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Estimulación temprana:

¿Cómo nace el termino de ET?


El término de ET nace al calor de la Revolución Industrial y todo el cambio que
esta produce: mayor movimiento desde las zonas rurales a las urbes, padres que
trabajan y dejan a las madres con los hijos solas; cambian las modalidades de
crianza y educación de los niños.
Desde los movimientos ideológicos que surgen en esa época la Estimulación
Temprana aparece como una forma especializada de atención a los niños/as que
nacen en condiciones de alto riesgo social, y en el que se privilegia a aquellos que
provienen de familias proletarias y de sectores marginales.
Declaración de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas:
Los movimientos fuertes de ET tienen un fondo ideológico y surgen en la
Declaración de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, el 20 de noviembre
de 1959, que postula:
“El niño física y mentalmente impedido o que sufra algún impedimento social debe
recibir tratamiento, la educación y los cuidados especiales que requiere su caso
particular”
En aquel tiempo la idea general que se tenía era que el desarrollo psicológico y
motor del niño era algo estático y determinado de forma genética. Es interesante
ubicar que lo temprano se situaba como no tratable (contrariamente a lo que
pensamos ahora), las intervenciones eran pasivas, no había mucho para hacer.
Por lo cual, toda acción que pretendería cambiar algo, que se entendía como del
orden de lo invariable, estaba destinado al fracaso.

La ET surge como una nueva disciplina: La ET como disciplina nueva surge


alrededor de los años 40, como un tratamiento activo de los procesos que,
justamente, antes se consideraban intratables.
Esto fue posible gracias a los avances surgidos en campos tales como la
neurociencia, medicina, psicología, psicomotricidad, terapia ocupacional,
psicopedagogía, miles de investigadores empezaron a desmitificar la tesis de la
carga orgánica invariable.

Estimulación Temprana: La estimulación, el aprendizaje, las experiencias


tempranas, tanto emocionales como cognitivas, son de gran relevancia. Cualquier
tipo de estimulación que se ejerza sobre un niño/a de entre 0-6 años, tiene mayor
impacto que cualquier experiencia a lo largo de toda su vida. Son las primeras
marcas, las primeras inscripciones en el aparato psíquico.
Freud dotaba de gran relevancia a las experiencias tempranas en los niños, en
forma o bien de traumas nocivos para el psiquismo o bien de fijaciones de
determinado tipo de satisfacciones que tienen la tendencia particular a repetirse y
a construir o reconstruir las posteriores relaciones en el adulto.
Hay que tener en cuenta que la estimulación es una forma de desafío, de presión
para la mente del bebé y dependiendo de su forma puede producir:
SATISFACCIÓN Y APRENDIZAJE
Lo que pretendemos desde la ESTIMULACIÓN TEMPRANA es que puedan darse
la anudación de estas dos cosas.
Sin motivación el aprendizaje es, sino imposible, un desafío muy grande. Es por
esto, que está conjunción –satisfacción y aprendizaje- debe convertirse en axioma
para un buen trabajo en estimulación temprana.
Definiciones generales de estimulación temprana:
Podemos definir a la estimulación temprana, como una transdisciplina, pensando a
esta como un espacio donde se conectan diversas teorías.
Reflexionemos sobre algunas definiciones…
“Es el conjunto de medios, técnicas y actividades aplicadas en forma sistemática y
secuencial que se emplea en niños desde su nacimiento hasta los seis años, con
el objetivo de desarrollar al máximo sus capacidades cognitivas, físicas y
psíquicas. Permite, también, evitar estados no deseados en el desarrollo y ayudar
a los padres con eficacia y autonomía, en el cuidado y desarrollo del infante”
(Terré, 2002)
En esta definición vemos que primero habla de sistemática, es decir, que es
necesario tener un método y un objetivo, un ordenamiento, para trabajar con un
niño. Luego, secuencial, es decir, que ese orden sigue un curso, una continuidad,
hace serie. En esto podemos pensar que la idea es adaptarlo a la etapa evolutiva
que se encuentre el niño y guiarnos por una secuencia lógica. Sin embargo, hay
que estar advertidos de que está secuencialidad y sistematización del proceso, no
nos imposibilite de introducir modalidades terapéuticas creativas que se adapten al
caso por caso. Ni tampoco dejar de tener en cuenta la influencia que pueda
ejercer el propio ambiente, lo social, la familia y la cultura en cualquier etapa
evolutiva.
La Atención Temprana, desde los principios científicos sobre los que se
fundamenta: Pediatría, Neurología, Psicología, Psiquiatría, Pedagogía,
Fisioterapia, Lingüística, etc., tiene como finalidad ofrecer a los niños con déficits o
con riesgo de padecerlos un conjunto de acciones optimizadoras y
compensadoras, que faciliten su adecuada maduración en todos los ámbitos y que
les permita alcanzar el máximo nivel de desarrollo personal y de integración
social.” (Libro blanco de la Atención Temprana, 2003)

Intervención temprana: Es de carácter preventivo. La intervención está dirigida a


familias de riesgo o que presentan un problema ya establecido.
Estimulación temprana: Se trabaja con el niño y actúa sobre las 4 áreas del
desarrollo del bebé. Estas cuatro áreas serían la psicomotora, la comunicativa
lingüística, la perceptiva cognitiva manipulativa y por último el área de la
autonomía e interacción social.
Educación temprana: Se realiza mediante la escolarización y consiste en acceder
a la cultura del grupo en el que está integrado el niño.

En relación a la ET podemos ver dos posiciones:

1. Proporcionar los medios adecuados para el desarrollo cognoscitivo, emocional,


cultural o social y psicomotor en un niño sin ningún problema en el desarrollo.
2. Proporcionar los medios adecuados para el desarrollo cognoscitivo, emocional,
cultural o social y psicomotor en un niño con un diagnóstico preciso que afecte una
o todas estas áreas.
Entre estas dos posiciones hay que tener mucho cuidado dado que, si bien la
estimulación puede ser buena en ambos casos, es necesario no sobreestimular, ni
excitar los sistemas neuronales por tiempos prolongados.
Hay que pensar la estimulación en términos de dosis; escuchar al niño y poder ver
sus tiempos.
Es él quién nos va a ir marcando el ritmo de períodos ventana donde se puede
ejercer una intervención y períodos donde sea preciso un descanso.
En esta era la sobreestimulación, muchas veces, viene dada por las pantallas,
celulares y demás dispositivos electrónicos.
Los estímulos deben estar presentes en la cantidad, la calidad y el momento
adecuado; la hiperestimulación, la estimulación fluctuante y la estimulación a
destiempo son tan nocivas para los sistemas funcionales como la subestimulación
misma (Wernicke, 1986).

Posición de dos psicoanalistas reconocidas en el ámbito: Delia


Maidagan y Celina Brinkworth
Es necesario que antes de cualquier consulta se encuentre una demanda. El
hecho postmoderno relacionado con el capitalismo imperante, ubica a los bebés
en serie como objetos de consumo que se manifiesta a través de la oferta que se
les hace a los padres: ropa de moda, chiches “estimuladores”, programas de
Estimulación Temprana, etc.
“Intervenimos tempranamente en la vida del bebé porque, guiándonos por
comprobaciones clínicas, sabemos que cuanto más temprano intervengamos con
mayor flexibilidad ceden los síntomas en el desarrollo del bebe”
Intervenimos tempranamente también porque estamos en los inicios de la vida, en
los momentos de inscripciones primordiales, en los momentos en donde aún nada
ha sido marcado; entonces cualquier operación clínica que hagamos en este
tiempo va a adquirir el carácter de una marca estructurante y definitiva. Por eso es
fundamental cuando algo del desarrollo se ve amenazado poder pensarlo y tomar
una decisión sobre quién, cuántos y cómo se harán cargo de la intervención.

PREVENCION: Niveles en los cuales se enmarca la estimulación


temprana:
1. Prevención primaria: Se dirige a la mejora del medio de vida del niño con el fin
de evitar la aparición de trastornos. Actúa sobre el ambiente familiar o social.

2.Prevención secundaria: Consiste en detectar lo más tempranamente posible los


trastornos a fin de evitar su cronicidad e instalación de manera definitiva.
3. Prevención terciaria: Intenta minorar, disminuir los síntomas o presentaciones
sintomáticas de cuadros mórbidos ya instalados.

Algunas formas de prevención


1- Escuela para Padres:

- Prevención primaria
Tiene como objetivo: el esclarecimiento, la reflexión y el aprendizaje de la
resolución de los conflictos que surgen en el vivir cotidiano y en la interacción
padres – hijos.
En la escuela para padres, ellos:
1- aprenden se informan acerca de dificultades del niño en cada etapa evolutiva,
las crisis evolutivas, los periodos críticos del desarrollo.
2- reconocen que el hijo es una persona diferente e independiente que no debe
limitarse a cumplir expectativas familiares
3- reflexionan acerca de sus prácticas de gobierno y de los modelos que recibieron
4- incorporan modelos, códigos y distintas maneras de resolver situaciones, lo cual
les permite desarrollar la creatividad en la crianza de los hijos
Estos programas son un importante factor de cambio en las relaciones familiares.
Sería de gran utilidad su extensión y adecuación a los diferentes momentos de la
familia: padres del recién nacido, del deambulador, ingreso a escolaridad, etc. En
algunos países, las escuelas para padres o el entrenamiento del rol parental son
de corte obligatorio. Generalmente cuando los padres asisten ya están frente a un
conflicto y se sienten condicionados por la ansiedad, no obstante, los aprendizajes
que logran en esas situaciones pueden permitir prevenir futuras dificultades.
- Prevención secundaria: Se puede incluir la escuela para padres de niños
adoptados, maltratados, perturbados física y psíquicamente, con trastorno de
aprendizaje, de conducta, adicciones etc.
Se trabaja con la elaboración del duelo por tener un hijo diferente, se busca que
éste pueda ser libidinizado (cargado afectivamente) y se pretende lograr la
asignación de un lugar sano, en la estructura familiar, para el niño con
capacidades especiales. En el camino de elaboración del duelo que implica el no
tener un niño normal, puede resentirse el afecto dirigido hacia el niño, incluso
pueden aparecer sentimientos de rechazo, con la consiguiente sensación de culpa
Modalidad de trabajo: Se usan grupo de reflexión, coordinados por un agente de
salud mental (profesionales de la psicología, asistentes sociales, enfermeras,
maestro etc) que forma parte de un equipo interdisciplinario con un entrenamiento
adecuado a la dinámica de grupo
No se emplea la interpretación ni el consejo
Se estimula la participación, la cooperación y el intercambio
2- Prevención en la familia
En la familia el niño se humaniza, encuentra respuesta a sus necesidades,
encuentra contención y apoyo, y modelos para formar su identidad y desarrollar
las capacidades específicamente humanas.
A partir de los vínculos que establecen en la familia se aprende el amor, el odio, la
ternura y la agresión. Cómo defenderse, cómo resolver problemas, cómo
relacionarse con las figuras de autoridad, y cómo relacionarse con los pares.
En la base de muchos trastornos mentales se encuentran distorsiones y
disfunciones en los vínculos familiares, de esto se desprende la importancia de la
detección precoz y de la corrección de los mismos y de posibles fallas en el rol
parental.
3- Prevención y pediatría
El agente privilegiado de prevención en la familia es el pediatra, suele ser el primer
terapeuta externo en ser aceptado como promotor de cambios. Es él quien tienen
el primer contacto con el paciente y su familia, por eso suele ser de gran
importancia para el diagnóstico precoz, incluso en el Autismo:
 puede reconocer perturbaciones en el vínculo mamá bebé
4- Prevención y comunidad educativa
En el ámbito escolar se pueden diseñar charlas para padres, escuelas para
padres. También se puede trabajar con los docentes en la reflexión acerca de su
rol, del modo en que pueden convertirse en agentes de prevención. Así como en
el reconocimiento de la influencia que sus conocimientos y vínculo que establecen
con el niño y con la familia, en la confianza que depositan en ellos los padres y el
niño.
Se los debe entrenar para coordinar escuela de padres, detectar posibles
perturbaciones en el niño que pueden tener su origen en el núcleo familiar.
Se requiere de un trabajo interdisciplinario y participativo de todos los miembros
de la comunidad educativa
Prevención en las distintas etapas del desarrollo, prevención prenatal y
neonatal:
Consiste en vigilar la buena evolución del embarazo, parto y primeros días de vida
del recién nacido.
En esto debe incluirse:
Diagnóstico precoz de posibles enfermedades en la madre y en el niño por nacer.
Esta prevención médica suele ser más fácil porque sus criterios son objetivos,
ligados esencialmente a condiciones fisiológicas.
Los recursos materiales y psicológicas que permiten a la mujer embarazada estar
en las mejores condiciones para recibir al bebé. Esto requiere, en el plano
psíquico, indagar en el significado que tiene la maternidad, los vínculos familiares
de la mujer, y la red social de apoyo, entre otros aspectos a tener en cuenta. Se
busca establecer un vínculo temprano adecuado.
Prevención en la primera infancia: Consiste en vigilar el buen desarrollo físico,
psíquico y psicomotor del lactante con el fin de evitar las situaciones patógenas
mejor conocidas: ruptura del medio familiar, carencia afectiva
. Consiste también en descubrir lo más precozmente posible los trastornos
indicadores de una patología ulterior.
Prevención en edad escolar y en la adolescencia: En estas edades la prevención
suele tener un carácter más secundario o terciario. De todos modos, se puede
trabajar con diferentes áreas como:
 El Juego
 La psicomotricidad
 Las relaciones sociales
 La adaptación a la escolaridad
 Los vínculos con los hermanos
 Aspectos de socialización secundaria
 Desarrollo moral

Destinatarios de la Estimulación Temprana:


Principalmente a tres grupos de niños denominados población de alto riesgo:
Este grupo presenta un diagnóstico claramente evidente desde el primer momento
del nacimiento.
 Niños que presentan deficiencias orgánicas, físicas y biológicas que son
evidentes desde el primer momento del nacimiento o se han detectado en el
periodo prenatal.
 Niños que presentan un accidente de salud no necesariamente dramático. Estos
problemas pueden estar asociados posteriormente a dificultades en el desarrollo
en general, como por ejemplo niños prematuros, falta de oxígeno en el parto.
 Niños que proceden de ambientes más bien deficientes (económicos, sociales,
familiares...)
El diagnóstico y la posterior intervención se tienen que empezar lo antes posible,
ésta debe continuar durante los siguientes años de vida e incluir el medio familiar.
El diagnóstico, como la intervención, tienen que ser de manera evolutiva,
adaptados a las características del niño, conforme va avanzando el tratamiento.
En general los programas de estimulación temprana se aplican para población de
riesgo, pero no son exclusivos de ellas. Desde un enfoque desde la psicohigiene
se los puede plantear para desarrollar o actualizar las potencialidades del niño,
mejorar la calidad del vínculo temprano con la madre.
¿Qué "SON" los programas de Estimulación Temprana?
 Son una manera muy especial de contactar y divertirse con el niño, siguiendo
los ritmos que marca su desarrollo, animándole y teniendo confianza en sus
posibilidades. Estos programas ayudan a desarrollar la creatividad y la
imaginación en los padres y en los niños
 Permiten prevenir y mejorar posibles déficits del desarrollo del niño.
Apuntan a normalizar sus pautas de vida.
Consisten en promover en el niño el desarrollo de una actitud sana ante las
personas, juguetes...De este modo es posible fijar su atención y despertar su
interés ante los acontecimientos de la vida. Pretende favorecer la autonomía del
sujeto, y lograr un nivel socioeducativo aceptable.
 Implican poner los cimientos para facilitar el crecimiento armonioso y saludable,
así como para el posterior aprendizaje y personalidad del niño
 Requieren de trabajar en una serie de tareas de una manera constante, pero
introduciendo una pequeña novedad. Si no hay suficiente constancia en los
aprendizajes, no aprenderá la tarea y se le olvidará rápidamente, y si la novedad
es excesiva se va a desconectar y abrumar.

¿Qué papel/ función desarrollan los padres en los programas de


Estimulación Temprana?
Son programas focalizados en los padres, ya que éstos aprenden del profesional y
luego se les anima a seguir con el programa en casa, a la vez que se desarrollan
en el colegio. El programa de estimulación se desarrolla como una acción global
que puede ayudarles a ellos y al niño, por medio de la información y la
observación, que llevará implícito un trabajo más elaborado de programación de
objetivos de desarrollo, que ellos van a poner en práctica en su casa, de una
manera relajada, aprovechando el ambiente familiar con todas las posibilidades
que tiene. Estos padres disfrutarán al jugar con el niño, aceptarán los consejos de
los profesionales, pero sin depender exclusivamente de ellos, aportando ideas
conforme se van realizando los aprendizajes. Adquirirán más seguridad y
confianza en sus propias posibilidades como padres, conociendo sus propias
limitaciones, planteándose unos objetivos sensatos a lograr con el niño.
Los programas de estimulación constituyen: Sugerencias que ellos
probablemente van a adaptar a su propio ambiente familiar. Los objetivos del
programa deben ser bien explicados, con pautas sencillas y con una extensión
suficiente. Éstos irán variando cuando los logros del niño así lo requieran, sin
plazo fijo ni frustración porque se tarde en conseguirlos
¿Qué áreas se trabajan?
El tipo de intervención dependen de tres niveles o necesidades:
Necesidades reales del niño a partir del diagnóstico.
Necesidades de la familia.
Necesidades que tiene el equipo multiprofesional de cara a la puesta en marcha
de los programas.
Las áreas junto con los objetivos que se trabajan
son:
Lenguaje:
Se centra su atención con actividades de tipo visual, auditivas, manipulativas.
Formación de conceptos: correspondencias y clasificación de objetos, conceptos
de coordenadas temporoespaciales, referidas a la vida cotidiana.
Comprensión simbólica. Reconocer el significado de los objetos, personas,
acciones. Imitación de roles, comprender estos símbolos e interpretarlos
verbalmente.
Comprensión verbal.
Lenguaje expresivo.

Multisensorial:
Aprovechamiento y utilización de los restos auditivos y visuales, en el caso de
tratarse de un niño con algún déficit sensorial.
Sistemas de comunicación.
Estimulación auditiva y táctil a través del juego.
Estimulación de todos los sentidos, mediante diversas experiencias y
exploraciones.
Coordinación de la movilidad y desplazamiento.
Acceder a la información, analizándola.
Trabajaremos habilidades de la vida cotidiana.

Control del movimiento corporal


Se trabaja todo el cuerpo, pero se hace hincapié si tienen algún miembro
afectado.
Estimular todas las vías de percepción, ya que es frecuente que los niños con
deficiencias físicas presenten trastornos psíquicos, por lo tanto se potencia una
integración multisensorial.
Fisioterapia y relajación.
Identidad y autonomía
Se realizan tareas que favorezcan la autonomía en el sujeto: en la alimentación,
movilidad, orientación.
Control de esfínteres, higiene.
Vestirse y desvestirse.
Social
Comunicarse con el medio que le rodea: personas, objetos.
Tomar conciencia de su entorno y fijar su interés en él.
Trabajaremos el juego como factor decisivo en
estas edades.

Objetivos de la estimulación temprana:


Los objetivos de la estimulación temprana pueden ser muchos o pocos
dependiendo de la patología a tratar.
Pero podemos definir en términos generales que entre sus objetivos se
encuentran:
- Reducir los efectos de una deficiencia o déficit sobre el conjunto global del
desarrollo del niño proporcionando un clima emocional positivo y una forma
organizada de brindarle información a sus sentidos, tratando de ajustar los
ofrecimientos de estas acciones a su verdadera capacidad para enfrentarse
a su entorno, teniendo en cuenta sus diferencias individuales, gustos y
preferencias
- Desarrollar habilidades y aptitudes con la intención de generar logros que
redunden en un beneficio en la vida social, física y emocional del niño.
- Garantizar a niños que presentan problemas en el desarrollo, todo aquello
que desde la vertiente preventiva y asistencial pueda potenciar su
capacidad de desarrollo y de bienestar, posibilitando de la forma más
completa su integración en el medio familiar, escolar y social, así como su
autonomía personal.
Hay que pensar al niño como un ser global atravesado por distintos ejes
interdependientes: condicionantes biológicos, familiares, económicos, culturales y
sociales.
El niño al estar en un grado alto de dependencia de los otros, por el estado de
prematuración biológica con el que nace, es altamente influenciable por su
entorno.
El sistema nervioso, el cerebro, la biología es un sistema abierto en perpetuo
intercambio con el medio. Todos los factores deben ser tenidos en cuenta a la
hora de armar un programa estricto en estimulación temprana. Es por esto mismo
que es necesario que antes de cualquier intervención tengamos una entrevista con
padres, terapeutas y colegio o jardín.

Otra definición de ET:


“Conjunto de acciones dirigidas a promover las capacidades físicas, mentales y
sociales del niño, a prevenir el retardo psicomotor, a curar y rehabilitar las
alteraciones motoras, los déficits sensoriales, las discapacidades intelectuales, los
trastornos del lenguaje y, sobre todo, a lograr la inserción de estos niños en su
medio. (…)
Su gran objetivo es mejorar la calidad de la vida y lo logra al aprovechar al máximo
el vasto potencial existente en el sistema nervioso central (SNC) del niño,
despertando capacidades dormidas, recuperando restos anatomo funcionales y
desarrollando nuevas posibilidades. Cuenta con el factor de la plasticidad cerebral
y la posibilidad de su mayor desarrollo por adiestramientos y estimulaciones y
trata, que "el bebé se exprese y crezca apropiándose de su propio deseo". Pero
también cuenta con la capacidad humana de responder al estímulo social: a la
sonrisa, la caricia, el estímulo físico o verbal. Por lo tanto, la estimulación tiene una
esencia social.”

En la estimulación temprana se incluyen muchas


dimensiones, en este momento se me ocurren estas:
- Vínculos familiares
- Significado y vivencia de la maternidad
- Aspectos psicológicos (afectivo, desarrollo del
aparato psíquico, etc)
- Aspectos cognitivos
- Psicomotricidad
- Nutrición y salud física en gral
- Contexto socio-económico de la familia
- Actividad lúdica.

El juego y La estimulación temprana


“El bebé responde al rostro del adulto sonriendo, si se cumplen ciertas
condiciones: que el rostro se muestre de frente, de modo que el infante pueda ver
los dos ojos y que el semblante tenga movilidad. No importa qué parte del rostro o
de la cabeza se mueva […]no hay ninguna otra cosa, ni siquiera el alimento del
infante, que provoque esta respuesta” Spitz, R., A. (1969)
La estimulación temprana ¿apoyo o sustituto?, hoy día al hablar de estimulación
temprana viene a la mente la imagen de estancias y guarderías para niños
lactantes y en edad preescolar, llevar a los niños a estas instituciones quedando a
cargo de los “profesionales” que conocen las actividades y ejercicios que
potencializaran las habilidades/ destrezas de los niños. En un libro titulado
Educación infantil se comenta en su primer capítulo (La educación durante la
primera infancia y nosotros: ¿Qué significa ser un profesional?), que el avance
científico ha permitido conocer de forma más profunda el desarrollo de los niños y
la manera en que estos aprenden, pero lo que se podría resaltar es que este
avance, desde el punto de vista del autor, permite a los profesionales ver a los
niños de una manera diferente, desvelando la potente capacidad que tienen para
aprender desde una edad temprana, dando pie a los “profesionales” a desarrollar
planes y programas para enseñar a los niños desde su nacimiento (Morrison.,
2005).
Afirmaciones de este tipo dan pie a cuestionarse ¿Cuál es la urgencia de la
sociedad para que los niños reciban una enseñanza y educación desde la edad
más temprana posible? ¿en qué momento estos padres y profesionales se
detienen a pensar en la constitución subjetiva y la vida psíquica del niño? ¿Qué
tan importantes son o puede llegar a ser estos 2 componentes del niño para los
profesionales? Como bien lo menciona Rene Spitz, un niño de tan solo 3 meses
no responderá con una sonrisa a cosa alguna que no sea la mirada del Otro.
Entendiéndose como Otro (Pérez de Plá, 2000), a aquel que lo sostiene y le da los
elementos para poder diferenciarse de él (el Otro). Esta conducta del bebé parece
ser innata sin embargo cuando no allá la marida del otro, la sonrisa se desvanece
y la conducta se debilita (Pérez de Plá, 2000). Pensando en esto, el desinterés del
otro por atender siquiera la sonrisa del niño estanca la capacidad del niño para
Ser, pues no hay de quien recibir una imagen de sí.
Ahora bien, se supondría que la estimulación temprana (ET) en su origen tendría
la utilidad de apoyar a los niños con capacidades diferentes, con retrasos en el
desarrollo biológico o a los niños con alteraciones genéticas, sin embargo, hoy en
día la estimulación temprana es concebida como: o “un conjunto de acciones que
tienden a proporcionar al niño sano las experiencias que éste necesita para
desarrollar al máximo sus potencialidades de desarrollo” (Santos.,2002, p.4) o “de
gran importancia para potenciar el crecimiento y desarrollo del menor, y a su vez
la vigilancia del crecimiento y desarrollo permite la detección oportuna de las
desviaciones en este proceso” (Santos., 2002, p.1)
Regresando a lo antes ya expuesto, se puede ver que el único interés que nace
para la estimulación temprana es el de potencializar las capacidades en el
desarrollo, y se deja a un lado al niño mismo, a su Ser, lo que podría traer como
consecuencias tempranas desviaciones patológicas, alteraciones o retrocesos en
el desarrollo (que paradójicamente no hay), y como consecuencias más tardías; el
pensamiento mecánico, el desinterés por la exploración del mundo y el no
cuestionamiento de los supuestos y afirmaciones. La dinámica familiar cada día
cambia más; padres divorciados, madres solteras, ambos padres con una vida
laboral, etc. probablemente esto no debería alterar el desarrollo y atención de los
niños, pero proporcional a ello brota la poca atención y escasa entrega de los
padres para con los hijos.
Desde lo que Esperanza Pérez de Pla (2000) plantea como ET se resalta que
estas actividades no son más que lo que comúnmente la madre (el Otro) hace con
su hijo(a) y si la ET es considerada como una herramienta seria desde el punto de
vista de apoyar la función materna para la consolidación del cuerpo del bebé y el
reforzamiento de los vínculos de padre - madre e hijo(a).
Para Esperanza “hay bebés que pierden contacto con el medio […]que resulta en
una situación que no le ayudo a tener interés en los otros seres humanos si no
que lo ha borrado como sujeto y lo ha robotizado” (Pérez de Pla, 2000). Desde la
autora no hay otro medio para promover el desarrollo del bebé que el jugar,
empero no un jugar cotidiano como menciona la UNICEF (2011):
“La estimulación temprana ayuda a fortalecer el cuerpo y a desarrollar las
emociones y la inteligencia de tu hijo o hija. Integra estas actividades a su juego
diario. Abrázale, felicítale, sonríele, háblale y dile lo mucho que lo quieres, así,
contribuirás a su desarrollo pleno y al cuidado de su salud.”

Definitivamente no es una técnica que debe utilizarse para optimizar el desarrollo


del niño, no es algo que se deba introducir de forma planeada y organizada a la
vida del niño, es más bien el “hilo conductor” (Rodulfo, 1996) que guiara la
constitución del Ser. Hablar del juego o el jugar trae consigo grandes
implicaciones puesto que al plantearlo desde su historia cronológica y los
diferentes autores que lo abordan, la concepción de este término cambia.
Comenzando con Freud, aquel que da un lugar al juego en la vida del niño,
antepone la función del juego, no como en sí mismo, sino como lo que el juego
permite al niño. Refiere que es una actividad simbólica (Ortigoza, 2010) que da pie
a resistir la angustia de la ausencia de la madre (el fort – da), en esta actividad el
niño es consciente de la realidad y su mundo del juego, permitiendo observar el
mundo interno, las fantasías y deseos del niño (Mori,2016).
En el avance de esta concepción del juego como una técnica, Melanie Klein lo
retoma y genera un planteamiento teórico de la utilidad del juego como medio de
expresión de los niños, desde el enfoque de Klein el juego será una técnica de
análisis de las simbolizaciones del niño, muy parecida al análisis de los sueños de
Freud, sin embargo, como la utilización del lenguaje en los niños es menos
elaborada, el juego y los juguetes permitirán vislumbrar las fantasías, deseos y
experiencias de un modo simbólico. Es como llevar a cabo la sesión con un adulto,
pero adaptándola al niño, mientras que el adulto habla el niño juega; “el juego de
los niños nos permite extraer conclusiones definidas sobre el origen de este
sentimiento…” (Klein, 2008)
Se puede observar que el camino del juego en estos 2 autores va enfocado más al
juego como una técnica para explorar el mundo interno del niño y la forma en que
simboliza, estos autores centran su teoría en “el juego del niño más que en el niño
jugando” (Mori,2016). posterior a estos planteamientos del juego en la vida del
niño, Winnicott entra en el campo con una postura teórica totalmente diferente
colocando al juego ya no como un sustantivo (Winnicott, 2006) si no como “un
verbo sustantivado” (el jugar), pues para este autor, al hablar sobre el jugar se
debe hacer como una cosa en sí misma.
Winnicott comenta que el jugar tiene un espacio y un lugar, no se encuentra ni
adentro del niño ni fuera de él, no pertenece al mundo exterior, más bien “es un
espacio potencial entre él bebé y
la madre” (Winnicott, 2006) que variaría indudablemente de las experiencias
vitales que la madre pueda crear en él bebé. El juego se encuentra en una
temporalidad distinta, que se vive por la experiencia que se creó ahí, un espacio
transicional que da pie a un espacio de la simbolización.
Por tal razón es necesario que este espacio potencial este motivado por el amor
de la madre, por el querer estar y no por el deber querer o el deber estar. Es
necesario porque el bebé necesita tener confianza en que hay un alguien con él y
que está dispuesta(o) a recibir y a devolver, como se comenta en un inicio, saber
de un Otro que sostiene y que da. Hasta aquí se pude vincular con lo que
menciona Esperanza Pérez de Pla de la ET como aquellas actividades cotidianas
que la madre hace con su bebé, el querer ser y estar para el niño ayudara a
optimizar su desarrollo.
Complementando con lo que menciona Ricardo Rodulfo, retomando fuertemente
la teoría de Winnicott, el jugar es una actividad creadora con un carácter de
producción; “no hay ninguna actividad significativa en el desarrollo de la
simbolización del niño que no pase vertebralmente por” el jugar (Rodulfo, 1996).
Desde la perspectiva de este autor existe una función más arcaica que la de
simbolizar, una que se ve desplegada en la constitución subjetiva, se refiere a la
necesidad de extraer materiales para la construcción del cuerpo, y estos
materiales solo se obtendrán a partir del cuerpo del Otro. Se agujera el cuerpo y
se extraen materiales que se van juntando permitiendo la elaboración de una
masa pegajosa que conformara el cuerpo. Para que el niño pueda rejuntar las
materias necesita de la espontaneidad cosa que puede desaparecer cuando se
aplican los programas de estimulación temprana actuales, puesto que el
comportamiento del niño es dirigido y regulado para cumplir un parámetro.
Como bien lo menciona Asturizaga y Unzueta (2008) “Nacemos creativos,
juguetones pero la vida, las circunstancias, las “normas” nos van imponiendo una
forma de actuar “normal”, que bloquea todo ese espíritu lúdico base del desarrollo
humano. Jugar es experimentar”. Aunque en el lugar de “la vida” y “las
circunstancia”, podría colocarse la ausencia y el deber estar del otro.
La conceptualización de la estimulación temprana podría verse como el apoyo a
devolverle al adulto la capacidad del jugar, la capacidad de ser el Otro que ama y
está dispuesto a Estar para ser arrancado y agujerado por él bebé, aquel bebé
que juega para elaborar y crear “un pegote” (Rodulfo, 1996). La ET debería
convocar al padre y madre a tener una relación potencial con él bebe, que sea
amorosa y espontanea. No buscando potencializar el desarrollo del niño, más bien
buscando las condiciones para que se del jugar.
REFERENCIAS
Asturizaga, E. & Unzueta, C.(2008). El estatuto del juego en la clínica psicoanalítica con
niños
http://www.revistasbolivianas.org.bo/pdf/rap/v6n1/v6n1a1.pdf
Klein M. (2008). El psicoanálisis de niños. Paidos. Recuperado de:
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