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El Museo del Estallido

Social Chileno
¿UN ESPACIO DE DESTRUCCIÓN
COMO MUSEO?
El proceso de destrucción,
intervención y resignificación
Implica

El nacimiento de nuevos
elementos y referentes
patrimoniales.

Tal como plantea Holtorf (2006), la pérdida y


destrucción no son un proceso opuesto al
patrimonio, al contrario, son parte constitutiva
del mismo.
Plaza Italia (también llamada Plaza Baquedano)
• Fue resignificada como epicentro del estallido social que, entre octubre e inicios de
marzo, reunió semanalmente a miles de manifestantes. Tanto así, que fue rebautizada
como Plaza de la Dignidad, instalando una placa con su nuevo nombre.
Los muros del Centro Cultural Gabriela Mistral
(GAM)
• Su cercanía a las comunidades, su ubicación en plena Alameda
(próxima a Plaza de la Dignidad) y sus extensos muros, lo Primera etapa del
convirtieron en el lugar ideal para que los manifestantes crearan Museo
una exposición callejera sobre el estallido social en Chile.
MUSEO PERFORMATIVO

• La interpretación de este espacio como un museo se construye a partir de su


aproximación a propuestas museológicas progresistas en Latinoamérica.
• Especialmente en base a sus características y funciones, así como la relación
establecida entre este espacio y sus visitantes.

Carla Pinochet (2014) presenta el museo performativo, un término que:


“caracteriza a una serie de experiencias museales que no se instituyen de una
vez y para siempre, sino que se conforman en un proceso acumulativo y en
permanente diálogo con sus contextos de emplazamiento (…). En esta lógica el
museo no surge para representar realidades de formas ‘científica’ y ‘objetiva’,
sino para movilizar transformaciones e imaginar nuevos rumbos culturales”
(p.10).
Bajo estos lineamientos, el museo performativo está más preocupado de catalizar
transformaciones que de obedecer a parámetros tradicionales.

MUSEO Esta definición de museo se acerca bastante al


desarrollo de la experiencia del Museo Callejero del
PERFORMATIVO Estallido Social Chileno, reconociendo que un museo
puede ser un proceso dinámico en estrecha sintonía
con su entorno.

Lejos de ser un
lugar estable

Social

Cultural

Cívico ICOM (2007):


“una institución sin fines lucrativos, permanente, al servicio
de la sociedad y de su desarrollo, abierta al público, que
Político, en el mejor adquiere, conserva, investiga, comunica y expone el
sentido del término” patrimonio material e inmaterial de la humanidad y su medio
ambiente con fines de educación, estudio y recreo”.
El Museo Callejero del Estallido
MUSEO DESBORDADO Social desborda la definición
oficial de museo.

MUSEO DESBORDADO

Superar las fronteras establecidas


por la tradición eurocéntrica Para los autores, descolonizar el
museo implica democratizar las
representaciones y la toma de
En base a cinco estrategias que van desde la decisiones, dando voz a sujetos
descolonización del museo, hasta la recontextualización tradicionalmente excluidos.
de sus colecciones a través del trabajo colaborativo
junto a visitantes transformados en ciudadanía activa.

“La modernidad intentó ponerle linderos, límites y bordes a todas las prácticas e
instituciones culturales. Este proyecto fracasó estrepitosamente y hoy vivimos una
época caracterizada por la interdependencia y la complejidad (…) uno de los desafíos
de los museos en la contemporaneidad es salir de los límites impuestos para abrirse a
nuevos diálogos entre distintos tipos de culturas, valores, patrimonios, espacios,
actores y prácticas. Y de esta manera desafiar la lógica de la clasificación,
jerarquización y control que está inscrita en la lógica colonial y moderna con la cual
tradicionalmente funcionaron los museos.” (León, 2014, p. 6)
NUEVO MUSEO
Las manifestaciones en Chile tuvieron una
fuerte reivindicación ante estos imaginarios
Frente a esta inconformidad ¿en qué lugar
coloniales que imperan hasta el día de hoy en la
desbordar los límites del museo eurocéntrico sino
construcción del patrimonio.
es en la calle?

En un museo temporal, dinámico, sin inmueble, sin vigilancia, abierto


24/7, receptivo a las contribuciones, modificaciones y destrucciones
de quienes circulan anónima y cotidianamente por la vereda. Un
museo que construye conocimiento y se configura a si mismo dentro
de una lógica colaborativa.

“No basta luchar para que los movimientos sociales tengan acceso
a los museos. Eso es bueno, pero todavía es poco. El desafío es
democratizar la herramienta museo y colocarla al servicio de los
movimientos sociales; a favor, por ejemplo, de la construcción de
otro mundo, de otra globalización, con más justicia, humanidad,
solidaridad y dignidad social.” (p. 14)

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