Está en la página 1de 9

Escuela hedonista

El período helenístico se extiende desde la muerte de Alejandro Magno (323 a.C.)


hasta la conquista romana de Egipto (30 a.C.). Esto influyó en la forma de pensar
de los griegos. Los ciudadanos empezaron a considerarse cosmopolitas, no solo
politas.
Los filósofos de esta época se desentienden de la política y de sus deberes
ciudadanos y empiezan a buscar soluciones individuales para conseguir la
felicidad al margen de la colectividad. Por esto, a las escuelas helenísticas se les
llama también escuelas de felicidad, porque buscan conseguir la felicidad y
compartirla con todos los que se acerquen a sus escuelas.

Las principales escuelas helenísticas fueron el epicureísmo, el estoicismo y los


cínicos. Además, en esta época seguían funcionando la academia de Platón y el
liceo de Aristóteles.

Estas escuelas tuvieron una importancia fundamental y algunas sobrevivieron


varios siglos ya en el mundo romano.

 Rasgos de la filosofía en este período:

- Cambia el concepto de «hombre»: Aristóteles hablaba de un «animal cívico»,


porque sólo la pólis era autosuficiente y sólo en ella podía realizarse plenamente.
Hundida la pólis, el ser humano es entendido más bien como «animal social»,
cuyo marco de referencia es la naturaleza y la humanidad, reclamando para sí la
autosuficiencia y autonomía que antes se reconocía a la ciudad.

- Por la inestabilidad de la época, la seguridad personal y la felicidad individual se

Convierten en las grandes aspiraciones del momento.

- Se busca la seguridad tomando como referencia las leyes inalterables de la


Naturaleza, del Cosmos. Se elabora una nueva Física y una nueva Ética de
carácter naturalista y cosmopolita.

- La filosofía estoica y epicúrea de la época sistematiza buena parte de su


doctrina, pero queda subordinada a los fines prácticos de la existencia: «sabio» no
es sólo el que sabe sino «el que sabe vivir.

- La filosofía ahora se concibe como un saber unitario, dividido en lógica, física y


ética, pero con una finalidad fundamentalmente moral. La especulación abstracta
carece de valor.

- En esta época florecen numerosas escuelas. Hay muchas influencias mutuas


pero también muchas polémicas. Eso explica el eclecticismo que vendrá a
continuación.

Las principales escuelas helenísticas fueron: Epicúreos, estoicos y escépticos.


Además en esta época seguían funcionando la academia de Platón y el liceo de
Aristóteles, y con el paso del tiempo surgió la escuela o movimiento neoplatónico
de Plotino, que también se considera helenístico y quedaban además un nutrido
grupo de sofistas. 

 para mi las escuelas tienen en común la actividad filosófica helénica, como el


amor de la sabiduría y la investigación,
que es una forma de vida, la forma de la
sabiduría. es como la perfecta paz del
alma.  

y la filosofía helenística es el periodo de


la filosofía occidental que se desarrolló
en el período helenístico. Comenzó con
Aristóteles y terminó con la extinción del
Neoplatonismo en el siglo VI.
Escuela del Epicureísmo
El Epicureísmo es una doctrina filosófica cuyo fundamento
principal es el pensamiento del filósofo griego Epicuro.
La afirmación más relevante de esta doctrina y también la
más polémica es que el mayor bien y el propósito de la
vida es el placer. En realidad se refiere más a los placeres
del intelecto ya que considera que los placeres sensuales
trastornan el espíritu.
Para Epicuro, una persona es feliz cuando puede
controlar sus miedos, el miedo al futuro, al fin de la vida y
a Dios. De modo que eliminar todos los miedos es el
objetivo primordial de esta filosofía.
Epicuro pensaba que el universo era eterno y sin límites,
constituido por cuerpos compuestos por átomos
indivisibles y por espacio; y que el hombre puede percibir las formas y sus
cualidades en función a la disposición que tienen estos átomos.
Epicuro se anticipó a Darwin con la idea de la selección natural, afirmando que la
naturaleza origina distintos tipos de organismos y que solamente sobreviven
aquellos que llegan a reproducirse y superarse.
La doctrina de Epicuro es esencialmente materialista desde el punto de vista
psicológico ya que sostiene que las sensaciones son producidas por una sucesión
de imágenes que dejan los cuerpos y que registran los sentidos.
Para Epicuro las sensaciones no engañan, es sólo la interpretación que hace el
sujeto la que puede estar equivocada.
Con respecto al alma, ésta se encuentra en cada parte del cuerpo en forma de
partículas de modo que cuando sobreviene la muerte tanto el cuerpo como el alma
desaparecen por igual.
La ética de Epicuro prioriza la justicia, el equilibrio entre placer y sufrimiento y la
honestidad; y la amistad para él es mejor que el amor, porque éste produce
intranquilidad y desequilibrio.
La felicidad es lograr la tranquilidad mediante el control de si mismo, el desapego
y la moderación.
Aunque Epicuro era materialista creía en que la voluntad era libre y que incluso
hasta los mismos átomos eran libres y que podían actuar con absoluta
espontaneidad.
Esta afirmación se asemeja notablemente a los conceptos de la mecánica
cuántica sobre el principio de incertidumbre.
Epicuro aceptaba a los dioses como seres eternos pero no creía que pudieran
influenciar en los humanos aunque gozaran contemplándonos.
La verdadera espiritualidad del hombre para Epicuro consiste a su vez, en
contemplar a los dioses ideales.
El Epicureísmo se desprestigió en virtud de la poca claridad que refieren sus
conceptos sobre la oposición entre los principios morales y el hedonismo que aún
hoy en día subsiste.
El gramático griego Apolodoro, los poetas romanos Horacio, y Lucrecio y el
estadista Plinio fueron sus discípulos prominentes.
Sin embargo esta escuela quedó en el olvido por muchos siglos, siendo revivida
recién en el siglo XVII en Francia por Pierre Gassendi.
Sigmund Freud también fundamenta su teoría en la doctrina de Epicuro con el
concepto básico del principio de placer como motivación psicológica humana
fundamental.
Otros seguidores aún hoy siguen siendo atraídos por el epicureísmo que
consideran a esta doctrina como la ética más influyente de los últimos tiempos.
Epicuro habla de un nuevo hedonismo: la felicidad está en los placeres -goces-
del cuerpo, siempre que sean naturales, moderados y sin excesos, disfrutados con
serenidad. También da mucha importancia a los placeres del alma (la amistad y
los recuerdos agradables, p.ej.), e incluso afirma que pueden ser superiores a los
del cuerpo, porque los corporales sólo se disfrutan en el presente, mientras que
los del alma abarcan el pasado, el presente y el futuro.
Epicuro tiene una concepción del «sabio» muy distinta de la que tienen los
estoicos: "sabio" no es quien se abstiene de todo placer, sino el que sabe gozar
moderadamente de lo natural y necesario. Prefería la soledad o la compañía de
unos pocos amigos íntimos en lugar del ambiente cosmopolita que los estoicos
consideraban ideal para desenvolverse.
Entendía que los procesos naturales no
estaban sometidos a un determinismo
férreo, como pensaban los mecanicistas,
porque los átomos se mueven libremente
en el vacío y esta ausencia de necesidad
hace posible que cada persona pueda ser
dueña de su destino. No temía a la muerte
ni vivía angustiado pensando en el final de
la vida. Creía que los dioses no
intervienen para nada en la vida de los hombres y que por esa razón era absurdo
pensar en la posibilidad de un castigo presente o futuro, resultado de la cólera
divina. Los placeres naturales, que eran lo importante para él, eran fáciles de
conseguir y también el dolor podía ser vencido con la actitud adecuada. Un ideal
de vida así resultaba especialmente atractivo en una época de terrores e histerias
colectivas como la de Epicuro.

Escuela sofista
El término sofista procede del vocablo latino sophista, aunque su origen
etimológico más lejano se halla en la lengua griega. Se conoce como sofista al
experto en retórica que, en la Antigua
Grecia, se dedicaba a la enseñanza del
sentido de las palabras. El concepto se
entendió de diversas formas a lo largo de
la historia. Muchas veces, el sofista era
considerado un sabio que, gracias a sus
conocimientos, podía educar a la gente.
Los sofistas, en este sentido, incluso
aconsejaban a los dirigentes y les
enseñaban cómo podían influir en la
población. Con el tiempo, algunos empezaron a acusar a los sofistas de arrogarse
una capacidad para la enseñanza de virtudes. Hubo sectores que señalaron a los
sofistas como tramposos que, haciendo uso de la retórica y de la dialéctica,
engañaban a las personas.
De esta manera, comenzó a calificarse como sofistas a quienes apelaban a los
sofismas para desarrollar sus razonamientos y convencer a los demás. Un sofisma
es una falacia: algo que, en apariencia, se presenta como válido, aunque en
realidad resulta falso .Puede decirse, en definitiva, que la noción de sofista cambió
con el paso del tiempo. En un principio, el sofista se dedicaba a la enseñanza y la
instrucción. Sin embargo, a partir de las posturas de Platón, Sócrates y otros
sabios, comenzó a asociarse a los sofistas al engaño. Así se llegó a la definición
de sofista como aquel que, empleando sofismas y falacias, engaña a las personas
y hasta obtiene un rédito de su capacidad para confundir al otro a través de sus
argumentos Epítome clásico Un paseo cronológico por las obras de los clásicos
griegos y latinos. Lo que dijeron y lo que ignoraron, a través de una mirada fresca
y actual. «Hay que poner en orden lo que nos transmitieron los antiguos y añadir lo
que nosotros mismos hemos descubierto». Pneumática, Herón de Alejandría. La
escuela sofista Sofista es un término derivado de sophia ("sabiduría"), y designa
por tanto al ingenioso y al gobernante práctico, a los poetas y a los educadores.
Sin embargo, al transcurrir el tiempo va adquiriendo un tinte despectivo, y ya en
Píndaro denota al charlatán. El paso a la designación despectiva no está
completamente claro: coincide con un incremento de las suspicacias de los
atenienses contra los que mostraban una mayor inteligencia, aunque Sófocles lo
atribuye al hecho de que los educadores cobraran por su servicio. Sin embargo, la
crítica a los sofistas por parte de Platón y Aristóteles proviene del uso de las
palabras como medio de persuasión (por delante de la verdad de los argumentos)
y de la utilización de la falacia como método.
Protágoras. Nacido en Abdera (Tracia) hacia 485 aC, fue un pensador viajero que
ejerció como maestro de retórica y conducta en Sicilia y ciudades de Asia Menor.
Vivió durante un par de temporadas en Atenas, donde conoció a Sócrates y fue
amigo de Pericles; éste le encargó redactar la constitución para la nueva colonia
de Turios (444 o 443 aC), en la que aparece por primera vez en la historia la
educación pública y obligatoria. Platón le acredita ser el inventor del papel de
sofista, y dice de Sócrates que guardaba estima por sus cualidades retóricas y la
profundidad de sus predicados, aunque contrario al uso que hacían de los
mismos. Durante su segunda visita a Atenas (muerto ya Pericles), fue rechazado y
castigado con la muerte o el exilio, supuestamente por su impiedad (habría leído
su obra Sobre los dioses, donde decía desconocer la existencia o la ausencia de
seres divinos). Murió en torno a 411 aC, al zozobrar el barco que le alejaba de
Atenas (tal vez cumpliendo el exilio o huir de la condena a muerte). En la obra
perdida Los discursos demoledores aparece su sentencia más famosa, transmitida
por otros autores de la Antigüedad: El hombre es la medida de todas las cosas, de
las que son en cuanto que son, de las que no son en cuanto que no son.  Es
conocida una anécdota que conforma la llamada paradoja de Protágoras;
anécdota recogida por Aulo Gelio en el siglo
II.
Antifonte: Nació hacia 480 aC, en Atenas o
en su colonia Ramnunte.Filósofo,
matemático, pero sobre todo orador, ganó
gran reputación escribiendo discursos por
encargo (en Atenas el litigante debía
defenderse en persona).Destaca por la
sutileza de sus argumentaciones, que
descansan sobre evidencias y testimonios,
así como en los 'argumentos de
verosimilitud' Identificaba el mundo de la
verdad con la naturaleza, y el de la
apariencia (el hombre) con lo falso. La
aspiración del hombre es el triplete naturaleza-verdad-bondad, pero en su camino
se interpone la ley, convención artificial, a veces contraria a lo natural y siempre
mudable. Murió hacia el 411 aC.
Gorgias. Su vida corre aproximadamente entre los años 485 y 380 aC.
Supuestamente nacido en Leontino (Sicilia), alumno de Empédocles y de los
retóricos Córax y Tisias. Viajó mucho por las ciudades griegas, hasta que terminó
por residir en Atenas en 427 aC, causando sensación por su dominio de la
palabra: se dice que, en los lugares público, argumentaba sobre cierto tema, y
cuando había (con) vencido a todos pasaba a defender la tesis contraria, y así
sucesivamente. Comparte el relativismo y el escepticismo de Protágoras, llegando
al nihilismo, y se le atribuye la obra Sobre la naturaliza o el no-Ser, donde ataca la
postura eleática, viéndose influido por ella. Su triple tesis sigue la siguiente línea:
nada existe; si algo existiese sería incognoscible; si algo fuera cognoscible, sería
incomunicable.
Hipias. Nacido a mediados del siglo V aC en la región de la Élide. Fue el
descubridor de la cuadratriz. Al parecer, estaba dotado de una excepcional
memoria, y desarrolló varios métodos mnemotécnicos. Se jactaba de poder
argumentar sobre cualquier tema, ya que su talento no eran los conocimientos,
sino la argumentación.
Pródico. Nació hacia el año 465 aC y seguía vivo en el 394 aC. Nació en Yulis, en
la isla egea de Ceos. Estableció la base para la teoría naturalista de la explicación
de los mitos, al establecer que los antiguos habían deificado las cosas útiles, tal y
como los egipcios adoraron al Nilo. Se interesó por el lenguaje, en particular por
los sinónimos.
Critias. Nacido hacia el 460 aC, fue uno de los Treinta Tiranos impuestos por
Esparta tras su victoria sobre Atenas. Prolífico autor y muy implicado en política
(defensor de Alcibíades, cabecilla oligarca y extremista), murió en el 403 aC, en el
campo de batalla que enfrentaba su facción contra los pro-demócratas de Trasíbul

Escuela Estoica
La Escuela Estoica nació en Atenas hacia el año 300 a.C. Su nombre lo debe al
lugar en el que sus miembros se reunían: la
puerta o pórtico (stoa) de columnas
decoradas por Polignoto. Su fundador,
Zenón de Citio, fue discípulo del cínico
Crates, el megárico Estilpón y el académico
Jenócrates, siendo el cinismo quien ejerció
sobre ella la mayor influencia.

El estoicismo fue, además de una escuela,


un modo de vivir y de concebir el mundo que
proyectó su influencia sobre la cultura
griega, la romana y, a través del tiempo, sobre todo el pensamiento occidental.
La grandeza de la escuela, tanto por la cantidad, calidad y variedad de sus
representantes, así como por su prolongada presencia a lo largo de los siglos,
llevó a los investigadores a dividirla en tres: 

Estoa Antigua (siglos III y II a.C.): Zenón de Citio, Aristón de Quíos, Cleantes de
Assos y Crisipo de Soles; 

Estoa Media (siglos II y I a.C.): Panecio y Posidonio; y  

Estoa Nueva o "estoicismo romano" (siglos I, II y III después de Cristo): Séneca,


Epicteto, Marco Aurelio.

Esta misma diversidad relativiza el valor de una presentación general de las


teorías de la escuela, ya que las mismas tuvieron matices muy diversos según las
épocas y los autores.

Los estoicos sostenían que en toda proposición pueden distinguirse tres


elementos: la palabra o significante, la cosa significada y el significado. Las
palabras y las cosas son materiales, el significado, por el contrario, es inmaterial y
actúa como nexo de unión entre los otros dos elementos. La verdad y la falsedad
sólo pueden atribuirse al significado. Las diversas posibilidades de conexión entre
proposiciones constituyen las condiciones formales de la verdad lógica.

La ética estoica se halla en relación directa con su física determinista. En un


universo regido por la razón, al sabio sólo le cabe aceptar su destino. Sucede lo
que debe suceder, según el destino y la providencia. Todo es racional y justo. El
ideal de los estoicos es "vivir de acuerdo con la Naturaleza". Para alcanzarlo uno
debe superar la intranquilidad que generan las pasiones, con su pretensión de que
las cosas sean de un modo diferente al determinado por la providencia. Las
pasiones se dominan mediante la apatía.
Quien logra dominarlas alcanza la
tranquilidad de ánimo. Quien acepta el
destino y supera las pasiones alcanza la
virtud.

Se suelen distinguir tres fases en el


desarrollo de la escuela: el estoicismo
antiguo (representado por el propio Zenón
y por Crisipo); el estoicismo medio
(representado por Panecio y Posidonio); y el estoicismo nuevo (representado por
Séneca, Epícteto y Marco Aurelio).
CARACTERISTICAS:

Las disciplinas teoréticas se cultivan  a causa de la ética. La filosofía pasa a


ocupar para los hombres cultos el lugar de la religión, y busca una nueva
seguridad para el hombre.

Predomina la cuestión del sentido y finalidad  del hombre y del cosmos. El hombre
ya no es visto desde la polis , y la ética ya no es considerada como una parte de la
política.

El estoicismo ve al hombre particular como miembro de la humanidad una, en la


cual no hay diferencias étnicas ni sociales.

Este nómones idéntico con el lógos divino que dirige el cosmos.

Según la doctrina estoica, además de los elementos griegos, han influido otros de
origen semítico. Es importante la influencia de las escuelas socráticas,
principalmente la de los cínicos.

Rasgos esenciales de la física y de la teología estoica han sido tomados de


Heráclito.

Pueden considerarse estoicas todas las doctrinas éticas que defiendan la


indiferencia hacia los placeres y dolores externos, y austeridad en los propios
deseos.

El ser humano se halla limitado por un destino inexorable que no puede controlar y
ante el que solo puede resignarse.

La conducta correcta solo es posible en el seno de una vida tranquila conseguida


gracias a la imperturbabilidad del alma, es decir, mediante la insensibilidad hacia el
placer y hacia el dolor.

También podría gustarte