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INSTITUTO PARA EL FOMENTO CIENTÍFICO DE MONTERREY

MAESTRÍA EN EDUCACIÓN CON ORIENTACIÓN EN DIDÁCTICA


CONSTRUCTIVISTA

ASIGNATURA: INVESTIGACION CUALITATIVA EN EDUCACIÓN

ACTIVIDAD 1: INVESTIGACIÓN ETNOGRÁFICA

NOMBRE DEL CATEDRÁTICO: NANCY ROCÍO AGUILAR GALVÁN

NOMBRE DEL ALUMNO: SARAHI SOSA GALLARDO

MONTERREY NUEVO LEÓN A 30 DE ENERO DEL 2024.


CONTEXTOS ESCOLARES Y PRÁCTICAS DOCENTES

Introducción.

Conversar de los procesos de la práctica docente como una constante en la vida


del hombre, implica razonar sus antecedentes históricos, hacer una reflexión sobre las
razones de la trascendencia en el ámbito educativo, puede ser complejo más aun,
considerando que el enfoque se basa en el desarrollo pleno del ser, en las diferentes
épocas algunos estudiosos se han dado a la tarea de documentar.

Es por ello, que se desea desarrollar una breve descripción de la práctica docente,
ya que desde la antigua Grecia a través de la poesía y de la filosofía clásica y su historia
de las civilizaciones formaron los pilares fundamentales en su trascendencia a través de
los tiempos, de tal forma que se logró tener una visión general del impacto del contexto
en la práctica contemporánea.

Comprender el concepto de práctica docente requiere de una visión globalizadora,


dinámica, compleja y contextual de esta función dentro del contexto político, económico,
social y cultural; que trasciende en el desarrollo de las sociedades.

El ser docente no solo implica la responsabilidad de enseñar en un aula aprender


a aprender, sino, se requiere que forme su propia identidad docente dentro de su
contexto escolar, donde se vive la acción, de acuerdo con sus conocimientos, emociones
y visión de su propio trabajo.

De tal forma que en cada sesión se asuma como docentes el compromiso y


responsabilidad profesional de innovar la práctica educativa, así mismo, se requiere que
el docente inicie el tránsito del conocimiento hacia el aprendizaje de competencias y
habilidades para proveer en los estudiantes, aptitudes que les permitan enfrentarse e
integrarse a la dinámica social.

Esta investigación tiene el propósito de reflexionar la contribución del docente al


desarrollo de las competencias en los estudiantes, analizando la ruptura entre la realidad
social y su práctica en el aula ante las reformas educativas.

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Desarrollo.

El contexto influye en el proceso de enseñanza-aprendizaje, puesto que el


estudiante se encuentra inmerso en una realidad de experiencias que, como persona lo
afecta directa o indirectamente; estos factores pueden ser exógenos, es decir, todo
aquello que está por fuera de la institución educativa, tal como la familia, la salud-
nutrición, el barrio, la economía del hogar y las políticas del Estado; también factores
endógenos, aquellos que se encuentran al interior, tales como: la planta física, el equipo
de docentes y directivos y el currículo en todas sus dimensiones; ya que el proceso de
enseñanza-aprendizaje necesariamente es integral.

La familia considerada como centro de la sociedad, es el ambiente propicio donde


se forma la persona con valores, virtudes, potencialidades y donde el individuo descubre
que “es” como ser integral, único y con la capacidad de relacionarse con otros en una
sana convivencia.

En el proceso enseñanza- aprendizaje, los padres cumplen la función de ser los


primeros responsables de la educación de sus hijos; por ende, la escuela, debe
garantizar espacios de participación para que se ejerza ese derecho del estudiante y
deber de los padres. Pero, este deber ser, no es una realidad en la escuela objeto del
presente estudio, la realidad existente es opuesta, perjudicando el normal desarrollo
físico y cognitivo de los niños de esta zona.

Otro factor influyente es la salud y nutrición de los menores; si el estudiante goza


de buena salud y nutrición adecuada para su edad, tendrá mejores oportunidades es su
rendimiento académico; de lo contrario, su proceso de aprendizaje se ve afectado.

Finalmente, los factores endógenos como instalaciones, docentes y plan de


estudios influyen en el proceso enseñanza-aprendizaje, puesto que es en la escuela
donde el estudiante interactúa consigo mismo y con los otros mediante experiencias de
vida que pueden o no llevarlos a un aprendizaje significativo. El currículo debe ser flexible
y adaptable a las necesidades de los menores. Los docentes deben ser investigadores,
críticos y reflexivos de la realidad del contexto en el que desarrollan su labor educadora
y acompañar la formación de los estudiantes; una teoría que no llega a la práctica, porque

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los docentes desconocen el manejo de las dificultades de aprendizaje de los niños y se
ciñen a los lineamientos impuestos, con lo cual cumplen su labor.

En el artículo (Berrocal & Extremera, 2003), aborda la educación en el siglo XXI,


una problemática de capital importancia en el actual contexto político, económico, social
y cultural de América Latina. A partir de los datos del Foro Mundial sobre la Educación,
llevado a cabo en Dakar, Senegal, el autor presenta una visión panorámica de la realidad
y de los desafíos de la educación en la mayor parte del mundo.

Asimismo, según la óptica de diferentes pensadores, se analizan las perspectivas


de la educación para el siglo XXI. A modo de conclusión, el autor presenta,
principalmente para los países en vías de desarrollo, algunas sugerencias para el futuro.

Por el interés, como se ha dicho, de ubicar la cotidianidad de las y los docentes


universitarios, se realizó la investigación cualitativa “La práctica educativa y docente de
profesores universitarios y su relación con procesos formativos. Aportes al debate”. Al
tratarse de un estudio de caso, donde importa “la particularidad y… la complejidad, para
llegar a comprender su actividad en circunstancias importantes” (Stake, 1998: 11), se
buscó el detalle de la práctica docente de los maestros participantes en sus contextos
como personas y profesionales en economía y en la enseñanza.

De esta forma, se recurrió a la etnografía y a la teoría fundamentada como


herramientas de análisis. La primera puntualiza la necesidad de una descripción densa,
que implica el análisis de las múltiples relaciones que se entretejen para dar sentido y
significado a lo observado (Geertz, 1987: 22).

Dada la intención de observar a los participantes en su cotidianidad educativa, se


recurrió a la observación participante con notas de análisis. Yuni y Urbano señalan que
la etnografía es un enfoque metodológico que ayuda al investigador a describir e
interpretar las interacciones de las personas, por lo que su principal contribución es
“aportar datos descriptivos valiosos de los contextos, actividades y creencias de los
participantes en los escenarios educativos” (2005: 111). Esto permite inducir la cultura
de una institución educativa. Asimismo, se consideró pertinente utilizar algunos

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elementos de la teoría fundamentada para construir categorías en el proceso de
observación de las prácticas referidas.

Esta metodología cualitativa permite fundamentar los conceptos, por ello se


consideró necesaria para teorizar, desde el empirismo, qué acciones nutren a la práctica
docente y cuáles a la práctica educativa. Así, el muestreo teórico se fue pensando a
través de los avances de las observaciones y de la indagación (Strauss y Corbin, 2002)
y quedó constituido por un grupo de profesores que reunía las siguientes características:

Ser economista de formación inicial (licenciatura).

· Haber participado en cursos y proyectos orientados a su formación como


docente.

· Aceptar ser entrevistado y observado en sus clases.

De una gama de 16 docentes con diversos perfiles y nombramientos, sólo se


trabajó con seis (cuatro mujeres y dos hombres, que van desde los cinco hasta los 24
años de antigüedad en la docencia). Cabe señalar que, en este estudio, de acuerdo con
Taylor y Bogdan, “en el muestreo teórico, el número de ‘casos’ estudiados carece
relativamente de importancia.

Lo importante es el potencial de ‘caso’ para ayudar al investigador en el desarrollo


de comprensiones teóricas sobre el área estudiada de la vida social” (1990: 108). Tras
la breve descripción de la investigación, en las siguientes líneas se expone lo que se
encontró con respecto a las prácticas docente y educativa.

Para articular lo tematizado sobre la práctica educativa entendida como la


concepción que se tiene sobre la educación y la docencia en un nivel macro y que implica
factores contextuales, donde importa la reflexión y el ajuste pedagógico que pueda llevar
a cabo el profesor, antes y después de la práctica en el aula, se han encontrado, con la
apoyatura de la teoría fundamentada y con los actores educativos, las siguientes
categorías de análisis e interpretación que nutren la conceptualización inicial: percepción
sobre la docencia, trayectoria docente, conceptualización del alumnado y relación
pedagógica.

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Conclusión.

Ante este escenario del contexto de la práctica docente, la docencia es una


profesión sociocultural y sociopolítica, a donde la sociedad mexicana, es quien debe
asumir la responsabilidad que le corresponde, de manera pertinente, a través de la toma
de consciencia y el cambio de actitud para superar la crisis educativa, ante los retos y
demandas globales, pero principalmente atendiendo las necesidades reales de cada
contexto educativo de México.

Sabemos que la realidad educativa es amplia y diversa por esto en la formación


de los futuros docentes de nuestro país, cursos en el Plan de Estudios, que tienen el
propósito de acercar a los estudiantes a los contextos educativos en los que podrían
llegar a trabajar como: zonas urbanas, urbanas marginales, rurales e indígenas,
fortaleciendo así la realidad social y su práctica educativa.

Estas experiencias permiten que se viva de cerca la realidad, dándose un acto


educativo y comunicativo, donde la trasposición didáctica, es decir del saber teórico se
trasforma al saber práctico, con el que se enfrentara al egresar.

En este esfuerzo de aprender a aprender, se genera el triángulo interactivo que


enriquece el contexto de la práctica y la formación de los docentes; asumiendo esta
función con carácter profesional, porque desde la formación debe tener claro que es una
profesión que demanda una identidad profesional que implica preparación, constancia,
sacrificio, esfuerzo, perseverancia, sistematicidad, orden y compromiso con la labor
educativa.

Además, asumir la responsabilidad de los procesos administrativos que los


actores educativos demanden, para realizar la función de la práctica docente como: la
planificación, desarrollo y evaluación de cada criterio e indicador necesario para el logro
de los propósitos educativos del nivel correspondiente, todos estos esfuerzos enfocados
a la formación de miles de niños con una educación de calidad y ahora con un enfoque
humanista que les permitan integrarse en un mundo globalizado.

6
Bibliografía:

Arnau, J. A. M., Nalda, F. N., Trens, M. A. J., Menorca, L. G., Ortiz, R. F., Emeterio, M.
C. S., Trens, M. A. J., García, M. G., Gómez, G. R., Sáiz, M. S. I., Campión, R. S.,
Díez, E. R., & Herce, M. J. E. (2013). Procesos y contextos educativos: nuevas
perspectivas para la práctica docente. Ed. Universidad de Cantabria.

Muñoz, M. M. R. (2021). Resignificación de la reforma educativa en el contexto escolar:


Estudios de caso: Estado de México y Michoacán. Universidad Iberoamericana
A.C.

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