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Por sus frutos los conocerán (Mt 7, 20)

¿Qué edad tengo?

 Objetivo: (5 min)

Conocer las dimensiones que forman parte de una fe madura, a través de un recorrido en el
crecimiento en la fe, como experiencia de encuentro con Cristo vivo, la invitación a la
conversión, al seguimiento, al testimonio y a la misión.

 Bienvenida:
 Oración (5 min)

V/. Señor Jesús, que por su fe sanaste a la mujer hemorrágica, con solo tocarte el manto (Cf
Lc 8, 40-48).
R/. Haz que nosotros nos acerquemos a tu presencia liberadora, para que nos liberes de la
muerte del pecado y así renacer a la dignidad de Hijos de Dios.

V/. Señor Jesús, que recriminaste la poca fe de aquellos discípulos temerosos por la
tempestad desencadenada en el lago (Cf Mt 9, 26).
R/. No permitas la vacilación nos domine al andar en medio de los problemas de nuestra
vida como jóvenes, padres de familia y ante las dificultades en nuestra vida cristiana.

V/.Señor Jesús, que como en aquel tiempo, hoy quiere preguntarnos ¿Quién dices que soy
yo? (Cf Mt 16, 15)
R/.Haz que como Pedro confesemos que eres el Mesías, el Hijo de Dios en quien nuestra
vida cobra sentido y nuestra existencia un rumbo hacia la plenitud.

V/. Señor Jesús a veces desconsolados, como los discípulos de Emaús, le huimos a la
Jerusalén del martirio, para regresar a nuestra comodidad, a nuestra vida sin compromiso
(Lc 24, 13-35)
R/. Acompáñanos en el camino, explícanos las escrituras, abre nuestras mentes cerradas por
la tristeza, parte el Pan para que te reconozcamos en este santísimo sacramento y en los
hermanos.

V/. Señor, que abriste los ojos al ciego de nacimiento con un poco lodo con tierra y saliva y
lo mandaste a que se lavara en la piscina de Siloé (Jn 9)
R/. Que te reconozcamos como el Señor de nuestra vida, nos postremos ante ti, y demos
testimonio ante los demás de las maravillas que has hecho en nuestra vida.

R/. Tú que dijiste que: “un sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, sino unido a la vid”
(Jn 15, 4)
V/. Haz que siempre estemos unidos a ti para que demos muchos frutos de amor, de
solidaridad, de alegría, de paz y de justicia.
 Canto: El peregrino de Emaús

I. RECORDAR CON GRATITUD EL PASADO


II. Ver

Se presentará en tres partes:

 La primera parte será a nivel parroquial sobre cómo se ha mantenido la fe a lo largo


de este tiempo (10 min.)
 La segunda parte será personal, ¿en qué momento sentí el llamado de Dios para
participar en la Iglesia y cuáles eran las circunstancias personales, familiares o
sociales que me rodeaban? (10 min.)
 ¿Vivo mi fe en comunidad, sin distinciones de edad, forma de pensar de manera que
promuevo una convivencia fraterna? ¿Qué actitudes negativas hacen que la vida
eclesial, en el coro, en las Comunidades Misioneras denotan que quizá no somos tan
cristianos? (8 min.)

(Has existido una experiencia de Encuentro con Cristo, ese encuentro nos ha convencido y
hemos decido cambiar de rumbo, hacia el reconocimiento de Dios como el Señor, al igual
que la samaritana, el ciego de nacimiento, los discípulos de Emaús.)

III. VIVIR CON PASION EL PRESENTE


1. Orientar (juzgar) (20 min)
a. Dios nos llama: Es nuestra historia de la salvación

Dios nos ha creado libremente y por amor, ha creado todo lo que existe porque su
misericordia es desbordante y no cesa de darse a sí mismo.

Pero hay un momento en que le hombre decide alejarse de su amor. Quiere llevar a cabo
sus propios planes sin contar con Dios.

Sin embargo, Dios no cesa de llamarlo para que le conozca y que le ame. Trata de reunir
nuevamente, lo que el pecado dispersó. Por eso al llegar a la plenitud de los tiempos envió a
su hijo. Para que salvara a cada hombre y a cada mujer de la esclavitud del pecado, del mal.

b. La fe: la respuesta del hombre y de la mujer al amor de Dios.

¿Qué es la fe? El A.T no conoce la palabra fe, pero si el verbo creer que utiliza la raíz,
“´mn”, se expresa con el Amén, y significa “apoyarse en” “reafirmarse en”. Fe se podría
decir que busca la seguridad, una firmeza desde la que el creyente se abre al proyecto de
vida que el Señor le propone. Por tanto la fe tiene dos componentes: Es llamada de Dios,
don divino y respuesta humana.
DV 5 dice que “por la fe el hombre se entrega entera y libremente a Dios, le ofrece “el
homenaje total de su entendimiento y voluntad” asintiendo libremente lo que Dios revela”.

La vida cristiana, es una iniciativa divina que podría expresarse de esta manera:

Iniciativa divina Experiencia/respuesta del hombre


Dios llama… Conversión/cambio (St 2,26)
Al hombre libre…. Esfuerzo-voluntad/responsabilidad
Por su nombre Plenitud/identidad de hijo de Dios
A una misión.. Carisma-mision/Vocación
En el amor…. Unión plena/ amor

Ejemplos del paso de la escucha a la fe: La samaritana, el ciego de nacimiento, los


discípulos de Emaús. El mensaje evangélico de los primeros cristianos era este: dar
testimonio en el amor, anunciar el Kerigma, suscitar la conversión, bautismo y formación.

Eso significa que se a partir de la respuesta de cada hombre hay un “Proceso de


transformación”, es un crecimiento continuo, es volverse plenamente uno mismo. Es ser un
joven integrado y en crecimiento y convertirse en un hombre nuevo en Cristo (Ef 4, 24),
como cristo pasar de la muerte a la vida: es el misterio pascual, la condición nueva del
hombre tiene que ser de verdad, justicia y santidad, esto inicia con el bautismo.

Esa respuesta está en nuestras manos, somos responsables y artífices de nuestra


transformación, sostenidos por la fe, la esperanza y la caridad.

¿Cómo sé que estoy en proceso de transformación? Se nota a través de la santificación


(abrirse a la gracia de Cristo se deja conquistar por su amor y le corresponde con la
espontaneidad del amor) y la configuración con Cristo a través del seguimiento y la
imitación (Vivir la solidaridad con radicalidad, defensa de los pobres y débiles, es ser
Hombres y mujeres para los demás, es gastarse en la plenitud del amor). El seguimiento
implica aceptar la llamada y hacerse discípulo y hacer renuncias, pero el punto de partida es
el sígueme de Jesús.

Receso (10 min) (1 hora)

Canto al atardecer de la vida.

Dimensiones de la fe

La confesión: Una de las formas más inmediatas de profesar la fe es el relato de los


acontecimientos en los que Dios se ha revelado (Dt 26, 3-10, salmo 136). Es expresar la
experiencia de gratuidad, del amor de Dios en mi vida y la vida de mi pueblo.
La entrega de la fe: me encontrado con Cristo y le respondo con la entrega: el primer
signo es la conversión, dejar todo aquello que tenía como ídolos, es decir, todo aquello en
lo que antes buscaba sentido a mi vida (metanoia=cambio de mente).

La otra forma de entrega es desde el doble mandamiento del amor. Responder desde
los grupos a la pregunta que significa este doble mandamiento del amor (Mt 22, 34-40)
responder con la ayuda de Mt 25, 31-46 y plenaria (10 min (10))

La eclesialidad de la fe:

¿Quién es la Iglesia? Los bautizados santos y pecadores.

La fe es un acto personal pero que se recibe en la Iglesia, puesto que es la manera como se
hace presencia histórica la revelación y la salvación de Dios.

De ella y en ella se recibe el mensaje de Jesús y su misterio pascual. Principalmente en su


actividad litúrgica y en el testimonio de la caridad.

No se puede pretender estar en comunión con Cristo, rechazando la comunión con la


Iglesia, pues la Iglesia es expresión visible de la comunión con Dios en Cristo por el
Espíritu.

Esta comunión implica dolores, lágrimas, rechazo, burla, engaño, etc. Ejemplo: Mons.
Romero, Padre Pio. Porque las peores heridas en el corazón de la Iglesia parte de quienes
somos Iglesia.

La aceptación de la fe se realiza a través del bautismo, junto con los otros sacramentos son
sacramentos de fe.

Reflexionar sobre el cambio que obra el bautismo en el bautizando de acuerdo a Rm


6,4 y escribirlo en una hoja de manera personal. (5 min)

La alegría de la fe: Es la comprobación de la verdad y la plenitud que da el llamado de


Dios y su designio salvador en Cristo. La alegría va acompañada de la paz, con la
aceptación de la llamada de Dios por la fe, la vida adquiere coherencia y sentido, propósito
y plenitud; la emoción de la plenitud vital es la emoción.

(Lc 24,41; Lc 1,44; 2,10; 15,9; Jn 16,22; Hch 5,41 (los ultrajes), Fl 4, 4-5; 3,1;2cor 13,1)

IV. ABRIRNOS CON ESPERANZA AL FUTURO


2. Actuar (10 min)

¿Me quiero dejar encontrar con el Señor que me invita a amarle a él en los hermanos?

¿Quiero responderle al Señor desde el corazón, mi entendimiento y mi voluntad?


¿Estoy dispuesto a esforzarme por imitar a Cristo, con todo lo que soy y tengo, mis
capacidades, mis habilidades, mis defectos, mis deseos?

¿Estoy dispuesto a vivir mi fe con los demás creyentes a pesar de las dificultades?

3. Celebrar (15 min) (otra hora)


- Como lo propone el libro de la semana misionera

(dos horas)

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