Está en la página 1de 7

Etapas

Primera etapa: hasta 1927, aproximadamente

principios de esta etapa se dejan sentir los tonos becquerianos, junto a algunos
resabios modernistas. Pronto es notorio el influjo de las primeras vanguardias.

El magisterio de Juan Ramón Jiménez


les orienta hacia la “poesía pura”. El gran instrumento de este arte “puro” es la m
etáfora, con audacias deslumbrantes que han aprendido de
Ramón Gómez de la Serna
y de otros vanguardistas. Por todo ello se les acusa de “Herméticos”, de “fríos”, d
e “deshumanizados”.

En esto, como hemos visto antes, sintonizan con el Ortega de “La deshumanizació
n del arte” (
1925
). El deseo de perfección formal motiva un primer acercamiento a los clásicos. A e
llo responde el cultivo de formas estróficas tradicionales (entre 1925 y
1927
) que se observa en libros como “Versos humanos” de G. Diego, o “Cal y canto” d
Segunda etapa: de 1927 a la Guerra Civil

Los poetas, ya en su plena madurez, comienzan a sentirse un tanto cansados de las


aventuras formalistas. Se inicia así el proceso de “rehumanización” de su lírica. Se
produce la irrupción del Surrealismo
, que señalaba asimismo una dirección diametralmente opuesta a la poesía “pura”. Pasa
n a primer término los eternos sentimientos del hombre: el amor, el ansia de plenitud y
las, frustraciones, la inquietud ante los problemas existenciales, etc.

Pablo Neruda funda en Madrid


la revista “caballo verde para la poesía”, en la que aparece el “Manifiesto por una poes
ía sin pureza”, es decir, inmersa en las circunstancias humanas y sociales más concretas
.

El acento social y político se introduce en la poesía. Alberti, Cernuda o Prados adoptan


una concreta militancia revolucionaria. Y de forma más o menos activa, todos los demá
s se mostrarían partidarios de la República, al estallar la guerra.
Tercera etapa: después de la Guerra

Acaba la guerra civil. Lorca ha muerto en 1936


. Los demás, excepto Aleixandre, Dámaso Alonso y Gerardo Diego, parten hacia una u
n largo exilio. El grupo poético del 27 se ha dispersado. Cada uno sigue una forma part
icular de hacer poesía, pero ninguno abandonará el cultivo de una poesía que cada vez
será más humana.
Características de la Generación del 27

•Tradición y vanguardismo: Aunque desean encontrar nuevas fórmulas poéticas, no


rompen con nuestras tradiciones y sienten admiración por el lenguaje
poético de Góngora, por nuestros autores clásicos y por las formas populares del Roma
ncero. A la par que lo tradicional, las corrientes de vanguardia, sobre todo el surrealism
o, ejercen gran influencia en el grupo del 27. Los escritores surrealistas exploran el mu
ndo de lo inconsciente y pretenden alcanzar la belleza absoluta, que está por encima de
la realidad.
•Intención estética: Intentan encontrar la belleza a través de la imagen. Pretenden
eliminar del poema lo que no es belleza y, así, alcanzar la poesía
pura. Quieren representar la realidad sin describirla; eliminando todo aquello que no es
poesía.

•Temática: Sienten especial interés por los grandes asuntos del hombre, como el amor,
la muerte, el destino... y los temas cargados de raíces populares.

•Estilo: Se preocupan fundamentalmente de la expresión lingüística


y buscan un lenguaje cargado de lirismo.•
Versificación: Utilizan estrofas tradicionales (romance, copla...) y clásicas (soneto, terc
eto...). También utilizan el verso libre y buscan el ritmo en la repetición de palabras, es
quemas sintácticos o paralelismo de ideas.
Integrantes de la Generación del 27

En los integrantes de esta generación se mezcla lo


popular y lo culto, todo bajo la idea de tradición y
renovación y profundamente influenciados por la
Guerra Civil Española de 1936 a 1939.
Rafael Alberti (1902-1999)

Vicente Aleixandre (1898-1985)


Dámaso Alonso (1898-1990)

Manuel Altolaguirre (1905-1959)


Luis Cernuda (1902-1963)

Gerardo Diego (1896-1987)

Federico García Lorca (1898-1936)

Jorge Guillén (1893-1984)

Miguel Hernández (1910-1942)


Emilio Prados (1899-1962)

Pedro Salinas (1892-1951)

También podría gustarte