Está en la página 1de 3

Electiva V.

Drenajes Longitudinales y Transversales

TEMA 1 Introducción a los Drenajes Viales

Una vía de comunicación no solo exige una adecuada planeación y la


selección correcta del eje de la misma sino el diseño racional de estructuras de
drenaje capaces de desalojar en todo momento en forma eficiente el escurrimiento
aportado por la lluvia en cualquier tramo de la carretera.

En base a esto, el objetivo del drenaje vial es en primer término, reducir al


máximo posible la cantidad de agua que de una u otra forma llega a la carretera y
en segundo término dar salida al agua que llegue a la misma. Para que una
carretera tenga buen drenaje debe evitarse que el agua circule en cantidades
excesivas por la misma, previendo un buen drenaje desde su proyecto, tratando
de ubicarlo sobre suelo estable permanente y naturalmente drenado.

Sin embargo, debido a la necesidad de un alineamiento determinado, las


vías pueden atravesar suelos variables, permeables e impermeables, obligando
con ello a la construcción de obras de drenaje. De acuerdo con las condiciones
requeridas de experiencia en el análisis y estudio de muchas carreteras en mal
estado, ha enseñado que el drenaje inadecuado más que ninguna otra causa ha
sido el responsable del daño que ha sufrido.

Parte importante de las fallas que más comúnmente suelen afectar las
obras viales están estrechamente relacionadas con las respuestas de los suelos al
ser expuestos a contenidos de humedad, que varían dentro de rangos más o
menos variables. Así mismo, el comportamiento de los pavimentos, está
fuertemente ligado al contenido de agua de las diversas capas de la estructura.

En resumen, cuando una ruta dispone de un sistema de drenaje adecuado


suficiente y que opera correctamente, disminuye sustancialmente la probabilidad
de falla y de otros efectos adversos que contribuya a acortar la vida útil.

Las aguas pueden afectar la carretera de la siguiente manera:

 Disminución de la adherencia entre los cauchos de los vehículos y la


superficie por la acumulación de agua sobre la calzada.

 El agua da origen a baches y fallas en el pavimento, tanto rígido


como flexible.

 Si el nivel freático está próximo a la superficie se puede sufrir el


fenómeno de ascenso capilar.

Prof. María Eugenia Acosta


Electiva V. Drenajes Longitudinales y Transversales

TIPOS DE DRENAJES VIALES

El agua que cae en forma de lluvia sobre la superficie terrestre, se


distribuye de tres formas, una parte se evapora por la acción del sol, otra parte se
infiltra sobre el terreno y la última escurre directamente sobre el terreno, en
búsqueda de una corriente de agua.

Las aguas superficiales ya sea que caigan directamente sobre la carretera o


que lleguen a ella por escurrimiento sobre terrenos adyacentes son evacuadas
mediante obras de drenaje superficiales, mientras que las aguas subterráneas
resultantes de la infiltración, ascenso del nivel freático y fenómenos de capilaridad
se remueven a través de sub-drenajes.

Se pueden construir los siguientes tipos de drenajes viales:

1. DRENAJES DE AGUAS SUPERFICIALES

El drenaje superficial tiene el propósito de alejar las aguas de las carreteras,


esto evitará su influencia negativa, tanto en el aspecto de la estabilidad de su
infraestructura como en sus condiciones de transitabilidad.

Las dimensiones de las obras de drenaje serán determinadas en base a


cálculos hidráulicos, tomando como base la información pluviométrica disponible.
El drenaje superficial comprende:

 Las aguas que escurren en el pavimento: El drenaje de las aguas que


escurren sobre la superficie del pavimento (plataforma y sus márgenes) se
efectúa por medio de bombeo en las secciones en tangente, y mediante el
peralte en las curvas de modo que el escurrimiento sea hacia los drenajes
longitudinales.

 Las aguas provenientes de los taludes de relleno: En los rellenos las aguas
que escurren sobre el pavimento deberán ser encausadas hacia ambos
lados del mismo y hacerse a tal forma que el drenaje se efectúe en sitios
separados especialmente para ello evitando la erosión de los taludes.

 La restitución de la continuidad de los cauces naturales interceptados por la


carretera, mediante su eventual acondicionamiento y la construcción de
obras de drenaje transversal.

Prof. María Eugenia Acosta


Electiva V. Drenajes Longitudinales y Transversales

2. DRENAJES DE AGUAS SUBTERRANEAS

El agua subterránea es una parte integral del sistema hidrológico que esta
íntimamente relacionado con el drenaje de aguas superficiales, se trata de un
proceso natural común, cuyo movimiento es controlado ampliamente por la
porosidad y permeabilidad de las rocas a través de las que fluyen.

COMPONENTES DEL SISTEMA DE DRENAJE VIAL

Se entenderá por sistema de drenaje vial al conjunto de obras que


destinadas a evitar los daños que las aguas pluviales, superficiales o subterráneas
puedan causar a la vía, con el fin de reducir los inconvenientes que puedan
ocasionar a la circulación de los vehículos, las obras de drenaje vial que
conforman el sistema de recolección, conducción y disposición de las aguas
superficiales y subterráneas se clasifican en tres tipos:

1. Obras de drenaje transversales: Son el conjunto de obras que encausan las


aguas, para atravesar la vía y la descarga en cursos de aguas naturales.

2. Obras de drenaje longitudinal: Comprende todas aquellas obras que en


dirección paralela a la vía, van recogiendo el escurrimiento superficial
proveniente de sus taludes y de los terrenos adyacentes, reduciendo las
infiltraciones.

3. Obras de subdrenaje: Corresponden a las obras que recogen, conducen y


descargan fuera de la vía, tanto las aguas subterráneas como aquellas
infiltradas a través de los poros y grietas del pavimento, así como también
las juntas de construcción. Estas obras cumplen primordialmente una
función básica y su inexistencia o incapacidad, se traduce a menudo en un
incremento de las labores de mantenimiento. Por otra parte el subdrenaje
cumple también la función complementaria de ayudar a mantener secos los
pavimentos, garantizando mayor seguridad al tránsito vehicular

Prof. María Eugenia Acosta

También podría gustarte