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Variedades de mandarinas
Las mandarinas se pueden clasificar en tres grupos diferenciadores que
son Clementinas, Satsumas e Híbridas.
Mandarinas Clementinas
Dentro de las mandarinas Clementinas tenemos cinco variedades que son:
Clementina Clemenules: alcanza hasta 100 g y es más achatada.
Presenta un color naranja intenso y ofrece una fantástica calidad de zumo.
Es fácil de pelar y apenas tiene semillas.
Clementina Clempons: es una variante de la Clementina
Clemenules aunque más temprana.
Clementina Esbal: se trata de un fruto de hasta 75 g, muy fácil de pelar y
sin semillas.
Clementina Fina: son frutos de hasta 70 g de gran sabor y calidad. Su
corteza es fina y presenta un color muy intenso.
Clementina Hernandina: su fruto alcanza hasta 75 g y es algo achatada.
Fácil de pelar y presenta semillas tan sólo si hay polinización. Es más tardía
que la Clementina Fina.
Clementina Loretina: su corteza es algo más rugosa de lo normal y carece
de semillas. También resulta muy fácil de pelar.
Clementina Marisol: es prácticamente igual que la Clementina Oroval
aunque más temprana.
Clementina Oronules: su característica principal es que carece de semillas
y presenta una forma más achatada.
Clementina Oroval: el fruto alcanza hasta 90 g y su corteza es más
granulada. También presenta un color muy intenso y resulta muy fácil a la
hora de pelar.
Mandarinas Satsuma
En cuanto a las mandarinas Satsuma tenemos tres variedades distintas que son:
Satsuma Clausellina: se trata de una mandarina de baja calidad y poco
apreciada.
Satsuma Okitsu: tiene buena calidad y es de recolección temprana.
Satsuma Owari: su fruto es de tamaño reducido y presenta un color
naranja claro. Tiene forma aplanada y contiene mucho zumo.
Mandarinas Híbridas
Y para terminar, en tercer lugar de la clasificación de las mandarinas tenemos
los híbridos, los cuales suelen producir frutos de un tono naranja rojizo, una
presencia muy atractiva y de mayor tamaño.
Su pulpa contiene mucho zumo y en su interior encontramos una gran cantidad de
azúcares y ácidos orgánicos.
Una forma de distinguir las mandarinas híbridas del resto es gracias a que la
corteza se adhiere con fuerza a la pulpa, por lo que es más difícil pelarlas.
Clima
La temperatura óptima para el desarrollo vegetativo del mandarino oscila entre los
23 y 34 °C. El desarrollo vegetativo se atrofia con temperaturas inferiores a los 13
°C y superiores a los 39 °C. El factor limitativo para los cultivos de mandarina es el
frio. Este árbol, si bien es el cítrico que mejor resiste las heladas, aguanta
solamente hasta 2 horas expuesto a temperaturas inferiores a -4 °C (Reyes, 2012,
p.16).
La planta es más resistente al frio y más tolerante a la sequía, pero los frutos son
sensibles. El factor limitante es la temperatura mínima, ya que no tolera
temperaturas inferiores a 3°C; pues la temperatura es la que determina su
desarrollo vegetativo, floración, cuajado y calidad de los frutos. Las temperaturas
altas constantes mantienen altos niveles de clorofilas y su color es
persistentemente verde (MINAGRI, 2014 p. 5).
Siembra
Plantación:
Plantación nueva, en el lugar definitivo, a inicios de invierno.
Los marcos de plantación empleados son menores que en naranjo, en el caso de
hibrido “Fortune”, con marcos de 6 x 6 m. Para los mandarinos más pequeños se
aplican marcos de 4,5 x 4,5 m. Para Marisol y Satsuma Owari se recomiendan
marcos de 5.5 x 4 m. La densidad media de plantación es de unos 400-550
árboles/ha (INFOAGRO, 2010, p 2).
Si se tiene disponibilidad de riego se puede sembrar en cualquier época del año;
caso contrario, la época más adecuada es al inicio de la época lluviosa. Los
sistemas de siembra comúnmente empleados son el rectángulo, cuadro y el de
tresbolillo, dependiendo principalmente de las condiciones topográficas del terreno
y del manejo que se planifica implementar en cada caso (PROMOSTA, 2005, p.
6).
Las características del suelo en el cultivo del mandarino
Generalmente, tanto el mandarino como el resto de cítricos, son especies no muy
exigentes en cuanto a suelo se refiere, y suelen adaptarse a la mayoría de ellos,
salvo aquellos que son muy arcillosos, muy calizos o salinos.
Que se adapta a gran variedad de suelos no significa que no repercuta sobre la
producción o crecimiento y estado general del árbol, debiendo aplicar de forma
periódica enmiendas orgánicas (compost, estiércol, abonos minerales, etc.).
Cuando el mandarino crece en un suelo arenoso, influye en el porte del árbol de
forma positiva, y esto también repercute sobre el tamaño de los frutos y la longitud
del sistema radicular (a mejor), todo lo contrario que cuando este cítrico crece en
suelo arcilloso.
¿Mi pH es recomendable para cultivarlo?
El rango de pH de desarrollo óptimo del mandarino se encuentra entre 6 y 7.
Ahora bien, vamos a comentar hasta qué punto puede afectarle si nos salimos de
esos valores. Si el pH es inferior a 4 (un suelo muy ácido) o superior a 9 (un suelo
muy básico), aparecerán lesiones por toxicidad en el árbol por acción de iones de
hidrógeno. En el caso de suelos muy básicos, minerales como el aluminio, el
hierro y el manganeso se harán insolubles y por lo tanto no podrán ser absorbidos
por el árbol, caso que hará aparecer numerosas deficiencias minerales.
El mejor suelo para los cítricos
Podas
De formación: necesaria, cuando las plantas injertadas han desarrollado un tallo
vigoroso cortar a 80 cm, lo que tiene por finalidad la formación de brotes laterales
distanciados que darán origen a las amas principales. De aquí en adelante
continuar deschuponando hasta cuando la planta entre a producción
Usos y aplicaciones
De acuerdo a Cruces, Castilla y Sánchez (2012), se puede enumerar los
siguientes usos y aplicaciones de la mandarina, considerando que su pulpa
contiene vitamina C, vitamina B, ácido cítrico, azúcar reductora y caroteno:
- Tiene propiedades broncodilatadoras y antiinflamatorias.
- Adecuada en el tratamiento de úlceras y favorece el correcto funcionamiento de
la vesícula.
- El aceite volátil que posee puede estimular el aparato digestivo.
- Las dietas ricas en carotenoides están asociadas a una disminución del riesgo de
contraer cáncer y enfermedades cardiovasculares.
La mandarina como materia prima es consumida como un producto fresco, a nivel
industrial la mandarina se puede emplear para distintos productos derivados como
el zumo, conservas como la mermelada o la confitura, para la elaboración de licor
de mandarina extraído de la corteza, para la extracción de aceites esenciales
utilizados para la fabricación de licores, en confitería y fabricación de bebidas
refrescantes.
(Frutas y Hortalizas, 2017)
https://medioambienteynaturaleza.com/como-plantar-mandarinas-ficha-completa/
http://www.crystal-chemical.com/citricos.htm
https://www.agromatica.es/el-cultivo-del-mandarino/
http://dspace.unitru.edu.pe/bitstream/handle/UNITRU/3132/ACEVEDO%20ALFARO%2C
%20Rodolfo%20Hern%C3%A1n.pdf?sequence=1&isAllowed=y