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CAPITULO 5

MÉTODOS DE EXTENSIÓN

Como lo decíamos anteriormente, se denomina método de extensión a toda


actividad de enseñanza en la cual se involucra uno o varios medios de
comunicación.

Los principales métodos de extensión actualmente utilizados son las reuniones,


las visitas, las demostraciones, los días de campo, las giras.

Visitas a la finca y al hogar


Son aquellas que el extensionista realiza a la finca de los agricultores, con el fin de
prestarles asistencia técnica o social, tanto a ellos como a sus familiares. Por eso
se habla de visitas a “la finca y al hogar”, porque el técnico no se debe limitar a
prestar atención únicamente a los cultivos o a la ganadería, su atención debe estar
dirigido al núcleo familiar
como protagonista principal
del proceso productivo.

Este método es el que más


estrecha la relación
campesino-extensionista.
Es el contacto cara a cara
de dos mundos que se
deben acercar y
complementarse cada día,
para cumplir con el objetivo
fundamental de la extensión: compartir saberes.
Es importante, antes de llevar a cabo una visita, determinar los objetivos que se
persiguen. Su conveniencia o no. Si se cuenta con los medios didácticos y
operativos suficientes.

Si se decide realizar la visita, se debe estudiar lo que comúnmente se denomina


“carpeta” del agricultor, que es la documentación donde se encuentran las
características socioeconómicas de la familia, los problemas que se les ha
presentado y las soluciones acordadas en cada caso. Es pues la “biografía” del
agricultor y su familia. Es indispensable conocer toda la problemática del núcleo
familiar para poder interactuar con mayor propiedad cuando se tenga la
oportunidad de dialogar con ellos en el campo.

El paso siguiente es la escogencia de fecha (día y hora) para adelantar la visita, la


cual debe ser anunciada con anterioridad, en lo posible, al agricultor y su familia,
para que ellos también organicen su tiempo lo mejor posible.

Siendo este método uno de los más eficientes en la labor extensionista, es


conveniente hacer una planificación exhaustiva, dar un buen cubrimiento a la
zona, tratando de visitar a todos los habitantes, que no se vaya a tener la
impresión de que se visita más a unos que a otros, pues eso puede crear cierta
resistencia a la relación entre el extensionista y los agricultores. Igual atención se
debe dar al campesino innovador que al reacio, al simpático que al introvertido, al
hombre que a la mujer, al más pobre que al acomodado, etc.

Hay aspectos que parecen nimios, pero que los campesinos observan y pueden
incidir en el éxito de una buena visita. La forma de vestir es una de ellas. El
extensionista debe ser pulcro en su vestuario. Usar la ropa adecuada para la
ocasión.

Durante la visita, la actitud del visitante es fundamental. Hay que utilizar un


lenguaje sencillo y claro, más no “vulgar”. La confianza con el campesino y su
familia se consigue día a día y paso a paso, no hay que forzarla. Ante todo, hay
que tener total respeto en el trato con el campesino y su familia. Los campesinos
son muy generosos, hay que aceptar con gusto sus ofrecimientos, de lo contrario
podemos herir susceptibilidades que malogren una buena comunicación.

Es preciso, y no nos cansaremos de repetirlo, de situarnos a la altura del


campesino en todo momento. No somos los que sabemos, no somos los
superiores, somos los pares. Vamos a compartir saberes con ellos, no a imponer
nuestros puntos de vista. Vamos a lograr consensos. No somos sabihondos, hay
cosas que nos preguntan y no las sabemos. Lo acertado es decir “no sé”, pero lo
voy a consultar, en lugar de disfrazar nuestra ignorancia con respuestas dudosas y
ambiguas. El campesino no es tondo, por el contrario, sabe cuando mentimos y
cuando verdaderamente decimos la verdad.

Es conveniente, cuando vayamos a visitar una familia campesina, llevar material


impreso que refuerce sus conocimientos, en los diferentes aspectos de la vida
rural. Igualmente, al terminar, reforzar la comunicación verbal con sugerencias
escritas para que las tengan en cuenta en su diario quehacer.

Las ventajas que ofrece una visita predial saltan a la vista, es la oportunidad para
conocer más de cerca a los agricultores y sus familias, compartir conocimientos,
obtener confianza, motivar y sensibilizar a la comunidad en los beneficios que
puede brindar un buen servicio de extensión.

Los costos es su principal desventaja. Por eso hay que aprovecharlas. Planearlas
y realizarlas de manera eficiente.

Visitas a la oficina

Son las visitas que los campesinos hacen a la oficina de los extensionistas con
dos finalidades principales, consultar sobre problemas técnicos, sociales o
económicos que tengan relación con su finca u hogar, o solicitar una visita de los
técnicos a su predio.
Así como el campesino nos recibe amablemente cuando vamos a su casa a
visitarlo, así mismo debemos corresponderle. Desde el portero hasta el jefe de la
oficina deben tratar con amabilidad a los campesinos que vayan a la oficina. Debe
procurarse que haya algo de privacidad en la oficina de los extensionistas para
que los agricultores no se cohíban en su diálogo, pues muchas veces van a tratar
temas íntimos que no les gustaría fueran del dominio público.
Para facilitar el acceso, se debe localizar la oficina de extensión en un lugar
cercano a los sitios que más frecuenta el campesino, que por lo general es la
plaza de mercado, los organismos gubernamentales o almacenes de
aprovisionamiento agropecuario. Lo ideal es que esté situada en un primer piso y
tenga un letrero bien visible con el logotipo de la entidad.

Los funcionarios deben programar los días y horas en que estén disponibles al
público. Por lo general se acostumbra atender durante todo un día, que
ordinariamente es el día de mercado.

Hay que tener mucho cuidado en convertir la oficina del extensionista en un


consultorio “a distancia”. Si bien es cierto, algunas veces se pueden dar
recomendaciones con base en los datos que los campesinos manifiesten, lo
recomendable es que ante problemas de salud animal o fitosanitarios se programe
una visita a la finca para realizar un diagnóstico sobre el terreno y ofrecer
recomendaciones acordes con la realidad. Hay que evitar que los profesionales
del agro se conviertan en “formuladores de escritorio”
Reuniones
Son métodos grupales de extensión, donde los campesinos y técnicos debaten
sobre temas varios, se capacitan en determinadas áreas o discuten y analizan
problemáticas del sector.

Las reuniones permiten la confrontación de ideas entre los campesinos y los


técnicos, con el fin de tomar decisiones de común acuerdo, que solucionen los
conflictos que se puedan presentar. Se debe buscar una verdadera participación
democrática, no la imposición unilateral de los funcionarios gubernamentales.
Afortunadamente cada vez más se está imponiendo esta filosofía de interacción
entre los actores del
desarrollo rural.

No existen fórmulas
mágicas que garanticen
que las reuniones sean
exitosas como
herramientas de
comunicación rural. Lo
corriente es que se
desarrollen en un recinto
cerrado (aula de clase,
por ejemplo) o a campo raso. La puede dirigir, y sería lo más conveniente, un
dirigente de la comunidad, o el extensionista, si los campesinos lo deciden. Lo
fundamental es que quien presida la reunión propicie la participación activa de
todos los asistentes. También se debe elegir a una persona para que lleve un acta
de lo tratado, como arma de seguimiento y control de las actividades pactadas.

Debemos estar atentos a que las reuniones se inicien a la hora programada. Los
campesinos son muy cumplidos en los horarios. Cualquier retraso puede generar
malestar entre los asistentes y desmotivarlos para su asistencia a próximos
eventos.
Se debe tratar de brindar la mayor comodidad posible a los asistentes, contar con
los medios audiovisuales más apropiados y ofrecer algún tipo de refrigerio, ojalá
en el intermedio de la charla.

Giras

Es uno de los métodos de extensión de mayor aceptación entre los agricultores,


pues se trata de realizar visitas a fincas o predios de otros agricultores de la
misma zona, de otra vereda, de otro municipio, de otro departamento y aún de
otros países. Por supuesto, los agricultores le tienen mucha credibilidad a otros
campesinos, que han aplicado ciertas técnicas innovadoras en sus explotaciones,
que se las muestran objetivamente en sus propias parcelas y además, les
comparten sus experiencias en la aplicación de determinadas tecnologías. Aquí no
es el técnico quien les comenta las bondades de aplicar ciertas tecnologías, es el
propio agricultor quien comunica sus propias experiencias y la bondad o no de las
prácticas realizadas.

“Estas giras fomentan el intercambio de experiencias de productor a productor y el


aprender haciendo, para así generar aprendizajes significativos para ser aplicados
en sus parcelas y socializados con otras personas que estén interesadas y/o
involucradas en procesos de cambio tecnológico participativo en sus
comunidades.” (FAO)

Tal vez la única desventaja de este método es lo costoso que resulta realizar un
evento de estas características, pues significa contar con presupuesto adecuado
para transporte de los participantes, alimentación, traslado de equipos
audiovisuales y alojamiento, si es necesario. Por lo tanto una gira se debe
planificar con todos los detalles, si se quiere tener éxito en su realización. Debe
haber una buena participación de la comunidad para su preparación, empezando
por los agricultores seleccionados, pues como no pueden ir todos los habitantes
de la vereda o veredas, la comunidad debe escoger a quienes consideran sus
representantes, para que de regreso les repliquen lo observado en el recorrido. Se
debe trazar un itinerario que debe ser cumplido, como se dice, al pie de la letra.

Los agricultores de la zona donde se va a llevar a cabo el encuentro deben estar


al corriente de la programación de la visita. Por lo general los propietarios de los
predios que se van a visitar serán los encargados de exponer a los visitantes las
innovaciones que han adoptado en sus fincas y responderán las preguntas del
caso. Los extensionistas se limitarán a una presentación general y a reforzar o
aclarar conceptos de los campesinos.

Los funcionarios (extensionistas) deben escoger con mucha precisión los lugares
a visitar, de acuerdo al interés y motivación de los campesinos. Deberá ser un sitio
de características agroecológicas y socioeconómicas similares a la de los
visitantes, con el objetivo fundamental de que las innovaciones observadas en la
gira puedan ser fácilmente adoptadas por los agricultores en sus sitios de
procedencia.

Resumiendo, en términos generales, la estrategia metodológica para realizar una


gira tecnológica es la siguiente: (FAO)

 Identificación del problema a resolver

 Determinación de la oferta por parte del equipo externo.

 Discusión y análisis participativo de la pertinencia de realizar la gira en


función de si contribuye a resolver la problemática o parte significativa
de la misma.

 Menú de opciones de lugares a visitar y concertación con el grupo de


productores participantes. ¿A dónde ir y por qué? (Propósito)

 Concertación de la gira con los productores.

 Plan de gira (Resolver los siguientes interrogantes):

o ¿Quiénes van a asistir? Asegurar la participación de los que


comparten el problema y al menos un líder técnico.

o ¿Cuánto tiempo se requiere?

o ¿Cuándo es el momento oportuno?

o ¿Cuál será el itinerario?

o ¿Quién o quienes atenderán a los participantes?

o ¿Dónde se van a alojar?

o ¿Cuánto costará el viaje y quienes lo financiarán?

o ¿Qué medidas de seguridad se recomiendan?


o ¿Se cuenta con las autorizaciones, confirmaciones, recursos
económicos, arreglos y compromisos requeridos para realizar la
visita en las condiciones previstas?

o Ejecución de la gira. Se recomienda que se ajuste al menor tiempo


posible. ¿Cómo se van a identificar las lecciones aprendidas? En
cada sitio visitado es necesario analizar y discutir lo aprendido y su
utilidad.

o Evaluación participativa de resultados de la gira. Cumplimiento de


objetivos y resultados del aprendizaje. Recomendaciones.

o Compromisos adquiridos por los productores para validar lo


aprendido en la gira. Diseño y toma de datos.

o Capacitación y seguimiento posterior en terreno y asesoría por


especialistas.

o Adopción y masificación de la metodología y tecnologías generadas


o validadas.

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