Está en la página 1de 14

UN MARCO TEÓRICO COGNITIVO

Ansiedad y PARA LOS TRASTORNOS DE ANSIEDAD1

Estrés
ISSN: 1134-7937
Michael W. Eysenck* y Nazanin Derakshan
Royal Holloway. University of London
1997, 3(2-3), 121-134

Resumen: La teoría de los cuatro factores de an- Abstract: The four-factor theory of anxiety (Ey-
siedad (Eysenck, 1997; Eysenck y Derakshan, en- senck, 1997; Eysenck & Derakshan, submitted) has
viado para publicación) plantea principalmente at its centre the assumption that experienced anxiety
que la experiencia de la ansiedad depende de cua- depends on four sources of information: (1) environ-
tro fuentes de información: (1) la estimulación mental stimuli; (2) one's own physiological activity;
ambiental, (2) la actividad fisiológica del indivi- (3) one's own behaviour; and (4) one's own cogni-
duo, (3) la conducta del individuo y (4) las cogni- tions. The influence of each source of information on
ciones del individuo. La influencia de cada una de experienced anxiety is modified by cognitive biases,
estas fuentes de información sobre la ansiedad of which the most important is interpretive bias (the
experimentada es modificada por sesgos cogniti- tendency to interpret ambiguous stimuli and events in
vos, de los cuales el más importante es el sesgo a threatening fashion). It is assumed that four of the
interpretativo (esto es, la tendencia a interpretar la main anxiety disorders (panic disorder; social phobia;
estimulación y eventos ambiguos de forma ame- obsessive-compulsive disorder; specific phobia) in-
nazante). Se asume que en cuatro de los principa- volve an interpretive bias mainly for one of the four
les trastornos de ansiedad (trastorno de pánico, sources of information, and that generalized anxiety
fobia social, trastorno obsesivo-compulsivo y fo- disorder involves an interpretive bias for all four
bia específica) aparece un sesgo interpretativo re- sources. Therapeutic implications of this theoretical
lacionado con una de las cuatro fuentes de infor- approach are discussed.
mación preponderantemente, y que en la ansiedad Key words:
generalizada se produce un sesgo interpretativo de
las cuatro fuentes. Finalmente, se discuten las im-
plicaciones terapéuticas de este enfoque.
Palabras Clave:
Title: A Cognitive Theoretical Framework
for the Anxiety Disorders

Introducción
En este artículo intentaremos desarrollar un riormente, comentaremos algunas de las
marco teórico cognitivo que ayude en la implicaciones terapéuticas de nuestro enfo-
comprensión de los trastornos de ansiedad. que. Pero antes de entrar a detallar estos
Contrastaremos este marco teórico con un enfoques teóricos en relación con los tras-
enfoque alternativo representado por el tornos de ansiedad, deberemos considerar
modelo de Zinbarg y Barlow (1996). Poste- cuales son los trastornos de ansiedad tipifi-
cados actualmente e identificar aquellos
que son más relevantes y los que lo son
* Dirigir la correspondencia a: Professor Michael W. Ey- menos desde una perspectiva cognitiva.
senck. Department of Psychology. Royal Holloway, Univer-
sity of London. Egham, Surrey TW20 0EX. Reino Unido. De acuerdo con el DSM-IV existen 12
1
Traducción al castellano: Héctor González Ordi. Universi- trastornos de ansiedad diferentes, a saber:
dad Complutense de Madrid trastorno de pánico sin agorafobia, trastor-
© Copyright 1997: de los Editores de Ansiedad y Estrés
Artículo recibido: 12-2-97. no de pánico con agorafobia, agorafobia
122 M.W. Eysenck y N. Derakshan

sin historia de trastorno de pánico, fobia produce como una consecuencia secunda-
específica, fobia social, trastorno obsesivo- ria.
compulsivo, trastorno de ansiedad genera- El trastorno por estrés postraumático y
lizada, ansiedad debida a causas médicas, el trastorno por estrés agudo no serán con-
ansiedad inducida por consumo de sustan- siderados mayormente. La razón es que
cias y trastorno de ansiedad no especifica- existen serias dudas de si han sido clasifi-
do. cados apropiadamente como trastornos de
Desde la perspectiva del desarrollo de ansiedad. De hecho, como ya apuntaron
un marco teórico cognitivo para los trastor- O'Donohue y Eliott (1992), "el trastorno
nos de ansiedad parece claro que algunos por estrés postraumático difiere de otros
de ellos son mucho más importantes que trastornos de ansiedad en que la ansiedad
otros. Consideremos por ejemplo los tras- no tiene un papel claramente predominante
tornos de ansiedad debido a causas médicas en el PTSD" (pág. 426). Estos autores con-
y por abuso de sustancias. Siguiendo el cluyen que "si el trastorno por estrés
DSM-IV, la sintomatología asociada a es- postraumático requiere una clasificación en
tos trastornos implica una respuesta fisio- los trastornos mentales, proponemos que se
lógica directa de la condición médica gene- retire de la subclasificación de los
ral, o de la droga de abuso, medicación o trastornos de ansiedad y sea incluido como
sustancia tóxica a la que se ha expuesto una categoría diagnóstica independiente"
respectivamente. A sí que, parece poco (pág. 433).
probable que los factores cognitivos pue- Por eliminación, nos quedamos con cin-
dan ser relevantes para comprender dichos co grandes trastornos de ansiedad que po-
trastornos. En relación al trastorno de an- tencialmente podrían tenerse en cuenta de-
siedad no especificado, se trata de una ca- ntro del marco teórico cognitivo: trastorno
tegoría residual y pobremente definida. de pánico, fobia social, trastorno obsesivo-
Existen algunas razones para no consi- compulsivo, fobia específica y trastorno
derar algunos de los otros trastornos de an- por ansiedad generalizada.
siedad desde un enfoque cognitivo. La ago- Desde un punto de vista general, existen
rafobia sin historia de trastorno de pánico dos enfoques básicos en el desarrollo de un
aparece muy rara vez. De acuerdo con el marco teórico comprensivo de los principa-
DSM-IV, " en el ámbito clínico casi todos les trastornos de ansiedad: (1) el enfoque
los individuos (sobre el 95%) que presen- "de abajo a arriba" (bottom-up), que se ba-
tan agorafobia también presentan un dia- sa en los perfiles sintomáticos presentados
gnóstico concurrente de trastorno de pánico por los pacientes para cada uno de los tras-
(pág. 403). El trastorno de pánico con ago- tornos; y (2) el enfoque "de arriba a abajo"
rafobia es un trastorno complejo porque (top-down), en el que los trastornos de an-
habitualmente suele comenzar como un siedad son incluidos en un marco teórico
trastorno de pánico en si mismo y poste- preexistente.
riormente, la preocupación por experimen- La esencia del enfoque "de abajo a arri-
tar un ataque de pánico en lugares públicos, ba" es que las interrelaciones entre trastor-
suele conllevar el desarrollo de síntomas nos de ansiedad están determinadas en fun-
agorafóbicos (ver Eysenck, 1997). En otras ción de la evidencia empírica de patrones
palabras: el trastorno primario es el trastor- de similitud o patrones diferenciales (p.ej.,
no de pánico y la agorafobia solamente se la estructura de los síntomas), por lo que no
existen hipótesis teóricas a priori en rela-
Un marco teórico cognitivo para los trastornos de ansiedad 123

ción a qué patrón será el resultante. Por co- naba más claramente con trastorno de pánico
ntra, en el enfoque "de arriba a abajo" los con agorafobia; la función ansiedad social
trastornos de ansiedad son categorizados y con fobia social; y la función obsesiones y
clasificados en función de un modelo teóri- compulsiones con el trastorno obsesivo-
co previo y, en consecuencia, uno de los compulsivo.
objetivos de dicho enfoque es "predecir" la De acuerdo con Zinbarg y Barlow
existencia de los trastornos de ansiedad en (1996), el nivel más alto de esta jerarquía es,
función del marco teórico subyacente. en ocasiones, más importante que los niveles
A continuación, presentaremos ejem- inferiores; aunque en otras circunstancias,
plos de los dos enfoques que hemos consi- suele ocurrir lo contrario. En concreto, Zin-
derado anteriormente. El modelo jerárquico barg y Barlow (1996) sostienen que "cuando
de Zinbarg y Barlow (1996) ilustra el enfo- se intenta distinguir entre pacientes depresi-
que "de abajo a arriba" y la teoría de los vos o con trastornos de ansiedad de indivi-
cuatro factores de ansiedad (Eysenck, duos que no presentan ningún trastorno
1997; Eysenck y Derakshan, enviado para mental, el nivel más alto es más importante y
publicación) ejemplificará el enfoque "de sólo se requiere un única dimensión. Sin
arriba a abajo". embargo, cuando se intenta diferenciar entre
distintos grupos con trastornos de ansiedad,
los niveles inferiores son los más importan-
El modelo de Zinbarg y Barlow tes" (pág. 191).
El modelo de Zinbarg y Barlow (1996)
Zinbarg y Barlow (1996) propusieron un presenta aspectos interesantes y valiosos en
modelo jerárquico de la ansiedad y de los relación con la búsqueda de patrones de se-
trastornos de ansiedad diseñado a través de mejanza y diferencias entre los diversos tras-
la administración de una entrevista clínica tornos de ansiedad. No obstante, debemos
semi-estructurada y diversos autoinformes a decir que este enfoque es en algún sentido
pacientes con diferentes trastornos de ansie- tautológico porque los pacientes fueron
dad o depresión mayor y a sujetos de control diagnosticados y clasificados en función de
(no pacientes). su sintomatología y esta misma información
En el nivel más alto de esta jerarquía fue utilizada para obtener las cuatro funcio-
aparecía un factor general de afectividad ne- nes discriminantes. En consecuencia, no es
gativa similar al rasgo de ansiedad. Este fac- sorprendente encontrar grandes equivalen-
tor diferenciaba al grupo de pacientes del cias entre las categorías diagnósticas y sus
grupo de sujetos control. Por debajo de este correspondientes funciones discriminantes.
factor general había cuatro funciones dis- La otra gran limitación del modelo es su
criminantes o factores más específicos que naturaleza ateórica, debido a que no parecen
fueron identificados como miedo al miedo, aportarse razonamientos teóricos específicos
agorafobia, ansiedad social y obsesiones y para predecir que deberían existir cuatro
compulsiones. funciones discriminantes necesariamente, así
¿Cómo se relacionaban estas funciones como si deberían tener el contenido especí-
discriminantes con los trastornos de ansie- fico que estos autores encontraron en su es-
dad?. Pues bien, la función discriminante de tudio o no.
miedo al miedo estaba más relacionada con
trastorno de pánico y trastorno de pánico con
agorafobia; la función agorafobia se relacio-
124 M.W. Eysenck y N. Derakshan

(1994, 1995). El planteamiento teórico prin-


cipal es que el nivel de ansiedad experimen-
La teoría de los cuatro factores de
tada viene determinado por cuatro fuentes de
ansiedad información diferentes. La fuente de infor-
La teoría de los cuatro factores de ansiedad mación más importante se basa en la valora-
fue propuesta por Eysenck (1997) y Eysenck ción cognitiva de la situación y ha sido plan-
y Derakshan (enviado para publicación). Es- teada anteriormente por otros autores (p.ej.,
ta teoría fue originalmente diseñada para Lazarus, 1966, 1991). Las otras tres fuentes
proporcionar una explicación teórica de la de información dependen más de la estimu-
ansiedad como estado emocional. Las carac- lación interna y serán tratadas a continua-
terísticas esenciales de esta teoría, que pue- ción.
den verse en la Figura 1, fueron planteadas
en gran medida anteriormente por Parkinson

Figura 1: La teoría de los cuatro factores aplicada a la ansiedad clínica (Eysenck, 1997;
Eysenck y Derakshan, enviado para publicación).

Las tres fuentes de información interna ciones o conductas y las cogniciones basa-
son el nivel de actividad fisiológica, las ac- das en la información de la memoria a largo
Un marco teórico cognitivo para los trastornos de ansiedad 125

plazo (p. ej., preocupaciones) del individuo.


Es importante tener en cuenta que la clave Relevancia de la teoría en los tras-
de la ansiedad experimentada está en la for- tornos de ansiedad
ma en que la información procedente de es- Según la teoría de los cuatro factores de an-
tas fuentes internas es percibida e interpreta- siedad (Eysenck, 1997; Eysenck y Deraks-
da por el individuo más que la determina- han, enviado para publicación), la ansiedad
ción objetiva de la misma. experimentada por un individuo depende de
Otra cuestión fundamental es que existen cuatro fuentes de información y de los ses-
diferencias individuales significativas en el gos cognitivos aplicados a cada una de estas
procesamiento cognitivo de estas cuatro fuentes. Si aplicamos esto a los trastornos de
fuentes de información. En el contexto de la ansiedad, deberíamos encontrarnos con cua-
ansiedad clínica son especialmente relevan- tro trastornos básicos o "puros". Primero,
tes dos tipos de sesgo cognitivo: la atención debería haber pacientes con ansiedad que
selectiva y el sesgo interpretativo. La aten- mostraran sesgos atencionales e interpretati-
ción selectiva se define como la tendencia a vos en relación con su propia actividad fisio-
atender selectivamente más a la estimulación lógica y sensaciones corporales. En segundo
de tipo amenazante que la estimulación de lugar, debería haber pacientes ansiosos que
tipo neutral; el sesgo interpretativo se define mostraran los mismos sesgos en relación a
como la tendencia a interpretar la estimula- sus propias acciones o comportamientos.
ción y situaciones ambiguas como amena- Tercero, igualmente debería haber pacientes
zantes. La importancia de estos sesgos cog- ansiosos cuyos sesgos atencionales e inter-
nitivos puede apreciarse si consideramos el pretativos fueran principalmente aplicados a
caso de dos individuos para los cuales la sus propias cogniciones y pensamientos. Fi-
cantidad de amenaza objetiva procedente de nalmente, algunos pacientes con ansiedad
las cuatro fuentes de información es la mis- aplicarían los sesgos hacia la valoración
ma. Si uno de los sujetos sesga, atencional e cognitiva de cierta estimulación ambiental.
interpretativamente, la información de di- ¿Es posible identificar cuatro trastornos
chas fuentes de información y el otro no lo de ansiedad relacionados con las especifica-
hace, el primero experimentará considera- ciones teóricas que acabamos de describir?.
blemente mayor ansiedad que el segundo. Según Eysenck (1997), la respuesta a esta
Finalmente, otro aspecto relevante es que pregunta es afirmativa: aquellos pacientes
el grado de influencia del procesamiento de que muestran sesgos cognitivos principal-
los sesgos cognitivos del individuo sobre el mente sobre su propia actividad fisiológica y
sistema emocional depende del estado de sensaciones corporales presentan trastorno
ansiedad previo. En concreto, los sesgos de pánico sin agorafobia; aquellos pacientes
cognitivos se incrementan en la medida en que muestran sesgos cognitivos principal-
que el estado de ansiedad aumenta. Lo que mente sobre sus propias acciones y conduc-
lleva a un mecanismo de feedback positivo, tas presentan fobia social; los pacientes que
ya que los sesgos cognitivos aumentan el es- muestran sesgos cognitivos principalmente
tado de ansiedad que hace incrementar la in- sobre sus propias cogniciones y pensamien-
fluencia de los sesgos cognitivos, que nue- tos presentan trastorno obsesivo-
vamente incrementa el estado de ansiedad. compulsivo; finalmente, aquellos pacientes
Este mecanismo es de gran importancia en la que muestran sesgos cognitivos principal-
ansiedad clínica. mente sobre la valoración cognitiva de de-
126 M.W. Eysenck y N. Derakshan

terminada estimulación ambiental presentan y Eysenck (en prensa) encontraron también


fobia específica. evidencias de un sesgo interpretativo con
Hemos visto cómo los cuatro principales respecto a la propia actividad fisiológica de
trastornos de ansiedad se incorporan con fa- los individuos con alto nivel de ansiedad. De
cilidad al marco teórico proporcionado por hecho, dichos individuos tenían más proba-
la teoría de los cuatro factores de ansiedad. bilidad que otros de interpretar qué su eleva-
Pero ¿qué decir del trastorno de ansiedad da tasa cardíaca durante la tarea de hablar en
generalizada? El aspecto principal a tener en público era debido al carácter estresante y
cuenta es que existe una clara relación entre amenazante de la situación; y al mismo
dicho trastorno y el rasgo de ansiedad. Ey- tiempo tenían menos probabilidad de atribuir
senck (1992) planteó que los sujetos norma- este hecho simplemente a que la situación
les con un alto rasgo de ansiedad presenta- fuera excitante y supusiera un nuevo reto pa-
ban un factor de vulnerabilidad cognitiva al ra ellos.
trastorno de ansiedad generalizada, aportan- Eysenck y Derakshan (en prensa) estu-
do una considerable cantidad de estudios en diaron los sesgos interpretativos de las pro-
donde el patrón de sesgos cognitivos mos- pias cogniciones, en forma de preocupacio-
trados por los individuos normales con alto nes no realistas, en estudiantes en época de
nivel de ansiedad y por pacientes con ansie- exámenes. Se pidió a los estudiantes que
dad generalizada era muy similar. Igualmen- predijeran su nivel de rendimiento en los
te, Rapee (1991) afirmó que el trastorno por exámenes algunas semanas antes de que és-
ansiedad generalizada representa "una mani- tos se celebraran y posteriormente se compa-
festación relativamente pura del rasgo de an- raron estas predicciones con los resultados
siedad elevado" (pág.422). finales. Los estudiantes con alto rasgo de an-
Eysenck (1992, 1997) y Eysenck y De- siedad presentaron un patrón claro de sesgo
rakshan (enviado para publicación) revisa- interpretativo debido a que la predicción de
ron la literatura existente sobre sesgos cogni- sus resultados estuvo considerablemente por
tivos en individuos normales con alto rasgo debajo de los resultados obtenidos finalmen-
de ansiedad. La evidencia sugiere que dichos te.
individuos presentan sesgos interpretativos y Si los sujetos con alto rasgo de ansiedad
atencionales con respecto a las cuatro fuen- muestran perfiles semejantes a los pacientes
tes de información. En este sentido, hemos con ansiedad generalizada, entonces estos
llevado a cabo dos estudios para ilustrar este últimos deben presentar sesgos interpretati-
tipo de evidencia. Derakshan y Eysenck (en vos y atencionales con respecto a la estimu-
prensa) sometieron a sus sujetos a una tarea lación externa, su propia actividad fisiológi-
de hablar en público mientras eran filmados ca, conductas y pensamientos. Sin embargo,
en vídeo; los videos resultantes fueron valo- como es sabido, los pacientes con ansiedad
rados mediante criterios observacionales por generalizada componen un grupo muy hete-
los propios participantes y por jueces inde- rogéneo. En consecuencia, aunque los pa-
pendientes. Las valoraciones de los indivi- cientes con este trastorno, como grupo dia-
duos con alto grado de ansiedad sobre sus gnóstico, muestren evidencia significativa de
niveles de ansiedad motora fueron significa- sesgos atencionales e interpretativos en las
tivamente más altas que las valoraciones de cuatro fuentes de información, esto no quie-
los jueces, lo que aportó una clara evidencia re decir que todos los pacientes manifiesten
con respecto al sesgo interpretativo de su estos sesgos para cada una de las fuentes de
propio comportamiento. Además, Derakshan información.
Un marco teórico cognitivo para los trastornos de ansiedad 127

objetiva (por oposición a la percibida) de los


pacientes con trastorno de pánico como res-
Evidencia Experimental puesta a la manipulación biológica es com-
La evidencia existente con respecto a la teo- parable a la demostrada por los sujetos nor-
ría de los cuatro factores de ansiedad aplica- males del grupo control. Diversos autores
da a los trastornos de ansiedad se comenta han encontrado esta semejanza en la res-
con detalle en Eysenck (1997). Lo que puesta fisiológica en diversos indicadores
haremos en este artículo será considerar al- (Gaffney et al., 1988, Rapee, Brown, Anto-
gunos estudios importantes centrados en el ny y Barlow, 1991).
sesgo interpretativo más que en el sesgo de Como consecuencia de la teoría de los
la atención selectiva debido a que el primero cuatro factores, se deduce que los pacientes
tiene una gran importancia en el ámbito de la con otros trastornos de ansiedad deberían
terapia. De hecho la existencia de un sesgo mostrar mucha menos evidencia de un sesgo
atencional con respecto a determinada esti- interpretativo como respuesta a la manipula-
mulación requiere que exista previamente un ción biológica que lo que lo hacen los pa-
sesgo interpretativo con respecto a dicha es- cientes con trastorno de pánico. De hecho
timulación; así que en términos terapéuticos existe algún apoyo empírico para esta pre-
la eliminación del sesgo interpretativo con- dicción; en un estudio (Perna, Bertani,
lleva la eliminación del sesgo atencional pa- Arancio, Ronchi y Bellodi, 1995), los pa-
ra aquellos estímulos implicados en los cientes con trastorno de pánico experimenta-
mismos. ron ataques de pánico trece veces más fre-
La noción de que los pacientes con tras- cuentemente que los pacientes obsesivo-
tornos de pánico muestran un sesgo interpre- compulsivo como respuesta a la manipula-
tativo de su propia actividad fisiológica se ha ción con dióxido de carbono. En otro estu-
investigado con mayor frecuencia utilizando dio (Verburg, Griez, Meijer y Pols, 1995)
estrategias biológicas como la infusión de los pacientes con trastorno de pánico mos-
lactato o la inhalación de una mezcla de di- traron un mayor incremento de su ansiedad
óxido de carbono y oxígeno. Estas técnicas subjetiva en respuesta a la manipulación bio-
biológicas producen un incremento sustan- lógica que lo que lo hicieron los pacientes
cial de la actividad fisiológica de los indivi- con ansiedad generalizada.
duos. El resultado habitual en este tipo de El hecho de que los fóbicos sociales
estudios es que los individuos con trastornos muestran sesgos interpretativos con respecto
de pánico experimentan un ataque de pánico a su propia conducta ha sido comprobado en
o diversos síntomas que recuerdan al pánico numerosos estudios; Rapee y Lim (1992)
tras la aplicación de estas técnicas biológi- encontraron que las valoraciones de obser-
cas, mientras que los sujetos normales no vadores externos del comportamiento de su-
suelen hacerlo (p. ej., Gaffney, Fenton, Lane jetos fóbicos sociales y controles mientras
y Lake, 1988; Yeragani, Balon y Pohl, hablaban en público no diferían, sin embar-
1989). go los fóbicos sociales valoraron su conduc-
Estos resultados sugieren que los pacien- ta más negativamente que lo que lo hicieron
tes con trastorno de pánico muestran un ses- los sujetos controles. El sesgo interpretativo
go interpretativo con respecto a su actividad en términos de autovaloraciones negativas
fisiológica; aunque, para que esta evidencia fue significativamente mayor en fóbicos so-
sea totalmente convincente es también nece- ciales que en sujetos normales que actuaban
sario demostrar que la actividad fisiológica como grupo control.
128 M.W. Eysenck y N. Derakshan

Alden and Wallace (1995) encontraron de sus ideas y pensamientos. Por ejemplo,
que tanto los fóbicos sociales como los suje- dichos pacientes creen que tienen una alta
tos controles valoraron su propio comporta- probabilidad de morir porque sus manos es-
miento no verbal más negativamente que lo tán contaminadas o bien que robarán en sus
que lo hicieron los observadores externos. casas a pesar de que han comprobado mu-
Sin embargo, la discrepancia media entre es- chas veces que la puerta de entrada está bien
tas valoraciones fue significativamente ma- cerrada. Van Oppen y Arntz (1994) presen-
yor para los fóbicos sociales que para los taron estudios de caso único en donde los
controles, indicando que mostraban sesgos pacientes sobreestimaban la probabilidad de
interpretativos de su propia conducta. peligro y/o sobreestimaban las consecuen-
Stopa y Clark (1993) pidieron a sus suje- cias negativas potenciales del peligro.
tos que participaran en una situación de in- Rachman y De Silva (1978) compararon
teracción social, solicitándoles a ellos y a un sujetos normales y pacientes obsesivos-
observador que evaluaran el grado en que compulsivos y, en términos generales, am-
los primeros mostraban diversas conductas bos grupos informaron de obsesiones simila-
positivas y negativas durante la interacción. res siendo muy difícil decidir si una obsesión
Los fóbicos sociales valoraron su compor- había sido informada por un paciente o por
tamiento más negativo y menos positivo que un sujeto control para los jueces indepen-
lo que lo hizo el observador; por contra, los dientes. No obstante, los pacientes obsesi-
sujetos controles no difirieron del observa- vos-compulsivos categorizaron sus obsesio-
dor en sus valoraciones del comportamiento nes como más intensas, amenazantes e in-
positivo y negativo. Estos resultados son controlables que lo que lo hicieron los suje-
consistentes con lo encontrado por Rapee y tos control. Este resultado proporciona algu-
Lim (1992) y Alden y Wallace (1995) en na evidencia para el hecho de que los pa-
que solamente los fóbicos sociales mostra- cientes obsesivos-compulsivos muestran
ron un sesgo interpretativo de su propia con- cierto sesgo interpretativo ausente en los su-
ducta. jetos normales.
Según la teoría de los cuatro factores los El hecho de que los pacientes con fobia
pacientes con otros trastornos de ansiedad específica muestren un sesgo cognitivo hacia
no deberían mostrar un sesgo interpretativo la estimulación fóbica relevante fue investi-
de su propia conducta. En este sentido, Sto- gado por Arntz, Lavy, van den Berg, y van
pa y Clark (1993) recogieron información Rijsoort (1993) y por Thorpe y Salkovskis
sobre pacientes con una amplia variedad de (1995). Arntz et al.(1993) pidieron a pacien-
trastornos de ansiedad distintos a la fobia tes con fobia a las arañas que indicaran sus
social encontrando que los pacientes ansio- pensamientos irracionales cuando se les ex-
sos valoraron su conducta menos negativa- pusiera a las mismas. Encontraron que el
mente que lo que lo hizo el observador 88% de los pacientes manifestaban pérdida
mientras que las valoraciones de su compor- de control, el 91% pánico y no saber qué
tamiento positivo no difirieron de éste últi- hacer, y el 64% que se iban a morir de mie-
mo; por lo que estos pacientes no mostraban do. Estos resultados llevaron a los autores a
sesgo interpretativo de su propio comporta- concluir que "las ideas irracionales sobre las
miento. reacciones de la propia persona frente a la
Resulta prácticamente evidente que los visión de una araña parecen estar dominadas
pacientes con trastorno obsesivo-compulsivo por ideas extraordinariamente similares a las
muestran un sesgo interpretativo de muchas
Un marco teórico cognitivo para los trastornos de ansiedad 129

que muestran los pacientes con trastorno de remos, por ejemplo, lo que ocurre en el
pánico" (pág. 265) campo de la neuropsicología cognitiva; la
Thorpe y Salkovskis (1995) pidieron a mayoría de los estudios están basados en pa-
sujetos fóbicos a las arañas, con otros tipos cientes con daño cerebral que muestran dete-
de fobias y sujetos normales que rellenaran rioros altamente específicos (Ellis y Young,
el Cuestionario de Creencias Fóbicas (Pho- 1988). Esta perspectiva ha demostrado ser
bic Beliefs Questionnaire) mientras imagi- muy útil para obtener una mayor compren-
naban el objeto de sus fobias en la misma sión de la arquitectura del sistema cognitivo
habitación donde se encontraban. Más del humano e indudablemente, resulta más pro-
50% de los fóbicos a las arañas afirmó que ductivo que el estudio con pacientes con da-
llegaban a sentirse paralizados, como si se ño cerebral masivo o generalizado.
volvieran locos o histéricos; sin embargo só- Por otra parte, existe evidencia a favor de
lo un pequeño porcentaje de los otros pa- la especificidad de los sesgos cognitivos a
cientes fóbicos suscribió estos pensamientos pesar de la comorbilidad. Logan y Goetsch
irracionales. Por tanto, sólo los fóbicos a las (1993) revisaron la literatura existente sobre
arañas mostraron un sesgo interpretativo con el sesgo de atención selectiva, concluyendo
respecto a la amenaza potencial producida que "en 14 estudios [con sujetos con trastor-
por la araña. nos de ansiedad] donde se intentó determi-
nar si el sesgo atencional era específico o
general, 11 mostraron que este sesgo era es-
Valoración de la teoría de los cua- pecífico y relevante para determinar las cla-
tro factores ves de la amenaza" (pág.556). Eysenck
(1997) revisó más estudios sobre el sesgo
La objeción más obvia que se le puede hacer
atencional publicados después de la revisión
a la teoría de los cuatro factores aplicada a la
de Logan y Goetsch (1993) encontrando que
ansiedad clínica es que se centra principal-
la especificidad del sesgo aparecía en la gran
mente en "casos puros" de diversos trastor-
mayoría de estos estudios.
nos de ansiedad, ignorando otros factores
como la comorbilidad. De hecho no hay du-
da de que la comorbilidad es común a la
mayoría de los trastornos de ansiedad; por
ejemplo, en un estudio realizado por Gois- Implicaciones Terapéuticas
man, Goldenberg, Vasile y Keller (1995) se Dentro del ámbito de la terapia cognitivo-
evaluaron 711 pacientes con ansiedad de los conductual los enfoques cognitivos han sido
cuales sólo el 29% recibieron un único dia- utilizados con gran éxito en el tratamiento de
gnóstico a lo largo de sus vidas; más de un diversos trastornos de ansiedad. Sin embar-
39% de dichos pacientes recibieron 2 dia- go, la evidencia sugiere que este enfoque ha
gnósticos de ansiedad, el 18% recibió 3 y el sido más exitoso con algunos trastornos que
14% 4 o más diagnósticos por ansiedad. con otros. Según Rachman (1993), "en rela-
No obstante, es necesario apuntar con ción a los trastornos de ansiedad, los progre-
respecto a la comorbilidad que es más fácil sos teóricos y clínicos más evidentes se han
para desarrollar un modelo teórico de cual- realizado en la aplicación de la terapia cog-
quier trastorno, centrarse en casos relativa- nitivo-conductual para la explicación y el
mente "puros" que en casuística más com- tratamiento del pánico" (pág.274).
pleja y que incluya gran variedad de sínto- ¿Por qué el enfoque cognitivo ha resulta-
mas irrelevantes para ese trastorno. Conside- do ser especialmente exitoso en el trastorno
130 M.W. Eysenck y N. Derakshan

de pánico? Una razón importante es que la compulsivo, por lo que nos centraremos es-
terapia cognitiva se centra en el síntoma cen- pecialmente en estos trastornos.
tral del trastorno de pánico, es decir, las in-
terpretaciones catastrofistas de las sensacio- Trastorno de Pánico
nes corporales del paciente; aunque, por su-
La mayoría de las estrategias cognitivas para
puesto, el trastorno de pánico cursa con
el trastorno de pánico, se basan en que la ca-
otros muchos síntomas. Sin embargo, y de
racterística central a tratar es la incontrolabi-
acuerdo con la teoría de los cuatro factores,
lidad percibida de las sensaciones corporales
la diferencia más importante entre los pa-
producida por las interpretaciones catastro-
cientes con trastorno de pánico y los sujetos
fistas de dichas sensaciones (p.e. Clark,
normales es que los primeros interpretan sus
1986). Clark y Salkovskis (1986) propusie-
sensaciones corporales como incontrolables,
ron una forma de terapia cognitiva basada en
causándoles una ansiedad extrema.
reestructurar los pensamientos disfunciona-
De acuerdo con Clark (1986), los pacien- les, como las interpretaciones catastrofistas
tes con trastorno de pánico sufren de ansie- de las sensaciones corporales, por pensa-
dad extrema cuando se produce el círculo miento racionales alternativos. Además, ins-
vicioso; la interpretación errónea de sus sen- truían a los pacientes sobre la relación exis-
saciones corporales aumenta su nivel de an- tente entre la hiperventilación, los síntomas
siedad y esto conduce a un incremento en el corporales y la ansiedad. Finalmente, los su-
grado de interpretación errónea y así sucesi- jetos debían expresar cualquier pensamiento
vamente. Otros síntomas del trastorno de automático que precediera o acompañara a
pánico son menos severos y tienen menos los ataques de pánico.
probabilidad de generar un círculo vicioso.
La mayoría de los estudios sobre resulta-
Por consiguiente, la idea fundamental que se
dos terapéuticos con este enfoque concluyen
sigue de este análisis es que la terapia cogni-
que es muy exitoso en el tratamiento del
tiva debería hacer especial énfasis en aque-
trastorno del pánico. Por ejemplo, Arntz and
llos síntomas relacionados con los círculos
van den Hout (1996) comparando la terapia
viciosos y la incontrolabilidad percibida, y
cognitiva de Clark y Salkovskis (1986) con
solamente cuando se hayan realizado pro-
tratamiento en relajación encontraron que al
gresos en el manejo de estos síntomas clave,
final del tratamiento, el 78% de los pacientes
el terapeuta debería centrarse en otros sín-
que habían recibido terapia cognitiva elimi-
tomas más controlables.
naron los ataques de pánico, mientras que
Siguiendo la teoría de los cuatro factores, sólo el 50% de los pacientes que recibieron
los síntomas clave de los pacientes más an- entrenamiento en relajación consiguieron
siosos están basados en los sesgos cogniti- similares resultados.
vos relacionados con una u otra fuente de in-
formación que determinan la experiencia de
Fobia Social
la ansiedad.
Siguiendo la teoría de los cuatro factores, el
A continuación se comentarán algunos
problema principal en la fobia social es que
tipos de terapia cognitiva específicamente
los fóbicos sociales interpretan erróneamente
diseñados para eliminar estos sesgos inter-
su comportamiento en la dirección de que
pretativos. El mayor progreso se ha realiza-
éste aparece mucho más ansioso e inadecua-
do en relación al trastorno de pánico, la fo-
do de lo que realmente ocurre. De ello se
bia social y el trastorno obsesivo-
deduce que el objetivo fundamental de la te-
Un marco teórico cognitivo para los trastornos de ansiedad 131

rapia sería reducir o eliminar este sesgo in- situación social concurrente. La demostra-
terpretativo. Hope, Heimberg y Bruch ción de que su ejecución social fue mejor
(1995) encontraron evidencias de que la te- que la que ellos inicialmente pensaban debe-
rapia cognitivo-conductual es más efectiva ría facilitar la reducción del sesgo interpreta-
que la terapia de exposición en eliminar este tivo, así como el hecho de que comprobaran
sesgo interpretativo. Para ello tomaron auto- esta evidencia por sí mismos en lugar de en
valoraciones de la calidad de la ejecución en función de las valoraciones de otras perso-
una situación social tanto de los pacientes nas.
fóbicos sociales como de jueces indepen- Aunque esta forma de actuación no ha
dientes; estas valoraciones se obtuvieron en sido utilizada todavía en un contexto tera-
situaciones de pre y post tratamiento, encon- péutico, Rapee and Hayman (1996) sugieren
trándose que sólo los pacientes que habían que puede ser muy efectiva en el tratamiento
recibido tratamiento cognitivo-conductual de los fóbicos sociales. Estos autores pidie-
eliminaron el sesgo interpretativo de su pro- ron a sujetos normales que realizaran auto-
pia ejecución social. valoraciones de su ejecución social durante
¿Qué se puede hacer para facilitar la eli- la misma y tras observar su grabación en ví-
minación de los sesgos interpretativos de los deo. Las autovaloraciones tras el visionado
fóbicos sociales sobre su propio comporta- de la ejecución social fueron significativa-
miento? Lo habitual es demostrar a estos pa- mente más favorables que aquellas obtenidas
cientes que la interpretación de su compor- en la misma situación social.
tamiento en situaciones sociales es más ne- Los fóbicos sociales normalmente tienen
gativa que la que realizan los observadores fuertes sesgos interpretativos con respecto a
independientes. No obstante, existen dos li- su comportamiento en situaciones sociales.
mitaciones en esta estrategia: la primera es Además, generalmente, su comportamiento
que los fóbicos sociales pueden pensar que social suele ser más deficitario que el de los
los observadores distorsionan sus valoracio- sujetos normales; en consecuencia, es
nes para no afectar a sus sentimientos, por lo igualmente importante incluir en el trata-
que entonces dichos pacientes se verán muy miento el entrenamiento en habilidades so-
poco afectados por las valoraciones de los ciales.
observadores; la segunda, y siguiendo la teo-
ría de los cuatro factores, es que los sesgos
Trastorno Obsesivo-compulsivo
interpretativos de los pacientes deberían ser
mayores cuando se encuentran más ansiosos De acuerdo con la teoría de los cuatro facto-
que cuando no lo están. En ese sentido, la res aplicada a la ansiedad clínica, los pacien-
práctica habitual de obtener autovaloracio- tes obsesivos-compulsivos presentan un ses-
nes sobre el rendimiento inmediatamente go interpretativo e incontrolabilidad percibi-
después de la situación social es probable da principalmente de sus propios pensamien-
que aumente el nivel de sesgo interpretativo tos obsesivos. Algunos de los factores impli-
de los fóbicos sociales. cados en este sesgo interpretativo fueron
comentados anteriormente por Eysenck
En consecuencia, es preferible grabar en
(1997): "Primero, existe un sentido exagera-
vídeo la actuación del fóbico social y poste-
do de la responsabilidad que aumenta consi-
riormente pedirle que valore su ejecución, o
derablemente la amenaza percibida en una
bien que realice dicha actuación en una si-
situación determinada; por ejemplo, la posi-
tuación relajada. Estas valoraciones podrían
bilidad de contaminarse. En segundo lugar,
compararse con aquellas obtenidas en una
hay una tendencia en los pacientes obsesi-
132 M.W. Eysenck y N. Derakshan

vos-compulsivos a exagerar considerable- ción in vivo. Utilizando tres medidas de me-


mente la probabilidad de ocurrencia de si- joría, encontraron que el 39% de los pacien-
tuaciones amenazantes. Los pensamientos tes que recibieron terapia cognitiva super-
tienen más probabilidad de convertirse en aron estas tres medidas en comparación con
obsesivos cuando la probabilidad subjetiva el 17% de los pacientes que recibieron expo-
de un resultado negativo y la amenaza de ese sición in vivo.
resultado es elevada" (pág.159).
Van Oppen y Arntz (1994) y Freeston,
Rheaume y Ladouceur (1996) han descrito Resumen y Conclusiones
distintas técnicas para reducir los sesgos in- La teoría de los cuatro factores, que origina-
terpretativos asociados a los pensamientos riamente se planteó como una teoría de an-
obsesivos. Por ejemplo, en la "técnica del siedad como emoción, ha sido utilizada para
pastel" (Van Oppen y Arntz, 1994) el pa- explicar el rasgo de ansiedad (Eysenck,
ciente obsesivo-compulsivo indica el grado 1997 y Eysenck y Derakshan enviado para
de responsabilidad que diversas personas publicación).
tendrían si el evento amenazante de una ob- A lo largo de este artículo, hemos demos-
sesión ocurriera y esta información se tradu- trado que la teoría puede ayudar a la com-
ce en un porcentaje que queda representado prensión de los principales trastornos de an-
en una gráfica en forma de "pastel". El grado siedad en términos de sesgos cognitivos
de responsabilidad del paciente se representa aplicados a las cuatro fuentes de informa-
por la cantidad de "pastel" que no se refiere ción que determinan el nivel de ansiedad ex-
a otras personas. Habitualmente, ese grado perimentada.
de responsabilidad es mucho menor del que
En el ámbito clínico, la teoría de los cua-
el paciente había estimado originalmente.
tro factores también ayuda a explicar porqué
La técnica del "patrón doble" representa la terapia cognitiva ha resultado ser más efi-
otra forma de reducir la sensación exagerada caz con el trastorno de pánico que con cual-
de responsabilidad percibida por el paciente. quiera de los otros trastornos de ansiedad.
En esencia, se le plante que, si el evento
Finalmente, los desarrollos recientes en
amenazante le ocurriera a otra persona, si és-
la terapia cognitiva para la fobia social y el
te sería igualmente responsable o culpable
trastorno obsesivo-compulsivo son consis-
de ello. El paciente, por regla general, admi-
tentes con esta teoría; en el caso de la fobia
te que la otra persona no es responsable del
social se ha propuesto una forma modificada
resultado, por lo que se le pide que compare
de terapia cognitiva basada en la teoría de
esta creencia con el alto grado de responsa-
los cuatro factores.
bilidad que él mismo sentiría si eso mismo le
hubiera ocurrido. Actualmente, la teoría de los cuatro fac-
tores proporciona una explicación general
Estas y otras técnicas propuestas por van
para los principales trastornos de ansiedad.
Oppen y Arntz (1994) para reducir el sesgo
No obstante, en un futuro, es necesario reali-
interpretativo se ha mostrado muy efectivas.
zar estudios más detallados y considerar
Van oppen, de Haan, van Balkom, Spin-
nuevas implicaciones de este marco teórico
hoven, Hoogduin y van Dyck (1995) compa-
cognitivo en el ámbito clínico.
raron la terapia basada en los planteamientos
de van Oppen y Arntz (1994) con exposi-
Un marco teórico cognitivo para los trastornos de ansiedad 133

Referencias bibliográficas
Alden, L.E. y Wallace, S.T. (1995). ty. Personality and Individual Parkinson, B. (1995). Ideas and
Social phobia and social appraisal Differences. realities of emotion. London:
in successful and unsuccessful so- Eysenck, M.W. y Derakshan, N. (En- Routledge.
cial interactions. Behaviour Re- viado para publicación). Cognitive Perna, G., Bertani, A., Arancio, C.,
search and Therapy, 33, 497-505. approaches to trait anxiety. Ronchi, P. y Bellodi, L. (1995).
Arntz, A., Lavy, E., van den Berg, G. Freeston, M.H., Rheaume, J. y La- Laboratory response of patients
y van Rijsoort, S. (1993). Negati- douceur, R. (1996). Correcting with panic and obsessive-
ve beliefs of spider phobics: A faulty appraisals of obsessionals compulsive disorders to 35% CO2
psychometric evaluation of the thoughts. Behaviour Research challenges. American Journal of
Spider Phobia Beliefs Question- and Therapy, 34, 433-446. Psychiatry, 152, 85-89.
naire. Advances in Behavioural Gaffney, F.A., Fenton, B.J., Lane, Rachman, S.J. (1993). A critique of
Research and Therapy, 15, 257- L.D. y Lake, C.R. (1988). Hemo- cognitive therapy for anxiety di-
277. dynamic, ventilatory, and bioche- sorders. Behaviour Research and
Arntz, A. y van den Hout, M. (1996). mical responses of panic patients Therapy, 31, 274-288.
Psychological treatments of panic and normal controls with sodium Rachman, S.J. y de Silva, P. (1978).
disorder without agoraphobia: lactate infusion and spontaneous Abnormal and normal obsessions.
Cognitive therapy versus applied panic attacks. Archives of General Behaviour Research and Thera-
relaxation. Behaviour Research Psychiatry, 45, 53-60. py, 16, 233-238.
and Therapy, 34, 113-121. Goisman, R.M., Goldenberg, I., Vasi- Rapee, R. (1991). Generalized anxie-
Clark, D.M. (1986). A cognitive ap- le, R.G. y Keller, M.B. (1995). ty disorder: A review of clinical
proach to panic. Behaviour Re- Comorbidity of anxiety disorders features and theoretical concepts.
search and Therapy, 24, 461-470. in a multi-centre anxiety study. Clinical Psychology Review, 11,
Clark, D.M. y Salkovskis, P.M. Comprehensive Psychiatry, 36, 419-440.
(1986). Cognitive treatment of 303-311. Rapee, R.M., Brown, T.A., Antony,
panic: Therapist's manual. De- Hope, D.A., Heimberg, R.G. y Bruch, M.M. y Barlow, D.H. (1992).
partment of Psychiatry, University M.A. (1995). Dismantling cogni- Response to hyperventilation and
of Oxford. tive-behavioural group therapy for inhalation of 5.5% carbon-
Derakshan, N. y Eysenck, M.W. (En social phobia. Behavioural Re- dioxide-enriched air across the
prensa). Interpretive biases for search and Therapy, 33, 637-650. DSM-III-R anxiety disorders.
one's own bejaviour and physiolo- Lazarus, R.S. (1966). Psychological Journal of Abnormal Psychology,
gy in high-trait-anxious indivi- stress and the coping process. 101, 538-552.
duals and repressors. Journal of New York: McGraw-Hill. Rapee, R.M. y Hayman, K. (1996).
Personality and Social Psycholo- Lazarus, R.S. (1991). Emotion and The effects of video feedback on
gy. adaptation. Oxford: Oxford Uni- the self-evaluation of performance
Ellis, A.W. y Young, A.W. (1988). versity Press. in socially anxious subjects. Be-
Human cognitive neuropsycholo- Logan, A.C. y Goetsch, V.L. (1993). haviour Research and Therapy,
gy. London, UK: Lawrence Erl- Attention to external threat cues in 32, 79-87.
baum Associates Ltd. anxiety states. Clinical Psycholo- Rapee, R.M. y Lim, L. (1992). Dis-
Eysenck, M.W. (1992). Anxiety: The gy Review, 13, 541-559. crepancy between self- and obser-
cognitive perspective. London: O'Donohue, W. y Elliot, A. (1992). ver ratings of performance in so-
Lawrence Erlbaum Associates The current status of post- cial phobics. Journal of Abnormal
Ltd. traumatic stress disorder as a diag- Psychology, 101, 728-731.
Eysenck, M.W. (1997). Anxiety and nostic category: Problems and Stopa, L. y Clark, D.M. (1993). Cog-
cognition: A unified theory. Hove, proposals. Journal of Traumatic nitive processes in social phobia.
UK: Psychology Press. Stress, 5, 421-439. Behaviour Research and Thera-
Eysenck, M.W. y Derakshan, N. (En Parkinson, B. (1994). Emotion. En py, 31, 255-267.
prensa). Cognitive biases for futu- A.M. Colman (Ed.), Companion Thorpe, S.J. y Salkovskis, P.M.
re negative events as a function of encyclopaedia of psychology, (1995). Phobic beliefs: Do cogni-
trait anxiety and social desirabili- Vol. 2. London: Routledge. tive factors play a role in specific
134 M.W. Eysenck y N. Derakshan

phobias?. Behaviour Research obsessive-compulsive disorder. Yeragani, V.K., Balon, R. y Pohl, R.


and Therapy, 33, 805-816. Behaviour Research and Thera- (1989). Lactate infusions in panic
Van Oppen, P. y Arntz, A. (1994). py, 33, 379-390. disorder patients and normal con-
Cognitive therapy for obsessive- Verburg, K., Griez, E., Meijer, J. y trols: Autonomic measures and
compulsive disorder. Behaviour Pols, H. (1995). Discrimination of subjetive anxiety. Acta Psychia-
Research and Therapy, 32, 79-87. panic disorder and generalized trica Scandinavica, 79, 32-40.
Van Oppen, P., de Haan, E., van Bal- anxiety disorder by 35% carbon Zinbarg, R.E. y Barlow, D.H. (1996).
kom, A.J.L., Spinhoven, P., Hoog- dioxide challenge. American Structure of anxiety and the anxie-
duin, K. y van Dyck, R. (1995). Journal of Psychiatry, 152, 1081- ty disorders. Journal of Abnormal
Cognitive therapy and exposure in 1083. Psychology, 105, 181-193.
vivo in the treatment of obsessive-

También podría gustarte