ADULTO MAYOR…

VEJEZ…..
Para prescribir con rigor
ejercicio físico a las personas de
edad avanzada es necesario
comprender en profundidad el
proceso de envejecimiento y la
manera en que éste modifica las
funciones vitales del organismo.
• Menor remodelación ósea
• Cambios en la geometría de la articulación
• Cambios en la distribución de las fuerzas
en la articulación
• Disminuye la estatura: ¼ parte de la
longitud de la columna vertebral es discal.
• Disminuye la flexibilidad del raquis.
• Pérdida de masa ósea: Disminución
del peso del esqueleto con la edad.
• Desmineralización: Mineral y matriz
orgánica.
• Osteoporosis.
• Adelgazamiento de las trabéculas en
el hueso esponjoso. Trama ósea
más delgada.
• Descenso en el número de fibras musculares.
• Aumento extracelular de líquido intersticial,
grasa y colágeno.
• Densidad de capilares por unidad motora
disminuidos.
• Pérdida gradual de fuerza muscular.
• Descenso en el desarrollo máximo de tensión.
• Hipertrofia miocárdica.
• Reducción del número de fibras
miocárdicas e hipertrofia de las residuales.
• Engrosamiento y rigidez de las válvulas
cardíacas.
• Disminución del número de células del
sistema de conducción.
• Disminución del gasto
cardíaco
• Disminución de la
frecuencia cardíaca en
respuesta al estrés o
ejercicio.
• Aumento de la presión
arterial
• Disminución en la movilidad de las
costillas y contracción parcial de los
músculos respiratorios, debido a la cifosis
progresiva.
• Se reduce la adaptabilidad de la pared
torácica y el pulmón se vuelve más rígido.
• Reducción en el número de alvéolos
• Disminuye la capacidad respiratoria
máxima.
• Desciende la presión parcial de oxígeno
entre un 10 y un 15%.
• Disminuye el flujo espiratorio forzado.
• La cantidad máxima de oxígeno en
condiciones de estrés se reduce en un 50%
hacia los 80 años