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ACTUALIZACIÓN

Insuficiencia renal aguda (I)


C. Moyano Peregrín*, R. Ojeda López, V. García-Montemayor, V. Pendón Ruiz de Mier y S. Soriano Cabrera
Servicio de Nefrología. Hospital Universitario Reina Sofía. Córdoba. España.

Palabras Clave: Resumen


- Insuficiencia renal aguda La insuficiencia renal aguda (IRA) es un síndrome clínico que se caracteriza por la pérdida brusca de la
- Necrosis tubular aguda función renal, que se asocia con frecuencia a un recorte de diuresis, y que da lugar a una elevación de
los productos nitrogenados en sangre y una alteración en la homeostasis del organismo. La IRA puede
- Fracaso renal agudo deberse a múltiples causas que darán lugar a hipoperfusión renal (causa prerrenal), daño de las diferen-
tes estructuras del parénquima renal (causa parenquimatosa) u obstrucción de la vía urinaria (causa
obstructiva), siendo en ocasiones la etiología multifactorial. Las manifestaciones clínicas de la IRA serán
muy variables y dependerán de la causa que la genere. La IRA puede desarrollarse en pacientes ambula-
torios, hospitalizados y más frecuentemente en pacientes críticos, estando asociada, en sus formas más
severas, a una elevada morbilidad y mortalidad, generando un elevado gasto sanitario. La recuperación
de la función renal ocurre en la mayoría de los pacientes que sobreviven a un episodio de IRA, aunque
una parte de ellos pasará a depender de la terapia renal sustitutiva o sufrirá una insuficiencia renal cró-
nica que podrá progresar a un estadio terminal. Debido al mal pronóstico asociado a la IRA, esta debe
ser identificada de forma precoz.

Keywords: Abstract
- Acute renal insufficiency Acute renal failure (I)
- Acute tubular necrosis Acute renal failure (ARF) is a clinical syndrome characterized by a sudden deterioration in renal function,
- Acute renal failure caused by an impairment of diuretic function and resulting in a rise of nitrogenous waste products in
blood and in homeostasis impairment. ARF may result from several causes resulting in renal
hypoperfusion (prerenal origin), damage in renal parenchyma (parenchymatous origin) or urinary tract
obstruction (obstructive origin). Sometimes etiology is multifactorial. Depending on the etiology, clinical
features vary. ARF affects both outpatients and inpatients, mainly to critically ill patient. Severe ARF is
related to high mobility and mortality rates, which are associated with high healthcare costs. Most of the
survivor patients recover renal function, although some of them will require renal-replacement therapy or
will evolve to chronic renal insufficiency which will progress to end-stage renal disease. Because ARF
prognosis is poor, early diagnosis is mandatory.

Concepto El término IRA ha sustituido al de fracaso renal agudo,


reflejando que pequeños descensos en la función renal que
no son un resultado de un fallo manifiesto del órgano tienen,
La insuficiencia renal aguda (IRA) se define como un dete-
sin embargo, una importancia clínica relevante que se asocia
rioro abrupto de la función renal que da lugar a una reten-
a un aumento en la morbimortalidad1. La definición de IRA
ción de urea y productos nitrogenados y a una disregulación
ha evolucionado a lo largo del tiempo y, de hecho, el diag-
del volumen extracelular y de electrolitos. Puede acompañar-
nóstico de la IRA ha evolucionado desde un aspecto clínico
se o no de oliguria.
y bioquímico a un nivel molecular, donde han existido avan-
ces en biomarcadores de daño tubular que permiten mejorar
la precisión en el diagnóstico2.
*Correspondencia Las diferentes definiciones de la IRA se basan en los
Correo electrónico: tanitak@hotmail.com valores de creatinina y en la diuresis, y han ido variando a

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INSUFICIENCIA RENAL AGUDA (I)

TABLA 1
Criterios de insuficiencia renal aguda

Criterios diagnósticos RIFLE AKIN KDIGO


Elevación de creatinina ≥ 0,3 mg/dl o Elevación de creatinina ≥ 0,3 mg/dl en 48 h
≥ 50% en 48 h o diuresis ≤ 0,5 ml/kg/hora o ≥ 50% en 7 días o diuresis ≤ 0,5 ml/kg/
en > 6 horas hora en > 6 horas
Estadios
Risk (RIFLE) o estadio 1 (AKIN/KDIGO) Aumento de la creatinina un 50-99% Aumento de la creatinina Aumento de la creatinina
o diuresis < 0,5 ml/kg/h en ≥ 0,3 mg/dl o 50-100% o diuresis ≥ 0,3 mg/dl o 50-99% o diuresis
6-12 horas < 0,5 ml/kg/h en 6-12 horas < 0,5 ml/kg/h en 6-12 horas
Injury (RIFLE) o estadio 2 (AKIN/KDIGO) Aumento de la creatinina un Aumento de la creatinina Aumento de la creatinina un 100-199%
100-199% o diuresis < 0,5 ml/kg/h > 100-200% o diuresis < 0,5 ml/kg/h o diuresis < 0,5 ml/kg/h en 12-24 horas
en 12-24 horas en 12-24 horas
Failure (RIFLE) o estadio 3 (AKIN/KDIGO) Aumento de la creatinina un ≥ 200% Aumento de la creatinina un Aumento de la creatinina un ≥ 200 %
o aumento de la creatinina desde > 200% o aumento de la creatinina desde o aumento de la creatinina desde
> 0,5 mg/dl a > 4 mg/dl o diuresis > 0,5 mg/dl a ≥ 4 mg/dl o diuresis ≥ 0,3 mg/dl a ≥ 4 mg/dl o diuresis
< 0,3 ml/kg/h en > 24 horas o anuria < 0,3 ml/kg/h en > 24 horas o anuria < 0,3 ml/kg/h en ≥ 24 horas o anuria
> 12 horas o inicio de terapia renal > 12 horas o inicio de terapia renal ≥ 12 horas o inicio de terapia renal
sustitutiva sustitutiva sustitutiva
Loss (RIFLE) Necesidad de terapia renal sustitutiva
> 4 semanas
End stage (RIFLE) Necesidad de terapia renal sustitutiva
> 3 meses
AKIN: Acute kidney injury network; ESRD: end-stage renal disease; KDIGO: kidney disease: improving global outcomes; RIFLE: risk, injury, failure, loss, end.

lo largo del tiempo. En general, todas las definiciones de hormonales (por ejemplo de la hormona antidiurética —
IRA subrayan el carácter inmediato del deterioro funcional ADH—) o cambios osmóticos (hiperglucemia). La oliguria
renal. Algunos autores han matizado que el deterioro puede puede ser una respuesta fisiológica a la depleción de volumen
producirse en días o semanas, pero consideramos que si se o a la disminución del flujo sanguíneo renal (FSR) y, además,
trata de semanas sería más apropiado hablar de un proceso puede existir daño renal no oligúrico. La tercera limitación
subagudo. que presentan los criterios diagnósticos de IRA es la deter-
En 2002, en la conferencia de consenso de la Adequate minación de la creatinina basal, ya que es imposible calcular
Dialysis Quality Initiative (ADKI) celebrada en Vicenza, se el cambio en la creatinina sérica en pacientes que presenten
desarrolla una clasificación bajo el acrónimo de RIFLE, una IRA pero no tengan una determinación basal de creati-
correspondiente a Risk (riesgo), Injury (daño), Failure (fa- nina. Además, el valor de creatinina sérica puede estar in-
llo), Loss (pérdida prolongada de función renal) y End (fin fluenciado por factores que alteren su producción (edad,
irreversible de la función renal). Con ella se pretende uni- dieta, masa muscular), eliminación o secreción (fármacos) y
ficar los criterios diagnósticos3,4. Posteriormente, se ha por el balance hídrico que puede alterar su concentración.
desarrollado otra clasificación que propone algunas modi- La gravedad del grado de IRA, según las diferentes defi-
ficaciones (AKIN —Acute Kidney Injury Network—). En niciones, se correlaciona con el riesgo de mortalidad y con la
ella se obvian los criterios de caída de filtrado glome- duración de la estancia hospitalaria y en unidades de cuida-
rular (FG) y se mantienen los de elevación de creatinina y dos intensivos (UCI)8-14.
la disminución de la diuresis1,5,6. Por último, las guías Entre las diferentes clasificaciones descritas, la clasifica-
KDIGO (Kidney disease: improving global outcomes) son las ción KDIGO parece ser mejor en el diagnóstico y la aproxi-
más recientes y las más empleadas7. En ellas, se define la mación pronóstica que la clasificación AKIN y RIFLE15-18.
IRA como un aumento de la creatinina de 0,3 mg/dl o más Sin embargo, futuros estudios prospectivos son necesarios
en 48 horas, o un aumento de la creatinina 1,5 veces o más para determinar la sensibilidad y la capacidad pronóstica de
el valor basal en los primeros 7 días, o un volumen urina- estas definiciones.
rio menor de 0,5 ml/kg/hora en 6 horas.
Las diferentes definiciones de IRA, según la clasificación,
se muestran en la tabla 1. Clasificación y etiopatogenia
Estos criterios diagnósticos de IRA presentan varias limi-
taciones. La principal es que estos criterios no distinguen Para una adecuada función renal son necesarios tres ele-
entre las diferentes causas de IRA. Para abordar este proble- mentos: una apropiada perfusión sanguínea renal, un pa-
ma, las guías KDIGO especifican que los pacientes con IRA rénquima renal íntegro y unas vías excretoras urinarias per-
sean evaluados rápidamente para determinar la causa. Esta meables. Una alteración súbita de cualquiera de estos tres
evaluación es fundamental para el cuidado del paciente, ya elementos puede ocasionar un deterioro agudo de la fun-
que las causas reversibles de IRA requieren medidas especí- ción renal. Dependiendo del elemento alterado, podremos
ficas. Otra limitación importante es el uso de la diuresis clasificar la IRA como prerrenal, si falla la perfusión renal;
como criterio exclusivo para la definición de IRA. La diuresis parenquimatosa, si se altera alguna estructura del parénqui-
va a depender de muchos factores independientes del daño ma renal, y obstructiva o posrenal, si se interrumpe el flujo
renal, como la ingesta o la pérdida de líquidos, los cambios urinario.

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ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (I)

TABLA 2 centraciones de sustancias natriuréticas como el factor na-


Causas de insuficiencia renal aguda prerrenal
triurético atrial y la urodilatadina, va a producir una
Hipovolemia verdadera
reabsorción de sodio y agua. Se produce, por tanto, una orina
Depleción de volumen intravascular por pérdidas: hemorragias, pérdidas digestivas
de escaso volumen, muy concentrada y con escasa cantidad
(vómitos, diarreas), quemaduras, pérdidas renales (diuréticos, diabetes insípida) de sodio.
Por redistribución: hepatopatías, síndrome nefrótico, obstrucción intestinal, La capacidad de retener sodio y agua distingue a la causa
pancreatitis, peritonitis y desnutrición
prerrenal de las formas parenquimatosas y obstructivas y se
Hipovolemia efectiva refleja en la bioquímica de orina con sodio bajo (menor de 20
Disminución del gasto cardiaco: shock cardiogénico, valvulopatías, miocarditis, mEq/l), osmolalidad aumentada (más de 500 mOsm/l) y ex-
infarto agudo de miocardio, arritmias, insuficiencia cardíaca congestiva,
tromboembolismo pulmonar, taponamiento cardíaco creción fraccional de sodio baja (EFNa menor de 1%).
Vasodilatación periférica: fármacos antihipertensivos, sepsis, hipoxemia, shock En la figura 1 se muestra de manera esquematizada el
anafiláctico, tratamientos con IL-2 o interferón, síndrome de hiperestimulación
ovárica mecanismo de autorregulación renal ante una situación de
Vasoconstricción renal: sustancias alfa-adrenérgicas, sepsis, inhibición de síntesis hipoperfusión renal.
de prostaglandinas, síndrome hepatorrenal, hipercalcemia.
En pacientes hospitalizados, la hipotensión, la hipovole-
Alteración de mecanismos adaptativos renales mia y la reducción de la perfusión renal es la causa más fre-
Vasodilatación de la arteria eferente: inhibidores de la enzima convertidora cuente de IRA.
de la angiotensina, antagonistas de los receptores de la angiotensina II
El fallo funcional ocurre en un riñón indemne, como
Vasoconstricción de la arteria aferente: anticalcineurínicos, antiinflamatorios
no esteroideos consecuencia del descenso de la presión de filtración glome-
rular. Esto constituye una respuesta apropiada a la situación
de hipoperfusión renal y suele ser reversible cuando la causa
se resuelve. Sin embargo, si la causa que genera la hipoper-
Insuficiencia renal aguda prerrenal fusión renal se prolonga en el tiempo o es muy severa, des-
encadenaría un daño hipóxico en las células tubulares rena-
Se produce cuando la perfusión renal está comprometida. les, con pérdida de polaridad, necrosis y apoptosis celular que
Supone el 70% de los casos de IRA adquirida en la comuni- daría lugar a una lesión conocida como NTA. En estos casos,
dad y hasta el 40% en el hospital. Las causas de IRA prerre- el daño ya sería intrínseco (con daño parenquimatoso) y se
nal se describen en la tabla 2. podría producir por otras causas diferentes a la hipoperfu-
En todas estas situaciones clínicas en las que la perfusión sión renal como: causas inmunológicas (vasculitis, nefritis
renal está comprometida, existe una respuesta fisiopatológica intersticial aguda), agentes nefrotóxicos (aminoglucósidos,
mediada por reacciones hormonales y estímulos nerviosos contrastes yodados), problemas vasculares (enfermedad ate-
que intentarán compensar esta situación y condicionarán la roembólica, trombosis de arterias o venas renales) o por obs-
disminución del flujo urinario. Por lo general, la IRA prerre- trucción tubular por el depósito masivo de moléculas (mie-
nal se asocia a oliguria, definida como una diuresis inferior a loma, cristales de ácido úrico). En ocasiones, el mecanismo
400 ml/día o de menos de 20 ml/hora. es mixto, combinándose varias causas. Ese es el caso de la
En condiciones normales, el FG y el flujo plasmático re- rabdomiolisis, en la que se suma la hipoperfusión y la lesión
nal (FPR) permanecen constantes dentro de unos márgenes, directa nefrotóxica, o la sepsis, en la que también se suma el
gracias a mecanismos de autorregulación gobernados por un efecto de la hipoperfusión renal y el efecto citotóxico de los
equilibrio entre sustancias vasodilatadoras y vasoconstrictoras mediadores de la inflamación liberados en respuesta a las to-
que preservarán la perfusión renal a pesar de las reducciones xinas bacterianas. La NTA puede cursar con oliguria, anuria
en la presión arterial media hasta valores de 80 mm Hg. o con diuresis conservada. En este caso, el sodio urinario es
Si desciende por debajo de estos niveles, los mecanismos habitualmente mayor de 20 mEq/l, la osmolalidad plasmáti-
compensadores serán insuficientes y se produce un descenso ca menor de 350 mOsm/l y la EFNa superior al 2%.
en el FG y en el FPR, pudiendo llegar a originar necrosis Una vez vista la fisiopatología de una IRA prerrenal, se
tubular aguda (NTA). En situaciones de hipoperfusión renal, entiende que la existencia de alteraciones previas en la mi-
los mecanismos de autorregulación mantienen la presión de crovasculatura renal pueda favorecer el desarrollo de IRA en
perfusión glomerular, produciendo una disminución de la distintas situaciones de hipoperfusión renal. En la tabla 3 se
resistencia de la arteriola aferente y probablemente de las describen factores predisponentes de IRA prerrenal.
arterias interlobulares y arcuatas, y el aumento simultáneo de
la resistencia de la arteriola eferente. La angiotensina II es la
principal responsable de la vasoconstricción de la arteriola Insuficiencia renal aguda parenquimatosa
eferente en situaciones de hipovolemia, y su bloqueo, en es-
tas circunstancias, es una causa frecuente de reducción brus- Podrá haber afectación de las diferentes estructuras que con-
ca del FG. La inhibición de las prostaglandinas (vasodilata- forman el parénquima renal (glomérulo, túbulos e intersticio
doras renales) intensificaría el aumento en la resistencia o estructuras vasculares). Aunque lo característico en una
vascular renal y la caída del FPR. IRA será la reducción en el FG, en la mayoría de los casos no
La vasoconstricción arteriolar eferente reduce la presión existe una glomerulopatía sino una lesión tubulointersticial
hidráulica en los capilares peritubulares y el túbulo proximal con una reducción secundaria del FG. Las causas de IRA
que, en conjunción con elevadas concentraciones de aldoste- parenquimatosa se pueden clasificar según la estructura renal
rona, angiotensina II y vasopresina y un descenso en las con- afectada como sigue.

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INSUFICIENCIA RENAL AGUDA (I)

Disminución presión
intraglomerular

Hipovolemia Activación de
mecanismo autorregulador

Activación barorreceptores
Activación sistema simpático
Activación de SRAA
Vasopresina
Prostaglandinas

Control perfusión glomerular Aumento de resistencia arteriola eferente


Control fracción de filtración Reabsorción de sodio y agua
Control de reabsorción tubular Disminución en resistencia de arteriola aferente

Fig. 1. Mecanismos de autorregulación en la hipoperfusión renal. SRAA: sistema renina angiotensina aldosterona.

Afectación glomerular TABLA 3


Factores predisponentes de insuficiencia renal aguda prerrenal

Glomerulonefritis. Pueden ser primarias o secundarias a Disminución de la resistencia en la arteriola aferente


enfermedades autoinmunes, infecciones o tumores. Las en- Cambios estructurales arteriolares: edad avanzada, ateroesclerosis,
hipertensión arterial
fermedades glomerulares pueden cursar con IRA tanto si son
Reducción en las prostaglandinas: antiinflamatorios no esteroideos,
agudas como si se produce una reagudización de una glome- inhibidores de la COX-2
rulonefritis crónica, sobre todo si cursa con un brote extra- Dificultad para aumentar la resistencia de la arteriola eferente: IECA, ARA II
capilar. Su diagnóstico se hará mediante biopsia renal. Estenosis de la arteria renal o nefropatía isquémica
ARA II: antagonistas de los receptores de la angiotensina II; COX-2: ciclooxigenasa 2; IECA:
inhibidores de la enzima de conversión de la angiotensina.
Afectación tubular e intersticial

Necrosis tubular aguda. Es la causa más frecuente de IRA


parenquimatosa, en general, y de forma específica en pacien- Afectación vascular
tes hospitalizados. La NTA es responsable del 90% de los
casos de FRA parenquimatoso. Su origen es secundario a Por afectación de pequeño vaso. Vasculitis y enfermedades
modificaciones hemodinámicas que producen isquemia pro- que producen microangiopatía y anemia hemolítica, inclu-
longada (NTA isquémica) o agresiones tóxicas (NTA nefro- yendo microangiopatía trombótica (MAT): púrpura trombó-
tóxica). La NTA isquémica ocurre por hipovolemia absoluta tica trombocitopénica o síndrome hemolítico urémico
o relativa mantenida en el tiempo. Las diferentes causas pue- (SHU), enfermedad ateroembólica o hipertensión maligna.
den ser hemorragia, hipotensión, shock, sepsis, cirugía mayor, En la MAT se estudiará el factor desencadenante. En el SHU
síndrome compartimental, etc. La NTA nefrotóxica podrá puede unirse a la toxina asociada a la cepa de E. coli 0157 o
ser causada por tóxicos endógenos como bilirrubina, mioglo- Shigella (SHU típico), o a otras causas (SHU atípico) como
bina, hemoglobina, ácido úrico, calcio, etc. o por tóxicos exó- el uso de ciclosporina, un estado posparto, enfermedades au-
genos como el contraste yodado, aminoglucósidos, ciclospo- toinmunes (esclerodermia) o a hipertensión maligna, entre
rina, tacrolimus, etilenglicol, etc. El riñón es un órgano muy otras. La MAT cursa con anemia, plaquetopenia, descenso de
vascularizado y presenta una gran capacidad de concentra- haptoglobina, elevación de LDH, presencia de esquistocitos
ción de sustancias tóxicas en el túbulo. Por eso es especial- en el frotis de sangre periférica y aumento de bilirrubina in-
mente vulnerable a la acción tóxica de numerosas sustancias, directa. La enfermedad ateroembólica puede ocurrir de for-
fármacos y compuestos orgánicos. ma espontánea, pero lo más frecuente es que se produzca
después de una manipulación instrumental endovascular,
Nefritis tubulointersticial aguda. La nefritis tubulointers- arteriografía o cirugía cardiovascular en pacientes con un ár-
ticial aguda (NTIA) se define como la inflamación aguda de bol arterial ateroesclerótico. Se produce una suelta de mi-
los túbulos e intersticio renales. Lo más frecuente es que esté croémbolos de colesterol generando pequeños infartos que
originada por fármacos, aunque también puede asociarse a pueden afectar a cualquier nivel, produciendo amaurosis,
infecciones o enfermedades sistémicas, o puede ser de causa pancreatitis, isquemia intestinal, etc. Destacan los signos cu-
idiopática. táneos, al ser los más visibles, como livedo reticularis o mi-

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ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (I)

croinfartos en zonas acras, siendo la manifestación más ca- TABLA 4


Causas de la insuficiencia renal aguda obstructiva
racterística el síndrome del dedo azul. El diagnóstico es
histológico, siendo la biopsia cutánea de elección por su sen- Anomalías congénitas Vejiga neurógena
cillez. En la biopsia, se evidencia la imagen en negativo de los Ureterocele
cristales de colesterol. En la analítica puede observarse eosi- Valvas uretrales posteriores
nofilia, plaquetopenia e hipocomplementemia. Uropatías adquiridas Hipertrofia prostática benigna
Litiasis
Por afectación de medianos y grandes vasos. Enfermedad Necrosis papilar
tromboembólica, infarto renal por disección aórtica o trom- Enfermedades malignas Neoplasias de próstata, vejiga, uretra, colon,
mama, cérvix
bosis venosa renal. La enfermedad tromboembólica se debe
Fibrosis retroperitoneal Idiopática
sospechar en personas mayores con ateroesclerosis o enfer-
Por fármacos
medades cardiológicas potencialmente embolígenas. En el
Traumática
caso de la trombosis venosa renal, suele ser un proceso cró-
Yatrógena
nico asociado a un síndrome nefrótico. Cuando ocurre de
Asociada a aneurisma aórtico
forma aguda, suele relacionarse con deshidrataciones muy
Ginecológica no neoplásica Asociada a embarazo
graves, siendo más frecuente en niños que reciben alimenta-
Endometriosis
ción hipertónica. El diagnóstico se suele hacer por tomogra- Prolapso uterino
fía computadorizada de alta resolución, aunque la ecografía Nefropatía aguda por cristales Ácido úrico
Doppler y la venografía renal son alternativas diagnósticas. Sulfamidas
Indinavir
Aciclovir
Insuficiencia renal aguda posrenal Infecciosas Tuberculosis
Candidiasis
La obstrucción puede ocurrir a cualquier nivel del tracto uri- Esquistosomiasis
nario. En estos casos, la historia clínica nos puede orientar al Aspergilosis
diagnóstico si hay antecedentes de cólicos nefríticos, trauma- Cistitis bacteriana
tismos, prostatismo o antecedentes de neoplasia urinaria,
intestinal o ginecológica. En pacientes sin insuficiencia renal
crónica (IRC), el deterioro brusco de la función renal sugie- al.19 establecen cinco estadios o fases evolutivas en la fisiopa-
re una obstrucción bilateral. Las causas de fracaso renal agu- tología de la NTA20:
do obstructivo se describen en la tabla 4. Si la obstrucción no 1. Fase prerrenal o de agresión hemodinámica o tóxica.
se resuelve, el daño renal evoluciona a una fibrosis tubuloin- Ocurre cuando disminuye el FSR pero se mantiene la inte-
tersticial irreversible. Ante un cuadro de IRA, siempre habrá gridad celular.
que realizar una ecografía abdominal (y prostática en varo- 2. Fase de iniciación. Aparece cuando el descenso del
nes) para descartar la causa obstructiva y valorar así la dilata- FSR provoca una depleción de ATP y se produce una lesión
ción de las vías urinarias y/o la presencia de litiasis. El análi- de la célula tubular epitelial: pérdida de microvilli, exfolia-
sis de orina es poco específico en este tipo de IRA, ya que los ción y obstrucción tubular.
índices urinarios pueden ser variables. 3. Fase de extensión. Se caracteriza por la persistencia
de la hipoxia y la respuesta inflamatoria, las cuales son más
pronunciadas en la unión corticomedular. En esta fase se
Manifestaciones clínicas produce una disfunción en la célula endotelial, originando
una alteración de la permeabilidad, del estado procoagulan-
La presentación clínica de la IRA es variable. En la evolución te, la disregulación de células proinflamatorias, la libera-
clínica de la IRA clásicamente se distinguen tres fases: de ción de citoquinas, etc. Se ocasiona una muerte celular por
instauración, de mantenimiento y de resolución. La primera necrosis y apoptosis, predominantemente en la médula ex-
fase de instauración, en la que actúa la noxa, abarca desde que terna. En esta fase, se produce una liberación continua de
se elevan los productos nitrogenados hasta el momento en citoquinas que retroalimentan la cascada inflamatoria. Inte-
que se estabilizan, aproximadamente. En la IRA oligoanúri- rrumpir esta cascada inflamatoria puede tener implicacio-
ca, el inicio coincide con la aparición de la oliguria/anuria. nes terapéuticas21.
La de mantenimiento coincide con la perpetuación del daño 4. Fase de mantenimiento. En esta fase, las células co-
renal por mecanismos propios de este. En este período, los mienzan a repararse, migran, sufren apoptosis y proliferación
productos nitrogenados se mantienen en niveles más o me- en un intento de reestablecer y mantener la integridad celu-
nos constantes, y en las IRA oligúricas persiste la oliguria. La lar y tubular. Esta reparación celular produce una lenta me-
fase de resolución coincide con el descenso de los productos jora de la función celular. El flujo sanguíneo vuelve a ser
nitrogenados en sangre y en la IRA oligúrica se reanuda la normal y las células epiteliales establecen la homeostasis in-
diuresis. tra- e intercelular.
La forma más grave de IRA es la NTA y, en su fisiopato- 5. Fase de recuperación. Se mantiene la diferenciación
logía, están implicados factores hemodinámicos, de lesión celular y se restablece la polaridad epitelial, recuperándose la
tubular y procesos inflamatorios. En el año 2002, Sutton et función celular normal y del órgano.

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INSUFICIENCIA RENAL AGUDA (I)

En cuanto a los síntomas que se presentan ante una IRA, IRA prerrenal en que la hipoperfusión renal ocasiona daño
dependerá de la causa subyacente. Así, en la IRA de origen tubular y no se produce recuperación tras la reposición de
prerrenal predominan los síntomas de bajo gasto, por dismi- volumen. En la NTA nefrotóxica, la clínica podrá ser muy
nución del volumen circulante, según la causa que lo motive: variable o ausente según el agente causal. En la IRA obstruc-
hipoperfusión renal (insuficiencia cardíaca, shock), pérdidas tiva, la clínica podrá ser variable y dependerá del lugar de la
extracorporales (hemorragias, diarreas, etc.) o por redistribu- obstrucción y de si es completa o parcial. Es frecuente el
ción del líquido extracelular (estados edematosos, pancreati- dolor debido a la distensión de la vejiga, sistema colector o
tis, etc.). En estas situaciones, puede observarse hipotensión cápsula renal, aunque suele ser mínimo o ausente en las obs-
arterial, ortostatismo y taquicardia. En la exploración podre- trucciones parciales o en aquellas que se establecen lenta-
mos apreciar signo de pliegue positivo, sequedad de mucosas mente.
e hipotonicidad ocular, aunque la ausencia de estos signos no
descarta una disminución del volumen circulante. En estos
casos, será útil la medida de la presión venosa central o pre- Formas de presentación
sión capilar pulmonar que estarán disminuidas. En la IRA
parenquimatosa, las múltiples causas que la generan pueden La IRA podrá darse en diferentes escenarios con distintas
dar lugar a una sintomatología muy diversa. Así, en las glo- formas de presentación. Así, la IRA podrá aparecer en el me-
merulonefritis, suele producirse IRA en el seno de glomeru- dio hospitalario o extrahospitalario y puede acontecer o no
lonefritis rápidamente progresivas que pueden cursar con en un paciente con IRC, siendo en estos casos difícil distin-
síntomas sistémicos (anorexia, fiebre, pérdida de peso, artral- guir las dos entidades.
gias, hemoptisis), acompañándose de proteinuria y hematu-
ria. También cursan con IRA las glomerulonefritis prolifera-
tivas, como las posinfecciosas que cursan habitualmente con Insuficiencia renal aguda frente a insuficiencia
síndrome nefrítico. En las glomerulonefritis que cursan renal crónica
con hematuria, el origen de la IRA puede venir determinado
por el efecto tóxico directo de los hematíes sobre el epitelio En ocasiones es difícil distinguir entre estas dos situaciones.
tubular (nefropatía IgA). Dentro de las IRA de origen paren- El primer punto a investigar es la posible existencia de con-
quimatoso, las NTIA cursan con clínica inespecífica (náu- troles analíticos previos que permitan conocer si el deterioro
seas, vómitos, malestar general). En la NTIA por fármacos se de la función renal actual es agudo o crónico. La existencia de
produce una reacción de hipersensibilidad, pudiendo presen- antecedentes de una enfermedad renal anterior sugerirá, en
tar fiebre, artralgias y exantema morbiliforme, aunque estas primer lugar, una evolución del proceso hacia la IRC. No
manifestaciones clínicas pueden estar ausentes. La tríada obstante, hay que tener en cuenta que un paciente con IRC
clásica consistente en exantema, fiebre y eosinofilia se pre- puede tener un deterioro agudo de la función renal de origen
senta solo en el 10% de los casos. En ocasiones, estas mani- similar al sujeto sano o por exacerbaciones de su enfermedad
festaciones de hipersensibilidad se pueden expresar a otros de base. En ausencia de datos previos de la función renal, la
niveles con afectación hepática (elevación de transaminasas y presencia de astenia, anorexia, somnolencia, calambres, náu-
bilirrubina) o hematológica (anemia hemolítica). Analítica- seas o vómitos matutinos, poliuria o polidipsia de larga evo-
mente cursan con eosinofilia, leucocituria (eosinofiluria), mi- lución inclinan el diagnóstico hacia una IRC, pues estos sín-
crohematuria y proteinuria moderada. En las NTIA secun- tomas son excepcionales en la IRA. El tinte urocromo
darias a enfermedades sistémicas predomina el cuadro de la prácticamente descarta el fracaso renal agudo. El hallazgo de
enfermedad de base. El diagnóstico solamente podrá ser anemia bien tolerada, hipocalcemia, hiperfosforemia, acido-
confirmado mediante una biopsia renal, aunque muchas ve- sis hiperclorémica no justificada por otros motivos o hiper-
ces esta se retrasa a la espera de que la función renal mejore potasemia bien tolerada clínica y electrocardiográficamente
tras la suspensión del fármaco. Algunos estudios afirman que orientan también hacia una IRC, aunque no descartan total-
la instauración precoz de tratamiento con corticosteroides mente una IRA, ya que estas alteraciones analíticas también
mejora el pronóstico y se evidencia mayor recuperación fun- pueden estar presentes en la aguda, aunque suelen transcu-
cional22. En la IRA parenquimatosa de causa vascular, en la rrir, al menos, dos o tres días hasta que se observan. La evi-
embolia renal podrá haber dolor abdominal en los flancos, dencia de riñones pequeños en la ecografía renal es caracte-
periumbilical o en fosa lumbar, fiebre y náuseas o vómitos. rística de la IRC, pero la presencia de riñones normales o
En la enfermedad ateroembólica, destacan los signos cutá- incluso grandes no excluye el origen crónico del deterioro de
neos al ser los más visibles, como livedo reticularis o microin- la función renal. Los controles analíticos después de detectar
fartos en zonas acras, siendo la manifestación más caracterís- una elevación de productos nitrogenados pueden ser orien-
tica el síndrome del dedo azul, aunque podrá haber tativos. Las fluctuaciones que acontecen en la concentración
manifestaciones clínicas renales, oculares, cerebrales, intesti- de creatinina sérica son más frecuentes en pacientes con IRC
nales o pancreáticas según el órgano afectado. En la MAT previa. Por esta razón, un cambio absoluto en el nivel de
podrán presentarse petequias, equimosis, hemorragias intes- creatinina sérica de 0,3 mg/dl puede representar un cambio
tinales y, con frecuencia, alteraciones del sistema nervioso intrascendente en el FG de pacientes con IRC subyacente y
central. En el caso del SHU típico, cursa con diarrea causada no reflejen una patología aguda superpuesta. En las guías
por la verotoxina de la cepa E. coli 0157 o una Shigella. En el KDIGO 2012 de la IRA se describen los diferentes escena-
caso de la NTA isquémica, clínicamente se diferencia de la rios que se pueden presentar en la práctica clínica, ya que no

Medicine. 2019;12(79):4662-71 4667


ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (I)

siempre se dispone de toda la información necesaria para La IRA presenta una elevada tasa de mortalidad, aunque
llegar a un diagnóstico de manera sencilla. En la guía se des- esta será variable según el perfil de paciente. Podrá oscilar
criben varios ejemplos de cómo aplicar los diferentes criterios entre un 15% de mortalidad en los casos de IRA adquirida
diagnósticos que definen la IRA (elevación de creatinina más en la comunidad hasta más de un 50% en los pacientes con
del 50% respecto a la basal y/o una elevación de 0,3 mg/dl IRA que precisan tratamiento renal sustitutivo (TRS) en la
o más en menos de 48 horas) en casos complicados, como UCI23,24,26,27.
cuando es difícil distinguir la IRA de una IRC o cuando la La necesidad de TRS en la IRA va a ser variable según la
IRA se inicia antes de la hospitalización o no tenemos datos población estudiada. La incidencia de uso de TRS en la IRA
de función renal previos para comparar7. puede variar según diferentes factores como son los criterios
para iniciar TRS o los motivos económicos según el área
geográfica. En pacientes críticos, la incidencia de TRS en la
Insuficiencia renal aguda extrahospitalaria IRA será aproximadamente de un 4-5%28,29.
y hospitalaria La IRA surge por unas causas y se produce en un sujeto
que está condicionado por su edad, sus antecedentes perso-
Cualquier médico, con independencia de su lugar de trabajo, nales y su patología asociada. Todos estos aspectos condicio-
debe estar preparado para identificar casos de IRA. Un estu- narán la evolución del enfermo y su pronóstico. Debido a
dio realizado en Madrid23 pone en evidencia que la mitad de esto, se han desarrollado varios sistemas pronósticos que se
los casos de IRA se generan en el medio extrahospitalario, lo relacionan con la mortalidad precoz de los pacientes. Existen
que supone aproximadamente una incidencia de 100 casos sistemas pronósticos basados en pacientes generales ingresa-
por millón de población y año (pmp/año). Las causas más dos en las UCI como son el APACHE II (Acute physiology, age
frecuentes de la IRA extrahospitalaria son la obstrucción de and chronic health evaluation II), SAPS II (Simplified acute phy-
la vía urinaria, las deshidrataciones y las enfermedades pa- siology score II) y el SOFA (Sepsis related organ failure asses-
renquimatosas renales (vasculitis, glomerulonefritis), mien- ment), y otros sistemas basados exclusivamente en pacientes
tras que la IRA hospitalaria suele ser debida a NTA general- con IRA como el ISI (Individual severity index), el SHARF
mente secundaria a técnicas diagnósticas y terapéuticas (Stuivenberg Hospital acute renal failure) o el modelo CCF
(cirugía, fármacos, contrastes yodados). En este mismo estu- (Cleveland Clinic Foundation).
dio de Madrid, donde se analizan 748 casos de IRA, un 52% La evolución tardía de los pacientes con IRA no se ha
fueron parenquimatosos, el 21% prerrenales, el 13% en pa- estudiado mucho. Si el paciente sobrevive al fracaso renal
cientes con IRC previa leve o moderada y el 10% fue de agudo, la función renal casi siempre se recuperará total o
origen obstructivo. La causa más frecuente fue la NTA parcialmente. Sin embargo, un porcentaje de casos con IRA
(43%). Dentro del grupo de pacientes hospitalizados, hay grave continuará precisando TRS tras el alta hospitalaria.
que distinguir a parte a los pacientes de cuidados intensivos. Liaño et al.30, en un trabajo realizado con 187 pacientes adul-
La prevalencia de IRA en la UCI puede variar entre un 3 y tos con IRA por NTA dados de alta vivos, siguen la evolución
un 30%. En un estudio prospectivo, observacional, multina- a largo plazo de estos pacientes (entre 7 y 22 años). Se obser-
cional y multicéntrico que incluía a 29.269 pacientes admiti- va que, en la mayoría de los pacientes, la función renal des-
dos en las UCI, en los años 2000 y 2001, la prevalencia de pués de una NTA mejora a lo largo del primer año. Después
IRA fue de un 5,7% (con un rango entre 1,24 y 25,9% según del año, la función renal era condicionada por la edad, la
el centro). La prevalencia de pacientes que requirieron tera- comorbilidad y el nivel de recuperación renal logrado antes
pia renal sustitutiva fue del 4,2%24. En cuanto a las caracte- del alta. La supervivencia a los cinco años de los pacientes del
rísticas especiales que presentan estos pacientes críticos res- estudio fue del 50%. La edad, los factores de comorbilidad,
pecto al resto de la población hospitalizada con IRA, el el haber tenido una IRA oligúrica o que la causa de la IRA
estudio de Madrid23 describe las diferencias principales entre fuese de origen médico eran los factores relacionados con la
ambos grupos. En ambos grupos, la IRA predomina en varo- mortalidad a largo plazo.
nes (2:1). Los pacientes de la UCI fueron más jóvenes y la De manera similar a la enfermedad renal crónica, recien-
necesidad de diálisis fue cuatro veces mayor en este grupo. tes estudios han demostrado que la IRA también se asocia
En cuanto a la etiología de la IRA, la NTA fue más frecuen- con mayor riesgo cardiovascular31.
te en los pacientes de la UCI, mientras que en el resto de los Otro punto a tener en cuenta es que los pacientes que
pacientes hospitalizados fueron más frecuentes la causa obs- consiguen recuperar la función renal tras una IRA o abando-
tructiva y la parenquimatosa. nar la TRS presentan un mayor riesgo de desarrollar enfer-
medad renal crónica, IRC terminal y mayor mortalidad32-38.

Complicaciones
Diagnóstico. Criterios de sospecha
De manera general, la IRA podrá ir asociada a todas las alte-
raciones metabólicas e hidroelectrolíticas asociadas a la dis- La IRA se asocia a una elevada morbimortalidad, por lo que
minución del FG: hiperpotasemia, acidosis metabólica, so- su diagnóstico precoz es fundamental. Debemos, por tanto,
brecarga de volumen, hiponatremia y azotemia. La frecuencia saber reconocer a los pacientes en riesgo de sufrir una IRA o
de estas complicaciones aumenta de manera exponencial con con una posible IRA antes de que aparezcan las manifestacio-
el grado de gravedad de la IRA25. nes clínicas7. Una vez que se constata la elevación de produc-

4668 Medicine. 2019;12(79):4662-71


INSUFICIENCIA RENAL AGUDA (I)

TABLA 5 niveles de fósforo o anemia normocítica que nos orientarán


Parámetros de funcionalidad en la insuficiencia renal aguda
hacia la presencia de una enfermedad renal crónica. Las guías
IRA Funcional (prerrenal) Establecida (parenquimatoso) KDIGO muestran un algoritmo para orientar el diagnóstico,
Sodio en orina (Nao) < 20 mEq/l > 20 mEq/l basándose en cifras de creatinina y FG, en si se elevan o no
Cociente Na/K orina K > Na Na > K y en si la alteración se resuelve o no en 3 meses o menos7. La
Osmolaridad orina > 500 mOs/kg < 350 mOs/kg ecografía también puede ser de utilidad, evidenciándose ri-
EFNa (%) < 1% > 1-2% ñones pequeños cuando se trata de una ERC.
Cro/Crp > 40 < 20 En segundo lugar, debemos evaluar la gravedad de la IRA
IFR (%) < 1% > 1% aplicando las diferentes clasificaciones ya descritas. El siste-
Cro: creatinina en orina; Crp: creatinina plasmática; EFNa: excreción fraccional de sodio, ma RIFLE servirá para el diagnóstico de la IRA y para la
EFNa = [Nao * Crp/Nap*Cro]*100; IFR: índice de fallo renal, IFR = Crp/(Nap*Cro).
clasificación según la gravedad funcional, pero también ha
demostrado su correlación como marcador pronóstico9,39. La
tos nitrogenados y/o la disminución de la diuresis en un pa- clasificación AKIN es una modificación del sistema RIFLE.
ciente, nos debemos plantear varias cuestiones que debemos En tercer lugar, debemos plantearnos las diferentes cau-
resolver. sas que han podido desencadenar la IRA. Para ello, nos apo-
La primera de ellas es determinar si estamos ante una yaremos en una exploración física minuciosa y en diferentes
IRA, una IRC o una IRC reagudizada. Para ello, la evalua- pruebas diagnósticas complementarias que solicitaremos de
ción clínica nos dará las claves para resolver esta cuestión: forma escalonada según su eficacia e inocuidad para el pa-
valoraremos cifras de creatinina previas al ingreso, factores ciente. Debemos tener en cuenta que la IRA, en muchas oca-
de riesgo (diabetes, hipertensión arterial), elevación de los siones, es multifactorial, sobre todo en el ámbito hospitalario

Elevación de productos nitrogenados

Historia clínica + exploración clínica completa


+ ecografía

6Cr < 0,3 mg/dl 6Cr > 0,3 mg/dl


Cr previa alterada Cr previa normal
Riñones pequeños en ecografía Riñones tamaño normal o aumentado

IRA
IRC
Si dilatación vía urinaria Parámetros urinarios

IRA IRA IRA


obstructiva funcional/prerrenal establecida/parenquimatosa

Según sospecha diagnóstica, completar estudio


Sedimento y proteinuria
Estudio autoinmunidad y serología
Ecodoppler renal
Biopsia renal

Vascular Glomerular Tubulointersticial

Fig. 2. Algoritmo diagnóstico ante la sospecha de insuficiencia renal aguda (IRA). Cr: creatinina; IRC: insuficiencia renal crónica.

Medicine. 2019;12(79):4662-71 4669


ENFERMEDADES NEFROURINARIAS (I)

y, además, es un proceso dinámico que puede evolucionar de


un estadio a otro. Para comenzar el algoritmo diagnóstico,

6. Molitoris BA, Levin A, Warnock DG, Joannidis M, Metha RL, Kellum
JA, et al. Improving outcomes from acute kidney injury. J Am Soc Ne-
phrol. 2007;18(7):1992-4.
solicitaremos una ecografía abdominal para descartar la exis-
tencia de una causa obstructiva. El siguiente paso será dife-

7. rr KDIGO Clinical practice guideline for acute kidney injury.
Kidney Int. 2012;2(1).
renciar si es un fallo renal prerrenal o parenquimatoso. Para ✔
8. Cruz DN, Bolgan I, Perazella MA, Bonello M, de Cal M, Corradi V, et al.
North East Italian Prospective Hospital Renal Outcome Survey on Acute
ello, la evaluación clínica es básica, pudiendo identificar o no Kidney Injury (NEiPHROS-AKI): targeting the problem with the RI-
situaciones de bajo gasto que justifiquen un origen prerrenal, FLE Criteria. Clin J Am Soc Nephrol. 2007;2(3):418-25.

tóxicos, fármacos, infecciones, etc. En este momento, la eva- ✔


9. r Ricci Z, Cruz D, Ronco C. The RIFLE criteria and mortality in
acute kidney injury: A systematic review. Kidney Int. 2008;73(5):
luación de parámetros urinarios es muy útil para diferenciar 538-46.

la causa de la IRA. En la tabla 5 se describen los parámetros ✔


10 Hoste EA, Clermont G, Kersten A, Venkataraman R, Angus DC, De Bac-
quer D, et al. RIFLE criteria for acute kidney injury are associated with
de funcionalidad, que están encaminados a saber si el riñón hospital mortality in critically ill patients: a cohort analysis. Crit Care.
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está respondiendo fisiopatológicamente a una inadecuada
perfusión renal o si existe un daño en el órgano que impide

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su correcta función. Se debe aplicar a pacientes con oliguria
que no estén bajo el efecto de los diuréticos. Para su cálculo,

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debemos solicitar simultáneamente iones urinarios, urea, 1692-702.
creatinina y osmolaridad urinaria. ✔
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que para esta investigación no se han realizado experimentos
en seres humanos ni en animales.

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Confidencialidad de los datos. Los autores declaran que en ✔
17. Wu HC, Lee LC, Wang WJ. Incidence and mortality of postoperative
acute kidney injury in non-dialysis patients: Comparison between the
este artículo no aparecen datos de pacientes.
AKIN and KDIGO criteria. Ren Fail. 2016;38:330-9.

Derecho a la privacidad y consentimiento informado. Los



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autores declaran que en este artículo no aparecen datos de
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Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

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