la terminación que tuvo la vanguardia italiana previa a la primera guerra mundial. El Manifiesto
futurista fue publicado el 15 de febrero de 1909 por Filippo Tommaso Marinetti (1876-1944) en el
periódico parisino le Fígaro. Este manifiesto expresa un deseo de provocación y una actitud
combativa. Manifiestan su hartazgo de ver que solo eran reconocidas las obras del pasado clásico.
Para liberarse de este pasado apuestan por belleza de la velocidad y la exaltación de todo lo que
pertenece a los nuevos tiempos (máquinas, tecnología, ritmo de las metrópolis, dinamismo, vida
nocturna, nuevos materiales…).

La base inicial del futurismo es poética y pictórica. La pintura y escultura futuristas apuestan por
representar la velocidad y la percepción de movimiento. La atracción por la belleza de las máquinas
incluía las de la industria armamentística, base de una irracional defensa de la guerra, entendida
como una experiencia purificadora. Se centra en representar la belleza de las máquinas mediante
técnicas deudoras del Postimpresionismo como el puntillismo, o la vanguardia contemporánea
como el Cubismo.

Marinetti publicó textos que eran más bien composiciones (collage) de


palabras sueltas con distintas formas y tipografías con las que juega y
envía un mensaje de confusión y caos. Un ejemplo es Palabras en libertad
(1914). Une la técnica del collage con las de la poesía y rompe con la
estructura convencional del lenguaje al otorgar derecho a la libertad
gramatical y literaria a las palabras. Las palabras son convertidas en
elementos que reclaman su propia fuerza individual, sumadas unas a
otras. Las frases son sustituidas por letras y signos con valores visuales y
onomatopeyas.

UMBERTO BOCCIONI (1882-1918)

Serata Futurista (1911)

Dentro del afán de los futuristas de hacerse notar y salir en los


medios, las veladas o seratas fueron unas de las actividades más
exitosas. En estas veladas, los futuristas promocionaban sus ideas
y obras artísticas con lecturas de manifiestos o interpretación de
composiciones musicales improvisadas muy ruidosas. Buscan
hacer ruido, e incluso inventan máquinas como el Intonarumori,
cuyo único objetivo es este mismo.

La calle penetra en el edificio (1911)

En las obras pictóricas de Boccioni se detectan las fuentes cubistas de su


inspiración. Boccioni estaba interesado en los temas urbanos. Esta obra
representa el ruido de la calle. En esta obra la calle y la ciudad son
expresadas como un tumulto de formas absorbentes que tratan de enviar
el mensaje del tiempo en el que transcurre la narración pintada. La
velocidad de la vida urbana, sin
embargo, seguía estando constreñida
por la dimensión plana del óleo
bidimensional. Otra obra similar es La
ciudad se levanta (1910-11), en la que representa la metrópolis moderna con una técnica pictórica
muy similar a la de Van Gogh.

Formas en continuidad en el espacio (1913)

La escultura también se desarrolló en el futurismo, aunque en menor


medida. Esta pieza es una de las únicas que han sobrevivido hasta la
actualidad. En el campo de la escultura, como en el pictórico, se buscaba
una identidad moderna alejada de las referencias tradicionales figurativas,
o de los materiales al uso. Esta obra está realizada en bronce, y representa
figuras humanas que han perdido la expresión reconocible, que se apropian
del espacio avanzando enérgicamente por él, y cuya fuerza desplegada en
la acción parece ser la causante de romper en múltiples planos la unidad
convencional de la representación figurativa.

CARLO CARRRÁ (1881-1966)

Manifestación intervencionista (1914)

En este collage realizado con recortes de periódicos y otros materiales


aleatorios, Carrá se deja motivar por la técnica que tanto experimentaba en
aquellos años Picasso. En esta obra hay una ausencia de figuración en busca del
tumulto abstracto de las masas girando. Carrá pretendía lanzar un mensaje de
activismo bélico mediante la poesía visual de las palabras recortadas y
dispuestas con total libertad. Carlo Carrá también tiene obras como Salida del
Teatro (1910) o lo que me ha dicho un tranvía (1910-11)

GIANCOMO BALLA (1874-1958)

Dinamismo de un perro con correa (1912)

El reto de competir contra los fotogramas múltiples de la


representación fotográfica, con los efectos de movimientos
captados por las cámaras cinematográficas, llevó a Giancomo Balla
a buscar la fiel reproducción pictórica del paseo de un perro atado
por una cadena con su amo. El movimiento aparece representado
mediante la repetición de siluetas, líneas y formas. En esta obra
persiste el hallazgo visual de la pintura desde la pura consideración
estética, llena de vibrantes impulsos, y de sugerencias. También
tiene obras como velocidad del automóvil + luz + rumor (1913).

GINO SEVERINI (1883-1966)

Bailarina azul (1912)


Severini fue el pintor futurista que más utilizó el color, el menos radical de
los pintores futuristas y el más próximo a los acontecimientos artísticos
parisinos. Esto se puede apreciar en obras como Bailarina Azul. El foco de
atención de la pintura está en la bailarina, con una forma triangular
descompuesta en triángulos menores, con gamas de color en que
predominan los azules y grises. En este y otros cuadros el dinamismo se
reajusta con la influencia de las representaciones estáticas del cubismo. Las
diferentes perspectivas cubistas se acentúan en las zonas del rostro y
brazos, que caracterizan a la pintura con el movimiento agitado que se le presupone a los
desplazamientos enérgicos de una figura danzante.

Tren de la cruz roja atravesando una población (1915)


Esta es una obra optimista en el contexto de una guerra mundial. Las
consignas de los manifiestos futuristas venían reclamando la belleza
creativa de la violencia y la emoción de lo militar. Severini lo tamiza a
través de su agudo sentido del color y de sus vibrantes sugerencias. Un
paisaje de colores idílicos, casas de tejados rojos envueltas en el humo
de la máquina de un tren de auxilio engalanado y festivo, se
descomponen en planos de color de ecos cubistas, tendencia hacia la
que se irá decantando Severini.

ANTONIO SANT ELI (1888-1916)

Cita Nuova (1913-14)

Diseñó un proyecto similar a la Ciudad Industrial de Tony Garnier. En


ambos casos se trató de adelantar las imágenes de las capitales
modernas basándose en los efectos beneficiosos para la humanidad
del control sobre los procesos de producción y su transferencia a la
forma arquitectónica de las urbes. Las referencias monumentales del
pasado han sido sustituidas por las figuras de la modernidad
arquitectónica, como centrales eléctricas, estaciones de tren,
aeropuertos, fábricas o rascacielos. La arquitectura futurista aporta y
lega la esencialización desornamentada de sus edificios, basados en
figuras geométricas elementales, la apuesta por las líneas rectas y la
búsqueda de una nueva e irrenunciable capacidad simbólica. Esta ciudad nueva estaría dirigida a
las masas, con enormes rascacielos construidos con nuevos materiales rematados por antenas y
con ascensores de hierro y vidrio adosados a las fachadas. Esta ciudad se ordena centrándose en el
flujo del tráfico, con vías cruzadas a varios niveles.

EXPRESIONISMO

Los pintores expresionistas pretendían alejarse de la tradición mediante la


deformación de sus vocabularios artísticos, y proclamaban el derecho a la
expresión de la subjetividad más absoluta. No existe un camino figurativo
común para los expresionistas, pero sí un camino compartido hacia la
abstracción. Las obras expresionistas se caracterizan por la utilización de
colores expresivos, que se alejan de lo que tenemos asociados como
normales y la deformación de las formas. De este modo encontramos
precursores como Van Gogh o Edward Munich con obras como La iglesia de
Auvers o El grito. Los autores expresionistas dirigen su interés hacia el arte
llamado primitivo, de inspiración africana y oriental. Gracias a esta influencia, representan rostros
como máscaras africanas.

VASSILY KANDINSKY (1866-1944)

Kandinsky diseñó junto a F. Marc la portada de la revista Blaude


Retier en la que defendía la importancia de liberar la parte interior
y espiritual de cada artista, de sus deseos más íntimos.
Independizará el color y la forma en su obra como cauce de acceso a
la abstracción. La incapacidad de imitar la realidad de Kandinsky
produce un cambio en el arte que aspira a conseguir una purificación
de los medios expresivos reflejando en la obra la esencia espiritual.
Kandinsky elaboró las primeras composiciones abstractas en
acuarela, utilizando por primera vez y como una forma de revelarse, el pigmento directamente
desde el tubo. Estas acuarelas presentan formas abstractas, composiciones de líneas de fuerzas y
masas de color con autonomía propia que expresan una armonía mística que fluye del artista. Con
el tiempo organizará este lenguaje abstracto a través de sus elementos básicos constructivos, y
creará en 1913 Composiciones en las que las figuras y los paisajes alcanzan tal grado de abstracción
que apenas son reconocidas y son ya prácticamente códigos visuales.

ALEXEI VAN JAWLNSKY (1867-1941)

Retrato del bailarín Alexander Sajaroff (1909)

Jawlensky estuvo en París antes de participar en la revista Der Blaue


Reiter, y de allí traía su admiración por el uso apasionado del color, con
inspiración de artistas como Van Gogh. El maquillaje del bailarín Sajaroff,
el rojo intenso del traje, la pose teatral y la mirada, son trasladados al
lienzo en planos de color contorneados de trazos negros crean un cuadro
psicológico que tiene efectos inmediatos sobre el ánimo del espectador.
En este mismo año creó su Bodegón con florero y jarrón que destaca por
la utilización de colores básicos muy intensos.

OTRAS OBRAS EXPRESIONISTAS

Retrato de Herwarth Walden (1910): Con el retrato de su mecenas y galerista,


Oskar Kokoschka se reivindicó en este cuadro en el que sobre la pintura extendida
en finas capas a la manera de una acuarela, Kokoschka marcaba después líneas
gruesas de contornos, y de esa manera quedaba acentuada la captación pictórica,
intensa y expresiva, del personaje retratado.

Dos mujeres (1912): El desnudo femenino, tratado con métodos de


representación próximos al arte primitivo de los pueblos africanos fue motivo
para promover la ruptura con la tradición por parte de Karl Schmidt-Rotluff.
Investigando en el museo etnográfico de la capital, el pintor llevaba al lienzo la
naturalidad de las jóvenes y caracteriza sus rostros con rasgos faciales de
máscaras africanas.

La vaca amarilla (1911): En su obra, Franz Marc otorgaba a los colores


atributos psicológicos y de género (azul masculino, amarillo femenino...). En
este cuadro aparece una vaca amarilla, en posición espacial ingrávida que
aludía para él a lo más primario y primitivo, tanto en el campo de los
símbolos evocadores, como en el de las formas, conscientemente imitadoras
del arte primitivo.

Tienda de sombreros (1914): Macke, más afrancesado, da la visión de una ciudad


tranquila y sosegada, por la que se puede pasear plácidamente, disfrutar de sus
parques y cafés, o pararse a contemplar los escaparates. Una dama sin rostro,
esbelta y elegante, se para un momento para observar una tienda de sombreros.
Utiliza colores luminosos y radiantes.
La plaza de Potsdam (1914): Los miembros del Brücke, además del alejamiento del
tradicionalismo, buscaban la sinceridad y la autenticidad en la pintura. Ernst
Ludwig Kirchner encontró esos valores en la vida de la ciudad, en las escenas de la
calle. De la metrópolis moderna eligió los barrios de la delincuencia y la
prostitución, en los que las mujeres viudas con velos negros aparecen como parte
del espectáculo, obligadas a prostituirse. Al fondo, los hombres las acechan con
sus miradas.

BRUNO TAUT (1880-1938)

Arquitectura Alpina (1919)

Es un proyecto arquitectónico dibujado con edificios coloristas realizados en


estructuras de hierro cubiertas por cristales de colores que se alzan como
formas iridiscentes sobre montañas. Estos edificios reflejan el mundo de lo
mineral, son volúmenes de acabados transparentes como iglús de cristal que
se alzan en cimas alpinas. Taut defiende la importancia simbólica de la
arquitectura de cristal, componiendo edificios de este material como
arquetipos de la futura sociedad y de la nueva religión socialista. Este
proyecto no fue llevado a cabo. La expresión dibujada de esa arquitectura
está en sintonía con las convicciones de Taut de que la arquitectura debía
seguir las luchas por las libertades formales que se defendía desde el campo de la pintura.

ERIC MENDELSOHN (1880-1938)

Torre de Einstein, Potsdam (1917-19)

Un edificio que sí se llegó a construir fue la torre Einstein de Eric


Mendelsohn, considerada como el paradigma de la arquitectura
expresionista. Su volumen de formas orgánicas se presenta como
una especie de híbrido entre la arquitectura y la escultura
abstracta. En realidad está construida en ladrillo y revocada con
cemento para conseguir una imagen de un edificio continuo.
Mendelsohn quería que la torre fuera una demostración
arquitectónica de las teorías científicas de su destinatario, que
plasmara con fuerza enunciadora los valores plásticos de la fluidez de la materia y de la energía.

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