PROBLEMAS FAMILIARES ASOCIACIADOS A LA CIBERADICCIÓN

Margarita Alejandra Urrego forero

Código: 1821983136
Ximena Sanmartín Álvarez
Código: 1821980504
Jesús Torregroza Arenales
Código: 1821980531
Nicolás Elías Aurela Serrano
Código: 1821980272
Martha Isabel Rojas Rodríguez
Código: 1821983127.

Institución Universitaria Politécnico Gran Colombiano

Profesional en Gestión de la Seguridad y Salud Laboral

Métodos cuantitativos en ciencias sociales

2019
 Tabla de contenido

Introducción .................................................................................................................................... 1
Objetivo General ............................................................................................................................. 5
Objetivos específicos ................................................................................................................. 5
Justificación .................................................................................................................................... 6
Marco Teórico ................................................................................................................................. 7
Bibliografía ................................................................................................................................... 10
 Resumen

Hablaba en estos días sobre cómo la generación de los 80 ha tenido la oportunidad de

vivir grandes cambios en la tecnología, todo comenzó con la llegada de los “beepers”, luego en

busca de estrategias militares se crea la internet y no acabando allí, aparece el teléfono celular

revolucionando al mundo entero.

A través del internet viajamos a lugares nunca visitados, conseguimos direcciones,

llevamos el trabajo a cualquier lugar, no existe un límite con ella, sin embargo, la facilidad de

este adelanto tecnológico tiene un efecto colateral, generando un déficit en las relaciones

sociales, esto claro esta cuando no se auto-limita la interacción con dicha tecnología.

La adición a la internet aún no se encuentra entre el grupo de trastornos presentes en el

Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales, (Association, 2016), pero se infiere

que dado a su proliferación pueda llegar a estarlo.

La adición al internet es definida como la pérdida de control frente al uso racional del

internet (Basile, 2006)

Aunque esto es un mal que no discrimina edades, géneros, clases sociales, niveles de

escolaridad o noveles sociodemográficos, sin embargo, hay personas con mayor predisposición a

desarrollar este tipo de adición, entre estos se encuentran las personas con fobia social o timidez.

Definitivamente es imposible decir que el internet hace daño, el internet es una

herramienta que ha venido para facilitar muchos procesos, para entretener y aprender entre otras
muchas cosas. Lo que hace daño es el uso desmedido del mismo, el que en lugar de ser un

facilitador nos haga prisionero.

Como adultos debemos evaluarnos y ser objetivos al señalar cuanto nos afecta, como

padres debemos poner límites, enseñar con el ejemplo y no permitirnos, ni permitir a nuestros

hijos que se convierta en algo más importante que lo maravilloso de la vida en familia, del

disfrute entre amigos y por ende el ser parte y participe de la sociedad.

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Introducción

La ciberadicción ¿Afición o enfermedad? Para iniciar con el desarrollo de esta

investigación se podría definir la ciberadicción una patología que genera cierta dependencia

limitando el estado de conciencia y creando cierto desinterés sobre las necesidades vitales que

como seres humanos tenemos, como lo es la interacción en comunidad, las relaciones fraternales

o sentimentales. Al hablar de adicción hoy en día no solo se refiere necesidad del consumo de

sustancias psicotrópicas o psicoactivas, si no, todo aquello que genera cierta sumisión, en este

caso se hace referencia a las nuevas tecnológicas, las cuales con frecuencia de uso y la solvencia

de necesidades o deseos, pueden volver a una persona dependiente de ellas.

Al hablar o escuchar sobre adicciones siempre nos mentalizamos el uso de drogas como

la marihuana, la cocaína, heroína, opio, metanfetaminas y un sinfín de sustancias que altere el

estado psíquico de una persona, sin embargo, se ha podido evidenciar que la constante de todos

trastornos de conductas adictivas es la falta de control, es el descontrol de la persona afectada

sobre el hábito adquirido.

El mecanismo del Internet permite el cierto grado de anonimato en las interacciones entre

personas sin importar el lugar o distancia, lo cual facilita a las personas con trastornos de

ansiedad social mediante una laptop o dispositivo móvil expresarse libremente generando así la

desinhibición de la que hablaba (Greenfield, 1999), la cual consiste en una pérdida del pudor y
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del miedo a expresarse libremente, lo cual provee a la persona de un sentimiento de protección y

libertad al mismo tiempo.

Los grupos, clanes o comunidades virtuales nos suministran los medios para buscar

personas con intereses similares a los nuestros. En un estudio con estos grupos de discusión

(McKenna & Bargh, 1998), encontraron que este medio permitía a aquellos con personalidades

estigmatizadas (por razones de sexo o ideología) llegar a una gran auto aceptación que en última

instancia conducía a revelar a sus familiares y amigos su identidad oculta. Esto hace que la

pertenencia al grupo virtual se convierta en una parte importante de su identidad.

Sin embargo, como toda acción tiene una reacción, el uso de la internet no queda exenta

de esta ley de la que nos hablaba el Físico Isaac Newton, la Internet es una herramienta que

facilita la vida misma, pero al usarla también acarrea consecuencias negativas. Muchas

especialistas como Greenfield o Echeburua a proponer la existencia de un desorden de adicción

a Internet similar a otros trastornos adictivos como el sexo y los juegos.

La adicción enfermiza a la red ha sido diagnosticada por ciertos expertos como Trastorno

Adictivo a Internet (TAI), y se estima que lo padece entre el 6 por ciento y el 10 por ciento de

todos los usuarios en el mundo. (Albela, 2016)

De acuerdo a (Echeburúa, 1998), las nuevas tecnologías son facilitadores de la vida, pero

al mismo tiempo pueden complicarla, pues pueden convertirse en un fin y no en un medio. Esto

puede ser observado cuando hay una obsesión enfermiza por adquirir la última novedad
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tecnológica y esta ansia puede llegar a poner en segundo plano necesidades más poderosas.

Asimismo, las redes sociales pueden llegar a atrapar a las personas, pues el mundo virtual

contribuye a crear en ellas una falsa identidad y distanciarle o perder el contacto personal, así

como distorsionar el mundo real. La adicción es aquella afición patológica que genera

dependencia y al mismo tiempo resta libertad al ser humano, al minimizar su campo de

conciencia y restringir la amplitud de sus intereses. Tiene como principal característica la pérdida

de control y la dependencia; esto puede llegar a interferir gravemente en la vida cotidiana, a nivel

familiar, escolar, social o de salud de las personas afectadas. Se considera que una persona no

adicta puede conectarse a Internet por la utilidad o el placer de la conducta en sí misma, mientras

que una persona adicta lo hace buscando el alivio de algún malestar emocional como lo puede

ser: aburrimiento, soledad, ira y nerviosismo. La ciberadicción, como es denominada, se

establece cuando el sujeto deja de verse con sus amigos y se instala frente a la pantalla, cuando

presta más atención a éstas que a las personas que lo rodean, o cuando el sujeto no rinde de

manera adecuada en sus estudios o actividades diarias. En todos los casos hay una interferencia

negativa en la vida cotidiana. Como cualquier otro adicto estos sujetos experimentan un

síndrome de abstinencia cuando no pueden llevar a cabo la actividad de ingresar a las redes

sociales, caracterizado por un profundo malestar emocional, donde se puede observar un estado

de ánimo disfórico, irritabilidad, insomnio e inquietud psicomotriz. (Echeburúa, 1998)

Una investigación realizada por Kaspersky Lab y iconKids & Youth, acerca del impacto

que está teniendo internet en las relaciones familiares, arrojó que la percepción es negativa y se

está convirtiendo en causa de distanciamiento entre padres e hijos.

Fueron en total 3.700 familias encuestadas en siete países, y los resultados permiten dar una idea
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sobre el cambio que está sufriendo la familia tradicional como consecuencia del mundo digital

actual. Se encontró que el 21 por ciento de los padres y el 22 por ciento de los niños consultados

coinciden en que internet y los dispositivos tecnológicos están generando tensiones familiares.

(Tiempo, 2016)

Según los resultados, dichas tensiones pueden deberse al hecho de que en gran parte de

los grupos familiares los dispositivos para conectarse a internet son compartidos. Dos tercios de

las familias dijeron que en su hogar se comparte un mismo computador, el 30 por ciento de los

padres aseguraron que sus hijos infectaron, al menos un dispositivo, con algún virus descargado

de páginas maliciosas. (Tiempo, 2016)

De igual forma, la imagen de los padres como fuente de consulta ante cualquier inquietud

de sus hijos se ha deteriorado. El 23 por ciento de ellos aseguran que ahora sus hijos prefieren

resolver dudas consultando internet en lugar de preguntarles a ellos. (Tiempo, 2016).

La adicción al internet es tema de investigación en todo el mundo debido a su gran

impacto en la salud, además de su evolución en el campo clínico y social, cada vez más

instituciones enfocan más sus programas de investigación hacia esta dirección con el fin de

determinar su origen y buscar su control ya que estadísticamente son los jóvenes quienes más se

ven afectados por estas nuevas tecnologías debido a que se vuelve parte de su desarrollo en

búsqueda de un estatus social.

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Es por esto que mediante diferentes herramientas decidimos abordar el tema de como la

ciber-adicción como una enfermedad puede generar una inestabilidad familiar y social, y así

durante el desarrollo del presente proyecto buscar las medidas de prevención y control para este

supuesto trastorno.

Objetivo General

Determinar los problemas familiares asociados a los efectos de la ciberadicción.

Objetivos específicos

 Establecer comportamientos específicos consecuencia de los efectos de la ciberadicción.

 Determinar la prevalencia de comportamientos en los miembros del núcleo familiar

asociados a la ciberadicción.

 Describir las variables sociodemográficas de la población estudio.

 Definir la relación ciberadicción y características demográficas de la población estudiada.

 Estimar el tiempo y frecuencia con la que los integrantes del núcleo familiar utilizan

dispositivos cibernéticos.

 Determinar la funcionalidad familiar en relación con integrantes que presenten conductas

asociadas a la ciberadicción.
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Justificación

A través de la siguiente investigación se busca dar a conocer la problemática de la

ciberadicción presente en la actualidad al interior las familias, lo cual ha ido ocasionando

consecuencias que se ven reflejadas en el comportamiento y en la solidez de las mismas.

Lo que en 1969 se creó para estrategias militares, hoy en día se ha vuelto un faro para el

desarrollo tecnologías innovadoras en las diferentes ramas económicas a nivel mundial, hasta el

punto de posicionarse como la fuente de información más grande del globo terráqueo, es por esto

que se va a desarrollar dicha investigación por el gran impacto que general el uso de la internet

en la sociedad y lo significativo que se ha vuelto para el diario vivir de la sociedad y esto cada

vez va en aumento, casas futuristas, criptomonedas, Smartphone con inteligencia artificial en sus

procesadores, entre otros usos que se le ha dado. No queremos enunciar que el uso de la internet

es un peligro ni mucho menos, pero si se utiliza de una forma irresponsable y desmesurada puede

afectar gravemente la calidad de vida de las personas y la estructura emocional de una familia

Según el ministerio de Tecnología de la Información y las Comunicaciones (TIC),

podemos ver las cifras del primer trimestre del año 2018, donde muestra los indicadores de uso

de internet, pudiendo deducir así que gran parte del tiempo de las familias colombianas está

siendo dedicado al internet. (Comunicaciones, 2018).

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Marco Teórico

La familia es un sistema con identidad propia, que incluye a varias generaciones, cuya

principal función psicológica consiste en la trasmisión de un legado; una idea digna, positiva y

diferenciada de quienes somos nosotros. Estos legados familiares en ocasiones son dañados por

diferentes acontecimientos (tanto internos como externos) y esto influye en las diferentes

maneras que tienen estos sistemas a la hora de relacionarse entre sus miembros y con el resto del

mundo. (Estaire, 2012).

El ejemplo de los mayores juega un papel fundamental en la formación de la personalidad

de los menores, y más aún cuando se trata de padres e hijos, pues en la vida cotidiana

encontramos muchas conductas pertenecientes a uno o ambos padres que se han “incrustado” en

el comportamiento de los hijos, pero más allá del origen de una o varias conductas repetitivas

como las generadas por la ciberadicción, está la concepción errada o acertada que se tiene frente

a las mismas, pues el punto de partida de todo cambio es la aceptación del error.

En un mundo lleno de información de todo tipo, es muy común encontrar planteamientos

o posturas que favorecen la creencia que se tiene sobre algo, y así mismo el comportamiento que

se produce ante tal o cual estimulo, por ello, antes de dar cualquier paso en la línea de esta

investigación, es ahora necesario construir una posición introductoria entorno a la ciberadicción

y sus consecuencias sobre el grupo más importante de la sociedad, la familia.

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(Lucca, 2019), licenciada en psicología la define como un trastorno de adicción a internet

que supone el uso excesivo de los servicios de esta red, a través de cualquier dispositivo

tecnológico y/o electrónico.

(Ballesteros, 2019), experta en plataformas de datos y tecnologías, afirma que nuestro

cerebro está cableado para que nos conectemos con los demás y la tecnología ha avanzado en

cosas que nos unen, el reto de esta industria es que el contenido que sale de las pantallas a

nuestra vida real sea más intercalado y permita unirnos, dejando en claro que su parecer frente a

la tecnología es que esta nos une y no nos divide, pues desde un punto de vista estrictamente

comunicativo la tecnología ha acortado distancias, ya que gracias a los avances que se han hecho

en esta materia, en la actualidad es posible ponerse en contacto; a través de diferentes medios,

con un ser querido que se encuentra a miles de kilómetros de distancia. En la otra cara de la

moneda hay sentencias como la de el gran científico de la era moderna Albert Einstein, quien

alguna vez dijo: “Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad, el mundo solo

tendrá una generación de idiotas”. Claramente este gran autor se refiere a la suprema veneración

que muchos le guardan a una red social, un video juego o cualquier otra cosa que aparezca en

una pantalla. A partir de lo anterior podemos sentar un corolario: la tecnología no es buena ni

mala todo depende del uso que le demos.

Según datos de un estudio realizado por la ONG Protégeles que colabora en programas de

la Comisión Europea, existe un 21,3 por ciento de jóvenes, que podrían convertirse en adictos a
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las nuevas tecnologías (Lucca, 2019). Es de esperarse que esta tendencia continúe en aumento,

pues la avalancha de nuevas y atrayentes tecnologías no se detiene.

Es necesario ahora enfocar esta problemática hacia los núcleos familiares. Claramente la

principal consecuencia radica en el distanciamiento que la ciberadicción ha generado dentro de

muchas familias, hoy en día es muy común ver a los jóvenes enfrascados en el mundo de la

internet y que gracias a ello corten muchas oportunidades de dialogo con sus padres, más el

problema no es solo de los jóvenes; también existen adultos ciberadictos, generalmente a causa

de compromisos laborales, en esos casos podríamos hablar de una especie de “adicción

impuesta” y no voluntaria.

Defensores la tecnología y de la internet, dicen que estas dos constituyen un modo eficaz

de conocer un mundo nuevo, y detractores de las mismas dicen que es la vía de acceso a la

mismísima perdición, refiriéndose con esto a la cantidad de “basura” que abunda en internet y a

las consecuencias en la conducta de los jóvenes, adultos y familias enteras.

Es preciso ahora ser un poco más específicos y preguntarnos ¿cuáles son los efectos

reales de los patrones comportamentales de la ciberadicción en las familias de hoy? Con lo

anterior no solo pretendemos abordar las consecuencias conductuales de la ciberadicción, sino

también los efectos que esta genera sobre la salud y sobre la sociedad misma.
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Bibliografía

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Basile, H. S. (2006). Adicción a Internet: Ciberadicción. Revista Argentina de Clínica Neuropsiquiátrica, 74-
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