Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Historia de la química
La química es una de las ciencias más trascendentales a disposición del ser
humano. Su historia se remonta a épocas muy anteriores al concepto mismo de
“ciencia”, puesto que el interés de nuestra especie por comprender de qué está
hecha la materia es casi tan antiguo como la civilización misma. Esto quiere decir
que los saberes químicos existían desde la prehistoria, aunque con otros
nombres y organizados de maneras muy diferentes.
Una de las primeras teorías que intentó dar respuesta a este dilema surgió en la
Grecia del siglo V a. C., obra del filósofo y político Empédocles de Agrigento,
quien propuso que debía haber cuatro elementos básicos (cuatro como las
estaciones) de la materia: aire, agua, fuego y tierra, y que las distintas
propiedades de las cosas dependían de la proporción en que estuvieran
mezclados.
Esta lógica sirvió para que luego la escuela hipocrática de medicina griega
propusiera su teoría de los cuatro humores que componían el cuerpo humano
(sangre, flema, bilis negra y bilis amarilla). Por otro lado, el célebre filósofo
Aristóteles (384-322 a. C.) luego añadió el éter o quintaesencia como el elemento
puro y primordial que conformaba a las estrellas y los astros del firmamento.
Sin embargo, no fue ésa la visión que se impuso durante los siglos venideros, sino
la propuesta por el cristianismo, entre cuyas preocupaciones no estaba la
comprensión de la materia, tanto como la salvación del alma humana. Es decir,
que para ella Dios había creado todo lo que existe, y con eso basta.
Aunque los alquimistas fueron mal vistos en el Occidente cristiano, sus saberes
eventualmente se filtraron en Europa y fueron rescatados por filósofos y
pensadores, especialmente los que se interesaban por sus experimentos en pos
del elixir de la vida eterna o la transformación del plomo en metales preciosos.
A medida que Occidente renacía alrededor del siglo XV, redescubriendo los
saberes de la antigüedad, una nueva forma de entender la realidad se iba
gestando: un pensamiento laico, racional y escéptico que finalmente dio origen a
la idea de ciencia, y que rebautizó la herencia alquímica como química.
A partir de entonces la química dio sus pasos como ciencia, lo cual trajo
numerosas hipótesis y teorías sucesivas, muchas hoy en día descartadas, como la
teoría del flogisto de finales del siglo XVII. Sin embargo, también se descubrieron
los primeros elementos químicos.
Sus primeras descripciones sistemáticas datan de principios del siglo XVIII. Por
ejemplo, la Tabla de las afinidades de E. F. Geoffroy, de 1718, fue precursora de
la Tabla periódica de los elementos que apareció en el siglo XIX, obra del ruso
Dmitri Mendeléyev (1834-1907).
Sus aportes fueron diversos y muy significativos, pero entre ellos destaca el
resurgimiento de la teoría atómica en 1803, gracias a la obra del inglés John
Dalton (1766-1844), quien la reformuló y adaptó al entendimiento de los tiempos
modernos. Tan trascendente fue esta aportación, que la química del siglo XIX
estuvo toda dividida entre quienes apoyaron la visión de Dalton, y quienes no.