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- CONCEPTOS
La embolia es la impactación de una masa no soluble que es transportada por el sistema vascular
de un lugar a otro. Esta masa puede ser de distintas naturalezas: sólida, líquida o gaseosa. Además
puede tener distintos orígenes. El émbolo es la masa no soluble intravascular que produce la
embolia.
Su principal efecto es producir isquemias tisulares de mayor o menor grado en función del lugar
que afecte así como del tamaño del émbolo (como mayor sea, podrá taponar un vaso más
importante y por tanto producirá un efecto más extenso).
ORIGEN EMBOLIA:
A) Pulmonar: en este tipo de embolias el émbolo se impacta en las arterias pulmonares, ya que es
el lugar donde se encuentran los vasos con menor calibre de esta parte del circuito. El émbolo se
origina en el sistema venoso de las extremidades (por ejemplo por una trombosis venosa
profunda) o en el corazón derecho (por ejemplo en una ACxFA o en una dilatación de la
aurícula).
Se presenta clínicamente con un cuadro de disnea (ahogo), dolor torácico y cianosis a causa de la
hipoxia. Este tipo de embolia puede causar infartos pulmonares periféricos (si afecta pequeños
vasos), embolias pulmonares de repetición (si no se elimina la causa etiológica de los émbolos)
que pueden causar hipertensión pulmonar y en las tromboembolias pueden darse las embolias
cabalgantes (que taponan las bifurcaciones de las arterias pulmonares que puede causar la muerte
del individuo).
Este tipo de embolias suelen originar isquemia y necrosis tisular (infartos). La afectación del
corazón o el cerebro puede ser fatal y causar la muerte (por eso debemos hacer profilaxis en
pacientes de riesgo y aplicar tratamiento precoz en estos pacientes).
TIPOS:
b) Gaseosa: suele ser por el nitrógeno o el oxígeno (se producen burbujas que taponan los vasos).
a) Venoso: suele ser causado por procedimientos médicos invasivos del territorio venoso, con
unos 200 cc. de aire se puede producir la muerte del paciente.
b) Arterial: suele producirse en intervenciones quirúrgicas o traumatismos torácicos. Con menos
aire puede producir la muerte, se comporta como una embolia sistémica en cuanto a los órganos
afectados.
c) Por nitrógeno: esto ocurre cuando hay una descompresión rápida, por ejemplo en los
submarinistas que ascienden rápidamente sin tener en cuenta que pasan de un lugar con mucha
presión a otro con menos presión. Cada 10 metros de profundidad, la presión aumenta 1
atmósfera). Puede producir la muerte cuando afecta al SNC.
d) Grasa: el émbolo está formado por glóbulos de tejido graso. Su origen es el de la médula ósea
(ya que está formada por tejido adiposo y células hematopoyéticas). Puede ocurrir en los
traumatismos óseos o de cirugía ortopédica. Suelen producir embolia pulmonar.
e) Líquido amniótico: se produce en partos difíciles, en los que el líquido amniótico que se
encuentra en el saco amniótico, puede penetrar en la circulación sanguínea materna,
comportándose como un émbolo. Este tipo de embolia también puede originar una CID.
g) Séptico: el émbolo es material séptico (pus con el agente infeccioso). Suele darse en la
endocarditis bacteriana. Además de producir embolias puede originar nuevos centros infecciosos
a distancia (en forma de abscesos habitualmente). También la tromboflebitis infectada puede
originar émbolos sépticos.
h) Cuerpos extraños: cuando el material que provoca la embolia es un material proveniente del
exterior del organismo. Por ejemplo algunos parásitos, el quiste hidatídico y de forma iatrogénica
cuando un catéter introducido con fines médicos que se rompe puede producir una embolia.
CONSECUENCIAS:
Las embolias producen situaciones de isquemia (ya que disminuyen el flujo de sangre provocando
que no se oxigenen correctamente algunos tejidos). Esta situación se intenta superar aumentando
la circulación colateral, aunque en algunos órganos como el corazón esto es muy poco frecuente
ya que no existen vasos colaterales.
Si el grado de obstrucción es total o muy importante entonces se puede producir el infarto, que es
cuando la hipoxia es tan intensa que produce la muerte por necrosis de células.
EMBOLIA ARTERIAL
Es una interrupción repentina del flujo de sangre a un órgano o parte del cuerpo debido a un
coágulo (émbolo).
Una embolia arterial puede ser causada por uno o más coágulos. Los coágulos se pueden atascar
en una arteria y bloquear el flujo sanguíneo. Dicha obstrucción priva a los tejidos de ese lugar del
flujo sanguíneo normal y de oxígeno, lo que puede producir daño o muerte tisular (necrosis).
Los émbolos arteriales a menudo ocurren en las piernas y en los pies. Algunos pueden ocurrir en
el cerebro, produciendo un accidente cerebrovascular, o el corazón. Entre los sitios menos
comunes están los riñones, los intestinos y los ojos.
Uno de los factores de riesgo principales para una embolia arterial es la fibrilación auricular. El
riesgo de una embolia aumenta cuando se incrementan los factores que tienden a formar
coágulos. Tales factores abarcan lesión o daño a una pared arterial y afecciones que incrementen
la coagulación de la sangre (como un aumento en el conteo de plaquetas).
La embolia paradójica se puede presentar cuando un coágulo en una vena ingresa por el lado
derecho del corazón y pasa a través de un orificio hacia el lado izquierdo. El coágulo puede
entonces trasladarse a una arteria y bloquear el flujo sanguíneo al cerebro (accidente
cerebrovascular) u otros órganos.
Si una embolia compromete las arterias que llevan el flujo sanguíneo a los pulmones, se
denomina émbolo pulmonar.
EMBOLIA PULMONAR
La embolia pulmonar es una enfermedad severa que pone en peligro la vida. Existen algunas
patologías que pueden contribuir para que se presente la embolia y estas pueden ser las
enfermedades del corazón, enfermedad pulmonar obstructiva crónica EPOC (su sigla en inglés es
COPD), reposo prolongado en la cama, cirugía, cáncer, parálisis, envejecimiento y anemia de
células falciformes.
¿Qué la causa?
La embolia pulmonar está dada por el bloqueo de la arteria pulmonar, por una sustancia extraña
que puede ser un coágulo sanguíneo (trombo) o trozos de él, grasa, aire o tejido tumoral.
El embolo tiene que ser suficientemente grande para poder ocluir una superficie significativa y
provocar sintomatología.
La enfermedad de Caesson, que se refiere a los fenómenos de descompresión, es la enfermedad
que tienen los buzos cuando se descomprimen muy bruscamente. Los que practican buceo tienen
que aprender que si suben muy rápido a la superficie y están a una profundidad respetable, se
puede provocar que el nitrógeno que está contenido en la sangre se torne al estado gaseoso y
produzca embolia gaseosa, llegando a ser fatal, porque la cantidad de burbujas es muy grande.
También se puede producir un fenómeno de descompresión a la inversa cuando se sube a
11,000 metros y se baja en forma acelerada. Las burbujas que se producen se localizan en el
cerebro, pulmón y esqueleto principalmente. (Ver trombosis)
EMBOLIA CEREBRAL
Accidente cerebrovascular
La Asociación Americana del Corazón (AHA) calcula que cada año aproximadamente 795.000
estadounidenses sufren un primer accidente cerebrovascular o una recurrencia. Los que
sobreviven pueden quedar paralíticos, sufrir problemas emocionales o padecer trastornos del
habla, la memoria o el juicio. El grado de la lesión o del trastorno depende de cuál haya sido la
arteria obstruida y durante cuánto tiempo quedó obstruida.
El accidente cerebrovascular es una lesión cerebral que también puede afectar gravemente al
cuerpo. Se produce cuando se interrumpe el riego sanguíneo a una parte del cerebro o cuando se
produce un derrame de sangre en el cerebro o alrededor de él.
El cerebro es una gran masa de tejido blando compuesto de miles de millones de células
nerviosas. Es el principal centro de control del organismo y nos permite ver, oír, saborear, oler,
hablar y caminar. También es el centro de control de los pensamientos, las emociones, la
memoria, el juicio y la conciencia.
Las células nerviosas del cerebro necesitan un suministro constante de oxígeno y azúcar (glucosa),
los cuales son transportados por la sangre. Cuando la sangre no puede llegar a ciertas partes del
cerebro, se interrumpe el suministro de oxígeno a esas zonas. Esto se denomina isquemia. Sin
oxígeno, mueren las células cerebrales. Cuanto más tiempo esté el cerebro privado de sangre,
más grave será el daño cerebral. La zona de tejido muerto ocasionado por la isquemia se
denomina infarto.
Como las células cerebrales controlan el movimiento, parte del cuerpo puede quedar paralizado
tras un accidente cerebrovascular. Si éste afecta al lado derecho del cerebro, el lado izquierdo del
cuerpo puede quedar paralizado. Si afecta en cambio al lado izquierdo del cerebro, el lado
derecho del cuerpo puede quedar paralizado.
El 12 % restante es ocasionado por vasos sanguíneos rotos o dañados que derraman sangre en el
cerebro o alrededor de él. Este tipo de ataque cerebral se denomina «accidente cerebrovascular
hemorrágico». Existen dos tipos de accidentes cerebrovasculares hemorrágicos: cerebral y
subaracnoideo. Los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos producen más muertes que los
isquémicos, pero los pacientes que sobreviven a un accidente cerebrovascular hemorrágico se
recuperan mejor y sufren menos discapacidades de larga duración.
Los accidentes cerebrovasculares isquémicos pueden ser de dos clases: trombótico y embólico.
Juntos, estos dos tipos de ataques cerebrales isquémicos representan aproximadamente el 88 por
ciento de todos los ataques cerebrales.
La mayoría de los coágulos sanguíneos son ocasionados por la auricular, según la Asociación
Americana del Corazón (AHA), unos 2,2 millones de estadounidenses padecen este trastorno. La
fibrilación auricular es un latido rápido anormal que se produce cuando las dos pequeñas
cavidades superiores del corazón (las aurículas) tiemblan en lugar de latir. Los temblores hacen
que la sangre se acumule, formando coágulos que pueden llegar al cerebro y causar un accidente
cerebrovascular.
Embolia amniótica. Accidente dramático raro que sobreviene en el curso de un parto anormal
que precisa maniobras obstétricas. Es debido al tránsito, en la circulación materna, de líquido
amniótico portador de partículas de meconio y de queratina que obstruyen numerosas arteriolas
pulmonares. Después de algunos pródromos (malestar con angustia, agitación, escalofríos,
sofocación) se puede presentar brutalmente un colapso con cianosis,disnea y parada cardiaca
mortal. A veces la evolución, más prolongada, hace un cuadro de cor pulmonar agudo
complicado con hemorragias por coagulación intravascular diseminada e insuficiencia renal
aguda.
Presentación
La condición es tan rara (entre 1 de cada 8000 y 1 de cada 80.000 partos, aunque estudios más
recientes muestran que 1 de cada 20.464 partos por un número más exacto) [3] que la mayoría de
los médicos nunca lo encuentro en su carrera profesional, y como resultado el proceso exacto es
poco conocida.
Se cree sin embargo que una vez que las células fetales y el líquido entran en la circulación
pulmonar derivada de la maternidad en términos generales, habrá insuficiencia respiratoria
profunda con profunda cianosis y cardiovasculares choque seguido de convulsiones y
profundoestado de coma , sin embargo, esto se produce en dos fases se detallan a continuación:
Primera fase
El paciente presenta dificultad respiratoria aguda y la hipotensión . Esto rápidamente progresa
a un paro cardíaco como las cámaras del corazón no se dilatan y se produce una reducción de
oxígeno al corazón y los pulmones. No mucho tiempo después de esta etapa el paciente se
extinguirá en un estado de coma . Si bien se creía que una tasa de mortalidad materna de 60-80%,
más recientemente se ha informado en el 26,4%.
Segunda fase
Aunque muchas mujeres no sobreviven más allá de la primera etapa, alrededor del 40 por ciento
de los supervivientes iniciales pasarán a la segunda fase. Esto se conoce como el hemorrágico fase
y puede ser acompañada por una grave escalofríos, tos, vómitos, y la sensación de un mal sabor
en la boca. Esto también es acompañado por un sangrado excesivo, la sangre pierde su capacidad
para coagular. Colapso del sistema cardiovascular lleva a sufrimiento fetal y muerte a menos que
el niño se entrega rápidamente.
Causas
Se trata sobre todo de acuerdo en que esta condición resulta de líquido amniótico de entrar en
el útero y las venas para que esto ocurra hay tres condiciones previas:
Ruptura de membranas (un término usado para definir la ruptura del saco amniótico )
Ruptura uterina o cervical venas.
Un gradiente de presión del útero a la vena.
Aunque la exposición a los tejidos del feto y por lo tanto es común encontrar tejido fetal en la
circulación materna no es significativa, en un pequeño porcentaje de mujeres que esta exposición
da lugar a una compleja cadena de eventos que llevan al colapso y la muerte.
Existe cierta evidencia de que puede estar asociada con abdominales un traumatismo .
Puede estar asociada con la amniocentesis .
Tratamiento
EMBOLIA ARTERIAL
SÍNTOMAS
Los síntomas pueden comenzar abruptamente o de manera lenta, dependiendo del tamaño del
émbolo y qué tanto bloquea el flujo de sangre.
Los síntomas de una embolia arterial en los brazos y las piernas pueden abarcar:
Síntomas posteriores:
Los síntomas de un coágulo en un órgano varían de acuerdo con el órgano comprometido, pero
pueden abarcar:
SIGNOS Y EXÁMENES
El médico puede encontrar disminución o ausencia del pulso, al igual que presión arterial ausente
o disminuida en el brazo o la pierna y puede haber signos de necrosis o gangrena.
Los exámenes para diagnosticar una embolia arterial o revelar la fuente de los émbolos abarcan:
Angiografía de la extremidad o del órgano afectado
Ecografía Doppler de una extremidad
Ecografía Doppler/dúplex de una extremidad
Ecocardiografía
IRM
Ecocardiografía miocárdica de contraste (MCE, por sus siglas en inglés)
Pletismografía
Doppler transcraneal de las arterias que van al cerebro
Ecocardiografía transesofágica (ETE)
Esta enfermedad también puede alterar los resultados de los siguientes exámenes:
Tratamiento
La embolia arterial requiere tratamiento oportuno en un hospital. Los objetivos del tratamiento
son controlar los síntomas y mejorar el flujo de sangre interrumpido al área del cuerpo afectada.
En caso de identificarse, se debe tratar la causa subyacente del coágulo con el fin de prevenir
problemas posteriores.
Derivación (bypass ) de la arteria (derivación arterial) para crear una segunda fuente de
suministro de sangre
Aspiración del coágulo (tromboaspiración)
Extracción del coágulo a través de un catéter con balón puesto en la arteria afectada o a
través de una cirugía abierta en la arteria (embolectomía)
Abertura de la arteria mediante un catéter con balón (angioplastia) con o sin una
endoprótesis vascular (stent ) implantada
EMBOLIA CEREBRAL
Accidente cerebrovascular
SINTOMAS EN UN ACV
Las manifestaciones clínicas de la ECV van a depender del lugar del cerebro en que se produzca
la interrupción de la circulación. Así, las manifestaciones más características van a ser: pérdida de
conocimiento; pérdida de fuerza (o hemiparesia) que a veces puede llegar a ser total (hemiplejia),
más intensa en el brazo que en la pierna, del lado contralateral a donde se ha producido la lesión;
pérdida de sensibilidad o hemianestesia del la mitad del cuerpo; alteraciones en la comprensión o
elaboración del lenguaje hablado o escrito (afasia) cuando se afecta el hemisferio dominante;
incapacidad para una coordinación adecuada de los músculos de la boca al hablar por lo que no
se le entiende (disartria); defectos en el campo visual del mismo lado de la lesión (hemianopsia o
cuadrantanopsia); desviación de la comisura de la boca por afectación del nervio facial del lado de
la lesión (la boca se desvía hacia el lado contrario al nervio afectado); pérdida del sentido de la
posición del cuerpo en el espacio; incapacidad para la deambulación con inestabilidad (ataxia);
desviación conjugada de la mirada hacia el lado de la lesión; incapacidad para la atención,
desorientación, amnesia (no recuerda lo sucedido, no reconoce a los familiares,...) y confusión;
incapacidad para la coordinación necesaria para la realización de tareas fáciles (como comer,
atarse los zapatos,...); dificultad o incapacidad para tragar (disfagia); incontinencia de los
esfínteres; visión doble (diplopía); sensación de hormigueo o acorchamiento (parestesias) de la
cara, brazos o piernas,... ; cuando se afecta el cerebelo es característica la presencia de vértigo,
nauseas y vómitos, pérdida de la sensibilidad térmica y dolorosa contralateral,...
La hemorragia subaracnoidea va a caracterizarse por una cefalea intensa, rigidez de nuca y una
disminución del nivel de conciencia hasta llegar al coma.
El ACV trombótico puede ir precedido de uno o varios ataques isquémicos transitorios (AIT),
consistentes en una interrupción temporal del aporte de sangre a un área del cerebro; la persona
presenta síntomas de ictus, de aparición brusca, que duran desde pocos minutos hasta 24 horas,
antes de desaparecer. Un AIT sirve de aviso de que el tratamiento es crucial para evitar la
instauración de un ACV definitivo (un tercio de las personas que presentan un AIT sufren un
ACV).
La principal complicación que tienen son las secuelas funcionales que dejan en el paciente; éstas,
van a afectar tanto al paciente como a los familiares con los que vive (en muchas ocasiones
supone un enorme trauma familiar, ya que el paciente puede necesitar cuidados constantes).
La recuperación funcional de las secuelas producidas por un ACV va a depender de la severidad
de éste, de la edad y situación física previa del paciente, y de la posibilidad o no de realizar
rehabilitación; el paciente, con la rehabilitación, puede "aprender de nuevo" a realizar las
funciones que ha perdido a causa de la lesión cerebral.
Un año después de sufrir un ictus, aproximadamente el 60% de los pacientes que sobreviven no
requieren ayuda en las actividades de la vida diaria (comer, vestirse, asearse, pasear,...), un 20%
sólo la requieren para actividades complejas (por ejemplo bañarse), y sólo un 5% son totalmente
dependientes. Un tercio de los pacientes con ACV son capaces de volver a trabajar al año del
episodio, aunque muchos continúan mejorando de su sintomatología hasta el final del segundo
año.
Como otras complicaciones, en los casos de déficit neurológico severo, aumenta la frecuencia de
infecciones respiratorias y urinarias, úlceras por el encamamiento, estreñimiento,...
Con técnicas de imagen más específicas como la TAC cerebral (Tomografía Axial Computerizada
o "scanner") o la RMN (Resonancia Magnética Nuclear) no puede diagnosticarse un ACV
isquémico hasta aproximadamente 24 horas después de haberlo sufrido, pero puede descartarse
la existencia de un ACV hemorrágico, que sería una contraindicación para el tratamiento
anticoagulante, o un proceso expansivo (tumor cerebral, absceso,...).
Otras técnicas aún más específicas que pueden realizarse para llegar al diagnóstico del ACV son
el Eco-doppler de troncos supraaórticos, la Angiografía, la SPECT (tomografía computerizada de
emisión de fotón único), la punción lumbar,...
El tratamiento, una vez el paciente ha sufrido un ACV, va a depender del tipo de ACV que sea:
En el AIT, aunque la recuperación del déficit sea completa, debe prevenirse la aparición
de recidivas, mediante la administración de antiagregantes plaquetarios, como el ácido
acetil salicílico (aspirina) a dosis de 300-1000 mg al día o la ticlopidina a dosis de 250 mg
cada 12 horas.
En el ACV establecido, una vez descartado el ACV hemorrágico, el tratamiento con
heparinas de bajo peso molecular durante 10 días iniciado dentro de las primeras 48
horas tras el infarto cerebral, parece reducir significativamente la mortalidad y la
dependencia de las actividades de la vida diaria a los seis meses.
En el ACV embólico se recomienda anticoagulación inmediata con heparina sódica en
infusión continua.
En el ACV en progresión no está demostrado que el tratamiento anticoagulante detenga
la progresión del infarto cerebral, aunque puede recomendarse en ciertos tipos de ACV
trombótico.
En el ACV hemorrágico el tratamiento consiste en el control de la hipertensión y el
tratamiento del edema cerebral con manitol; en algunos casos es posible el tratamiento
quirúrgico con drenaje del hematoma.
En el caso de la hemorragia subaracnoidea el tratamiento consistirá en reposo absoluto,
tratamiento analgésico, sedación y laxantes para controlar el estreñimiento, realizando
tratamiento quirúrgico tan pronto como sea posible.
El tratamiento farmacológico definitivo de los pacientes que han sufrido un ACV será con
anticoagulantes orales, controlados debidamente por el Hematólogo. Finalmente, una vez
establecido el déficit neurológico definitivo, el paciente deberá recibir tratamiento rehabilitador,
para intentar recuperar en la medida de lo posible las funciones perdidas.
EMBOLIA PULMONAR
En cuanto a los líquidos extraños que entran al aparato circulatorio y pueden provocar una
embolia, son fundamentalmente el líquido amniótico que ingresa a la circulación materna al
producirse desprendimiento de la placenta, y rotura de las venas uterinas y/o del cervix
constituyendo en una embolia amniótica. Ésta dependiendo de la cuantía puede ser fatal.
También en las fracturas múltiples, la medula ósea adiposa de los huesos que es semilíquida
puede entrar a la circulación y embolizar hacia el pulmón o cerebro.
Se puede practicar un examen llamado escáner V/Q, que es un estudio nuclear de la ventilación y
perfusión de los pulmones, así como una angiografía pulmonar.
El tratamiento específico será determinado basándose tomando en cuenta la edad del paciente, su
estado general de salud, la historia médica, que tan avanzada está la enfermedad, la tolerancia a
determinados medicamentos, procedimientos o terapias. Así como expectativas para la trayectoria
de la enfermedad y opinión o preferencia del paciente.
EMBOLIA AMNIÓTICA
Patología Clínica
Historia
Embolismo del líquido amniótico (AFE) por lo general se produce durante el parto, pero se ha
producido durante el aborto, después de un traumatismo abdominal, y durante la amnioinfusión.
Una mujer en las etapas finales del trabajo se convierte en aguda disnea con hipotensión, que
puede experimentar convulsiones seguido rápidamente por un paro cardíaco. Hemorragia masiva
CID asociada a la siguiente y luego la muerte. La mayoría de los pacientes mueren dentro de una
hora de inicio.
Actualmente no existe ninguna prueba diagnóstica definitiva existe. Los Estados Unidos y el
Reino Unido AFE registros recomendamos los siguientes cuatro criterios, que deben estar
presentes para hacer el diagnóstico de la AFE. 7 , 1 , 9
Física
En los informes de casos, los pacientes se describen como el desarrollo de dificultad respiratoria
aguda, a veces con una tos, seguida de hipotensión severa. Los siguientes signos y síntomas son
indicativos de posibles AFE:
Causas
AFE se considera un acontecimiento imprevisible e inevitable con una causa desconocida. En el
registro nacional, el 41% de los pacientes tenía un historial de alergias.
Los factores de riesgo para el desarrollo de la AFE son la multiparidad, edad materna avanzada,
el feto masculino, y el trauma. En una revisión retrospectiva de un período de 12 años que abarca
180 casos de la AFE, de los cuales 24 fueron mortales, la inducción médica del trabajo aumentó
el riesgo de AFE. 10 En el mismo estudio, la AFE se asoció positivamente con la multiparidad,
cesárea o parto vaginal operatorio, desprendimiento de placenta, placenta previa, y la laceración
cervical o ruptura uterina.
EMBOLIA PULMONAR
EMBOLIA CAROTÍDEA
EMBOLIA AMNIÓTICA PULMONAR
EMBOLIA AMNIÓTICA
4.-) EPIDEMIOLOGÍA
En lo que a Ecuador respecta, son muy pocos los estudios que han descrito la incidencia y
prevalencia de enfermedades neurológicas y la gran mayoría de éstos, han sido realizados en la
región interandina [5-9]. Aún en un país pequeño como el nuestro, su gran bio-diversidad hace
difícil extrapolar los resultados de dichos estudios a todas sus regiones y a todos sus habitantes. El
litoral o costa es una amplia región de la patria donde habita más del 50% de la población
ecuatoriana. Consideramos necesario y urgente realizar estudios epidemiológicos en dicha región,
con la finalidad de conocer la incidencia y prevalencia de las enfermedades neurológicas más
frecuentes y de identificar sus factores de riesgo, para desarrollar medidas destinadas a su control.
El presente trabajo de investigación comunitaria intenta determinar la incidencia y prevalencia de
enfermedades neurológicas frecuentes (epilepsia, enfermedad cerebrovascular, demencia y
cisticercosis) en una población rural del litoral ecuatoriano, y encontrar los factores de riesgo
asociados con su prevalencia.
POBLACIÓN ESTUDIADA
Se escogió la Parroquia Atahualpa (Cantón Santa Elena, Provincia del Guayas) por tratarse de una
población representativa del litoral ecuatoriano desde el punto de vista geográfico, climático y
racial (Figura 1). Atahualpa se encuentra localizada a nivel del mar, a menos de 150 Km de
Guayaquil y aproximadamente a 10 Km del Océano Pacífico (2º18’S, 80º45’O) (Figura 2). Se
trata de una población relativamente cerrada, con escaso flujo migracional hacia y desde
poblaciones vecinas. Sus habitantes se dedican principalmente a la agricultura, al comercio y a la
carpintería. Todos sus habitantes hablan español y desde el punto de vista racial, todos son
mestizos (mezcla racial entre españoles y nativos ecuatorianos). De acuerdo con el Instituto
Nacional de Estadística y Censos, el último censo — realizado en el año 2001 — reveló un total de
2,613 habitantes (www.inec.gov.ec). La organización política de Atahualpa incluye una Junta
Parroquial, con un presidente y 5 vocales, y la organización sanitaria consiste en un Subcentro del
Ministerio de Salud Pública, con un médico contratado, una auxiliar de enfermería, una obstetriz
y un odontólogo.
El presente estudio de investigación epidemiológica fue diseñado por los autores del presente
trabajo y cuenta con el aval de las directivas de la Sociedad Ecuatoriana de Neurología y de la
Liga Ecuatoriana Contra la Epilepsia. Forman parte presente estudio neurológico,
neuroepidemiólogos, cardiólogos, médicos generales, salubristas, parasitólogos, enfermeras y
veterinarios. El estudio se encuentra financiado gracias a un apoyo irrestricto de Novartis Ecuador
y cuenta además con la colaboración del Grupo de Estudio de Cisticercosis en Perú, quien
participará activamente en la realización de parte del proyecto.
Se elaboró una hoja de consentimiento informado que deberá ser leída y firmada por cada
individuo con diagnóstico clínico de enfermedad neurológica, antes de realizarle los exámenes
complementarios. Las consideraciones éticas del estudio, su diseño y el consentimiento
informado fueron previamente revisadas y aprobadas por un panel revisor independiente, que en
este caso es el Comité de Ética del Hospital-Clínica Kennedy de Guayaquil.
Esta fase consiste en la aplicación, casa por casa, de una encuesta familiar e individual, destinada
a: 1) recabar información social y demográfica de la población, 2) identificar a cada uno de los
individuos que habitan en ella, y 3) reconocer determinados factores de riesgo individuales de
relevancia para el conocimiento epidemiológico de las enfermedades que se pretenden investigar.
Como se mencionó previamente, la encuesta será realizada por médicos generales y enfermeras
entrenados en el tema. Cada vivienda será codificada con un número de 5 dígitos que incluye la
manzana y la casa, y las personas encuestadas serán codificadas con un número individual. La
encuesta incluye preguntas sobre el tipo de construcción, la fuente de obtención de agua de
consumo humano, la presencia de luz eléctrica, la forma de eliminación de excretas, la presencia
o no de cerdos en la casa, su cantidad, su estado y su destino final. A nivel personal se investigará
la edad, sexo y raza del individuo, así como su grado de escolaridad y ocupación. Se preguntarán
determinados factores de riesgo para las enfermedades que se investigarán, tales como
alcoholismo, tabaquismo y expulsión de proglótides de Taenia con las heces, y se determinarán
las cifras de tensión arterial en los sujetos mayores de 15 años.
2. Recolección de datos
Una vez terminada la primera fase, y con el mismo sistema de aplicación de cuestionarios casa
por casa, por parte del mismo grupo de profesionales que realizó el censo y la encuesta social, se
investigarán los individuos sospechosos de epilepsia, enfermedad cerebrovascular y demencia.
Dichos cuestionarios han sido previamente establecidos, discutidos y aprobados por los
investigadores principales del estudio y han sido tomados de estudios ya realizados, donde su
eficacia ha sido demostrada y validada. Específicamente, el cuestionario para la detección de
individuos sospechosos de crisis convulsivas fue tomado de los estudios de epilepsia en Ecuador
realizados por Placencia y col [10] en la década de los 80; el cuestionario para la detección de
individuos sospechosos de enfermedad cerebrovascular fue tomado del utilizado en estudios
epidemiológicos realizados en Colombia [11,12], el cual es una traducción al español, ligeramente
adaptada, del cuestionario de la Organización Mundial de la Salud [13]; y el cuestionario para la
detección de individuos sospechosos de demencia fue adaptado de las señales de alarma de
deterioro cognoscitivo utilizadas por la Asociación Americana de Enfermedad de Alzheimer
(www.alz.org).
Las preguntas del cuestionario para la detección de crisis convulsivas serán realizadas a toda la
población, interrogando directamente a los sujetos de 15 años de edad o más, e indirectamente a
los menores. Los adultos con deterioro intelectual o con trastornos de lenguaje no serán
interrogados directamente, sino a través de sus familiares. Con este cuestionario, la respuesta
positiva a las dos primeras preguntas juntas o a cualquiera de las otras preguntas restantes, hacen a
un individuo sospechoso (Anexo 2). Las preguntas para la detección de enfermedad
cerebrovascular serán realizadas únicamente a sujetos de 15 años de edad o mayores. Al igual que
con el cuestionario anterior, los individuos con deterioro intelectual o con trastornos de lenguaje
no serán interrogados directamente, sino a través de sus familiares. Con este cuestionario, la
respuesta positiva a cualquiera de las preguntas, hacen a un individuo sospechoso (Anexo 3). Las
preguntas para la detección de demencia serán realizadas únicamente a sujetos de 60 años de
edad o mayores. Al igual que con los cuestionarios anteriores, los individuos con deterioro
intelectual o con trastornos de lenguaje no serán interrogados directamente, sino a través de sus
familiares. Con este cuestionario, la respuesta positiva a cualquiera de las preguntas, hacen a un
individuo sospechoso (Anexo 4).
Durante esta fase del estudio se procederá, además, a la obtención de una muestra de sangre
capilar en todos los individuos encuestados (que den su consentimiento) para detección de
anticuerpos anti-cisticerco mediante técnicas de inmunoblot.
3. Evaluación clínica
En esta fase se examinarán, por parte de dos o más neurólogos calificados, todos los casos
sospechosos de crisis convulsivas, enfermedad cerebrovascular y demencia, así como el 5% de los
individuos considerados no sospechosos por parte del equipo encuestador. Este grupo de
individuos será escogido al azar y servirá para estimar el porcentaje de falsos negativos (casos
reales no detectados como sospechosos) del equipo encuestador.
Pacientes con sospecha clínica de crisis convulsivas: A estos pacientes se les realizará una historia
clínica y un examen neurológico completo. La historia clínica estará orientada a investigar datos
sobre antecedentes familiares del paciente, así como su historia neonatal, el desarrollo durante sus
primeros años de vida, el tipo de crisis que ha experimentado (interrogando al paciente y a
testigos), antecedentes de ingesta de alcohol, consumo de drogas o traumatismos de cráneo,
factores que él considere que desencadenan sus crisis y presencia de otros síntomas neurológicos
relevantes. La clasificación del tipo de crisis se realizará de acuerdo con la clasificación de
epilepsias y síndromes epilépticos de la Liga Internacional Contra la Epilepsia [14]. Pacientes con
diagnóstico de epilepsia serán aquellos que presenten dos o más crisis epilépticas (manifestación
clínica resultante de una descarga excesiva y anormal de un grupo de neuronas en el cerebro) que
no hayan sido desencadenadas por una causa inmediata identificable. La presencia de crisis
múltiples que se presenten en un período de 24 horas serán consideradas como un evento único.
Los pacientes con crisis únicas o con crisis sintomáticas agudas (aquellas relacionadas con
consumo de alcohol, trauma de cráneo o infecciones agudas del sistema nervioso), serán
incluidos en el estudio, pero analizados por separado. Se excluyen del presente estudio pacientes
con crisis exclusivamente febriles o neonatales. Se considerarán casos activos de epilepsia a
aquellos pacientes que han presentado por lo menos una crisis epiléptica en los 5 años previos al
día de prevalencia, independientemente de la medicación utilizada.
Pacientes con sospecha clínica de enfermedad cerebrovascular: A estos pacientes se les realizará
una historia clínica y un examen neurológico completo. La historia clínica estará orientada a
investigar datos sobre antecedentes familiares del paciente, así como la presencia de factores de
riesgo para el desarrollo de enfermedad cerebrovascular, incluyendo tabaquismo, alcoholismo,
dislipidemias, consumo de drogas lícitas e ilícitas y presencia de otros síntomas relevantes. El
diagnóstico clínico de enfermedad cerebrovascular se establecerá de acuerdo con la definición de
la Organización Mundial de la Salud [15], es decir: pacientes que experimentan el desarrollo
rápido de signos clínicos de déficit focal o global, que duren más de 24 horas o que terminen con
la muerte del sujeto y que no tengan otra explicación aparente que aquella de origen vascular.
Solamente se considerarán casos de primera vez, detallándose la fecha de inicio del evento. Los
pacientes con ataques isquémicos transitorios no serán incluídos en esta definición.
Pacientes con sospecha clínica de demencia: A estos pacientes se les realizará una historia clínica
y un examen neurológico completo. La historia clínica estará orientada a investigar datos sobre
antecedentes familiares del paciente, así como la presencia de factores de riesgo para el desarrollo
de demencia, tales como alcoholismo, consumo de drogas y presencia de otros síntomas
neurológicos relevantes. La progresión cronólogica del deterioro intelectual será tomada en
cuenta. Posteriormente se aplicará el examen mínimo de función mental, validado para
comunidades hispanoparlantes [16] (Anexo 5), y la escala de Yesavage para descartar pseudo-
demencia por depresión (Anexo 6). El diagnóstico clínico de demencia se establecerá en
pacientes con puntaje menor de 25 en el examen mínimo de función mental y menor de 11 en la
escala de Yesavage. A estos pacientes se les aplicará la escala de Hachinski para diferenciar entre
casos probables de demencia senil y de demencia vascular.
Tabla 2. Criterios diagnósticos de
neurocisticercosis (adaptado de Del Brutto
OH, Rajshekhar V, White AC, et
al. Proposed diagnostic criteria for
neurocysticercosis. Neurology 2001;57:177-
183).
CRITERIOS DIAGNÓSTICOS
Criterios Absolutos
Demostración histológica del parásito en
biópsia de cerebro o médula espinal.
Tabla 1. Investigaciones complementarias a Presencia de lesiones quística mostrando el
realizar en el presente estudio scolex en TC o IRM.
Visualización directa de un cisticerco
Pacientes con epilepsia subretiniano por examen de fondo de ojo.
Tomografía computada de cerebro Criterios Mayores
Electroencefalograma. Lesiones sugestivas de neurocisticercosis en
exámenes de neuroimagen.
Pacientes con enfermedad cerebrovascular Presencia de anticuerpos anticisticercos en
Tomografía computada de cerebro inmunoblot.
Electrocardiograma Resolución de lesiones quísticas luego de
Radiografía de tórax
tratamiento cestocida.
Ecocardiograma, ecocarotídeo
Resolución espontánea de lesiones anulares
únicas.
Dopppler transcraneal
Criterios Menores
Laboratorio: biometría hemática,
Lesiones compatibles con neurocisticercosis
glicemia, colesterol, triglicéridos,
en estudios de neuroimagen.
creatinina, fibrinógeno, TP, TPT.
Manifestaciones clínicas sugestivas de
Pacientes con demencia
neurocisticercosis.
Tomografía computada de cerebro
Presencia de anticuerpos anticisticerco en
Electroencefalograma
LCR mediante ELISA.
Laboratorio: biometría hemática,
Presencia de cisticercosis extraneural.
glicemia, creatinina, TGO, TGP, Criterios Epidemiológicos
colesterol, triglicéridos, vitamina B12, Evidencia de un contacto familiar con
T3, T4, TSH. infección por Taenia solium.
Pacientes con anticuerpos anticisticerco en Sujetos que habitan en áreas endémicas.
sangre Historia de viajes frecuentes a zonas
Examen de heces para
endémicas
coproantígenos de Taenia solium
Tomografía computada de cerebro GRADOS DE CERTEZA
DIAGNÓSTICA
Diagnóstico definitivo
Presencia de un criterio absoluto
Presencia de dos criterios mayores más un
criterio menor y un epidemiológico
Diagnóstico probable
Presencia de un criterio mayor y dos criterios
menores
Presencia de un criterio mayor mas un
criterio menor y un epidemiológico
Presencia de tres criterios menores y un
epidemiológico
4. Práctica de exámenes complementarios
5. Análisis de datos
Una vez obtenidos los resultados de los exámenes complementarios se intentará, en primer lugar,
establecer un diagnóstico más específico de los pacientes con epilepsia, enfermedad
cerebrovascular y demencia. Los pacientes con epilepsia serán clasificados en tres grandes grupos:
1) epilepsia idiopática: término reservado para pacientes que presenten síndromes epilépticos que
cumplan criterios clínicos y eléctricos específicos, 2) epilepsia secundaria: pacientes cuyos
estudios de neuroimagen o historia clínica sugieran una causa particular de su epilepsia, y 3)
epilepsia criptogénica: pacientes cuya causa no haya sido determinada con la historia clínica o los
exámenes realizados. Los eventos cerebrovasculares serán clasificados en isquémico, hemorrágico
o indeterminado. La enfermedad cerebrovascular isquémica será clasificada de acuerdo a su
localización y probable etiología, utilizando para este último aspecto los criterios del TOAST [17]
en: 1) enfermedad oclusiva aterosclerótica, 2) arteriolopatía hipertensiva, 3) embolia cerebral
cardiogénica, 4) infarto por otras causas, y 5) infarto de causa desconocida. Las hemorragias se
clasificarán por su localización y probable etiología (hipertensión arterial, malformaciones
vasculares, aneurismas intracraneales, otras causas y de causa desconocida). Los pacientes con
demencia se clasificarán en: 1) enfermedad de Alzheimer (probable o posible), 2) demencia
vascular, 3) demencia mixta, 4) demencia fronto-temporal y 5) demencia por otras causas.
A los pacientes con anticuerpos anti-cisticerco en sangre se les aplicará la tabla de criterios
diagnósticos de neurocisticercosis (Tabla 2) [18] para encontrar casos de infección cerebral
definitiva y probable. Se identificará la vivienda de los sujetos sero-positivos y se intentará
encontrar agregación familiar de sero-positividad, y su probable relación con hábitos higiénicos y
con crianza de cerdos, tal como se ha realizado en otros estudios epidemiológicos de la
enfermedad realizados en Sud América [19,20].
La última fase del proyecto consiste en el análisis de la información obtenida utilizando los
paquetes estadísticos Epi-info 2000 (C.D.C., Atlanta, GA) y SPSS-10. Se determinará la
prevalencia de epilepsia, la prevalencia e incidencia de enfermedad cerebrovascular en sujetos
mayores de 15 años, la prevalencia de demencia en sujetos mayores de 60 años, la relación entre
tabaquismo, alcoholismo, hipertensión arterial, diabetes mellitus y enfermedad cerebrovascular, la
relación entre cisticercosis y epilesia y la prevalencia de taeniósicos en sujetos con anticuerpos
anti-cisticerco en sangre.
5.-) CONCLUSIONES:
6.-) RECOMENDACIONES:
Entre las recomendaciones se incluyen los consejos útiles para los pasajeros que efectúan viajes en
avión de más de 6 horas de duración y que padecen el llamado "síndrome o enfermedad de la
clase económica".
Este tipo de pacientes pueden evitar eventuales accidentes de trombosis o por lo menos disminuir
los riesgos con una serie de medidas.
Por ejemplo, se recomienda evitar la ropa demasiado ajustada a nivel de los miembros inferiores
y la cintura.
Es conveniente también estar bien hidratados. Cabe recordar que en la cabina de los aviones, por
efecto de la presurización y recirculación del aire, se produce una deshidratación mayor que lo
normal.
Por último, es recomendable estirar periódicamente los músculos de las pantorrillas.
Otras medidas para los pacientes con riesgo de padecer accidentes tromboembólicos, como las
mujeres embarazadas y los recién operados, es el uso de medias elásticas de compresión
graduadas o también con el uso de medicación antitrombótica, debiendo ser ingerida
previamente a la salida del avión.
Realizar un poco de ejercicio, incluso caminar media hora por día, se reduce el riesgo de sufrir
una embolia tanto en hombres como en mujeres.
7.-) BIBLIOGRAFÍA:
http://apuntesanatomia.iespana.es/ap/embol.htm
http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/001102.htm
http://www.texasheartinstitute.org/HIC/Topics_Esp/Cond/stroktys.cfm
http://www.texasheartinstitute.org/HIC/Topics_Esp/Cond/strok_sp.cfm
http://www.portalesmedicos.com/diccionario_medico/index.php/Embolia
http://translate.google.com.ec/translate?hl=es&langpair=en|es&u=http://emedicine.medsc
ape.com/article/253068-overview