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5) ¿Qué es motivar?

Motivar es impulsar a alguien a iniciar acciones, encaminadas a conseguir objetivos


específicos y a persistir en el intento hasta alcanzarlo. Por lo tanto, toda acción
encaminada realmente a motivar ha de tener en cuenta imprescindiblemente éstos tres
elementos: activación, dirección y persistencia.

Muchas veces el dinero cumple la función de motivación y por caso muchísimas


organizaciones y empresas la emplean para motivar a su empleados y así conseguir
mejores performances.
Otro uso que también le atribuimos a este término
permite indicar el ánimo que se le da a alguien para
que se interese por una actividad, tarea, profesión
determinadas y que tiene que ver con el interés, la
capacidad o la inclinación que le observamos a esa
persona y que entonces nos impulsa a
mencionárselo y animarlo a que lo vea y actúe en tal
sentido. Si Juan no me hubiese motivado como lo
hizo no creo que me hubiese decidido a escribir el
libro.

Cabe destacarse que el motivo siempre se erige


como una causa o la razón que desencadenará una
manera de proceder, o en su defecto la presencia de
algo o de alguien. Por ejemplo, si alguien tiene
hambre es el motivo que lo llevará a prepararse una
comida. Laura quiere recibirse sí o sí este año, ese
será entonces el motivo por el cual se la pasa
larguísimas horas estudiando.
En tanto, a ese motivo lo conocemos
popularmente como motivación y se
erige sin dudas como la razón por la
cual las personas realizamos
determinadas acciones, porque detrás
del cumplimiento de cada acción, cada
paso, cada objetivo, llegará la
concreción de ese deseo o plan. Si no
existe tal motivación, que es lo en
definitivas cuentas nos impulsará a
esforzarnos y a sortear posibles
obstáculos, difícilmente lleguemos
rápido y con ímpetu a la satisfacción de
un objetivo.
6)¿Qué es la satisfacción?
La satisfacción es la sensación de placer que tienen las personas cuando han
hecho realidad un deseo o han cubierto una necesidad. Por ejemplo, pagar las
deudas, saciar el hambre, cumplir con las pasiones o llevar a cabo ciertas
exigencias, además de premiar méritos o, en su defecto, cambiar agravios por
recompensas. La satisfacción puede entenderse como el cumplimiento de un
deseo o la resolución de una necesidad, de manera tal que se produce sosiego y
tranquilidad. Las personas se sienten satisfechas, pues, cuando logran cumplir
un deseo o alcanzar una meta trazada de antemano, por lo que se alcanza un
estado de bienestar.

Cuando la satisfacción acompaña a la seguridad racional de haberse hecho lo


que estaba dentro del alcance de nuestro poder, con cierto grado de éxito, esta
dinámica contribuye a sostener un estado armonioso dentro de lo que es el
funcionamiento mental.
La satisfacción Personal

•La satisfacción personal es la impresión de


bienestar general que siente una persona
respecto de su vida, de sí misma o de sus
necesidades. Se trata de un estado psicológico
que depende tanto de factores esenciales
(que garantizan la salud y el bienestar
objetivo), como secundarios (vinculados con
lo emocional, lo psicológico y lo existencial).
La mayor o menor sensación de satisfacción,
dependerá de la optimización del consumo
energético que haga el cerebro. Cuanto mayor
sea la capacidad de neuro transmitir, mayor
facilidad de lograr la sensación de satisfacción.
La satisfacción Laboral

•La satisfacción laboral es el grado de


conformidad que una persona siente
respecto a su trabajo, o sea, qué tan
pleno se siente con lo que hace, dónde lo
hace, para quién lo hace y qué recibe a
cambio. De la satisfacción laboral
depende en gran medida la motivación de
los trabajadores y por lo tanto su
desempeño, ya que un trabajador
satisfecho es mucho más productivo que
uno descontento.

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