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COMPOSICIÓN DE LA POBLACIÓN

La composición de la población por edad y por sexo se puede visualizar con las llamadas
pirámides de edades. Estás pirámides muestran la clasificación de la población por grupos de
edades y se hacen a partir de la información de los censos.

La población se ubica por su edad en grupo de entre 0 y 4 años, de 5 a 9, de 10 a 14 y así


sucesivamente hasta los 80 o más. Una vez que se obtiene la población de edad segmento
en números absolutos, se divide la cantidad entre el número de hombres y de mujeres y se
hace la pirámide.

En la parte inferior aparece el segmento de 0 a 4 años, de un lado las mujeres y del otro los
hombres. En el segundo nivel está la población comprendida entre 5 y 9 años y así
sucesivamente. De esta forma se construye una pirámide de población.

Las pirámides de población por edades muestran información importante sobre las
características de un país, como las siguientes:

• Población total del país

• Población de mujeres y de hombres

• Población de mujeres y de hombres por grupos de edades

• Dinámica de población del país

• Proporción de los segmentos

• Evolución de la población a lo largo de varios años.

Analizando las sucesivas pirámides de población de un país se puede apreciar la tendencia


de crecimiento, así como la edad dominante.

La pirámide progresiva corresponde a un país en vías de desarrollo. Su base es ancha, lo


cual significa que la población más numerosa corresponde a grupos menores de 15 años.

La pirámide estable tiene una base menos ancha que el anterior, lo que significa que la
población se mantiene estable. Hay un predominio de población joven, pero no tan acentuada
como en el primer caso.
La pirámide regresiva tiene una base poco ancha y tiende a crecer en la parte media. Esto
significa que la mayor parte de la población de ese país es madura y que en unos años esa
situación puede resultar problemática.

En los países desarrollados, las personas de 60 años o más constituyen actualmente el 20%
de la población y se prevé que en 2050 constituirán en 32%. En los países desarrollados, la
población anciana ha superado ya a la infantil (personas de 0 a 14 años), y en 2050 habrá
dos personas ancianas por cada niño. En estos países las pirámides de población a principios
del siglo XX eran progresivas, a mediados del mismo siglo ya eran estables y actualmente
son regresivas.

Estás variaciones en la composición de la población tienen muchas consecuencias, de las


cuales mencionaremos algunas.

Cuando un país, generalmente de escaso desarrollo económico, tiene una mayoría de


población joven significa que los adultos deben cubrir las necesidades de los jóvenes que no
pueden ser satisfechas por ellos mismos. Debido a las carencias económicas, la educación
será insuficiente y de baja calidad, por lo que habrá un elevado analfabetismo y bajo nivel de
escolaridad, así como mayor deserción escolar. Además, al crecer, los jóvenes demandarán
empleos y si el país no tiene desarrollo económico, no podrá ofrecérselos, por tanto, tendrán
que emigrar para conseguirlos. Esta es la situación de la mayoría de los países en desarrollo;
un ejemplo de ello lo encontramos en Túnez, Marruecos y Mauritania, cuyos jóvenes emigran
a través del Mediterráneo buscando trabajo en España, Francia e Italia, principalmente.

Por otro lado, en un país con mayoría de población anciana, los adultos de edad media tienen
que producir para los jóvenes y contribuir para los sistemas de pensiones en los ancianos.
Como hay pocos jóvenes, hay escasez de mano de obra, particularmente en actividades que
requieren personas con plenitud física, como las agropecuarias, mineras, pesqueras e
industriales. Para que el desarrollo económico se mantenga tendrán que buscar trabajadores
extranjeros y fomentar su ingreso, aunque sea de manera temporal. Estos trabajadores
suelen enfrentar problemas de discriminación, marginación social y económica. Esta situación
ocurre actualmente en España, que recibe gran cantidad de trabajadores extranjeros de
Túnez, Marruecos, Mauritania, Ecuador y Perú.

En México los censos de población y vivienda levantados por el INEGI proporcionan datos
poblacionales para su posterior procesamiento. Y el Consejo Nacional de Población (Conapo)
es el organismo encargado de llevar a cabo las proyecciones de la población y proponer las
políticas demográficas del país. De acuerdo con el Conapo, la situación demográfica actual
de México es la siguiente:

1. El crecimiento de la población ha disminuido su ritmo.

2. Se mantienen los porcentajes de 51 y 49% entre mujeres y hombres, respectivamente. La


población menor de 14 años sigue siendo el estrato más numeroso.

3. Ha disminuido la cantidad de menores de cinco años y ha aumentado el número de adultos


y ancianos.
Todo lo anterior indica que en México está iniciando un proceso de envejecimiento
poblacional. En el siguiente cuadro se presentan las estimaciones del Conapo para la
población durante las siguientes décadas:
Bibliografía:

- Álvarez, B. (2009). Geografía de México y del mundo. 2a ed. México: Santillana.

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