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No. De lectura: 0 0 1
García, G. E. L. (2014). Psicología general (3a. ed.). Capítulo 6, página 150 a 163.
México, D.F., MX: Larousse - Grupo Editorial Patria. Recuperado
de http://bibliotecavirtual.unad.edu.co:2077/lib/unadsp/reader.action?
ppg=148&docID=11046624&tm=1481412234028
Según lo han demostrado diversos estudios, las emociones juegan un papel fundamental en
los procesos de salud de una persona. Tal es así que en muchos casos, sucede que una
enfermedad se desencadena por una determinada experiencia que genera una emoción
particular, tal es el caso de las fobias o de los trastornos mentales. También hay casos de
epilepsia donde las emociones son una causa imperante.
Las emociones están entendidas como fenómenos de raíz psico-fisiológica y, según los
expertos, reflejan formas eficaces de adaptación a diversos cambios ambientales. En el
aspecto psicológico, las emociones generan sobresaltos en el índice de atención y aumentan
el rango de diversas conductas en la jerarquía de respuestas del individuo que las
experimenta. En cuanto a la fisiología, las emociones permiten ordenar las respuestas de
diversas estructuras biológicas, incluyendo las expresiones faciales, la voz, los músculos y el
sistema endocrino, con el objetivo de definir un medio interno adecuado para el
comportamiento más óptimo.
Las emociones le permiten a todo individuo establecer su posición respecto al entorno que lo
rodea, siendo impulsada hacia otras personas, objetos, acciones o ideas. Las emociones
funcionan también como una especie de depósito de influencias innatas y aprendidas.
13. RESUMEN
15. Reflexión que desde la formación como Psicólogo (a) le genera el contenido
de la lectura
Orientar las emociones y los sentimientos puede cambiar la forma como percibes
tu realidad. Eres parte de un todo que te aguarda lleno de experiencias
maravillosas. Es el momento de confiar en ti y de hacer de tu vida la aventura que
siempre has deseado vivir.
No. De lectura: 0 0 2
Tresguerres, J. A. F. (2005). Fisiología humana (3a. ed.). Capítulo 9, página 149 a 165. Madrid: McGraw-Hill España.
Recuperado de: https://bibliotecavirtual.unad.edu.co:2538/lib/unadsp/reader.action?docID=3195143&query=Fisiolog
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11.Palabras claves:
12.Tesis central:
El fenómeno del sueño va más allá del ritmo circadiano. Observando su evolución en la
filogenia se encuentra que en la mayoría de las especies es ultradiano; la ontogenia, en
cambio, muestra que en el individuo humano es circadiano, principalmente, para adultos
jóvenes. Por otra parte, el sueño está constituido al menos por dos estados bien
diferenciados, el sueño lento (SL y sus etapas) y el sueño paradójico (SP o REM), que
alternan en una noche de sueño varias veces, constituyendo un ritmo intrínseco ultradiano.
En esquema, entidades como el cerebro basal anterior ( basal forebrain) será quien
proporcione el marco para el SL, en tanto que el tegmento pontino dorsolateral será
responsable de las características expresiones del SP. El sueño emerge como un conjunto o
constelación de cambios fisiológicos, rítmicos, en el que participan dife- rentes sistemas del
organismo regulados por el sistema nervioso central ( SNC).
13.RESUMEN
Los seres vivos poseen variables fisiológicas que los caracterizan y que están controladas
entre estrechos márgenes de normalidad; sin embargo, esta franja de normalidad no es
constante, sino que presenta oscilaciones que pueden configurar ritmos. El núcleo
supraquiasmático del hipotálamo anterior es el principal oscilador que coordina los ciclos
diarios de la fisiología y el comportamiento, adaptándonos al ambiente y regido por el ciclo de
luz-oscuridad. Sobre esta base general el cerebro organiza el ciclo vigilia-sueño, que si bien
está estrechamente relacionado con el ritmo circadiano de actividad-reposo, posee
características propias, muchas de las cuales son aún desconocidas. Se reconocen ritmos de
diversos niveles de complejidad. Desde seres unicelulares en los que se han descrito más de
un ritmo, hasta en el organismo humano, cuyo cerebro posee complejas redes neurales
interconectadas en circuitos tales que hacen de este órgano el más evolucionado de todas
las especies, se encuentran numerosos ritmos que se superponen, se acoplan y se modulan
entre sí. También desde el punto de vista del curso temporal de estos ritmos encontramos
diferencias de varios órdenes de magnitud. Desde las oscilaciones rítmicas del potencial de
membrana de las células ciliadas del oído interno (del orden de varios miles de ciclos por
segundo) hasta los ciclos anuales de hibernación de ciertos animales existe un amplio rango
temporal. Éstos obedecen a muy diversos mecanismos subyacentes, tales como relojes
dirigidos genéticamente que se expresan como síntesis de sustancias, propiedades
electrofisiológicas de membrana, circuitos neuronales que se alternan, etc. Esta serie de
ritmos se pueden agrupar, simplificando, en: a) los ritmos ultradianos, de más de 1 ciclo por
día, b) los ritmos infradianos, de menos de un ciclo por día, y (c) los ritmos circadianos (del
latín: circa dies ) , siendo el de vigilia-sueño el más conspicuo, cuyo período de oscilación se
aproxima al período de rotación de la Tierra de 24 horas y que persiste cuando se lesiona el
núcleo supraquiasmático (véase Cap. 82).
14.Principales conclusiones
La hipótesis de que el sueño sirve para recuperar y restaurar los procesos bioquímicos y
fisiológicos que son previamente degradados durante la vigilia es aparentemente muy lógica
y, por lo tanto, muy aceptada. Sin embargo, con el alargamiento del sueño o con un
desplazamiento del ciclo se observan trastornos similares a los que provoca la pérdida de
sueño. El aumento de la hormona de crecimiento durante el SL del ser humano apoyaría la
hipótesis del sueño como restaurador. Sin embargo, otras especies, como los monos rhesus
( Macaca mulatta) o los perros, no muestran esta correlación temporal. El SL podría estar
más estrechamente relacionado con la plasticidad cerebral que con la restauración del
organismo en su totalidad. Recientemente ha sido propuesto que el aprendizaje mejora
cuando es seguido de una noche de sueño. En la especie humana existe una correlación
positiva entre la duración de la vigilia previa y la duración del sueño posterior. Sin embargo,
en otras especies este hecho no está claro. Por ejemplo, las ratas expuestas a luz constante
y privadas mecánicamente de sueño total por períodos de 45 días mostraron un incremento
masivo del SP sin efectos consistentes sobre el SL. Los efectos del ejercicio sobre el sueño
subsiguiente no avalan la hipótesis de la restitución del cuerpo en general. En contraposición,
el ejercicio efectuado en las horas previas al sueño provoca demoras en la instalación del
mismo, lo que podría provocar un desfase del ritmo circadiano.
No todos necesitamos dormir el mismo número de horas. Generalmente las personas más
jóvenes, aquellas que realizan esfuerzos físicos o psíquicos intensos, así como
determinadas características personales, suelen necesitar dormir más. Un niño puede
precisar dormir unas 10 horas diarias, un adulto entre 6 y 8 horas, mientras que una
persona de edad avanzada puede tener suficiente con 5 o 6.
Es muy importante que el sueño sea de calidad y sin fragmentaciones. Cinco horas de
sueño profundo y reparador pueden descansar más que ocho horas sufriendo pesadillas o
incomodidades. Pero el sueño no supone solamente un mero descanso, sino que sirve
también para descargar un buen número de tensiones originadas durante la vigilia, y aquí
es donde juega su papel más importante nuestra capacidad de soñar.
Dormir y soñar son dos procesos íntimamente unidos, aunque no siempre vayan
acompañados. No soñamos durante todo el tiempo que permanecemos dormidos, sino
solamente durante algunos períodos concretos llamados fases MOR (movimiento ocular
rápido) o REM (rapid eyes movements) en inglés.
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11.Palabras claves:
12.Tesis central:
En psicología, ¿qué es la motivación? Esta pregunta tiene varias respuestas que dependen
de la orientación del psicólogo, pues la motivación es un estado del organismo que
energética y dirige la conducta hacia la obtención de una meta y sólo a través del
comportamiento de la persona la podemos estudiar y conocer; además, algunas conductas
pueden corresponder a diferentes motivos. La palabra motivación se deriva del vocablo latino
moveré , que significa moverse, refiriéndose a esta actividad dirigida a metas del organismo.
Casi todos los teóricos coinciden en que la motivación surge de las necesidades del
organismo y la diversidad de manifestaciones se presenta por el tipo de objetivo o meta que
satisface esas necesidades. Un motivo es una necesidad o deseo específico, que activa y
dirige la conducta hacia una meta. Todos los motivos son desencadenados por algún tipo de
estímulo, ya sea externo al individuo o interno al producto de una condición corporal. Por
ejemplo, suponga a una persona (Pepito) que inicia un día cualquiera, después de haber
dormido bien, tranquilo, desayuna y se dispone a realizar sus actividades diarias. En términos
generales podemos decir que se encuentra en un estado de homeostasis, en un equilibrio
biológico. A medida que pasa el tiempo Pepito tiene desgaste de energía, de glucosa,
proteínas, etc., el nivel o equilibrio de estas sustancias en su organismo disminuye, se rompe
la homeostasis y surge la necesidad de recuperar el nivel en que se encontraba. Esta
necesidad se representa como hambre y se manifiesta de manera individual en formas muy
variadas, a Pepito le da dolor de estómago. ¿Qué hace él cuando tiene hambre? Consigue
comida. A medida que aumenta el hambre y no obtiene la comida, se activa más para
conseguirla. Sólo en caso extremo ya no tendría energías para moverse y moriría de
inanición, pero antes que esto suceda realiza muchas conductas encaminadas a obtener
comida. Una vez que Pepito logra la meta de comer, su organismo recupera lentamente su
estado de equilibrio, el cual volverá a romperse y recuperarse una y otra vez. Analicemos con
este ejemplo las características de la conducta motivada. En primer lugar, surge de una
necesidad; en este caso, recuperar el nivel biológico de las sustancias en sangre (hambre).
Segundo, está dirigida a metas (conseguir comida). Tercero, es activa , ya que se harán
muchas cosas y se invertirá un gran esfuerzo para conseguir la comida. Cuarto, la conducta
dirigida a metas es selectiva porque si la persona tiene hambre, no se satisface abrigándose,
tomando agua o pintando un cuadro; sólo el objeto meta (comida) lo satisface. Por último, es
cíclica , ya que aparece una y otra vez.
14.Principales conclusiones
Los motivos biológicos homeostáticos, básicos o pulsiones, como el hambre, que
tienen su origen en las necesidades fisiológicas del organismo, su tendencia es a
recuperar un nivel perdido y son fundamentales para la supervivencia del individuo,
porque si no se satisface puede provocar la muerte.
Motivos biológicos no homeostáticos, como el sexo, que es un motivo de conservación
de la especie, donde la supervivencia del individuo no está en riesgo y aunque tiene
una base biológica, no es homeostática porque no tiende a recuperar un nivel perdido,
sino al contrario.
Motivos innatos no biológicos derivados de las necesidades de adquisición de
conocimiento y adaptación al ambiente, tales como la curiosidad y la estimulación.