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Introducción.

En la historia de la Iglesia como ha sido su función en la Nueva España, destacando


su papel en los ámbitos de evangelización, la educación y la enseñanza, pues se conoce la
labor importante que tuvieron los franciscanos en las misiones que evangelizaron a Nueva
España en el último siglo XVI.

El presente trabajo tiene como finalidad presentar como se llevó a cabo la


evangelización de la Nueva España de una manera primordial los primeros misioneros
Franciscanos; nos detendremos en un primer momento a analizar cómo fue la fundación de
la orden de los franciscana, en la época que se vivía en ese momento la Iglesia Católica y
ve que San Francisco de Asís ponen de relieve la vivencia de la pobreza y llevar el
Evangelio primitivo, así también en la conversión por los que no creen en Dios y la
asistencia social.

En un segundo momento se pone de manifiesto el estudio sobre los primero pasos


de la orden de franciscanos que llegan a la Nueva España, es decir la manera mediante la
cual se llevó las primeras misiones, los primeros que llegaron fueron tres frailes, el más
importante fue fray Pedro de Gante y posteriormente llegaron los Doce franciscanos, con
ellos se empezó la evangelización en la Nueva España, estos Doce quien fuera su superior
fray Martin de Valencia. En el tercer momento que va unido con el anterior momento se
estudió como fue la evangelización por el territorio en México, sobre todo como se
reunían los indios para recibir el sacramento del Bautismo.

En el cuarto momento vemos que los franciscanos como fue la enseñanza de la


doctrina de la Iglesia Católica, una de las herramientas que utilizaron fueron los catecismos,
las imágenes, obras teatrales, la educación y los hospitales, todas estas herramientas que
fueron utilizados por los franciscanos para llevar la evangelización y que los indios tuvieran
un conocimiento sobre la doctrina cristiana.
I. Orden de los Franciscanos.

La fundación de la Orden Franciscana se dio un momento crítico para la Iglesia


Católica, derivado de relajamiento de las costumbres y la adopción de una vida de lujos
alejada de los ideales de Cristo, esta situación fue posible debido al crecimiento económico
que hubo en el siglo XIII.

En ese mismo tiempo que se sustraía a la jerarquía feudal, se situaba también fuera de la
órbita del monarquismo que había sido la fuerza civilizadora y catequizadora de la sociedad
europea en la alta media. En vez de los monjes, se acercaban al pueblo oscuros
reformadores con sus principios de retorno al evangelio, de pobreza, de comunidad de
bienes, de compromiso fraterno1.

Pero fueron los franciscanos y los dominicos las dos familias que supieron dar la
respuesta a la urgencia del momento histórico. Comenzaba así la era de las que más tarde
serian llamadas ordenes mendicantes. El surgimiento de los franciscanos y los dominicos,
marca el inicio de un afán de reforma dentro de la Iglesia. La reformación ponía tanto,
sobre todo en Francisco de Asís, una gran atención a la pobreza y señalaba la intención de
regresar al ideal evangélico primitivo dentro de la más pura ortodoxia2.

La Orden Franciscana mantuvo como objetivo, desde su fundación, la conversión de


todos aquellos que no compartieran la fe cristiana, inseparable a este, implico también la
asistencia social de los conversos a través de servicios sanitarios o asistencia en labores del
día a día. Dicha evangelización no es un objetivo único de la Orden Franciscana, sino
propio de la Iglesia Católica y delegada a los monarcas españoles. Los reyes, desde la
encomienda del Papa Alejandro VI en su bula Inter Catedra de 149, tuvieron la misión de
convertir a los pobladores de sus nuevas conquistas.

1 Cfr. Iriarte, Lázaro, O.F.M. Historia Franciscana, Valencia, Editorial Asís, 1979. p. 43-44.
2 Cfr. Iriarte, Lázaro, O.F.M. Historia Franciscana, Valencia, Editorial Asís, 1979. p. 47
Desde la llegada de las órdenes mendicantes en América, se intentó comparar lo
sucedido en Indias con algún punto de referencia en la historia de la Iglesia para basarse en
alguna experiencia. Lo más acorde fueron los tiempos primitivos de la Iglesia y se intentó
imitar los ejemplos en lo realizado por los discípulos de Cristo. La conducta de los
apóstoles fue el modelo y sus métodos adoptados para las circunstancias del momento. Por
ellos los frailes buscaron fundar la Iglesia con base en sus votos de pobreza y humildad
propios tanto de los apóstoles.3

II. Los primeros pasos de los Franciscanos a Nueva España.

Previo a la llegada de los tres frailes y de los doce franciscanos, se conoce la presencia
de dos frailes franciscanos que estuvieron como capellanes de Cortés que fueron Diego
Altamirano que era pariente del conquistador y fray Pedro Melgarejo de Urrea, que no han
dejado huella alguna en la historia eclesiástica novohispana4.

Las primeras peticiones de Cortés envía el rey algunos misioneros a Nueva España. Por
el 13 de agosto de 1523 llegaron tres franciscanos que llegaron a estas tierras que fueron los
sacerdotes Johann Dekkers, Johann van den Auwera y el lego Pierre de Gande, que fueron
conocidos por los nombres españolizados de Juan de Tecto, Juan de Aora y Pedro de
Grande, el primero fue confesor de Carlos V y profesor durante catorce años de la
universidad parisiense5. Los frailes Juan de Tecto y Juan de Aora casi a raíz de su llegada a
Nueva España, se fueron con Cortés a la expedición de la Hibueras y en ella fallecieron en
1524, Pedro de Gante paso en México todo el resto de su vida y trabajo a favor de la
conversión y a la enseñanza de los indígenas.

3 Cfr. Borges, Pedro. El envío de misioneros a América durante la época española. Salamanca: Universidad
Pontificia, 1977 33
4 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 2014
pág. 65
5 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 Pág. 291
Pedro de Gante escribió una carta a sus hermanos de Flandes, fechada por el 27 de
Junio de 1529 en el convento de San Francisco de México, que nos dice

“Mi oficio es predicar y enseñar día y noche. En el día


enseño a leer, escribir y cantar, en la noche leo doctrina
cristiana y predico. Por ser tierra grandísima, poblada de
infinita gente, y los frailes que predican pocos para enseñar a
tanta multitud, recogimos en nuestras casas a los hijos de los
señores principales para instruirlos en la fe cristiana, y que
después enseñen a sus padres. Aprendieron estos muchachos
a leer, escribir, cantar, predicar y celebrar el oficio divino a
uso de iglesia. Los domingos salen estos muchachos a
predicar por la ciudad y toda su comarca, a cuatro, a ocho o
diez, a veinte o treinta leguas, anunciando la fe católica, y
preparando la doctrina a la gente para recibir el bautismo.
Nosotros con ellos vamos a la redonda destruyendo ídolos y
templos por una parte, levantamos iglesias al Dios
verdadero”.6

Otra petición de Cortes en su Cuarta Carta de Relación por el 15 de Octubre en México,


trae a la memoria de Carlos V la insistencia con que antes había expuesto la necesidad de
proveer a la eterna salvación de los indios, pero le insiste en la necesidad de misiones en
Nueva España para la conversión de los infieles7.

La llegada de los doce franciscanos que habían llegado a México, los doce
desembarcaron en Ulúa el 13 o 14 de mayo de 1524, que se ha pasado a la historia como los
iniciadores de la evangelización organizada en Nueva España, ellos fueron; Martin de
Valencia, Francisco de Soto, Martin de Jesús o de la Coruña, Juan Suarez, Antonio de
Ciudad Rodrigo, Toribio de Benavente como conocido como Motolinia, García de
Cisneros, Luis de Fuensalida, Juan de Ribas, Francisco Jiménez, Andrés de Córdoba y Juan
de Palos. El superior de los doce era fray Martin de Valencia, poco después de la llegada a
la Nueva España recibió las ordenes fray Francisco Jiménez, los que permanecieron legos
fueron fray André de Córdoba y fray Juan de Palo8.

6 Cfr. Mariano Cuevas S. J. Historia de la iglesia en México, Editorial Patria 1932, 160
7 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 65
8 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 66
EL Papa Adriano VI con la Bula Exponi nobis nuper fecisti fechada el 10 de mayo de
1522, fue dirigida a Carlos V, que daba a los franciscanos que actuaran en la Nueva España
su autoridad apostólica donde quiera que faltaran obispos o se hallaran estos distantes más
de dos jornadas, salvo en aquellos ministerios que exigen consagración episcopal9.

A los pocos días de haber llegado a Nueva España, fray Martin de Valencia quien fuera
superior de los doce, deliberan sobre el método que han de aplicar en la evangelización de
los indios y se dividen en grupos para su labor apostólica. Poco después junto con Hernán
Cortés algunos eclesiásticos y letrados convocan a una Junta apostólica, para orientar su
labor en desarraigar la idolatría y propagar la fe católica. Los participantes de en la Junta
formulan normas más bien generales que fueron; para el bautismo instruirían
suficientemente en conventos e iglesias a niños y adultos10.

A partir de 1524 los franciscanos menores fundan conventos en dos regiones, que
habrán de ser los dominios fundamentales de su actividad apostólica que son el valle de
México y la región de Puebla. En cada una de ellas instalan dos casas y para ello escogen
grandes centros indígenas. En la región de Puebla, Tlaxcala y Huejotzingo, en el valle de
México, Texcoco y Churubusco.

En el convento de México estuvieron ligados durante todos los tiempos primitivos el


valle de Toluca, Michoacán, la región de Jilotepec y la de Tula, Texcoco dependían
Otumba, Teapulco, Tulancingo, en Tlaxcala tenia jurisdicción sobre Zacatlán y sus
montañas, lo mismo que la región de Jalapa y Veracruz, Huejotzingo había recibido a su
cuidado a Cholula, Tepeaca, Tecamachalco, Tehuacán, Huaquechula, Chietla y toda la
Mixteca11.

9 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 292
10 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 293
11 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 113
III. La evangelización de la Nueva España por los Franciscanos.

La primera preocupación de los franciscanos al iniciar sus labores apostólicas fue el


bautismo de los indígenas, fray Mendieta se refiere que bautizaban primero, a sus
discípulos los que en el monasterio se criaban con su doctrina, unos que antes que a otros,
conforme al aprovechamiento que hallaban en cada uno de ellos. De los de afuera, si les
llevaban niños chiquitos, los bautizaban por el peligro que podían correr12.

Los franciscanos en México se van desarrollando su trabajo entre los indígenas, se


disponen en casas, pero no de iglesias, en el valle de México y Tlatelolco van distribuyendo
la población por los barrios, que recorren uno a uno doctrinando y bautizando. Para la
enseñanza se valen comúnmente del escrito o interprete. Los domingos y las fiestas se
reúnen cada barrio en su cabecera y las ceremonias litúrgicas e instrucción religiosa tienen
lugar en salas que servían a los indios para sus juntas13.

Fray Martin de Valencia y junto con un compañero que tenía conocimiento de la lengua
mexicana, salen a evangelizar a los pueblos del Valle de México, iniciando por Xochimilco
y Coyoacán, por escrito y con interprete predican a los naturales y bautizan algunos niños.
Los señores y principales de esos pueblos aceptaron la enseñanza y su labor de los frailes,
delante de ellos destruye ídolos, levantan cruces y señalan sitios para edificar iglesias. Así
fueron recorrieron pueblos, siempre con los mismos resultados. Nutridos grupos indígenas
que pedían el bautismo para ellos y para sus hijos.

Fray Pedro de Gante había tenido tiempo de instruir con esmero a sus discípulos, pues
los evangelizo y les dio la formación con puntos esenciales que son; un solo Dios
todopoderoso, eterno, de sabiduría y bondad infinitas, creador de todas las cosas, la
Santísima Virgen María, la inmortalidad del alma, los demonios, eran los dogmas a que se
limitaba la instrucción y con que los indios eran preparados para el bautismo. Por lo tanto la

12 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 315
13 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 315
administración del bautismo era precedida en todo caso de una instrucción previa, se podría
decir muy rápida, según las circunstancias de los indígenas14.

Los franciscanos solo daban el bautismo a los niños en domingo, después de la misa,
era cuando los indios llevaban a los niños para que se los bautizaran. Por eso los
franciscanos de acuerdo con lo prescrito en la Junta Eclesiástica de 1524, fijaron dos días a
la semana para el bautismo de los niños que sería el domingo después de misa y el jueves
después de las vísperas15.

Los franciscanos llevan dos años en estar en Texcoco haciendo apostolado, diariamente
acuden indios a la explicación de la doctrina cristiana, hay también muchos indígenas que
quieren ser bautizados, el éxito misional conserva un ritmo de elevación en todos los
pueblos de la provincia, ya en estos momentos los franciscanos ya han aprendido la lengua
de los naturales16.

En su tercer año llegaron los franciscanos a Tepopolco, que estaba hace el norte de
Tehuacán, estado de Puebla, fue convocado el pueblo para comenzar la instrucción,
después de tres o cuatro horas, ya muchos sabían persignarse y la oración del Padre
Nuestro. Los franciscanos enseñan y predican a los indios que no sabía ni había oído de
Dios, ni recibido su palabra, pues les enseñaban que Dios del cielo era verdadero Señor,
creador del cielo y la tierra y quien era el demonio, a quien los indios adoraban y honraban,
delante de los frailes destruían los ídolos que tenían y quemaron los templos17.

En la preparación prebautismal tenían también muy activa en los monasterios


franciscanos los niños indios, porque todos los pueblos principales, aunque estuvieran algo
lejos, hacían traer los hijos de los señores y los manaban a la escuela, después de que
estuvieran bien doctrinados los enviaban a sus tierras, para que ellos lleven la noticia de lo

14 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 136
15 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 140
16 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 316
17 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 317
que habían aprendido de la ley de Dios, que a su vez les enseñaran a sus padres, parientes y
a la gente, dando orden como se juntasen ciertos días para ser enseñados de la doctrina,
como lo hacían en los monasterios. 18

Entre los franciscanos con un territorio misional más extenso y mayor variedad de
lenguas, abunda en proporción análoga el grupo lingüistas, podemos ver como el Náhuatl
podemos citar como fray Luis de Fuensalida, fray Francisco de Jiménez, fray Juan Focher,
fray Alonso de Molina y fray Bernardino de Sahagún, como notables en el tarasco como a
fray Pedro de Garovillas, fray Juan de San Miguel y fray Matutinio Gilbert, como
especialistas en matlatzinca como a fray Andrés de Castro, como poliglotas como a fray
Miguel de Bolonia y a fray Andrés de Olmos.19

Fray Juan de Alameda quien fuera una gran arquitecto, fue constructor futuro de Tula,
en 1539 traslada a toda la comunidad indígena como unos cuarenta mil almas, habitantes de
una zona escabrosa a Huejotzingo, distante de Puebla de los Ángeles, para lo cual abrió
calles, dilato plazas y construyo un convento. Fray Juan de Padilla reúne indios de algunas
rancherías de la comarca de Jalisco y con ellos funda y organiza en 1533 Zapotlán.
Juchipila en Zacatecas, eran más de doce mil indios, lo erige en 1542 fray Miguel de
Bolonia presidido por iglesia, convento y hospital, hace su apostolado el fray Gaspar
Rodríguez20.

IV. La enseña de la doctrina de la Iglesia.

Una de las enseñanzas para los indios fue el catecismo, ya que toda la población se
reuniera en un convento había de enseñarse el catecismo de manera regular todos los
domingos y de fiesta. Muy de mañana estaban los vigilantes de cada barrio, eran llamados
merinos en las grandes ciudades o los alcaldes en los pueblos, ellos se dedicaban en a s

18 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 318
19 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 328
20 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 396
despertar a su gente. Cada barrio o pueblo se encaminaban a la iglesia, iban con la cruz por
delante y rezando por el camino. Llegando al templo se pasaba lista y se tomaba nota de los
faltantes, la ausencia no podían justificar a los que pasaban lista. Esta vigilancia era
estrictamente rigurosa, ya que al principio de la predicación del Evangelio se imponían muy
severas sanciones, fue hasta 1539 tuvieron que prohibir el uso de los azotes y la cárcel.
Pues bien se percibe era necesaria una doctrina por escrita en la dirección de los
neoconversos, ya que estos eran inclinados al olvido. Por lo general la reunión se hacía en
los atrios o cementerios, en torno a la Cruz, las mujeres en lugar distinto de los hombres,
todas altas voces dos o tres veces alguna parte del catecismo. A todo esto se seguía un
sermón y al fin la celebración de la misa21.

Los franciscanos no hubieran podido llevar a la práctica esta enseñanza si no se


hubieran ayudado de los indios de confianza, estos indios a quienes se le daba nombre de
fiscales o mandones en español y en náhuatl se les llama tepixque o tequitlatoque, no tenía
que reunir a los indios para llevarlos a la enseñanza del catecismo y a la misa, también
entraban en sus deberes de presentar al obispo en la visita parroquia los jóvenes y los
adultos no confirmados, vigilar que todos se bautizaran y que cumplieran con la confesión
en Cuaresma, procurar la celebración en regla de los matrimonios, reprimir y denunciar a
las autoridades los adulterios y concubinatos, denunciar a los ebrios impenitentes y a los
brujos22.

Los franciscanos tuvieron el principal empeño de ensañar la doctrina en la de los niños.


Pues los dividieron en dos categorías, los niños de la gente baja, reunidos cada mañana
después de misa en los atrios de los templos y repartidos en diversos grupos, conforme a
sus grados de conocimiento del catecismo y aprendizaje de las oraciones principales,
acabada la sección catequística, regresaban a su casa para seguir el aprendizaje de los
oficios y ejercicios de sus padres. Otra era la manera de tratar a los hijos principales, en
ellos se ponía un mayor interés, como que estaban llamados a gobernar. Estos niños nobles
vivían en escuelas anexas a los conventos en calidad de interno. Mañana y tarde tenían
clases en la escuela y en ellas estudiaban el catecismo en primer término, también les
21 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 150
22 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 151
enseñaban leer y escribir, de estos niños escogían algunos para cantores de la iglesia y otros
ayudaban a la celebraciones de la misa para servir de sacristanes 23. Los niños preferidos en
la instrucción franciscana suponían el provenir material y espiritual de México, fueron
fieles y activos colaboradores de la obra evangelizadora.

Para los franciscanos los puntos principales que les enseñaba a los niños y adultos eran
sustancialmente expuestos en la doctrina de fray Alonso de Molina, que en su primera parte
comprende las oraciones y verdades esenciales que todos deben de saber, que se
explicaban en las iglesias y era parte del examen para los candidatos al bautismo,
matrimonio, confesión, comunión y confirmación, de igual manera deben aprender las
oraciones como el Padre Nuestro, Ave María, Salve Regina, los diez mandamientos de Dios
y los cinco de la Iglesia, los siete sacramentos, el pecado venial y mortal. La segunda parte
contiene verdades complementarias cuyo conocimiento no se creía necesario para todos,
tenía el contenido de las virtudes teologales, las catorce obras de misericordia, los dones del
Espíritu Santo, los sentidos corporales, las potencias del alma, los enemigos del alma, las
bienaventuranzas, los dotes del cuerpo glorificado y los deberes de los padrinos. Todas
estas verdades las repetían diariamente, en alta voz24.

Los franciscanos en 1526 comienzan a confesar indios con mucho trabajo en la


provincia de Texcoco, no poco les costó hacerles entender el significado del sacramento, la
confesión era vocal o escrita en caracteres indígenas, la confesión la hacían en pascuas y en
las fiestas principales. Algunos ministros del Evangelio les suscitaba la duda de que si los
indios eran capaces de este sacramento, pues confesaban indistintamente los pecados, los
franciscanos continúan administrándoselo, les explican insistentemente a los penitentes las
condiciones que hacían sacrilegio o nulo el acto sacramental25.

Otra herramienta en la que empezaron a utilizar los franciscanos fue la pintura y las
imágenes, puesto que para la cultura mesoamericana, el tipo de escritura era de dibujos que

23 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 153
24 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 402
25 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 406
representaban escenas o palabras de la vida común o de algún evento religioso. Así pues
los misioneros plasmas ideas en imágenes que ayudaban a comprender mejor la doctrina
que se trataba de transmitir, de esta manera se pudo romper en cierto grado la barrera que
se trataba del lenguaje y la escritura. Simultáneamente también se desarrollaron obras
teatrales en que se podían observar diferentes trozos de la biblia o de la evangelización en
la vida diaria. Otros recursos que utilizaron los franciscanos fueron los cantos.

Los frailes también habían infundido en el alma india un gran amor a la Cruz, puesto
que levantaron muchas en las montañas y en otras muchas otras partes, puesto que cada
indio la veneraba en su oratorio doméstico, muchos la llevaban colgada al cuello, en
cuaresma algunos por devoción se cargaban una bien pesada para ir en peregrinación a una
ermita o iglesia muy distante del pueblo. En Semana Santa sacaban varios crucifijos y
cruces diferentes, las levantaban en calles y caminos aquellos días y las otras fiestas las
enramaban y adornaban con rosas y flores26.

Las primeras escuelas en México fueron fundadas por los franciscanos, fueron dos
escuelas importantes la primera fue la fundada en Texcoco por fray Pedro de Gante en el
año 1523, antes de la llega de los Doce, la segunda escuela fue en 1525 por fray Martin de
Valencia. La primera escuela de Tlaxcala fue fundada por el fray Alonso de Esclona en
1531. El colegio de San Juan de Letrán, este se acogían los niños huérfanos nacidos de
español e india, fue un principio una escuela ordinaria dirigida por los franciscanos, la
escuela de Ahuacatlán, en la Nueva Galicia fundada por los frailes Francisco Lorenzo y
Miguel de Estivales.

La enseñanza del catecismo los franciscanos habían dividido a los niños en dos
categorías la gente baja y los hijos de los principales, los primeros eran externos, llegaban
cada mañana con regularidad a recibir sus clases y la tarde les quedaba libre, los otros eran
internos, vivían en el monasterio, la escuela era una dependencia del convento, los niños de
esta categoría tenían clases mañana y tarde, pero más se procuraba era su instrucción y

26 Cfr. León Lopetegui S.I. y Félix Zubillaga S.I. Historia de la Iglesia en la América Española, Ed. BEC Madrid
1969 414
educación religiosa. La formación profana era idéntica para ambas categorías les enseñaban
leer, escribir y cantar27.

Los orígenes de las escuelas técnicas fue fray Pedro de Gante que tuvo la iniciativa de
introducir en la escuela situada junto a la capilla de San Jose de los Naturales la enseñanza
de artes y oficios. En estas escuelas reunía a indios ya adultos y los transformaban en
herreros, carpinteros, albañiles, sastres, zapateros, también había instalado en esa escuela
un equipo de pintores, escultores, que trabajaban haciendo estatuas y retablos para las
iglesias y forjaban todo tipo de clase de ornamentos, tales como candeleros, cruces, vasos
sagrados, etc. También los franciscanos quienes descubrieron a los indios el secreto de la
bóveda, la primera que vieron hacer fue la de la primera iglesia del convento de San
Francisco el Grande de México, bajo la dirección de un albañil de Castilla28.

Fray Juan de San Miguel se le atribuye la fundación de la mayor parte de los hospitales
en Michoacán y de los primeros hospitales en México, puesto que fundo hospitales
cercanos a las iglesias donde se curan los enfermos, se administran los Sacramentos de
Penitencia y Extrema Unción. Estos hospitales se hallaban bajo el nombre de la Cofradía de
la Purísima Concepción y formaban parte de ellos todos los indios que lo querían. Puesto
que los mismos indios se alternaban en el servicio de los enfermos juntamente con sus
mujeres, puesto que se dividían entre cinco o seis grupos, cada grupo se encargaba por
semana, también hacían una ofrenda al hospital de acuerdo a sus posibilidades. Estos
benévolos enfermeros tenían que confesar y comulgar con cierta regularidad, puesto que se
reunían en la capilla para rezar la doctrina toda la mañana y las noches por tres veces a la
semana y todos los sábados había un culto especial en honor de la Purísima Concepción
quien era patrona de los hospitales29.

27 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 266
28 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 270
29 Cfr. Robert Ricard La Conquista Espiritual de México, Editorial Fondo de Cultura Económica México 213
Conclusión.

El trabajo realizado para la evangelización de Nueva España por los franciscanos


como se ha visto la importancia que tuvieron estos primeros frailes para la enseñanza de la
doctrina de la fe, fue una labor importante que tuvieron los primeros franciscanos para la
misión por estas tierras.

En México es un territorio muy amplio y gracias a eso, los franciscanos fueron


evangelizando casi todo ese territorio construyendo casas, conventos e iglesias donde se
juntaban los indios para la enseñanza de la doctrina y para recibir el bautismo, uno de los
más destacados de los primeros franciscanos fue fray Pedro de Gante que fuera un hermano
lego, quien fuera que enseñara la doctrina, se aprendió la lengua de los indígenas, fundo
escuelas y talleres de artes.

En labor ejercida por los franciscanos fue siempre de admirar por todo lo que
hicieron para la evangelización de los indios en estas tierras mexicanas, como le pusieron
muy interés en la enseñanza de los niños, ya que estos tienen un papel importante en los
pueblos y barrios, ya que acabando la enseñanza de la doctrina llegaban a sus casas a
enseñarles la doctrina lo que habían aprendido, también las predicaciones que los
franciscanos tuvieron a la evangelización, sobre todo tuvieron que aprender muchas lenguas
para poder predicarles y supieron aplicar las herramientas que encontraron para que
pudieran entenderles a los indios como fueron las imágenes y las obras teatrales que fueron
una parte fundamental para la evangelización de estos indios, que representaban pasajes de
la Sagrada Escritura sobre todo pasajes de Jesús, otra herramienta fue los cantos, ya que
veían que los indios les gustaba cantar en sus ceremonias que tenían, los franciscanos
adecuaron para que entraran la cantos propios para la evangelización. Las escuelas
franciscanas pronto se convirtieron en los centros donde los franciscanos les enseñaban

Podemos concluir que esta manera empezaron varios caminos para evangelizar a
casi todo el territorio mexicano, puesto que tenían las bases para empezar a construir una
fuerte fe, que ha tenido las características necesarias para poder aceptar la fe cristiana, que
fueron importantes esta evangelización de los franciscanos que aun en nuestros días existen
las herramientas que utilizando los frailes.

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