Está en la página 1de 85

RESUMEN DE PSICOLOGIA EVOLUTIVA II

EJE I: La adolescencia como un fenomeno multideterminado


1.1. La psicologia del desarrollo. El concepto del ciclo vital y la adolescencia como parte del mismo.
1.1- GRASSI, y CORDOVA, N. (2010) "La primavera del significante", En "Entre niños, adolescentes y
funciones parentales". Buenos Aires: Entreldeas.
Introduccion; Los adolescentes y los significados de su tiempo
A partir de la década del 50 acompañando a los profundos movimientos sociales de posguerra el fenómeno
denominado “adolescencia” se acelera y expande es decir los propios adolescentes comienzan a diferenciarse
y crear signos de una cultura propia. El contexto social epocal de los años 50 y 60 es el espacio tiempo en que
la juventud de posguerra toma conciencia de sí misma y pone en crisis des-ordena y cuestiona lo socialmente
establecido
La relacion significante/adolescencia. Etimologia e historia
El término adolescencia ha debido recorrer un largo camino, el significante adolescencia arriba a la actualidad
con una notable eficacia simbólica esto es la capacidad potencial de producir nuevos efectos de sentido
Los vocablos adolescencia y adolescente tienen su raíz latina en el verbo adolescere, el cual está compuesto
por el prefijo ad- y el sufijo -scere, qué denota el principio de una acción progresiva “comenzar a crecer, estar
creciendo”, adolescente deriva de adolescens-entis, que significa “el que esta creciendo”.
Adolescencia proviene de la raíz originaria al-r qué significa “acrecentar, elevar o mover hacia arriba,
levantar, alzar”
Con el transcurrir del tiempo al-r derivó en la voz latina alere “nutrir, alimentar, criar” para dar lugar después
a alescere “crecer aumentar de tamaño”, posteriormente alescere con la unión del prefijo ad- dio origen a
adolescere “crecer desarrollarse”.
En los dos últimos siglos el término adolescencia se fue extendiendo y adquiriendo una vigorosa presencia en
las distintas lenguas de la cultura occidental coincidiendo con la notoria emergencia de “lo adolescente” en la
escena social
Lo adolescente y las inquietantes figuras de alteridad
La adolescencia es un puro devenir con sus sentidos de cambio transformación acontecer y transcurrir. Crecer
es un proceso de subjetivación, lo adolescente arriba a la posmodernidad con un bello mascarón de proa
portando el admirado fuego sagrado de la nueva generación junto con la inquietante extrañeza de la alteridad
condición o capacidad de ser otro distinto
El significante adolescencia connota para el mundo adulto el amenazante sentido de enunciar el advenimiento
del recambio generacional, los adolescentes al crecer agitan los aspectos de las tres figuras de la alteridad, el
extranjero, la muerte y la sexualidad
Una sustraccion de sentido; adolecer
El autor realiza una crítica a cómo era asociado a través de la historia esta etapa planteando que esto genera
una falsa relación del término adolescencia con adolecer, que ha venido a significar carecer, faltar algo y que
se lo hace derivar de dolesco; afligir, dolerse, caer enfermo
Los autores plantean que esta errónea definición tiende a negativizar los sentidos de la voz adolescencia
contribuye al malentendido a desmentir el potencial transformador y creativo de los adolescentes
Tomando lo planteado por Winnicott con su confianza en el potencial creativo del crecer adolescente, que
significa generar las condiciones para esa puesta en juego de esa potencialidad
Dado que no puede admitir el desorden como condición para los procesos saludables, se intentará mutilarlo o
segregarlo como anómalo atípico o perturbador

1
Es más tranquilizador calificar el desorden que la adolescencia promueve como dolencia sufrimiento o
carencia qué pensarlo como condición necesaria facilitadora de los procesos de subjetivación de una
generación aun vulnerable intentando arribar y hacerse un lugar en el mundo adulto
Adolescencia; la primavera del significante
Grassi sostiene que los procesos puberal y adolescente se ponen en juego en lo que denomina “el entretiempo
de la sexuación”, afirma que la adolescencia es urgencia de transformar y crear, es puesta en desorden del
cuerpo de la identidad infantil del orden familiar y la posición generacional
La urgencia de transformar(se) y crear(se) y el imprescindible empuje a la puesta en desorden de sí y del
contexto se verifican también en el campo del lenguaje
Los adolescentes necesitan recurrir a significantes propios, a veces ineditos para apalabrar e inscribir ese
íntimo acontecimiento y subjetivarlo
La primavera del significante
Con esta finalidad para des-ordenar las convenciones de lenguaje adulto y des-alienarse de los significantes
parentales del tiempo de la infancia, que no dan respuesta, ni les permiten expresar sus intimas, ineditas e
inexplicables vivencias
Para apropiarse de los recursos del lenguaje debe recurrir a su creatividad no exenta de hostilidad para
transgredir los codigos preestablecidos y explorar nuevas palabras y sentidos
Durante el entretiempo de la sexuacion se ponen de manifiesto novedosas y cripticas formas de expresion
grupal, de apariencias meramente oposicionistas.
El adolescente no cuenta aún con un “discurso apropiado” (aun no se ha apropiado de un discurso) está en
proceso de desasimiento y desalienación del otro parental, debe entonces crear recursos expresivos en la
grupalidad para representar ciertos estados emocionales: “Bolu, estoy re heavy”
No suele encontrar en el adulto la escucha que le otorgue legitimidad y sentido a esos estados para poder
figurarlos y ligarlos,
Cuando el adolescente no puede decir en palabras ni expresar con el cuerpo, la actuación como intento de
poner el cuerpo donde falta la palabra y la escucha precisa, es pensable como un intento de inscripción
subjetivante y puesta en escena dirigida al otro parental
Los adolescentes deben establecer una novedosa relación con las palabras desacralizarlas poniendo al
descubierto su vaciamiento y empobrecimiento devolviéndole un novedoso valor significante
Una operación característica “en” la adolescencia es la manipulación de sílabas y fonemas, creando
acortamientos aveces originales, alterando la escritura o pronunciación de las palabras sin modificar su
significado: “Na bolu”
Los adolescentes crean sus propias maternas, con los que intentan formular y transmitir aquello no expresable
por medio de las palabras a su alcance,
Se trata de un momento creativo de puesta en desorden y apropiación de un lenguaje al que han permanecido
sujetados y alienados
“La adolescencia es la primavera del significante” sus delicadas y bellas floraciones caeran con el tiempo,
probablemente, tambien el caracter incondicional del grupo y las primeras experiencias amorosas,
exploraciones en y desde el otro, que dejaran sus poeticas e indelebles escrituras en el cuerpo, decisivas para
su subjetivacion
El fruto será el cavado de un ínfimo lugar propio en el orden simbólico, habiendo previamente jugado con él y
desafiado sus leyes, apropiarse del lenguaje le permitirá intentar materializar sus deseos y decir algo en
nombre propio, dejando la impronta de su paso en el lenguaje adulto

2
GRASSI, A. CORDOVA, N. (2010) "Adolescencia: reorganización y nuevos modelos de subjetividad.
En "Entre niños, adolescentes y funciones parentales". Buenos Aires: Entreldeas.
El des-orden
Reorganización implica que un orden o “estado de la cosa” es cambiado, transformado por reacomodamientos
reordenamientos por des-orden de lo existente, la incorporación de nuevos elementos des-ordena lo
establecido dando lugar a organizaciones neo (nuevas)
En 1o que a produccion subjetiva y adolescencia se refiere, desorden no es una mera oposición a orden ni
dicho des-orden aparece como descuido desgano negativismo, o rebeldía adolescente (aunque todo esto pueda
estar presente en alguna medida), des-orden no es producto de una mera carencia del sujeto ni deviene por
“evolución natural” del desarrollo, des-orden es meta a alcanzar mediante un esfuerzo de trabajo psíquico y su
realización comporta un rédito positivo en la producción de subjetividad
Lo puberal- Lo adolescente
En su devenir la subjetividad trabaja la adolescencia produciendo transformaciones, estos trabajos implican un
potencial saludable (no siempre desarrollado) de cambio. Lo puberal-adolescente al encontrar condiciones de
desarrollo, es una puesta en des-orden del statu quo promotor de neo-organizaciones
Siendo que desorden reorganización y neorganizaciones aparecen ante la incorporación de lo nuevo, de lo
distinto de lo hetero, lo puberal-adolescente trabaja para su incorporación y homogenización lo proveniente de
distintas fuentes;
● un campo intrasubjetivo cómo son los cambios corporales y las vicisitudes de la historia personal
● un campo de intersubjetividad que abarca las relaciones familiares al conjunto de los coetáneos y un
círculo más amplio con quienes se comparte un periodo histórico político social
● un campo que vía transmisión generacional de la vida psíquica toma una dimensión trans subjetiva que
conecta con las generaciones precedentes
Puntualizamos distintos elementos heterogeneos a metabolizar en este periodo;
1. Crecimiento y desarrollo que jaquean la identidad
Los cambios corporales relativos al desarrollo y nuevos funcionamiento endocrino y hormonal, que producen
el crecimiento del cuerpo y la aparición de los caracteres sexuales secundarios, imponen al psiquismo un
trabajo de simbolización, la maduración biológica (bruscos cambios de estatura peso y proporciones
corporales aparición de vellosidad cambios de voz etcétera) que irrumpe en ambos sexos entre los 12 y los 16
continuando durante varios años, replantean en simultáneo las identidades enraizadas a lo somáticos, a la vez
el crecimiento del aparato genital, la maduración de sus órganos sexuales internos y externos (producción de
líquido seminal, la ovulación y la llegada de la menstruación el desarrollo de los senos aparición de vello
pubiano) son elementos que anuncian al psiquismo un trabajo de metabolización de las diferencias de género
sobre el desarrollo de la identidad sexual, la maduración biológica con todo este nuevo funcionamiento
endocrino y hormonal, el crecimiento corporal con su transformaciones y metamorfosis son la materia prima
lo hetera a metabolizar
Los cambios corporales piden revisita de la imágen especular, un nuevo pasaje por el estadio del espejo como
formador de la funcion del yo
Es común en los años de pubertad y adolescencia la aparición de fenómenos de alteración de funciones
corporales, tales como trastornos digestivos y alimentarios, las alteraciones de los ritmos del sueño, trastornos
corporales producidos por el exceso en la ingesta de bebidas alcohólicas y otras sustancias, las actuaciones
sobre el terreno de lo corporal con autoagresiones y automutilaciones, las diversas marcaciones (voluntarias e
involuntarias) sobre la superficie de la piel, la aparición de enfermedades psicosomáticas, fenómenos
conversivos y angustia hipocondriaca. Todos estos desarreglos funcionales acompañados además de temores,

3
cuando no terrores referidos a lo corporal y sus limites, son una muestra suficiente para dimensionar que la
subjetividad requiere de trabajos de integración psicosomática
La subjetividad demanda encontrar nuevos ordenamientos re-ordenar, des-ordenar las relaciones del cuerpo
infantil con la propia historia con los padres de la infancia con la infancia de los padres con su lugar en el
circuito de deseo familiar.
Demanda replantear las identificaciones infantiles enraizadas en lo somático y en la familia, se requieren
nuevas organizaciones que signifiquen, que den sentido al crecimiento y la genitalidad.
Los trabajos de duelo en la adolescencia son paradojales, el fin de la infancia requiere de una caída una
muerte pero a la vez de una conservación superadora, transformación de lo infantil, algo se pierde pero los
referentes simbólicos de la identidad son resignificados (nombre, apellido, filiación, pertenencia a un sexo, a
un grupo de origen, a una generación). Los nexos con el cuerpo de la infancia, con la historia de elecciones
libidinales y de la relaciones objetales familiares, con la genealogia entran en un proceso de resignificación e
historización aun incierto en cuanto a su devenir y que se inicia con los procesos adolescentes
2. Los dos tiempos o fases de la sexuación (y el entretiempo)
Respecto a estos dos tiempos o formas de la sexuacion, nuestra proposicion; Lo puberal-adolescente es el
entretiempo de la sexuación en la medida en que la culminación de la sexualidad (infantil) no se produce (si es
que alguna vez lo hace) autonomicamente y deviene en su conformacion normal definitiva (adulta), requiere
de estaciones de recambio de su identidad infantil, de des-orden del cuerpo, del objeto familiar del
reposicionamiento generacional, entre re-edición y repetición, lo puberal-adolescente tiene urgencia de
transformar y crear, urgencia por la inscripción de un cuerpo que conlleve una identidad diferenciada de lo
infantil, de lo conocido y parental con rasgos originarios y que contenga el deseo genital ligado a un objeto
no-familiar
Entre repetición de lo viejo e inscripción de lo nuevo, lo puberal adolescente demanda un proceso
identificatorio que se debate entre principio de permanencia y principio de cambio
Lo puberal-adolescente es ese entretiempo de trabajos específicos, lugar de transformacion e inscripción del
cuerpo (erogeno) pre-genital en cuerpo genital y de objeto familiar en objeto de deseo no-familiar
3. Erotismo genital y hallazgo de objeto alteran lo familiar
En lo que a constitución del cuerpo genital se refiere, señalamos que la iniciación sexual marca un antes y un
después un hito en los procesos de subjetivación el cual no es sin “el otro”, el otro (a la vez par y extraño) en
su función de compañero sexual (opaco ajeno) en presencia (y diferencia) con su participación coadyuva en la
inscripción del cuerpo genital. A la vez que en la inscripción del cuerpo genital coadyuva, y no sin una
profunda angustia, en la inscripción de la categoria misma de la alteridad del objeto. De alli que el objeto sea
extra-familiar,
La inscripción de la radical diferencia del otro sexo abre a la inscripción de las diferencias con el objeto. Con
el coito se inscriben y reinscriben diferencias corporales, de género y desiderativas, el otro se constituye en su
alteridad como sujeto de deseo
4. La sucesion generacional y su reordenamiento
El reacomodamiento que la adolescencia implica por sus posibilidades de fecundación y procreación impone
al psiquismo un trabajo de simbolización de un nuevo emplazamiento generacional.
El potencial pasaje de hijo/a y su proyección como padre/madre, y consecuentemente el pasaje de padres a
abuelos etc., es un corrimiento generacional cuya metabolización implica un deseo de muerte y asesinato de
los progenitores como operaciones simbólicas
Que en la adolescencia se sobreviva al deseo de muerte y asesinato es fundante del pasaje generacional y para
llegar a un nuevo emplazamiento se requiere que lo adolescente simbolice dicha experiencia. Este nuevo

4
emplazamiento generacional simultáneamente implica un nuevo registro de la temporalidad, construirse un
pasado va a posibilitar proyectar un futuro. El devenir en cuanto proyecto identificatorio no es sin ligaduras
con la genealogía, la sucesión generacional, el por-venir y el azar.

URBANO, C. y YUNI, J. (2001) "Y,...no se... "Colección Psicología y Cultura de los


Adolescentes-Editorial Mi Facu.Cap. I y II.
CAPITULO 1. Nombrar la adolescencia
La adolescencia; un fenomeno novedoso para la sociedad y para la ciencia
Recién en el siglo XX aparecieron los primeros estudios sistemáticos sobre la adolescencia en Estados Unidos
y Europa, este hecho se relaciona con el surgimiento de nuevos roles sociales vinculados con la preparación
de los niños para ingresar al mundo adulto. Debemos recordar que en las sociedades antiguas y también
actualmente en diferentes sociedades no occidentales el tránsito de la niñez a la adultez se realiza a partir de
un simple rito de pasaje por el cual al niño se le reconoce comunitariamente su nuevo estatus de adulto y al
mismo tiempo recaen sobre él obligaciones responsabilidades y derechos que estos poseen
Estos pasajes se han vinculado al reconocimiento de la capacidad para ser miembro activo en las tareas de
reproducción social de su grupo, este pasaje sin transicion de roles infantiles a roles adultos hace que los
varones se incorporen a las actividades ligadas a la subsistencia económica cómo ser el cultivo la recolección
la caza o el trabajo en la calle, mientras que a las niñas se les reconoce su función en la reproducción de la
prole y en la realización de tareas domésticas como el cuidado de los niños y tareas del hogar. En estos
contextos el matrimonio de púberes, la participación en el trabajo doméstico y extradoméstico y los
embarazos tempranos han sido y son prácticas sociales corrientes
En las sociedades occidentales en cambio, los procesos sociopolíticos iniciados en el siglo XIX ampliaron el
lapso de tiempo en el que los niños dejan los roles infantiles para adquirir roles adultos, en las sociedades con
cierto grado de desarrollo económico y social se fue configurando un conjunto de roles propios de aquellos
sujetos que aún alcanzando la madurez biológica no se les reconoce la madurez social ni la autonomía para el
ejercicio autónomo para sus funciones sociales, aparece de este modo la adolescencia como transición entre la
niñez y la adultez y como un tiempo social de preparación para el ejercicio de los roles sociales
Las sociedades occidentales han desarrollado un conjunto de significados y sentidos simbólicos es decir un
trabajo de producción cultural que ha generado la aparición de una nueva categoría; la adolescencia, estas
sociedades disponen de un sistema de creencia valores rituales códigos y lenguaje que condensan los
significados que atribuyen a la adolescencia y definen el modo de ser, de sentir y pensar este fenómeno
En las sociedades de Occidente el desarrollo evolutivo de las personas supone el pasaje por este estadio
específico particular y con características propias que es la adolescencia.
Clarificando los sentidos de la palabra adolescencia
Según su acepción etimológica la palabra adolescencia (del latín adolescere) posee dos significados, en un
sentido indica “crecer o desarrollarse hacia la madurez” y en otro “adolecer o faltar algo”, ambos significados
reflejan el sentido de incompletud y del tránsito hacia la adultez, en contraposición encontramos el concepto
adulto, que etimológicamente significa “crecido” y es la referencia que da sentido a la adolescencia
Las metáforas culturales que designan a la adolescencia ofrecen una vision romantica que se manifiesta en
expresiones contradictorias tales como albor de la vida, divino tesoro, que reflejan una vision positiva.
También desde una mirada negativa es reconocida como la edad del pavo, purgatorio de la juventud (Dolto)
Erickson elabora el concepto de moratoria social es decir un tiempo que se les otorga a los no adultos para
aprender nuevos roles sociales ponerlos en juego y optar por aquellos que elija para su desempeño social
como adulto

5
En las sociedades modernas y desarrolladas la entrada a la adultez se asimila a la autonomía financiera y a la
independencia económica, en otras sociedades la entrada a la adultez se vincula a la procreación o a la
inserción en el mundo del trabajo.
Paradójicamente a los adolescentes se los incita al ejercicio de la autonomía de la independencia, aunque la
realidad de los procesos macrosociales dificulta cada vez más esa conquista
Maduros biológicamente e inmaduros socialmente y responsables para el ejercicio de ciertos roles y
sobreexigidos en el ejercicio de otros supuestamente aseguradores del éxito y la proyección cultural.
La adolescencia es el período que va desde la pubertad y que concluye alrededor de los 25 años. Los estudios
muestran que a medida que aumenta el nivel socioeconómico la duración de la adolescencia también aumenta
por el contrario en los grupos de menores recursos la adolescencia es un periodo más breve.
Desde el punto de vista evolutivo la adolescencia es una etapa en la que el sujeto alcanza la adultez, logro que
depende de la trama que se establezca entre los factores psicológicos, los condicionantes del entorno
socio-cultural y los mandatos culturales que en cada sociedad modelan este periodo
Quizás sería provechoso renunciar a una mirada homogénea que nos conduzca hablar de una adolescencia o
del adolescente en general para encontrarnos con las variadas formas de ser adolescentes e identificar la
multiplicidad de “adolescencias” que se presentan actualmente en nuestra sociedad.

CAPITULO 2. La adolescencia en el ciclo vital


La adolescencia es una etapa evolutiva del ciclo vital. Actualmente se entiende el desarrollo evolutivo del
sujeto como el despliegue de las potencialidades emocionales, afectivas, cognitivas y sociales que reconocen
como punto de origen la concepción y como punto de cierre la muerte biológica. El despliegue de esas
potencialidades (posible por la integración que genera la actividad mental del sujeto) requiere de la
interacción dialéctica entre el potencial biológico, los recursos psicológicos, cognitivos, emocionales y
afectivos del sujeto y la concurrencia de los recursos socio-culturales.
Se realiza en un plano temporal en el que los seres humanos experimentan múltiples cambios y diversas
transformaciones en las distintas esferas constitutivas de su existencia. Así,
● La base material, biológica, ligada a la corporeidad experimenta cambios desde el mismo momento de
la concepción hasta su desaparición.
● En la esfera social, el paso del tiempo supone el aprendizaje y ejercicio de diferentes roles y la
realización de múltiples procesos de construcción y reconfiguración de la identidad como sujeto
social.
● En el plano psicológico el paso del tiempo genera cambios en las diferentes dimensiones del
psiquismo: las emociones, la personalidad, la cognición y la afectividad.
Por su parte, la dimensión psíquica es de fundamental importancia puesto que es la que posee la capacidad
para interpretar los cambios en todas las dimensiones y, a la vez, otorga un sentido de unicidad personal más
allá de las transformaciones que acontecen a lo largo de la vida.
Estos presupuestos constituyen la base de la psicologia del desarrollo
La psicologia del desarrollo como ambito de estudio del cambio evolutivo
Durante la primera mitad del siglo predominaron los estudios sobre los primeros años de vida, especialmente
los años correspondientes a la primera infancia y dieron comienzo las investigaciones sobre la pubertad y la
adolescencia.
Las teorías de ese momento pretendían que las etapas evolutivas eran normativas y universales. En otras
palabras, suponían que todos aquellos sujetos cuyo desarrollo entraba dentro de los parámetros de
"normalidad", debían presentar ciertas caracteristicas psicológicas acordes con su edad cronológica. Además

6
las características propias de cada etapa se tendrían que presentar en todos los sujetos, independientemente del
contexto socio-cultural.
Luego de la posguerra se produjo un cambio importante en la forma de plantear el estudio científico del
desarrollo humano. La psicología evolutiva estableció que a medida que los sujetos avanzan en edad,
completan procesos madurativos vinculados al crecimiento orgánico y logran mayor autonomía en la
satisfacción de sus necesidades biológicas primarias, el concurso de la cultura y la influencia del medio social
influyen decisivamente en las características psicológicas y sus procesos de cambio.
Los investigadores de la posguerra concluyeron que la mejor manera de observar estos procesos era
observando, evaluando y testeando al mismo grupo de sujetos durante períodos extensos (varias décadas) de
tiempo. Se instala así la necesidad de utilizar métodos longitudinales para poder dar cuenta de un modo más
preciso del proceso de desarrollo humano y, consecuentemente, se consolida la idea de que ese proceso debe
estudiarse considerando los factores ambientales, sociales y culturales.
El enfoque del Ciclo vital; un marco para el analisis del desarrollo
Hablamos de enfoque pues se trata de un conjunto de principios que fundamentado en diferentes teorias (no
sólo psicológicas) ofrece algunas claves para el estudio del desarrollo. El Enfoque del Ciclo Vital no es, pues,
una teoría en sí misma. Es un conjunto de premisas surgidas de la investigación científica que orientan la
descripción, la interpretación y el análisis de los procesos de desarrollo evolutivo a lo largo de todo el Ciclo
Vital. Por lo tanto, se constituye en un recurso valioso para comprender la adolescencia como un estadio
dentro del proceso de desarrollo.
Rechaza las interpretaciones antinómicas que explicaban las fases del desarrollo humano apelando solo a
factores intrínsecos del sujeto o a factores del entorno como agentes causales o desencadenantes de los
procesos de cambio evolutivo;
● Las teorias innato-maduracionistas; centradas en el sujeto y que explican su desarrollo en función de
un plan madurativo intrinseco y consustancial a un plan genético de base biológica que contiene y
pre-determina las posibilidades evolutivas. Un ejemplo de este tipo de pensamiento podemos
encontrarlo en las teorías que pretenden explicar todas las conductas humanas y las características de
personalidad (tanto una habilidad creativa, la violencia, o las sensaciones de placer) a partir de la
genética y/o de combinaciones neuro-bio-químicas. Los autores del Ciclo Vital se oponen al
determinismo implícito en esa descripción del proceso de desarrollo, por el cual los sujetos están
condicionados causal y necesariamente por procesos que están fuera de su alcance, generalmente
inscriptos en su carga biológica y en las experiencias pasadas.
● Las teorías ambientalistas del desarrollo; para las cuales es el medio o el entorno el responsable de
proveer los estímulos necesarios para generar los procesos de cambio. Los procesos de cambio se
producen por la presión de las variables que ejercen un efecto de modelado del sujeto. De algún modo,
el individuo tiene un rol pasivo y receptivo de la influencia ambiental, explicándose las diferencias a
partir de las variaciones en el tipo e intensidad de los estímulos provistos por el medio ambiente. Por
ejemplo, muchas diferencias individuales a nivel de inteligencia, de actitudes, de características
emocionales, etc. son explicadas a partir del efecto de factores antagónicos tales como
déficit/estimulación, deprivación cultural/disponibilidad de múltiples recursos y, entornos nutricios o
protectores/entornos deprivados.
Caracteristicas del Ciclo Vital
● Otorga mayor importancia a los procesos del sujeto (tanto los de orden biológico, como los
psicológicos, afectivos, intelectuales y sociales),

7
● A la vez reconoce la importancia relativa del medio como agente activo que, junto con el individuo,
participa en la construcción y autorregulación de su propio desarrollo.
El papel relevante del sujeto en los procesos de desarrollo se relaciona;
● Con su carácter activo (no es un mero receptor de los estímulos y demandas ambientales),
● Constructivo (reconstruye sus esquemas de percepción de la realidad y de sí mismo y reelabora
sucesivamente su identidad) e
● Integrador de sus experiencias vitales, incluidas las referidas a los cambios fisicos, psicológicos y
sociales.
Entre los principales aportes del enfoque del Ciclo Vital puede mencionarse:
● El concepto de desarrollo evolutivo;
El desarrollo ontogenético es un proceso que se produce a lo largo de toda la vida, que no concluye en
la adultez sino que avanza aun más allá de la vejez. El desarrollo personal no es un proceso orientado
hacia una meta universal (común a toda la especie) y no posee el mismo ritmo de progresión entre
sujetos de distintas culturas y aun dentro de una.
En cada estadio las transformaciones son producidas por la conjunción de procesos acumulativos
relacionados con acontecimientos vitales previos (estableciendo de esa manera cierta continuidad en el
curso vital) con la irrupción de procesos innovadores que generan discontinuidad y que son
experiencias innovadoras que desestructuran el curso vital, e impulsan al sujeto hacia la búsqueda de
un nuevo equilibrio y configuración identitaria.
● El interjuego entre ganancias y pérdidas en el proceso de desarrollo
El concepto de desarrollo no implica necesariamente evolución, sino que a través de la vida, el
desarrollo se produce por la ocurrencia de ganancias (fenómenos de crecimiento, maduración y de
conquista de posibilidades) y pérdidas (fenómenos de declive y deterioro, y de abandono). De esta
manera no habría desarrollo evolutivo sin la aparición de nuevas adquisiciones o ganancias y con la
ocurrencia de pérdidas. De hecho, la llegada a la adolescencia (fenómeno interpretado como una
ganancia) se sustenta en la necesidad de perder la niñez y sus atributos definitorios.
En cada estadio del desarrollo, puede esperarse la ocurrencia de eventos normativos (esperables
tendencialmente para los que forman parte de ese grupo) y eventos no normativos (sucesos
inesperados tanto a nivel individual como de las expectativas sociales para cada grupo de edad) de
pérdidas y ganancias
● El desarrollo evolutivo es multidireccional
Los cambios ligados al desarrollo evolutivo presentan considerable diversidad o pluralismo, es decir
son multidireccionales. La orientación del cambio evolutivo varía según el tipo de conducta que se
analice (social, cognitiva, afectiva, mental). En cada etapa evolutiva, algunos sistemas de
comportamiento muestran un incremento, en tanto otros declinan en su nivel de funcionamiento.
● Plasticidad y heterogeneidad en el desarrollo
Las experiencias previas y las condiciones sociales que contextualizan la vida de los sujetos,
constituyen un poderoso sistema personal que facilita o dificulta los procesos de cambio psicológico.
De todos modos, en todas las etapas del desarrollo el sujeto puede introducir cambios en su
funcionamiento psicológico y actitudinal, de donde surge el concepto de plasticidad
Las experiencias pasadas no generan estructuras psicológicas rígidas e inmodificables que, si bien son
condicionantes, no impiden a los individuos afrontar de manera creativa los conflictos personales que
se les presentan en cada etapa de la vida. Esta capacidad de adaptar y modificar los sistemas de
pensamiento y de acción produce una amplia variedad de respuestas lo que explica la heterogeneidad y

8
las diferencias de funcionamiento psíquico entre distintos individuos que atraviesan el mismo periodo
evolutivo
● La influencia de los procesos históricos en el desarrollo
El desarrollo ontogenético sufre la influencia de un conjunto de condiciones socioculturales que
ocurren en un momento histórico dado, y que a su vez sufren transformaciones. De ese modo, para
comprender los procesos psicológicos propios de cada etapa evolutiva es necesario analizar las
condiciones histórico-culturales actuantes en cada sociedad.
Sistemas influyentes en el desarrollo evolutivo
El proceso de desarrollo individual puede ser comprendido como resultado de las interacciones dialécticas
entre tres sistemas de influencias cuya conjunción es denominada contextualismo. Esos sistemas son:
● Las influencias normativas asociadas a la edad cronológica y a procesos madurativos de naturaleza
biológica; (fenómenos nos esperables tendencialmente para un estadio específico) Por ejemplo, es
esperable que en la pubertad se produzca un aumento en la talla de los adolescentes o que aparezcan
los signos de la madurez de los caracteres sexuales primarios y secundarios.
● Las influencias normativas que se relacionan con los acontecimientos históricos y culturales de cada
contexto social; es esperable que los procesos de globalización y de posmodernidad ejerzan cierto
influjo sobre las generaciones actuales de adolescentes de clase media urbana. En contextos rurales, o
de grupos sociales pobres y con escasa inserción en el mundo globalizado, es poco probable que esas
influencias tengan el mismo efecto. De hecho, esas condiciones actuales difieren sustancialmente de
las influencias socio-históricas de la generación del sesenta y, más aun, de la generación que
transcurrió su adolescencia entre la dictadura militar y la guerra de Malvinas.
● Las influencias biográficas; propias de cada individuo, que reciben el apelativo de "no normativas".
Son parte de estas influencias la muerte de uno de los padres, un accidente que deja secuelas físicas o
pertenecer a un grupo familiar que migra a otro país.
En las etapas tempranas del desarrollo (particularmente la infancia y la pubertad) se observa una prevalencia
del sistema de influencias normativas relacionadas con la edad cronológica, ya que las funciones biológicas
experimentan un continuo proceso de crecimiento y maduración.
En la adolescencia juvenil, en la adultez y la vejez se caracterizan por el mayor peso del sistema normativo de
influencias históricas y las influencias no normativas de carácter idiosincrásico. Con la progresión en el
desarrollo evolutivo los individuos se ven más expuestos a las variables contextuales y a las de tipo
biográfico, por lo que se produce un incremento de la variabilidad entre un sujeto y otro.
De todos modos debe quedar claro que durante todas las fases del desarrollo, los tres sistemas de influencias
interactúan permanentemente, pese a que en cada estadio predomina alguno de ellos como motor del proceso
de cambio.
La adolescencia desde el enfoque del Ciclo Vital
Esto puede sintetizarse en algunas premisas;
● La adolescencia es un estadio evolutivo del Ciclo Vital; Se trata de un período de la vida con
características propias, producidas por el modo particular en que se combinan e interactúan procesos
psicológicos, biológicos y sociales.
● La adolescencia transcurre en una dimensión temporal y es, por lo tanto, un proceso dinámico; En
tanto proceso, se reconoce a la pubertad como el fenómeno que marca el inicio de la adolescencia, y a
los quince años posteriores como el tiempo de duracion de esta
● La adolescencia es un fenómeno individual que se realiza dentro del marco establecido por el contexto
socio-cultural en que se desempeñan los jóvenes.

9
● Los cambios no van en paralelo sino que ocurren a distintos ritmos. Al comienzo de la adolescencia
los cambios físicos ocupan un lugar clave en la crisis adolescente; por el contrario, hacia el final de la
adolescencia el conflicto se relaciona con la inserción, la elección de roles, etc. A lo largo de todo el
proceso adolescente, sea cuales sean los factores de cambio dominantes, el sujeto debe efectuar un
intenso trabajo psicológico para poder interpretar los procesos de cambio que le ocurren. La dimensión
psicológica es la que le permite al joven percibir, afrontar y resolver las transformaciones que
experimenta en la transición adolescente Por esa razón, los características psicológicas y de
personalidad de los adolescentes tienen un papel fundamental en tanto actúan como filtros que le
permiten interpretar las demandas contextuales y utilizar los recursos sociales y psicológicos que
disponen para resolver los conflictos que se le presentan
En cada una de las fases la dinámica de los cambios está dada por el papel predominante que en cada
momento juegan las transformaciones físicas psicológicas y sociales que le acontecen a los adolescentes. De
la variedad de clasificaciones nos interesa rescatar la que realiza Carvajal Corzo, este autor identifica;
1. La adolescencia puberal (11-14 años): coincidente con el conjunto de cambios físicos producidos por
la pubertad y que marean la completa maduración (biológica) de los órganos de reproduccion
masculinos y femeninos. En esta fase el eje de los procesos de cambio psicológico se relacionan con
la resolución de los conflictos, generados por los cambios físicos y la toma de conciencia de la
madurez sexual. El duelo principal que el adolescente enfrenta en esta fase es la pérdida del cuerpo de
niño.
2. La adolescencia nuclear (14-17 años): fase en la que el sujeto se ve enfrentado a la resolución de una
serie de conflictos de identidad, fenómeno que es acompañado por nuevas posibilidades del
pensamiento y el despliegue de nuevos sentimientos y de una emocionalidad desconocida. La
problemática de esta fase es eminentemente psicológica e implica la adopción de un conjunto de
decisiones y la realización de elecciones que le permitan al sujeto configurar una nueva identidad y
proyectarse con ella hacia el futuro. La principal tarea de elaboración psicológica es la pérdida de los
padres infantiles.
3. La adolescencia juvenil (17 a 25 años): marcada fundamentalmente por la toma de decisiones ligadas a
la realización social, particularmente vinculadas a las elecciones de carrera, de ocupación y de pareja
amorosa. En esta última fase adquieren mayor peso los factores sociales y culturales ya que las
elecciones del sujeto se vinculan a la adopción de una identidad social y a la asunción de papeles
sociales que le permita ingresar a la adultez con autonomia personal. En esta fase el adolescente debe
resolver la perdida del rol del niño. Resolucion de la crisis de desarrollo
La adolescencia es un fenómeno que tiene múltiples facetas y puede ser interpretada en diferentes esferas. En
el plano de los sujetos y, particularmente en su dimensión psicosocial, podemos hablar del proceso de la
adolescencia como un estadio del Ciclo Vital que representa una crisis del desarrollo En el plano de la
sociedad, pueden observarse un conjunto de roles sociales, de normas y de prácticas considerados típicos de
los adolescentes. También existe un conjunto de significados y sentidos culturales asociados a esta etapa vital,
lo que permite hablar de una cultura juvenil o adolescente que siendo un fenómeno colectivo incide e
interactúa en el modelado de los procesos individuales.

URBANO, C. y YUNI, J. (2014) Psicologia del Desarrollo. Enfoques y perspectivas del Curso Vital"-
Editorial Brujas. Córdoba. Cap. II y VII.
CAPITULO 2. El enfoque del curso vital
El enfoque del curso vital como marco interpretativo del desarrollo evolutivo

10
El valor de este enfoque radica en su capacidad para poder responder cuatro problemas fundamentales propios
de la psicologia del desarrollo.
● En primer lugar, permite explicar la naturaleza dinámica, contextual y procesual del desarrollo
evolutivo.
● En segundo lugar, ofrece un modelo que da cuenta de las transiciones relacionadas con la edad y las
trayectorias vitales en el que se relativiza la influencia de la edad cronológica y se revalorizan los
aspectos biográficos del sujeto como moduladores de los procesos de cambio.
● En tercer lugar, describe cómo las diferentes fases del curso vital son moldeadas y condicionadas por
los contextos sociales, por los significados culturales atribuidos a cada fase y por la posición que
ocupan los sujetos en la estructura social.
● Finalmente, el enfoque del Curso Vital explica cómo el tiempo histórico y la pertenencia a distintas,
cohortes modelan el proceso de desarrollo, influyendo tanto en los individuos, como en los grupos
sociales.
El enfoque del curso vital adopta una perspectiva de interacción moderada, este se caracteriza por otorgar
mayor importancia a los procesos del sujeto (tanto de orden biologico, psicologico, afectivo, intelectual y
social) reconociendo la importancia del medio como agente activo que, junto con el individuo, participa en la
construcción y autorregulación de su propio desarrollo.
Sobre los procesos de desarrollo evolutivo influyen múltiples causas y factores de diferente naturaleza que
operan de diversas maneras en cada fase del curso vital
Entre los principales supuestos teoricos del enfoque del Curso Vital pueden mencionarse;
● El concepto de desarrollo evolutivo
En el curso vital; ninguna fase evolutiva mantiene primacía en la regulación del desarrollo es decir
ningún estadio es determinante causal de los cambios que ocurren en los estadios anteriores, en cada
fase las transformaciones son producidas por la interaccion entre los logros adquiridos en procesos y
acontecimientos vitales previos, con la irrupción de procesos que generan discontinuidad y que
introducen experiencias innovadoras que desestructuran elcurso vital e impulsan al sujeto hacia la
búsqueda de un nuevo equilibrio y configuración identitaria
● Sistemas influyentes en el desarrollo evolutivo
El proceso de desarrollo resulta de las interacciónes dialécticas entre tres sistemas de influencias cuya
conjuncion es denominada contextualismo. Esos sistemas son;
Las influencias normativas asociadas a un rango de edad cronológica especialmente aquellas
relativas a procesos madurativos de naturaleza biológica, (fenómenos esperables
tendencialmente para un estadio especifico) o a roles sociales definidos por limites de edad
cronológica más o menos rigidos (tales como el ingreso al jardin de infantes a los cinco años o
la jubilación a los 60 años en el caso de las mujeres), por ejemplo es esperable que en la
pubertad se produzca un aumento en la talla de los adolescentes o que aparezcan los signos de
la madurez de los caracteres sexuales primarios y secundarios
Las Influencias normativas que se relaciona con los acontecimientos históricos y culturales de
cada contexto social; Las caracteristicas de la sociedad de consumo actual, potenciada por la
incorporación de tecnologias de la información y la comunicación, genera demandas y
oportunidades para el desarrollo personal totalmente diferentes a las que tuvieron las
generaciones de la década del 30 o del 50. A su vez, la influencia de los procesos
socioculturales actuales es diferente según el nivel sociocultural de los sujetos, el grupo
generacional de pertenencia, la pertenencia a un grupo étnico o la condición ruralidad o de
habitante de un centro urbano

11
Las Influencias biográficas, propia de cada individuo, que reciben el apelativo de no
normativas por tratarse de situaciones particulares que configuran la trayectoria de cada sujeto
En cada uno de estos sistemas de influencia puede establecerse la ocurrencia de eventos normativos y no
normativos.
● Los eventos normativos, son procesos y/o sucesos esperables tendencialmente,
● Los eventos no normativos son sucesos inesperados que afectan las capacidades del sujeto (una
enfermedad, un accidente que genera secuelas fisicas), situaciones que generan disrupciones en el
ejercicio de roles familiares, o roles sociales, o cambios inesperados de valores creencias religiosas,
ideologías políticas, los eventos no normativos se caracterizan por su carácter azaroso e impredecible,
además de presentarse aleatoriamente en algunos grupos o individuos pero no necesariamente afectan
a todas las personas.
● No eventos; es decir condiciones y situaciones esperadas y buscadas por el sujeto a las que sin
embargo no se acceden, estos no eventos condicionan en muchos casos el proceso de desarrollo
Por su parte las crisis evolutivas pueden ser desencadenadas tanto por las transiciones propias de los eventos
normativos, por eventos no normativos o por no eventos. Las crisis generadas por cambios normativos se
denominan crisis normativas o de desarrollo mientras que las originadas por eventos no normativos son
llamadas crisis accidentales.
Durante todas las fases del desarrollo los tres sistemas de influencias interactúan permanentemente pero en
cada ciclo predomina alguno de ellos como motor del proceso de cambio
● LA INFLUENCIA EN LOS PROCESOS HISTORICOS EN EL DESARROLLO
Para comprender los procesos psicológicos propios de cada fase evolutiva es necesario analizar las
condiciones histórico culturales actuantes en cada sociedad. Estas marcan las posibilidades de
desarrollo de cada grupo generacional. La evolución de los roles sociales y de los significados
culturales hacen que cada generación sufra el influjo de diferentes factores y patrones culturales, qué
modelan el pensamiento y la acción de cada grupo de edad
● EL PROCESO DE DESARROLLO ES PRODUCTO DEL INTERJUEGO ENTRE
GANANCIAS Y PERDIDAS
El concepto de desarrollo no implica necesariamente evolución sino que a través de la vida, el
desarrollo se produce por la ocurrencia de ganancias (fenómenos de crecimiento y maduración y de
apertura de nuevas posibilidades) y pérdidas (fenómenos de declive, deterioro, regresión y perdida
efectiva de capacidades o facultades). De esta manera no habría desarrollo evolutivo sin la interacción
entre nuevas adquisiciones o ganancias y la ocurrencia de pérdidas. De hecho la conquista de la
adolescencia, por ejemplo supone la pérdida de atributos definitorios de la infancia, no solo en lo
referente a las características corporales sino en relación a la autoimagen o al acceso a nuevos roles
sociales reservados para los adolescentes. Esa dinámica entre ganancias y perdidas se registra tanto en
relación a los diferentes factores constitutivos del desarrollo (lo biologico, lo social, lo psicologico, lo
cultural) como a las diferentes fases evolutivas. El concepto de compensacion es clave para entender el
carácter autorregulado del desarrollo ya que cuando un sistema experimenta una pérdida o una
declinación, otro sistema tiende a incrementarse para sostener el intercambio adaptativo
● EL DESARROLLO EVOLUTIVO ES MULTIDIRECCIONAL
Los cambios ligados al desarrollo evolutivo presentan considerable diversidad o pluralismo, es decir
son multidireccionales. La direccion del cambio evolutivo varia según el tipo de conducta que se
analice (social, cognitiva, afectiva, mental). En el inicio de la adolescencia se produce un cambio
repentino en el cuerpo de los jóvenes producido por los procesos fisiológicos ligados al crecimiento,
ese proceso que es más o menos general y común a todos los adolescentes produce efectos diferentes
entre los miembros de un grupo, al conjugarse con las disposiciones de personalidad de cada sujeto,
las pautas familiares de crianza, el nivel de información que poseen, el genero, etc.

12
● PLASTICIDAD Y HETEROGENEIDAD EN EL DESARROLLO
Las experiencias pasadas o el nivel de desarrollo alcanzado de ciertas capacidades y habilidades
funcionales no generan estructuras psicológicas rígidas e inmodificables que, si bien son
condicionantes no impiden a los individuos afrontar de manera creativa las demandas que le presentan
cada ciclo de la vida. El sujeto no tiene necesidad de insistir en la repetición de respuestas que bajo
ciertas circunstancias son útiles pero que pueden no serlo en otras y por ello ensaya nuevas formas y
exitosas de respuesta que lleven al cambio. La plasticidad sería entonces la capacidad adaptativa que
facilite la modificabilidad biológica cognitiva afectiva y social frente a las demandas que el medio
plantea al sujeto y para las cuales el repertorio de recursos personales no es suficiente o pertinente.
Esta capacidad de adaptar y modificar los sistemas de pensamiento y de acción produce una amplia
variedad de respuestas lo que explica la heterogeneidad y las diferencias de funcionamiento psíquico
entre distintos individuos que atraviesan el mismo ciclo evolutivo
Definicion del desarrollo evolutivo
Es el proceso de constitución y reconfiguración de la subjetividad, la identidad, las capacidades y funciones
psíquicas y el sentido existencial del sujeto a partir de la dinámica interactiva del despliegue/repliegue de las
potencialidades y limitaciones emocionales, afectivas, cognitivas y sociales que reconocen como punto de
origen la concepción y como punto de cierre la muerte biológica. La dinámica de despliegue/repliegue de esas
potencialidades/limitaciones (posible por la integración que genera la actividad mental del sujeto) requiere de
la interacción dialéctica entre el potencial biológico, los recursos psicológicos, cognitivos, emocionales y
afectivos del sujeto y la concurrencia de los recursos socioculturales que ofrece su entorno
Elementos para una síntesis comprensiva del desarrollo evolutivo desde el enfoque del curso vital
El desarrollo evolutivo se caracteriza por la tensión entre continuidad y discontinuidad. Justamente el
desarrollo se basa en el trabajo psiquico del sujeto de extraer del conjunto discontinuo y azaroso de eventos
que debe atravesar, alcanzando una continuidad madurativa basada en la tarea del Yo de obtener ganancias de
las pérdidas introducidas por los cambios biológicos, psicológicos y sociales.
Esta concepción de desarrollo plantea que lo orgánico es condición necesaria pero no suficiente para
desencadenar procesos de crecimiento, maduración y desarrollo. Por esa razón, desde la incipiente
constitución como sujeto, el Yo debe emprender un trabajo inacabado para adquirir logros evolutivos basados
en el atravesamiento indisoluble de lo orgánico, lo psicológico, lo emocional y lo vincular como instancias de
naturaleza distinta pero concurrentes.

CAPITULO 7. El ciclo de la adolescencia


Una de las características de nuestro contexto sociocultural contemporáneo es el de la prolongación de la
adolescencia como ciclo del curso vital. En nuestro caso seguiremos la clasificación de Carvajal Corzo
aunque con algunas adaptaciones que fueron introducidas en otro texto nuestro (Urbano y Yuni, 2001)
La adolescencia puberal (10-11 años)
Se produce un aumento de la actividad hormonal que se manifiesta en una serie de modificaciones organicas,
ligadas a procesos de crecimiento, tales como cambio de tamaño, de peso y en la proporcion del cuerpo. Ellos
originan en el sujeto una alteración en la percepción de su imagen corporal. Cuando los cambios físicos
ocasionan el estiron adolescente se desencadena un profundo conflicto psicológico, el que a su vez se
encuentra condicionado por las características que se le atribuyen a esta etapa dentro del contexto
sociocultural
El puber debe enfrentar la angustia que le provoca la pérdida de su cuerpo infantil, no se reconoce a si mismo,
percibe su cuerpo como extraño, su sentimiento de unidad se rompe. Es posible observar manifestaciones
físicas como somnolencia fatiga y desgano signos que evidencian la ansiedad y la angustia que le produce la
invasión de nuevos impulsos y sensaciones corporales. El rendimiento escolar con frecuencia decae, su

13
conducta es dispersa y presta poca atención a los estímulos que lo motivaban en su época infantil, se sumerge
en un estado de inactividad y suele pasar mucho tiempo durmiendo
Frente a la confusión y desconocimiento de la propia imagen y de las sensaciones corporales qué le ocurren en
un primer momento el puber comienza a explorar su cuerpo manipulando sus órganos genitales y descubre
que esto y la actividad en sí misma producen placer, este placer se acompaña de culpa. Otra conducta tipica
del adolescente ante los cambios de su cuerpo y de sus sensaciones internas, es situarse largas horas frente al
espejo ensayando peinados posturas gestos, observar su imagen en el espejo constituye un intento de
reafirmarse en sus cambios
Los cambios corporales influyen en las interacciones sociales provocando reacciones ambivalentes en el
encuentro con otras personas de su entorno. Es común que el adolescente manifieste rechazo físico a quienes
intenten tocarlo: ¡déjame! “ya no soy un niño”, por el contrario manifiesta una excesiva búsqueda por el
contacto físico, ambas reacciones constituyen una forma de canalizar la irrupcion de estas “nuevas”
sensaciones eroticas y expresan el desconcierto que los adolescentes vivencian respect oa como estar con
otros con ese cuerpo transformado
Todas estas conductas y reacciones no son producto de “caprichos” sino que son las maneras que tiene de
enfrentarse a esta invasión de sensaciones nuevas, las cuales no puede verbalizar, su modo de funcionamiento
infantil no le sirve para enfrentar estos cambios
La Adolescencia nuclear
La identidad adolescente se caracteriza por el cambio de relación del sujeto con sus padres internos y
fantaseados, la presencia externa de los padres deja de tener el carácter de imprescindible, pues las figuras
parentales ya han sido incorporadas a la personalidad del sujeto encontrándose habilitado para realizar su
proceso de subjetivación, la transición de la adolescencia apunta al logro de un nuevo reconocimiento de sí
mismo, como un sujeto habilitado para desempeñarse en la vida de manera autónoma, independiente de su
familia
La irrupción de nuevas sensaciones en lo físico le exige replantearse el concepto de sí mismo en relación al
cuerpo, el cuerpo adquiere otro significado, es un cuerpo en donde se conjuga el placer con la culpa, por
primera vez el sujeto se plantea la idea de la muerte, la propia y la de sus progenitores, esto lo lleva a
“humanizar” a sus padres, Los cuales lejos de ser perfectos y omnipotentes como son representados en la
infancia ingresan en la categoría de imperfectos, de mortales y de seres que son capaces de envejecer, esto le
produce mucha angustia, inseguridad y desprotección lo que lo lleva a actuar una variada gama de conductas
Aparecen conductas de aislamiento, comienza a defender sus espacios de intimidad y expresa la necesidad de
tener un cuarto para él solo, intenta salir de la posición de niño y se manifiesta molesto cuando se le otorgan
roles y actividades infantiles, se torna poco comunicativo en sus “cosas íntimas” sus respuestas se vuelven
monosilábicas; bien, mal, no, sí, sus hábitos cambian, se observa el descuido respecto de sí mismo y de su
habitación
En todas estas conductas el adolescente desafía las normas de convivencia familiar los modos de interacción y
el diálogo las formas que hasta entonces eran habituales de ser, estar y conducirse en el seno de la familia. Se
compara con otros adolescentes y con aquellos personajes que poseen cualidades anheladas por él estas
evaluaciones posibilitan al adolescente compararse con sus propios ideales y con los ideales propiciados por el
entorno, esta autoevaluación crítica se acompaña de un sentimiento de vergüenza que hace al adolescente
vulnerable al ridículo
El adolescente comienza un proceso de autoafirmación intentando contradecir los modelos de sus padres,
surgen conductas de imitación de amigos y de otros personajes que poseen atributos que desea poseer y que
pueden estar en oposición a los modelos sostenidos por los progenitores. Es comun que el adolescente;

14
● Se identifique con algun personaje de ficción
● Se asocia a amigos o a grupos de pares que se asemejan a los ideales que él desea para sí
● Surge la admiración por algún par que posee actitudes de líder o por el contrario intenta competir
dentro de su grupo de pertenencia por representar ese rol
En este momento de la vida, adquieren mucha importancia los modelos sociales respecto del cuerpo y los
valores provistos por la cultura, es por esta razon, que el sujeto se esfuerza en hacer coincidir los aspectos de
sí mismo que siente que tiene valor con aquellos aspectos anhelados por el mismo y con los valores por el
entorno
La autoevaluación que se realiza a sí mismo es fluctuante porque su estado de ánimo es variable, manifiesta
constante fluctuaciones de su estado ánimico, pudiendo pasar de un estado de optimismo y euforia a un estado
de frustración y desaliento absoluto, esto se debe a que se encuentra en un estado de labilidad (personalidad
esponja, pues su rasgo principal es el hecho de estar expuesto a una excesiva intensa y variable permeabilidad
respecto de lo que recibe del mundo exterior y de aquello que proyecta)
El permitirse fluctuar entre diferentes modalidades de ser posibilita al adolescente poder adquirir una
identidad que responda al autoconcepto de sí mismo. Cuando el sujeto puede hacer coincidir “quién cree y
siente que es”, “lo que percibe el entorno de quién es él” y “lo que aspira a ser el mismo” es posible que
genere un sentimiento de autoaceptación. Cuando no hay posibilidades de integrar esos elementos, o estas son
limitadas, el adolescente elabora un concepto de sí mismo con imágenes y creencias distorsionadas y
empobrecidas y sentimiento de autovaloración negativos, de hecho el modo en que se represente a sí mismo
tendrá efectos importantes sobre la autoestima, el reconocimiento de sus propias capacidades y su sentido de
eficacia y seguridad para proponerse y lograr metas
Sin embargo no todo el proceso de la adolescencia depende de las características psico-afectivas y de
personalidad, ya que este se encuentra inmerso en un contexto sociocultural, en el que la familia es la primera
representante del orden social. Por su parte el medio social en qué vive le provee otras posibilidades de
incorporar pautas socioculturales y económicas, estas se encuentran representadas en figuras significativas
que se ofrecen como modelos a seguir, esas figuras actúan como modelos sociales, ofrecen al adolescente un
sistema de posibilidades múltiples en el que puede seleccionar y efectuar identificaciones personales que le
permiten elaborar su identidad
En un primer momento un adolescente no diferencia entre lo que significa representar un rol (ejercer una
actividad que otorga una posición dentro de la estructura social) y lo que significa definirse a sí mismo en su
modo de ser (en aquello que le da sentido), en la búsqueda de encontrar su lugar social se encuentra
determinado por la acción más que por la reflexión.
La adolescencia se convertiria en un laboratorio en el que aprende roles, los pone en juego y evalúa su utilidad
y el sentido que le aporta a su proyecto vital
El adolescente hace uso de su pensamiento intelectualizado y fantasioso proyectándose a sí mismo en algún
movimiento grupal cuya motivación es “el mejoramiento de la humanidad”, surge aquí la adhesión a
movimientos sociales políticos religiosos como una manera de autoafirmarse dentro de la estructura social
La adolescencia juvenil
La elección de una carrera la búsqueda y ejercicio de un trabajo, la conformación de una pareja la adquisición
de derechos legales y económicos implican para el adolescente joven una inserción progresiva en “el mundo
de los adultos”, el adolescente comienza a sentirse un “igual”
Comienza a exigir reconocimiento como adulto joven, siente que las “normas” constituyen un acuerdo
pactado y que no son reglas impuestas que hay que cumplir porque sí, en la medida que considere razonables

15
al conjunto de normativas sociales, se compromete a ejecutarlas, de esta manera la reciprocidad y el respeto
mutuo desembocan en el sentimiento de justicia, el cual se antepone a la obediencia.
El adolescente joven comienza a formar una autonomía moral en los valores individuales y en aquellos de
nivel social, se preocupa por problemas que exceden el “aquí y ahora” comienzan a proyectarse y elaborar
planificaciones futuras, se observa una logica creciente sobre las relaciones; el despertar de la reflexión sobre
los sentimientos morales y sociales
El adolescente joven puede mediar la acción mediante la reflexión. En la medida en que el adolescente
encuentra caminos de realización de sus proyectos vitales puede introducirse en el mundo de los adultos, con
ideas renovadores y con un sentido “apropiado” de la realidad
La identidad como eje estructurante de la adolescencia
Cómo se observa la crisis de la adolescencia es una crisis centrada en el logro de una identidad personal y
social, la “identidad personal” supone la síntesis e integración de la autodefiniciones que el sujeto tiene de sí
mismo, es decir la forma en que se define, se describe e interpreta en tanto ser único y particular. La identidad
permite tener conciencia plena de quién es uno y a dónde pertenece, sin embargo la identidad personal se
construye en inter juego e interacción que se produce entre el autoreconocimiento y el heteroreconocimiento
La identidad personal en tanto síntesis de la mismIdad y continuidad de un sujeto en el curso vital contiene la
descripción de lo que los individuos ven cuando se miran a sí mismos en términos de su características físicas
autopercibidas de su personalidad sus habilidades sus rasgos sus roles y su estatus social. El adolescente
necesita darle a su proceso de cambios una continuidad dentro de la personalidad por lo que establece la
búsqueda de un nuevo sentimiento de continuidad y mismidad. La identidad permite al sujeto individual
crearse un sentimiento interno de mismidad y continuidad la que es reconocida tanto por el propio sujeto
como por su entorno y que se traduce en el “saber quién soy”
La elaboración de la identidad por parte del adolescente joven está condicionada por la calidad reaseguradora
de las figuras parentales internalizadas, que proveen de seguridad al sujeto y enriquecen su yo, qué proveen de
seguridad al sujeto y enriquecen su yo, reforzando sus mecanismos defensivos útiles y el desarrollo de sus
áreas más saludables
La adolescencia concluye cuando el sujeto puede integrar su identidad personal y adopta una identidad social,
ello supone haber resuelto los conflictos ligados a los cambios corporales psicológicos y sociales, y sucede
cuando el joven ha logrado elaborar una imagen de sí mismo, en tanto sujeto único, idéntico a sí mismo
resultado de un proceso vital desplegado en el tiempo y como parte de un grupo y de una sociedad en los que
puede ejercer los roles y gozar de los derechos que poseen los adultos
El riesgo de esta fase estará dado en la falta de autoconfianza Por parte del yo lo que impide el compromiso
fiel a un proyecto compartido y que se puede manifestar en una actitud excesivamente crítica de las ideologías
del entorno pudiendo derivar en conductas desadaptadas que tiendan a expresar su lealtad a la oposición por la
oposición misma a un orden establecido y a la emergencia de una ideología totalitaria que transmite por las
márgenes del fanatismo

1.2. Revision critica del concepto Psicologia Evolutiva


1.2.- EMMANUELE, E. S. "Adolescencia, crisis y discursos sociales", Extraído el 09 de febrero de 2014
desde http://www.datavoc.com/orientadores/articulo09.php
La psicologia evolutiva y su concepcion de humano
Desde el enfoque tradicional la adolescencia constituye un período de transición de un momento a otro un
paso de la niñez a la adultez un periodo crítico y conflictivo

16
Las llamadas psicologías evolutivas remiten concepciones diversas que consisten en un ser humano acabado
capaz de alcanzar la plenitud y de progresar hacia una madurez que culmina con el logro de una identidad
propia
Se distinguen dos grandes líneas o posturas
● La concepcion monánica, (enfatizan la noción de un des/arrollo humano que supone el progresivo y
espontáneo despliegue de algo indudablemente “arrollado” que sale a luz como efecto de fuerzas
evolutivas biológicas, propias de los seres de la especie humana. Tal proceso endógeno evoluciona
hacia una madurez plena según las influencias ejercidas desde un medio ambiente que interviene ora
favoreciendo, ora obstaculizando el desarrollo de potencialidades en germen) plantean el desarrollo
endógeno un desarrollo hacia la plenitud único de la especie humana enfatiza en la maduración
biológica o en la Génesis del psiquismo (biologista o psicologista)
● La Concepción diadica; se plantea a partir de la influencia y los aportes de la antropología cultural y
postula un determinismo cultural (El hombre como biopsicosocial)
Lo que importa señalar es que una vez planteados dos términos a y b y el axioma de su interacción queda el
terreno abonado para discutir el predominio la determinación la subordinación la influencia la interacción o la
independencia de uno respecto del otro y viceversa
Este paradigma alternativo al positivismo ya no se puede sostener
El hombre es un ser histórico en permanente proceso de construcción situado en un mundo en donde los
objetos son propuestos por la cultura en y a través del lenguaje
El cuerpo es una condición necesaria para el devenir humano pero no suficiente el proceso de construcción del
sujeto ya no se puede concebir como líneal sino como efecto resultante de un complejísimo entramado de
dimensiones convergentes
La adolescencia como encrucijada
Desde la perspectiva tradicional, se sitúa la adolescencia como un corte transversal de la biología humana.
Queda así localizada en una cierta edad cronológica dentro del tiempo que transcurre entre el nacer y el morir
Sin embargo, la biografía se inscribe en una historia singular que precede la existencia real y carece de límites
temporales pues se halla ligada a generaciones pretéritas que involucran variados imaginarios acerca de
determinados personajes familiares ofrecidos a la identificación. Su significación es relevante en la medida en
que representa la historia subjetiva de deseos en la que el Sujeto ha podido constituirse como tal.
El cuerpo biológico sufre transformaciones permanentes lo que conllevan a inscripciones en el psiquismo pero
no se trata situar lo biológico como un área o entidad que interactúa con otras entidades sino de reubicarlo en
una dimensión de posibilidad humana que se conforma como tal dentro de la misma trama estructurante que
hace del devenir humano una constante encrucijada
Tal encrucijada como oscuro cruce de caminos convergentes y cómo acechanza o emboscada se materializa en
ese tránsito designado adolescencia
La significativa búsqueda de lo propio conlleva (en esa encrucijada adolescente) a interpelar y revisar todo lo
dado, en una reedición de percepciones de extrañamiento frente a las cosas familiares desde siempre; frente al
cuerpo real autorizado en su sexualidad únicamente por la biología; frente al nombre que por impuesto se
reniega. Pero el reconocimiento de los otros se formula carente de toda positividad y lejos de la afirmación
anhelada, sólo expresa la evidencia de lo que está en falta.
o revisión de todo lo que es familiar que en esta etapa nos resulta extraño todo lo que era normal ahora se
cuestiona
La nocion de “crisis” y los discursos sociales
La noción de crisis aparece ligada de un modo casi incuestionable a la adolescencia

17
El origen etimológico de la palabra crisis que significa juicio se ubica en la trama que enlaza el discurso
medico con el discurso jurídico
Se trata del momento decisivo en que una enfermedad se resuelve entre la curación o la muerte, es entonces el
momento decisivo en el que podra juzgarse. Traspolada al discurso psicológico la crisis marca un momento de
ruptura casi lineal entre el pasado de un niño pronto a desaparecer y el futuro de un adulto por venir
La crisis connota tanto el peligro frente a algo como así también la posibilidad misma de este algo, cuando la
dificultad y la magnitud de un problema sobrepasa los recursos que se disponen en forma inmediata para
enfrentarlo, sobreviene la crisis
Se trata entonces de una disfuncion, un desorden, un desequilibrio que irrumpe en la supuesta armonia de un
orden establecido
Desde la mirada adultocentrica la adolescencia se concibe en términos de crisis que entraña la posibilidad y
los riesgos derivados de dejar de ser juicioso y obediente hasta el peligro de una pérdida irremediable del
juicio, con todos los matices intermedios que socialmente se adjudican entre el desacato y la locura
El discurso es siempre una construcción histórica social que trasciende a sus hablantes se trata de un espacio
de exterioridad que ofrece diversas posiciones de subjetividad y en cuya trama el sujeto es constitutivamente
situado, “sin que pueda figurar en él jamas como titular”
Los discursos sociales vigentes tienen como sustrato común concepciones evolucionistas del humano ya que
toda organización social en mayor o menor medida es evolutiva desde sus criterios básicos
● Desde el discurso jurídico, la población se clasifica en mayores y menores femeninos y masculinos se
regula lo permitido y lo prohibido con Las edades definidas por la hegemonia biologista del discurso
medico
● El discurso pedagógico, encarna a su modo las normativas sociales instituyendolas, en el ambito de la
organización escolar. Los mayores dirigen y enseñan a los enseñantes y estos a los enseñados, a su vez
dentro de la población estudiantil la palabra vale más cuanto más avanzado en la carrera cuanto más
grande o superior es el año o curso quedandos la palabra de los ingresantes prácticamente
descalificada
Todos los discursos sociales insisten en sitúar la crisis nominada adolescente, adherida o localizada en la
metamorfosis misma del cuerpo real y en las supuestas conductas derivables que se observan al modo
de un organismo reactivo.
Desde variados dispositivos sociales queda fertilizado un mercado propio de esta sociedad de consumo que
comercializa con los jóvenes en la oferta de insignias y marcas, para poner señuelos de distinción a sus
cuerpos, los medios de comunicación de masas incitan al consumo de imágenes extravagantes acerca del éxito
del triunfo de la omnipotencia de la sexualidad etcétera imágenes que ofertan fragmentaciones y alienación.
Pero aquel que reniega que ignora que olvida que condena que desprecia su propia adolescencia difícilmente
pueda ocupar sitio alguno o función posible en el escenario de la vida real o imaginaria de aquellos
protagonistas que una vez evaluados obtienen la clasificación social de adolescentes
Si no resulta posible exponerse a caídas bruscas desde el sitio de ideales a sostener confrontaciones que
evidencian la propia incompletud humana a compartir los lugares circula desde el saber menos aún resultará
posible tomar alguna posición de desafío

URBANO, C. y YUNI, J. (2014) "Psicología del Desarrollo. Enfoques y perspectivas del Curso Vital"-
Editorial Brujas. Córdoba. Cap I
CAPITULO 1. La psicologia del desarrollo
Conceptualizacion de la psicologia del desarrollo en el marco de la psicologia

18
La psicología del desarrollo es decreciente aparición en el campo de los estudios psicológicos su surgimiento
es concomitante al cuestionamiento y crisis de la psicología evolutiva de la que representa su continuación el
objeto de esta disciplina la interpretación descripción y explicación de las transformaciones psicológicas
vinculadas al proceso de desarrollo humano los cambios que se producen en las capacidades facultades y
procesos psíquicos a través del curso de la vida han sido motivo de interés a lo largo de la historia de la
humanidad los avances más significativos se han producido en los dos últimos siglos a partir de la
consolidación de la psicología como disciplina científica
La psicología del desarrollo se presenta como un campo de conocimiento en donde convergen los aportes de
diferentes enfoques y subdisciplinas psicológicas y se articulan saberes de otras disciplinas como la sociología
la antropología la lingüística la biología y la neurobiología entre otras, el carácter necesariamente es
integrador e interdisciplinario debido a la naturaleza compleja del psiquismo humano
Breve recorrido histórico de la psicologia evolutiva
Los primeros aportes de la psicología evolutiva se caracterizaron por su pretension de describír el cambio
evolutivo como un conjunto de etapas sucesivas y necesarias con inicio en la niñez y finalizaba en la vejez,
Vinculando cada una de las etapas a un conjunto de características y conductas específicas que transcurren
dentro de determinadas secuencias de edad cronológica
Esas teorias pretendian que las etapas evolutivas eran normativas y universales, esas leyes evolutivas se
caracterizaban por el determinismo. La expresión ley evolutiva denota el sesgo biologicista de este periodo de
los estudios psicológicos de ahí el énfasis explicativo que las teorías ponían en conceptos biologicistas tales
como; crecimiento maduración y factores constitutivos del desarrollo especialmente los denominados innatos
Esas leyes evolutivas deberian explicar la dinamica evolutiva segun el esquema “nacimiento, crecimiento,
maduración, declinación, muerte” que era la forma tradicional de representar el curso de la vida.
El concepto de normatividad se asociaba al de normalidad ya que en la medida en que se pueden establecer
normas evolutivas para cada periodo de la vida es posible establecer un parámetro que permitiera delimitar si
un individuo particular se encuadra dentro o fuera de lo esperado para el conjunto de sujetos que atraviesan la
misma etapa evolutiva definida por la edad cronológico esta concepción de normalidad estaba ligada al
concepto de universalidad del desarrollo
Después de la posguerra se plantea un cambio en el enfoque del estudio del desarrollo humano, en las últimas
décadas se abandonaron progresivamente las explicaciones de cada estadio evolutivo como una unidad aislada
de las demás y se planteó su estudio atendiendo a la totalidad del ciclo vital, la psicología evoluiva de
posguerra estableció que a medida que los sujetos avanzan en edad completan procesos madurativos
vinculados al crecimiento orgánico y logran mayor autonomía en la satisfacción de sus necesidades biológicas
primarias, además se reconoció la influencia decisiva que el concurso de la cultura y del medio social tienen
en el desarrollo de las características psicológicas y sus procesos de cambio
El cambio más importante en la concepción del desarrollo psicológico ha sido el de adoptar una perspectiva
diferente acerca del sujeto cómo un ser de naturaleza compleja, activo y proactivo y con capacidad para
regular representarse e interpretar sus procesos de cambio
La mejor manera de conocer estos procesos era observando evaluando y testeando al mismo grupo de sujetos
durante periodos extensos de tiempo utilizando métodos longitudinales
A lo largo del siglo XX la psicología evolutiva ha progresado hacia una visión más comprensiva y
totalizadora del desarrollo humano,
En las últimas décadas la psicología del desarrollo se ha interesado por todo el ciclo vital, otorgandole mayor
importancia al cambio social e historico en el desarrollo individual, el sujeto es estudiado a lo largo de todo el

19
curso de su existencia, interpretando el cambio como una evolución constante íntimamente ligada a los
contextos con los que mantiene una relación de recíproca interdependencia e interrelación
MODELOS TEORICOS EN EL ESTUDIO DEL DESARROLLO PSICOLOGICO
Es usual reconocer tres modelos generales para el estudio del desarrollo evolutivo son ellos; el modelo
mecanicista, el organicista y el modelo contextual-dialéctico en la actualidad hay un claro predominio de este
último
● MODELO MECANICISTA; El individuo es concebido como una máquina y su conducta puede ser
explicada en términos de causalidad eficiente
Lo importante no es el organismo sino los aspectos externos a él
En este modelo la clave para el desarrollo estaría en las condiciones ambientales mientras que el
mecanismo que posibilitaría los cambios comportamentales serían los aprendizajes y los procesos de
condicionamiento en general
Es el medio o el entorno el responsable de proveer los estímulos necesarios para generar los procesos
de cambio en los comportamientos y las capacidades
El individuo tiene un rol pasivo y receptivo de la influencia ambiental las diferencias puede ser
explicadas por las variaciones en el tipo e intensidad de los estímulos
Los factores ambientales tienen una incidencia que fluctúa entre la carencia y la sobreestimulación del
cual dependerá el efecto que ejerce sobre la capacidad rendimiento o función psicológica que se
estudia. El conductismo clasico seria la teoria psicologica paradigmatica de este modelo
● MODELO ORGANICISTA; Vinculado a la metáfora del crecimiento biológico el individuo es
representado como un sistema orgánico vivo
El desarrollo estaría fuertemente condicionado por un plan madurativo interno sustentado en una
autorregulación automantenimiento y autorreproducción
Este modelo dio lugar a teorías innato-maduracionistas centrada en el sujeto explicando sus desarrollo
en función al plan madurativo intrínseco y consustancial a un plan genético de base biológica que
contiene y pre-determina las posibilidades evolutivas
En la crítica que Baltes (1983) realiza al modelo mecanicista y organicista destaca que en ambos el desarrollo
humano se caracterizaria por los siguientes rasgos específicos:
a) su carácter secuencial,
b) su unidireccionalidad,
c) la irreversibilidad de los cambios,
d) la transformación cualitativo-estructural que éstos suponen y
e) la universalidad
A partir de estas críticas se fue configurando un modelo que, sustentado en diferentes teorías, produciría un
giro en las formas de concebir el desarrollo humano y explicaría el cambio psicológico desde una perspectiva
más abarcativa
● MODELO CONTEXTUAL- DIALECTICO; propone un analisis contextualizado del cambio en el
que el desarrollo es producto de un entrecruzamiento de un sistema de normas que lo regulan con las
mediaciones que el propio sujeto introduce como parte de un grupo social y con las herramientas que
su cultura le provee
Se denomina modelo contextual porque postula interdependencia entre sujeto y naturaleza como dos
entidades íntimamente relacionadas en un espiral dialéctico en la que mutuamente se forman y
transforman
Este modelo propone una concepción diferente del cambio y la transformación, que considera como
elementos consustanciales a la realidad socio-cultural y a los sistemas vivos
Lo distintivo del desarrollo en todos los estadios del ciclo vital sería su tendencia o su naturaleza de
cambio antes que su orientación a la estabilidad
El desarrollo de las funciones biológicas y psicológicas lejos de expresar un plan inscrito en lo
genético o en el potencial biológico era el producto de la interacción e interdependencia con el medio,

20
interacción en la que se configura una estructura particular que luego va a condicionar el propio
desarrollo de las funciones así como su modo de uso
Las hipótesis explicativas del cambio desde esta perspectiva son resumidos por Sinnott (1994:98) en un
conjunto de proposiciones, de las que tomamos las más relevantes
1) El cambio puede ocurrir solamente si existe potencial y éste se basa en la presencia de cierto grado de
desorden o desestructuración en el sistema. El potencial es interpretado como un elemento nuevo (no por ello
de naturaleza positiva o-incremental) que básicamente tiende a modificar la estructura del sistema
2) El sujeto en tanto sistema se construye a sí mismo y construye su realidad en la interacción con el mundo
circundante. El desarrollo del sistema humano en tanto sistema abierto se basa en la relación de
interdependencia e intercambio con el medio y entre los subsistemas que lo conforman siendo la información
(genética, linguistica, códigos, convencionales, etc.) el contenido básico del intercambio
3) El sujeto se define por el límite de su mismidad, limite abierto y permeable que marca su diferenciación
respecto del afuera/los otros y que preserva su unidad biográfica y existencial. El establecimiento de ese límite
identitario es posible por el doble trabajo permanente (a lo largo de todo el ciclo vital) de
diferenciación/construcción de su Yo
4) Los sistemas constitutivos del sujeto son sinergicos. Es decir que el sujeto al actuar en interrelación con los
otros y su entorno y al utilizar en forma interactiva y compleja sus subsistemas aumenta sus posibilidades de
generar un mayor desarrollo
5) El sujeto en tanto ser vivo es autopoiético, es decir que tiende a su propia autoorganización Esta capacidad
de autopoiesis se sustenta en el intercambio, razón por la que la permeabilidad y la flexibilidad son
condiciones para asegurar los procesos de interacción. El sujeto que posee limites porosos puede admitir
nueva información, reestructurar la que posee y desechar la que no tiene más significado Por su parte, la
flexibilidad es una condición para el desarrollo ya que es desde allí que puede instalarse el cambio.
Entre las perspectivas teóricas derivadas del modelo contextual-dialéctico encontramos como una de las
más relevantes el Enfoque del Curso Vital.

1.3. Esquema inicial de los modelos teooricos de comprension de la adolescencia. Nuevas


conceptualizaciones: aportes de autores contemporaneos a partir de las posturas clasicas.
1.3.- DUSCHATZKY, S. (2006) "Qué es un niño, un joven o un adulto en tiempos alterados". En
Infancias y Adolescencias. Teoría y experiencias en el borde. Graciela Frigerio (coord.). Ed. Noveduc.
Tiempo atrás cuando la vida transcurría en suelo sólido y en consecuencia nuestro modo de habitar el mundo
se construía en condiciones relativamente estables previsible, ser madre padre joven niño alumno maestro no
era un problema
Ser adulto en la forma que hoy fuera suponía ocupar un lugar en torno a la ley y ser niño joven hijo o alumno
asumir su lugar complementario
La ley no constituía un mero ordenamiento jurídico sino una experiencia forjada en la vida institucional la
familia y la escuela eran los pilares por excelencia encargado de inscribir los lugares que cada uno ocupa en
torno al principio de la ley (inscripción de subjetividad)
Las formas de configuración histórica de la infancia y la juventud podía ser pensadas como acto de
institución, así la eficacia simbólica de los ritos de institución radica en actuar sobre lo real actuado sobre la
representación de lo real, de modo que un acto de institución es un acto de comunicación particular que logre
conferirle a alguien sus marcas de identidad
El siglo XX introdujo vastos inventarios sobre quién es el niño

21
Ya no se trata de mirar la juventud solo como una etapa de transición sino de dar cuenta de estéticas singulares
que nos hablan de sus formas de vivir la temporalidad
Si la institución consiste en ligar símbolos a significaciones y hacerlos valer como tales los niños jóvenes o
adultos en tanto instituidos configuran un modo específico de habitar el mundo
Los tiempos actuales nos enfrentan a producciones de subjetividad ya no se dejan explicitar desde la
perspectiva paterno filial o desde las operaciones instituidas sostenido en el principio de la ley en
consecuencia demandan nuevas claves de pensamiento capaces de designar lo que acontece
El campo de la fraternidad se perfila como un campo consistente de construcción subjetiva, lo fraterno no es
necesariamente agrupamiento entre pares contra el mundo adulto lo fraterno alcanza también al vínculo entre
generaciones ejemplo, un club
Lo fraterno se sitúa como un modo subjetivante de habitar el declive de aquellos anclajes sólidos que
marcaban las formas de posicionarse en la relación social, no es un sustituto ni antagónico del eje
paterno-filial sino suplementario en el sentido que aporta complejidad, diferencia y singularidad
Lo fraterno entendido como práctica de ligadura social se arma sobre tres pilares fundamentales; la confianza,
la responsabilidad y el afecto
● La confianza en el devenir en la activación de posibilidades en el despliegue de diferencias
● Responsabilidad como respuesta a la interpelación del otro concreto y
● Afecto como capacidad de ser afectado en un encuentro
Forma de configuración de la adolescencia
Percibimos que el mundo es otro lo cierto es que la metáfora que parece describirlo mejor es el de la fluidez
La fluidez no es nada parecido a liviandad placentera fluidez equivale a desfondamiento de todo soporte
sólido de existencia social, fluidez es el término que designa una condición caracterizada por el cambio de
forma constante no se sabe dónde está el capital pero ya no se haya concentrado en fábricas
Fluidez es entonces el pasaje de un mundo estable a un mundo desregulado y altamente inestable que no se
deja pensar en su novedad por las viejas representaciones
Los ritos (prácticas regladas cargadas de densidad simbólica que habilita un pasaje) han sido considerados
históricamente como núcleos de inscripción de la subjetividad, sin embargo existe una diferencia entre los
ritos institucionales transmitidos de generación y generación y los ritos armados en situación
En los ritos en situación es el otro el próximo, no es el semejante, es decir el otro no se instituye a partir de la
ley estatal sino a partir de la regulaciones grupales
Es aquel que comparte mis circunstancias con el que establezco finalidades y reglas de reconocimiento
recíproco es el otro, el par y no la autoridad simbólica
Los ritos en situación tienen solo validez en un territorio simbólico determinado no se constituyen sobre la
base de transmisión intergeneracional sino sobre la transmisión entre pares son frágiles pero pueden cumplir
la función de anticipar lo que pueda acontecer
Nos encontramos con que la afiliación puede ser grupal fraterna y no necesariamente genealógica y que la
autoridad es más operación de afectación que institución de la ley

GARBARINO, M.F.de, y MACEDO, I. M. de (1991) "Adolescencia". Roca Viva. Cap.I "La


adolescencia"
La tarea esencial del adolescente
La tarea esencial del adolescente es crecer
Adolescere; crecer desarrollarse, nos parece muy ajustada, si todo el transcurso de la existencia puede
entenderse como un crecimiento en el sentido de pérdida y adquisición permanente también es verdad que la

22
situación adquiere en la adolescencia un relieve tan singular como no lo observamos en ningún otro momento
de la vida
Buena parte de la angustia del adolescente pueden adscribirse al crecimiento ya que crecer es siempre
angustiante, la angustia de crecer alcanza su acmé en este momento en que crecer significa ingresar a un
mundo desconocido peligroso e inquietante cómo es el mundo de los adultos
No se trata de un proceso unilateral sino de un proceso bilateral en el cual hay que considerar conjuntamente y
en interjuego recíproco los dos términos del problema, cada movimiento o transformación en el joven produce
su impacto y necesita un ajuste por parte de los padres, si el adolescente se vuelve adulto pierde su infancia y
en cierto sentido también los padres pierden al niño, se establece una interrelación dinámica entre ambos
términos
Las dificultades del adolescente no tienen un carácter unidimensional sino más bien hay que considerarlas
como un producto de una relación bidimensional, de este modo es muy frecuente que las propias resistencias
que tiene el adolescente a crecer se vean estimuladas de un modo inconsciente por las resistencias al mismo
crecimiento proveniente de los padres
● Por un lado están las tendencias regresivas o conservadoras que se oponen al cambio tanto por parte
del adolescente como de los padres
● Y por otro las tendencias progresivas o renovadoras también presentes en ambos
Si observamos ahora únicamente a la adolescente es indudable que existan en él actitudes opuestas y
contradictorias, existe el impulso al cambio qué significa ingresar a un mundo nuevo que le procurará
gratificaciones por mucho tiempo anheladas pero existe también la resistencia al cambio con el objeto de
mantener la dependencia infantil con la protección y seguridad que ello implica, se entabla una lucha
dinámica y conflictiva entre ambas tendencias que contribuye a dar esa imagen compleja y muchas veces
contradictoria y desconcertante del adolescente en el cual se dan conjuntamente aspectos actitudes infantiles
junto a otras muy maduras
El signo distintivo de la tarea esencial del adolescente es el desprendimiento de los lazos infantiles para poder
hacer su ligamen o inserción en el mundo adulto
Este crecimiento tiene su raíz biológica en los profundos cambios corporales que operan en ese momento
determinan que la vivencia que tienen de su propio cuerpo sufra una transformación radical, debe entonces
adaptar o insertar de otro modo su cuerpo cambiado en la realidad que lo circunda, crear una nueva estructura
yo-mundo a través de la vivencia de su cuerpo adolescente
Puede suceder que el adolescente niegue sus cambios puberales lo que da lugar a una discordancia un cuerpo
puber con una mentalidad infantil dificultad de aceptar el crecimiento
Cuando el adolescente acepta sus cambios puberales y busca crear una nueva estructura que lo situe en la
realidad es cuando se origina el conflicto entre sus distintas tendencias y las del medio que lo rodea
Frente a la dificultad de realizar el cambio dentro de ellos mismos, el yo adolescente proyecta en parte esa
necesidad de transformación fuera de sí mismo es entonces el mundo el resultado de transformación
En función de esta misma necesidad de cambio está también el desprecio por lo rutinario tan característico del
adolescente
Es otra expresión del conflicto entre el mundo adulto y el adolescente haciendo este una crítica severa al
mundo adulto el cual le parece vulgar y rutinario, el adolescente es un proyecto ambicioso y es la causa de no
soportar la rutina
Esto tiene su lado positivo en el sentido de un afán por superar los logros de los adultos pero es también
expresión por su incapacidad transitoria por lograr lo mínimo o sea sentirse adulto y sin la necesidad de
dependencia y protección de que goza el niño

23
Entrar en la rutina y mediocridad del mundo adulto sería la visión del fracaso de ese proyecto ambicioso
Debemos reconocer que la actitud renovadora del adolescente es un motivo de perturbación para el estatus
alcanzado por la sociedad adulta
Por otro lado sus sueños ambiciosos sus exigencias desmedidas que no pueden ser ni medianamente
satisfechas por la realidad lo conducen a un famoso sentimiento de frustración y desaliento
Sintiéndose solo y frustrado se quejan de ser incomprendidos sentimiento típico de esta etapa, lo que no es
más que su propia incapacidad de comprender el mundo en el que vive y comprenderse a sí mismo, termina a
veces por no saber ni lo que quiere ni lo que busca y si este sentimiento se hace muy agudo lo conduce a una
falta de interés cayendo en el aburrimiento
El aburrimiento es la vivencia de fracaso de una auténtica tarea renovadora y constructiva es lo opuesto a
creación
La incomunicación, donde hay falta de auténticos vínculos afectivos se sienten solos a pesar de estar juntos
constantemente hay una desesperada búsqueda de compañía y muy frecuentemente de unión sexual pero se
trata solo de un contacto físico sin poder alcanzar una verdadera comunicación que depare goce y felicidad
El conflicto básico del adolescente
Las angustias del adolescente están centradas alrededor del Edipo
La sexualidad infantil caracterizada por la existencia de los instintos parciales y de las diferentes zonas
erógenas al evolucionar hacia la sexualidad de la pubertad se ordena alrededor de la zona genital que establece
la primacía sobre las demás, las funciones sexuales alcanzan su completo desarrollo y el individuo se vuelve
apto para la función reproductora
Los primeros objetos que busca el puber son los padres que es en virtud de una represion de las tendencias
incestuosas que se vuelven hacia otros objetos
El complejo de Edipo no es un fenómeno nuevo sino una reedición de una situación arcaica
Melanie Klein precisó la similitudes y diferencias existentes entre la temprana infancia y la pubertad donde se
revive la angustia relacionada con este complejo
● La capacidad del yo para manejar y dominar las ansiedades diferente, el yo adolescente está mucho
mejor equipado para esta tarea que el yo del niño ya que dispone de múltiples actividades y de otra
inserción en el medio ambiente
La elaboración del edipo en el adolescente está en parte condicionada a la estructura que haya adquirido
durante la evolución sexual infantil pero esto ocurre solo parcialmente ya que no se trata de una simple
repetición sino una re-creación en la que influyen gradualmente los nuevos elementos propios de la situación
presente
Al igual que el niño, el yo adolescente, abrumado por la angustia intensa de tipo incestuoso recurre a métodos
primitivos de defensa estableciendo una disociación de carácter esquizoide
Separa amor y odio y dirige ambos afectos hacia otros objetos diferentes de los padres ubicando los
sentimientos edípicos fuera del círculo familiar obtiene así un mejor control de la ansiedad
● Las personas sobre las que recae estos afectos suelen ser profesores deportistas artistas y en general
individuos destacados de su ambiente del mismo modo siente odio profundo hacia otros objetos
● La defensa a través de la proyección es más o menos exitosa pero es siempre incompleta y no evita
situaciones de tensión familiar con la consecuente angustia y sentimiento de culpabilidad a causa de la
fantasías incestuosas
● Debe recurrir a otras defensas suceden muy frecuentemente que se aisle del medio o no participe o lo
hace escasamente parece un extraño en su casa en casos extremos puede llegar a la fuga del hogar
como intento de escapar de la angustia del incesto

24
● Otras veces adopta una actitud desafiante y de franca hostilidad con los padres sentimiento de rechazo
burla desvalorización suelen observarse con frecuencia
● Otra forma es a través de los deportes la competición con los rivales le da la oportunidad de medirse
ganar o perder sin destruir ni destruirse como una expresión simbólica de la rivalidad con el progenitor
del mismo sexo
Las dificultades por las que pasa el adolescente a causa de la reviviscencia del Edipo no depende solo de él
sino que están condicionadas por la actitud asumida por los padres
Los padres tienen también su oportunidad para revivir su propio Edipo adolescente a través del de sus hijos y
ahora en relación a ellos, si este no ha sido resuelto por parte del adulto puede incluso en casos extremos
constituirse inconscientemente en cómplice y estimular las urgencias instintivas de su hijo
Cuando la represión del edipo es excesiva el adolescente entra en crisis, la relación con los padres se ve
seriamente transtornada así como la adaptación al mundo externo, el proceso de independización gradual de
los padres no tiene lugar, el adolescente mantiene una relación muy hostil con su medio como expresión al
fracaso a su independencia y la conservación del vínculo infantil,
● La urgencia instintiva y anímica del adolescente encuentra una derivación en la actividad
masturbatoria por un lado constituye una descarga importante de sus necesidades sexuales por otro
lado es fuente de ansiedad y sentimiento de culpa, la masturbación se acompaña de fantasías
incestuosas y esta determinan temores de haberse dañado y de haber dañado al progenitor rival
también puede acompañarse con fantasía sádicas contra el progenitor del mismo sexo
Esta significación incestuosa de la masturbación trae como consecuencia;
● Que el adolescente luche tenazmente contra ella a veces esta lucha se extiende contra toda urgencia
instintiva y puede conducir al ascetismo en toda la necesidad física sexual o no, es rechazada y
menospreciada
● Otra consecuencia es el incremento de las tendencias homosexuales la orientación suele fluctuar entre
elección de objetos hetero y homosexual hasta encontrar su definitiva elección
En el caso de la niña es más complicado y conflictual a causa del fenómeno menstrual, la fantasías de la niña
acerca de la menstruación constituyen una fuente de angustia, representa para ella la confirmación de que su
cuerpo ha sido atacado y destruido en forma relativa por su madre con la pérdida consecutiva de la capacidad
para tener niños, la menstruacion tambien es vivida como un castigo por la masturbación clitoridiana y la
fantasías incestuosas que lo acompañan
La femineidad es una conquista más difícil para la mujer de lo que es la masculinidad para el hombre
La menstruación también tiene un aspecto positivo y en circunstancias favorables la niña la recibe como un
signo de madurez sexual
El adolescente para realizar su tarea esencial que es crecer y adaptarse al mundo adulto abandonando la
infancia debe recrear el conflicto básico infantil, es decir el complejo edipico, de las vicisitudes de esta
recreación dependerá su inserción exitosa en el mundo o la conservación de una actitud adolescente en la vida
adulta

LERNER, H. (2006) "Adolescencia, trauma e identidad" en ROTHER HORSTEIN, M.C. (comp.)


Adolescencias; trayectorias turbulentas. Ed. Paidós. Bs.As
Algunas generalidades
Si bien han cambiado las épocas la modernidad ha dejado marcas, algunas de ellas colocaban al adolescente
frente a la presión de lo que podríamos llamar su normatización

25
Normalizador o transgresión implica tener un proyecto cerrado y acabado estudios objetivos laborales casarse
formar una familia etcétera y ese proyecto exige contar de antemano con un mundo dado que es la meta el
paraíso que se desea alcanzar
No obstante en la actualidad esta polaridad no está tan marcada, hoy nos encontramos frecuentemente con;
● El adolescente navegador, dotado de una consistencia yoica o de una plasticidad yoica que le permite
navegar por el mundo y desplegar y expandir diferentes potencialidades creativas, este tipo de
adolescentes busca concretar su proyecto adaptándose, es decir que se puede moldear. El contexto
muchas veces le da espacio a este adolescente no quedando entrampado en el discurso del sistema y
aprende a surcar diferentes caminos, lo importante es moverse buscar no importa el puerto al que se
arribe “caminante no hay camino se hace camino al andar” Antonio Machado.
● Otro tipo de adolescentes sería el Yuppie, expresión a la adaptación absoluta al ideal social de los 80
● Y por último tenemos al adolescente del descarte o de la anomia (desorganización social o
aislamiento como consecuencia de la falta o incongruencia de las normas sociales), estos adolescentes
no pueden ni navegar ni construir y sufren un colapso caótico en cualquier proyecto que inicie aunque
el contexto permita mayor libertad de uso se percibe la dificultad para usarla
La modernidad establecía metas recibirse, casarse, formar una familia, hoy muchos llegan a dichas metas pero
lo que era una meta anhelada y valiosa ya no lo es, muchos sienten que ya no pueden navegar.
El contexto social en nuestro pais ha cambiado, la sociedad funciona como un elemento traumatico en tanto
no permite la navegacion o la concrecion de planes y por ende un proyecto identificatorio
Hablemos de trauma
Trauma para Laplanche y Pontalis (1974) es lo siguiente: "De un modo más general, puede decirse que el
conjunto de fenómenos clínicos en los que Freud ve actuar esta compulsión (de repetición), pone en evidencia
que el principio de placer, para poder funcionar, exige que se cumplan determinadas condiciones, que son
abolidas por la acción del traumatismo, en la medida en que éste no es una simple perturbación de la
economía libidinal, sino que viene a amenazar más radicalmente la integridad del sujeto [...] El yo, al
desencadenar la señal de angustia, intenta evitar verse desbordado por la aparición de la angustia automática
que caracteriza la situación traumática, en la cual el yo se halla indefenso[...]. Esta concepción lleva a
establecer una especie de simetria entre el peligro externo y el interno: el yo es atacado desde adentro, es
decir, por las excitaciones pulsionales, como lo es desde afuera".
El sujeto no es solo historia congelada, no solo repite la historia, ni tampoco es un conjunto de
identificaciones fijas, sino que es el producto de su interacción con su contexto y por lo mismo su subjetividad
es cambiante
Se puede reservar el nombre de subjetividad para el espacio de libertad de esa creación, es una creación de
otro y también de uno,
No tendría otro contenido que ese proceso, la subjetividad es la posibilidad que tiene el sujeto de crear al otro
al mundo y a sí mismo, la condición y el marco para la produccion de subjetividades están dados por el
intercambió social y también estan dados estructuralmente, para un sujeto es imposible no producir
subjetividad
Frente a diferentes acontecimientos sociales la subjetividad o la producción de la misma serán diferentes o
variarán de acuerdo a los vínculos que se establezcan o con los diferentes medios sociales en que se desarrolle
un sujeto
Winnicott señala con su concepto de holding la importancia que tiene contar con un contexto estable y
previsible para que alguien se integre y se convierta en persona, las personas que en medio de este caos social

26
con esta ausencia de holding social han podido construirse y ser corren el riesgo de sufrir todos los trastornos
derivados de las dificultades para la integración y la personalización
Si nos detenemos a pensar que el adolescente ha sido víctima de la amputación de la utopía y la ilusión no nos
será difícil imaginarnos la alteración que ha sufrido la creación de ideales capaces de sostener un proyecto
probable, un proyecto que lo convirtiera en un sujeto en el mundo, como señaló Winnicot, la ilusión necesita
un contexto que fomente en el sujeto la creencia de que él está creando el mundo, esa experiencia es
imprescindible para gestar una realidad psíquica y externa confiable
Cuando un sujeto adolescente va construyendo su identidad ciertas situaciones contextuales sociales pueden
interferir en dicha construcción, esa interferencia guarda relación con la idea de trauma; “son traumáticas
cosas que impiden que el individuo sea, que logre conquistar el “yo soy” y estorban el proceso de llegar a ser
lo que quiere”
El adolescente necesita un piso consistente sobre el cual pueda experimentar si el suelo es demasiado fluido y
poco firme no habrá proceso de desarrollo sobre arenas movedizas no se puede construir, el contexto social
incierto sin horizonte no permite construir ningún proyecto
¿Qué es lo que diferencia a un yo que naufraga de otro que sigue navegando?
La historia de la construccion subjetiva del que navega le permite que su yo se vuelva “idealmente plástico” y
recurra a diferentes modalidades de navegación para atravesar tormentas sin náufragar, en cambio el primero
está sumergido en aguas psicopatológicas depresiones adicciones
“El yo no colapsará en la medida que pueda seguir estructurando proyectos, armando historia generando un
futuro”
Si un sujeto transito por vivencias de amparo y apego tendrá más recursos, los sujetos que contaron y cuentan
con un medio previsible y estable llevan ventaja para que su ideal del yo no sea siempre una quimera, en
cambio quienes hayan padecido una historia llena de discontinuidades duelos traumas severos o todas las
experiencias que obstaculizan la narcisización del sujeto en desarrollo estarán en desventaja
Cómo la historia es una construcción constante, el individuo tendrá innumerables encuentros intersubjetivos la
amistad el enamoramiento el grupo de pares que posibilitará reparar ese yo padeciente y averiado, si hay otro
que refleja sostiene y funciona como objeto especular e idealizado, ese otro se convertirá en generador por vía
intersubjetiva de estructura psíquica
Mcdougall nos advierte que debemos distinguir entre “catástrofes reales” que son individuales de los “traumas
universales” que son el drama de la alteridad, de la sexualidad y de la ineluctable mortalidad del hombre, un
suceso solo puede llamarse traumático cuando enfrentar y resolver esas catástrofes que se encuentran en el
psiquismo se vuelve más complicado que de costumbre, esta autora distingue aquellos hechos traumáticos
que transcurrieron antes de la adquisición del lenguaje sucesos que dejan huellas… incoherencias y los
blancos que provocan en el registro del pensamiento
Si pensamos a la constitución yoica como un paraíso prometido al que se aspira a llegar, frente a este modo de
pensar la idea de trauma tiene más sentido, en cambio si conceptualizamos al yo como un proceso de
construcción constante la idea de trauma deja de tener peso, entonces trauma es una ruptura de la continuidad
pero no todo trastorno en la continuidad es detención, no se produce una detención si se puede “seguir
siendo”.
Lo que puede ser traumático para algunos no lo será para otros porque atraviesan esa situación con una
intersubjetividad sostenedora que en ese momento o posteriori les permitirá usar esa experiencias como
materiales constitutivos de su yo
En algunos casos al trauma solo tendríamos que llamarlo acontecimiento en tanto permita la emergencia de
algo nuevo un acontecimiento genera ruido aumentando la complejidad del sistema el cual puede aumentar los

27
grados de autonomía de un sujeto por un lado un ruido puede ser traumático para algunos y generador de
cosas nuevas de adiciones integradores para otros, para algunos será paralizante en tanto para otros puede ser
posibilidad de creación y de aumento de complejidad yoica de enriquecimiento
Cuesta aceptar ciertos traumas y heridas narcisistas la alteridad la diferencia de los sexos y las generaciones la
muerte inevitable pero es producto de un trabajo psíquico poder aceptar todo esto lo que dará como resultado
una mayor complejización yoica una subjetividad y una identidad más rica y viva
En búsca del sentido de ser, de la identidad, del “yo soy”
Hasta la infancia la identidad se completaba bastante con afirmaciones como “yo pertenezco a esta familia,
yo soy hijo de mamá y papá”, el adolescente debe salir a conquistar nuevos territorios distintas familias
enunciados diferentes de los que lo acompañaron y sostuvieron hasta que hizo la erupción la sensación y
necesidad de querer ser su propio constructor
Hasta no hace tantos años el adolescente estaba inmerso en una cultura de búsqueda de su identidad esencial
suponía que debía encontrar su vocación de una vez y para siempre hoy este modelo hace agua los
adolescentes deben aprender a navegar y buscar con la idea de que el encuentro de su vocación va a ser
muchas veces transitorios hoy la temática pasa por navegar en sí puesto que no hay promesa alguna de
alcanzar un puerto seguro y abrigado
El adolescente tiene como trabajo psíquico centrar la búsqueda de su identidad o si se quiere el delineamiento
de su proyecto identificatorio aunque este sea cambiante
La identidad del yo se construye a lo largo de la vida, el trabajo de identificación no acaba nunca porque el
sujeto no solo se construye sino también se transforma a través del proceso de identificación en su capital
identificatorio hay movimiento y reorganización y la presencia actual del objeto interno no solo es causa de
este movimiento sino que pasa a formar parte constituyente de su subjetividad
La especularidad intersubjetiva que aporta el grupo funciona como contención y aceptación de lo traumático
inexplicable lo que causa angustia son experiencias compartidas que les permite no sentirse aislado le hace
saber que hay unos otros significativos que al transitar por los mismos caminos funcionan como objetos del
self
En los primeros momentos del desarrollo emocional es durante el tránsito adolescente cuando el “yo soy”
confirma la mismidad del sujeto en pos de este logro subjetivo el adolescente busca reivindicar con pasión su
derecho a ser un sujeto en el mundo
El logro de la individualidad y del yo soy siempre exige un contexto interdependiente, se da la paradoja que es
de que se logra ser en función de la presencia del otro de la dinámica intersubjetiva que permite al sujeto
sentirse el mismo
El vínculo con el otro es fundante e imprescindible podrá romper con este futuro siniestro, si inicia un vínculo
que le posibilite otra mirada
Crecer no es solo producto de una tendencia que se hereda sino que es un entrelazamiento de suma
complejidad con el ambiente facilitador y con el contexto familiar social en el cual está inserto
Sin otro no hay producción de subjetividad los objetos del SELF son imprescindibles para la estructuración
del self en los inicios, pero nunca se puede prescindir el vínculo con esos objetos que reconfirmarán darán
brillo mejorarán la autoestima, sin esas respuestas se precipita al vacío cae en una desestructuración
En esos procesos de construcción-reconstrucción se deberán conservar anclajes estables en los cuales nuestra
memoria nos garantiza la permanencia y la fiabilidad
Los cambios y las transformaciones que devengan al yo no deberían alterar la mismidad, el adulto que
devendra no será ajeno al infante que fue, que se ha conformado en el fondo de memoria

28
Si hubo una historia traumática que impidió ligar los diferentes momentos evolutivos se produce una
discontinuidad en la sensación de ser uno de sentir un yo continuo con historia con pasado presente y futuro,
un self fragmentado, un yo alterado, caldo de cultivo para patologías graves
Palabras finales
Se podria aconsejar a la sociedad: por el bien de los adolescentes y de su inmadurez, no les permitan
adelantarse y llegar a una falsa madurez, no les entreguen una responsabilidad que no les corresponde, aunque
luchen por ella. Con la condición de que los adultos no abdiquen, no cabe duda de que los esfuerzos de los
adolescentes por encontrarse y determinar su destino son lo más alentador que podemos ver en la vida que nos
rodea. El concepto del adolescente acerca de una sociedad ideal es incitante y estimulante, pero lo
caracteristico de la adolescencia es su inmadurez y el hecho de no ser responsable, Este, su elemento más
sagrado, dura apenas unos pocos años, y es una propiedad que cada individuo debe perder cuando llega a la
madurez
Arribar a la sensación de "yo soy", y la consecuente relación con "yo era" y "yo seré" (construir su historia),
es un trabajo psíquico que se desenvuelve entretejido con el mundo. De cómo se entramen esos hilados
sociales, de que nuevos marcos contextuales surjan en la vida del adolescente y cómo los transite, dependerá
que los traumas, adversidades, cataclismos emocionales, etc. dejen un sedimento, estructuras y no vacíos. La
lucha se libra entre el proceso identificatorio -proceso en tanto la identidad no es algo acabado sino en
movimiento, por un lado, y por otro el vacio, la futilidad, la sensación de inexistencia, la patologia.

VIÑAR, M. (2013) "Mundos adolescentes y vértigo civilizatorio". Noveduc. Bs As. Cap. 1.


La mirada a las adolescencias del Siglo XXI
Lo biológico no es la causa que determina efectos psicosociales, intrapsíquicos y vinculares, que vendrían por
añadidura; este determinismo lineal es mecanicista y simplificador. Es mejor decir y pensar que la tormenta
hormonal pubertaria es el gatillo que dispara, que desata un trabajo mental inédito (inaugural quizás), que
cada individuo y grupo humano deben transitar, tramitar o resolver. Y que una vez desatada la tormenta
puberal, biología y cultura interactúan en un paradigma complejo sin prioridad lógica de uno sobre otro. La
adolescencia es mucho más que una etapa cronológica de la vida y el desarrollo madurativo; es un trabajo de
transformación o proceso de expansión y crecimiento, de germinación y creatividad, que como cualquier
proceso viviente tiene logros y fracasos que nunca se distribuyen en blanco y negro
Una perspectiva dialogica; transformacion y no etapa
Me propongo recorrer el tema del tránsito adolescente, no solo como una etapa cronológica definible por una
franja etaria entre tal y cual edad, sino como un tiempo de transformaciones, de progresos y retrocesos, de
logros y fracasos, cuyo comienzo puede fijarse en la niña con la menarca y en el varón con la primera
eyaculación o polución nocturna, en compañía del cortejo de cambios corporales por todos conocidos
(caracteres sexuales secundarios). En nuestra cultura actual, favorecida por la mayor expectativa de vida al
nacer, y en los grupos privilegiados por la extensión casi hasta el infinito de estudios y diplomas de
capacitación, la fecha de cierre del tiempo adolescente se ha estirado indebidamente. Por consiguiente creo
que hay retener el período de los 12-13 hasta los 16-17 años de vida, como un tiempo de gran fuerza por la e
intensidad de los cambios que se operan en el cuerpo y en el alma, y llamar al resto juventud o adolescencia
tardía, cuando va cesando la moratoria de la edad y se plantea la inscripción en el mundo adulto.
Hoy, para fijar lo que está bien o mal, la responsabilidad de cada sujeto y cada grupo es mayor que antes, lo
que es un progreso en la autonomía y en la emancipación, pero también un mayor riesgo de error o
descarrilamiento. Lo que la religión y/o el estado legislaban como bisagra entre lo legítimo o ilegítimo ha
sufrido una confiscación, un movimiento de reapropiación.

29
Como dice Edgar Morin, los seres humanos somos producto y productores de la trama social en que vivimos,
somos agentes y efecto de la cultura.
Un límite, regla o ley debe existir siempre, afirma Lévi Strauss. Lo que en la historia viva se debate es con
qué criterios y parámetros se define ese límite, porque no es lo mismo el gesto activo y creador de cambiar
una norma y fundar otra, que la pasividad desdiferenciante de disolverla. No son operaciones análogas sino
opuestas.
a) Del lado de los viejas, del mundo adulto, seguramente todos guarda- mos, en algún rincón secreto del alma,
el recuerdo silencioso pero vivido, de la desmesura de las emociones, del exceso de impulsos, del tumulto, de
lo que fuimos capaces de hacer o pensar en esa época de la vida. En todo adulto y todo viėjo hay una memoria
indeleble, quizás indecible, de esa época de turbulencia y fulguración.

No al singular

No al determinismo lineal

No a la naturalizacion, si a la construcción

No a la herencia positivista

El tiempo vivencial

El cuerpo

El espejo de los pares; las tribus adolescentes

Conductas de riesgo

Adolescencia y proyecto de vida

El adolescente aburrido y sin brujula. La exclusion

Toxicomania y adicciones

Filiacion, adolescencia y exclusion

EJE II: Una lectura psicoanalitica de la adolescencia


2.1. Naturaleza del proceso adolescente: el trabajo de duelo y el logro de la identidad
2.1.- GRASSI, A. y CORDOVA, N. (2010) Adolescencia: reorganización y nuevos modelos de
subjetividad". En "Entre niños, adolescentes y funciones parentales". Buenos Aires: Entreldeas.
El des-orden
Reorganización implica que un orden o “estado de la cosa” es cambiado, transformado por reacomodamientos
reordenamientos por des-orden de lo existente, la incorporación de nuevos elementos des-ordena lo
establecido dando lugar a organizaciones neo (nuevas)

30
En 1o que a produccion subjetiva y adolescencia se refiere, desorden no es una mera oposición a orden ni
dicho des-orden aparece como descuido desgano negativismo, o rebeldía adolescente (aunque todo esto pueda
estar presente en alguna medida), des-orden no es producto de una mera carencia del sujeto ni deviene por
“evolución natural” del desarrollo, des-orden es meta a alcanzar mediante un esfuerzo de trabajo psíquico y su
realización comporta un rédito positivo en la producción de subjetividad
Lo puberal- Lo adolescente
En su devenir la subjetividad trabaja la adolescencia produciendo transformaciones, estos trabajos implican un
potencial saludable (no siempre desarrollado) de cambio. Lo puberal-adolescente al encontrar condiciones de
desarrollo, es una puesta en des-orden del statu quo promotor de neo-organizaciones
Siendo que desorden reorganización y neorganizaciones aparecen ante la incorporación de lo nuevo, de lo
distinto de lo hetero, lo puberal-adolescente trabaja para su incorporación y homogenización lo proveniente de
distintas fuentes;
● un campo intrasubjetivo cómo son los cambios corporales y las vicisitudes de la historia personal
● un campo de intersubjetividad que abarca las relaciones familiares al conjunto de los coetáneos y un
círculo más amplio con quienes se comparte un periodo histórico político social
● un campo que vía transmisión generacional de la vida psíquica toma una dimensión trans subjetiva que
conecta con las generaciones precedentes
Puntualizamos distintos elementos heterogeneos a metabolizar en este periodo;
1. Crecimiento y desarrollo que jaquean la identidad
Los cambios corporales relativos al desarrollo y nuevos funcionamiento endocrino y hormonal, que producen
el crecimiento del cuerpo y la aparición de los caracteres sexuales secundarios, imponen al psiquismo un
trabajo de simbolización, la maduración biológica (bruscos cambios de estatura peso y proporciones
corporales aparición de vellosidad cambios de voz etcétera) que irrumpe en ambos sexos entre los 12 y los 16
continuando durante varios años, replantean en simultáneo las identidades enraizadas a lo somáticos, a la vez
el crecimiento del aparato genital, la maduración de sus órganos sexuales internos y externos (producción de
líquido seminal, la ovulación y la llegada de la menstruación el desarrollo de los senos aparición de vello
pubiano) son elementos que anuncian al psiquismo un trabajo de metabolización de las diferencias de género
sobre el desarrollo de la identidad sexual, la maduración biológica con todo este nuevo funcionamiento
endocrino y hormonal, el crecimiento corporal con su transformaciones y metamorfosis son la materia prima
lo hetera a metabolizar
Los cambios corporales piden revisita de la imágen especular, un nuevo pasaje por el estadio del espejo como
formador de la funcion del yo
Es común en los años de pubertad y adolescencia la aparición de fenómenos de alteración de funciones
corporales, tales como trastornos digestivos y alimentarios, las alteraciones de los ritmos del sueño, trastornos
corporales producidos por el exceso en la ingesta de bebidas alcohólicas y otras sustancias, las actuaciones
sobre el terreno de lo corporal con autoagresiones y automutilaciones, las diversas marcaciones (voluntarias e
involuntarias) sobre la superficie de la piel, la aparición de enfermedades psicosomáticas, fenómenos
conversivos y angustia hipocondriaca. Todos estos desarreglos funcionales acompañados además de temores,
cuando no terrores referidos a lo corporal y sus limites, son una muestra suficiente para dimensionar que la
subjetividad requiere de trabajos de integración psicosomática
La subjetividad demanda encontrar nuevos ordenamientos re-ordenar, des-ordenar las relaciones del cuerpo
infantil con la propia historia con los padres de la infancia con la infancia de los padres con su lugar en el
circuito de deseo familiar.

31
Demanda replantear las identificaciones infantiles enraizadas en lo somático y en la familia, se requieren
nuevas organizaciones que signifiquen, que den sentido al crecimiento y la genitalidad.
Los trabajos de duelo en la adolescencia son paradojales, el fin de la infancia requiere de una caída una
muerte pero a la vez de una conservación superadora, transformación de lo infantil, algo se pierde pero los
referentes simbólicos de la identidad son resignificados (nombre, apellido, filiación, pertenencia a un sexo, a
un grupo de origen, a una generación). Los nexos con el cuerpo de la infancia, con la historia de elecciones
libidinales y de la relaciones objetales familiares, con la genealogia entran en un proceso de resignificación e
historización aun incierto en cuanto a su devenir y que se inicia con los procesos adolescentes
2. Los dos tiempos o fases de la sexuación (y el entretiempo)
Respecto a estos dos tiempos o formas de la sexuacion, nuestra proposicion; Lo puberal-adolescente es el
entretiempo de la sexuación en la medida en que la culminación de la sexualidad (infantil) no se produce (si es
que alguna vez lo hace) autonomicamente y deviene en su conformacion normal definitiva (adulta), requiere
de estaciones de recambio de su identidad infantil, de des-orden del cuerpo, del objeto familiar del
reposicionamiento generacional, entre re-edición y repetición, lo puberal-adolescente tiene urgencia de
transformar y crear, urgencia por la inscripción de un cuerpo que conlleve una identidad diferenciada de lo
infantil, de lo conocido y parental con rasgos originarios y que contenga el deseo genital ligado a un objeto
no-familiar
Entre repetición de lo viejo e inscripción de lo nuevo, lo puberal adolescente demanda un proceso
identificatorio que se debate entre principio de permanencia y principio de cambio
Lo puberal-adolescente es ese entretiempo de trabajos específicos, lugar de transformacion e inscripción del
cuerpo (erogeno) pre-genital en cuerpo genital y de objeto familiar en objeto de deseo no-familiar
3. Erotismo genital y hallazgo de objeto alteran lo familiar
En lo que a constitución del cuerpo genital se refiere, señalamos que la iniciación sexual marca un antes y un
después un hito en los procesos de subjetivación el cual no es sin “el otro”, el otro (a la vez par y extraño) en
su función de compañero sexual (opaco ajeno) en presencia (y diferencia) con su participación coadyuva en la
inscripción del cuerpo genital. A la vez que en la inscripción del cuerpo genital coadyuva, y no sin una
profunda angustia, en la inscripción de la categoria misma de la alteridad del objeto. De alli que el objeto sea
extra-familiar,
La inscripción de la radical diferencia del otro sexo abre a la inscripción de las diferencias con el objeto. Con
el coito se inscriben y reinscriben diferencias corporales, de género y desiderativas, el otro se constituye en su
alteridad como sujeto de deseo
4. La sucesion generacional y su reordenamiento
El reacomodamiento que la adolescencia implica por sus posibilidades de fecundación y procreación impone
al psiquismo un trabajo de simbolización de un nuevo emplazamiento generacional.
El potencial pasaje de hijo/a y su proyección como padre/madre, y consecuentemente el pasaje de padres a
abuelos etc., es un corrimiento generacional cuya metabolización implica un deseo de muerte y asesinato de
los progenitores como operaciones simbólicas
Que en la adolescencia se sobreviva al deseo de muerte y asesinato es fundante del pasaje generacional y para
llegar a un nuevo emplazamiento se requiere que lo adolescente simbolice dicha experiencia. Este nuevo
emplazamiento generacional simultáneamente implica un nuevo registro de la temporalidad, construirse un
pasado va a posibilitar proyectar un futuro. El devenir en cuanto proyecto identificatorio no es sin ligaduras
con la genealogía, la sucesión generacional, el por-venir y el azar.

32
FERNANDEZ MOUJAN, O. (1997) "Abordaje teórico y clínico del adolescente" Ed. Nueva Visión.
Cap. IV y V.
El duelo adolescente
El duelo es un difícil proceso que realiza el yo de manera consciente e inconsciente ante la pérdida de un
objeto
Esta pérdida es importante no solo respecto del objeto en sí sino por la fantasías inconscientes o no ligadas al
mismo y las partes del yo incluidas en el objeto perdido
Se lo considera una lucha que hace surgir en ello dos tendencias;
● Una que rechaza la pérdida y crea una serie de mecanismos inconscientes destinados tal fin y
● Otra que busca liberarse de la tendencia negadora de la realidad psíquica a la cual supone dolorosa y
pretende afirmarse en la tendencia reparadora del vacío surgido
La buena relación con la realidad externa, la autoestima y la capacidad de pensar son las ayudas más
importantes durante este periodo
El mundo externo va devolviendo la capacidad de modificar las fantasías y ansiedades persecutorias al hacer
experiencias paulatinas que devuelven la confianza en los nuevos vínculos
La autoestima alivia la culpa compensa la tendencia de acusarse por la pérdida, este hecho es deluido por las
buenas capacidades reparatorias dadas por la confianza en el amor
El pensamiento brinda una capacidad reparatoria que no necesita su demostración inmediata y permite planear
las conductas reparatorias
La capacidad reparatoria del yo es la fuerza más importante para aceptar la pérdida y hacer frente a nuevos
riesgos; es la capacidad básica para elaborar duelos
Esta capacidad depende no solo de las experiencias actuales de pérdida sino también las buenas experiencias
previas de separación lo que significa identificaciones con aspectos valorados de los objetos que fueron
asumidos por el yo
Lo que el púber siente como peligroso en este cuerpo adulto que empieza a surgir los rasgos de carácter
puberales son fenómenos transicionales sin ser externos permanecen como algo no asimilado al yo
Se logra postergar el enfrentamiento con el complejo de Edipo hasta los 15 años (la resolución del complejo
de Edipo es una de las consecuencias del duelo por la bisexualidad en la adolescencia; aceptar la realidad
externa aceptando su propia identidad lo que supone perder el vínculo edipico con los padres y asumir la
rivalidad con los otros por el nuevo vínculo de amor e interés; la propia pareja)
A esta edad (15 años) el duelo se encuentra en torno a la identidad sexual y la distancia de control sobre los
objetos en niveles más abstractos posibilitados por el desarrollo del pensamiento lógico formal ello
incrementa una percepción más integrada de los objetos
El adolescente de 15 años tiene que defenderse sobre todo de la desesperación por el vacío creado ante la
pérdida de partes del yo, de la culpa intolerable incrementada por las nuevas pulsiones édipicas y de la
sensación de impotencia y desorientación frente a los nuevos vínculos
Sin embargo en esta etapa podemos ver una capacidad especial del yo, lo que Melser llama “fluctuación del
yo” qué consiste en una extrema facilidad para realizar identificaciones (tanto dentro del yo como en los
objetos y el cuerpo)
Otro elemento relevante en este periodo es la nueva forma de pensar es decir que puede pensar a partir de
ideas y no solo sobre objetos concretos lo que indica una mayor capacidad del yo para separarse de la realidad
externa, permite cierto manejo omnipotente de los objetos

33
Las fallas en el pensamiento y en la vida grupal con los otros adolescentes son motivos frecuente de fracaso
en la elaboración del duelo que hacen posible la emergencia de depresiones histerias tendencia de actuación y
otras conductas regresivas durante este periodo
El grupo es una ayuda inestimable por un lado potencia el pensamiento omnipotente por otro lo regula al
exigirle un cierto reconocimiento de la realidad al mismo tiempo facilita las relaciones sociales en base a un
yo grupal
El duelo alcanza su culminación después de los 17 años cuando la desesperación se va convirtiendo en
soledad, las ayudas para elaborar el duelo no se tiene más por lo menos sin conflicto
El adolescente entra a los 17 años en el proceso de reparación adquiriendo su conducta sentido de
responsabilidad el espíritu de lucha se une al espíritu de solidaridad
A esta edad las consultas son por quejas personales por fracasos sexuales o afectivos depresiones
desorientación o quejas familiares por psicopatía sociopatía o caracteropatías
Los enemigos del duelo en la adolescencia son el resentimiento el miedo y el triunfo maníaco de permanecer
estos el duelo se resuelve patológicamente
Ciertos duelos patológicos no se manifiestan clínicamente como sufrimiento del yo sino como carácter
opacidad psicopatías expresiones exageradas y rígidas de las defensas que antes puntualizamos como
normales expresando un duelo patológico de la adolescencia y un trastorno de la identidad es decir expresan la
disociación del objeto y del yo por intolerancia a la ambivalencia que enfrentaría con la integración y la culpa
● En la sociopatía (identidad negativa) se idealiza el aspecto malo con el cual el sujeto se identifica
● En la psicopatía (no tiene empatía ni sentimiento de la moral, una difusión de la identidad) se pondrá
una fragmentación en yoes imposible de integrar
● En la caracteropatía (una pseudoidentidad) el yo queda anulado por una máscara externa que se hace
cargo del objeto perdido y desvalorizado lo cual lleva al sometimiento a un objeto tiránico o idealizado
externo, sino dicha máscara encarna el objeto idealizado y se vuelve el líder tiránico
Para concluir podemos decir que la conducta social, el pensamiento el cuerpo, rasgos de carácter y
pseudoidentidades transitorias son de suma utilidad para ir elaborando el proceso de duelo
Cualquier exageración rigidez o prolongación de estas conductas transitorias son índice de una mala
elaboración del duelo propio de la edad y factores predisponentes de enfermedad

CAPITULO 5. Adolescencia e identidad


Amplitud del concepto de identidad
el concepto de identidad encierra una idea integradora totalizadora de la persona que es percibida negada
deformada por el yo, integradora porque supone al hombre en permanente relación consigo mismo y con las
personas y cosas que lo rodean
La identidad es el logro de una integración entre el ideal de vida para el yo y el de la sociedad en la que vive
el hombre
Al hablar de crisis cambio o lucha por la identidad nos referimos a la percepción que tiene el yo de una
ruptura no solo en el tiempo (continuidad) sino también en el propio self (unidad) y en su relación con la
familia y la sociedad (mismidad)
En este proceso busca construir un nuevo esquema corporal un nuevo mundo interno y su nueva sociedad es
decir es una lucha que realiza el adolescente en los tres campos simultáneamente
Si bien una cara del proceso es la integración con un nuevo, no menos importante es la separación con lo viejo
Crisis de identidad

34
Analizando la crisis de identidad a nivel más personal encontramos que se encuentran por sus cambios en un
periodo transitorio de confusión que rompe con la identidad infantil y enfrenta al yo con nuevos objetos
impulso y ansiedades
Las funciones yoicas se esmeran en discriminar controlar y fluctuar entre los objetos de identificación se
propone tolerar las ansiedades que provocan un sentimiento de no identidad
Las defensas esquizoparanoides (disociación proyección introyección idealización omnipotencia negación),
son las que tienen preponderancia en especial la identificación proyectiva e introyectiva que permite la
confusión necesaria del yo con los objetos y de los objetos con el yo como para permitir la estructuración de
un campo dinámico ambiguo que no exija demasiado compromiso con la realidad
La pseudoidentidad sería una transacción entre la necesidad perentoria que el yo tiene de una identidad y los
obstáculos internos y externos que la rechazan
La vulnerabilidad de los adolescentes dependerá de las fluctuaciones que haga el yo con su identificaciones
“inauténticas” estas fluctuaciones se dan tanto en el cuerpo como en el objeto interno y externo
● A nivel del cuerpo encontramos somatizaciones sentimientos de extrañeza o plenitud abulia
somnolencia fatiga inmotivadas etcétera lo que expresa la utilización del cuerpo en el manejo de los
objetos
● Respecto a los objetos internos y el pensamiento que la fluctuación se manifieste entre las identidades
negativas, seúdoidentidades y grandes teorías, erotización frialdad del pensamiento etcétera modos
todos de controlar la ansiedad y discriminar la confusión existente
● Manejo en el mundo externo, cambio de objeto de amor tendencia al sometimiento o al despotismo
necesidad de pertenecer a grupos nuevos
Durante este proceso se pueden observar verdaderos cuadros de despersonalización y hasta brotes
esquizofrénicos
No es muy frecuente que este proceso desemboque en la despersonalización o bloqueo del adolescente esto es
posible por la enorme flexibilidad que tiene a esta edad
Vicisitudes de la identidad
La confianza depende de las tempranas experiencias en las que las proyecciones de objetos sentimientos y
partes del yo se modifican satisfactoriamente permitiendo la introyecciones que a su vez modifican el mundo
interno, el yo aprende que la crisis son reversibles y las pérdidas temporarias lo que aumenta la confiabilidad
en el tiempo y la interacción ayuda a esperar proveer y discriminar
Cuando la confianza se basa en idealizaciones internas y excesivos cuidados externos hace posible la negación
de los aspectos persecutorios impidiendo la buena discriminación entre lo bueno y malo y llevando a la
confusión entre los objetos y los límites del yo
Cuando el niño encuentra en su familia imágenes adecuadas y positivas para las identificaciones disminuyen
las características conflictivas que siempre tienen los momentos críticos de autodefinición, en cambio si el
chico introyecto imágenes familiares muy conflictivas y negativas destructivas perversas en los momentos de
autodefinición necesita negar grandes sectores del yo por lo persecutorio de las identificaciones ligadas al
mismo
Es necesario que las identificaciones negativas estén al mismo tiempo compensada por identificaciones
positivas asimiladas al yo dándole una suficiente confianza que le permita soportar el sentimiento de
incompletud y de no identidad es decir que esto es lo que le da la capacidad de esperar y pensar sin
desorientación
El mundo interno con que se encuentra el adolescente durante el proceso de duelo es ejecutorio por lo cual es
imprescindible disociar y proyectar lo doloroso esta “sangría yoica” se compensa con una “transfusión al yo”

35
que hambriento de identidad acepta identificaciones introyectivas ideales no asimiladas que le brindan una
fachada un “como sí”, así se forman la pseudoidentidades
Cuando el monto de persecución es muy grande a causa del exceso de identificaciones negativas persecutorias
el yo renuncia a su identidad a lo asimilado y se identifica proyectivamente intrasíquicamente con los objetos
más indeseables y rechazados idealizados ahora en la búsqueda de una certeza absoluta única capaz de
calmarlo, estas identificaciones negativas tienen el carácter de perversas y reales
En el caso de la delincuencia y desadaptación juveniles por ejemplo vemos estos mecanismos de
identificación con los más persecutorio y negado del grupo familiar
Tanto la seudoidentidades como las identidades negativas pueden tener características transitorias ser
máscaras que permitan a través de la pandilla o de la interacción en general ir asimilando al yo tanto lo ajeno a
sí mismo, pero adaptando identidades negativas, esta asimilación dependera de la confianza básica que
permite un mayor grado de autenticidad para consigo mismo y con los demás
Las pseudoidentidades y las identidades negativas son transacciones e implican disociación represión y
alineación del yo una identidad propia en cambio sería una verdadera adecuación que implica integración
elaboración y sublimación
Concepto de identidad
Los elementos que componen la identidad en torno a tres sentimientos básicos; unidad, mismidad, continuidad
Cada uno de estos aspectos se manifiesta en todas las áreas de experiencia; mente, cuerpo y mundo externo
● La unidad de la identidad está basada en la necesidad de integrarse y diferenciarse en el espacio como
una unidad que interactúa correspondería al cuerpo al esquema corporal y a la recepción de
transmisión de estímulos con cierta organización, ante la crisis de identidad se rompe esta unidad por
el cambio físico el cambio de las sensaciones e impulsos que expresan un cierto desorden y el cambio
de la imagen interna del propio cuerpo
● En la continuidad surge la necesidad del yo de integrarse en el tiempo con la adolescencia se produce
una ruptura en la continuidad esto es así por la emergencia de una nueva forma de pensar el poder
pensar a partir de ideas y no solo de objetos concretos permite el transporte en el tiempo y en el
espacio
● La mismidad es un sentimiento que parte de la necesidad de reconocerse uno mismo en el tiempo y en
el espacio se extiende a otra necesidad la de ser reconocido por los demás
Si necesitamos el reconocimiento externo (mismidad) para tener identidad y este reconocimiento no tiene en
cuenta otros aspectos de la identidad personal (unidad y continuidad) se provoca un conflicto en que se
tendería a incluir lo personal como factor pasivo
Esta integración se va dando en el curso de toda adolescencia tomando para cada periodo disociasiones
básicas que permiten la unión paulatina mediante la experiencia
Las tres disociaciones básicas instrumentales son;
● Disociación mente-cuerpo
● Disociación pensamiento-acción y
● Disociación individuo-sociedad
A. Durante el periodo puberal; se subraya la disociación mente-cuerpo para controlar los peligrosos
típicos el cambio real fundamental recae sobre el yo personal que vive el cuerpo como extraño y
peligroso, la búsqueda de la identidad en sus tres aspectos estimula determinadas conductas que tienen
sentido de lucha, la lucha por la unidad perdida se puede detectar por ejemplo en algunas conductas
regresivas regímenes de comida voracidad inapetencia etcétera (orales), suciedad constipación
colecciones etcétera (anales) y masturbación (fálicas), los deportes dan una destreza que fortalece la

36
necesidad de una unidad, la manía del espejo está en esta línea, para fortalecer la continuidad de la
identidad observamos conductas regresivas reflejadas fundamentalmente en los sueños diurnos y los
juegos de palabras, en los sueños diurnos pueden crear un mundo una familia donde los
acontecimientos infantiles se relatan en situaciones nuevas a veces opuestas pero siempre manteniendo
una continuidad con lo infantil, la palabra-acción se debe a que tiene un pensamiento infantil, jugar
con palabras sería como jugar con cosas lo cual le permite mantener la continuidad antes de pasar a
jugar con ideas, el reconocimiento se circunscribe a través de la pandilla dentro de la cual tienen a
indiferenciarse, los deportes le dan la posibilidad de ser reconocido en un nivel social
B. En la mediana adolescencia; la crisis de identidad recae más sobre el yo psicológico la disociación
pensamiento-acción es verdaderamente instrumental pues discrimina entre un pensamiento que busca
orientarse hacia un futuro desconocido y una acción que necesita concretar las necesidades más
perentorias ligadas a la identidad sexual y a la independencia familiar, un ejemplo de conducta que
afianza la ya adquirida unidad de identidad sería el uso de vestidos extravagantes, ambiguos, así como
la pareja narcisista, la continuidad se logra por medio del pensamiento reflexivo que permite un cierto
dominio y conocimiento de las ideologías imperantes en la cultura, el mundo de las ideas no sumerge
al adolescente solo en el futuro sino también en el pasado, el sentimiento de continuidad queda
preservado, la mismidad tiende a buscar reconocerse, al ser reconocido primero entre pares (deporte
pareja amigo íntimo del otro sexo actividades grupales) y luego ante los adultos, en el grupo se
adquiere identidad reconociéndose y siendo reconocido, la identidad grupal que adquiere mucha
importancia resuelve el problema de disociación pensamiento-acción, la acción se realiza por un
pensamiento grupal manteniendo la disociación individual hasta su paulatina integración el grupo
ayuda a la integración
C. Durante la última etapa; la crisis de la identidad recae sobre un yo social disociación
individuo-sociedad apoyándose en las identidades adquiridas, la unidad y la continuidad básicamente
adquiridas permiten instrumentar la disociación individual con la finalidad de dar el toque final a la
mismidad de identidad qué es la tarea básica de esta edad, se podría decir que a los 18 años se ha
adquirido la individualidad pero falta desarrollarse aún la integración con la sociedad, la actividad
social y política tiene ahora una fuerza personal no solo grupal la necesidad de reconocimiento por el
otro tiende a modificar los valores y así la misma idea de identidad se basa en una verdadera
interacción creadora
El surgimiento de una nueva identidad termina con las disociaciones instrumentales e integra al yo del ex
adolescente en una unidad espacial consigo mismo, en el tiempo y con la sociedad en que actúa
El surgimiento de la identidad adquiere importancia recién en la preadolescencia cuando se da el fenómeno de
la identidad proyectiva no para negar sino para verse, reconocerse en el amigo
Llegada la adolescencia la mismidad infantil se rompe, había tres configuraciones de la identidad del yo;
el yo psicológico, el yo social y el yo corporal configuran a su vez la identidad del yo adolescente, que
necesita por la fase de la vida que atraviesa formarse sin más retardos y poder expandirse como persona capaz
de intimidades ya no grupales sino personales en la pareja en la tarea social y en su soledad

GARBARINO, M.F.de. (1992) "Identidad y adolescencia en GARBARINO. M. F. de, y MACEDO, L.


M. de (1991) "Adolescencia". Roca Viva.
Identidad y adolescencia

37
Todo movimiento progresivo implica un cambio, que se produce en función del interjuego de elementos
nuevos, con los que se estan manejando o son en realidad cuando se trata de un cambio en el terreno de la
psicología no se trata de una pérdida,
El devenir humano es un constante cambio
Tal vez el periodo más angustiante y el más importante es el de la adolescencia, va a constituir una pérdida de
su equilibrio de su identidad anterior también en esta edad se va a estructurar a establecer la identidad
definitiva es decir la adulta
Identidad previa
Esta etapa es un momento de la vida en que se produce un cambio total del ser y su mundo cambio que es la
reestructuración total a través del inter juego entre el niño y el adulto desde un punto de vista individual y el
interjuego de generaciones sucesivas desde el punto de vista cultural
Self es la totalidad del ser físico y psíquico pero el concepto de identidad va más allá es decir es el self en
relación con los otros mejor dicho diferenciado igualado y continuado a través y por los otros

2.2. Normalidad y patologia en la adolescencia. El sindrome de la adolescencia normal


2.2.- ABERASTURY, A. y KNOBEL, M. (1990) "La adolescencia normal" Ed. Paidós- Cap. II y Cap. V
pág., 142 a 152.
CAPITULO 2. El sindrome de la adolescencia normal
Normalidad y patologia en la adolescencia

Síntoma. Síndrome

Normalidad. Anormalidad patológica

El Síndrome normal de la adolescencia


● Entidad semi-patológica; es normal en la adolescencia en este caso es el síntoma con características
circunstanciales y transitorias
● Normalidad; se establece sobre las pautas de adaptación al medio es la capacidad de utilizar los
dispositivos existentes para el logro de la satisfacciones básicas del individuo en una interacción
permanente que busca modificar lo displacenteros o lo inútil a través del logro de sustituciones para el
individuo y la comunidad, toda la moción de este periodo de la vida debe ser considerado como
normal, sería anormal la presencia de un equilibrio estable durante el proceso de la adolescencia
● Síntomas; es la conducta del sujeto en este caso del adolescente, el síntoma es la manifestación de algo
cuyo manifestacion es normal en esta etapa la no manifestación de la conducta es enfermedad
● Síndrome; es el conjunto de síntomas, se manifiestan simultáneamente los 10 síntomas pero algunos
de ellos predominan según sea el momento o la crisis que tiene que ir resolviendo el adolescente
● Anormalidad y/o patología; la manifestación de los síntomas es normal pero si excede el tiempo puede
haber una fijación lo cual ya no sería normal. La anormalidad es normal en el adolescente un ejemplo
de patología es si un sujeto a los 25 años continúa con conflictos no resueltos del cuerpo puede haber
una patología. En el adolescente es normal que se manifiesten conductas que sean circunstanciales y
transitorias
● Patología normal; exterioriza sus conflictos de acuerdo a sus estructuras y sus experiencias, las luchas
y las rebeldías externas son reflejos de los conflictos de dependencia infantil

38
Síndrome de la normal anormalidad
Es el conjunto de 10 síntomas que se manifiestan simultáneamente con predominio de algunos según la etapa
por la cual se esté transitando
La mayor o menor anormalidad del síndrome normal se deberá en gran parte a los procesos de identificación y
de duelo que haya podido realizar el adolescente
Los 10 síntomas de la adolescencia normal son;
1. Búsqueda de sí mismo y de la identidad; la idea de sí mismo o del ser implica algo mucho más
amplio en todas las etapas del desarrollo, es el conocimiento de la individualidad biológica social del
ser psicofísico en su mundo circundante que tiene características especiales en cada edad evolutiva, la
consecuencia final de la adolescencia sería un conocimiento del sí mismo como entidad biológica en el
mundo, el todo biopsicosocial de cada ser en ese momento de la vida, el cuerpo y el esquema corporal
son dos esquemas íntimamente relacionados que no deben desconocérse, el esquema corporal es un
resultado intrapsíquico de la realidad del sujeto es decir es la representación mental que el sujeto tiene
de su propio cuerpo, son de fundamental importancia los procesos de duelo con respecto al cuerpo
infantil perdido que obligan a una modificación del esquema corporal el logro de un autoconcepto o
del yo se va desarrollando a medida que el sujeto va cambiando y se va integrando con las
concepciones que acerca de el mismo tienen muchas personas grupos e instituciones y va asimilando
todos los valores que constituyen el ambiente social se va transformando ese sentimiento de identidad
como una verdadera experiencia de autoconocimiento, el adolescente necesita darle a todo esto una
continuidad dentro de la personalidad por lo que se establece una búsqueda de un nuevo sentimiento
de continuidad y mismidad. Para Erickson el problema clave de la identidad consiste en la capacidad
del yo de mantener la mismidad y la continuidad frente a un destino cambiante y por ello la identidad
es un proceso psicosocial que preserva algunos rasgos esenciales tanto en el individuo como en su
sociedad, de la infancia no se pasa al pleno actuar procreativo sino que se atraviesa por la moratoria
psicosexual donde no se requiere roles específicos y le permite experimentar con lo que la sociedad
tiene para ofrecer con el fin de permitir la ulterior definición de la personalidad, en esta búsqueda de
identidad el adolescente recurre a situaciones que se le presentan como más favorable en el momento,
una de ellas es la de uniformidad que brinda seguridad y estima persona,l ocurre aquí el proceso de
doble identificación masiva en donde todo se identifican con cada uno, por ejemplo todos vestidos de
la misma manera, en ocasiones la única solución puede ser la de buscar una identidad negativa basada
en identificaciones con figuras negativas pero reales es preferible ser alguien perverso indeseable a no
ser nada, esto constituye una de las bases del problema de las pandillas de delincuentes los grupos de
homosexuales los adictos a las drogas etcétera, en la necesidad de tener una identidad se recurre a este
tipo de identificaciones anómalo pero concreto, esto ocurre muchas veces sobre todo cuando ya hubo
trastornos de la adquisición de la identidad infantil cuando los procesos de duelo por los aspectos
infantiles perdidos se realizan en forma patológica la necesidad del logro de una identidad suele
hacerse sumamente imperiosa para poder abandonar la del niño, existe también el problema de la
seudoidentidad, expresiones manifiestas de lo que se quisiera o pudiera ser y que oculta la identidad
latente, la verdadera, los adolescentes pueden iniciar precosmente su vida genital aún antes de haber
aceptado su identidad genital, en esta premura que pueden interpretarse como una forma maniaca de
buscar la identidad adulta es posible llegar a la adquisición de ideologías que son solo defensivas, las
que no están auténticamente incorporadas al yo, todo esto puede llevar a la adolescente a adoptar
distintas identidades

39
● Las identidades transitorias; son las adoptadas durante un cierto periodo por ejemplo
introyección proyección la precoz sedución histeroides de la niña
● Las identificaciones ocasionales; son las que se dan frente a situaciones nuevas ejemplo el
primer encuentro con una pareja o el primer baile
● Las identidades circunstanciales; son las que conducen a dos identificaciones parciales
transitorias que suelen confundir al adultos sorprendiendo a veces ante los cambios en la
conducta de un mismo adolescente, que recurre este tipo de identidad, por ejemplo cuando el
padre ve a su hijo adolescente de acuerdo a cómo lo ve en el colegio en el club y no como
habitualmente lo ve en su hogar, este tipo de identidades son adoptadas sucesivamente o
simultáneamente por los adolescentes según las circunstancias, son aspectos de la identidad
adolescente surgen como una de sus características relacionadas con el proceso de separación
de las figuras parentales con la aceptación de una identidad independiente puede interpretarse
como el resultado del manejo de las ansiedades persecutorias y de las capacidades
autodestructivas que obligan a la fragmentación del yo y de los objetos con los cuales este se
pone en contacto con lo consiguiente, proyección al exterior de estas imágenes amenazantes,
La integración del yo se produce por la elaboración del duelo por parte de sí mismo y por sus objetos un buen
mundo interno surge de una relación satisfactoria con los padres internalizados y de la capacidad creadora que
ellos permiten
2. La tendencia grupal; en esta etapa de la vida recurre como comportamiento defensivo a la búsqueda
de uniformidad que puede brindar seguridad y estima personal, hay un proceso de sobreidentificación
masiva en donde todos se identifican con cada uno a veces el proceso es tan intenso que la separación
del grupo parece casi imposible y el individuo pertenece más al grupo, que al grupo familiar no puede
apartarse de la barra y de sus caprichos de moda en cuanto al nivel de actuaciones del grupo y de sus
integrantes representan la oposición a las figuras parentales y una manera activa de determinar una
identidad distinta a la del medio familiar, en el grupo el adolescente encuentra un reforzamiento muy
necesario para los aspectos cambiantes del yo, el fenómeno grupal adquiere una importancia
trascendental ya que se transfiere al grupo gran parte de la dependencia que anteriormente se mantenía
con la estructura familiar y con los padres en especial, el grupo constituye así la transición necesaria
en el mundo externo para lograr la individualización adulta, después de pasar por la experiencia
grupal el individuo podrá empezar a separarse de la barra y asumir su identidad adulta la utilización de
las mecanismos esquizopanoides es muy intensa durante la adolescencia y el fenómeno grupal
favorece la instrumentación de los mismos cuando durante este periodo de la vida el individuo sufre
un fracaso de personalización producto de la necesidad de dejar rápidamente los atributos infantiles y
asumir una cantidad de obligaciones y responsabilidades para los cuales aún no está preparado recurre
al grupo como un refuerzo para su identidad, en el fenómeno grupal el adolescente busca un líder al
cual someterse o si no es él quien ejerce el poder de padre o madre, por los mismos mecanismos
esquizoide el individuo siente que está ocurriendo proceso de cambio en los cuales él no puede
participar en forma activa y el grupo viene a solucionar entonces gran parte de sus conflictos, el
fenómeno del grupo facilita la conducta psicopática normal en el adolescente
3. Necesidad de intelectualizar y fantasear; la necesidad que la realidad impone de recrear al cuerpo al
rol y a los padres de la infancia así como a la bisexualidad que acompaña a la identidad infantil
enfrenta al adolescente con una vivencia de fracaso o de impotencia frente a la realidad externa, esto
obliga también al adolescente a recurrir al pensamiento para compensar las pérdidas que ocurren
dentro de sí mismo y que no puede evitar, las elucubraciones (pensamiento reflexion, hipótesis que es

40
producto de la meditación) de la fantasía consciente y el intelectualizar sirve como mecanismo
defensivo, frente a estas situaciones de pérdida tan dolorosas (son estrategias psicológicas
inconscientes pues están en juego por diversas entidades para hacer frente a la realidad y mantener la
autoimagen), (la intelectualizacion es un mecanismo de defensa donde el razonamiento se utiliza para
bloquear la confrontación con un conflicto inconsciente y su estrés emocional mediante el uso
excesivo de ideación abstracta para eludir sentimientos difíciles) son mecanismos de defens,a la
función del ascetismo es mantener al ello dentro de ciertos límites por medio de prohibiciones y la
función de la intelectualización consistiría en ligar los fenómenos instintivos con contenidos ideativos
y hacerlos así accesibles a la conciencia y fáciles de controlar. Tal huida en el mundo interno permite
una especie de reajuste emocional un autismo positivo en el que se da un incremento de la
intelectualización que lleva a la preocupación por principios éticos filosóficos sociales que no pocas
veces implican un formularse un plan de vida distinto al que se tenía hasta ese momento y que también
permite la teorización acerca de grandes reformas que pueden ocurrir en el mundo exterior, este
mundo exterior se va cada vez más diferenciado del mundo interno y por lo tanto sirve también para
defenderse de los cambios incontrolables de este último y del propio cuerpo
4. La crisis religiosa; es común observar que un mismo adolescente pasa incluso por periodos místicos o
ateismo absolutos, esto concuerda con toda situación cambiante y fluctuante de su mundo interno, la
preocupación metafísica (conjunto de pensamientos) emerge entonces con gran intensidad y las
frecuentes crisis religiosas son el intento de solución de la angustia que vive el yo en su búsqueda de
identificaciones positivas y el enfrentamiento con el fenómeno de la muerte definitiva de parte del yo
corporal, la figura de una divinidad puede representar una salida mágica si las situaciones de
frustración son muy intensas y las vivencias de pérdidas sumamente penosa por carencias de buenas
relaciones y virtud de las características de las imágenes parentales perseguidoras internalizadas el
refugiarse en una actitud nihilista (negación a toda creencia o principio moral religioso político social)
como una aparente culminación de un proceso de ateísmo reivindicatorio puede también ser una
actitud compensadora y defensiva. El misticismo que puede llegar a causar niveles delirantes y el
materialismo con características nihilistas son actitudes extremas de una forma de desplazamiento a lo
intelectual religioso de cambios concretos y reales que ocurren a nivel corporal y en el plano de la
actuación familiar social que resultan incontrolables en esta práctica en este nivel fáctico, la
construcción definitiva de una ideología así como de valores éticos o morales es preciso que el
individuo pase por algunas idealizaciones persecutorias que la abandonen por objetos idealizados con
los egosintónicos (no le genera malestar enfrentarse a situaciones o problemas) para luego sufrir un
proceso de desidealización que permita construir nuevas y verdaderas ideologías de vida
5. Desubicación temporal; desde el punto de vista de la conducta observable es posible decir que el
adolescente vive con cierta desubicación temporal, convierte el tiempo en presente y activo como un
intento de manejarlo en cuanto a su expresión de conducta el adolescente pareciera vivir un proceso
primario con respecto a lo temporal por ejemplo un padre que recrimina a su hijo que estudie y la
respuesta del adolescente es que tiene tiempo que el examen es mañana, es durante la adolescencia que
la dimensión temporal va adquiriendo lentamente características discriminativas a las dificultades para
el adolescente para diferenciar externo e interno debe agregar dificultades para distinguir presente
pasado y el futuro, se puede unir el pasado y el futuro en un verdadero presente, presente que tiene
características no discriminadas y por lo tanto implicaría una temporalidad diferente llegando al
individuo a la adolescencia ya hubo oportunidad de vivenciar parcialmente separaciones muerte de los
objetos internos, externos de partes del yo y cierta limitación de lo temporal al transcurrir el tiempo se

41
va haciendo más objetivo adquiriéndose nociones de lapsos cronológicamente ubicado, por eso creo
que podría hablarse de un tiempo existencial, un tiempo vivencial y un tiempo conceptual. El tiempo
vivencial y el conceptual; puede corresponder a los llamados tiempos rítmicos el tiempo cronológico y
aceptar la pérdida de la niñez significa aceptar la muerte de una parte del yo y sus sujetos para poder
ubicarlos en el pasado como defensa el adolescente espacializa el tiempo para poder manejarlo y
viendo su relación con el mismo como con un objeto si se niega el pasaje del tiempo puede
conservarse al niño dentro del adolescente como un objeto muerto-vivo, esto está relacionado con el
sentimiento de soledad tan típico de los adolescentes que presentan estos periodos en que se encierran
en sus cuartos, se aislan y retraen, estos momentos de soledad suelen ser necesarios para que afuera
pueda quedar el tiempo pasado futuro presente convirtiéndolos así en objetos manejables la verdadera
capacidad de estar solo se logra después de estas experiencias de soledad. La noción temporal del
adolescente es de característica corporales o rítmicas o sea basado en el tiempo de comer defecar jugar
dormir estudiar etcétera es el que se denomina tiempo vivencial o experimental a medida que se van
elaborando los duelos la dimensión temporal adquiere otras características, aquí es cuando surge la
conceptualización del tiempo que implica la noción discriminada de pasado presente y futuro los
primeros se manifiesta a nivel corporal “cuando era chico, cuando sea grande”, mantenerse
únicamente en el tiempo experiencial es una forma de intentar paralizar el tiempo en los cambios de
denegar una perspectiva presente pasado futuro, la percepción y la discriminación de lo temporal sería
una de las tareas más importantes de la adolescencia vinculada con la elaboración de los duelos típicos
de esa edad cuando se puede reconocer un pasado y formular proyectos a futuro con capacidad de
espera y elaboración en el presente supera gran parte de la problemática adolescente, el poder
contextualizar el tiempo vivenciarlo como nexo de unión es lo esencial subyacente a la integración de
la identidad
6. La evolución sexual desde el autoerotismo hasta la heterosexualidad; se puede describir un oscilar
permanente entre la actividad de tipo masturbatorio y los comienzos del ejercicio genital donde hay
más un contacto genital de tipo exploratorio y preparatorio que la verdadera genitalidad procreativa, al
ir aceptando su genitalidad el adolescente inicia la búsqueda de la pareja en forma tímida pero intensa
el enamoramiento apasionado es también un fenómeno que adquiere características singulares en la
adolescencia y que presenta todo el aspecto de los vínculos intensos pero frágiles de la relación
interpersonal adolescente, aparece aquí el llamado amor a primera vista que no solo puede ser
correspondido sino que incluso puede ser totalmente ignorando como ocurre cuando ese ser amado es
una figura idealizada un actor de cine una estrella de deporte etcétera que tiene en realidad las
características de un claro sustituto parental al que el adolescente se vincula con fantasías edípicas,
cabe también aquí el problema de la curiosidad sexual expresada en el interés por las revistas
pornográficas, el exhibicionismo y el voyerismo se manifiesta en la vestimenta en el cabello el tipo de
baile etcétera, en este periodo evolutivo la importancia de las figuras parentales reales es enorme, los
cambios biológicos que se operan en la adolescencia producen gran ansiedad y preocupación porque el
adolescente debe asistir pasiva e impotentemente a los mismos, la tentativa de negar la pérdida del
cuerpo y el rol infantil provoca modificaciones en el esquema corporal que se trata de negar, en la
elaboración de los procesos de duelo normales de la adolescencia, así como durante la fase genital
previa se establece el triángulo edípico en la adolescencia este se reactiva con toda intensidad porque
como la instrumentación de la genitalidad se hace factible el individuo se ve obligado a recurrir a
mecanismo de defensa más persistentes y enérgicos, es durante la adolescencia y como aspecto de la
elaboración de la situación edipica que pueden verse aspectos de conducta femeninos en el varón y

42
masculinos en las niñas que son las expresiones de una bisexualidad no resuelta, al ir elaborando el
complejo de Edipo en el varón aparecen idealizaciones del padre que adquieren las características de
un ser bueno y poderoso que permite visualizar los sentimientos que tiene el adolescente hacia su
padre real y que va a poder manejar en la relación adulta con el mismo puede identificarse con los
aspectos positivos del padre superar el temor a la castración por medio de realizaciones y logros
diversos, completar sus estudios o sus aprendizajes del trabajo aceptar sus progresos que son los que le
mostrarán que en realidad él mismo, el propio adolescente, es el que también tiene potencia y
capacidad creativa. En la níña ocurre algo similar ya que al elaborar su situación edípica puede aceptar
la belleza de sus atributos femeninos y también realizarse en el trabajo o en el estudio de una manera
femenina aceptando que su cuerpo no ha sido ni destruido ni vaciado pudiendo entonces identificarse
con los aspectos positivos de su madre. La raíz de la homosexualidad que suele darse transitoriamente
como una manifestación típica de la adolescencia es preciso buscarla en las circunstancias de que el
padre no asume sus roles o está ausente, tanto el varon como la niña va a ir a la homosexualidad
porque ambos quedan así obligados a mantener la bisexualidad como defensa frente al incesto tanto en
esta homosexualidad normal y transitoria como en la actividad genital previa y la genitalidad
procreativa el proceso masturbatorio está presente desde la temprana infancia hasta la adolescencia
avanzada, la actividad masturbatoria en la primera infancia tiene una finalidad exploratoria y
preparatoria para la futura aceptación de la genitalidad, la masturbación como fenómeno normal de la
adolescencia le permite al individuo en esta etapa de su vida pasar por la etapa esquizoparanoide en su
personalidad, considera a sus genitales como ajenos a sí mismo trata de recuperarlos de integrarlos y
finalmente realizar un proceso depresivo a través de una angustia primero persecutoria luego depresiva
e integra sus genitales a todo el concepto de sí mismo formando realmente una identidad genital adulta
con capacidad procreativa independiente real y capacidad de formar una pareja estable en su propio
espacio y en su propio mundo
7. Actitud social reivindicativa; me refiero a este cuando he hablado del fenómeno grupal no todo
proceso de la adolescencia depende del adolescente mismo la constelación familiar es la primera
expresión de la sociedad que influye y determina gran parte de la conducta de los adolescentes, la
situación de ambivalencia dual, la misma situación ambivalente que presentan los hijos separándose de
los padres la presentan estos al ver que ellos se alejan, si a ellos unimos los mecanismos proyectivos y
esquizoideparanoides típico del adolescente y la reacción de la sociedad en la que el adolescente se
mueve, podemos ver que es toda la sociedad la que interviene muy activamente en la situación
conflictiva del adolescente, la sociedad se hace cargo del conflicto edípico y tiende a imponer su
solución a veces de una manera cruel lo que ya refleja esa situación de ambivalencia dual y el
antagonismo (rivalidad entre personas o ideas) que los padres sienten hacia sus hijos, el fenómeno de
la subcultura adolescente se expande y se contagia como un signo de rebelión, en realidad se trata de
identificaciones cruzadas y masivas qué ocurren como una necesidad de defensa yoica mediante la
cual el sujeto va desprendiéndose de situaciones infantiles y viviendo al mismo tiempo como peligrosa
e indefinida su entrada al mundo de los adultos, el adolescente con su pujanza con su actividad con la
fuerza reestructuradora del su personalidad trata de modificar la sociedad, es posible decir que se crea
una malestar de tipo paranoide en el mundo adulto que se siente amenazado por los jóvenes que van a
ocupar ese lugar. La actitud reivindicatoria y de reforma social del adolescente puede ser la
cristalización en la acción de lo que ha ocurrido ya en el pensamiento, las intelectualizaciones,
fantasías conscientes necesidades del yo fluctuante que se refuerza en el yo grupal hace que se
transforme en pensamiento positivo en verdadera acción social política cultural, esta elaboración del

43
proceso de la adolescencia que sí se puede elaborar bien los duelos correspondientes y reconocer la
sensación de fracaso podrá introducirse en el mundo de los adultos con ideas reconstructivas
modificadoras en un sentido positivo de la realidad social y tendiente a que cuando ejerza su identidad
adulta pueda encontrarse en un mundo realmente mejor
8. Contradicciones sucesivas en todas las manifestaciones de la conducta; El adolescente no puede
mantener una línea de conducta rígida permanente y absoluta aunque muchas veces la intenta y lo
busca, la “personalidad esponjosa” es una personalidad permeable que recibe todo y que también
proyecta enormemente es decir es una personalidad en la que los procesos de proyección e
introyección son intensos variables y frecuentes esto hace que no pueda haber una línea de conducta
determinada por eso es que hablamos de una normal anormalidad, de una inestabilidad permanente del
adolescente, un indicio de normalidad se observa en la habilidad de su organización defensiva es el
mundo adulto el que no tolera los cambios de conducta del adolescente el que no acepta que el
adolescente puede tener identificaciones ocasionales transitorias circunstanciales y exige de él una
identidad adulta que no tiene porqué tener, estas contradicciones con la variada utilización de defensa
facilitan la elaboración de los duelos y caracterizan la identidad adolescente.
9. Separación progresiva de los padres; uno de los duelos fundamentales que tiene que elaborar el
adolescente es el duelo por los padres de la infancia, una de las tareas básicas es la de ir separándose
de los padres, no son ajenos los padres a las ansiedades que despiertan la genitalidad y el
desprendimiento real y a los celos que esto implica en los hijos y en ellos mismos, la evolución de la
sexualidad depende en gran parte de cómo los mismos padres aceptan los conflictos y el
desprendimiento que los hijos de una manera u otra pueden expresar la ambivalencia dual que es el
difícil proceso de separación entre padres e hijos adolescentes, muchas veces los padres niegan el
crecimiento de los hijos y los hijos viven a los padres con las características persecutorias más
acentuadas, ocurre especialmente si la fase genital previa se ha desarrollado con dificultades y las
figuras de los padres combinados en la escena primaria ha tenido y tiene caracteres de indiferenciación
y de persecución, si la figura de los padres aparece con roles bien definidos en una unión amorosa
creativa la escena primaria disminuye sus aspectos persecutorios y se convierte en el modelo del
vínculo genital que el adolescente buscará realmente, la presencia internalizada de buenas imágenes
parentales con roles bien definidos y una escena primaria amorosa y creativa permitirá una buena
separación de los padres un desprendimiento útil y facilitará al adolescente el pasaje a la madurez para
el ejercicio de la genitalidad en un plano adulto, por otro lado figuras parentales no muy estables ni
bien definidas en sus roles pueden aparecer como desvalorizadas y obligarlo a buscar identificaciones
con personalidades más conscientes y firmes por lo menos en un sentido compensatorio e idealizado
en estos momentos la identificación con ídolos de distinto tipo cinematográfico deportivos es muy
frecuente en virtud de la necesidad de negar sus fantasías genitales y la posibilidad de realización
edifica, los mecanismos esquizoparanoides suelen ser muy intensos las identificaciones se hacen
entonces con sustitutos parentales en los cuales pueden proyectarse cargas libidinales, es así como
aparecen relaciones fantaseadas con maestros héroes reales e imaginarios compañeros mayores que
adquieren características parentales y pueden empezar a establecer relaciones que en ese momento
satisfacen más
10. Constantes fluctuaciones del humor y del estado de ánimo; la cantidad y la calidad de la
elaboración de los duelos de la adolescencia determinarán la mayor o menor intensidad de esta
expresión y de estos sentimientos en el proceso de fluctuaciones dolorosas permanentes la realidad no
siempre satisface las aspiraciones del individuo es decir sus necesidades instintivas básicas el yo

44
realiza intentos de conexión placentera a veces displacentera nirvanica con el mundo que no siempre
se logra y la sensación de fracaso frente a esta búsqueda de satisfacciones puede ser muy intensa y
obligar al individuo a refugiarse en sí mismo, la intensidad y frecuencia de los procesos de
introyección y proyección puede obligar al adolescente a realizar rápidas modificaciones de su estado
de ánimo los cambios de humor son típicos de la adolescencia y es preciso entenderlo sobre la base de
los mecanismos de proyección y de duelo por la pérdida de objeto al fallar estos intentos de
elaboración tales cambios de humor pueden aparecer como micro crisis maníaco depresivas
El síndrome de la adolescencia normal permite apreciar la expresión conductual y determinar las
características de la identidad y del proceso adolescente
Al aceptar una normal anormalidad del adolescente tiene por objeto facilitar la comprensión de este periodo
de la vida
Si el mundo adulto lo comprende adecuadamente y facilita su tarea evolutiva el adolescente podrá
desempeñarse correcta y satisfactoriamente o saber de su identidad de todas sus situaciones para elaborar una
personalidad sana y feliz
De lo contrario siempre se proyectarán en el adolescente las ansiedades y las patología del adulto y se
producirá ese colapso o crisis de enfrentamiento generacional que dificulta el proceso evolutivo y no permite
el goce real de la personalidad

CAPITULO 5. El pensamiento en el adolescente y en el adolescente psicópatico Arminda Aberastury


Mauricio Knobel

El proceso de la adolescencia, implica un cierto grado de conducta psicopatica inherente a la evolucion


normal de esa etapa. La exageracion en la intensidad o la persistencia de estos fenomenos configura la
psicopatia, en el sentido y gnoseológico del termino

De acuerdo con Arminda Aberastury en la adolescencia se puede observar la elaboración de tres duelos
fundamentales;
● Duelo por el cuerpo infantil
● Duelo por la identidad y rol infantil
● Duelo por los padres de la infancia

Veamos como estos tres duelos repercuten en la esfera del pensamiento;


1. Duelo por el cuerpo infantil;

En virtud de las modificaciones biológicas de la adolescencia, el individuo, en esta etapa del


desarrollo, se ve obligado a asistir pasivamente a toda una serie de modificaciones que se operan en su
propia estructura, creando un sentimiento de impotencia frente a esta realidad concreta, que lo lleva a
desplazar su rebeldía hacia la esfera del pensamiento,
Este se caracteriza por una tendencia al manejo omnipotente de las ideas frente al fracaso en el manejo
de la realidad externa, vive en es momento la pérdida de su cuerpo infantil con una mente aun en la
infancia y un cuerpo que se va haciendo adulto,
Esta contradicción produce un fenómeno de despersonalización que domina el pensamiento del
adolescente en los comienzos de esta etapa, que se relaciona con la evolución misma del pensamiento.
Las palabras son las adquisiciones culturales transmitidas a los niños por los padres.

45
La pérdida de los objetos reales se va sustituyendo por símbolos verbales que son las palabras, y a
medida que el pensamiento evoluciona, lo conceptual simbólico reemplaza cada vez más a lo concreto
real egocéntrico,
En el adolescente normal este manejo de las ideas le sirve también para sustituir la pérdida de su
cuerpo infantil y la no adquisición de la personalidad adulta, por símbolos intelectualizados de
omnipotencia, reformas sociales y políticas, religiosidad en donde él no está directamente
comprometido como persona física sino como entidad pensante.
Niega así su cuerpo infantil perdido y en fluctuaciónes incesantes con la realidad, que lo ponen en
relación con sus padres, su familia y el mundo concreto que lo rodea y del cual depende, elabora esa
pérdida y va aceptando su nueva personalidad,
La despersonalización del adolescente implica una proyección en la esfera de una elucubración
altamente abstracta del pensamiento, y explica la relación labil con objetos reales a los que
rápidamente pierde, como pierde su cuerpo infantil
Este proceso de despersonalización fluctuante puede por exageración de su intensidad o por fijación
evolutiva adquirir las características observadas en la psicopatía. La simbolización fracasa, el símbolo
y lo simbolizado se confunden y las ideas tratan de desarrollarse en el “plano orgánico”, que es lo que
lleva a la acción en cortocircuito
Aqui la confusión puede ser extrema y el adolescente niega su realidad biopsquica comenzando a
actuar roles fantaseados que siente como fantaseados,
Todo el fenómeno del “impostor” o el de “si yo fuera usted” caben en esta descripción. Esto nos lleva
al conflicto de identidades y al segundo duelo
2. Duelo por la identidad y por el rol infantil;

En la adolescencia hay una confusión de roles ya que al no poder mantener la dependencia infantil y al
no poder asumir la independencia adulta el sujeto sufre un fracaso de personificación y así delega en el
grupo gran parte de sus atributos y en los padres la mayoría de las obligaciones y responsabilidades.
Recurre a este mecanismo esquizoideo quedando su propia personalidad fuera de todo el proceso de
pensamiento, con un. manejo omnipotente; es la irresponsabilidad típica del adolescente, ya que él
entonces nada tiene que ver con nada y son otros los que se hacen cargo del principio de realidad. Así
nos podemos explicar una característica típica de la adolescencia, la "falta de carácter”, surgida de este
fracaso de personificación, que a su vez lo lleva a confrontaciones reverberantes con la realidad, un
continuo comprobar y experimentar con objetos del mundo real y de la fantasía que se confunden
también permitiendole a su vez despersonalizar a los seres humanos, tratandolos como objetos
necesarios para sus satisfacciones inmediatas. Esta desconsideración por seres y por cosas del mundo
real hace que todas sus relaciones objetales adquieran un carácter, si bien intenso, sumamente lábil y
fugaz, lo cual explica la inestabilidad afectiva del adolescente, con sus crisis pasionales y sus brotes de
indiferencia absoluta.
Aquí, la exclusión del pensamiento lógico, que surge del duelo por el rol infantil se convierte en la
actuación afectiva, como el duelo por el cuerpo de la infancia se convertia en la actuación motora
El manejo objetal, realizado de la manera descripta, lo lleva a una serie de continuos cambios, a través
de los cuales establecerá su identidad, siguiendo un proceso lógico de maduración. En este desarrollo
y, en parte, por los mecanismos de negación del duelo y de identificación proyectiva con sus coetaneos
y con sus padres, pasa por períodos de confusión de identidad. El pensamiento comienza a funcionar

46
de acuerdo con las características grupales, que le permiten una mayor estabilidad a través del apoyo y
del agrandamiento que significa el yo de los demás, con el que el sujeto se identifica
Esta sería una de las bases del fenómeno de las "barras", en donde el adolescente se siente
aparentemente tan seguro, adoptando roles cambiantes y participando de la actuación, responsabilidad
y culpas grupales son trasladadas a su propio proceso de pensamiento, en el cual los afectos y los
objetos depositarios de los mismos son también fragmentados y tratados con prescindencia de una
responsabilidad personal. Amor y odio, culpa, reparación, son intermitentemente vividos con
intensidad y rápidamente eliminados, para volver a ocupar posteriormente el pensamiento, en ese
proceso constante de aprendizaje que significa este juego de manejo objetal y afectivo.
La exageración o fijación de este proceso por la no elaboración del duelo por la identidad y por el rol
infantil explica las conductas psicopáticas de desafecto y crueldad con el objeto e induce a la actuacion
y falta de responsabilidad, el psicópata maneja a las personas como objetos con desconsideración y sin
culpa en forma permanente e intensa así como al adolescente lo hace transitoriamente en su evolución
y con capacidad de rectificación. El cortocircuito afectivo, al eliminar el pensamiento, donde la culpa
puede elaborarse, permite el maltrato definitivo de los objetos reales y fantaseados, creando en última
instancia un empobrecimiento del yo, que trata de mantenerse irrealmente en una situación infantil de
irresponsabilidad, pero con aparente Independencia, a diferencia del adolescente normal, que tiene
conflictos de dependencia pero que puede reconocer la frustración. La imposibilidad de reconocer y
aceptar la frustración obliga a bloquear la culpa e inducir al grupo a la actuación sadomasoquista, no
participando de la misma.
Puede hacerlo porque disocia pensamiento de afecto y utiliza el conocimiento de las necesidades de
los demás para provocar su actuación, satisfaciendo así, indiferentemente su apariencia, sus propias
ansiedades psicóticas.
El adolescente normal puede, en estas circunstancias, seguir los propósitos del psicópata y sucumbir
en la acción ya que participa intensa y honestamente de la misma. Es así que el conflicto de identidad
en el adolescente normal adquiere en el psicópata la modalidad de una mala fe conciente, que lo lleva
a expresiones de pensamiento cruel, desafectivo, ridiculizante de los demás, como mecanismos de
defensa frente a la culpa y al duelo por la infancia perdida que no pueden ser elaborados.
Normalmente el adolescente va aceptando las perdidas de su cuerpo infantil y de su rol infantil, al
mismo tiempo que va cambiando la imagen de sus padres infantiles, sustituyéndola por la de sus
padres actuales, en un tercer proceso de duelo
3. Duelo por los padres de la infancia;

La relación infantil se va abandonando paulatinamente y dificultosamente. La impotencia frente a los


cambios corporales, las penurias de la identidad, el rol infantil en pugna con la nueva identidad y sus
expectativas sociales hacen que se recurra a un proceso de negación de los mismos cambios, que
concomitantemente se van operando en las figuras y las imágenes correspondientes de los padres y en
el vínculo con ellos, que por supuesto no permanecen pasivos en estas circunstancias, ya que también
tienen que elaborar la pérdida de la relación de sometimiento infantil de sus hijos, produciéndose
entonces una interacción de un doble duelo, que dificulta aún más este aspecto de la adolescencia. Se
pretende no sólo tener a los padres protectores y controladores, sino que periódicamente se idealiza la
relación con ellos, buscando un suministro continuo que en forma imperiosa y urgente debe satisfacer
las tendencias inmediatas, que aparentemente facilitarian el logro de la independencia. El pensamiento
se expresa aquí en forma de contradicciones: es la necesidad inmediata del automóvil familiar

47
(dependencia), para mostrarse como adulto y dueño de la potencia familiar (seudoindependencia). La
demanda desconsiderada y a veces inoportuna de dinero (dependencia) paramanejarse como un
individuo adulto y potente frente a los demás (seudoindependencia).
Las contradicciones de pensamiento de este tipo, tan frecuentes en la adolescencia, nos muestran falta
de elaboración conceptual y la permanencia en niveles inferiores de este proceso. Esta misma
contradiccion produce perplejidad en el manejo de las relaciones objetales parentales internalizadas y
rompe la comunicación con los padres reales externos, ahora totalmente desubicados en el contexto de
su personalidad.
Figuras idealizadas deben sustituirlos y el adolescente se refugia en un mundo autista de meditación,
análisis, elaboración de duelo que le permite proyectar en maestros ídolos deportivos artistas amigos
íntimos y su diario la imagen paterna idealizada, esta soledad periódica del adolescente es activamente
buscada por él, ya que le facilita su conexión con los cambios internos, en este proceso de pérdida y
sustitución de los mismos que va a terminar enriqueciendo al yo.
El diario que frecuentemente llevan los adolescentes sirve para la externalización de los objetos
internos y de sus vínculos permitiendo el control y cuidado de los mismos en el exterior, esto facilita la
elaboración de las relaciones objetales perdidas, mediante la fijación de las mismas en su diario
En el psicópata los padres infantiles tienen vigencia real y permanente y la pérdida del suministro
continuo acarrea frustraciones demasiado intensas para ser soportadas, hay aquí una verdadera
“demencia de las percepciones” que le impide verificar la realidad y le obliga a vivenciar la frustración
como una amenaza de muerte, de la que se defiende con una respuesta cortocircuito, en donde la
percepción distorsionada actúa como causa desencadenante de un afecto avasallador,
Por ejemplo, la falta de dinero puede llevar al acto delictivo o criminoso que facilita su obtención, hay
percepción acción sin pensamiento
En vez de buscar la soledad que le permita su elaboración de la pérdida de los padres infantiles la evita
constantemente tratando de diluir su personalidad a través de identificaciones proyectivas masivas con
grupo de delincuentes a los que hace actuar sus ansiedades. El psicópata percibe el mundo externo
como amenazador y frustrante, y en su respuesta apresurada y angustiosa frente a esta amenaza utiliza
su caudal intelectual para prescindir de la confrontación crítica, y emplea tan sólo una racionalización
más o menos coherente para explicar su conducta desaprensiva y cruel, carente aparentemente de
culpa, y la no necesidad de justificación, ya que está permanentemente en la actitud de recibir el
suministro continuo que el adolescente normal sólo desea momentánea y periódicamente.
El duelo por el cuerpo infantil perdido, por la identidad y el rol infantil, y por los padres infantiles,
llevan consigo, dentro de un proceso de pensamiento una dificultad en la discriminación de la
ubicación temporal de sujetos y de la identificación sexual del mismo

El tiempo en el adolescente

El adolescente entra en una crisis de temporalidad, presentando entonces el pensamiento del adolescente las
contradicciones de inmediatez o de relegación infinita frente a cualquier tipo de posibilidades de realización, a
las que pueden seguir sentimientos de impotencia absoluta. Es un verdadero estado caótico que por momentos
pareceria indicar la invasión y predominancia de un tipo de pensamiento primario.

48
Este va siendo sustituido por el juicio de realidad, mediante la elaboración de los tres duelos enunciados que
permite ubicar cuerpo, rol y padres infantiles en el pasado aceptando el transcurso del tiempo y con éste el
concepto de muerte como proceso irreversible y natural dentro del desarrollo

En el psicopata, la atemporalidad se establece rigidamente en su pensamiento; posterga y exige sin


discriminación frente a la realidad, y actúa sin esta noción limitante, que permite la ubicación del individuo en
el mundo.

La periodicidad de pensamiento primario observada en el adolescente normal adquiere caracteres de


permanencia en el psicopata.

El sexo en el adolescente

Los cambios biológicos de la pubertad imponen la sexualidad genital al individuo e intensifican la urgencia
del duelo por el cuerpo infantil perdido qué implica también el duelo por el sexo perdido

En la pubertad, la definición de su capacidad creativa marca una nueva definición sexual en la procreación, ya
que sus genitales no sólo aceptan la unión de la pareja, sino también la capacidad de crear. En la adolescencia
se intenta recuperar infructuosamente el sexo perdido mediante la masturbación que es una negación
omnipotente de esta pérdida,

El psicópata en cambio permanece en una bisexualidad fantaseada que tiene para él todo el significado de la
realidad psíquica y que le impide relaciones amorosas de objeto y el logro de la pareja que busca y que en
cambio si puede obtener el adolescente normal, éste pasa por momentos de confusión de sexo qué implican
fantasías homosexuales que son las que precisamente le permiten elaborar los duelos inherentes a esta etapa
del desarrollo

El duelo por la bisexualidad infantil perdida acompaña a estos tres procesos de duelo.

La elaboración incompleta de los duelos o la no elaboración de alguno de ellos producirá fijaciones o


exageraciones de estos procesos, que podrán ser identificados en la conducta psicopática, donde adquieren
modalidades de fijeza y de irreductibilidad, que, teniendo en cuenta estas consideraciones, pueden ser
modificadas mediante el tratamiento psicoanalitico.

● Duelo por la bisexualidad perdida; en esta etapa se configura el pasaje del autoerotismo a la
heterosexualidad, el adolescente primero se mira a sí mismo y se explora luego debe fijarse en su
mismo sexo para compararse (homosexualidad) lo hace mediante el juego y el toqueteo.
○ Homosexualidad; en los hombres se ve en los juegos de mano y en la mujer en ese ir
constantemente del brazo de la amiga en el baile entre ellas etcétera es bastante coherente que
se fije primero en el mismo sexo y recién ahí tender a buscar una relación en el sexo opuesto,
no puede darse un corte tan grande en el pasaje del autoerotismo a la heterosexualidad,

49
La necesidad de elaborar los duelos lo obligan a manejos psicopáticos que identifican sus conductas, estos
pueden ser la necesidad de delegar toda responsabilidad en el grupo, la necesidad de manejar el tiempo a
manera de objeto etcétera

Adolescencia, posmodernidad y escuela. Guillermo Obiols- Silvia Di Segni Obiols


Los procesos que se suceden en el duelo se han dividido en tres etapas:
1. La negación; mecanismo por el cual el sujeto rechaza la idea de pérdida muestra incredulidad siente
ira. Es lo que nos lleva a decir: "No puede ser que haya muerto, lo vi ayer por la calle", cuando
inesperadamente recibimos la noticia de la muerte de un amigo, aunque sepamos que hay muchas
maneras de morir en pocas horas.
2. La resignación; admite la pérdida y sobreviene como afecto la pena
3. El desapego; en la que renuncia al objeto y se produce la adaptación a la vida sin él, esta última etapa
permite el apego a nuevos objetos

2.3. Surgimiento de la genitalidad; la identidad del rol sexual.


2.3.- ALTERMAN, M. (2008) "La identidad del rol sexual. Los vinculos entre el hombre y la mujer".
Lugar Editorial. Introducción y Cap. IV
Introduccion
Muchos de los factores que tienen que ver con la identidad individual tienen relación también con aquella
identidad en la que cada ser humano se ubica desde un lugar particular y propio en la realidad que le toca
vivir. Este lugar se halla muy vinculado a la identidad del rol sexual con el que se desarrolla y se mueve en la
vida cada individuo, y es independiente del sexo biológico con el que ha nacido y del lugar que la cultura le
otorga a cada uno de los sexos según el mormento histórico y la cultura en la que transcurra la existencia de
cada ser humano, como así también en función de los roles que debe ejercer según su realidad, e incluso, su
posición socioeconómica
Podríamos considerar entonces que la identidad tiene que ver con la condición y el rol, femenino o masculino,
que nos toca ejercer en la vida y en la sociedad a la cual pertenecemos, dado que la coincidencia de ambos y
la aceptación libre de ella por parte del sujeto establece la verdadera identidad a la que llega cada individuo en
la adultez.
Por ello debemos preguntarnos ¿en qué se diferencian rol y condición? No es fácil responder a este
cuestionamiento dado que uno depende del sexo biológico, "la condición, y el otro depende de las conductas
que una sociedad, grupo o cultura espera de un sujeto de acuerdo con las pautas que ha impuesto para esa
condición, que sería "el cumplimiento de ese rol".
De todos modos, ambos tienen un factor de coincidencia, que es la identidad que un sujeto tiene o elige a fin
de cumplir con su condición, o de ejercer el rol que esa condición le impone
¿Por qué esto es así? Es asi pues la identidad es el resultado final de las diferentes elecciones que el sujeto ha
realizado a través de las etapas evolutivas, ya sea por identificación o por oposición, y a partir de los
diferentes arquetipos que ha concebido como tales a lo largo de su vida.
Esta identificación es la que determina el ser que cada uno sera en la vida para si y para con los demás y que
lo hace unico y diferente del resto de las personas distinguiéndose de los demás por sus atributos, virtudes y
defectos, a partir de cómo se estructura la organización de su personalidad de la forma de estructuración de los
contenidos de su inconsciente como resultado de la historia de sus vínculos primitivos y a partir de la realidad
que le toca vivir

50
CAPITULO 4. Masculino/femenino; ¿Existe actualmente la identidad del rol?
Debemos considerar que aquellos rasgos de la identidad en el rol sexual impuesto por la cultura se pueden
llegar a traducir en términos afectivos o emocionales en un conflicto o no para un individuo, una sociedad,
una cultura o un momento historico dado.
Si consideramos en cada individuo su egosintonia es decir la ausencia de conflicto y aceptación del sexo que
biológicamente le ha correspondido, deberíamos tener en cuenta además los factores externos que también
inciden sobre la identidad de cada sujeto cómo es su lugar de pertenencia o el bagaje cultural y social al que
pertenece o que le han permitido al respecto y la posibilidad de hacer su identidad como persona y de su
identidad de rol su felicidad o su satisfacción, seguramente que ese sujeto disfrutara libre de conflictos de su
identidad de rol y de su ejercicio
Pero, de estar sujeto a la egodistonía de su sexo biológico con su identidad de rol es posible que se sienta
condenado a una vida conflictiva lo que daría por resultado un ser insatisfecho consigo mismo, que muchas
veces se encontrará en la necesidad de pedir ayuda constituyéndose esta problemática en un motivo de
consulta muy habitual en las consultas clínicas cotidianas
De acuerdo con esa egosintonía o egodistonía que constituya la elección o el cuestionamiento al sexo
biológico con el que ha nacido cada individuo, constituido como una identidad, tendra o no dificultades para
la consolidación definitiva de su identidad adulta y la concreción de su proyecto de vida, la conflictiva le
plantea la posibilidad de quedar atrapado entre las exigencias que la sociedad le impone, por un lado, y la
dificultad que se le presenta de tener que definirse a sí mismo desde el ejercicio de la identidad del rol sexual
que pretenda o elegir cumplir como un miembro adulto dentro de dicha sociedad
Pero también por otra parte, hay otras alternativas que pueden ser consideradas conflictivas o no, como la
situacion en la cual un sujeto siente la necesidad de ubicarse en la posicion psicologica, emocional o concreta
de plantearse la renuncia a su sexo biológico, es decir, a aquel con el que ha nacido, o tal vez el deseo
consciente o inconsciente y/o la fantasía de ser más feliz si pudiese pertenecer al sexo opuesto, sea por
elección, como se ha dado en considerar actualmente, sea por influencias y elecciones de sus padres en sus
relaciones más primitivas, sea por padecimientos vinculares desde su historia, o considerando algún otro tipo
de patología psicológica o psiquiátrica que hublese podido aparecer, etc.
De todos modos , cada sujeto funcionará cumpliendo la función que le marca su sexo biológico siempre y
cuando este resulte ser egosintónico con el lugar que ocupa en el vínculo con los demás respecto de su
identidad de rol, mientras que cumplirá la función del sexo opuesto en aquellas relaciones en las que aparecen
aspectos egodistonicos respecto de su sexo biologico, que se ha podido advertir tanto en parejas
homosexuales como heterosexuales
A partir de estas consideraciones, podremos entonces advertir que las modificaciones que se producen en las
respectivas identidades del rol para el hombre y para la mujer pueden llegar a provocar que las relaciones
entre ambos sexos se establezcan desde el logro de "una coexistencia pacífica", pero que será "de una manera
paradojal, pues lo harán tal vez separándose".
¿Por qué semejante planteo? Pues porque se podía establecer que las mujeres entre sí y los hombres entre sí
pueden llegar a convivir más armónicamente, y que además esto podría ser favorecedor de una relación, sin la
rivalidad ni la competencia que lo que la historia de la humanidad ha demostrado para las relaciones entre el
hombre y la mujer en la heterosexualidad
Parece que desde siempre las culturas han puesto en competencia y rivalidad a ambos sexos, es decir, han
enfrentado al hombre y a la mujer por las más diversas razones y circunstancias.al aceptar que los sexos son,
tanto desde el punto de vista biológico como psicológico, indudablemente "diferentes y complementarios y no
un espacio de enfrentamiento como ha sido sostenido ancestral y culturalmente.

51
Dicho en otros términos, una vez ubicados hombre y mujer en sus respectivas condiciones desde el punto de
vista social, biológico y socioeconomico, quedarán claramente delimitados los roles, y en consecuencia, en la
convivencia se ejercerá el respeto recíproco a las identidades de cada uno y la equidad de los roles; por lo
tanto, en el ejercicio libre de la propia identidad estará dada la armonía de la pareja, pues el ejercicio libre de
la identidad implica el respeto por el otro y el placer por el ejercicio de la propia libertad de elegir.
En la medida en que el hombre o la mujer reciba de su pareja el respeto por su identidad, será capaz de
sostener dicha identidad sin deterioro y cumplir satisfactoriamente su rol, aun independientemente del sexo
biológico que tenga.

EJE III: Aspectos cognitivos en el proceso del desarrollo adolescencial


3.1- Características funcionales del pensamiento lógico-formal
3.1.- FERNÁNDEZ MOUJAN, O. "Abordaje teórico y clínico del adolescente"- Ed. Nueva Visión. Cap.
IX
El pensamiento adolescente
Las tareas más urgentes del adolescente serían cristalizar su identidad, jerarquizar las funciones yoicas y
asumir los roles sociales. Con finalidades de estudio separamos para dedicarnos a una de ellas; jerarquizar las
funciones yoicas
De estas funciones la más prominente es el pensamiento.
Como todo duelo, la adolescencia estimula al yo en las tareas de aceptación de la pérdida y redistribución
libidinal en los nuevos objetos, es decir el Yo está ante la tarea de elaborar la pérdida discriminar su mundo
interno del circundante y volver a relacionarse con lo nuevo
La solución radicaría en poder “aliviarse” del caos interior sin proyectarlo masivamente al mundo externo de
modo que impida toda interacción discriminativa (separación – unión).
Esta situación discriminativa crea un contexto depresivo de unión y pérdida saludable para el Yo, con su
función de pensar, vaya dejando “vínculos” infantiles que requerían determinada forma de pensamiento, por
nuevos “vínculos” adultos que requieren un nuevo tipo de pensamiento.
Los vínculos infantiles toman una característica especial, que Piaget conceptualizó como “la inclusión de lo
posible dentro de lo real”: son vínculos inmediatos, en lo que se requiere un pensamiento lógico concreto
capaz de reproducir configuraciones mentales similares a las propuestas por la realidad, el pensamiento es un
compás de espera para la acción
Los vínculos adultos que el adolescente empieza a descubrir se caracterizan porque hay una percepción de los
“objetos reales incluidos dentro de los posibles”, lo cual quiere decir que existiría un tipo de pensamiento
lógico-formal capaz de pensar a partir de ideas y no sólo sobre objetos reales (dichas ideas más adelante son
transformadas en reales o no).
El adolescente va dejando tambien una forma de pensar que le permitiria operar de una manera eficaz y va
adquiriendo una nueva forma de pensar que le permitirá a su vez una nueva forma de vincularse con la
realidad
Se da una suerte de movimiento que va de la acción al pensamiento, para luego pasar del pensamiento a una
nueva forma de operar, ya no solo sobre objetos reales que configuran una realidad conocida sino sobre
objetos ideales que harán posible nuevas configuraciones.
Esta doble actitud de replegamiento y expansión del yo es característica en todo el desarrollo de la persona.
Piaget las llama fases de egocentrismo y de descentralización;
● En la primera fase infantil sensoriomotriz el objeto es poco discriminado del sujeto primando lo
sensorial como centro egocéntrico

52
● A la fase siguiente la llama Piaget de lenguaje simbólico (pensamiento verbal) en ella nuevamente el
yo se expande a través del pensamiento, las representaciones son el centro egocéntrico desde donde se
controla la realidad lo subjetivo se confunde con lo objetivo
● La descentralización paulatina se efectúa mediante las operaciones concretas (pensamiento concreto)
con que el chico va reemplazando sus primitivos puntos de vista (forzado por el juicio de realidad) por
otros más reales, que lo limitan en el dominio de los objetos.
● Por ultimo, se da una nueva expansión del yo con el pensamiento lógico-formal. El sujeto vuelve a
dominar la realidad, esta vez con teorías, confundiendo en distinto grado Yo - no yo, el símbolo con
los simbolizado, lo posible con lo real, las proposiciones con los hechos reales. La descentralización
aparece con la vida grupal y el trabajo.

En esto podemos ver como hay un ir y venir entre dos tipos de pensamiento:
1. MÁGICO, que controla el objeto omnipotentemente y
2. CIENTÍFICO, que controla los objetos de una manera más real.
Uno intenta controlar la realidad el otro se prepara para conectarse con la realidad haciendo proposiciones
(hipótesis) que tienen que ser puestas a prueba
Durante la adolescencia, el pasaje del pensamiento lógico-formal con características mágicas al pensamiento
lógico-formal con características científicas se realizan en tres tiempos, qué corresponden a los tres periodos
en que hemos dividido las etapas de la adolescencia.
● La primera forma de pensar la encontramos en la pubertad periodo en que se ejercita por primera vez
el pensamiento que hemos llamado mágico.
● En la mediana adolescencia se acepta la pérdida de la omnipotencia del pensamiento aunque no
totalmente se mantiene en los grupos donde el control es compartido
● Al final de la adolescencia se supone que se ha adquirido totalmente el pensamiento lógico-formal lo
que permite al adolescente estar a la par de los adultos para entender y criticar la cultura
Las ideas y palabras como objetos transicionales
Las palabras y las ideas tienen en el adolescente funciones de evacuación, control, tanteo y elaboración de
pérdida.
El adolescente busca ir conjugando, de alguna manera, su mundo infantil y la nueva realidad. Para ello
reemplaza los objetos primitivos por abstracciones simbólicas, palabras que luego se estructuran en teorías
que tienen al comienzo la forma del código adulto pero el contenido mágico del mundo infantil. Son una
transición, por un lado se alejan de los objetos infantiles, reemplazandolos por símbolos abstractos, pero por
otro lado son utilizados mágicamente como si fueran juguetes.
Es por esto que las llamaremos “palabras juguetes” considerando que apuntan a la misma finalidad que los
objetos transicionales, desprendimiento paulatino de lo familiar y control de lo desconocido.
Es justamente en esta transición donde lo adulto y lo infantil se mezclan y se modifican. Por un lado, el
mundo se llena de sentimiento y fantasía infantiles y, por otro, va adquiriendo una estructura formal que lo
familiariza con lo nuevo.
La abstracción simbólica (palabras y teorias) sirve como pasaje y elaboración, siempre que no se convierta en
una huida de la realidad, siempre y cuando acepte ser luego sometida a la prueba de la realidad (semejante al
método científico que elabora teorías e hipótesis con la condición de que puedan ser confrontadas con la
realidad empírica).
Una dificultad importante para abandonar el pensamiento infantil consiste en que, en la nueva forma de
pensar, lo real (cercano) no incluye lo posible (lejano) perdiéndose entonces el control, sobre todo si se tiene

53
en cuenta que el pensamiento lógico concreto infantil solo sirve para manejarse dentro de un marco cultural
restringido y no descifra el código social adulto más amplio al que tiene que adaptarse.
El pensamiento reflexivo, fruto de la lógica formal, va permitiendo elaborar teorías anticipatorias que
disminuyen la persecución aunque al comienzo estén lejos de lo real. Lo importante es confundirse primero
con el objeto nuevo, para luego simbolizarlo como algo personal, libremente adquirido.
● La etapa de la adolescencia en que mejor se pueden detectar las palabras e ideas transicionales es la
pubertad el pensamiento tiene caracteres mágicos, en la pubertad recién se empieza a familiarizar con
esta nueva estructura del pensar;
● Luego en la mediana adolescencia se conservan aunque a nivel grupal aceptándose más las
limitaciones de la realidad tiene el carácter mesiánico típico; elaboración de teorías que no exigen aún
su concretización. En la mediana adolescencia se desarrolla y ejercita restringidamente para que
● Luego en la adolescencia tardía se detecte la caída definitiva de la omnipotencia del pensar en aras de
un manejo más real de los objetos y de la comunicación con sus pares y adultos
El pensamiento lógico – formal como el verdadero cambio en el pensamiento adolescente
Dice Piaget que dependen de la interacción del sistema social por un lado y el sistema biológico por otro,
entre ambos sus propias experiencias psicológicas lo van incorporando a la vida de los adultos
Dice Piaget que el adolescente se incorpora al mundo adulto liberando su pensamiento infantil subordinado,
programando su futuro y reformando el mundo dónde va a vivir, para ello construye sistemas y teorías que le
posibilitan un cierto manejo de lo desconocido, tiene pensamientos a la segunda potencia (es capaz de pensar
sus pensamientos; reflexión) yendo de lo concreto hacia lo abstracto y posible, por último maneja los
símbolos adultos conociendo sus ideologías
¿Cómo consigue esto? con su nuevo instrumento, el pensamiento formal para Piaget consiste en:
1) la capacidad de reflexionar, o sea, operar no sobre las cosas (logica concreta) sino sobre sus ideas (logica
formal) o proposiciones y
2) la posibilidad de inversión de relaciones entre lo posible y lo real; Lo real injertado dentro del conjunto de
operaciones posibles
La lógica formal permite al pensamiento adolescente no solo una incorporación a la sociedad sino también un
mayor dominio de los impulsos al poder ampliar el mundo de los objetos gratificantes a nivel del pensamiento
dado que lo posible es mayor que lo real, la lógica formal crea, por fin, un nuevo tipo de sensibilidad, permite
captar valores culturales abstractos como patria, ideologías, etcétera., hasta ahora no reconocibles pues la
sensibilidad se limitaba a ideales encarnados u objetos concretos.
La adquisición de un tipo de pensamiento que pasa del interes por lo concreto (cosas y personas) al interes por
las ideas permite a los adolescentes, especialmente despues de los 15 años, salirse del tiempo y espacio dados,
descubrir dentro de sus “mundos” (grupo, generación) una nueva idealidad personal y proyectar una futura
cultura distinta de la que se les propone.
En este contexto tan inestructurado la identidad adolescente adquiere un sentido de lo propio surgido desde
adentro el sujeto necesita definirse recortarse diferenciarse de los demás como unidad, descubrir frente a sí
mismo la continuidad de la propia identidad en un tiempo que percibe confuso así como ser reconocido por
los demás como tal, y así sentirse incluido socialmente. En esta inclusión que llamamos mismidad de la
identidad es importante la ideología como sentimiento de pertenencia a un grupo o cultura donde se comparte
una visión diferenciada del mundo dentro del cual uno se siente incluido física y moralmente
El pensamiento lógico-formal permite al adolescente ubicar su identidad en un nuevo contexto, capacitándolo
para:
1) percibir intelectualmente todas las partes del self como formando una unidad;

54
2) percibir vivencialmente el sentido de continuidad de su identidad y
3) percibir el sentido de pertenencia que tiene el yo, incluido social e ideológicamente dentro de la cultura.
Etapas evolutivas y pensamiento
● La pubertad es un período donde el pensamiento se encuentra en una etapa de transición. Las ideas se
convierten en “objetos” que reemplazan a los objetos reales, hasta tal punto que las palabras y la
acción son muchas veces reemplazadas por el pensar o viceversa (restos del pensamiento lógico
concreto). Por esto lo llamamos periodo mágico de pensamiento adolescente, por la confusión normal
que aún existe entre ideas y palabras, hechos e ideas, forma y contenido del lenguaje. Lo cual llevaría
a actuar omnipotentemente sobre la realidad dominada por el pensar y explicaría en parte la tendencia
marcada que tienen los puberes a los sueños diurnos, juegos de palabras, lenguajes cifrados,
equivocaciones entre el sentido y la letra, etcétera.
Manipular por primera vez la realidad concreta como abstracta y viceversa, permite al púber,
magicamente, salir del tiempo y el espacio, pensar como si volviera el pasado o meterse en el futuro y
vivirlo como si fuera presente. Es frecuente encontrarse con púberes que discuten convencidos de
haber hecho cosas que solo han pasado por su pensamiento.
● En la mediana adolescencia el pensamiento sufre un cambio muy importante, pierde el carácter
transicional y confuso de la pubertad y adquiere un fuerte carácter grupal. Aún conserva algunos de
sus caracteres omnipotentes pero a nivel grupal. Los adolescentes de esta edad pueden discutir lo que
piensan (sus ideas son realmente ideas para comunicarse) aunque restringidamente, las ideas se
comparten y discuten en grupos de pares, es decir que se acepta hasta cierto punto una prueba de
realidad aunque al principio se busquen grupos ideológicos muy semejantes y no se toleren los
diferentes. Llamamos al pensar de este período pensamiento mesiánico, porque es compartido
necesariamente por otros que expresan ideas semejantes, salvadoras y redentoras que no necesitan ser
puestas a prueba más allá de su ámbito. Sí se incluyen dentro de alguna ideología imperante dentro de
la cultura, lo hacen con un sentido verdaderamente mesiánico, de salvación, sin aceptar la relatividad
de las verdades sustentadas.
Realmente se da un importante desprendimiento de sus padres y mayores, ya no reciben de ellos
información y aprendizaje, sino de su propia generación o grupos elegidos. Es importante ver que la
relación que adquieran con estos nuevos grupos en vez de transformarse en un sometimiento estable,
no sea más que una reedición de su situación infantil. Cuando se inhiben intelectualmente, el fondo
depresivo da una explicación del síntoma, otras veces la inhibición se manifiesta más como una
rigidez en la forma de pensar, convirtiendo la actividad pensante básicamente elaborativa y creativa en
una actividad estabilizante: intelectualización.
● En la adolescencia tardía la identidad está más afinada, el duelo ha pasado sus etapas críticas y el
pensamiento lógico - formal ha sido totalmente aprendido, permitiendo al adolescente renunciar al
pensamiento omnipotente, mágico y mesiánico de las etapas anteriores y adoptar un pensamiento
creador y realizador. Ahora sí acepta poner a prueba sus ideas por medio del trabajo y la ampliación de
sus relaciones sociales. Al empezar a asumir su rol social, lo mesiánico se realiza.

3. 2. Contribuciones del pensamiento formal a la consolidación de la identidad


3.2.- URBANO, C. y YUNL, J. (2001) "Y,...no se..."Colección Psicología y Cultura de los Adolescentes-
Editorial Mi Facu. CAP. VI y VIL
CAPITULO 6. Cambios cognitivos en la adolescencia

55
Durante la adolescencia los sujetos experimentan una variedad de cambios en su funcionamiento intelectual e
indican que tales cambios con-forman un verdadero proceso de desarrollo cognitivo. En este estadio se
produce un conjunto de procesos intelectuales y cognitivos mediante los cuales los adolescentes van ganando
en conocimiento; se incrementan y complejizan sus habilidades para comprender, pensar y percibir el mundo;
y aprenden a utilizar esas habilidades para resolver los problemas cotidianos que supone el proceso de
adaptación evolutiva que realizan.
El desarrollo intelectual y cognitivo no puede entenderse como una cualidad aislada, formal de los sujetos
sino que está interrelacionada y es interdependiente de las características del entorno socio-cultural y de las
características personales ligadas a la personalidad, la emocionalidad y las características intelectuales de cada
uno. El pensamiento no se desarrolla en el vacío (por el efecto de la maduracion de ciertas funciones
biológicas), sino que requiere la interacción con los objetos de conocimiento, ya sea por su exposición directa
a los fenómenos (la exploración y manipulación de/en situaciones reales) o por la mediación de personas e
instituciones especializadas.
Está demostrado que sin una suficiente estimulación de las funciones intelectuales o un contexto
socio-cultural enriquecedor que provea oportunidades para el pensamiento divergente y para la construcción
personal de los conocimientos, tampoco se produce el desarrollo cognitivo en la adolescencia. Asimismo, los
duelos que tiene que resolver el adolescente en su proceso de desarrollo constituyen un poderoso motor que
aumenta significativamente las tareas ligadas al pensamiento.
Interacciones entre pensamiento y crisis del adolescente
El adolescente puede comprender y afrontar sus conflictos gracias a las características que asume el
pensamiento en esta etapa evolutiva. El comienzo de la adolescencia supone la utilización de un pensamiento
abstracto a partir del cual el individuo empieza a reflexionar sobre sí mismo y a elaborar sus propias teorías y
sistemas de creencias referidas a diferentes ámbitos de la vida.
Ante la impotencia que esto le ocasiona recurre al pensamiento para compensar las pérdidas que ocurren
dentro de sí mismo y que no puede evitar. Así, el uso de la intelectualización y de la fantasía como
mecanismos defensivos para disminuir la angustia, que le produce el ingresar a una incipiente vida adulta,
serían las características principales que asume la dinámica del pensamiento adolescente.
Transiciones estructurales en el pensamiento adolescente
Cualquier referencia a las transformaciones estructurales del pensamiento durante la adolescencia, obliga a
considerar la obra de Jean Piaget y su teoría sobre el desarrollo intelectual.
Para Piaget cualquier tipo de conducta (incluidas las intelectuales) proviene de un intercambio entre el sujeto
y el medio exterior y es resultado del proceso de adaptación, el cual es definido como el equilibrio entre los
procesos de asimilación y acomodación. En tal sentido la inteligencia (en tanto capacidad construida en el
proceso evolutivo) no es una capacidad innata sino que es resultado de la interacción entre el sujeto y el
medio ambiente.
● La asimilación le permite al sujeto incorporar los objetos de conocimiento a su estructura cognitiva, a
sus esquemas previos, en un proceso activo mediante el cual el individuo transforma la realidad a la
que conoce a través de la acción (mental o material).
● La acomodación permite al individuo transformar su estructura cognitiva, sus esquemas, para poder
incorporar los objetos de la realidad a ella.
En el acto de conocimiento hay, por lo tanto, un proceso constructivo caracterizado por una doble acción: la
del individuo sobre los objetos del entorno y una repercusión del objeto sobre los esquemas del sujeto. De
acuerdo a este planteo la adaptación es una equilibración progresiva entre un mecanismo asimilador y un

56
mecanismo acomodador. La adaptación supone el intercambio del organismo con su medio, con la
modificación entre ambos.
En el ciclo vital el desarrollo cognitivo se explica por las transformaciones que experimentan los procesos de
equilibrio en la interacción del individuo y el medio, ya sea por cambios producidos en el sujeto, en el entorno
o por las interacciones entre ambos. Piaget sostuvo la existencia de un estadio con características específicas a
partir de los 11-12 años, en el que se observa una transformación cualitativa en el funcionamiento intelectual
del niño. Esta transformación se caracteriza por el uso incipiente de procedimientos formales alrededor de los
11-12 años, los que mejoran paulatinamente hasta los 15-17 años y que, en buena parte de los casos, llegan a
ser plenamente sistemáticos y eficaces hacia los 20 años.
Propuso la hipótesis de que durante esta etapa los sujetos eran competentes para desarrollar el pensamiento
formal, pero que el escaso entrenamiento socio-cultural y una inadecuada estimulación cognitiva generaba
deficiencias en la actuación.
Los rasgos comunes a todo el proceso de transición cognitiva durante la adolescencia pueden caracterizarse
por la aparición y desarrollo de los siguientes aspectos fundamentales;
● Los adolescentes desarrollan la habilidad para pensar acerca de su propio pensamiento. Mediante el
ejercicio de una actividad intelectual introspectiva puede reflexionar acerca de lo que conocen y de
cómo conocen. Desarrollan la metacognición y la regulacion de sus propios procesos de pensamiento
● En la adolescencia se produce la conquista del pensamiento abstracto. Este es posible por un nuevo
uso de la abstracción reflexionante. La abstracción reflexionante permite dos procesos.
○ Por un lado posibilita la elaboración de conceptos más abstractos (ya que puede captar los
aspectos esenciales, constitutivos, de los objetos)
○ Y otro, facilita la reorganización y coordinación de esta nueva conceptualización con lo que
posee el sujeto. (Dicho de otro modo, mediante la abstracción reflexionante el sujeto puede
elaborar un pensamiento basado en conceptos abstractos y, a la vez, integrar esos conceptos en
una estructura cognitiva más amplia y compleja.)
● Uno de los principales efectos que produce la adquisición del pensamiento abstracto es que el
adolescente comienza a desarrollar argumentaciones que poseen carácter proposicional, es decir,
puede efectuar juicios sobre las cosas que conoce y sobre sus propios juicios. Además el adolescente
comienza a utilizar un conjunto de símbolos para los símbolos, razon por la que puede aprender
distintas notaciones cientificas, aprende a hacer un uso más complejo del lenguaje. La posibilidad de
dominar los sistemas simbólicos le permite descubrir que estos pueden tener múltiples significados y
pueden ser combinados entre sí.
Los adolescentes con operaciones formales son capaces, por medio del razonamiento inductivo, de
sistematizar sus ideas y manejar críticamente su propio pensamiento para construir teorías acerca de él.
También mediante el razonamiento deductivo pueden examinar sus teorías, utilizando las herramientas del
análisis lógico y de la observación y experimentación metódica.
En esta etapa vital, los sujetos son capaces de considerar todos los hechos o ideas importantes y elaborar
conclusiones o teorías correctas, utilizando el razonamiento hipotético y la comprobación metódica de sus
conjeturas.
El razonamiento hipotético no es una capacidad intelectual que aparece en la adolescencia, sino que en esta
etapa adquiere nuevas características de funcionamiento. En palabras de Piaget, el sujeto adolescente adquiere
un razonamiento sobre lo posible, formula y comprueba sistemáticamente hipótesis. Lo característico de este
modo de razonamiento durante la adolescencia no radíca sólo en el contenido original de las hipótesis sino en
que el sujeto puede trabajar con varias hipótesis simultánea o sucesivamente.

57
En este momento puede verse la importancia del pensamiento abstracto ya que la evaluación de esas hipó-
tesis no se efectúa a través de una contrastación empírica (en los hechos) sino que se realiza con
contraejemplos adquiridos por la evocación verbal o mental.
Las operaciones formales en perspectiva evolutiva
En la adolescencia se produce la transición entre el pensamiento operatorio concreto y el operatorio formal,
esa transicion supone un proceso constructivo y gradual en la adquisición de las capacidades intelectuales
propias del pensamiento formal.
Piaget e Inhelder (1959) distinguieron dos etapas en el desarrollo cognitivo durante la adolescencia:
● Alrededor de los 11-12 años daría comienzo el subestadio de las operaciones formales incipientes
caracterizado por la adquisicion de la capacidad de formular hipótesis basadas en el razonamiento
abstracto. Pero generalmente fracasan en los procedimientos de prueba porque no se aislan
adecuadamente los factores o no pueden combinar correctamente los datos. Hacen descubrimientos
correctos y manejan ciertas operaciones formales, sin embargo no pueden proporcionar
demostraciones sistematicas y rigurosas para sus afirmaciones.
● El segundo subestadio es el de las operaciones formales, caracterizado por el logro de mayor precisión
e integración de las funciones intelectuales propias del pensamiento formal. Amodo orientativo se
señalan los 15 años como el momento de inicio y los 20 años como momento de consolidación del
pensamiento formal. Lo propio del pensamiento formal es que las características funcionales forman
una estructura de conjunto, condicion necesaria para que el adolescente resuelva problemas abstractos
y complejos.
Los sujetos que alcanzan el pensamiento formal son capaces de resolver tres tipos de tareas formales de
diferente grado de dificultad:
1. los problemas de combinatoria,
2. los del grupo INRC (pueden realizar cuatro tipo de operaciones lógicas, basándose en proposiciones:
Identidad, Negación, Reciprocidad y Correlativa) o de la doble reversibilidad y
3. los que implican cálculos de proporción o probabilidad.
El lenguaje es un componente de la funcion simbólica del sujeto, es decir facilita la representación mental de
la realidad y posibilita efectuar proposiciones sobre los fenómenos. Por ello es indudable la importancia que
adquiere el dominio lingüístico para que los sujetos puedan desarrollar las habilidades cognitivas formales. El
descubrimiento de esta nueva capacidad por parte del adolescente, incide en el gusto por escribir poesías,
diarios personales o letras para canciones.
La escolarización resulta ser una condición necesaria pero no suficiente para la adquisición del pensamiento
formal. Precisamente el tipo de conocimientos sistemáticos que transmite la escuela, el tipo de entrenamiento
cognitivo que promueve y la preparación para el uso del razonamiento científico son aspectos claves que
hacen que los adolescentes escolarizados tengan más posibilidades de alcanzar el subestadio de las
operaciones formales que los no escolarizados.

CAPÍTULO 7. Los procesos cognitivos en la dinamica psicologica de la adolescencia


La resolución de las crisis en la adolescencia se apoya en gran medida en las nuevas posibilidades que ofrece
el pensamiento.
Un rasgo señalado como propio del funcionamiento adolescente es su egocentrismo, actitud coincidente con el
egocentrismo intelectual descrito por Piaget. Los adolescentes tienden a dotar a sus teorías y creencias de un
inmenso poder, capaz de modificar la realidad. El egocentrismo intelectual supone cierta incapacidad para
ponerse en el lugar del interlocutor. El egocentrismo genera una incapacidad para concebir con realismo las

58
posibilidades de aplicación de las teorías que se conciben, y también un exceso de confianza en el poder de las
ideas como elementos de transformación de la realidad.

En la adolescencia puberal aparecen dos fenómenos típicos que se apoyan en la transformación de las
capacidades intelectuales y que desaparecen con la llegada de la adolescencia nuclear. Elkin las denominó
● “la audiencia imaginaria”, alrededor de los 11 años en la adolescencia temprana, cumple un rol
importante en la actuación del sujeto, ya que tiende a actuar con las miras puestas en lo que cree que es
la mirada de los otros, tiende a ser exhibicionista y contestatario en función de lo que cree que es la
forma en que los otros piensan sobre él,
● y “la fábula personal” de los púberes les lleva a pensar que sus experiencias son únicas e
incomprensibles para otros, razon por la que sostienen que estas son incomunicables y por lo tanto,
son parte de su mundo interno.
En la fase de la adolescencia nuclear se produce un acercamiento a principios éticos, filosóficos, sociales que
lo motivan a formular un plan de vida que oriente su manera de ser y actuar. El pensamiento abstracto son
procesos mentales que cumplen un rol importante en su desarrollo psicosocial.
A continuacion reseñamos algunos de los principales procesos mentales propios de la dinamica adolescente;
● Los interrogantes metafisicos
El adolescente al intentar resolver la pregunta de “quién es” se interroga acerca de la finalidad para lo
cual ha sido creado es decir acerca de lo que debe hacer con el mismo, esta pregunta produce mucha
ansiedad y angustia pues supone el hacerse cargo de lo que piensa de sí mismo de la manera en que
desea ser y de lo que él siente de sí mismo. En la interrogación acerca de la existencia de un ser
“superior”, busca asegurar la continuidad de su propia existencia. El adolescente se plantea la figura de
una divinidad en la que deposita los atributos omnipotentes de los padres protectores infantiles como
una salida mágica para resolver el conflicto que le origina sentirse finito y limitado
Como sostiene Aberastury (1959) en la construcción definitiva de una ideología, de valores éticos y
morales el sujeto pasa por períodos de ambivalencia, de idealizaciones irracionales y
desidealizaciones, que le permiten construir nuevas y verdaderas ideologías de vida. La
intelectualización y el pensamiento más allá de lo posible son las bases que permiten al adolescente
crear y adherir a un sistema de creencias y elaborar justificaciones racionales sobre él.
● La discriminacion temporal
En la adolescencia se rompe ese equilibrio e irrumpen aspectos no diferenciados que actualizan la
indiferenciación de las primeras etapas. El cuerpo se transforma en un espacio en el que confluyen
exigencias biológicas y sociales, transformándose en el área en la cual se depositan todas estas
experiencias de indiscriminación que remiten a lo vivido en la infancia temprana.
La noción temporal del adolescente se asocia a características y necesidades corporales o rítmicas, es
decir, vinculadas a tiempos como comer, defecar, jugar, dormir, estudiar, etc. Por esto el tiempo
percibido y actuado por los adolescentes, es básicamente un tiempo de carácter vivencial o
experiencial, asociado a acciones del diario vivir, antes que el transcurrir objetivo del tiempo
cronológico.
El pensamiento del adolescente adquiere características diferentes respecto al espacio y al tiempo que
se manifiesta en la indiscriminación de los tiempos reales. Se produce una fusión irracional del pasado,
presente y futuro. Existe una particular percepción del tiempo en donde las urgencias son enormes y
las postergaciones son irracionales.

59
A esta dificultad del adolescente de discriminar entre pasado-presente-futuro, se le une la dificultad de
diferenciar externo-interno, adulto-infantil, masculino-femenino, etc.
A medida que va logrando dejar atrás esta experiencia de soledad, la dimensión temporal adquiere
otras características. Surge la conceptualización del tiempo, lo que implica una discriminación de
pasado, presente y futuro, se produce la aceptación de la pérdida del cuerpo infantil, la pérdida de sus
vínculos con los padres omnipotentes e inmortales y la aceptación de la propia muerte, como así
también, la de sus progenitores.
El tiempo integra en una unidad la continuidad del ser a través de la existencia.

EJE IV: Aspectos psicosociales y socioculturales de las adolescencias


4.1. Subjetividad y nuevos escenarios sociales: un modo de pensar nuestro tiempo
4.1.- BLEICHMAR, S. (2009) "La subjetividad en riesgo" Topía Editorial. Buenos aires. Cap I, VII,
VIII.
CAPITULO I. Un modo de pensar de nuestro tiempo
La muerte de los padres puede llevar a un duelo patológico (aniquilación del propio ser por intolerancia a la
pérdida, o por restos de odio ante la desprotección sufrida) o a una elaboración sufriente de su ausencia. La
identificación, sin embargo, es insoslayable. Somos hijos, con el tiempo, de nuestras propias representaciones
interiores de aquellos que nos engendraron.
Algunos aspectos del contrato interhumano exceden lo circunstancial, y se plantean como premisas de la
humanización. El hecho de que los seres humanos sean crías destinadas a humanizarse en la cultura marca un
punto insoslayable de su constitución: la presencia del semejante es inherente a su organización misma. En el
otro se alimentan no sólo nuestras bocas sino nuestras mentes, de él, recibimos junto con la leche, el odio y el
amor, nuestras preferencias morales y nuestras valoraciones ideológicas. El otro está inscripto en nosotros, y
esto es inevitable.
Es esta condición de base de la transformación del cachorro humano en ser humano la que genera la
expectativa de que el semejante no pueda dejar de arrancarnos del egoísmo con una presencia tensionante.
El contrato interhumano no fija mis derechos, sino que limita mis obligaciones-infinitas respecto al semejante.
En esta premisa de partida se funda la esperanza de que nuevas formas de recomposición de vinculos de
solidaridad sean posibles en el marco de la corrupción y el facilismo
Marcuse, ha definido como "malestar sobrante” a esa cuota de malestar extra que debemos pagar y que no se
reduce en nuestra sociedad actual sólo a la dificultad de algunos de acceder a bienes de consumo, ni tampoco
por el dolor que pueden sentir otros, más afortunados materialmente, pero en tanto sujetos éticamente
comprometidos y provistos de un super-yo atravesado por ciertos valores que aluden a la categoría general de
"semejante", ante el hecho de disfrutar beneficios que se convierten en privilegios ante la carencia entorno.
El malestar sobrante está dado, básicamente, por el hecho de que la profunda mutación histórica sufrida en los
últimos años deja a cada sujeto despojado de un proyecto trascendente que posibilite, de algún modo, avizorar
modos de disminución del malestar reinante. Porque lo que lleva a los hombres a soportar la prima de
malestar que cada época impone, es la garantía futura de que algún día cesará ese malestar, y en razón de ello
la felicidad será alcanzada. Es la esperanza de remediar los males presentes, la ilusión de una vida plena cuyo
borde movible se corre constantemente, lo que posibilita que el camino a recorrer encuentre un modo de
justificar su recorrido.
Desde esta perspectiva, tal vez nuestra tarea como intelectuales consista en la recomposición de las vías para
evitar que el malestar sobrante devore nuestro pensamiento, en la posibilidad de instrumentar nuevas
preguntas con respeto por la historia pero sin que la nostalgia por el pasado o la reificación del presente

60
inunde las posibilidades creativas. Si esto se logra, si el contrato implícito de los intelectuales con nuestro
tiempo lo posibilita, la denuncia puede no redundar en queja y la dificultad no cerrarse en autocomplacencia
frente a las dificultades.

CAPITULO VII. Tiempos dificiles. La identificacion en la adolescencia


Conocemos la adolescencia como categoria que alude, desde el punto de vista del proceso de constitución
psíquica, al tiempo en el cual se despliegan los modos de definición que llevan a la asunción más o menos
estable de la identidad sexual y a la recomposición de las formas de identificación, las cuales se desanudan de
aquellas propuestas originarias que marcaron las lineas que articulan las relaciones constitutivas enlazadas a
los adultos significativos de la primera infancia para abrirse a modelos intergeneracionales o de
recomposición de los ideales en un proceso simbolico mas desencarnado de los vinculos primarios
Desde esta perspectiva, la adolescencia es un tiempo abierto a la resignificación y a la producción de dos
tipos de procesos de recomposición psíquica: por un lado, aquellas que determinan los modos de concreción
de las tareas vinculadas a la sexualidad y por otro, los que remiten a la deconstrucción de las propuestas
originarias y a la reformulación de ideales que luego encontraran destino en la juventud temprana y en la
adultez definitiva:
● Respecto a las tareas vinculadas a la sexualidad, es indudable que hay cambios, y que la dirección
no se avizora aún si bien algunas transformaciones son evidentes. Por una parte, han cambiado las
pautas de iniciación sexual.
Habiendo dejado la familia de ser el lugar de impartición privilegiado de información en razón de que
los medios han tomado a su cargo esta función, y habiendo quedado el semejante en función de
mediador y metabolizador de información y ya no como fuente de proveniencia de la misma, los
modelos identificatorios de la sexualidad no circulan alrededor de las figuras del entorno inmediato
sino de personajes virtuales que han devenido familiares, al punto de que su destino y modos de operar
forman parte del entretejido cotidiano y se convierten en opciones de cotejo intra-generacional.
Actualmente las pautas de las generaciones anteriores no interesan, ni siquiera como frente de
oposición, y se genera una nueva asimetria, en este caso sincrónica, entre esas figuras mediáticas cuyo
ascendiente forma opinión y quienes deben acceder a la identificación sexual estable.
● Respecto a aquello que atañe a la desconstrucción de significaciones y a la recomposición de
valores -vale decir, a la asunción metabólica de enunciados que fueron aceptados o rechazados en la
infancia por su proveniencia del adulto significativo- se presenta con mayor complejidad que en otras
épocas, en razón de que la historia anisına ha devastado significaciones operantes hasta hace pocos
años, y las generaciones que tienen a su cargo el completamiento de la crianza de quienes vendrán a
relevarlos en el proceso reproductivo y social se ven despojadas ya no de certezas sino de propuestas
mínimas a ofrecer.
He marcado en otras ocasiones la diferencia existente entre los procesos de autoconservación y de
autopreservación que constituyen dos ejes de la problematica de la subjetividad. Siendo el yo un
residuo identificatorio, su masa ideativa se ordena alrededor de dos ejes aquella que tiene que ver con
la conservación de la vida y realiza las tareas necesarias para ello, y la que se determina como
preservación de la identidad, como conjunto de enunciados que articulan el ser del sujeto, y no sólo su
existencia, apelando a una cierta formula filosófica expandida. En tiempos de estabilidad ambas
coinciden, y se puede preservar la existencia sin por ello dejar de ser quien se es, vale decir sin dejar
de sostener el conjunto de enunciados que permiten que uno se reconozca identitariamente: se puede
ser solidario y tener trabajo, sobrevivir sin por ello destruir a nadie, ser generoso sin sucumbir a la

61
miseria. Pero en épocas históricas particularmente desmantelantes, ambos ejes entran en contradicción,
y la supervivencia biológica se contrapone a la vida psíquica, representacional, obligando a optar entre
sobrevivir a costa de dejar de ser o seguir siendo quien se es a costa de la vida biológica
La crisis identitaria de la sociedad argentina pone hoy de manifiesto que esta contradicción acecha, al menos
en sus bordes, al conjunto
El proceso de desidentificación se ve agravado por el hecho de que el país se ha convertido en un lugar
transitorio para los jóvenes que aún piensan en un futuro posible, y en un espacio sin sentido para quienes
tienen vedado incluso esa perspectiva. Pero tal vez el signo más notable del vacio representacional en el se
ven sumergidos los adolescentes radique en que el discurso parental se ha ido deslizando, inevitablemente,
hacia el plano autoconservativo
Las instituciones mediadoras de identificación han variado y de ellas depende la posibilidad de recomposición
de procesos identificatorios que den garantia para parar la desintegracion que amenaza a la sociedad argentina.
Los tres pilares de la identificación son las representaciones, los fines compartidos y los afectos ligadores.
Los requisitos de una re-identificación humanizante, tienen entonces algunas puntas desde las cuales
sostenerse y ello desde un proceso de identificación recíproca del conjunto, ya que no hay condiciones para
proponer una perspectiva identificatoria a los adolescentes si no se recomponen las grandes líneas de la
identidad que se ven fracturadas en este momento de la historia de los adultos mismos.

CAPITULO VIII. Las formas de la realidad


¿Bajo que forma y en que circunstancias la realidad exterior, cuando se transforman ciertas condiciones
habituales de vida, afecta el funcionamiento psiquico?
La conexion con la realidad exterior, se trata de tomar partido de ejercer un movimiento superador de las
opciones establecidas hasta la actualidad, superación que lamentablemente no implica sintesis, sino pérdida y
neocreacion
Llamamos realidad exterior a los procesos continuos que ejercen constantes estímulos discontinuos para el
aparato anímico, que no solo incide sino que constituye, en razon de que introduce de modo permanente
desequilibrios que obligan a un trabajo de ligazón y evacuación, complejizando sus funciones y
constituyéndose el motor del crecimiento psíquico. De esta realidad exterior, dos son los órdenes
privilegiados: el cuerpo y el otro humano ambos generando las condiciones que propician la emergencia de
toda representacion, de todo pensamiento.
Realidad exterior que opera desdoblada bajo dos modos una vez constituido el sujeto psíquico; por un lado,
como realidad significada o significable, capturada por el lenguaje y no solo por el lenguaje como código
organizador sino por los discursos significantes que le dan forma y la transforman en instituyente, y por otro
lado, la realidad no significada, no capturable, exterior no solo a la subjetividad sino a los modos con los
cuales el discurso socialmente producido permite su captura, pero que ejerce, sin embargo, impacto
traumático en el borde mismo de lo significado.
El discurso instituido socialmente como instituyente de las formas de representacion de la relacion al mundo
por parte del sujeto psiquico; en esta mediacion que ejerce el otro humano, atravesado por sus deseos y
prohibiciones, se define la transmision de representaciones que constituye, en un todo, al yo como masa
ideativa en la cual se define la representacion que tiene el sujeto de si mismo, ideologicamente instituida; ser
lindo, feo, rico, pobre, blanco, negro… no regido esto por cualidades morales que remiten al superyo sino por
formas de clasificacion valorativa de lo dado, no como emblemas-meta, ni en el registro de la culpabilidad,
sino de la propia autoestima y del registro del otro

62
Definir la relación del aparato psíquico con la realidad o el impacto de la realidad en la subjetividad, obliga a
reconocer diversos tipos de realidad y a ubicar su incidencia, su impacto, en los diversos tiempos y modos del
funcionar del sujeto psíquico.
1. Relación del inconsciente con la realidad. En el sujeto constituido se trata de un real no constituido,
del impacto de lo real que ingresa de manera descompuesta, desarticulada. El inconsciente sufre
embate de la realidad exterior, pero no como realidad significada sino como realidad constituyente de
los sistemas de representaciones y de la invasion y destino de cantidades, de mociones de afecto, con
incidencia en las series placer-displacer. El inconsciente está abierto a lo real pero no a la realidad
significada, le da sentido a lo que ingresa sin que ella implique “significarlo”.
2. Relación del yo con la realidad. Es aca donde se define lo fundamental de la relacion del sujeto a la
llamada realidad-social, siempre y cuando podamos abandonar todo lastre teorico que considere al yo
como el lugar de conocimiento de la realidad y al inconsciente como infiltrado de fantasia a un yo
percepcion-conciencia que supuestamente se relacionar de modo directo con el objeto si no mediara la
presencia contaminante de la misma.
Respecto al yo, dos necesarias diferenciaciones para abordar la relación con la realidad o la
constitucion de la realidad. En primer lugar la categoria yo no recubre al preconsciente freudiano. El
preconsciente se define por la presencia de la lógica y del lenguaje, en tanto articulado por el codigo,
el yo constituye por su parte una masa libidinal en la cual se juegan posiciones libidinales y modos de
articulacion de la identidad y la defensa. Si el preconsciente provee las herramientas de conocimiento
del mundo, el yo inviste ese mundo para que surja el deseo de su conocimiento, así como puede operar
como forma misma defensiva del desconocimiento respecto al inconsciente u obstaculizar la relación
con el conocimiento a partir de sus propios enclaves narcisistas o de la generación de angustia que le
produce ese conocimiento.
En segundo lugar, al haber establecido en el interior del yo una diferenciación que implica que este
toma a cargo tanto la autopreservacion como la autoconservacion del sujeto, estos dos aspectos
conllevan una relación con la realidad que articula toda la relacion social al mundo en sentido estricto,
amorosa y politica.
Estos dos ejes; autopreservación y autoconservación constituyen el punto nodal con el cual se articulan
los procesos mediante los cuales la realidad instituye o destituye formas de la subjetividad.
3. Respecto del Superyo. La realidad que lo instituye es indudablemente exterior al sujeto, discursiva e
inscripta bajo modos coagulados. Sus enunciados estando constituidos por imperativos de
proveniencia exógena que el sujeto considera autónoma, provenientes de sí mismo. Son estos rasgos
los que dan el carácter atemporal e impersonal.
La dureza del castigo generada por dos vías, por el desconocimiento del sujeto respecto a su propio deseo y
por el carácter no hipotético sino categorico del castigo.
La realidad que nos interesa para aproximarnos a las relaciones entre el sujeto psíquico y lo que se llama "la
realidad Argentina" -vale decir el conjunto de variables sociales, económicas y políticas que fundan y
sostienen un campo representacional en el cual se despliegan angustias, temores y relaciones consigo mismo y
con el otro humano- remite a las formas con las cuales el sujeto libidinal recibe el impacto de la misma
En primer lugar, es necesario tener en cuenta que no es la autoconservación en sí misma la que determina el
sistema de representaciones que producen el sufrimiento o el placer, sino su impacto representacional,
ideativo. Es para ello que volveremos a los dos aspectos antes expuestos del yo en sus dos vertientes: lo
autoconservativo y lo autopreservativo.

63
● La autoconservación no tiene representación psíquica directa en el ser humano, sino por el sistema de
mediaciones que implica la toma a cargo por el yo de la preservación de la vida como lugar de amor
del otro, vale decir como lugar a ser protegido en tanto baluarte de la vida. La angustia de muerte
dando cuenta de que la representación de la propia vida es lo que diferencia fundamentalmente los
modos con los cuales los seres humanos preservan su cuerpo biológico a partir de la continuidad
temporal de la existencia, y no de la mera extensión a la vida psiquica de la información biológi ca
genéticamente acuñada.
● La autopreservación por su parte remite a los aspectos identitarios del yo, lo que se es (a diferencia
del ideal, que se articula con lo que se debe llegar a ser), podemos suponer que los enunciados
autopreservaivos son más variables que los autoconservativos, pero cabrían dudas cuando pensamos
en ciertas experiencias en las cuales la identidad ha quedado soldada al cuerpo y el sujeto muere al ser
expulsado de su lugar de pertenencia como si cuerpo e identidad se hubieran soldado. Se es, quiere
decir que el yo queda articulado, en sus enunciados de base, a una red que determina su existencia
como tal y que cuando se rompe hace entrar en naufragio al conjunto del aparato y obliga a defensas
extremas o conlleva desestructuraciones y restituciones que ya no retoman más a su forma originaria.
En tiempo de paz en tiempos afortunados, la autoconservación y la autopreservación más o menos marchan
juntas. La conservacion de la vida y la preservacion de la identidad permiten en tiempos más o menos
normales, aún con leves diferencias, un equilibrio que sostiene la unidad psíquica lo cual es fractura en
situaciones extremas.
La realidad que debemos recuperar es la de poder construir sistemas de representaciones que restituyan el
derecho a pensar y a estructurar proyectos que no reduzcan a los seres humanos que constantemente el sistema
expulsa hacia la marginalidad a sus puros cuerpos biológicos, que no limite nuestras acciones a un
asistencialismo que despoja los restos de la identidad y genera la engañosa propuesta de una sola realidad.

4.2. Adolescencias, tecnologías y medios de comunicación


4.2.- URRESTI, M. y otros. (2015) "Conexión total: los jóvenes y la experiencia social en la era de la
comunicación digital". Grupo Editor Universitario, Buenos Aires. Cap I y III
CAPITULO I. Los jovenes, la innovacion y las tecnologias digitales
1. La sociedad como tiempo; tradicion, cambio, innovacion
Una de las muchas maneras en que la sociedad puede ser vista es aquella que remite a un conjunto de
generaciones conviviendo en un mismo presente. Reune en un mismo segmento temporal a camadas de
sujetos que tienen distintas experiencias, aunque esten en un mismo presente las experiencias van a tender a
diferenciarse entre si, dando como resultado una forma temporal compartida con un contenido vivencial
divergentes. Esta complejidad de la experiencia social hace que el presente sea común y diferente a la vez,
ambiguedad que da origen a una variedad de modos de percepción, apreciación y valoración frente a los
estímulos que una época determinada ofrece a sus habitantes.
Una sociedad, a su vez, puede ser vista también como el resultado de tradiciones que se prolongan en el
tiempo y van siendo asimiladas por las sucesivas camadas de sujetos que llegan a la vida y las van
incorporando a medida que transitan los procesos de socialización. Una sociedad se desarrolla con los
repertorios de instituciones, cosmovisiones e imaginarios que recibe de su propio pasado y que, a partir de las
operaciones que se ejercen en el tiempo presente, mantiene, transforma o reemplaza y luego transmite hacia el
futuro, proceso de transferencia según el que se legan tradiciones que serán tomadas más adelante por las
próximas generaciones de sujetos, que las encarnarán e investirán con nueva vida
El proceso de reproducción social presenta diferentes patrones según cómo afectan los cambios:

64
● Hay sociedades que tienen patrones de evolución muy lentos (sociedades/socializacion tradicionales):
Con cuotas de cambio mínimas y con una tolerancia muy baja para las transformaciones. En las que el
peso del pasado es muy marcado y las innovaciones son percibidas como amenazantes dado su
potencial virtualmente desestabilizador por lo que se las evita con el fin de mantener costumbres y
formas en las que se sustenta la jerarquía establecida
Procura con métodos de repetición, la memorización de los legados más valiosos a ser conservados y
obedecidos.
● De evolución esperada (sociedades/socializacion modernas): Más reciente en el tiempo que establece
instituciones dinámicas donde el cambio acotado a un conjunto de espacios delimitados es bienvenido,
donde los cambios son portadores de mejoras, modelos sobre el que se asienta y rige la idea del
progreso, celebran el progreso como una matriz de renovación positiva que se va superando a medida
que pasa el tiempo
Se establece a partir de métodos de enseñanza-aprendizaje que transmitan los saberes aceptados para
administrar el cambio.
● De evolución necesaria (sociedades/socializacion hiper-modernas): En nuestros días ha comenzado a
hablarse de ellas en las que la innovación se acelera de un modo inédito en la historia donde surgen
invenciones científicas y técnicas que se suceden a velocidades crecientes lo que conduce a un
panorama económico social cultural y político en cambio constante donde la acumulación de
innovaciones se vuelve necesaria para la supervivencia del sistema. El cambio es necesario y se
procura como un recurso valioso
Apunta mediante métodos de inducción-mostración a desencadenar la creatividad que permita buscar
y producir la innovación permanente.
Es decir, que segun el contexto reinante la socialización puede variar de acuerdo a marcos establecidos Que
conectan de modo muy diverso a los sujetos con su pasado con sus legados y con el sentido que esos
repertorios van a adquirir de acuerdo con la valoración dominante que los acompañe.
La impronta temporal de un orden se verá expresada en la forma en que se socialicen las jóvenes generaciones
y, a partir de ello, se produzcan las distancias entre las diversas camadas temporales de sujetos.
● Las sociedades de tipo tradicional, la senectud comporta el valor de la sabiduría y la prudencia,
fuentes de la reproducción saludable del orden social establecido;
● En las sociedades modernas sucede de modo análogo con el valor que adquiere la madurez, donde el
progreso desplaza a las generaciones mayores hacia la obsolescencia y le exige a las más jóvenes un
proceso de preparación para asumir los cambios, quedando los adultos en posición de control legitimo
de los procesos más significativos,
● Del mismo modo, cuando las innovaciones son tan veloces que plantean la necesidad de una
formación permanente y un estado de constante refundación, donde los sujetos mayores pierden
rápidamente el tren de los cambios y los adultos maduros se ven obligados a reciclarse profesional o
cognitivamente con nuevos puestos y estudios a los que se someten, situación que es ventajosa para los
más jóvenes, que entran sin mochila y sin pesos previos a las convulsiones cambiantes del presente,
dada la plasticidad que les brinda su falta de experiencias anteriores.
2. Las generaciones menores en una sociedad de innovacion
¿Por qué se produce de un modo tan recurrente esa asociación entre los jóvenes y el cambio? Un principio de
respuesta se encuentra en el funcionamiento del proceso de socialización y en la experiencia singular que se
despliega en el momento de la adolescencia o la juventud, momento de la vida de una persona en la que se
produce una apertura hacia el mundo social e histórico, donde prima una mirada desprejuiciada, liviana y

65
poco comprometida, una condición que se activa con la sucesión de las generaciones menores. Por esta razón
es que jóvenes generaciones e innovación se acercan: la novedad de un estado de cosas propuesto por una
sociedad o un momento determinado suele asumirse como propia cuando el sujeto de la percepción no registra
capas de experiencia previa acumulada que puedan servir de base para comparar las irrupciones con otras
previas. Adultos y jóvenes tienen distintas cargas de saber y compromisos institucionales y vitales para
percibir y valorar lo que sucede.
Puede entenderse a la adolescencia o la juventud como condiciones de edad o de generación cuyos miembros,
si bien son copresentes con los de mayores edades, tienen caracteristicas especificas de socialización temporal
que los distinguen y alejan respecto de las generaciones de adultos que los preceden en el tiempo. Ese
alejamiento acontece con diverso ritmo en distintas sociedades y tiende a resonar con mayor dramatismo en
las sociedades contemporáneas, en la medida en que la aceleración temporal que caracteriza a la época
promueve un reemplazo más veloz de las formas en las que se estabiliza la experiencia.
Las generaciones funcionan como comunidades temporales que portan las marcas del desarrollo cultural y
espiritual dominantes en una época determinada, con lo cual tanto la edad como la pertenencia generacional,
por más formales que puedan parecer, establecen un parentesco entre los sujetos que surgieron a la vida en
momentos cercanos y los diferencia de los otros sujetos cuyo origen en el tiempo es lejano, aunque compartan
el mismo presente en tanto que miembros de la sociedad
● En las culturas dominadas por el pasado y una cuota de cambios poco significativos, a las que calificó
de posfiguralivas, la tradición guarda los elementos fundamentales de la experiencia futura de los
jóvenes, con lo cual los adultos socializan a sus hijos y los subsumen al respeto de la sabiduria antigua.
● En las culturas en las que los cambios se vuelven más frecuentes, las generaciones anteriores pierden
el lugar de salvaguarda de la sabiduría, el pasado deja de ser garantia suficiente para la resolución de
los problemas que sobrevienen y las generaciones jóvenes comparten con los adultos la construcción
del presente. A esas culturas las bautizó como cofigurativas.
● Pero hay una tercera posibilidad, que es la que evidencian las sociedades donde el cambio es
permanente. En ellas, conocimientos y códigos de la cultura se ven sometidos a cambios reiterados,
con una acelerada pérdida de vigencia del pasado y una necesidad de replantear en todo momento el
conjunto de los conocimientos pertinentes y las organizaciones para resolver problemas y conflictos
En estas sociedades, a las que llama prefigurativas, donde los modelos que se ensayan caducan a gran
velocidad, el esquema de la socialización tradicional queda desactivado en nombre del proyecto
permanente, de la irrupción constantemente renovada del futuro en el presente, lo que le otorga un
peso relativo mayor a las generaciones jóvenes respecto de las precedentes.
La particular situación de los jóvenes frente a los cambios les da una ventaja relativa respecto de las
innovaciones tecnológicas mientras los adultos, y mucho más los adultos mayores, oponen resistencias a su
adopción y comprensión, a la que también muchas veces invisten con criticas fundadas, los jóvenes suelen
sumergirse en ellas sin res inconvenientes, con un manejo idóneo de los nuevos aparatos, con la aplicación
práctica o lúdica que es posible extraerles.
Las tecnologias digitales constituyen una innovación tecnológica radical, frente a la cual los jóvenes tienen
evidentes ventajas respecto de sus padres y abuelos. Las tecnologías digitales son una condición reciente del
mundo social, que sienta las bases de las comunicaciones masivas, la interacción personal, la búsqueda de
información y recursos, pero también las fuentes del entretenimiento, del encuentro y de la participación para
la gran mayoría de la población.

66
A diferencia de las generaciones de jóvenes de otras épocas, los jóvenes actuales se integran en el mundo de
la comunicación digital sin filtros previos ni membranas protectoras, haciendo del contexto social
crecientemente digitalizado el centro de su experiencia de vida.
3. Las tecnologias digitales ¿una creacion juvenil?
Una historia de la evolución de las tecnologías digitales, del diseño de las herramientas de software y de los
programas y las aplicaciones más utilizados en distintos momentos, tendería a encontrarse con gran frecuencia
con miembros de generaciones muy jóvenes. En efecto, los diseñadores, programadores, desarrolladores,
emprendedores y otras figuras recurrentes del universo de la comunicación digital han sido personas jóvenes,
que producen innovaciones a edades muy tempranas. Al mismo tiempo, aquellos que adoptan esas
innovaciones, las prueban, las aplican y las utilizan con mayor frecuencia, ampliando sus horizontes de uso,
suelen situarse en el mismo grupo etario. Con lo cual, por ambos vértices los jóvenes son los principales
pioneros y difusores
Los sitios más cercanos en el tiempo que irrumpen a mediados de la década pasada con todo su potencial de
arrastre como es el caso de facebook y Twitter plataformas de comunicación circulación de información y
articulación de redes sociales masivamente utilizadas por públicos de la geografía y las edades más diversas
todos ellos pensados y originados por personas muy jóvenes luego sostenidos y desarrollados en primera
instancia por esa misma franja de la población y finalmente adoptados masivamente por grupos de mayor
edad
Dos de las estrellas del mundo digital actual, Facebook y Twitter, siguen la lógica de invención juvenil de los
otros sitios: Facebook fue creado en 2004 por Mark Zuckerberg cuando tenía 20 años y Twitter fue lanzado en
2006 diseñado por Jack Dorsey, Evan Williams, Noah Glass y Biz Stone, todos ellos ex-empleados de Google
y de Pyra Labs con una edad promedio de 30 años al momento del lanzamiento.
Más recientemente podemos mencionar la aparición de aplicaciones y servicios que arrastran el mayor flujo
de atención entre los públicos globales que los benefician con su atención y adopción. Es el caso de
Whatsapp, Instagram, Pinterest, Snapchat o Spotify, poderosas plataformas y aplicaciones que continúan
revolucionando el mundo de las comunicaciones digitales en los distintos rubros a los que se destinan. Se trata
de servicios disponibles en la red, que ofrecen distinto tipo de soluciones para los usuarios contemporáneos de
internet fija y móvil y contribuyen a cumplir con las necesidades comunicativas, de vinculación o de consumo
cultural de grupos que crecen día a día, aumentando el poderio y el volumen de negocios de las empresas del
mundo digital.
4. La difusion de las tecnologias digitales e internet
Tal como afirmamos recién, las generaciones más jóvenes, en principio los jóvenes, pero especialmente los
adolescentes, han sido los más consecuentes demandantes de tecnologias digitales desde el rol de
consumidores de computadoras, teléfonos celulares de última generación, consolas de juego y dispositivos
periféricos enlazables con el entorno digital, pero también como usuarios de software y aplicaciones
destinadas a rodar en esos dispositivos
a computadora, el software y la conexión a Internet se volverán parte indísociable de su entorno vital,
afectando sus modalidades de trabajo y estudio, las búsquedas de información y entretenimiento, asi como los
modos usuales de interacción y relacionamiento con los demás. Este modelo de adopción se irá replicando en
primer lugar "hacia los costados”, esto es, intra-generacionalmente, por los grupos de pares y las redes de
amigos que se acercan a las tecnologias por contigüidad, y luego "hacia abajo", es decir, de estas generaciones
jóvenes hacia las menores, por la influencia que esos jóvenes y adolescentes pioneros tienen sobre los
hermanos más chicos, para pasar de éstos a los pares y amigos de esos niños y preadolescentes, también
lateralmente pero en un escalón de edad inferior, y concluir finalmente con un flujo "hacia arriba" es decir,

67
empujando a las generaciones mayores cercanas familiarmente a conectarse con las nuevas tecnologías, ya
definitivamente teñidas de espíritu juvenil
Este proceso de expansión hacia las edades más jóvenes, hecha por hermanos mayores y por padres
adoptantes tempranos, es lo que da origen al fenómeno de los “nativos digitales", que son los niños que
interactuan desde edades muy tempranas con computadoras personales hogareñas ya conectadas a la red.
El proceso concluye con la incorporación de los adultos mayores, los últimos en arribar al universo de la
comunicación digital. Esos adultos mayores, podríamos decir, los abuelos de los nativos digitales, los padres
de los primeros adoptantes, apelan a las herramientas de este tipo con el fin de mejorar la comunicación con
sus familias y acceder al vasto universo de los contenidos digitales.
Los adolescentes y jóvenes, cuentan con mucho tiempo libre, lo que les brinda la oportunidad de experimentar
y buscar contenidos de su interès. Asi, se convierten en usuarios competentes que aprovechan sus capacidades
letradas y utilizan el entorno de acuerdo con sus preferencias. Con ellos la red adquiere una nueva capa de
usuarios que suma contenidos y proponen un intercambio y un flujo donde además de sus familias entran en
contacto con parientes más o menos lejanos y amigos mayores en proceso de conexión.
5. Ciberculturas y prosumidores
En las sociedades contemporáneas, las nuevas tecnologías constituyen un nuevo entorno de comunicación, en
él los sujetos se encuentran entre si, interactúan, se informan e intercambian información, se entretienen y
reciben contenidos en diversos formatos-audiovisuales, textuales, auditivos, acordes con sus gustos e intereses
y, en menor medida, también publican textos, imágenes y videos en las distintas plataformas destinadas a ese
fin. Las tecnologías digitales suponen un cierto consumo de bienes, artefactos y servicios específicos, la
adquisición de aparatos y programas, pero también una profusa actividad de interacción a partir de la
utilización y la posibilidad de producir nuevos contenidos y herramientas, que abren para otros procesos de
consumo y disfrute, así como de producción y creatividad. En esos procesos de recepción y reactivación, de
consumo y producción, la información circula y se utiliza, se acrecienta y multiplica en nuevos contenidos
que aumentan sin cesar
Esta situación afecta la forma tradicional de recepción de las producciones culturales por parte de los
adolescentes y los jóvenes. Este cambio de formatos, la digitalización de la música, la gráfica y las películas,
altera la forma de vinculación de los jóvenes con la cultura la adquisición de música e información
relacionada con ella se resuelve hoy en día dentro de las autopistas informativas
Un nuevo sistema que afecta a todos, en el que entran con mayor facilidad las generaciones menores y que se
desarrolla en el sentido de una cibercultura en la que se digitalizan los bienes y las producciones de la cultura
letrada tradicional, de las industrias del espectáculo y del entretenimiento
En este contexto, adquiere un rol cada vez más importante la figura del prosumidor. En la medida en que
internet facilita la publicación como nunca antes ya no sólo de textos, sino también de imágenes, música
animaciones y hasta audiovisuales, y ese conjunto de infinitos repertorios tiene un nivel de accesibilidad
simple, Inmediato y a costos insignificantes, con el paso del tiempo es más frecuente que adolescentes y
jóvenes de distintas localidades, niveles socioeconómicos y culturales registren y publiquen materiales,
documentos a aspectos diversos de su vida que consideran interesantes para ofrecer a la consideración ajena.
Este tipo de oferta se multiplica por la acción creativa de jóvenes que suben contenidos a la red, los hacen
circular y los comparten con otros jóvenes, que vuelven a replicar el procedimiento. El resultado de este
proceso es una proliferación constante de materiales cada vez más compleja e inasible, múltiple y diversa
De acuerdo con ello, aparece una categoría de usuario que entre los jóvenes es especialmente relevante, dada
su presencia y extensión. Se trata del prosumidor, ese intermedio paradójico entre la producción y el consumo,
El prosumidor es la figura que tiene la capacidad de adecuar la producción estandarizada a un tipo de

68
requerimiento más Individual y personalizado, coproduciendo o produciendo creativamente aquello que
consume. El prosumidor es un prototipo de relación con los productos y los servicios masivos y
estandarizados, que desarrolla una creciente autonomia y capacidad para adaptar la oferta a la demanda, en
última instancia, es el polo que tiende a salir fortalecido con este tipo de innovaciones tecnológicas y
comunicativas.
En el caso de los jóvenes, el prosumidor es un amplio espectro que va desde las formas más cercanas al
consumidor critico pero tradicional, es decir, pasivo en la producción pero activo en la recepción, pasando por
el bricoleur, que a modo de cazador selecciona y combina en secuencias no planificadas por la emisión,
llegando en el otro extremo al productor casi autónomo, consumidor de lo que produce Los adolescentes y
jóvenes de la actualidad se mueven dentro de ese espectro con una facilidad que por el momento la es vedada
a las generaciones adultas, con la facilidad de la adaptación a un media que les reclama participación y
compromiso con el fin de completar el comunicativo

CAPITULO III. Las redes sociales como ámbito de intercambios múltiples


En el marco complejo de la sociedad contemporánea, cada sujeto, cada grupo social, se apropia de la
tecnología que tiene a su cance de acuerdo a sus condicionamientos y necesidades
1. Formas de sociabilidad en las redes sociales; recursos, entretenimiento y colaboracion
Los adolescentes contemporáneos utilizan internet y las redes sociales para satisfacer diversos aspectos de sus
vidas cotidianas, las principales valoraciones de los adolescentes respecto de internet son las siguientes:
● Comunicarse las aplicaciones del chat, los muros, los mensajes privados, la publicación y comentarios
de fotos, la función "me gusta”, los grupos de interés y los comments.
● Ser valorados por los amigos y el circulo de contactos, las funciones MG y "dar un toque los
comments, las firmas en el muro, la cantidad de amigos, las palabras de apoyo y los emoticones.
● Mantenerse informados sobre sus temas de interés diversas apps como el monitoreo de la actividad de
perfiles ajenos, los feeds de noticias y usuarios, la búsqueda de contactos y los links a contenidos de la
Web.
● Entretenerse las múltiples aplicaciones, los juegos y la multimedia
Los adolescentes, que asocian autonomía a conectividad, logran una significativa parte de la libertad que
ansían tener respecto de los adultos
En ocasiones, los adolescentes reconocen que los juegos se les tornan adictivos y los hacen descuidar de otras
responsabilidades. "Te distrae de las cosas importantes”, dicen en repetidos casos y entre esas cuestiones
mencionan las tareas escolares, la recreación al aire libre, el trabajo y las relaciones familiares o con amigos.
Para ellos, la distracción es susceptible de convertirse en algo más grave cuando se torna "vicio" Los
videojuegos “se te hacen un vicio” declaran.
2. La presentacion de si, entre el anonimato y la exhibicion
La tenencia de un equipo propio y de una conexión continua a Internet repercute sobre la constitución
identitaria de los jóvenes en los entornos virtuales tanto para la personalización de los equipos y perfiles en
red como para los diversos modos de presentación de la persona. Los jóvenes habitan Facebook con absoluta
naturalidad y vuelcan allí no solo información personal sino el conjunto de elementos con los cuales se

69
identifica construyan un relato de sí mismos utilizando la fotografía como componente clave los teléfonos
inteligentes actúan como herramientas fundamentales para ese tipo de prácticas
Los jóvenes editan fotografías con software específicos para retocar aspectos de la imagen personal o a modo
de juego para hacerlas más atractivas a sus observadores., Esto hace de las fotos un producto cada vez más
maleable que se va distanciando de su carácter inicial clásico.
Los Adolescentes testean el nivel de reconocimiento y aprobación de su corporalidad poniendo a disposición
de sus pares (y de una audiencia imaginada pero invisible) las fotografías tomadas en busca de la aprobación
mediante los “me gusta” y los comentarios adicionales
Entre las fotos grupales que abundan en Facebook se destacan las de salidas nocturnas, las nocturnidad como
espacio temporal principalmente gobernado por los jóvenes tiene actualmente esta nueva posibilidad de
autoregistro en la vía pública y en locales nocturnos
No todos los que poseen cuentas en Facebook se exhiben en igual cantidad y detalle mediante fotografías
propias, nuevamente aquí se producen distinciones el modelo dominante de belleza impone sus patrones y
determina quiénes son dignos de mostrarse públicamente en las redes sociales y quiénes no
Muchos optan por no mostrar sus cuerpos. Ellos deben presentarse ante sus contactos mediante otros
elementos complementarios
3. Amigos, contactos y grupos ampliados
El núcleo de las relaciones que se establecen en Facebook proviene de los grupos de pares, es decir de un
pequeño grupo de amigos de edad similar que se frecuentan cara a cara que establecen vínculos afectivos de
confianza e intimidad
Desde ese primer grupo se expande una constelación de vínculos que cada usuario comparte con el conjunto,
en esos ámbitos compartidos los jóvenes y adolescentes buscan reconocimiento y aceptación intercambian
likes comentan fotos o frases se etiquetan entre sí y se recomiendan música, si bien en un primer momento
pareciera que amigos y desconocidos comienzan a mezclarse en un ámbito común de carácter público donde
toda la privacidad se manifiesta y exhibe ajustando la mirada se observa en cambio, que cada sujeto comparte
su entramado de pertenencias enraizadas en su clase social de origen y las instituciones por las que transitan
En el marco de las redes sociales es insuficiente hablar de la exhibición de la intimidad sin considerar las
formas múltiples en que los jóvenes y adolescentes administran la visibilidad de sus publicaciones
compartidas, hoy en día los jóvenes utilizan las herramientas de configuración de la privacidad de manera
compleja para determinar qué contenido pueden visualizar Cuáles de sus contactos, en este contexto
nuevamente cabe preguntarse si los jóvenes exhiben su intimidad a quienes y con qué motivaciones
La investigación muestra que los jóvenes en Facebook atraviesan una experiencia de aprendizaje en un
comienzo al abrir sus cuentas suelen agregar a conocidos y desconocidos de forma compulsiva con el tiempo
algunas malas experiencias (peleas con amigos o parejas contactos desconocidos que molestan adultos
acosadores), los alertan sobre la importancia de la regulación de la visibilidad de sus publicaciones
En la red el aprendizaje colaborativo se lleva a la práctica de forma espontánea sin mucha meditación
simplemente quien tiene una duda busca la opinión compartida por otro usuario que ya ha pasado por el
mismo problema y ha decidido socializar su experiencia en la red

70
Una manera de comprender cómo circulan estos elementos en esta red social es interpretando desde el punto
de vista de los actores la complejidad que subyace a la categoría “amigos”, en efecto los jóvenes comparten
contenidos con distintos tipos de amigos de acuerdo a sus motivaciones y a las circunstancias que los
interpelan
El primer círculo está compuesto por los amigos íntimos entre los que en ocasiones participan algunos
familiares se trata de un espacio compartido que puede ser pensado como un refugio un espacio común donde
cada uno comparte fotografías gustos apreciaciones y estados de ánimo en un ámbito de confianza afectiva,
para esa dinámica el círculo de pocos y conocidos puede ser cerrado así muchos jóvenes utilizan Facebook
bajo la condición “solo amigos”
El segundo círculo responde a las necesidades de apertura hacia la otredad hacia gente nueva y diferente la
socialización de la red de contactos permite que esta apertura comience desde lo cercano así empiezan a
relacionarse los “amigos de los amigos” cuyos intereses pueden concordar con los propios estos pasan a
convertirse en “amigos en común” categoría exitosa que los adolescentes mencionan frecuentemente cuando
se indaga de qué manera agregan nuevos contactos a su red
Al ampliarse la cantidad de amigos crece el nivel de visibilidad de las propias publicaciones el uso de la red se
torna menos personal e íntimo y adquiere un carácter más lúdico la sociabilidad y el intercambio de
contenidos se vuelven más intensos
Para la etapa de apertura hacia el mundo que los adolescentes y jóvenes atraviesan en la cual van dejando
atrás los modelos y las seguridades de la infancia, internet se presenta como un abanico de referencias infinito
la virtualidad multiplica los canales de acceso a esos mundos posibles, en internet se crean comunidades
virtuales que constituyen espacios de sociabilidad, encuentro, interacción e intercambio de bienes culturales
En tercer lugar se presenta un nivel de visibilidad que se expande más allá de los límites estimados por el
usuario son los casos en que la configuración de la privacidad se halla en estado “público” haciendo posible a
cualquier usuario visualizar los contenidos compartidos y publicados
4. Seduccion y busqueda de pareja
Los jóvenes se presentan ante los otros exhibiendo las fotografías de sí mismos que consideran más atractivas
a la espera del feedback de su comunidad de pares
Facebook define ciertas categorías para describir la situación sentimental, cuando el usuario modifica su
estado sentimental este se publica inmediatamente como novedad en el muro de sus contactos estos cambios
de estado civiles o sentimentales funcionan como manifestación pública del comienzo o el fin de una relación
o en otros términos de estar o no disponible para la seducción y la búsqueda de pareja de modo abierto
Entre los adolescentes heterosexuales de sectores populares las mujeres se concentran por un lado en la
búsqueda de un varón que cumple con las expectativas de compromiso actividades proyectos y atracción
necesarios y por otro en volverse mujeres fatales con un alto grado de autonomía respecto de la exclusividad
que demanda una pareja monogámica por su parte los varones se concentran en la búsqueda y seducción de
contactos femeninos con las que explorar la sexualidad así como también aspiran a conseguir una pareja
estable una chica que sea fiel cariñosa romántica y familiera
Desde el punto de vista de las percepciones de los adolescentes la búsqueda de pareja en Facebook conlleva
tanto ventajas como desventajas, por un lado valora que les permiten conocer aspectos del otro antes de

71
decidir encontrarse “podés conocerlo y verlo antes de encontrarte en persona”, “conoces todo sobre ellos”, “el
Face muestra todo lo que te gusta y así uno se conoce mejor”, por otra parte rescatan de las redes que les
ayuda a construir su propia imagen “podés mostrarte distinto a los demás”. Así mismo resaltan que “es más
fácil” conocer gente por este medio, que les genera mayor grado de desinhibición para comunicarse y
establecer vínculos “capaz que te conoces mejor”, “cuando lo vas conociendo podes tener mejor
comunicación”, “tal vez le podés decir cosas que sí la tenés enfrente no te animarías”.
Para los adolescentes esta plataforma es una herramienta imprescindible para buscar pareja aunque, a su vez,
posee sus riesgos y desventajas, dado que lo que se construye allí constituye una performance que no siempre
coincide con la identidad copresencial deseada
Sobre esta cuestión, los adolescentes van afinando la mirada: suelen distinguir entre los usuarios activos y
"reales", a los que definen como los que tienen fotos donde están etiquetados por otros, y los sospechosos de
ser trolls, potenciales criminales o "estar metidos en algo raro.
5. Relaciones intergeneracionales, el complejo lugar de los padres y los docentes en las redes
sociales
En el marco de esta apertura a nuevas relaciones, seducción y presentación desinhibida de sí mismos, los
jóvenes corren riesgos, en especial los más chicos. Frente a ello, los adultos intentan intervenir en pos de su
cuidado y protección, cabe preguntarse si saben los adultos qué hacen los adolescentes en las redes sociales,
hasta dónde comparten los padres los espacios de encuentro virtual como FB con sus hijos.
La brecha generacional entre nativos e inmigrantes digitales. La generación de los mayores estaría alejada de
los dispositivos digitales y las plataformas virtuales por una carencia en las habilidades y saberes para
utilizarlos, en estas diferencias influye el grupo de edad también influye la clase social no solo por una
cuestión económica de acceso a equipos y conectividad sino también por una cuestión de hábito de uso de las
TIC, los adultos mayores por su parte están más alejados de los códigos generacionales de los jóvenes y
adolescentes pero sin embargo disponen de tiempo libre para experimentar, como los más chicos.
Los adolescentes por la etapa de la vida que transcurren buscan autonomía, dentro de los hogares demandan
una habitación propia u otros elementos que son vehículos de autonomía por ejemplo un automóvil una
Notebook un teléfono inteligente y dinero para los gastos diarios, en particular los adolescentes de sectores
populares (que en general carecen de una habitacion propia) encuentran en los dispositivos y entornos
digitales ámbitos amistosos para volcar su música favorita sus videoclips favoritos las imágenes de sus ídolos
predilectos y a su vez intercambian todos esos gustos y preferencias con sus pares y otros nuevos contactos
que se van presentando así encuentran en Facebook una suerte de “habitación virtual”
En líneas generales se observa que en comparación con años atrás las familias y la escuela están cada vez más
presentes en Facebook por un lado esto hace de la red un lugar menos riesgoso donde los adolescentes pueden
contar con el acompañamiento protección y supervisión de los adultos ¿Qué hacen los jóvenes y adolescentes
frente a esta nueva situación? cómo es de esperar desarrolla nuevas estrategias para correrse de la mirada
adulta e institucional que comprime sus necesidades expresivas y relacionales, adquieren una habilidad cada
vez más sofisticada para gestionar al público susceptible de observar sus publicaciones
Frente a la presencia cada vez más fuerte de los adultos, los jóvenes y adolescentes comienzan a resolver sus
necesidades de sociabilidad y comunicación mediante otras estrategias, entre ellas el uso de otros servicios y
plataformas virtuales, en general no cierran sus cuentas, sino que, para sus usos cotidianos cambia de función.

72
4.3. Cuerpo, imagen corporal y significación social. Las modificaciones en el cuerpo como fenómeno
cultural
4.3.- STERNBACH, S. (2006) "Adolescencias, tiempo y cuerpo en la cultura actual. En Adolescencias:
trayectorias turbulentas, Rother Horstein (Comp.) Edit. Paidós, Buenos Aires.
No es novedad que los adolescentes de hoy poco se parecen a los de algunas decadas atras.
La cultura produce configuraciones subjetivas mayoritariamente congruentes, con sus propuestas
identificatorias, sus ideales, sus prohibiciones y sus imposibles identificatorios, también los adolescentes
personifican, aun sin saberlo, el dicho cultural acerca de quiénes son o cómo deben jugar su canon etario. Ni
siquiera el cuerpo permanece ajeno a la atribución identificatoria. Los múltiples modos en que los discursos
sociales se enraízan, produciendo sujetos encarnados.
Los ímpetus de la globalización por lo demas, imponen sus coordenadas al actual tránsito adolescente. Así es
que la tendencia a la homogeneidad atraviesa las fronteras geográficas e impregna a los adolescentes, de
regiones distantes con estilos, modas, músicas, hábitos de consumo y anclajes identificatorios que los igualan
tanto.
Junto con una mayor homogeneidad espacial en lo que a la adolescencia se refiere, las diferencias
generacionales adoptan modalidades novedosas. A diferencia de otros periodos historicos, en los cuales la
adolescencia se consideraba un tiempo de transito que culminaria en la adultez, actualmente es la juventud y
aun la adolescencia aquello a alcanzar. Por esta razon el modelo adolescente se impone y convoca al mundo
adulto a intentar permanecer lo más cerca posible de esta etapa, actualmente erigida en ideal colectivo.
La velocidad de los tiempos y de las transformaciones socioculturales produce cambios vertiginosos en la
producción de subjetividad, al punto tal que las distancias generacionales se agudizan a veces dentro de la
misma franja etaria que hasta hace poco quedaba unificada bajo la nocion de adolescencia. Asi es que “cada
generacion es hoy parte de una cultura diferente”. A la vez, dentro de lo que se definiria como una misma
generacion, cohabitan modalidades subjetivas que solo en algunos aspectos se parecen entre si.
Las adolescencias, múltiples, diversas, siempre surcadas por una singularidad entretejida con las trazas
comunes que la cultura actual posibilita.
Adolescencias
Debido a los embates de las fuertes transformaciones corporales, a menudo la adolescencia tiende a aparecer
bajo la pregnancia de lo biológico y lo evolutivo. De este modo, se la sustancializa olvidando que el cuerpo
también es hablado desde lo social.
La alineación en los discursos culturales no solo se manifiesta en el plano del pensamiento, en la adhesion
acrítica a las propuestas de la época, también y tal de modo todavia mas imperceptible, acontece en las
prácticas sociales, en las conductas, en las acciones naturalizadas, en los cuerpos mismos.
El trabajo de los adolescentes actuales es justamente el de plasmar un proyecto identificatorio bajo
coordenadas sociales específicas ni mejores ni peores que las de antaño pero sin duda diferentes
La vida familiar se ha modificado notablemente en las últimas décadas, la familia burguesa tradicional es una
estructuración ya casi anacrónica dentro del enorme abanico de diversidades familiares (familias ensambladas

73
homosexuales monoparentales entre otras) algunas características comunes las distancian de la familia que
hasta hace poco se consideraba convencional
Una de estas características es que fundamentalmente la familia no es hoy el principal y mucho menos el
único agente de socialización y transmisión, la otredad generacional se acentúa salvo que los padres adopten
las jergas adolescentes para fraternizar con sus hijos
ES evidente que la transmisión intergeneracional cede lugar a modalidades de transmisión exogámicas que
sustituyen las identificaciones otroras centrales por otras extrafamiliares
El lugar idealizado que la cultura propone respecto de lo joven es antes que nada el lugar del consumidor. La
alegría, la belleza, el modelo identificatorio propuesto giran en torno al perfil del consumidor en tanto ideal.
Dicha oferta es congruente con el tipo de sujeto ideal propuesto desde ese peculiar momento sociocultural.
El adolescente actual tiene abiertas posibilidades que a sus antecesores generacionales les estaban vedadas,
una menor cerrazón endogámica, menos autoritarismo, mayor cuestionamiento de modelos anteriores, mayor
libertad en múltiples aspectos.
Entre los obstáculos destacamos la tendencia a una adolescentización social que se corresponde con la
devaluación de la noción de proyecto, esto que puede vaciar de sentido al futuro al mismo tiempo constituye
una oportunidad para la diversificación de búsquedas no ancladas a un proyecto identificatorio ya definido de
antemano (Lerner, 2004.)
Además, la exploración y búsqueda a través de las posibilidades que el mundo tecno-mediático permite, la
misma prolongación de la adolescencia como moratoria, ofrecen oportunidades anteriormente inexistentes
para la subjetivación del adolescente contemporáneo.
El tiempo; entre la velocidad y el proyecto identificatorio
Abordar la cuestión de la temporalidad implica referirnos a un aspecto central en la construcción de la
subjetividad, una subjetividad que no puede sino estar marcada por las trazas temporales de su cultura a las
cuales modifica y recrea a la vez
Hoy el tiempo parece transcurrir con una mayor velocidad En comparación con épocas anteriores, el ritmo de
los cambios propios de la modernidad se ha ido acentuando en parte gracias a los enormes avances
tecnológicos que brindan posibilidades inéditas en cuanto al acortamiento de tiempos y distancias. La época
nos propone construirnos “habitantes del puro presente” lo cual imprime un sello peculiar a la temporalidad.
La velocidad se aúna de modo paradójico con cierta eternización de un tiempo efímero que no se dirige hacia
un futuro prefijado, transformador del presente.
En la actualidad la búsqueda está mucho más permitida porque los mandatos previos han caducado y el
porvenir es incierto imprevisible o en última instancia no importa demasiado. Como dice Piera Aulagnier,
para el yo resulta fundamental poder situar un ideal a futuro que no se agote en la mera reedición de lo ya
vivido. El proyecto identificatorio parte de la trabajosa elaboración psíquica de la castración es esencial para
el sujeto humano
La distancia entre el yo actual y el ideal buscará ser zanjada a futuro. Futuro que se dibuja como proyecto
identificatorio y como sede de ideales que habrán de funcionar como horizonte desiderativo para un yo en
movimiento hacia lo porvenir.

74
El proyecto otorga un sentido provisorio y desiderativo al yo en devenir. Promueve efectos de subjetivación al
rescatar al adolescente de la inercia de las anticipaciones que los otros plasmaron para su yo, lo rescata de las
trampas narcisistas de un yó igualado al ideal en tiempo presente El proyecto es en cambio alteración. Implica
la alteridad potencial para un yo no condenado meramente a permanecer.
Con frecuencia la creciente velocidad con la cual los adolescentes hablan y que oficia como contraseña de
pertenencia generacional, está acompañada de un empobrecimiento del lenguaje. El “todo bien” que
acompaña el saludo habitual con su obvia contrapartida del “todo mal” para dar cuenta ya sea del desánimo, la
angustia, la tristeza, la depresión constituye una muestra de dicho empobrecimiento
Los potenciales efectos alienantes de una oferta cultural que convierte el pasado y la historia en el trivial “ya
fue” y reduce la posibilidad de lo nuevo, de lo inédito, al reino de la novedad
El cuerpo; entre la docilidad y la potencialidad subjetivante
El cuerpo se construye en el seno de los vínculos y del campo histórico social
Este cuerpo a la vez biológicos sensorial erógeno imaginario y hablado es por consiguiente indisociable tanto
del psiquismo como del encuentro incesante con los otros investidos y con el lazo social ampliado
El cuerpo, afectado desde sus raíces biológicas, es sin embargo también producto de los discursos sociales, se
produce desde una realidad cultural y no meramente natural.
El cuerpo biológico constituye el basamento material del cuerpo sensorial y erógeno, pero las vicisitudes
afectivas y representacionales revierten a su vez sobre el funcionamiento biológico corporal, de este modo, el
sufrimiento psíquico produce a menudo sufrimiento somático.
El Yo, proyección de superficie corporal despliega el múltiple entramado de las identificaciones y los ideales
pero no solo se trata de cuestiones identificatorias en la adolescencia, la habilitación sexual activa también el
mundo fantasmático y los más arcaicos modos del procesamiento afectivo en la salida a la sexualidad a través
de las transformaciones corporales y fundamentalmente a través del encuentro con los otros estos registros se
ven conmovidos
La relación con el cuerpo propio es inseparable de la relación con los otros, temática que se juega de modo
peculiar en la adolescencia
El cuerpo en general y el cuerpo adolescente en particular resultan hoy fuertemente investidos desde los
discursos sociales, se trata antes que nada del cuerpo en su dimensión estética, que opera a menudo como
clasificador y organizador fundamental de las relaciones afectivas y sociales.
El yo queda subordinado en la imagen corporal, que responde al ideal de perfección según el canon de la
época, la atención al cuerpo (gimnasios, dietas, cirugías, etc) excluye al afecto, la emoción, la fantasía, el
pensamiento.
La idealización de la representación del cuerpo adolescente desoye a menudo al cuerpo real con sus
sensaciones de placer y de sufrimiento.
¿Qué ocurre con la sexualidad adolescente en este contexto de significaciones sociales? sabemos que hoy en
día el ejercicio de la sexualidad ha quedado liberado respecto de restricciones anteriormente vigentes, alguna
de las cuales fueron hegemónicas durante siglos, la sexualidad actual goza de una permisividad creciente

75
porque el placer en el sexo forma parte de una validación social que se extiende tanto a las mujeres como a los
varones
La incitación cultural a los discursos acerca de lo sexual si bien otorga innegablemente libertades no por eso
deja de ejercer efectos normatizantes ligados al control social
Esto habrá de contribuir a la reapropiación de la riqueza de una corporalidad no reductible a la imagen y a la
pulsión desencadenada para incluir la potencialidad subjetivante del cuerpo en su multidimensionalidad
El analista en los bordes
Trabajar hoy con adolescentes implica avanzar en las conceptualización de sus problemáticas actuales y de las
modalidades de subjetivación contemporáneas
Acompañar a los adolescentes de hoy en su posibilidad de exploración y en su tarea de autoconstrucción
requiere de estos y otros interrogantes en suma de nuestra apertura y disponibilidad para el cuestionamiento
de los sentidos coagulados

4.4. Familias, adolescencias y pautas culturales


4.4.- URBANO, C. y YUNI, J. (2001) "Y....no se..."Colección Psicología y Cultura de los Adolescentes
Editorial Mi Facu. Cap. IX.
CAPITULO 9. Adolescencia y familia
Introduccion
Al nacer todo sujeto recibe de su núcleo familiar una doble herencia genética y cultural;
● Herencia Genetica; es la responsable de transmitir biológicamente a través de los genes las
características fisonómicas y temperamentales del sujeto
● Herencia Cultural; se vale de la plasticidad del cerebro para transmitir los códigos normas valores
rituales propios del contexto social
De este modo el sujeto elabora una personalidad acorde con el tipo de sociedad en el que desarrolla su
existencia
Las relaciones familiares que se dan en ella responden a las características que posee la trama vincular que
hace de cada familia una configuración particular esa trama es producto de diferentes tipos de interacciones
que ocurren dentro de un proceso dinámico que conecta cada personalidad individual con las relaciones que se
dan en el interior de la estructura familiar y con el contexto sociocultural
En el establecimiento de una sociedad conyugal, cada sujeto aporta su propia individualidad, la cual se
manifiesta en la "identidad personal" de cada integrante de la pareja. En la conformación del vínculo marital
se configura una "identidad de pareja". Cuando se produce el nacimiento de un hijo, éste modifica la relación
de la pareja, los que arriban a un nuevo rol social: el de "padres". Los padres aseguran la supervivencia física
y emocional de su hijo, a la vez que moldean su desarrollo individual; determinando, en gran parte, su destino
mental.
En la actualidad hay una amplia gama de estructuras familiares, muchas de ellas caracterizadas por la ausencia
de alguno de los padres (como es el caso de las madres solteras); o de ambos (en las cuales los niños so
creados por los abuelos o por otros familiares). No obstante ello, generalmente las personas encargadas de la

76
crianza realizan una sustitución de las funciones parentales, que les permite contar a los niños y adolescentes
con los modelos de identificación de cada uno de los generos y roles (masculino/padre-femenino/madre)
necesarios para elaborar su propia identidad.
La familia constituye un sistema estructurado en el cual la acción de uno de sus miembros incide sobre los
demás integrantes que la constituyen. Es en su interior, en donde el sujeto encuentra contención y seguridad
emocional frente a las exigencias que le plantea la sociedad como sistema que la contiene. La identidad
individual de cada sujeto se apoya en la identidad familiar y ésta, a su vez, se manifiesta dentro de una
comunidad
Trataremos de resaltar los rasgos principales de la vinculacion padres-hijos adolescentes en el contexto de las
relaciones familiares
Funciones de la familia
Las funciones de la familia abarca la satisfacción de las variadas necesidades básicas de los seres humanos el
cumplimiento de las mismas dará lugar a la conformación es mayor o menor medida de una identidad
integrada podemos agrupar las funciones familiares en
a. Funciones de crianza, la crianza de los seres humanos no se limita sólo a la provisión de elementos
que satisfagan las necesidades biológicas, sino que requiere de la provisión de recursos psicológicos,
emocionales y sociales. La familia como sistema organizado en torno a relaciones de alianza y de
consanguineidad, genera un código común, un conjunto de valores y de reglas que determinan la
interacción recíproca entre sus miembros y los miembros de la comunidad, estos codigos son los que
sustentan las practicas de crianza, siendo de suma importancia el rol y la posicion de los padres. El
modo en que estos efectúen la actuación de su autoridad en cuanto a la orientación y a la puesta de
límites, así como el establecimiento de un vínculo reasegurador que provee al sujeto de afecto y
seguridad, son fundamentales en la función de la crianza de los niños y adolescentes. El desempeño de
esta "función de crianza" de una manera flexible y contenedora tendrá influencia en el desarrollo
emocional del sujeto, y también en la adquisición de un autoconcepto positivo y de una autoestima que
le permita proyectarse en el futuro confiado en sus capacidades y potencialidades para enfrentar las
demandas del mundo exterior.
b. Funciones de organización de la descendencia, la familia en tanto sistema organizado necesita tener
“unidad de liderazgo”, que consiste en el ejercicio de la autoridad en forma distribuida entre los
progenitores. Actualmente, el sistema legal ha regulado la igualdad de los padres en el ejercicio de este
liderazgo, mediante el reconocimiento de la patria potestad compartida, derecho que hasta la década
pasada sólo le era reconocido al padre. Tanto el padre como la madre portan roles sociales diferentes
(privados y públicos), y se ajustan a funciones socialmente determinadas. Culturalmente, se ha
atribuido
A la madre la representación del liderazgo expresivo- afectivo, que consiste en asegurar
la estabilidad armónica del hogar y en cubrir las necesidades básicas de nutrición, en lo
que se refiere a aspectos emocionales y afectivos de los hijos.
Al padre se le ha asignado la tarea de ejercer un "liderazgo instrumental", consistente
en la función de sostener y proteger a la familia en cuanto a la provisión de recursos
materiales, contribuyendo así a la ubicación social de la familia dentro de un contexto
más amplio.
El "liderazgo expresivo-afectivo" no es una condición exclusiva ni propia de lo femenino; pues esta
función también es ejercida por el padre como representante de lo masculino. Por otra parte, los

77
cambios socio-culturales y económicos acontecidos en las últimas décadas tambien dejan sin efecto la
atribución cultural respecto de la funcionalidad otorgada al padre como proveedor.
El hecho de que las condiciones económicas hayan cambiado, que se haya producido la inserción de la
mujer dentro del mercado laboral, y del alarmante nivel de desempleo y falta de trabajo para los
varones, son factores concurrentes que han posibilitado que el liderazgo instrumental sea compartido
por ambos progenitores y que el liderazgo afectivo-expresivo y varias funciones de crianza hayan sido
trasladadas al hombre
Todos estos procesos se han producido de forma paralela y seguramente vinculada a la desintegración
de la estructura familiar tradicional (debido a divorcios, muerte de un conyuge, conformacion de
familias ensambladas).
De lo antes dicho, se desprende que ambos padres son responsables de la "unidad de liderazgo”. Es
decir, ejercen la función de autoridad conjuntamente, de modo que posibiliten la integración de los
vínculos familiares. En el interior de la estructura familiar es posible diferenciar tres tipos de vinculos:
a) vínculos de alianza; En la pareja se establece una complementariedad funcional respecto a
los intercambios sexuales, al ejercicio de la autoridad respecto de los hijos, al intercambio
económico y respecto de la organización de la vida familiar en general.
b) vínculos paterno-filiales; Entre los padres e hijos se establece una alianza respecto del
cuidado y la protección, la dependencia económica y la toma de decisiones.
c) vínculos fraternos; Entre los hermanos se establecen ligazones de complementariedad
funcional.
Todos estos vínculos se actúan cotidianamente en la familia. Estos intercambios se producen en
forma dinámica, es decir, que se complementan e interactúan entre si, modificándose a través del
tiempo. Estas modificaciones son necesarias, en la medida en que posibilitan al sujeto el logro de una
mayor independencia y autonomía respecto de la familia; y específicamente, respecto de la función de
crianza
c. Funciones de enculturación: en la familia se produce un intercambio entre sus miembros y el
contexto social inmediato, produciéndose una interdependencia e interinfluencia entre la familia y la
sociedad. La familia se constituye asi en un sistema abierto y permeable a las transformaciones
socioculturales, las cuales exigen cierta flexibilidad y el aprendizaje de pautas, valores, actitudes por
parte de los integrantes del grupo familiar. La familia como sistema social primario es responsable de
la transmisión de la cultura. Dicha transmisión se efectúa principalmente a través de la enseñanza del
lenguaje, medio a través del cual el sujeto puede canalizar su experiencia perceptiva con el mundo
externo y puede pensarse internamente; dotando de significación y de sentido a los acontecimientos de
su vida.
Se efectúa de generación en generación. A veces se complementa, otras se superpone o contradice los
procesos y contenidos culturales que transmiten otras organizaciones sociales. La tarea de la familia
como sistema social primario es posibilitarle al sujeto el aprendizaje de los roles sociales básicos y el
valor de las instituciones sociales.
La importancia de la accion de los padres en la adolescencia

78
Si bien, es posible caracterizar el proceso de la adolescencia en sus aspectos comunes a todos los seres
humanos sus manifestaciones se exteriorizan de diferentes maneras según los patrones culturales propios de
los contextos en que acontece. La adquisición de la identidad del adolescente se encuentra condicionada en
gran medida por las características del medio familiar y sociocultural.
Los cambios físicos y psicológicos que se producen en esta etapa no sólo afectan al adolescente sino también
a sus padres, los que perciben el crecimiento de sus hijos con ansiedad, temor y angustia frente a las actitudes
de crítica, y a las manifestaciones de independencia por parte del mismo.
Entre los adolescentes y sus padres se produce una situación de ambivalencia dual, ya que la misma situación
ambivalente que presentan los hijos separándose de los padres, la presentan estos al ver que aquellos se alejan
La crisis por la que atraviesa el adolescente se actualiza los conflictos de que han sido partícipes los padres
cuando atravesaron esta etapa. La transformación de este niño en adolescente púber es vivenciada por los
padres como un período en el cual sienten mucha ambivalencia: a veces lo tratan como niño mientras que
otras le imponen exigencias del mundo adulto. El estado de confusión por el cual atraviesa el adolescente
despierta cierto rechazo en sus padres
Además de manifestar un cambio en su comunicación con ellos: “ahora no les cuenta nada”. Esto los irrita y
angustia, pues les hace sentir que su hijo tiene algún conflicto que no puede comunicar por falta de confianza
en ellos
Ahora se ven enfrentados a abandonar sus fantasías de omnipotencia y a aceptar la necesidad de autonomía de
su hijo, lo cual muchas veces es sentido como que los ha dejado de querer. Suelen presentarse fantasías en los
padres, respecto a que los cambios que observan en su hijo son inducidos por el colegio que les enseña cosas
que no deben, por algún amigo/a, o por algún grupo de los que participa. Esta fantasia es lo que hace que le
prohiban comunicarse con fulano o fulana de tal.
Los padres comienzan a manejar esta agresión y desobediencia a través de prohibiciones, de excesivas
exigencias personales, de una manera autoritaria carente de lógicas razones. Chantajean a su hijo a través de
un sistema de premios y castigos.
Para el adolescente los padres se constituyen en el rival que hay que derrotar y vencer para obtener la
autonomía. El adolescente intenta “destruir a sus padres” en su concepción infantil de dependencia, de
omnipotencia y de relación simbiótica, esto lo realiza en la fantasía.
La forma de afrontar los cambios de su hijo adolescente dependerá, en mayor o menor medida, de la madurez
y de cómo ellos (los padres) hayan resuelto este período de su vida. La adolescencia de su hijo moviliza los
conflictos de la adolescencia de los padres. Los padres como adultos deben favorecer este proceso de
separación que su hijo está necesitando para autoafirmarse, para lo cual deben abandonar la ilusión de hacer a
su hijo a su imagen y semejanza. En este momento de la vida es necesario la presencia activa de los padres,
quienes deben actuar de una manera inteligente en la puesta de límites de su hijo.
La adolescencia constituye un período de transformaciones en donde el adolescente necesita de un ambiente
que lo contenga y lo oriente más que nunca, pues él se ve enfrentado a la tarea más importante de esta etapa:
el ser buscador de una identidad. Es de suma importancia la presencia activa de los padres, quienes deben
intentar hacer frente a estas agresiones que su hijo adolescente les propicia, estableciendo pautas de
convivencia flexibles, que puedan ser cuestionadas y dispuestos a modificar su actuación teniendo en cuenta

79
las necesidades de su hijo. El no poder asumir los cambios del adolescente y el posicionarse en una actitud de
autoritarismo, de atropello y de exigencias absurdas acrecientan el sentimiento de incomprensión del joven,
constituyéndose en la fuente de ciertos trastornos en el desarrollo normal
En casos extremos, los padres pueden llevar al adolescente a sentirse abandonado, no tenido en cuenta,
sintióndose incapaz de cumplir con las exigencias del medio y a tener fantasías de suicidio, las cuales en
muchos casos pueden llevarse a la práctica.

DUSCHATZKY, S. y CORREA. C. (2009) "Chicos en banda. Los caminos de la subjetividad en el


declive de las instituciones". Ed. Paidós, Buenos Aires. Cap. 4
CAPITULO 4. Las instituciones en la pendiente.
4.1. Las figuras de autoridad familiar
¿Que es la familia?
La familia tradicional ofrecia un punto de equilibrio al individuo, al mismo tiempo lo insertaba en un espacio
de sostén social y redistribución económica, la familia hacía posible la inscripcion en una genealogía, es
decir en una historia que les brindaba a sus miembros sostén y referencia.
La familia constituía para la tradición moderna el primer eslabón en el proceso de filiación y construcción de
la cadena intergeneracional. Desde ya que este patrón cultural no contemplaba las diferentes experiencias
familiares gestadas en itinerarios culturales y sociales distintivos, pero constituía la matriz regulatoria de las
sociedades occidentales.
La función materna ofrece además una función identificatoria, le proporciona al niño un conjunto de
significados que permitirán nombrar los diferentes estados por los que atraviesa
¿Qué papel le confiere el psicoanálisis al padre? Al igual que la función materna se trata de una función
simbólica, es decir, no importa quién la ejerza sino la posibilidad de que sea inscripta significativamente. El
padre es el representante de la ley y como tal el portador de los discursos sociales legitimados. El padre es el
encargado de romper la simbiosis entre madre e hijo y el que reparará esa "pérdida" con la puesta a
disposición de objetos sustitutos (simbolos, ideas, instituciones, ritos) que facilitarán la exogamia.
Ahora bien, ¿qué ha sucedido con estas representaciones familiares?
La organización paterno-filial dependía de un orden social específico (la sociedad burguesa) que conferia a la
familia la tarea de constituir la matriz subjetiva de los futuros ciudadanos. La desarticulación del universo de
la familia nuclear se inscribe en la alteración de una serie de condiciones basadas en el principio jerárquico
Las alteraciones sufridas por el modelo paterno-filial que constituyó el núcleo de la organización familiar:
● Pérdida de condición salarial,
● incertidumbre respecto al futuro,
● flexibilidad laboral,
● dilución del trabajo como pilar de estructuración social,
● pérdida de las protecciones sociales,
● borramiento de las fronteras sociales,

80
● pasaje del saber a la información con sus efectos concomitantes en la devaluación de la
experiencia y
● la transmisión intergeneracional.
El corpus de la investigación nos enfrenta a la emergencia de nuevos modos de vinculación familiar que nos
hablan de algo mas que de otros tipos de familia. Se trata de múltiples modos de relación que rompen la
estructura paterno-filial. Los estudios sociológicos describen nuevos tipos de familia:
● familias ensambladas,
● monoparentales,
● ampliadas,
Que a pesar de las transformaciones en su configuración conserva una matriz fundada en el ejercicio de
figuras de autoridad. Lo que encontramos, en cambio, nos enfrenta a la necesidad de repensar la categoría
familia ya que emergen múltiples modos de vinculos que ponen en juego la eficacia de las figuras portadoras
de autoridad simbólica.
Dado que se trata de modalidades de relación construidas en situación, es imposible arribar a un cuadro
exhaustivo de los nuevos vínculos familiares. La caida de un patron referencial en la estructuracion familiar,
nos invita a pensar que la “familia” es hoy un significante vacío, es decir un lugar sin referencia estable de
significación.
Ante el agotamiento del dispositivo familiar, los registros ofrecen 3 modalidades subjetivas de habitar la
nueva situación: desubjetivacion, resistencia e invención.
4.1.1. Desubjetivacion
Son modos desubjetivantes de habitar los vinculos familiares o, lo que es lo mismo, un no poder hacer casi
nada con la situación.
La desubjetivación, nos habla de un modo de habitar la situación marcada por la imposibilidad, estar a
merced de lo que acontezca habiendo minimizado al máximo la posibilidad de decir no, de hacer algo que
desborde las circunstancias. Se trata de un modo que despoja al sujeto de la posibilidad de decisión y de la
responsabilidad.
Una de las condiciones de la desubjetivación en el entorno familiar es la visible indiferenciación de los
lugares tradicionales de padre, madre e hijo con la consecuente disolución de las posiciones de protección y
autoridad de los padres hacia los hijos. En ese marco de disolucion y confusión, la desubjetivación consiste
en la imposibilidad de gestionar lugares de enunciación desde los cuales habitar esas transformaciones.
La indiferenciación de lugares entre adultos y chicos no llamaba la atención durante el siglo XV, pero hoy, tras
un largo período de institucionalización, la alteración de los lugares simbólicos de autoridad delata algo más
que un simple cambio histórico en la configuración familiar.
Vemos emerger nuevas relaciones que no sólo ponen de relieve la simetrización o indiferenciación de lugares
sino más bien la pérdida de toda referencia en la cual anclar. Quizás haya que pensar que lo propio de nuestras
circunstancias es la ausencia de referentes y anclajes y que, por lo tanto, cualquier sistema de referencias que
se arme conlleva la oportunidad de un proceso subjetivante.

81
La maternidad y la paternidad aparecen desinvestidos de aquel sentido heredero de la tradición cultural. Padre,
madre e hijo ya no se perfilan como significante de una relación intergeneracional basada en el principio de
autoridad, sino que parece tratarse de lugares simbólicamente destituidos.
Estas alteraciones a menudo son acusadas como vacío por parte de los hijos. Los momentos donde se hace
más visible la circulación del dolor, el desamparo y una suerte de llamado a las figuras protectoras de los
padres, se dejan ver en los relatos sobre las experiencias familiares.
Ante esa caída, los sujetos difícilmente logran construir condiciones de enunciación para habitar e investir la
experiencia de la paternidad y de la maternidad.
La desubjetivación es en este caso la imposibilidad de instalar alguna condición subjetiva para hacer algo con
lo real de un embarazo, Los modelos de paternidad y maternidad burgueses están destituidos. Se abren,
entonces, dos caminos: el de la supervivencia o el de la subjetivación. El embarazo, el nacimiento, la
reproducción pueden ser meros hechos reales, biológicos, avatares del viviente. Pero también, en la medida en
que la situación exige altas cuotas de implicación, podría ser una ocasión de decisión, de responsabilidad, de
subjetivación.
4.1.2. Resistencia
La resistencia expresa cierta actitud de defensa algo asi como un modo de abroquelarse para protegerse de
los efectos riesgosos que acechan la existencia. La familia aparece como un lugar de refugio y preservación.
La alteración del modelo se registra en el tránsito de una familia que propiciaba la salida al mundo a una
familia que preserva de los riesgos del mundo. Tradicionalmente la familia era la encargada de instalar al niño
en el mundo mediante una serie de prácticas de socialización que atendían a su autonomización progresiva. El
mundo era apetecible en tanto prometedor de nuevas posibilidades.
El mundo se ha vuelto inhabitable y la familia procura dilatar la salida de sus hijos. La calle es peligrosa,
amenazante y en consecuencia el cuidado familiar no es aquel que fortalece al hijo para salir al mundo sino
el que lo preserva de los riesgos del mundo.
4.1.3. Invencion
La modalidad de la invención pone de relieve la producción de recursos para habitar la situación. Se trata de
hacer algo con lo real, de producir aberturas que desborden la condición de imposibilidad, de producir
nuevos posibles.
Aún en condiciones de destitución del dispositivo familiar se registra la producción de operaciones de
subjetivación.
La desocupación como marca de identidad y no como estado temporario, nos hablan de nuevas condiciones
erosionantes de autoridad.
El efecto de esta mutación no es necesariamente la disolución total de toda autoridad simbólica. Se trata de la
construcción de una posición de enunciación que grafica la búsqueda de un “poder ser” en el borde de un “no
poder”. Las operaciones de subjetivación se plantean allí donde opera la imposibilidad.
Presencia, límite, acompañamiento, transmisión de valores son algunos de los rasgos de la actual enunciación
paterna y materna. La nueva autoridad simbólica se instala por fuera o en el borde de un campo social

82
configurado sin principios contundentes de jerarquía. En otras palabras, cuando las referencias que sostienen a
un sujeto en el devenir de su existencia se han vuelto fragiles la vida se torna un hacerse a si mismo cada vez.
4.2. La escuela entre la destitución y la invención
Los jóvenes que viven en condiciones de expulsión social construyen su subjetivación en situación
compromete profundamente a la escuela.
En este punto transitaremos nuevamente por las tres categorías: desubjetivación, resistencia e invención, a fin
de analizar los diferentes modos de habitar la caída del dispositivo pedagógico moderno. La destitución no es
la inexistencia, no es el vacío, no es la ausencia de algún tipo de productividad. Tampoco la falta de respuesta
a un tipo de demandas. La destitución simbólica de la escuela hace alusión a que la "ficción" que ésta
construyó mediante la cual eran interpelados los sujetos dejó de tener poder performativo.
La eficacia simbólica de la escuela no se demuestra en la constatación empírica: no se trata de que la escuela
haya producido efectivamente sujetos que participaran en la misma medida en la vida pública; ni en una
efectiva distribución equitativa de los hienes educativos. La eficacia simbólica de un discurso se mide en su
potencia de producción de subjetividad, es decir, en su capacidad de constituir a un sujeto alrededor de un
conjunto de normas y valores que son los que rigen la vida social.
Lo que sugerimos con la hipotesis de la destitucion de la escuela es que se percibe una pérdida de credibilidad
en sus posibilidades de fundar subjetividad.
La destitución tambien puede ser procesada y habitada, la destitución no es un derrumbe sino el escenario
complejo y extremadamente duro en el que se despliegan operaciones de invención para vivirla.
4.2.1. Desubjetivacion
La desubjetivación hace referencia a una posición de impotencia, a la percepción de no poder hacer nada
diferente con lo que se presenta.
Segun los momentos historicos y las ideologias dominantes, el énfasis en la devaluación del pobre se puso
alternativamente en la dimensión moral o cultural. En los tiempos presentes los atributos negativos del
"pobre" no son sólo de índole cultural sino que conllevan nuevamente una impugnación moral. Ya no se trata
simplemente de la calificación tradicional de "ignorantes", "incultos", "mal hablados", "lentos"; el discurso
moral se ha aggiornado. Ahora se trata de "valores cambiados, autoridad disuelta, familia ausente y
despreocupada, agresión, robo, violencia"
Persisten logicas devaluación del pobre, pero ademas, desde la percepción de los docentes ya no los habita la
esperanza del progreso sino la resignación y la pérdida de confianza en civilizarlos, disciplinarlos o
emanciparlos.
El problema, a juzgar por los relatos docentes, es su impotencia enunciativa, que es igual a decir la
desubjetivación de la tarea de enseñar. La impotencia no es de los maestros sino de lo que alguna vez fue
instituido; y los maestros son el síntoma de la pérdida de una autoridad simbólica que los excede
4.2.2. Resistencia
No cabe ninguna duda de que los chicos de antes eran diferentes, la diferencia decisiva es que los de antes se
dejaban educar, instituir, moldear por la institución escolar y no así los de ahora. El respeto a la autoridad, la

83
disposición para la obediencia, la sumisión, el deseo de progreso, la capacidad de adquirir normas básicas de
interacción social, constituían la matriz básica de la educabilidad sobre la que la escuela no sólo intervenía
para ejercer su tarea formadora, sino que ella misma fundaba en colaboración solidaria con la familia. Los
chicos de ahora no sólo expresan la ausencia de esa matriz básica, no sólo una fuerte resistencia a dejarse
moldear por esa matriz; también son la expresión de la incomunicación profunda entre la escuela y la familia
en de disolución estatal.
La relación asimétrica con el adulto y la noción del futuro como la conquista de una adultez que se vive como
una etapa deseada, son dos de las condiciones básicas de producción de un joven. Se admitirá que en la
producción de tales condiciones la familia y la escuela han tenido una función decisiva.
Los docentes nos dicen lo que ya no son y ese "no ser" revela en consecuencia un ser que fue instituido, un ser
histórico y no una esencia pervertida en su verdadero ser. Lo que de todos modos permanece implícito en esas
declaraciones -al menos para una interpretación- es qué cosas han dejado de operar para que los niños y
adolescentes ya "no sean"
La posición docente que llamamos de resistencia da cuenta de un modo de abroquelarse en representaciones
que han perdido capacidad de nombrar las alteradas condiciones actuales de enunciación del alumno o del
docente.
Históricamente podíamos nombrar al estudiante como aquel niño o joven que transitaba una institución que lo
proveía de los saberes necesarios para alcanzar la autonomía social durante un período de moratoria social en
el que se postergaba la asunción de las responsabilidades adultas. La resistencia es un obstáculo porque
impide que una subjetividad se altere para poder enunciarse en las nuevas condiciones. La posición que resiste
insiste en seguir suponiendo un alumno que ya no existe: obediente, capaz de postergaciones, en condiciones
de prever y anticipar, disponible para recibir algo del adulto. Por eso cuando nos enfrentamos a una
subjetividad que contradice esas expectativas la pensamos como disvalor o como una expresión de violencia.
La resistencia es en definitiva una resistencia a pensar, a poner en suspenso categorías abstractas o a declarar
que fueron eficaces en otras condiciones sociohistóricas. La resistencia es un obstáculo para que algo de otro
orden pueda advenir. Todo tiempo pasado fue mejor y sólo en ese tiempo están las claves de nuestra
emancipación. Tal es la creencia sobre la que arraiga y se concentra la posición de la resistencia
4.2.3. Invencion
El enemigo de la educación es la idea de lo definitivo, de la determinación, de la impotencia, de la
irreversibilidad.
La educación es el intento de activar un lu- gar, una falla, un pliegue donde la posibilidad de subjetivación sea
todavía ilegible
La invención supone producir singularidad, esto es formas inéditas de operar con lo real que habiliten nuevos
modos de habitar una situación y por ende de constituirnos como sujetos.
La educación como acción igualadora no es, en consecuència, la fabricación de sujetos idénticos entre sí ni la
producción de un sujeto sin fisuras a semejanza de algún ideal. La educación igualadora es la acción que hace
posible la subjetivación, la que emprende la difícil e incontrolable tarea de introducir a un sujeto en otro
universo de significación de modo de ayudarlo a construir su diferencia. La educación consiste en examinar
una situación de imposibilidad contingente y en trabajar con todos los medios para transformarla

84
Es el tiempo que insiste en hacer de la experiencia educativa un acontecimiento. En este modo de concebir la
temporalidad, no habría disciplinamiento, no habría fabricación de un sujeto homogéneo sino transmisión. La
transmisión supone poner a disposición de los sujetos textos y lenguajes que los habiliten para hacer algo más
que la mera repetición. La transmisión ofrece a quien la recibe un espacio de libertad. La pregunta no es cómo
aprendieron los alumnos lo que les enseñé sino qué hacen con lo que les enseñé. Y sólo sabré que enseñé algo
si los sujetos habrán sabido hacer algo con eso.
El horizonte de posibilidad no radica entonces en la producción de un sujeto a imagen y semejanza de algún
ideal, ni simplemente capaz de gestionar por sí mismo las exigencias de un mundo fragmentado, sino en la
creación de condiciones que habiliten un porvenir, un nuevo tiempo.

85

También podría gustarte