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La verdad y las formas jurídicas: cuarta conferencia (Michel Foucault).

Al inicio de la cuarta conferencia Michel Foucault, menciona que tratará sobre la


sociedad disciplinaria, deja en claro que no trata del derecho en general, o de las
formas jurídicas en general, afirma que trata de las formas jurídicas en el derecho
penal, y hace breves referencia a Beccaria, Betham, sobre el control de los sujetos
activos del delito, y que en forma general podría considerase “Las finalidades
rectoras que constituyen el sistema de Derecho penal sólo pueden ser de tipo
político criminal, ya que naturalmente los presupuestos de la punibilidad han de
orientarse a los fines del derecho penal” (Roxin:2007, p.217), para la protección de
la sociedad (Jescheck:1993, p.18), en la que se crea toda una maquinaria que tiene
por objeto la vigilancia y control de la peligrosidad del sujeto, en el que tiene especial
importancia instrumentos no penales (Baratta: 2004, p. 152)
En las referencias la situación a finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX,
considera la posturas de Beccaria, Betham, Brissot así como de los legisladores
sel primer y segundo código penal francés en la época revolucionaria. Para ellos ya
no se trata de la infracción a la ley, penal, natural, o religiosa, sino que se da un
cambio, y el crimen es considerado como ruptura de la ley civil. En segundo lugar
la ley penal, define lo que es reprimible, lo que representa un daño social. Y
Consideran al criminal como un enemigo social, así Rousseau afirmó que el criminal
es el que rompe el pacto social.
Y ahora se trata de una cuestión de prevención general (Mir: 2005, p. 137), dirigida
a la comunidad colectiva y de prevención especial. Menciona Foucault que los
autores citados extraen cuatro posibles formas de castigo:
• La expulsión, deportación, exilio de los sujetos que hubiesen roto el pacto
social. En este caso, se mencionó que en el derecho germánico era una
sanción, en la época de los autores citados, y posteriormente significaría una
problemática mayor ya que afectaría a otros Estados.
• La segunda forma, es la exclusión, el aislamiento dentro del grupo social, un
castigo a nivel de escándalo,
• Una tercera forma de pena era el trabajo forzado.

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• La cuarta forma se pretendía que el daño no pueda cometerse de nuevo, que
no tuviese deseos de cometerlo nuevamente, mediante la ley del talión.

Las mencionadas penas fueron sustituidas a inicios del siglo XIX por la de prisión,
de la que Foucault afirma surgió como una institución de hecho, sin justificación
teórica, y este proceso fue acompañado por un cambio en la legislación penal,
que tratará de ajustarse al individuo.
Durante el siglo XIX se verifica un importante cambio, y la importancia de la
política criminal (Bustos:1997, p. 10) lo importante ya no es el control de los actos
que realizan los sujetos, sino de los actos que pueden realizar, de lo que estén
dispuestos a hacer o estén a punto de hacer, apareciendo a finales del siglo XIX
el concepto de peligrosidad, considerando lo que el individuo Enel nivel de
virtualidad y no de sus actos. Se trata de tener el control del comportamiento en
el mismo momento en que se esboza. De un control que no puede estar
totalmente en manos de un poder autónomo del poder judicial.
El concepto de peligrosidad como menciona Ferrajoli muy a pesar de la
pretensión de que separarlo de la cuestión moral religiosa, de una pretenida
objetividad resulta lo contrario:
Y con todo, el juicio de peligrosidad no puede sino hacer referencia a
elementos sustancialistas, de carácter moral, natural o social, no
identificables sobre la base de la ley y por tanto sólo legitimables
externamente, aun violando la garantía de la estricta legalidad.
(Ferrajoli:1995, p. 218)
Menciona que el control de las virtualidades no se puede realizar en forma exclusiva
por la justicia, y se requiere de poderes laterales, como la policía y una red de
instituciones de vigilancia y corrección, que tenga por objeto el control de individuo
durante toda su existencia, instituciones psicológicas, psiquiátricas, médicas,
criminológicas, y pedagógicas de corrección.
Considera Foucault a Betham como el único que previo la vigilancia mediante una
construcción arquitectónica que se llamó panóptico, que implicaría la vigilancia
permanente del sujeto en todos los ámbitos en que este se desarrolle, en el que

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siempre existirá un garante de esa vigilancia, el maestro de escuela, el jefe en su
oficina, el médico.
Para Foucault el surgimiento de estas estructuras de vigilancia y corrección de las
virtualidades que pudiese externar el sujeto, tienen sustento en la modificación en
la forma de producción, y llevaría a preguntar si sucede lo mismo en la Antigua
Grecia, así como en la época del derecho germánico, lo que implicaría una aparente
contradicción en cuanto a la crítica que hace a lo que denomina en su primera
conferencia marxismo académico francés.
En el contenido de la cuarta conferencia, se refiere a como el Estado, y otros sujetos
realiza actividades de vigilancia, control y corrección del comportamiento de los
sujetos, en los diversos sectores, que le permitiría incluso detectar el momento
mismo en que se inicia un comportamiento que vulnera el orden social,
aparentemente con la finalidad de lograr una uniformidad en el comportamiento.
Lo que denomina como sociedad disciplinaria, en la que los grupos ye individuos
que detentan poder de control, vigilancia y corrección del comportamiento de un
determinado grupo social, lo que implicaría el uso de la violencia a efecto de vigilar,
controlar o corregir los comportamientos que impliquen una infracción al Estado.
En su discurso se encuentra ausente una concepción de lo que es el derecho, y la
referencia tal vez a modo de anécdota del contrato social, resulta una omisión sobre
las sociedades y su organización política, sea en el derecho griego, lo que lleva a
Foucault a a firmar que el pueblo vence al soberano en el caso de Edipo, por los
testimonios de dos personas que son esclavos.
Como se menciono la referencia al surgimiento de concepto de peligrosidad, así
como diferentes formas de vigilancia. Control y corrección, son elementos que s
podrían subsumir en lo que es la política criminal.

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Bibliografía.
Baratta, Alessandro. Criminología y sistema penal. Argentina, Ed. B y F Ltda 2004.
Bustos Ramírez, Juan J. y Hernán Hormazabal Malarée. Lecciones de derecho
penal volumen I. Madrid, España, Editorial Trotta 1997.
Hans-Heinrich Jescheck Tratado de derecho penal, parte general, España, Ed.
Comares 1993,
Ferrjoli, Luigi. Derecho y razón. Teoría del garantismo penal. Madrid España,
Editorial Trotta 1995.
Roxin, Claus. Derecho penal, parte general, tomo 1, Civitas 2007, España, 1071 p
Mir Puig, Santiago. Introducción a las bases del derecho penal, Argentina, Ed. B de F
Ltda. 2005,

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