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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL


DE LOS LLANOS CENTRALES “RÓMULO GALLEGOS”
ÁREA: CIENCIAS POLÍTICAS Y JURÍDICAS
NÚCLEO CALABOZO

Facilitador
Abg. LUIS HIDALGO

AUTOR (a):
Hernández, Yasmina.
C.I. V-12.990.884
3do Año. Secc. 02

Calabozo, Mayo 2020 1

INTRODUCCIÓN
Los actos administrativos conforman la forma de manifestación por
excelencia de la actividad administrativa, los cuales, por su naturaleza y carácter,
los mismos inciden en la esfera jurídica de los administrados que están
subordinados o demandan los servicios que ofrece la Administración Pública,
creando, modificando o extinguiendo una situación jurídica determinada.
Según el jurista alemán Otto Mayer (1.949.Tomo I:126) define el acto
administrativo ‘’Como un acto de autoridad que emana de la Administración y que
determina frente al súbdito, lo que para él debe ser derecho en un caso concreto”.
Como un concepto legal, según la Ley Orgánica de Procedimientos
Administrativos de la República Bolivariana de Venezuela, en su articulado
número 7° establece: “Se entiende por acto administrativo, a los fines de esta ley,
toda declaración de carácter general o particular emitida de acuerdo con las
formalidades y requisitos establecidos en la ley, por los órganos de la
administración pública”, por lo que, tomando en consideración el concepto
legalmente citado ut supra se puede concluir que, para que un acto administrativo
tenga carácter legal, el mismo debe emanar de los órganos de la Administración
Pública.
Según Sayagués Laso (1853:T.I; 391), expresa en el texto Manual de
Derecho Administrativo que, “los actos administrativos han sido objeto de diversas
clasificaciones, cada una de ellas desde puntos de vistas diferentes, no
excluyentes, sino complementarios”. En tal sentido, en el presente informe se
realizará un análisis descriptivo de los cinco (5) tipos de clasificaciones de los
actos administrativos que establece Brewer Carias (2010), tales como: según los
efectos; su contenido; las manifestaciones de la voluntad; su impunidad y según
su ejecución, todo esto fundamentado en las doctrinas establecidas en la materia,
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así como también en base a las Leyes correspondientes.

DESARROLLO
Tomando en consideración la Ley Orgánica de Procesos Administrativos de
la República Bolivariana de Venezuela, así como también diferentes doctrinas, a
continuación se hará una descripción de la clasificación de los Actos
Administrativos:

1. SEGÚN SUS EFECTOS: la actividad administrativa debe clasificarse según


produzca o no efectos jurídicos. Según Martínez, Eloy (2010) en su texto
Manual de Derecho Administrativo, expresa que en Venezuela existen actos
administrativos de efecto general y particular, todo esto en concordancia con el
artículo 259° de nuestra Norma Suprema del año 1999, el cual establece: “La
jurisdicción contencioso administrativa corresponde al Tribunal Supremo de
Justicia y a los demás tribunales que determine la ley. Los órganos de la
jurisdicción contencioso administrativa son competentes para anular los actos
administrativos generales o individuales contrarios a derecho, incluso por
desviación de poder; condenar al pago de sumas de dinero y a la reparación
de daños y perjuicios originados en responsabilidad de la Administración;
conocer de reclamos por la prestación de servicios públicos y disponer lo
necesario para el restablecimiento de las situaciones jurídicas subjetivas
lesionadas por la actividad administrativa”, en tal sentido, tomando en
consideración el artículo citado anteriormente, según el carácter normativo o no
de los actos administrativos, los mismos se sub-dividen en actos de efectos
generales y actos de efectos particulares.
Los actos administrativos de efectos generales: son los de
contenido normativo, es decir, aquellos que crean normas que integran
el ordenamiento jurídico. Este tipo de actos posee su legalidad
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contemplada el artículo 13° de la Ley Orgánica de Procedimiento
Administrativo de nuestro país, el cual establece: “Ningún acto
administrativo podrá violar lo establecido en otro de superior jerarquía;
ni los de carácter particular vulnerar lo establecido en una disposición
administrativa de carácter general, aun cuando fueren dictados por
autoridad igual o superior a la que dicto la disposición general”, por lo
que, se puede concluir que los actos administrativos de efectos
generales, son aquellos de contenido normativo de carácter coercitivo,
ya que surgen efectos a la ciudadanía en general y son de fiel y
obligatorio cumplimiento.
Los actos administrativos de efectos particulares: son aquellos que
contienen una decisión NO normativa, sea que se aplique a un sujeto o
a varios sujetos de derecho, en tal sentido, un acto de efecto particular
por no poseer rango normativo no podrá vulnerar lo establecido en una
disposición normativa de carácter general, ya que se debe respetar la
jerarquía del ordenamiento jurídico, tal como se establece en el artículo
14° de Ley Orgánica de Procedimiento Administrativo, el cual tipifica:
“Los actos administrativos tienen la siguiente jerarquía: decretos,
resoluciones, órdenes, providencias y otras decisiones dictadas por
órganos y autoridades administrativas”, por tanto, los actos
administrativos han de atender a la jerarquía establecida, en forma tal
que los de menor rango no pueden anular a los de rango superior.
Según diversa doctrinas y las Leyes, ambas acogen la clasificación de los
actos administrativos según sus destinatarios, los mismos pueden sub dividirse en
actos administrativos generales o individuales, donde, los primeros, son aquellos
que están destinados a un número indeterminado de persona, ejemplo: la orden
de vacunación masiva de una población; y los segundos, son aquellos que pueden
referirse a una o varias personas, pero todas ellas determinadas, ejemplo: la
liquidación de un impuesto sucesoral, en el cual se impone el impuesto que han de
sufragar diferentes herederos del de cujus (individuo que ha fallecido y del cual se
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ha desprendido un proceso sucesoral). En el artículo 72° de la Ley Orgánica de
Procedimientos Administrativos venezolana, establece que: “Los actos
administrativos de carácter general o que interesen a un número indeterminado de
personas, deberán ser publicados en la Gaceta Oficial que corresponda al
organismo que tome la decisión. Se exceptúan aquellos actos administrativos
referentes a asuntos internos de la administración. También serán publicados en
igual forma los actos administrativos de carácter particular cuando así lo exija la
ley”.

2. SEGÚN EL CONTENIDO: Desde el punto de vista de su contenido, según


Ojeda Raiza (2012, pp: 165), los mismos pueden ser actos administrativos
definitivos y de trámites, los cuales están establecidos en los artículos 9°, 62°,
63° y 85° de la Ley Orgánica de Procedimiento Administrativo venezolana. Por
su parte el artículo 9° establece: “Los actos administrativos de carácter
particular deberán ser motivados, excepto los de simple trámite o salvo
disposición expresa de la ley. A tal efecto, deberán hacer referencia a los
hechos y a los fundamentos legales del acto”, siendo ésta una regla general.
Los actos definitivos: son aquellos mediante los cuales se define con
plenos efectos jurídicos las cuestiones sometidas a la consideración o
decisión de la Administración, según (CPCA Magistrado ponente: Pedro
Miguel Reyes. RDP, N°31, Julio-Septiembre 1.987, pp.78-79), por lo
que, los mismos se emiten como culminación del procedimiento
administrativo, y contienen la voluntad esencial del órgano competente
sobre el asunto ventilado, es decir, la concesión o negativa de un
petitorio, mandato, permiso o prohibición, contenida su base legal en el
Artículo 63° de la norma mencionada la cual establece en su primer
aparte: “El procedimiento se entenderá terminado por el desistimiento
que el interesado haga de su solicitud, petición o instancia. El
desistimiento deberá formularse por escrito. En caso de pluralidad de
interesados, el desistimiento de uno de ellos no afectará a los
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restantes”.
Los actos de trámites: según (CSJSPA. Magistrado Ponente: Román
J. Duque Corredor. RDP, N° 40, octubre-diciembre 1989, pp.118-119),
establece que los actos de tramite no son susceptibles de ser
impugnados directamente mediante el recurso contencioso-
administrativo, salvo que causen indefensión o prejuzguen sobre lo
definitivo. Según Martínez Eloy (2010) expresa en su texto Manual de
Derecho Administrativo, que el procedimiento para la elaboración de un
acto administrativo consta de numerosos trámites, de carácter previo,
por lo que, es definido como actos preparatorios o de trámites, muy
utilizados en nuestro país en los procedimientos legales para obtener
concesiones, por ejemplo de hidrocarburos, arrendamiento de tierras
baldías, registro de marcas de fabricas y patentes, entre otras.
Actos creadores de derechos o que establecen obligaciones:
cualquier acto administrativo de efectos particulares que declara o crea
derechos o intereses a favor de particulares, no puede ser revisado y
revocado por la administración, estando el principio de revocación
establecido sólo para los actos administrativos que no crean ni declaran
derechos a favor de los administrados, todo establecido en el artículo
82° de la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos venezolana,
lo que trae como consecuencia de este principio de irrevocabilidad de
los actos administrativos que crean o declaran derechos o intereses en
favor de sus destinatarios, claramente establecido en el artículo 19°
numeral 2 en la norma mencionada, el cual sanciona con nulidad
absoluta aquellos actos administrativos que deciden asuntos
previamente decididos en forma definitiva y que han creado derechos
individuales; es decir, que revocan actos administrativos previos que
han creado o declarado derechos o intereses a favor de los
administrados. La consecuencia de un acto afectado de la sanción de
nulidad absoluta, es que es nulo e inválido según el artículo 83° de la
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misma norma, y no puede producir ningún efecto legal, permitiendo así
a la administración reconocer en cualquier momento dicha nulidad
absoluta.
3. SEGÚN LA MANIFESTACIÓN DE LA VOLUNTAD : La manifestación de
voluntad que produce el acto administrativo, es aquella que debe ser expresa y
formal, es decir, conteniendo el acto una serie de requisitos que deben
manifestarse por escrito, conforme tal como se establece en artículo 18° de la
Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos, el cual regula el acto
administrativo como se describe a continuación: “Todo acto administrativo
deberá contener:
1. Nombre del Ministerio u organismo a que pertenece el órgano que emite
el acto.
2. Nombre del órgano que emite el acto.
3. Lugar y fecha donde el acto es dictado.
4. Nombre de la persona u órgano a quien va dirigido.
5. Expresión sucinta de los hechos, de las razones que hubieren sido
alegadas y de los fundamentos legales pertinentes.
6. La decisión respectiva, si fuere el caso.
7. Nombre del funcionario o funcionarios que los suscriben, con indicación
de la titularidad con que actúen, e indicación expresa, en caso de actuar
por delegación, del número y fecha del acto de delegación que confirió la
competencia.
8. El sello de la oficina.
El original del respectivo instrumento contendrá la firma autógrafa del o de
los funcionarios que lo suscriban. En el caso de aquellos actos cuya
frecuencia lo justifique, se podrá disponer mediante decreto, que la firma
de los funcionarios sea estampada por medios mecánicos que ofrezcan
garantías de seguridad.
Es importante destacar que la Ley admite la manifestación de voluntad tacita
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de la Administración, derivada del silencio administrativo, tal como se tipifica en la
norma mencionada en su artículo 4°, el cual establece: “En los casos en que un
órgano de la administración pública no resolviere un asunto o recurso dentro de
los correspondientes lapsos, se considerara que ha resuelto negativamente y el
interesado podrá intentar el recurso inmediato siguiente, salvo disposición expresa
en contrario”, por tanto, todo acto administrativo tácito producido como
consecuencia de una disposición legal que le atribuyen efectos al silencio
administrativo, ya sean dichos efectos positivos o negativos, el mismo está sujeto
a los mismos principios y normas de derecho administrativo que rigen la actuación
administrativa, incluso aquellas que rigen su revocación.

4. SEGÚN SU IMPUNIDAD: Llamados también Actos Administrativos Firmes,


según (CSJ_SPA. Magistrado Ponente: Luis H Farías Mata. RDP, N° 53¬54,
enero-junio 1993, pp.201-202), el cual establece que todo acto administrativo
es firme cuando han sido agotados, tanto en vía administrativa como
jurisdiccional, los recursos para impugnarlos, o se ha dejado transcurrir el lapso
para su ejercicio. Los actos administrativos firmes no puede ser impugnado por
los recursos ordinarios, y sobre el cual el único recurso que procede, es el de
revisión, siendo su basamento legal en la Sección Cuarta del Recurso de
Revisión, artículo 97° de la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos,
toda vez que establece tres casos específicos; al contrario de los actos
administrativos que no son firmes, quiere decir, que pueden ser impugnados, y
poseen su base legal en el articulado 85° de la norma descrita, toda vez que
establece: “Los interesados podrán interponer los recursos a que se refiere
este capítulo contra todo acto administrativo que ponga fin a un procedimiento,
imposibilite su continuación, cause indefensión o lo prejuzgue como definitivo,
cuando dicho acto lesione sus derechos subjetivos o intereses legítimos,
personales y directos”. Para concluir con éste tipo de clasificación, según
Martínez, Eloy (2010) en su texto Manual de Derecho Administrativo, expresa
que: “un acto que ha causado estado es aquel que agota la vía administrativa;
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constituye la palabra final de la Administración sobre un problema
determinado, razón por la cual se dice que es un acto firme en la vía
administrativa”.
5. SEGÚN SU EJECUCIÓN: en materia de clasificación de los actos
administrativos, debe señalarse una clasificación según la ejecución, con la
finalidad de distinguir el acto material de ejecución del acto administrativo
formal. Su basamento legal se encuentra tipificada en el artículo 78° de la Ley
Orgánica de Procedimientos Administrativos venezolana, el cual establece:
“Ningún órgano de la administración podrá realizar actos materiales que
menoscaben o perturben el ejercicio de los derechos de los particulares, sin
que previamente haya sido dictada la decisión que sirva de fundamento a tales
actos”, por lo que, según Ojeda, Raiza (2012) establece que: ningún acto
material de ejecución no puede afectar o perturbar los derechos de los
particulares, los cuales no pueden realizarse sin que exista previamente un
acto administrativo que sirva de fundamento a dichos actos materiales”.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Brewer, Allan. Algunos Principios Generales del Derecho Administrativo en
Venezuela, en particular, sobre el Procedimiento Administrativo y Los
Efectos del Silencio Administrativo. (s.d) recuperado de:
http://allanbrewercarias.net/Content/449725d9-f1cb-474b-8ab2-
41efb849fea2/Content/I,%201,%201041.%20PRINCIPIOS
%20GENERALES%20SOBRE%20EL%20PROCEDIMIENTO%20Y
%20SILENCIO%20ADMINISTRATIVOA.%20Congreso%20DA%20Puebla
%202011.do.pdf
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. N° 5.908, Caracas,
2009.
Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos. (1981). Publicada en
Gaceta oficial N°: 2818, de fecha 01/07/1981.
Martínez, E. (2010). Manual de Derecho Administrativo. Caracas,
Venezuela: Exlibris.
Ojeda, R. Actos Administrativos. Aporte Jurisprudencial. Anuario de
Derecho. Año 29, N° 29. Enero-diciembre 2012. Mérida-Venezuela.
Recuperado de:
http://www.saber.ula.ve/bitstream/handle/123456789/37043/articulo6.pdf;jse
ssionid=3071983A7C97EEA6306C9B6ED32B5DD4?sequence=1

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