Partiendo del concepto que un activo apto o calificado es aquel
que requiere un tiempo sustancial para su fabricación o
construcción (Ejm. Fabricación de una Boeing 787, Fabricación de un Submarino) la NIC 23 establece que los costos financieros, que sean directamente atribuibles y que se esperen generen beneficios económicos a futuro[1]deberán ser incluidos dentro del costo histórico [2] del bien.
El término a definir es genérico vs especifico, un préstamo
especifico es aquel que puede ser identificado expresamente y sin duda al bien sujeto a capitalización, mientras que el genérico es aquel donde los costos financieros no puede ser identificados totalmente mas solo si en una porción para capitalización.
La interpretación básica de la NIC 23 es que busca proteger y
revelar los hechos reales de la compañía, partiendo de la idea que si todos los intereses fueran reconocidos como gasto se podrían empezar a reconocer pérdidas aun cuando los activos generados de efectivo se encuentran en proceso de fabricación y aun no empiezan a retornar el efectivo invertido en ellos. Además es importante señalar que con la globalización de los negocios no solo es necesario recibir un documento de nuestro acreedor financiero y registrarlo, si no también realizar pruebas que nos permitan validar lo descrito en la NIIF 13 Valor Razonable.