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Lila y el manantial mágico

Había una vez en un pequeño pueblo a los pies de una montaña en una casita
pequeña vivía una niña que tenia el cabello de color marrón, utilizaba un
hermoso vestido de color lila y una vincha también de color lila que hacia juego
con su vestido su nombre era Lila, ella era hija única por eso ella era muy querida
y muy traviesa.

Un día se le ocurrió subir a la sima de la montaña, ya que había una leyenda que
decía que en la sima había un manantial mágico que cumplía los deseos que
nacían desde lo profundo del corazón.

Ella escalo y escalo, y llego a la sima y vio el manantial le pidió: Sabes quiero
que ya no haya personas abandonadas y que sufran.
El manantial dijo: No puedo hacer eso yo, pero tú puedes hacerlo envés de mí.

Desde ese momento Lila comenzó a ayudar a los más necesitados y el pozo
siempre transmitió la historia de Lila y las buenas acciones que hacia.

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