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ESCUELA DE TEOLOGIA
PROF. SERGIO ARMANDO GONZALEZ SANCHEZ PENTATEUCO
Presenta: CASTAÑEDA VÁSQUEZ JONATHAN
1º TEOLOGIA
Tlalpan, Ciudad de México., 18 de septiembre de 2019
TAREA 1
Curso de Pentateuco y Libros Históricos
Melquisedec trajo el pan y vino de Salem para proveer al guerrero agotado. Para obtener
paz, libertad y la prosperidad para él. Melquisedec expresó su gratitud a Abraham y le
dijo: "bendito sea Abraham de Dios altísimo, el fundador del cielo y de la tierra: y bendito
sea Dios, el altísimo, que ha entregado sus enemigos en su mano."
Abraham intercambió esta bendición dando a Melquisedec un décimo de todo el botín
tomado de los enemigos. Dando el décimo, Abraham reconoció el sacerdocio divino de
Melquisedec que Dios alcanza más allá de una deidad local; Él es "el más alto Dios,
fundador del cielo y tierra," el Dios de "todas las familias de la tierra."
Tenga presente que Abraham no guardaría la pertenencia del rey de Sodoma porque él no
tenía nada en común con él. Sin embargo, él aceptó del rey de Salem no solamente el pan
y vino para el alimento de los guerreros agotados, sino que fue una bendición sacerdotal
también. De regreso, él le dio un décimo de todo su botín. Esto era una muestra definida
que Abraham reconoció a su Dios y se sometió al sacerdocio real de Melquisedec.
Por otra parte, esta auto subordinación a Melquisedec era una bendición práctica de un
sacerdocio real que es más alto que el sacerdocio confiado a los descendientes de
Abraham. El nombre de Melquisedec significa, "rey de justicia." No hay duda, él era un
rey que gobernó a su gente en toda justicia.
RECEPCION EN LA LITURGIA
El altar de la Nueva Alianza es la cruz. La oración colecta de la Misa del Corpus Christi,
compuesta por Santo Tomás de Aquino, la Iglesia recuerda la intención del Señor al
instituir el Sacramento de la Eucaristía, en la víspera de su muerte, como memorial de la
Pasión que pronto debía padecer. Y pide que, penetrados así de su verdadero sentido en
los honores rendidos al Cuerpo y Sangre, obtengamos el fruto de su sacrificio.
Gn 22, 1-19
Sacrificio de Isaac
Dios le pide a Abrahán que le sacrifique a su hijo único, a quien había concebido en su
ancianidad y como cumplimiento de una promesa que Él mismo le había hecho. Por la fe
Abrahán conduce a su hijo a la montaña del sacrificio. De camino hay una cantinela del
santo patriarca que expresa angustia y confianza al mismo tiempo: “En la montaña el
Señor proveerá”.
Isaac es una imagen de Jesucristo. Este texto, leído como prefiguración de lo que será la
pasión del Señor, nos permite descubrir muchas cosas. En primer lugar, podemos ver en
Abrahán lo que serían los sentimientos del Padre ante la entrega de su Hijo. Frente a
quienes ven en el misterio de la Redención un silencio incomprensible de Dios, aquí se
nos muestra como un padre ofrece a su hijo. Y Abrahán actúa movido sólo por la fe. La
fe de aquel hombre fue llevada a un extremo que, en la Biblia, no encuentra comparación,
salvando a la Virgen junto a la Cruz de su Hijo. Los padres subrayaron la prefiguración
fijándose tanto en Abrahán, como en Isaac, que influye la decisión de su padre sin
protestar. Se trata de un ejemplo de obediencia que, después, traerá la bendición sobre
toda la tierra.
Este texto resulta un poco obscuro para nosotros. En algunas culturas vecinas a Israel era
esta una práctica más o menos habitual, que incluía dar muerte al hijo. Pero más allá de
esta interpretación, la petición que Dios hace a Abrahán, nos lleva al centro misterioso de
la historia. Se nos dice por una parte que hay que vivir con absoluta confianza en Dios.
Vivir de la fe implica ser conducido continuamente hacia lugares que desconocemos,
incluso colocados al borde del abismo, como sucede en el texto.
Pero Isaac es salvado. En el último momento, cuando el cuchillo de su padre está a punto
de bajar sobre él, un ángel detiene la mano. La fe de Abrahán ha sido probada. Isaac no
muere y un carnero ocupa su lugar. Cuando la pasión de Cristo, en el Huerto de los Olivos,
la situación será diferente. También allí acudirá un ángel. Pero esta vez no será para
detener el sacrificio, sino para consolar al Hijo que toma la decisión de hacer la voluntad
de su padre.
Abraham recupera a su hijo en el momento en que está por sacrificarlo; Jesús, el Hijo de
Dios, después de atravesar la muerte en la cruz, resucita glorioso y vive eternamente:
Cristo Jesús ha muerto, más aún, ha resucitado y está a la derecha de Dios intercediendo
por nosotros.
El Padre había estado entrenando años y años a Abraham, purificándolo con pruebas para
que desempeñase el papel del sacrificio supremo a la perfección. Y Abraham va a
responder. No va a matar a su hijo, sino a engendrarlo en una dimensión nueva.
Gn 28, 10-22
SUEÑO DE JACOB
En los momentos más difíciles, recibimos mayor gracia, pues al estar solos, podemos
tener un encuentro con Dios que nunca se aparta de nosotros. Jacob sale de Beerseba y va
hacia Harán. Supuestamente, es un viaje para hallar esposa, pero en realidad, está huyendo
de las amenazas de su hermano. Jacob está solo, sin familia ni amigos. Al oscurecer, se
ve obligado a dormir en cualquier lugar, con una piedra como cabecera. Entonces, Dios
sale a su encuentro. La presencia de Dios y Sus promesas transforman la tristeza en gozo.
Ya no se siente solo. Dios le ha prometido que estará con él en todo lugar. Dios derrama
Su gracia sobre los que pasan dificultades. Él anhela que los que se sienten fracasados, se
levanten nuevamente por Su gracia.
Jacob demuestra ser hombre de fe (28:16-22), a pesar del temor y de la impresión que se
lleva es capaz de descubrir y aceptar que ese lugar es la casa de Dios y aun mas
importante, acepta que esa es la puerta del cielo.
La Palabra de Dios penetra hasta lo más profundo de nuestro ser, y provoca cambios en
nuestra persona. Inmediatamente, Jacob reacciona con fe ante la palabra de Dios.
“La escala indica la existencia de una comunicación continua entre el cielo y la tierra.
Dios, del que los ángeles forman la corte, envía mensajeros que suben y bajan para
ejecutar sus órdenes; no se los representa con alas, ya que necesitan de escala para cumplir
su misión. El cielo, residencia de Dios, no está separado de la tierra...; la Providencia vela
por el hombre, y la distancia no le separa...; hay una relación directa entre ella y el
hombre”2
La escala tiene sentido de conexión de la divinidad por medio de sus ángeles con el que
iba a ser padre del pueblo elegido. Dios habita en el cielo y desde él contempla a los
hombres, que moran en la tierra. Pero hay ciertos lugares en los cuales tiene puestos
especialmente sus ojos y desde los que se comunican los hombres con Dios, y Dios
responde a los votos y plegarias de los hombres. En este ministerio servirán los ángeles,
1
http://bibliadenavarra.blogspot.com/2011/04/el-sacrificio-de-isaac-gn-221-18.html
2
Biblia comentada, texto de la Nácar Colunga. Pentateuco, tomo I. Madrid, 1967.
que aquí aparecen subiendo y bajando por la escala, es decir, son portadores de mensajes
divinos a la humanidad. Jesucristo se aplica este texto
al declararse a los primeros discípulos. Jesucristo será la verdadera escala puesta para
comunicación entre el cielo y la tierra, el punto de unión de los hombres con la divinidad.
RECEPCION: LITURGIA
BIBLIOGRAFIA:
- BIBLIA COMENTADA, TEXTO DE LA NÁCAR COLUNGA.
PENTATEUCO, TOMO I. BAC. MADRID, 1967.
- http://bibliadenavarra.blogspot.com/