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Revista de agricultura sostenible

ISSN: 1044­0046 (Impreso) 1540­7578 (En línea) Página de inicio de la revista: www.tandfonline.com/journals/wjsa20

Agroecología: la ecología de los sistemas alimentarios

C. Francis, G. Lieblein, S. Gliessman, TA Breland, N. Creamer, R. Harwood, L. Salomonsson,

J. Helenius, D. Rickerl, R. Salvador, M. Wiedenhoeft, S.
Simmons, P. Allen, M. Altieri, C. Flora y R. Poincelot

Para citar este artículo: C. Francis, G. Lieblein, S. Gliessman, TA Breland, N. Creamer, R. Harwood, L. Salomonsson, J. Helenius, D.
Rickerl, R. Salvador, M. Wiedenhoeft, S. Simmons, P. Allen, M.
Altieri, C. Flora & R. Poincelot (2003) Agroecología: La ecología de los sistemas alimentarios,
Journal of Sustainable Agriculture, 22:3, 99­118, DOI: 10.1300/J064v22n03_10
Para vincular a este artículo: https://doi.org/10.1300/J064v22n03_10

Publicado en línea: 17 de octubre de 2008.

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encontrar en https://www.tandfonline.com/action/journalInformation?journalCode=wjsa21
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Agroecología:
La ecología de los sistemas alimentarios

C. Francis D. Rickerl
G. Lieblein r.salvador
S. Gliessman M. Wiedenhoeft
TA Breland S. Simmons
N. Creamer P.Allen
R. Harwood M. Altieri
L. Salomonsson c.flora
J. Helenius R. Poincelot

C. Francis está afiliado al Departamento de Agronomía y Horticultura de la Universidad de Nebraska,

Lincoln, NE.
G. Lieblein y TA Breland están afiliados al Departamento de Horticultura y
Ciencias de los Cultivos, Universidad Agrícola de Noruega, Ås, Noruega.
S. Gliessman está afiliado al Departamento de Estudios Ambientales y P. Al­
Len está afiliado a CASFS, Universidad de California, Santa Cruz, CA.
N. Creamer está afiliado al Departamento de Ciencias Hortícolas del Norte
Universidad Estatal de Carolina, Raleigh, Carolina del Norte.
R. Harwood está afiliado al Departamento de Ciencias de Cultivos y Suelos de Michigan.
Universidad Estatal, East Lansing, MI.
L. Salomonsson está afiliado al Centro para la Agricultura Sostenible, Suecia
Universidad de Ciencias Agrícolas, Uppsala, Suecia.
J. Helenius está afiliado al Departamento de Producción Vegetal de la Universidad de Hel­sinki,
Helsinki, Finlandia.
D. Rickerl está afiliado al Departamento de Ciencias Vegetales del estado de Dakota del Sur.
Universidad, Brookings, SD.
R. Salvador y M. Wiedenhoeft están afiliados al Departamento de Agronomía,
y C. Flora está afiliada al Departamento de Sociología de la Universidad Estatal de Iowa,
Ames, IA.
S. Simmons está afiliado al Departamento de Agronomía y Genética Vegetal,
Universidad de Minnesota, St. Paul, MN.
M. Altieri está afiliado a la División de Control Biológico de la Universidad de Cali­
fornia, Berkeley, CA.
R. Poincelot está afiliado al Departamento de Biología de la Universidad de Fairfield, Fairfield, CT.
Dirija la correspondencia a: C. Francis, Departamento de Agronomía y Horticultura,
Universidad de Nebraska, Lincoln, NE 68583­0915 (correo electrónico: cfrancis2@unl.edu).
División de Investigación Agrícola de la Universidad de Nebraska J. Número de serie 13535.

Revista de Agricultura Sostenible, vol. 22(3) 2003

http://www.haworthpress.com/store/product.asp?sku=J064
2003 por The Haworth Press, Inc. Todos los derechos reservados.
10.1300/J064v22n03_10 99
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100 REVISTA DE AGRICULTURA SOSTENIBLE

ABSTRACTO. Presentamos una justificación convincente para definir la agroecología como la

ecología de los sistemas alimentarios. Nuestro propósito es proporcionar un marco que guiará la
investigación, la educación y la acción en los múltiples y
facetas interactivas de una agricultura y una alimentación globales cada vez más complejas
sistema. Para lograr tales objetivos, es esencial tender puentes y
conexiones entre y más allá de nuestras disciplinas en la agricultura de producción, así como más
allá de la puerta de la granja hacia el paisaje rural y la comunidad. Campos de la sociología, la
antropología, las ciencias ambientales, la ética,
y la economía son cruciales para la combinación. Proporcionan una ventaja adicional
Puntos desde los cuales podemos ver el sistema alimentario de una manera nueva, así como ideas
sobre cómo establecer criterios de valoración más allá de la economía neoclásica.
Se utilizan ejemplos de México, California y la región nórdica para ilustrar la implementación
exitosa de esta estrategia educativa en
universidades. El diseño de granjas individuales utilizando principios de ecología es
expandido a los niveles de paisaje, comunidad y biorregión, con
énfasis en la singularidad del lugar y las personas y otras especies que habitan ese lugar.
Concluimos que definir la agroecología como la ecología de
Los sistemas alimentarios fomentarán el desarrollo de equipos de investigación interdisciplinarios
más amplios y cursos atractivos basados en sistemas para los mejores del mañana.
estudiantes. En contraste con el enfoque limitado en las interacciones cultivo­suelo, este
Esta definición nos ayudará a plantear preguntas de investigación de alto nivel cuyas soluciones
impulsarán el desarrollo de una agricultura y una alimentación sostenibles.
sistema. [Copias del artículo disponibles mediante pago en The Haworth Document
Delivery Service: 1­800­HAWORTH. Dirección de correo electrónico: <docdelivery@haworthpress.
com> Sitio web: <http://www.HaworthPress.com> 2003 por The Haworth Press,
Inc. Todos los derechos reservados.]

PALABRAS CLAVE. Sistemas agrícolas, investigación holística, aprendizaje activo,

Estudios Interdisciplinarios

INTRODUCCIÓN

Definimos la agroecología como el estudio integrador de la ecología del

todo el sistema alimentario, abarcando las dimensiones ecológica, económica y
social. Esta definición conducirá a un enfoque práctico que aliente al investigador,
educador y estudiante a abrazar la totalidad y
conectividad de los sistemas, y estimulará un enfoque en la singularidad de
cada lugar, y soluciones adecuadas a sus recursos y limitaciones.
La definición amplía nuestro pensamiento más allá de las prácticas de producción y
impactos ambientales inmediatos a nivel de campo y finca.
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Investigación, revisiones, prácticas, políticas y tecnología 101

La agroecología se ha definido de diversas formas como la ecología de la agricultura,

el estudio de las funciones ecológicas en la agricultura y la unión de
agricultura y ecología. Más específicamente, “la agroecología se define como
la aplicación de conceptos y principios ecológicos al diseño y
gestión de agroecosistemas sostenibles” (Gliessman, 1998). Este
concepto ha capturado la imaginación de agricultores y académicos que
están buscando formas innovadoras de aumentar la productividad y la sostenibilidad de la
agricultura manteniendo al mismo tiempo un entorno que debe
perdurar y proporcionar calidad de vida. A falta de abordar la complejidad de mejorar los
sistemas alimentarios actuales, la mayoría de los proyectos de investigación y
Los cursos universitarios –incluso en agroecología– se centran en los componentes
específicos de la producción agrícola y sus impactos ambientales inmediatos. Tal enfoque
no refleja nuestra visión en expansión de cómo la ecología
puede informar el diseño y la gestión del sistema alimentario total, ni
¿Se basa en la base ecológica que se ha utilizado en varios
programas educativos para apoyar el desarrollo de agroecosistemas sostenibles. El
estudio de la ecología de los sistemas alimentarios puede proporcionar información
sobre cómo abordar las cuestiones a nivel de sistemas y contribuir al desarrollo de
sociedades sostenibles.
Los sistemas ecológicos naturales han evolucionado a lo largo de siglos para
aprovechar eficientemente los recursos naturales. Las especies de plantas y animales que
interactúan sobreviven bien juntas en cada entorno, incluidos sus
clima y suelos. Proporcionan un modelo de supervivencia y relativa estabilidad.
sobre el cual podemos modelar los agroecosistemas modernos. Los sistemas naturales son
esencialmente locales y, en la mayoría de los casos, son biológicamente diversos. Pistas
Los conocimientos obtenidos de los sistemas naturales pueden combinarse con atentas
innovaciones humanas para diseñar futuros sistemas alimentarios.
Muchas prácticas de producción instructivas se encuentran en agroecosistemas
tradicionales que representan una coevolución de la cultura y la naturaleza. El
Las complejidades y el valor potencial de los sistemas indígenas fueron estudiados
extensamente por el etnobotánico mexicano Efraim Hernández X., quien definió los
agroecosistemas como la interacción entre tecnologías ecológicas, tecnológicas y
y factores socioeconómicos. Explicó por qué la agricultura moderna
Los sistemas han perdido su base ecológica, a medida que los factores socioeconómicos
se convirtieron en las fuerzas impulsoras dominantes en el sistema alimentario (descritas).
en Hernández X., 1977). El sistema maíz/frijol/calabaza de México y
Centroamérica es un ejemplo de eficiencia biológica y de aporte a la alimentación familiar.

¿De qué manera podemos recuperar el conocimiento desarrollado a lo largo de siglos

de experiencia en producción agrícola tradicional y vincularlos?
¿Con las eficiencias de los sistemas naturales y con las nuevas tecnologías?
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102 REVISTA DE AGRICULTURA SOSTENIBLE

Gliessman (1998) sugirió que, “Cuanto mayor sea la similitud estructural y funcional de un
agroecosistema con los ecosistemas naturales en su
región biogeográfica, mayor será la probabilidad de que el agroecosistema
será sostenible”. Uno de nuestros retos en la investigación es descubrir
cómo los principios, el diseño y las funciones de los sistemas naturales pueden
ser utilizados como puntos de referencia o guías para el desarrollo productivo y futuro.
sistemas (Gliessman, 1990, 2001). El Land Institute de Kansas ofrece
un ejemplo de un escenario de investigación basado en la pradera como ecosistema modelo
(Jackson, 1980; Soule y Piper, 1992). Su red nacional
de 125 científicos está explorando cómo la comprensión de los sistemas naturales
se puede utilizar para informar nuestra búsqueda de un futuro productivo basado en plantas perennes.
agroecosistemas que operan en armonía con el medio ambiente y los recursos
naturales.
Cuando nos centramos únicamente en el sector de producción agrícola, el análisis de
los sistemas actuales y el diseño de alternativas futuras se ven gravemente limitados. Tal
enfoque ignora la gran inversión en energía y materiales.
que son parte integral de los pasos de procesamiento, transporte y comercialización en
La cadena de comida. En el sistema alimentario industrial, es prácticamente imposible
reincorporar muchos de los productos de desecho de esta cadena a
el ciclo de producción debido a la distancia, el costo y las complicaciones logísticas.
Un sistema global puede traernos plátanos todos los días del año, si podemos
permitírselos, pero oscurece el principio de estacionalidad en la producción de alimentos en
cada lugar y los ciclos que son a la vez inherentes y eficientes en la producción de alimentos.
sistemas naturales. Basándose en los principios de la ecología y la singularidad de
En este lugar, la agroecología y el análisis de los agroecosistemas pueden proporcionar
métodos para ampliar el enfoque al análisis de todos los componentes de los alimentos.
sistema y cómo interactúan.

PERSONAS EN AGROECOSISTEMAS

Nuestras sociedades son sistemas abiertos que resultan de las acciones humanas y
se basan en demandas, deseos y visión. Es esencial que integremos el comportamiento
humano como una fuerza impulsora importante en el sistema. Nuestro
El sistema actual separa a la mayoría de las personas de sus fuentes de alimentos y
del entorno de producción. En la cultura urbana actual, la comida puede ser
la única conexión que queda con la naturaleza. Esta separación y falta de
La conciencia sobre cómo y dónde se producen y procesan los alimentos contribuye
a las decisiones de las personas de consumir comida rápida sin tener en cuenta la
importancia de la salud, así como otros impactos humanos y ambientales (Nes­tle, 2002;
Schlosser, 2001). Además, el sistema alimentario mundial no
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Investigación, revisiones, prácticas, políticas y tecnología 103

Actualmente aportan alimentos adecuados a las mesas de la mayoría de las personas.

en el planeta. Debemos considerar la equidad global en términos de nutrición,
salud y seguridad alimentaria. Un enfoque más amplio e interdisciplinario en la
agroecología como estudio de los sistemas alimentarios nos ayudará a identificar los
costos y beneficios humanos reales del sistema actual y ayudará a explicar lo que
A menudo se consideran externalidades, tanto a corto como a largo plazo.
Estas cuestiones ya se están abordando a través de la Política Agrícola Común (PAC)
de la Unión Europea, donde se hace hincapié en
Paisajes multifuncionales que incluyen valores culturales en cada lugar.
Con el aumento de la población humana mundial, existe una mayor conciencia de la
necesidad de aumentar la producción de alimentos y al mismo tiempo proteger la
biodiversidad y el medio ambiente natural. Los seres humanos tienen la oportunidad.
y responsabilidad de evaluar los sistemas alimentarios de nuevas maneras, reconocer
la necesidad de equilibrar el sistema con los recursos disponibles y de aceptar una
obligación moral de gestionar los resultados del sistema de forma equitativa.
manera. Cuando las personas son vistas como parte integral del ecosistema,
sujeto a todas las leyes naturales y consecuencias del éxito del sistema, no
es una razón de peso para hacer que los agroecosistemas sean lo más sostenibles
posible a largo plazo. Más allá de nuestro actual poder disruptivo en el ecosistema,
somos capaces de diseñar sistemas que cierren los ciclos de nutrientes,
depender más de la energía renovable, reducir las ineficiencias en la producción,
y promover la salud ambiental. Podemos alcanzar nuestros objetivos utilizando
algunos principios y propiedades de diseño de sistemas que se asemejan a los de
ecosistemas naturales.
En este contexto, la agroecología tiene atractivo porque nos ayuda a centrarnos en
estructura y procesos en cada nivel de sistemas relevante. estudio cuidadoso
puede conducir a mejores análisis de la sostenibilidad o de posibles efectos negativos.
impactos ambientales a largo plazo de las prácticas agrícolas actuales y
sistemas. Hay una preocupación creciente por parte del público, a menudo expresada
a través de regulaciones, que conducen a requisitos para las prácticas agrícolas.
que reducirá la pérdida de suelo y nutrientes de los campos y minimizará
la entrada de plaguicidas y sus residuos a las aguas superficiales y subterráneas.
Aprender más sobre los procesos cíclicos y los diseños de los sistemas naturales puede
ayudarnos a mejorar los agroecosistemas gestionados. Hasta el presente,
El enfoque en la ciencia agrícola se ha centrado principalmente en los componentes de
el proceso de producción y maximizar los retornos netos de productos individuales
por unidad de tierra o de trabajo. Todos los demás usos de recursos y efectos
ambientales se han considerado “externalidades” y se han excluido.
desde el diseño del sistema. El enfoque de producción también se refleja en el diseño de
Cursos de agroecología más actuales.
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104 REVISTA DE AGRICULTURA SOSTENIBLE

El sistema agrícola es un sistema abierto que interactúa con la naturaleza.

y con la sociedad, y el desarrollo de un sistema alimentario sostenible
Requieren más atención a la eficiencia de todo el proceso de conversión de recursos naturales
en lo que llega a las mesas de los consumidores. Esto incluye
Análisis de la producción, procesamiento, comercialización y consumo de alimentos.
Cuando la agroecología se define como la ecología de los sistemas alimentarios, nos vemos
obligados a considerar algo más que la eficiencia del uso de recursos en la producción, los
impactos ambientales a corto plazo de las prácticas y las tasas anuales.
economía empresarial. La mayor parte de la energía (quizás >75%) de los alimentos
El sistema implica pasos posteriores al proceso de producción de campo (Johansson et al.
otros, 2000). Necesitamos considerar la energía utilizada y los residuos generados en
En cada paso de la cadena alimentaria, los potenciales para que los materiales vuelvan a convertirse en ciclos.
producción primaria y las propiedades emergentes de un sistema complejo
eso es básico para la supervivencia humana. Necesitamos emplear herramientas como el
análisis del ciclo de vida de los materiales (Audsley et al., 1997), el análisis de emergía (Odum,
1996), cálculos de la huella ambiental (Wackernagel et al., 1999),
y esquemas de valoración económicos y de otro tipo alternativos (para una revisión, ver
Doherty y Rydberg, 2002). Más allá de mirar sólo la energía y
flujos de materiales, debemos considerar otras fuerzas impulsoras en el sistema
tales como la economía a nivel agrícola, nacional y global, las consecuencias ambientales de
los sistemas en todas las especies de plantas y animales, y la
Impactos sociales y de salud de los sistemas en las personas. Un enfoque interdisciplinario e
integrado es esencial para abordar adecuadamente las complejidades de
interacciones en el sistema alimentario total (Allen et al., 1991).

EVOLUCIÓN DEL CONCEPTO DE AGROECOLOGÍA

Gliessman (1998) remontó la historia de la agroecología a la primera parte

del siglo pasado cuando la gente en ecología y agronomía encontró intereses comunes. El
área de ecología de cultivos incluyó a científicos que exploraban
dónde se cultivaron los cultivos y las condiciones climáticas donde cada uno era mejor
adaptado. Algunos propusieron utilizar el término agroecología. Tanto las publicaciones
antiguas como las recientes que utilizan este término y conceptos relacionados se muestran
en la Tabla 1 (basada en Gliessman, 1998).
Estas publicaciones se remontan a la vinculación de los términos ecología y
agronomía en el artículo de Klages de 1928 “Ecología de cultivos y cultivo ecológico
La Geografía en el Currículo Agronómico”. Gliessman describe cómo
grupos de científicos divergieron después de la Segunda Guerra Mundial, siendo los ecologistas
dando más atención a los experimentos en el medio natural y los agrónomos dedicando su
atención a los sistemas cultivados en la agricultura.
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Investigación, revisiones, prácticas, políticas y tecnología 105

Esta separación de intereses perduró hasta la década de 1970, cuando comenzaron a

aparecer libros y artículos utilizando el término agroecología y el concepto de agroecología.
agroecosistema.
Fueron muchos los indicios de esta nueva generación de autores
que la agroecología evolucionaría para incluir algo más que el entorno biogeoquímico y los
cultivos allí cultivados. Gliessman (1990) describió el trabajo pionero del Prof. Efraim
Hernández X. y su
estudiantes en México que desarrollaron investigaciones basadas en sistemas y conocimientos
indígenas, y cómo esto condujo a programas de educación en agroecología (Hernández X.,
1977; Gliessman, 1978). En Agroecología del
Trópico Americano, Montaldo (1982) sugirió que los problemas biológicos en el diseño de
prácticas agrícolas son inseparables del contexto socioeconómico en el que se utilizan los
sistemas agrícolas.
En Agricultura Sostenible y Sistemas Agrícolas Integrados (Edens
et al., 1985), había secciones dedicadas a la economía de los sistemas, los impactos
ecológicos y la ética y los valores en la agricultura. Estos complementaron los documentos
esperados sobre integración de cultivos/animales, niveles de insumos
uso y alternativas de comercialización que dominaron el proceso. altieri
(1985) discutieron el manejo de plagas en el contexto de una estructura cambiante de la
agricultura, incluida la consolidación de granjas, la plantación de monocultivos y cómo estos
impactan las poblaciones de plagas. Gliessman (1985)
Agregó que “los componentes socioeconómicos, tecnológicos y ecológicos
interactúan constantemente, creando un complejo mecanismo de retroalimentación que a través de
el tiempo ha seleccionado los tipos de sistemas de producción de alimentos que observamos
hoy”. Estos agroecólogos sentaron las bases de lo que en algunos programas se ha convertido
en un estudio integral del sistema alimentario.
Paralelamente a este desarrollo surgió la literatura sobre agricultura.
sistemas (por ejemplo, Spedding, 1979, 1996).
Los términos y conceptos de la Tabla 1 se limitan al uso del término
agroecología, y sólo tocar las publicaciones estrechamente relacionadas y
fuerte crecimiento en educación e investigación en agricultura sostenible durante este mismo
período de tiempo. Una visión general del desarrollo histórico moderno de la agricultura
sostenible realizada por Harwood (1990) describió cómo un
La evolución de la base de recursos, los valores sociales y la estructura del mercado nos
estaban llevando a pasar del modelo industrial actual a algo que
cualitativa y cuantitativamente diferentes. Esto incluía un número estable
de personas en la agricultura de producción, un número creciente en los servicios alimentarios,
un cambio de la especialización a la integración empresarial, un cambio hacia procesos más
biológicos y un aumento cuántico de las condiciones sociales y
consideraciones ambientales que influyen en la inversión pública en el
sistema alimentario.
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106 REVISTA DE AGRICULTURA SOSTENIBLE

TABLA 1. Publicaciones emblemáticas que utilizan el término o concepto de agroecología

(modificado de Gliessman, 1998; no todas las publicaciones se citan en la Referencia
sección).

Año Autor(es) Título

1928 Klages Ecología de cultivos y geografía ecológica de cultivos en el

plan de estudios agronómico
1939 Hanson Ecología en la agricultura
1956 Azzi Ecología agrícola
1965 Tischler Agrokología
1973 Janzen Agroecosistemas tropicales
1974 Harper La necesidad de centrarse en los agroecosistemas
1976 cerraduras Surgimiento de la investigación sobre agroecosistemas
1977 Hernánez Xolocotzi Agroecosistemas de México
1978 Gliessman Agroecosistemas y tecnología agrícola tradicional
1979 ciervo Agroecosistemas: conceptos básicos
1979 Cox y Atkins Ecología agrícola: un análisis de la producción mundial de alimentos
sistemas
1980 ciervo agroecosistemas
1981 Gliessman, García & La base ecológica para la aplicación de métodos tradicionales.
Amador tecnología agrícola en el manejo de bosques tropicales
agroecosistemas
1982 Montaldo Agroecología del trópico americano
1983 Altieri Agroecología
1984 Lowrance, Stinner y Ecosistemas agrícolas: conceptos unificadores
Casa

1985 Conway Análisis de agroecosistemas

1987 Altieri Agroecología: la base científica de la agricultura alternativa
1990 Allen, Dusen, Lundy, Integrar cuestiones sociales, ambientales y económicas en
& Gliessman Agricultura sostenible
1990 Gliessman Agroecología: investigar las bases ecológicas de
Agricultura sostenible
1990 Carroll, Vandermeer Agroecología
y Rosset
1990 Altieri y Hecht Agroecología y desarrollo de pequeñas explotaciones agrícolas
1991 Caporali Ecología para la agricultura
1991 Bawden Pensamiento sistémico en la agricultura
1993 Coscia agricultura sustentable
1998 Gliessman Agroecología: procesos ecológicos en sostenibilidad
agricultura
2001 flora Interacciones entre agroecosistemas y zonas rurales
comunidades
2001 Gliessman Sostenibilidad del agroecosistema
2002 Dalgaard, Porter y Agroecología, escalamiento e interdisciplinariedad
Hutchings
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Investigación, revisiones, prácticas, políticas y tecnología 107

Conway (1985) articuló la importancia de basar el análisis de los agroecosistemas en

un estudio interdisciplinario, utilizando casos reales de granjas en un entorno de taller.
El proceso conduce a “un conjunto de preguntas clave acordadas para futuras
investigaciones o, alternativamente, un conjunto de directrices provisionales para el desarrollo”.
Bawden (1991) señaló que los enfoques apropiados de las ciencias naturales, como la
investigación de sistemas agrícolas y el análisis de agroecosistemas, pueden
enriquecerse con métodos de ciencias sociales que exploren las cuestiones cognitivas
en la toma de decisiones de los agricultores.
En la literatura posterior sobre agricultura sostenible existen estrechos vínculos con
la economía, la estructura de la agricultura y las cuestiones éticas de los sistemas
alimentarios. Por ejemplo, Coscia (1993) describió la obligación ética o moral de cada
generación de preservar los recursos naturales no utilizados por sus antepasados y de
brindar al menos las mismas oportunidades a sus hijos y a las generaciones venideras.
Una serie práctica de guías de campo para agricultores y estudiantes comenzó con
Michigan Field Crop Ecol­ogy (Cavigelli et al., 1998), un conjunto que pronto incluirá un
volumen sobre los vínculos sociales/políticos y el contrato social. Interacciones entre
agroecosistemas y comunidades rurales (Flora, 2001) ilustra el aumento de la conciencia
sobre las conexiones con la comunidad humana y el capital humano. El pensamiento
integrador es central en los escritos actuales sobre agricultura sostenible, y quienes
participan en la enseñanza de la agroecología deben estar al tanto de los nuevos
programas de investigación y educación en este campo relacionado.

Dalgaard et al. resumen la importancia de los enfoques interdisciplinarios y la

incorporación de la metodología de los sistemas sociales en la investigación y la
educación. (2002). En su artículo, se presenta un caso convincente para ampliar la
aplicación de principios ecológicos utilizando una jerarquía de escala para comprender
la complejidad del sistema de producción. Este enfoque es similar al utilizado por
Gliessman (1998). Se sugiere que la agroecología es la disciplina lógica para integrar
disciplinas y diferentes niveles de escala. Los métodos de las ciencias naturales se
pueden utilizar para describir las herramientas de apoyo a las decisiones que informarán
el diseño de una agricultura ecológicamente racional, mientras que los métodos de las
ciencias sociales se pueden utilizar para integrar las dimensiones humanas y ayudarnos
a comprender mejor el sistema total.

TEXTOS Y MATERIALES DE RECURSOS

El texto Agroecología del Trópico Americano (Montaldo, 1982) fue publicado por el
Instituto Interamericano de Cooperación Agrícola (IICA) y difundido ampliamente a través
de sus oficinas en todo el hemisferio occidental. Cursos en Italia, especialmente en la
Universidad de
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108 REVISTA DE AGRICULTURA SOSTENIBLE

Tuscia en Viterbo, han utilizado el texto de Fabio Caporali (1991), Ecologia

per L'Agricoltura: Teoria e Pratica, durante la última década. Ellos principalmente
abordar el proceso de producción y combinar la agricultura con la ecología.
Escritos de Miguel Altieri durante las últimas dos décadas (por ejemplo, Altieri,
1983, 1987; Altieri y Hecht, 1990) reflejan una fuerte preocupación por la
Cuestiones de equidad en la agricultura. En su investigación, enseñanza y asesoramiento
de posgrado, Altieri ha integrado las preocupaciones sociales de la escala agrícola, la mano
de obra agrícola y la equidad de beneficios en los estudios técnicos de MIP y
sistemas agrícolas integrados. El texto de Gliessman (1998) es probablemente
el más utilizado en los EE. UU. en este momento, y su referencia editada
El volumen es ampliamente citado en la literatura (Gliessman, 1990). el tambien tiene
publicó un manual de campo y laboratorio para la enseñanza de la agroecología
(Gliessman, 2000). La serie de libros editada por Clive Edwards y publicada por CRC Press
proporciona información y antecedentes adicionales sobre
muchas dimensiones de la agroecología (por ejemplo, Buck et al., 1999; Collins y Qualset,
1998; Flora, 2001; Gliessman, 2001).

CURSOS Y PLAN DE ESTUDIOS EN AGROECOLOGÍA

La agroecología tiene su fundamento tanto en la ecología como en la producción.

agricultura, así como otras disciplinas específicas. Por lo tanto
El desarrollo de programas educativos depende en gran medida de la
Componentes que ya son bien conocidos e incluidos en muchos cursos.
en el currículum convencional. La agroecología, la ecología de los sistemas alimentarios,
proporciona una plataforma para la integración de numerosos y complejos
elementos del sistema con los objetivos de comprender las estructuras y funciones de los
sistemas, cómo mejorar su diseño para más
producción sostenible, de largo plazo e integración de objetivos de seguridad
y equidad en los alimentos para el futuro. La educación debe cambiar el énfasis de
enseñar cómo maximizar la producción de un solo cultivo en un entorno descontextualizado
con acceso ilimitado a combustibles fósiles, hacia una alimentación
Nivel de sistemas donde se reconoce el entorno natural y la sociedad.
en toda su complejidad. Consideramos cada vez más importante vincular métodos de las
ciencias naturales y sociales al diseñar una educación que satisfaga
estos objetivos.
Programas en México: La importancia de la base ecológica de
La agricultura ha sido durante mucho tiempo el énfasis de los programas educativos de
varios programas de pregrado y posgrado en México. Al principio
de los años 1970, estudios pioneros en la Escuela Nacional de Agricultura de
Chapingo (UACh) enfocado en la agricultura tradicional de México
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Investigación, revisiones, prácticas, políticas y tecnología 109

campesinos (campesinos). Los cursos de posgrado en etnobotánica desarrollaron las ideas

que llevaron a una reunión nacional “Agroecosistemas de México” en 1976 (Hernández X.,
1977), y a una convocatoria posterior para cursos de etnobotánica.
instituciones agronómicas a nivel nacional que abordaron los problemas ecológicos,
económicos y sociales que enfrentan los agroecosistemas y los agricultores mexicanos.
Este enfoque fue revisado en una serie de publicaciones recopiladas.
(Hernández X., 1985, 1987).
El Departamento de Ecología del Colegio Superior de Agricultura
Tropical (CSAT) en Tabasco ofreció cursos de ecología, agroecología,
y agroecosistemas tropicales, enfatizando los valores de las tradiciones
agroecosistemas (Gliessman, 1978). Aprendizaje en aula y laboratorio.
se aplicaron a través de un semestre de residencia a tiempo completo en una comunidad
agrícola local, mostrando a los estudiantes cómo un enfoque agroecológico
podría vincular la ecología de los sistemas alimentarios con la realidad socioeconómica
que están experimentando los agricultores. La agroecología en un contexto cultural fue
proporcionado por el Programa de Posgrado en Antropología de la Universidad
Iberoamericana en la Ciudad de México (González Jácome y Del Amo, 1999).
Después de un curso corto intensivo en agroecología tropical en 1989 en el
Colegio de Postgraduados en Tabasco (el antiguo CSAT) y un simposio internacional sobre
agroecología en 1990 (Ferrera­Cerrato y
Quintero L., 1993), se formó un Departamento de Agroecología y un pleno
plan de estudios inaugurado en 1991. Se hace hincapié en la educación basada en la ecología.
procesos y prácticas de producción, con cursos adicionales requeridos en
componentes económicos, sociales y culturales de la agricultura sostenible. En
diez años, 130 estudiantes se han graduado y se han convertido en los catalizadores de
programas y planes de estudios de agroecología en todo México.
Programa de la Universidad de California Santa Cruz (UCSC): El primero
El curso dedicado específicamente a Agroecología en la UCSC se ofreció en
1981 como parte del Programa de Estudios Ambientales, y poco después se inició el Programa
de Agroecología (ahora Centro de Agroecología y Sistemas Alimentarios Sustentables). Un
objetivo principal del curso es
Se ha desarrollado y monitoreado indicadores de sostenibilidad agrícola. La preocupación por
incorporar las dimensiones económicas y sociales de los sistemas de producción agrícola se
refleja en el último capítulo.
de Agroecología, titulado “De la Agricultura Sostenible a la Agricultura Sostenible
Sistemas alimentarios” (Gliessman, 1998). Se anima a los estudiantes a aventurarse
más allá del resultado económico convencional para considerar los impactos de
agricultura en el entorno más amplio, la influencia de la agricultura
política y las complicaciones de cómo el pensamiento y las decisiones a corto plazo
influir en el rendimiento del sistema a largo plazo. La sostenibilidad del sistema alimentario es
visto como algo más que una reducción de pesticidas y fertilizantes químicos, sino
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110 REVISTA DE AGRICULTURA SOSTENIBLE

más bien como involucrar la equidad de productos y beneficios y cómo alternativas

Los sistemas afectan la dieta y la salud.
El énfasis en Agroecología y Agricultura Sostenible en Estudios Ambientales en la UCSC
se ha expandido y florecido. Los cursos tienen
Se han agregado métodos que promueven métodos ecológicos de control de plagas y
enfermedades, así como enfoques de conservación de recursos para el diseño de
sistemas de producción. Otros cursos promueven el conocimiento y la incorporación de los
aspectos económicos, sociales y culturales del agroecosistema.
sostenibilidad. Experiencias de pasantías de campo en comunidades agrícolas
se ofrecen como parte del programa.
Especulamos que introducir la agroecología en los planes de estudio agrícolas
Es un gran desafío para muchos científicos y educadores convencionales, reduccionistas y
orientados a las disciplinas. Los especialistas agrícolas se sienten más cómodos tratando
con componentes de sistemas, simple causa­efecto.
relaciones y preguntas que pueden responderse mediante diseños experimentales estándar
(Francis et al., 2001). La agroecología debe involucrar enfoques interdisciplinarios, y estos
amenazan la autonomía y los presupuestos.
de nuestros departamentos disciplinarios. Es intrigante observar el desarrollo de la
agroecología en la UCSC en una universidad de artes liberales que no concede tierras.

Modelo nórdico de agroecología: una definición amplia de agroecología es

utilizado para definir cursos en NOVA University (Francis et al., 2001;
Lieblein, 1997; Lieblein et al., 1999, 2000). Los cursos “desafían el
metáfora convencional de la cadena alimentaria con su carácter unidimensional y lineal.
vinculación entre los componentes. En contraste, un programa local enfatiza
toda la red de factores ecológicos (energéticos y materiales), económicos,
y los vínculos socioculturales (roles de los actores, información, comunicación) 'verticalmente'
desde la producción hasta el procesamiento, los mercados y las comunidades que
consumen los bienes, y su interdependencia” (Francis et al.
otros, 2001).
El grupo de trabajo regional de NOVA en agricultura ecológica patrocinó una serie de
cursos titulados “De los sistemas agrícolas a los sistemas alimentarios” (Lieblein, 1997) que
centraron el aprendizaje en las actividades de los estudiantes en el
campo, explorando y describiendo recursos naturales, prácticas de producción
y potenciales, procesamiento, marketing y preocupaciones del consumidor en el
Región de Hedmark en el centro­sur de Noruega. Una descripción de estos cursos
modulares se encuentra en Lieblein et al. (1999). En estos cursos tenemos
Principios aplicados del aprendizaje activo resumidos por Schubert (1995).
El grupo de trabajo NOVA dirige actualmente una investigación regional
y proyecto educativo, “Mejorar la educación de la región nórdica en
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Investigación, revisiones, prácticas, políticas y tecnología 111

Agroecología”. El objetivo es desarrollar una didáctica agroecológica para la

región (Lieblein y Østergaard, 2001).
El actual programa de maestría en agroecología de NOVA University está diseñado
como un plan de estudios de dos años que incluye un proyecto de tesis práctica.
El estudio incluye cursos en Agroecología y Sistemas Agrícolas y Agroecología y Sistemas
Alimentarios en Noruega, y Gestión Adaptativa en
Suecia. En general, estos cursos (1) establecen su enfoque en un sistema
nivel en las granjas y en el paisaje más amplio, (2) observar los sistemas de una manera
interdisciplinaria, integrando las ciencias naturales y sociales, (3) manejar
el sistema como abierto e interactivo, y (4) utilizar el aprendizaje experiencial como
base pedagógica para la comprensión de sistemas complejos y el aprendizaje­acción como
punto de partida en el campo. Utilizando la agricultura ecológica y
sistemas alimentarios como alternativa al sistema actual, desarrollan
visiones para un futuro, un sistema alimentario sostenible y planes de acción sobre cómo
ir allí. Los cursos utilizan la agricultura ecológica como enfoque de estudio de caso debido
a su creciente importancia en Europa y otros lugares.

INTEGRACIÓN EN LA CORRIENTE PRINCIPAL DE EE. UU.

Altieri y Francis (1992) exploraron cómo la agroecología podría integrarse en el plan de

estudios agrícola dominante en nuestro sistema de concesión de tierras, instando a los
educadores a incluir temas que vinculen los sistemas de producción con
sistemas económicos, culturales y políticos, y estudiar cómo las políticas pueden
influyen fuertemente en las prácticas y los impactos de la agricultura.
Hoy en día, los cursos de agroecología se encuentran con mayor frecuencia en departamentos de
agronomía o ciencias biológicas y enfatizar la ecología de la producción.
Se centran en las dimensiones de la ecología si las enseña un ecólogo, o en
Detalles de producción si los enseña un agrónomo. No sólo reflejan la
antecedentes y disciplinas de quienes imparten la enseñanza, sino también de sus
departamentos y los estudiantes que se sienten atraídos por los cursos. Varios
Los ejemplos se enumeran en un compendio de materiales educativos (King
y Francisco, 1994).
En la Universidad de Nebraska, la Agroecología es un curso culminante en el
Departamento de Agronomía y Horticultura. Su énfasis en el ecosistema de pastizales de
las Grandes Llanuras presenta la estructura y función del
pradera, clima y tiempo, y comparaciones de condiciones naturales y gestionadas.
ecosistemas. Procesamiento de alimentos y sistemas alternativos de comercialización local.
se comparan con el sistema alimentario mundial. La Ecología Agrícola de la Universidad
de Maine utiliza una evaluación rural rápida dentro del amplio contexto social de los
sistemas. Uso de ideas indígenas, biodiversidad, manejo de plagas,
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112 REVISTA DE AGRICULTURA SOSTENIBLE

y cultivos de cobertura son temas específicos, mientras que la industrialización, las políticas y
La ética y los valores humanos hacen de este uno de los cursos más diversos en la actualidad.
disponible.
La Universidad Estatal de Iowa (ISU), la Universidad de Minnesota y la Universidad de
Nebraska ofrecen Análisis de Agroecosistemas como viaje de verano
curso que utiliza visitas a granjas para proporcionar una base para el análisis de la producción,
Economía, impactos ambientales y paisajísticos, y viabilidad social.
de prácticas y sistemas alternativos (Wiedenhoeft et al., 2002). DAA
También inició nuevos programas de maestría y doctorado en agricultura sostenible en
Otoño de 2001. Agroecología es un nuevo curso en la Universidad Estatal de Carolina del Norte
que será parte de una especialización interdisciplinaria propuesta. En el
En este curso residencial de ocho semanas de duración, Aprendizaje experiencial en agricultura
sostenible, las conferencias se complementan con experiencia práctica en producción, marketing,
extensión e investigación en el campo. Este curso incluye
una semana que se centra en la integración de las dimensiones sociales de la sostenibilidad
agricultura.
Estos cursos están fuertemente dirigidos a los procesos ecológicos en
patrones de cultivo específicos y las comparaciones entre la agricultura convencional y la
alternativa. Incluyen los impactos económicos y ecológicos de
así como la atención a los impactos sociales de los sistemas en las familias.
Sólo en un curso se presenta la política agrícola como un tema importante en el
cronograma. Los cursos ilustran las ofertas actuales en agroecología en EE. UU.
universidades, e incluyen un tratamiento limitado de los complejos pasos de
procesamiento, comercialización y consumo de alimentos que generan ineficiencias y costos en
la cadena alimentaria global. Del mismo modo, se presta una atención desigual a las múltiples y
complejas cuestiones de la producción biológica, la economía en diferentes niveles de escala
geográfica y la conducción de la producción biológica.
fuerzas como las nuevas biotecnologías, la movilidad de capitales y los mercados globales, y
eventuales presiones debidas a desigualdades en la distribución de beneficios.
Definir la agroecología como la ecología de los sistemas alimentarios ayudará a
Ampliar la perspectiva educativa en futuros cursos.

CERRAR EL CICLO: EDUCAR AL CONSUMIDOR

La agroecología debe involucrar a todas las partes, desde los científicos hasta los productores
al procesador, al comercializador y al consumidor, si el objetivo es basar nuestro sistema
alimentario en fundamentos científicos que puedan manejar la complejidad y el cambio.
Aunque se ha sentado gran parte del trabajo preliminar para los programas, existe una
La participación de los consumidores suele faltar. Sólo cerrando tal
incluir al consumidor, ¿se completará el ciclo agroecológico?
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Investigación, revisiones, prácticas, políticas y tecnología 113

completado. En particular, necesitamos llamar la atención de los consumidores tanto urbanos como
suburbanos. Aquellos de nosotros con experiencia enseñando a estudiantes universitarios.
observar que los estudiantes están insuficientemente informados o desinformados sobre el sistema alimentario,
especialmente desde una perspectiva ambiental y de salud. Esto es igualmente
evidente en la mayoría de los grupos comunitarios. Las sociedades modernas están organizadas.
en torno a los combustibles fósiles como fuerza impulsora. Como impactos de los sistemas actuales.
comenzar a amenazar la base de soporte vital, el interés aumentará en menos
recursos energéticos densos, naturales y contemporáneos. Esto aumentará
interés público en las zonas rurales y paisajes agrícolas, y hacer que la
mensaje más aceptable para el público urbano y los estudiantes.
Es necesario que más consumidores comprendan las conexiones entre la agricultura, sus
alimentos, su salud y su medio ambiente. Para llegar a ellos nosotros
Es necesario enfatizar los beneficios para la salud personal y el medio ambiente.
ellos y sus familias que se ofrecen a través de una mejor comprensión de
el sistema alimentario. Estudiantes y público en general sí conectan con la salud
cuestiones como los beneficios de la fibra procedente de verduras y frutas, o la relación entre
pesticidas y cáncer. Una vez informados, son receptivos.
a información sobre los sistemas alimentarios locales, incluidos los huertos comunitarios,
puestos agrícolas, abono, productos orgánicos y agricultura apoyada por la comunidad, así como
funciones y servicios ecosistémicos más complejos, como
como humedales para agua limpia, cortavientos para aire limpio, suelos intactos que
no se erosione y el oxígeno de las plantas verdes. Los consumidores querrán
aprender más sobre su suministro de alimentos y el paisaje rural y, en última instancia, querrán
información y opciones del sistema que un
el enfoque agroecológico puede proporcionar.
Los productores y procesadores de alimentos orgánicos ya han tenido éxito
en hacer llegar información al público sobre las etiquetas certificadas que identifican sus productos
en el mercado, así como realizar conexiones directas
en venta de la finca. Así como los grupos de productos básicos han promovido su
cultivo o producto animal específico, los productores y procesadores orgánicos tienen
llevó a cabo campañas de educación pública utilizando tarifas y contribuciones de los agricultores.
Un resultado es que los productores se benefician del precio superior que los productos orgánicos
traerán al mercado, aumentando así los ingresos.
haciendo avanzar sus productos etiquetados. Las ventas de alimentos orgánicos han aumentado
en aproximadamente un 20% anual durante más de una década en EE. UU. y Europa
(Lampkin, 1999).
El énfasis en la educación del consumidor debe incluir explicaciones de
cómo los enfoques ecológicos utilizados por los agricultores sostenibles pueden producir
alimentos sin pesticidas y con alternativas a los fertilizantes químicos,
protegiendo al mismo tiempo el ecosistema y produciendo alimentos sanos y seguros para
consumidores. El agricultor puede ser retratado como un administrador ambiental.
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114 REVISTA DE AGRICULTURA SOSTENIBLE

quien también se preocupa por la salud del consumidor, un aliado del consumidor que ha
realizado cambios en las prácticas agrícolas para lograr estos múltiples objetivos. Se puede
afirmar a los clientes cuando toman la decisión de comprar alimentos producidos de esta
manera. Una mayor educación sobre cómo se producen los alimentos, dónde, quién y bajo qué
condiciones reforzará sus decisiones. Encuestas realizadas en Noruega han demostrado que
los consumidores que compran regularmente alimentos ecológicos también están preocupados
por el uso general de pesticidas y fertilizantes, por el bienestar animal y por las condiciones de
los agricultores y las familias donde se producen los alimentos (Torjusen et al., 2001). Cuando
la agroecología estudia todo el sistema alimentario, estas cuestiones de opinión y elección de
los consumidores son parte de la ecuación.

CONCLUSIONES

Hemos definido la agroecología como el estudio de todo el sistema alimentario, que abarca
tanto las ciencias naturales como las sociales, y enfatiza el pensamiento sistémico y los
principios ecológicos. Basándonos en nuestra experiencia colectiva en la enseñanza y la
investigación, nos resulta imposible abordar eficazmente la complejidad del uso de recursos y
el diseño de sistemas futuros si sólo nos centramos en los aspectos de producción, la economía
a corto plazo y los impactos ambientales en el inmediato. proximidades de campos de cultivo.
Es lógico sugerir que la agroecología debería ocuparse de todos los actores de los sistemas
alimentarios, así como del flujo total de energía y materiales desde sus fuentes a través de la
producción y otros pasos hasta el consumidor, y el potencial de devolver nutrientes al campo.
Es esencial analizar cuidadosamente el actual sistema alimentario global y explorar alternativas
locales, así como opciones únicas como la agricultura orgánica. Los conceptos de agroecología
también se pueden aplicar para mejorar los sistemas agrícolas convencionales.

Richard Harwood (comunicación personal, 2001) describe las fuerzas que están dando
forma a la dinámica del desarrollo y la situación alimentaria mundial emergente en este nuevo
siglo. Enumera las fuerzas impulsoras como las nuevas tecnologías, la movilidad de capitales
y personas, los mercados globales y una infraestructura cada vez más dominada por
corporaciones multinacionales. En la agricultura, algunas de las fuerzas suplementarias que
darán forma al futuro incluyen la recolección y manipulación de germoplasma, nueva información
sobre genómica y programas dinámicos de mejoramiento de nuestros principales cultivos
básicos. Las fuerzas correctivas son aquellas invocadas por los gobiernos e incluyen políticas
globales, regionales y nacionales, así como la supervisión internacional del comercio, la gestión
de monopolios y la legislación que protege el medio ambiente.

Harwood enumera las fuerzas sustentadoras como investigación en ecología de la producción,

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Investigación, revisiones, prácticas, políticas y tecnología 115

protección efectiva de los recursos naturales, tecnologías apropiadas y sistemas alimentarios

locales, y una acción firme por parte del sector civil. Enfoque limitado en
tecnologías específicas para aumentar la producción de alimentos o resolver problemas
ambientales locales pueden ayudar a algunos agricultores, pero proporcionarán poco
dirección significativa sobre cómo diseñar sistemas eficaces y sostenibles para el futuro.
Una nueva definición de agroecología proporciona una justificación y aporta recursos
intelectuales para centrarse en algunos de los aspectos más importantes.
Cuestiones difíciles y complejas que desafían nuestra capacidad de proporcionar un
suministro estable de alimentos para el futuro indefinido.
La mayoría de los educadores involucrados en agroecología y agricultura sostenible.
Creemos que un análisis reflexivo de las implicaciones económicas y los impactos a largo
plazo de los sistemas alternativos nos ayudará a resolver las complejidades del uso de
recursos y los impactos ambientales que resultan de los sistemas alternativos de
procesamiento de alimentos y agricultura. Una evaluación amplia de
productividad, retorno económico, impacto ambiental y equidad social
que cuantifica las múltiples consecuencias de los sistemas alimentarios alternativos
puede ayudar a estudiantes e investigadores a formular las preguntas pertinentes, interpretar
los resultados, y aplicar esta información al diseño de agroecosistemas productivos y
sostenibles. Además, será imposible lograr avances sustanciales a menos que reconozcamos
también la importancia de la literatura,
filosofía, ética y otras reflexiones de la cultura que ayudan a explicar la
singularidad del lugar, incluidas las personas y los recursos. para presentar esto
concepto a una audiencia estudiantil más amplia, instamos a un diálogo continuo tanto
la definición de agroecología y el desarrollo de enfoques innovadores para el uso de
recursos y sistemas alimentarios para el futuro en nuestras facultades y universidades
agrícolas de todo el mundo.

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RECIBIDO: 27/09/01
REVISADO: 10/06/02
ACEPTADO: 11/07/02