Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
[Vkook/Kookv]
@YonheeSook
La historia no es siempre lo que parece. Con la batalla de Egipto atrás de ellos, Taehyung y Jungkook
están disfrutando de la emoción de un nuevo amor. A pesar de que el destino no esperó demasiado
tiempo, antes de tirarlos de vuelta para un mundo extraño.
Ellos saben que la sangre de Taehyung es especial, aunque su verdadero propósito aún se les escape.
Y dada la incapacidad de Taehyung para ser
Con la ayuda de Jorge, un niño vampiro con el don de la clarividencia, Taehyung y Jungkook se
enfrentan a un nuevo tipo de guerra. Esta vez, su investigación les lleva a las fronteras de China y
Mongolia, pero no es lo que está en las cajas abajo lo que preocupa a Taehyung. Es el creador detrás
de todo. En las profundidades de China, en el medio de una guerra con el Ejército de Terracota, ellos
van a descubrir exactamente lo que es La Llave, y lo que Taehyung significa para el mundo de los
vampiros.
Capitulo 1
Taehyung se sentó en el sofá con los pies sobre la mesa de café leyendo
el New York Times en un IPAD. El miraba hacia arriba de vez en cuando
en el apartamento, en el estante de los recuerdos de Jungkook,
sonriendo a las antigüedades presentadas allí, luego, para el vampiro
al lado de él.
Salto Quántico.
―Es de 1288. Una vieja me apuñaló con eso. ―La boca de Taehyung se
dejó caer.
―Ella qué?
―Y eso?
―Tú llegas cerca, los tocas, pones tus labios sobre ellos. ―dijo. Sabía
que estaba haciendo pucheros, pero no pudo parar. ―No es justo.
―Jungkook puso un dedo debajo de la barbilla de Taehyung y levantó
su cara para que pudiera ver sus ojos.
―No es lo mismo.
―Yo sé. ―Taehyung dijo con petulancia. Él sabía que estaba siendo
poco razonable. Estiró el cuello, exponiéndolo a Jungkook. Taehyung
sabía que había perforaciones de vampiro que marcaban su piel, y las
amaba. Las llevaba con orgullo.― Me gusta cuando tus labios están en
mi cuello, cuando me muerdes. Cuando bebes de mí. ―Jungkook se
inclinó hacia delante y se pasó la nariz a lo largo de las picaduras.
―Es muy bueno para mí. ―Esta vez Jungkook se rió, un ronroneo
retumbó en su pecho.
Esto abrió todo un mundo de preguntas, pero más que eso, eso
significaba que podían tener relaciones sexuales, mientras Taehyung
era humano. Y sí, tanto como él quería a Jungkook llevarlo, follarlo y
morderlo, su cuerpo humano necesitaba de recuperación. El intenso
placer sexual y la ligera pérdida de sangre tuvieron sus efectos cuando
fue durante horas a la vez. Así que, tanto como no le gustaba eso, sabía
que Jungkook tenía razón.
―Para dónde?
―Conozco el lugar.
[...]
―Conocido por aquí, verdad? ―Jungkook miró por encima del hombro
y le sonrió, dando a Taehyung una visión de sus dientes de vampiro.
―Nadie puede ser herido aquí. Esto traería atención a los propietarios.
Es simplemente una empresa de propiedad de uno de nuestra especie.
―Jungkook dio un paso para atrás, sus ojos negros oscuros, el pelo por
lo general oxidado, ahora teñido de color azul de la luz del neón de
arriba.― Bebida? ―Taehyung asintió y Jungkook abrió el camino hacia
la barra. Jungkook miró por un largo tiempo a un tipo que estaba
apoyado en la barra por sí mismo, antes de asentir con la cabeza y
llamarlo por su nombre.
―Por lo tanto, La Llave sigue siendo humana. ―Dijo.― Tengo que decir
Jungkook, estoy sorprendido.
―El no hizo nada con eso... ― comenzó Taehyung. Pero Jungkook tomó
la mano de Taehyung y fue llevándolo por lo que Taehyung notó que
fue el camino de regreso a la escalera de incendios.
―Qué sucedió?
―Correcto.
―Qué estaba mal con él? ―Preguntó Taehyung. Sus ojos se ajustaron a
la oscuridad ahora, justo a tiempo para ellos para dejar de caminar.
―Sí.
―Es un vampiro?
―Sí.
―Él qué?
―Sus visiones son exactas, como ninguna otra. ―dijo Seokjin.― Sólo se
necesita descifrar lo que significan. ―Jungkook asintió.
―Y las conversaciones dobles son un poco irritantes.
―Tú traes a un ser humano. ―Una voz respondió, Taehyung luchó para
escucharla.― Yo puedo oír los latidos del corazón desde aquí.
Entonces Jorge sonrió, y Taehyung tuvo que parar y dar un paso atrás.
La boca de Jorge estaba llena de dientes de leche, pequeños cuadrados
y dientes de vampiro. Se rió y dijo algo que Taehyung supuso que es un
dialecto local de español. Taehyung sabía un poco de español, y podía
entender las palabras humano y mascota, y él se rió. Enseguida, Jorge
le preguntó a Sehun, en inglés:
―El tiene razón. Jorge tiene razón. El sol venía de mi sangre, y si, él los
mató a todos. Estos vampiros resucitados no sabían lo que estaban
haciendo. La mujer que les hizo fue muy cruel. Ella se negó a darles de
comer y enseñarles. Ellos no sabían que lo que estaban haciendo
estaba mal.
―No fue la reina que hizo mal. ―Se quedó mirando por un largo
tiempo.― Jorge no es feliz. No, no es feliz. ―Seokjin, obviamente,
tratando de desviar la conversación hacia adelante, miró al niño y dijo:
―Dos? ―Taehyung no sabía lo que significaba, pero fue junto con él.
Jorge asintió.
―Ojos y mente. Ojos y mente, aquí y allá, Jorge ve. ― Luego frunció la
frente.― Por supuesto que él lo entiende. Está bien, podía ver con sus
ojos y su mente. ―Taehyung asintió.
―Tú no tienes miedo de Jorge. ―dijo Jorge.― Él debe tener miedo. Los
seres humanos están siempre con miedo. Este no. ―Taehyung sonrió y
asintió con la cabeza apuntando a Jungkook.
―Jorge no puede jugar. No, no tiene permiso para jugar. ―Oh, mierda.
OK entonces. Afortunadamente Sehun aclaró.
―Mano Roja, Luna azul, Río de Plata, la tierra volverá a la vida. Sangre
de una piedra, piedra de una sangre. Él ha resucitado, tal como ella se
levantó, la respuesta está en las piedras. Sangre de una piedra, piedra
de una sangre. ―Jungkook habló a continuación.
―Manos rojas en las piedras. Siempre está en las rocas. ―dijo Jorge.
Taehyung, Jungkook, Seokjin, se volvieron hacia el muchacho. Él
sonrió con su hermosa y aterradora sonrisa.― La Llave pide preguntas
diferentes, él hace. Sí, lo hace. Manos rojas en las piedras. Para siempre
está en las rocas. ―Taehyung no tenía idea de lo que decía, pero le dio
al niño una sonrisa y un gesto de cabeza. Jungkook tiró a Taehyung a su
lado, y cuatro pasos en el claro, Jungkook - sin soltar la mano de
Taehyung, tocó el brazo de Seokjin, y ellos se fueron.
[...]
Estaban de vuelta en el callejón de Londres, detrás de la discoteca de
Seokjin. Taehyung se estremeció con los cambios bruscos de
Temperatura, calor húmedo al frío, y Jungkook lo tiró cerca, frotando
su espalda para entrar en calor. Taehyung nunca había sido tan feliz de
estar en otro lugar. Miró al húmedo, callejón oscuro.
―Bueno, a él le gustaste.
―Sólo pensé que era mejor hacerte amigo con él. ―dijo Taehyung.
―Estoy seguro de que más sale a la luz, a medida que más clanes se
muevan, o se propagan rumores, podemos ponerlos juntos.
―Jungkook asintió.
―Estoy de acuerdo.
―Ustedes sabían que algo estaba pasando ? ―Preguntó Taehyung.― En
China, o Rusia o algún lugar de mierda.
―Sí. ―Seokjin dijo con una sonrisa.― Se me olvidó lo que era estar
cerca de las parejas recién acopladas. ―Él sacudió todo su cuerpo.―
Ahora tengo que ir a buscar a alguien para disfrutar de las feromonas,
gracias. ―Taehyung rió.
―De nada. ―El deslizó ambos brazos alrededor de Jungkook y raspó los
dientes contra la mandíbula de él, y la siguiente cosa que supo, fue que
estaba acostado sobre su espalda, en el medio de la cama de Jungkook.
Su camisa había desaparecido, sus piernas se extendieron, y Jungkook
arrodillándose entre ellas. Sonrió alrededor de sus colmillos, los ojos
negros picantes. Taehyung gimió y levantó las caderas. Cerró los ojos y
expuso su cuello y esperó que el placer se lo llevase.
Capitulo 3
Taehyung golpeó parada en la cinta, ralentizando el paso.
―Sí. Estarán de vuelta en una hora. Así que, cuando estés listo,
podemos ir. ―Taehyung se limpió la cara y bajo de la cinta.
―Voy a tomar una ducha. Ya sabes, va siendo dos veces más rápido, si
me ayudas. ―Jungkook se rió.
―Está bien, está bien.― Dijo con una sonrisa cálida. Taehyung se
apresuró a abrazar a Yoongi.
―Y mira a los dos. ―dijo Yoongi.― Supongo que las últimas semanas
han sido bien gastadas. Jungkook se sonrojó y Taehyung rió.
―Tú siempre juegas al fútbol con la gente que te asusta? ―Los ojos de
Jimin se agrandaron.
―Taehyung sugirió que el niño comiera sólo verduras para reducir los
conservantes en su dieta. ―Yoongi se rió otra vez, toda su cara
sonriente.
― Oh Taehyung, te he echado de menos. ―Jimin se puso serio.
―Creo que el deber de Taehyung como Llave, sea cual sea, comenzó de
nuevo. ―Yoongi hizo un gesto a Taehyung.
―Yo sé.
―Pues bien, teniendo en cuenta que La Llave, es decir yo, está en otra
crisis otra vez, yo digo que no perdamos un minuto.
Cuando Jugué estaba listo para saltar, con los cuatro de ellos en alguna
parte en el centro de Tokio, Taehyung puso su mano sobre el brazo de
Yoongi, una mirada de incredulidad cruzó la cara de Jungkook. Dio un
salto antes de que Taehyung pudiera preguntarle lo que estaba mal. La
siguiente cosa que Taehyung sabía, fue que estaba en un callejón
oscuro aislado, pero los sonidos de una bulliciosa ciudad estaban por
todas partes. Miró hacia arriba y vio el callejón corto, con ríos de gente
que pasaba, y cuando llegaron al cruce donde el callejón encontró la
calle, Taehyung se quedó sin habla.
Por supuesto, había visto fotos y películas de Tokio, pero nada, nada lo
preparó para lo que era la vida real. Si Times Square estaba iluminado
como una linterna, entonces la estación de Shibuya era un maldito
árbol de Navidad. Tiendas, restaurantes, gente, tanta gente y luces de
neón iluminando desde la publicidad hacia que parezca de día.
―Um, sí. Pero estoy seguro de que no me gusta la etiqueta del precio.
―Miró a la marca exclusiva por encima de la cabeza. Jungkook se burló.
―Por favor, dime que está en yenes. ―Jungkook se rió, pero cogió el
reloj y lo puso en la muñeca de Taehyung. Taehyung sabía que
Jungkook tenía dinero, bienes raíces y todo, y Taehyung había tratado
de no dejar de molestarse con el hecho cuando llegó al apartamento de
Jungkook con una cuenta bancaria congelada y nada más que ropa y un
viejo ordenador portátil. Pero cuando vio el orgullo, la satisfacción y la
alegría en la cara de Jungkook cuando puso el reloj en su muñeca, no
fue capaz de discutir.
Le quitó el aliento.
[...]
―Estaba de pie en la barra, y cuando miraba para mí, juro que sentí
calor... ―Extendió la mano.― ... en mis dedos. ―Jimin y Yoongi ambos
parpadearon, sorprendidos. Jungkook siguió hablando.
―Sí. ― El susurró.
―Yo no entiendo.
―Hemos tenido mucho sexo. ―Taehyung terminó por él, sin vergüenza
en absoluto. ― Y él me muerde todo el tiempo. Me gusta eso. De hecho,
me encanta eso. Y él ha tenido una gran cantidad de pequeñas
cantidades. No tuvo hambre en absoluto. ―Jimin y Yoongi miraron
entre Taehyung y Jungkook por un total de diez segundos.
―No sé, Taehyung. En todos mis años, nunca he oído hablar de tal cosa.
Yo ni sé si hubo alguna vez un caso de que un vampiro se alimentase del
mismo humano más de una vez.
―Es la única cosa que yo puedo ver como una posible razón. ―dijo.― Tu
sangre es diferente, Taehyung. Para qué propósito, nosotros no
sabemos. ―Taehyung estaba súbitamente sin habla. Se esforzó por
encontrar las palabras correctas.
―No quiero hacerle daño. ―La cara de Jimin se suavizó, al igual que sus
ojos. El puso su mano en su brazo.
―Eso hace que sea peor. ―Taehyung rompió. El no había sentido este
tipo de dolor en meses, no desde sus primeros tiempos de descanso. Él
dejó escapar un suspiro.― Tal vez sea porque pasamos tanto tiempo
juntos últimamente. ―Jimin frunció el ceño.
―Cómo te sientes?
―Al principio, sí... ―dijo Jimin.― ... Pero el anhelo que debe haber
disminuido un poco, se puso más fuerte.
―Te dije que estaba bien. ―Taehyung dijo, un poco más suave esta vez,
susurrando solo para Jungkook.
―Jungkook. ―Jimin dijo en voz baja. ―Cómo te sientes? Has visto algo
del don de Yoongi cuando lo tocaste para saltar ahora? ―Jungkook
negó con la cabeza.
―Dime lo que ves. ―Jungkook tomó la mano de Yoongi y cerró los ojos
durante unos segundos.
―Veo una línea de tiempo, pero no es tan clara. No puedo definir nada,
pero está ahí.
―No tenemos nada para comparar su situación. ―Jimin dijo, sus ojos se
llenaron de preocupación.― Su conexión es ciertamente fuerte.
―Taehyung levantó la mano.
―No creo que él quiera más detalles. ―Jimin luchó con una sonrisa,
pero, como siempre, era la voz de la razón.
―Nosotros no tenemos ninguna manera de saber los efectos sobre ti,
Jungkook, y tampoco los efectos que puede tener en Taehyung. Creo
que tenemos que investigar lo que podamos, y tal vez deberías hablar
con Eleanor. En ella se puede confiar con eso, ¿verdad?
―Estoy muy feliz de estar de nuevo aquí. ―dijo.― Sentí falta de todas
las cosas locas que dices. ―Taehyung rió y se puso en el sofá.
―Estoy muy bien. ―Dijo con una sonrisa.― Me siento muy bien, la
verdad, un poco cansado. ―Jungkook le tomó la mano.
―No, yo creo que tengo que usar mi cerebro. Yo no hice nada, además
de usar mi cuerpo durante las últimas ocho semanas... ―Jungkook se
ruborizó, haciendo reír a Yoongi.
―Quiero decir con todo el material físico que he estado haciendo, como
el ejercicio y otras cosas. ―Taehyung miró directamente a Yoongi.― No
he utilizado mi cerebro para otra cosa que leer nada más que
periódicos. Volviendo mi cerebro en gelatina. Volviendo al trabajo de
investigar será bueno para mí.
―Creo que tiene sentido investigar lo que nos dijo Jorge. ―dijo
Taehyung.― Y Jimin y Yoongi pueden buscar historias de vampiros y
ver si alguna vez hubo un caso de esa transferencia o una relación
vampiro - humano antes.
―Tal como?
―Es muy común que los vampiros telépatas muestren signos de locura.
― Explicó Jimin.― Después de tantas voces en la cabeza durante tanto
tiempo, tienen que buscar la soledad o se volverán locos. ―Taehyung
no lo podía creer.
―Yo pensé que los vampiros no podrían cambiar? Para ser afectados
por una enfermedad mental, indica la capacidad de cambiar o ser
afectados. ―Jungkook asintió lentamente.
―No puede haber nada malo en ti, Jungkook. ―Se tragó el nudo en la
garganta y habló a la habitación vacía.― Simplemente no puede ser.
―En serio? Qué dije? ―Taehyung dijo con una sonrisa.― Espero que
haya sido algo sucio. ―Yoongi se rió.
―Dijiste que no puede haber nada de malo con él. Eso es lo que él
repitió a nosotros cuando estábamos allí. ―La sonrisa de Taehyung
murió, y él miró a Jungkook.
―Tú dijiste: “No puede haber nada malo en ti, Jungkook ”. ―Entonces,
al unísono completaron, los dos dijeron:
―Cuando ellos están en el otro lado del mundo? ―pregunto Yoongi, con
las cejas levantadas.― Uh, no. ―Taehyung respiró hondo y miró
directamente a los ojos de Jungkook.
―Para qué?
[...]
―El médico estará aquí a las seis de la tarde. ―Kole Kim dijo por
teléfono.
―Siento que tengas que pasar por esto. ―Murmuró. Taehyung puso las
manos en la cara de Jungkook y la levantó para que pudiera mirarlo.
―El tipo del que no tienes que preocuparte. ―Taehyung miró el reloj de
nuevo, luego, a la salida del sol saliendo. La pared de cristal
especialmente filtrada protegió a los vampiros en el interior, sin
impedir la vista espectacular de la ciudad.― Es casi la hora de ir a la
cama. ―dijo Taehyung.― Qué tal comenzar nuestra investigación antes
de llegar el día. ―Jungkook asintió.
Su sangre proviene del sol. Sangre de una piedra. Piedra de una sangre.
Tantas preguntas. Sangre de una piedra. Mano roja, Luna azul, Río de
Plata, la tierra volverá a la vida.
Jungkook dijo.
―Qué necesita hacer La Llave?
Manos rojas en las piedras. Para siempre está en las rocas. La Llave
hace diferentes preguntas, que él hace. Sí, lo hace. Manos rojas en las
piedras. Para siempre está en las rocas.
―Él dijo la primera parte antes. Dijo que mi sangre viene del sol,
cuando estaba hablando sobre vampiros momificados en Egipto. Vio
que mi sangre resucitó a Ra y el disco solar, matando a todas esas
pobres almas. Así los llamó él. Dijo que ellos no sabían lo que estaban
haciendo, y tenía razón. La Reina Hyuna nunca les enseñó, nunca los
alimentó. ―Jungkook asintió.
―Él dijo que no era culpa de ellos. Ellos no sabían lo que hacían.
―Hay algo en los ojos negros que no te gusta? ―Taehyung se rió de él.
―Tus iris son de color negro, sí, pero no la totalidad de tus globos
oculares. Hay una diferencia. Los tuyos son un ardiente negro. Los de
él, fueron muertos, como un tiburón.
―Y tan molesto como él es, creo que tenemos que volver a verlo.
―Creo que Jimin habló con Eleanor y le pidió una visita. ―Dijo
Jungkook.― Vamos a hablar con ella primero y determinar si ha visto
algo de esta nueva amenaza, sin los puzzles. Ella puede ser capaz de
arrojar alguna luz sobre las palabras de Jorge. ―Eleanor era una
vidente. Un vampiro con el don de la videncia. No siempre era exacta, y
sus puntos de vista podrían cambiar a su antojo, dependiendo de las
decisiones y otros resultados, mientras que los puntos de vista de
Jorge, aunque crípticos, nunca fueron equivocados.
―Tal vez él pueda elaborar sobre todas las referencias de la roca. ―dijo
Taehyung.― Tú sabes lo que quería decir con eso?
―Posiblemente.
―Y la mano roja? Río plata, luna azul. Creemos que sabemos lo que
significa luna azul, pero ¿qué infierno el resto? ―Taehyung sacudió la
cabeza.― Estoy muy cansado para averiguarlo. ―Jungkook le tomó la
mano.
―Nada, yo...
―Nosotros estamos.
―Así que dime tus teorías. ―dijo Taehyung.― Dime lo que crees que
Jorge estaba refiriéndose sobre las rocas.
―Yo no lo creo. La única referencia a vampiro para una mano roja que
puedo recordar, pertenecía a un vampiro que vivió hace 800 años atrás.
También vivía en la zona experimentando ahora las desapariciones de
los seres humanos.
―Genghis Khan.
Capitulo 5
―Genghis Khan? ―Taehyung repitió.― Al igual que Gengis Khan, que
gobernó Asia, China y Europa? Ese Genghis Khan? ―Jungkook asintió.
―El reclamó territorios del Lejano Oriente, como del otro lado de Corea
hasta Europa. Tenía multitud de facciones, o generales, como él los
llamaba, que afirmaron territorios en su nombre durante más de cien
años. Fue una carnicería sin precedentes.
―Um, sí. Primera: Cómo diablos Genghis Khan era un vampiro y nadie
sabía sobre eso? Y quién más fue un vampiro que yo debo saber, a lo
largo de la mierda de siempre? ―Yoongi se rió.
―Sí.
―Al igual que los mosqueteros, ¿eh? Uno para todos y todos para uno.
―Jungkook se apartó ligeramente para que pudiera ver la cara de
Taehyung.
―No, y los rumores no son ciertos sobre Robin Hood. ―Jimin se unió.
―Déjame adivinar, Santa Claus era un vampiro que podía saltar. Eso
explica la posibilidad de visitar a todos los niños del mundo en una sola
noche.
―Oh, Jesús. ―Jungkook frunció los labios en una sonrisa. Él negó con
la cabeza.
―Los niños?
―No la policía, no. ―Jimin dijo con una sonrisa divertida.― Seokjin
tuvo el placer de poner fin a ese pequeño espectáculo. ―Taehyung
sacudió la cabeza y sopló una respiración.
―Sí, está bien, eso es suficiente. Creo que no necesito saber más. ―Él
suspiró y miró a través de la vista de la ciudad. Ahora era bien y
verdaderamente de día.― Tengo que ir a la cama. ―Taehyung sólo
sintió los brazos de Jungkook alrededor de él antes de que estuvieran
saltando. Él cayó de espalda, en la cama de Jungkook, con Jungkook
encima de él.
[...]
Aunque sólo fueron unas pocas horas de sueño, y sólo unas pocas horas
desde su última separación, Taehyung parecía sentir la falta de
Jungkook. Se movió en su sueño de nuevo, y gimió. Era un sonido que
hizo a Jungkook flexionar las caderas. Sin abrir los ojos, Taehyung
sonrió y rodó sobre su estómago. Abrió sus muslos y levantó su culo,
gimiendo de nuevo.
Taehyung todavía estaba resbaladizo de su última vez, lleno de
lubricante y disfrute. Taehyung nunca quiso estar limpio. Amaba que
Jungkook podría liberarse dentro de él, diciéndole una y otra vez lo
bien que lo hacía sentir. Y Jungkook quería. Él adoraba que Taehyung
tendría su aroma en él, que lo hacía como suyo, todo el tiempo.
―No le mordí.
―Hemos oído. ―Yoongi dijo, y Jimin le siseó, aunque luchó contra una
sonrisa. ― Todo.
―Sí, bueno. ―Se corrigió con una sonrisa tímida.― Estos, también. Sólo
que, solo ahora me doy cuenta de lo incómodo que debes haberte
sentido.
―Es bueno estar de vuelta aquí con ustedes también. ―dijo Jimin.― Y
verte tan feliz, Jungkook. Nunca me di cuenta que eras tan infeliz antes
de conocer a Taehyung.
―Y ahora?
―Y ahora sé por qué estas con Yoongi todos estos siglos. ―Yoongi se rió
y tiró todo lo que estaba sosteniendo, sobre la cabeza de Jungkook. Lo
cogió con facilidad y sin dejar de sonreír, inspeccionándolo. Era una
pequeña bola de metal de filigrana que Jungkook había recogido de
Italia hace mucho tiempo. Taehyung había estado mirándola el otro día
y la había dejado en la mesa cuando sus conversaciones acerca de los
recuerdos que había recogido, terminaron con ellos desnudos, como de
costumbre. Jungkook la puso de nuevo en el estante de donde
Taehyung la había tomado, y se volvió hacia sus amigos.
―Qué?
―Como yo. ―dijo Yoongi.― Los íncubos son engañosos, hasta crueles, y
tú no eres nada de eso. Lo que tú y Taehyung tienen, es real. Ustedes
comparten la cama, no te alimentas de él por causa de la menor
posibilidad de efectos a largo plazo sobre él mismo, y simplemente no
puedes causarle dolor.
―Mi querido amigo, vamos a ir a través de eso. Aunque, voy a decir, que
tú eres mi preocupación inmediata. Genghis Khan, si eso es incluso a lo
que nos enfrentamos, puede esperar. Esta luna azul o la siguiente,
Jungkook, no importa. Tu bienestar es mi prioridad.
[...]
A Jungkook le gustaba el padre de Taehyung. Kim Kole era un buen
hombre, así como su hijo, aunque con algunos veintitantos años más
viejo. Durante los primeros 30 minutos de su visita, Taehyung se sentó
con Kole en el sofá, hablando de lo que había pasado desde su última
conversación, hace tan sólo unos días.
―Señor Kim... ―Jungkook los interrumpió. ―... Usted sabe algo acerca
de su sangre? Usted llama eso de especial, pero sabe en qué sentido?
―Creo que debe ser algo importante para que estés preocupado, pero
no, lo siento. ―Dijo Kole.― Solo que estaba destinado a grandes cosas.
Estaba en su linaje. Eso es todo lo que sé. ―Jungkook asintió.
―Es importante, sí. Incluso así, gracias. ―Se detuvo por un largo
segundo.― Este médico sabe lo importante que es Taehyung?
―Estás bien?
―Para cubrir todos los gastos del laboratorio. ―El médico puso una
bolsa negra en la mesa del comedor y suspiró.
Taehyung.
La luz del sol estaba casi rompiéndose a través del Serengeti, con
énfasis en los llanos de Tanzania, en una espectacular mezcla de
belleza y salvaje. Dejó los dos cuerpos caer al suelo y dio un paso
adelante, olfateando el aire a su alrededor. Sus viejos amigos estaban
aquí, si podría llamarlos así. El nunca trajo a alguien aquí, nunca había
compartido este secreto con nadie. Sabía que iba a traer a Taehyung
aquí un día, aunque no mientras fuera humano. No quería correr el
riesgo. Pero cuando Taehyung se convirtiera en un vampiro, ellos
vendrían aquí y podrían maravillarse juntos.
Lo que hizo que los gatos se sientan atraídos por los vampiros,
Jungkook sólo podía adivinar. Pero el gran león tronó a verlo,
empujando su cadera antes de olfatear el cuerpo siguiente. Jungkook
pasó la mano a lo largo del pelo, sintiendo su piel gruesa, sintiendo su
fuerza mientras caminaba, acolchando los enormes pies en la suciedad.
Cuando la luz de un nuevo día amenazaba con romper en el horizonte,
el resto del orgullo llegó al segundo cuerpo, y Jungkook sonrió con
satisfacción cuando saltó de nuevo a la casa de Kole.
―Te oí de nuevo.
―Una vez más, le pido disculpas. Gracias por ser tan compresivo.
[...]
―Yo no había experimentado nada como esto. ―dijo.― Fue unos celos y
una ira como yo nunca he sentido antes. ―Jimin salió fuera de la
habitación sólo para regresar con uno de los libros que habían tomado
a partir de Praga. El tuvo que abrir una página en particular.
―Sí.
―Nada. ―dijo Jimin.― Ella vivió durante más de cien años. ―Jungkook
estaba decepcionado. Él quería respuestas. De alguna manera sería
más fácil aprender de que esta pobre mujer vampiro había
enloquecido.
―Una razón más para ser posesivo. ―Yoongi dijo simplemente.― Los
vampiros son territoriales de un ser humano del que están
alimentándose, y mucho más de uno que es su predestinado. ―A
Jungkook no le importaba parafrasear a Yoongi, pero entendió la
sensación.
―No hay normal en este escenario. ―Yoongi dijo con una sonrisa.―
Exactamente lo que es comprensible o no es sorprendente, por lo
menos. Jungkook, la sangre de Taehyung es diferente. Es especial.
Nosotros sabemos eso. No hubo ninguna otra sangre como la de él,
nosotros lo sabemos, o si lo hubo, el hombre no era La Llave para el
mundo de los Vampiros. El hecho es de que él, es ambos al mismo
tiempo, es insuperable, o tal vez que su sangre especial es la razón de
qué él es La Llave. Jungkook, no tenemos forma de saber. Pero creo
que Jimin está en lo correcto. Siempre y cuando dejes de beber, todo
irá bien.
―Es hora de empezar a trabajar. ―Dijo.― Mucho que hacer, mucho por
hacer. ―Él puso la pizarra en la mesa y escribió algunos puntos de lo
que sabía hasta el momento: las desapariciones en China, y Mongolia y
reubicaciones de clanes. Luego escribió las palabras crípticas de Jorge,
río de plata, luna azul, la mano roja, sangre y piedra, y cuando se
volvió, vio que los tres vampiros estaban observándolo. Dio una
palmada.― Vamos, ojos vivos. Tenemos trabajo que hacer. ―Jimin
sonrió y cogió el libro antes de levantarse. Yoongi se rió y dijo:
―Yo estaba pensando que lo haría, sí. ―Dijo Jungkook.― Me gusta ver
como haces la cosa de detective. Es fascinante. ―Taehyung resopló.
―Fascinante!
―No ―dijo Yoongi.― Fue construido por los seres humanos en un vano
intento de mantener a los vampiros de cruzar sus tierras.
―Terracota.
―No me digas. ―Taehyung puso los ojos. ― Yo diría que llevó miles de
albañiles. ―Jimin le sonrió.
―No, me refiero a un albañil, como un vampiro con un don de mudar
las cosas en piedra. ―La boca de Taehyung se abrió y parpadeó. Y
volvió a parpadear.
―Un qué?
―Tal vez el albañil podría usar tierra o arcilla en lugar de piedra, como
cuando yo uso el agua para convertirla en hielo. ―Jimin explicó.―
Ningún don es una ciencia exacta.
― Sí.
―Al igual que aquel dibujo animado con el chico con la flecha azul en la
cabeza, que es un Maestro del Aire. ―Los tres vampiros lo miraron.
Nadie habló.― No importa.1
―Así como cuando piensas que has oído a alguien que llama tu nombre,
pero cuando miras no hay nadie allí? ―preguntó Taehyung.― Eso es un
vampiro?4
―Sí.
―Hay algunos que pueden controlar el olor que sientes. ―dijo Yoongi.―
Un olor del perfume o el olor de la comida.
―Ejecutado?
―Por qué?
―Los griegos creían que el dios Morfeo influenciaba los sueños. ―Dijo
Jimin.― Sin embargo, hay algunos que pueden influir en la mente
dormida.
―Sí, lo dijo. ―Miró a Jimin y Yoongi.― Influir en el nombre que iba a ser
dado. Vante era un nombre elegido.
―Tu padre dijo que las generaciones antes de él sabían que su linaje era
especial. ―El alcanzó.
―Taehyung, me dejas?
―Permitir qué?
―Si sólo querías tomar mi mano, sólo había que preguntar. ―Jungkook
gruñó a cualquiera en la habitación. Taehyung le tendió la otra mano,
invitando a Jungkook para llevarla.― Puedes tener esta. ―Jungkook
gruñó, pero aceptó la oferta, sentándose en el otro lado de Taehyung.
―No sé. Puedes tomar su mano, por favor? ―Él le preguntó.― Voy a ver
si esto funciona de la misma manera.
―Qué ves?
―Sentiste eso?
―Jimin envió una ráfaga helada a través de ti para mí. Debió haberte
afectado, deberías haber sentido eso, por lo menos. ―Taehyung
sacudió la cabeza y habló en un susurro:
―Qué significa esto Jungkook, qué me está pasando? ―Jungkook
deslizó su mano sobre el cuello de Taehyung y lo atrajo hacia él.
―Yo no sé.
[...]
Eleanor era la vidente que había ayudado con su batalla contra hyuna
en Egipto. Ella era una mujer mayor, por lo menos de sesenta años en
los seres humanos, una edad que no es típica en vampiros, pero
también era ciega. Así que, sus ojos eran lechosos, nublados, pero veía
con su mente. Vio cosas que podrían cambiar y por lo tanto nunca
podrían suceder, y a veces, sólo vio partes, por lo que su don no era
exacto. Pero fue útil, sin embargo.
― Hmm, interesante.
―Veo que esto tiene efectos negativos. ― Ella dijo. Jungkook asintió,
pero se corrigió.― No sobre ti, Jungkook, sino en Taehyung.
―Al igual como fue con Hyuna. Ella te necesitaba para traer de vuelta a
Osiris, pero fue tu sangre que compró a Ra de vuelta para matarla.
―Eleanor dijo.― Khan te necesita para ganar todo lo que
quiere que él esté haciendo con esta guerra, Taehyung. Pero también
es tu sangre cuando, utilizada contra él, lo verá deshecho. ―Taehyung
se dirigió mecánicamente al sofá delante de Eleanor y se echó sobre él.
Se frotaba las sienes. Su voz sonaba cansada y resignada, incluso a sus
propios oídos.
―Cuándo?
―No puedo ver. Algo está nublando, ocultando lo que está destinado a
ser. Tu sangre es muy potente, sin embargo. Es posible que un ser
humano no pueda contenerla.
―Por qué dijiste eso? ―preguntó.― Vimos a Jorge y él dijo algo similar.
―Si hablaste con Jorge, yo no veo lo que puedo decirte. ― Eleanor dijo
con incredulidad.― Su don es mucho más fuerte de que el mío.
―Porque habla con acertijos, por eso. ― dijo Taehyung. Su tono era
corto y recortado, reflejando su paciencia.― Nosotros pensamos que
podrías ser capaz de arrojar algo de luz sobre lo qué demonios estaba
pasando. En primer lugar, tenemos noticias de un nuevo enemigo, el
cual descubrimos que es Genghis Khan - sin la ayuda de Jorge,
entonces, Jungkook comienza con la transferencia de dones de otros
vampiros, porque mi sangre es jodida. Y necesitamos respuestas, no
crípticas pistas. ― Él tomó una respiración profunda. ― Así que por
favor, cualquier cosa que puedas decirnos. Es algo.
―No, no hay manera de saber hasta que eso ocurra. Aunque será de
gran alcance. Cómo puede no ser? Una Llave humana que se convertirá
en un vampiro? Yo me lo imagino muy fuerte. ―Jungkook, Yoongi, y
Jimin miraron a Taehyung, y cada uno de ellos sonrieron un poco
orgullosos.
―Jorge dijo que era para siempre en las rocas. Qué te parece que quiso
decir?
―Dime todo lo que dijo. ― Dijo Eleanor. Jungkook repitió palabra por
palabra lo que Jorge le había dicho.
Su sangre proviene del sol. Sangre de una piedra. Piedra de una sangre.
Tantas preguntas. Sangre de una piedra. Mano Roja, Luna Azul, Río de
Plata, la tierra volverá a la vida. Sangre de una piedra, piedra de una
sangre. Él ha resucitado, como ella se levantó, la respuesta está en las
rocas. Sangre de una piedra, piedra de una sangre. Luna Azul, Río de
Plata, sangre de una piedra. No vas a encontrarlo con tus ojos. Sí, por
medio de La Llave. A través de La Llave. Manos rojas en las piedras.
Para siempre está en las rocas. La Llave hará diferentes preguntas, que
él hace. Sí, lo hace. Manos rojas en las piedras. Para siempre está en las
rocas.
―Puede ser. ―dijo Jimin.― Pero yo no creo que sea probable. Nada de
lo que dice Jorge es simple.
―Está bien, para. ―Los cuatro vampiros miraron para él.― Caballos?
Cómo en la película, My Little Pony, trote-trote, malditos caballos?
―Jungkook le estrechó la mano.
―Tal vez aquellos que hicieron esto, no lo sabían, o tal vez esperaron
en vano. Los mongoles reverenciaban sus caballos. Todavía lo hacen.
Ellos son un país forjado en caballos. No es agradable, pero no me
sorprende ver caballos en las tumbas al lado de sus soldados.
―Taehyung se estremeció de pies a cabeza, y Jungkook soltó su mano,
para que pudiera poner su brazo alrededor de él.
―Él tiene que hacer esto, para que pueda ser transformado?
―preguntó Jimin. Eleanor suspiró profundamente. Sus ojos se
abrieron.
―Parece que sí. Yo no puedo ver por qué, sólo que eso es todo.
―Algo debe sucederle cuando cae. ―dijo Yoongi.― Algo debe pasar con
su sangre, para cambiar lo que sea que lo hace especial. ―Taehyung
cayó contra Jungkook. Los pensamientos de esto pesaban sobre él.
―Sé que lo odias. Pero Jungkook, no importa por lo que tenga que
pasar. Mientras te tenga siempre, entonces todo valdrá la pena.
―Parece que con cada paso de respuestas, sólo nos da más preguntas.
―Jungkook dijo en voz baja.― Jorge habló de preguntas. Parece que él
también podía ver que todo lo que enfrentamos es sin respuesta.
―Yoongi se sentó junto a Eleanor.
―No hay dos guerreros más hábiles. ―dijo Jungkook. Llevó las manos a
la cara de Taehyung, buscando ver si estaba herido, e incluso en la
oscuridad, Taehyung podía ver lo grande y negros que tenía los ojos.
―Está bien.
[...]
Taehyung se encontró en su habitación. La luz estaba encendida y
brillante en comparación con la oscuridad donde él sólo había estado,
pero al menos estaba caliente. Todavía estaba temblando,
castañeando los dientes y todo el cuerpo le fue cubierto de piel de
gallina.
― Tenemos que salir. ―Dijo sin levantar la vista. Jungkook dio una
inclinación de cabeza dura.
―Estoy de acuerdo.
―Sí, sí. Estoy demasiado viejo para esta mierda en la mitad de la noche.
―Jungkook no perdió el tiempo.
[...]
La casa donde ellos llegaron esta vez fue ligera, pero fría. No es que los
vampiros parecían darse cuenta, pero Taehyung estaba agradecido por
la chaqueta que Jungkook le había dicho de coger. Hoseok tomó las
bolsas y las alineó contra la pared, y Eleanor definió sobre cómo iniciar
el fuego.
―Alec. ―Jungkook dijo con una risa sin humor.― No pienses ni por un
segundo que te permitiría entrar en una trampa!1
―Los boletos son un ardid, sí. Puedo ver que no termina bien.
―Mantente seguro, ¿eh? ―Fue todo lo que Kole dijo antes de que
Taehyung, Jungkook, Yoongi, y Jimin desaparecieran. En lo que fue su
tercer país en menos de una hora, Taehyung se encontró de pie en el
interior del Museo Británico. Sólo estaba iluminado por una
iluminación de seguridad, la habitación era enorme, con techos altos
de vidrio. Todo lo demás era de mármol y azulejos, incluyendo las
escaleras que se envolvían alrededor de ambos lados de la habitación.
Ellos aterrizaron en el Grande Hall, y Seokjin, junto con dos vampiros
que Taehyung no había conocido antes, lo recibieron con
sonrisas. Jungkook los saludó con un brusco.
―Veo que alguien tiene sus pantalones celosos hoy. ―El gruñido de
Jungkook se hizo más fuerte y más grave, y Seokjin dejó de sonreír. Se
volvió a Jungkook y levantó una ceja en cuestión. Yoongi dio un paso
rápidamente entre ellos y retiró la mano de Seokjin de Taehyung.
―Él no quiso decir nada con eso. Parece que hay consecuencias
indebidas de beber la sangre de Taehyung. ―Taehyung rápidamente
dio la vuelta a Yoongi, para que él pudiese tocar a Jungkook. Colocó un
brazo alrededor de él, medio de lado a Seokjin. Jimin añadió.
―De esta manera. ―Taehyung dijo en voz baja. Era casi un sueño, como
si fuera casi flotante, pero los llevó a la sala. Había pilares cuadrados
que se alineaban en la sala larga y estrecha, que sostenían el techo
grande y adornado. Al lado de las columnas había armarios de vitrinas
de antigüedades, que normalmente a Taehyung le hubiera gustado
inspeccionar y preguntar, pero en aquel momento, no le importaba
nada de eso. Debido a que en el centro de la habitación, detrás de las
paredes de cristal, estaban seis guerreros de terracota. Enfrentándolo,
estoicos y quietos, como si estuvieran esperando por él.
―Lo siento por mi mal humor. Parece que los efectos que Taehyung
tiene en los dones es de amplia difusión. ―Eleanor asintió al anciano.
Mmm, Jungkook.
―Buen día. ―Taehyung dijo, con la voz todavía gruesa del sueño.
Yoongi se rió.
―Dormiste bien?
―Ah, el agua fría metafórica. ―Taehyung dio a Yoongi una mirada mala
cuando se levantó y se acercó a su padre. Kole estaba con un plato de
pan tostado, y Taehyung se sirvió una rebanada. El mordió, y Kole puso
su mano bajo la barbilla de Taehyung y le volvió la cabeza hacia un
lado. Él frunció el ceño.
―Es lo que soy, papá. Es lo que Jungkook es, y lo que yo seré. ―Kole
estudió a Taehyung durante mucho tiempo. Si él estaba buscando
dudas o miedo en los ojos de Taehyung, entonces no lo encontró. Él
nunca lo haría. Eventualmente, él asintió.
―Tú puedes por lo menos ponerte algo de ropa. ―Kole dijo.― Hay
damas en la sala.
―No dijiste que había albañiles, personas que controlan las piedras?
―Taehyung tomó un sorbo de café.
―Tiene que tener algo que ver con mi sangre, ¿verdad? ―Preguntó
Taehyung. Miró por la ventana para ver que estaba oscureciendo, y
luego miró su reloj.― Yo crucé tantas zonas horarias en las últimas
veinticuatro horas, que ni siquiera sé qué día es hoy. Tengo que llamar
al Dr. Benavides. ―Jungkook ni siquiera tuvo que mirar nada. Como si
tuviera un reloj mundial en la cabeza, dijo:
―Es casi las 18:00 aquí, casi las 04 a.m. en Nueva York.
―Sí, cuando se despertó antes, con el mismo resultado. Puedo ver hace
tres generaciones, entonces algo lo borra para fuera. Es el mismo que el
tuyo. De lo que yo puedo ver... ―Él levantó su mano y trazó una línea
vertical en el aire, que Taehyung fue deduciendo, cómo que vio el ADN
en la cabeza.―... Eso va directo, y luego, tu lado paterno, tu bisabuela,
lo borra. ―Abrió la mano como si el ADN de su mente desapareciera en
la nada. Taehyung no sabía qué hacer con él.
―No puede ser una coincidencia. ―Pensó en lo que todo esto podría
significar y miró a Jungkook.― Dime, ¿cómo funciona todo el asunto de
incubo? ―Jungkook parpadeó con sorpresa, y cuando Taehyung miró a
los otros, encontró a todos los vampiros mirándolo.
―Incubus?
―No sé... ―Jimin empezó a decir, como si fuera muy poco probable la
noticia. Taehyung sacudió la cabeza, todavía convencido de que tenía
razón.
―Tú sabes, yo vi vampiros momificados volver a la vida, ya he visto
estatuas de terracota moverse, y no vamos a olvidar del caballo de
Terracota que gritó, ¿verdad? Porque para mí, eso está allá encima, con
los sonidos del mal y el olor rancio horrible de momias en mi lista
deberá tener pesadillas con esa mierda. Así que, en realidad, la
posibilidad de que soy un descendiente directo de un vampiro, es
probablemente, la mierda menos más extraña que a mí me pasó.
―Jungkook tomó la mano de Taehyung y apretó.
―¿Pero?
―Y si los genes tuvieron que esperar hasta a mis padres para ser la
combinación genética correcta? ―Entonces se detuvo, porque otra
cosa le entró en su conciencia. Un pensamiento-no, una realización que
hizo su sangre helarse.
Taehyung tuvo que leer y releer el árbol genealógico del libro que
Jungkook había pedido a Kole para llevar con él, y no la letra cursiva de
su madre, eran los nombres de su madre, abuela, y su bisabuela.
Entonces nada. Y estos nombres no aportaron nada.
―Yo sé que puede explicar alguna cosa, Taehyung. Pero para qué? Esto
no cambia nada.
―Porque entonces lo sabré. ― dijo Taehyung.― Algo no está bien en mi
composición, padre. Algo que hace mi sangre especial, algo que afecta
a Jungkook. No te molesta? ―Kole enfrentó a su hijo.
―No, eso no pasará. ―Taehyung dijo en voz baja.― Pero podría salvar
mi vida. O la de Jungkook. Y eso es algo que no puedo hacer, Papá. Si
puede salvar a Jungkook, entonces tengo que hacerlo. ―Taehyung
levantó la vista para encontrar a Jungkook de pie en la puerta. Se
acercó lentamente, dando a Taehyung una pequeña sonrisa.
―Está bien. Lo sé. Lo siento, papá. ―Kole le dio una sonrisa triste.
―Yo creo.
―Tal vez ella lo sabía. Tal vez estuvo en eso de alguna manera.
―Taehyung ofreció. El miró para su padre y paró cualquier emoción.
―Si sabía algo, ella nunca lo dijo. ―Taehyung suspiró y dejó caer la
cabeza hacia atrás.
―Uh, tal vez pueda ayudar con eso. ―dijo Hoseok.― Estudié historias
del mundo en la Universidad.
―Puedo?
―Eso explicaría por qué puedes transferir todos los poderes de los que
te rodean, después de que bebiste de la sangre de Taehyung. ―dijo
Yoongi.― Es por qué nuestros poderes podrían realizarse a través de él.
―Jungkook comenzó a gruñir. Su mandíbula apretada y sus ojos negros
brillaron.
―Dónde estamos?
―Parece que has hecho esto antes. ―Taehyung susurró, sus labios
tocando a Jungkook. Sonriente, Jungkook sacudió sus caderas.
―Sabes que yo he hecho tal cosa. ―Taehyung cayó contra él, duro,
abriendo los muslos de Jungkook más amplios. Nunca se sintió tan
poderoso, tan dominante y posesivo.
―Mo ghaol Bith-buan, ―susurró, con tanta reverencia, que las palabras
sonaron como una oración. Taehyung esperó por él traducir.
Taehyung nunca se sintió tan lleno y feliz. Jungkook estaba en él, sí,
pero en
más de un sentido. El impregnó todos sus sentidos, todas sus células, y
por la forma cómo jugar lo sostuvo, lo llenó, fue como si tratara de
llegar a ser uno con él. Taehyung había aprendido algunas palabras en
gaélico de su tiempo con Jungkook, pero algunas cosas había que
decirlas en inglés. Tomó la cara de Jungkook en sus manos, mirándose
en sus ojos negros de lujuria, los labios hinchados del beso, y sus
dientes de vampiro.
[...]
Con sólo unos segundos de sobra, una hora después de que se fueron,
Jungkook y Taehyung saltaron de nuevo a la casa en Japón. Todavía
envueltos alrededor del otro, Taehyung estaba mordiéndose el labio
inferior y Jungkook estaba riéndose.
―Ustedes dos están cada vez peor. ―Él repitió lo que Jimin dijo.― El
olor de las hormonas procedentes de ustedes dos, asfixia, y es peor
ahora que antes. Al menos ustedes dos pueden estar en la misma
habitación, sin tocarse? ―Taehyung hizo un ruido gutural bajo y apretó
a Jungkook más, lo que fue un claro ―No― muy verbal.
―Por qué nosotros tuvimos que estar de vuelta dentro de una hora de
cualquier manera? ―preguntó.― Nosotros podríamos habernos
quedado mucho más tiempo. ―Apenas cuando dijo eso, el teléfono
móvil de Taehyung sonó.
―Por qué?
―Y?
―Bueno, hice una serie de pruebas, tal como lo pediste. Y eso incluía
una prueba de electroforesis de proteínas séricas. Ahora, tú siempre
tuviste un alto contenido de hierro.― Dijo el doctor Benavides.― Y aun
tienes. Pero estas lecturas son... bueno, muy inusuales.
―Describa inusual.
―Muy bien, doctor. Yo no creo que tenga que preocuparme por ello.
―Taehyung, yo no...
―Dime lo que eso significa. Puedo decir a partir de las miradas en sus
rostros, que ustedes saben alguna cosa. ―Jungkook tomó la mano de
Taehyung y lo hizo sentarse en el sofá.
―No sé nada científicamente, Taehyung. ―Dijo Jungkook.― A pesar de
lo que el médico encontró, tiene sentido. Estos compuestos sanguíneos
elevados son una explicación del poder en tu sangre.
―Eso es lo que Jorge quería decir sobre el sol en mi sangre? Tal vez no
estaba hablando de la luz solar brillante fuera de la cosa del disco solar
en Egipto. Tal vez esto significa literalmente, el poder del sol como
energía.
―Él estará bien. ―Yoongi susurró de una forma que ningún ser humano
podía oírlo. ―Jungkook, mi hermano, yo comprometo mi vida encima
de la suya.
―Se está haciendo más fuerte. ―Jungkook dijo en voz tan baja.―
Físicamente. Pudo darme la vuelta, algo que sin duda no habría sido
capaz de hacer antes. —Los ojos de Yoongi se abrieron.
―Él fue más fuerte que tú? —Jungkook dio una leve inclinación de
cabeza.
―Momentáneamente, sí. Está cambiando, Yoongi. Incluso el médico así
lo dice. Estos resultados de sangre son nuevos.
―Crees que, una vez que fue destinado a ti, cambió físicamente
también?
―Es una posibilidad que no puedo pasar por alto. ―dijo Jungkook.
Observó a Taehyung mientras hablaba con su padre en la luz del sol. ―
O tal vez yo mordiéndole lo cambió, no sólo como se esperaba. O tal vez
es nuestro... acoplamiento. ―Jungkook se encogió por discutir tales
asuntos personales. Yoongi casi sonrió.
―Podría haber posibilidades. Tal vez sea una combinación de todos los
tres. No tenemos forma de saber. Nosotros no podemos cambiar nada
de tu ser predestinado. Esto está hecho. Dejaste de morderlo, sí? —
Jungkook asintió.
―Sí. ―dijo Taehyung.― Por supuesto que puedo oírla. —Jungkook hizo
un gesto hacia fuera.
―Está bien, eso cambia las cosas. ―Yoongi dijo, tirando de Taehyung
en la habitación. Jungkook fue rápido para estar entre ellos, gruñendo
y quitando forzosamente la mano de Yoongi del brazo de Taehyung.
Cuando se dio cuenta de lo que había hecho, Jungkook movió la cabeza
y cogió las dos manos.
―Sea lo que sea que lo afecta tanto, está empeorando. ―dijo Jimin.―
Tenemos que poner fin a esto. —Jungkook habló en voz baja con
Yoongi, con la cabeza hacia abajo.
―Sé que nunca le harías daño. Estoy perdiendo el control sobre esto.
―Él tragó con fuerza. Su vínculo con Taehyung era tan fuerte, que
Jungkook sabía que Taehyung sentiría su angustia. Sin embargo,
parecía incapaz de detenerlo.
―Me temo que esta conexión es tan abrumadora, que está volviéndome
loco. —Taehyung abrazó a Jungkook y la atrajo hacia él, enterrando el
rostro de Jungkook en la curva de su cuello. Besó el lado de su cabeza y
movió la cabeza
―No estás loco. Eso es nuevo para todos. Nunca hubo un vampiro
predestinado a un ser humano, y mucho menos una llave humana. Así
que este es un terreno desconocido, eso es todo. No te estás volviendo
loco, mi amor. ―Taehyung besó la sien de Jungkook otra vez antes de
levantar su rostro para poder mirarlo a los ojos. Habló con fuerza.
[...]
Y jodidamente asustador.
―Qué te pareció?
―Uh. ―Jungkook parpadeó un par de veces.― Parece que hay una gran
cantidad de propaganda en relación con las estatuas de terracota que
cambiaron de formación en el Museo Británico ayer. —Taehyung
sonrió.
Pero estos libros no estaban en inglés, por lo que Taehyung estaba feliz
de obtener información de segunda mano. Jimin y Yoongi discutían de
Genghis Khan, estudiando su vida, humana y vampiro, y bien, de la
forma en que Taehyung había descubierto información básica sobre
Hyuna para revelar sus motivos. Pero a Taehyung no le importaba
mucho al respecto.
―Taehyung?
―Sí?
―Las cosas que voy a hacer cuando todo este lío haya terminado.
―Oh.―dijo Jungkook.― Hay planes para nosotros? —Taehyung sacudió
las cejas.
―Sí, aunque tal vez esta vez la luz del sol no se rasgará a través de la
habitación. No sé lo que sucederá. Tal vez sea eso lo que se necesita de
mí que haga, para que él pueda ser el todo poderoso bastardo que fue
una vez. Tal vez esto le dará la inmortalidad, o tal vez va a convertirlo
en polvo. Realmente, no tengo ni idea. —Jungkook negó con la cabeza.
―Sí, pero no tenemos nada que pasar. Sabemos que los soldados de
terracota reaccionan a mi presencia. Sabemos que hay una placa de
piedra de algún tipo, que se relaciona directamente con la antigua
mitología china de los cinco elementos. Estamos asumiendo que soy de
alguna manera el quinto componente, que él necesita para cumplir con
todo lo que sea que esté haciendo. Lo que no sabemos es si él necesita
mi sangre para vencernos, o si la necesitamos para vencerlo. Tampoco
nosotros sabemos... —Hoseok levantó la mano para detenerlo.
[...]
―Taehyung no está bien. Esto tiene que terminar hoy. —Jimin asintió
con brusquedad.
―Dime lo que necesitas que haga. —Así que, durante las dos horas que
Taehyung durmió, todos se pusieron muy ocupados. Hoseok definió
diagramas de planes y construcción de infraestructura del Monte Li y
los enormes cofres del tamaño de
un campo de fútbol que albergaba a unos seis mil soldados de
Terracota. También hicieron una lista de las ubicaciones de todos los
soldados de Terracota expuestos en todo el mundo.
Volver a Taehyung.
―Está bien. ―El sopló hondo y miró para ambos, Jimin y Yoongi.
―Qué es eso?
[...]
Jungkook se negó a ir a ninguna parte sin Taehyung, así que, dado que
necesitaban de elementos de fuera de la ciudad japonesa hacia la
ciudad más cercana, tenían que saltar.
Yoongi estaba con ellos, negándose a dejarlos ir solos. Su primera
parada fue en un almacén de suministros médicos, segunda parada fue
en los alimentos.
―He pasado por más tiempo sin comida, Taehyung. Voy a estar bien. —
Taehyung gruñó con frustración.
―Él podría acabar con todo el puto pueblo y no me importaría, con tal
de que significara que no tenga hambre. —Yoongi resopló.
―Yo no quiero que una aldea entera muera, para que lo sepas.
―Entonces él miró directamente a Jungkook.― Me gusta la idea de
librar las calles de asesinos y violadores, pero poniendo los dientes en
la garganta de una persona y beber su sangre puede ser otra historia. —
Jungkook estaba delante de él y sostuvo su cara suavemente.
[...]
―Vamos a dar un paseo por la noche a la ciudad. —Dijo Eleanor. Ella era
consciente de lo que se dijo enfrente de Kole, y los dos parecían
disfrutar de la compañía del otro. Estaban jugando al ajedrez cuando
Taehyung, Jungkook y Yoongi volvieron, con Sammy el gato
ronroneando con fuerza junto a Eleanor. Parecían bastante cómodos
juntos, pensó Taehyung. Y cuando Eleanor los dejó, Kole se puso de pie
y se estiró.
―Cómo?
―Y?
―Um, Yoongi, odio ser el que tenga que decírtelo, pero no estás
gelificando tofu. —Yoongi se rió largo y ruidoso.
―Ah, Taehyung. Me haces reír. ―El levantó una flecha, dejando la goma
blanca gruesa gotear para atrás en el recipiente.― Entonces sabes que
los minerales de arcilla son caracterizados por hojas bidimensionales
de esquina que compartían SiO4 tetraedros o AlO4
octaedros. A veces las dos cosas. —Taehyung parpadeó lentamente.―
Estas hojas tienen una composición química (Al, Si)3 O4. Cada
tetraedro de silicona comparte tres de sus átomos de oxígeno en el
vértice —Taehyung levantó la mano, y luego se rascó la cabeza.
―Uh, no tengo ni idea, por lo que sólo iré con un sí, porque dijiste que
lo era. —La sonrisa de Yoongi se amplió.
―Uh, está bien. Podemos llegar al punto sin clases de química y física?
—Yoongi levantó una flecha que había sumergido en la pasta y le
mostró la punta.
―Sí.
―Y qué es eso?
―Estoy de acuerdo.
[...]
―Está limpio. ―dijo.― No hubo nadie aquí, desde que nos fuimos. —
Taehyung exhaló con fuerza, el alivio recorriéndolo.
―Como así?
―Bien, yo soy todo del siglo XXI, con el argot cero respeto por el idioma
inglés o cualquier idioma para esa materia. Y tú hablas tan bien, tan
perfectamente. Es como si cada frase fuera un regalo. —Los ojos de
Jungkook se abrieron cuando lo hizo sonreír.
―Qué es eso?
―Creo que deberías beber de mí otra vez. ―Levantó las manos antes de
que Jungkook pudiera oponerse.― Escúchame, por favor. ―Taehyung
tomó la mano de Jungkook y se sentó en la cama. Lo miró y respiró
lentamente. ― No es por gratificación, o porque lo encuentro caliente,
o porque necesito que me muerdas. Es decir, todas estas cosas pueden
ser verdad, pero es más que eso. Creo que deberías beber de mí, tomar
mi sangre, para que puedas transferir deliberadamente los poderes a
los que están a tu alrededor.
―Sí.
―Correcto.
―De una buena manera. ―Jungkook dijo con una pequeña risa.― Tu
sangre es la forma más pura que he probado nunca.
―Puedes sentirlo?
―Debemos empezar?
―Me siento bien. Perfecto, en verdad. Ya sabes, creo que esta sangría
me está haciendo mejor. Tu bebiendo de mí, me hace mejor. Recuerdas
cómo yo estaba confundido y cansado antes? Bueno, eso se ha ido. —
Jungkook hizo una mueca.
―Nunca.
―Qué es eso?
―Se ve bien! ―Taehyung rió.― Tener una última cena. Al igual que
Jesús. —Jungkook se rió entre dientes, luego se dedicó a cambiar la
bolsa de sangre. El tenía para Taehyung zumo y un bocadillo en la
cocina para reponer sus niveles de azúcar, o así había dicho Jungkook.
El estaba claramente preocupado acerca de la cantidad de sangre que
Taehyung estaba dando, pero Taehyung le aseguró todo el tiempo, que
se sentía bien. Cuando la tercera bolsa de medio litro terminó,
Jungkook añadió la cuarta bolsa y la última, y Jungkook fue insistente
sobre la alimentación de Taehyung en más alimentos y zumo,
Taehyung pensó que podría ser un buen momento para preguntarle
algo que pesaba en su mente por un tiempo.
―Por supuesto.
―Te lo dije, me siento muy bien. Mejor que genial. Yo creo que dejando
la mitad de mi sangre hacia fuera ayudó o algo así. Yo no sé. Y de
cualquier manera, puedes decir mi presión arterial, escuchando? —
Jungkook resopló.
[...]
―Así que, ahora que te sientes tan bien, deseas hacer una
investigación? —Taehyung se encogió de hombros sin comprometerse.
Yoongi se balanceó sobre los talones, haciéndose mindiferente.
―Como así?
―Aún así, un humilde peón puede dar jaque mate a un rey, Taehyung.
No hay que subestimar a un viejo vampiro con una sed de venganza.
―La misma persona que transformó a Kim Hyuna para la vampira reina
egipcia Hyuna. La misma persona que utilizó los sueños de mis padres
para que me den mi nombre. Tal vez lo que dijo Yugyeom, en el
callejón antes de morir, tiene un doble significado. El dijo no son uno,
son dos. Tal vez él sabía algo que nosotros no sabemos. Tal vez él
estaba atrapado en algo y murió antes de que pudiera decir a ninguno
de ustedes. —Hoseok negó con la cabeza.
―Y cuál es tu protección?
[...]
―Como Thor.
―Ellos saben que estás aquí, Taehyung. ―dijo Jimin. Taehyung dio un
paso más cerca de Jungkook.
―Nos vamos.
―Nada.
Yoongi corrió primero, con Jimin justo sobre sus talones, y saltó limpio
desde el frente del almacén a las pasarelas elevadas de tierra. Cuando
el primero de los soldados de terracota trató de llegar a sus pies,
Yoongi balanceó su martillo, diezmándolo en polvo.
―No ―Dijo.― Sólo los dones de los que nos rodean, nada más.
―Qué? ―Seokjin silbó.― Qué quiere decir, que no puede ver?
―Bueno, ustedes dos son sólo una maravillosa tejida de extraño. ―Dijo
Seokjin categóricamente. En ese momento, un pequeño grupo de
soldados de terracota salieron de la oscuridad. Ellos se movían en
formación sincronizada, y
poco a poco, se acercaron como un robot hacia ellos.
―Qué tal pasar por eso en primer lugar? ― Taehyung dijo, descartando
la idea.― Tengo la sensación de que estamos caminando justo adonde
él quiere. —Yoongi miró a Taehyung y dio una inclinación de cabeza
antes de agacharse y caminar un poco más rápido.
La siguiente sección de soldados de terracota se movían más rápido de
nuevo, con más fuerza y flexibilidad que los anteriores, y el pelotón
después de esos aún más. Estaba claro para Taehyung que los más
débiles, tal vez los soldados creados primero, fueron enviados en
primer lugar. Pero aún así, estaban casi fuera de juego para ellos.
Glorioso e imperial, pero inútil en combate. Jungkook se humedeció los
labios y frunció el ceño.
―Yo me siento bien. ―Dijo él, cuando la verdad era que no estaba
seguro de cómo se sentía. Estaba caliente y era difícil respirar, pero,
básicamente, sólo corrió media milla llevando un martillo, llevaba
gafas de visión nocturna y una mochila, y el aire en el túnel no era
exactamente fresco. ― Yo estoy bien.
―Qué es eso?
―Algo no está claro. ―Dijo crípticamente.― Puedo ver algo, pero está
oculto a la vista.
―Imagínate una sala con ventanas, puedes verlas todas, pero es opaco
y oscuro.
―No, yo no sé cómo.
Una vez más, Hoseok y Yoongi fueron primero y los ingleses eran los
siguientes, pero el próximo pelotón de soldados era más rápido y más
ágil. Y armados. Jimin se unió en la lucha, y cuando más tropas seguían
llegando, Jungkook y Taehyung también lo hicieron.
―Gracias.
―No por esto. ―Jungkook respondió con una ligera curva. Cuando ese
batallón de soldados fue hecho, sin decir una palabra de lo cerca que
estaban o cuánto más aptos para luchar contra el Ejército de Terracota
fueron quedando, ellos continuaron hacia el oeste en el túnel.
Taehyung lo estaba sintiendo ahora. Era el aire más grueso o fueron sus
pulmones sin trabajar correctamente? Esto es lo que quería decir
Eleanor. Dijo que el aire era pesado, y ahora Taehyung sabía por qué.
Lleno de polvo venenoso. El polvo que no afectó a los vampiros, pero
seguro fue perjudicial para los seres humanos. Sus pulmones estaban
temblando y él se sentía caliente, muy caliente. Hizo el ritmo que
estaba manteniendo casi imposible y se tambaleó.
―Un show. —Uno de los ingleses, el saltador que los trajo aquí, sonrió
con sus ojos muy abiertos.
El era, Taehyung suponía, como algo descrito con precisión por los
historiadores. Puesto que ellos no tenían exactamente fotografías en el
siglo XIII, por eso, las pinturas y los dibujos no eran exactamente el
Evangelio. A menos que el sancionase a los artistas por dibujarlo aún
más alto, Taehyung no estaba seguro, pero el tipo era bajo. Vestido con
ropas blancas y marrones con una perilla grisácea extraña, él extendió
los brazos en señal de bienvenida, como si fueran todos amigos de hace
mucho tiempo esperados, y gritó palabras que Taehyung no podía
entender.
―Qué pasa con los otros elementos? ― dijo Taehyung. Las palabras
dolían mientras hablaba.― No necesitará de todos los cinco? —
Jungkook negó con la cabeza.
―Yo también.
―La Llave está muriendo. ―Jorge sollozó.― Río de Plata, Río de Plata.
―Taehyung asintió con la cabeza y empezó a toser, parecía que tenia
lava en sus pulmones, y todo su cuerpo le dolía.― Nuestra mente ve lo
que nuestros ojos no pueden. La mente de Jorge ve. Río de Plata.
Sangre y piedra.
―La tierra pertenece al Río de plata. Mira con tu mente como lo hace
Jorge. ―Dijo Jorge, y el alto vampiro se burló, levantó su mano y
golpeó a Jorge en la cara para silenciarlo.
―Toca al niño otra vez y será la última cosa que vas a hacer. —El
hombre se burló de Yoongi, pero Gengis levantó la mano y puso fin a
cualquier discusión de los involucrados.
Jorge ensanchó los ojos cuando vio lo que Taehyung tenía en la mano, y
empezó a sonreír. El rápidamente corrió a través del suelo, a través de
los pilares de piernas y agarró de la mano de Taehyung el reloj antes de
que el alto vampiro tirara de él de vuelta.
[...]
―Mientras miraba a mi gente morir, tú vas a ver al tuyo. Esta Llave para
toda la humanidad no va a servir a nadie más que a mí. ―Se burló de
Jungkook.― Ustedes, los celtas deberían haberse quedado en sus
cuevas, Jungkook, todos aquellos años atrás. Y créanme, cuando haya
terminado, desearás haberlo hecho.
―Y Gengis Khan. ―Rilind añadió.― Ambos locos por el poder que nunca
sería de ellos.
―Y, sin embargo, le dará la vida eterna cuando lo salve. ―Dijo Rilind,
inclinando la cabeza.― O, él va a morir. De todos modos, no me
importa. ―sonrió de nuevo.― Hay viejas fuerzas en juego aquí,
Jungkook. Fuerzas tan poderosas que ni nuestros antepasados
vampiros podían entenderlas. Los egipcios y los chinos eran tontos en
pensar que podrían soportarlo.
―Vamos, vamos. ―dijo Jorge.― El Río de Plata. ―El niño corrió hasta el
final de la plataforma de círculo y los llamó con la mano.― Vamos,
vamos. —Jungkook tomó a Taehyung y fue con el niño. Él estaba sin
resistencia y cayó en sus brazos. Murmuró una palabra, con sólo un
soplo agitado.
―Jungkook.
Carne, no del cuerpo podrido de Qin que fue hace mucho tiempo
momificado, estaba en el aire viciado. Fue el olor del mercurio. Mucho
de esto. Ríos del mismo. Río de Plata como Jorge lo había llamado.
―Aquí. ―Jorge dijo, todavía con la placa de piedra, que era casi la
mitad de su tamaño. Al parecer era ajeno a todo en la tumba. Tal vez
había visto esto en su cabeza antes, pensó Jungkook, por lo que no se
sorprendió con lo que vio ahora.― Jorge te llevará. —Jungkook siguió a
Jorge mientras corría, saltando sobre los flujos de mercurio hacia el
altar. Fue sólo cuando estaba casi encima de él, que Jungkook pudo ver
un círculo de piedra alrededor del lugar del descanso final de Qin, el
primer emperador de China.
―Jorge? ―gritó Jungkook.― Qué significa eso? —Los ojos del niño
estaban todo negros otra vez y él se balanceó hacia atrás y al frente.
―Luna Azul. Río de Plata. —Hoseok tomó la placa de piedra del chico, y
él corrió hacia el río más cercano de mercurio. Lo sumergió en el líquido
de plata.
―Los antiguos elementos chinos están sobre esta piedra. ―dijo él.
Corrió de nuevo hacia Jungkook y colocó la placa de piedra en el cuerpo
de Taehyung.― Los otros elementos. Recógelos! —Yoongi levantó una
estaca de madera de su funda, y Jimin llevó las manos y con un gran
esfuerzo, formó una bola de hielo en sus manos y la colocó
cuidadosamente en el plato de mercurio. Lars chasqueó los dedos y
apareció una pequeña llama. Tomó una vieja moneda, calentándola, y
la puso en el plato. Entonces, Hoseok tomó una bolsa de sangre de su
mochila, y la cortó con la uña, derramando la sangre de Taehyung en el
plato.
―Jorge! ¡No funciona! —El chico negó con la cabeza y sus ojos eran
claros. Él habló en voz baja y clara.
―¡No! ―Jorge se puso de pie y gritó de vuelta para él con más fuego e
ira de la que Jungkook habría dado crédito para el niño.― Mira la
mente de Jorge! Ve! Ve! Dentro de las rocas, de donde él vino. Donde su
nació sangre. —Jungkook cerró los ojos y se centró en los
pensamientos de Jorge, y vio exactamente lo que Jorge vio. Los ojos de
Jungkook se abrieron en el
momento en que la puerta de madera se rompió y el Ejército de
Terracota entró.
―Agárrense a mí!
―Miró para el este, donde el sol amenazaba con subir.― Estoy casi
fuera de tiempo.
―Piedra, sangre, metal, fuego y agua, junto con la luna y el sol. ―Su
madre respondió, apuntando para la placa de piedra en el pecho de
Taehyung. Estaba cubierta de mercurio, fuego, agua, y el elemento más
importante de todo, la sangre de Taehyung.― Los elementos de la vida
van a salvarlo.
―Cómo?
―Fuiste creado para eso. ― Dijo Jorge. ― Puedes mover átomos físicos
cuánticos, ¿verdad? —Jungkook asintió.
―Soy un saltador.
―Qué?
―La sangre de vampiro ya corre por sus venas, por eso no podía ser
transformado. ―dijo la voz de la madre de Taehyung con serenidad.―
Debes matar al vampiro en él para que el ser humano pueda vivir. —
Sólo un aliento, Jungkook. Entonces muérdelo.
—Jungkook estaba a punto de objetar, no podía hacerlo, nunca podría
matar a alguna parte de Taehyung, pero un tremendo zumbido vino de
la tierra como si reverberase dentro de él y sus manos comenzaron a
temblar.
―Tienen que irse. No pueden estar aquí cuando salga el sol. —Jimin
tomó la mano de Yoongi.
―Tú no deberías tener que ser el único que lo haga. —Jungkook movió
la cabeza y respiró a través del dolor. El zumbido en el pecho era casi
insoportable.
Y luego se fue.
―Va a estarlo. —Jimin puso las manos frías en Taehyung para enfriarlo,
Jungkook se dio cuenta, y Taehyung se relajó un poco. Agarró la mano
de Jungkook, sus dedos como garras y sus dientes estaban cerrados.
―Él tiene una energía como nunca antes vista en nuestra especie, como
si fuera destinado. No en un poder, sino en todos los poderes. Sin
precedentes e inimaginable, pero él es correcto y equitativo, y va a
proteger y servir. El destino eligió bien. —Jorge habló directamente a
Jungkook.― Pero estos poderes no están exentos de riesgos. Habrá
siempre aquellos que buscan controlar o conquistar, y habrá una gran
responsabilidad en protegerlo, pero tú lo protegerás. —Jungkook
asintió.
El mundo era más claro, con una nueva gama completa de colores, y su
visión estaba en permanente vista panorámica. Oyó todo - todo - y
probó todo eso en su lengua. Su cerebro lo catalogó todo en menos de
una milésima de segundo, y su mente - oh, su mente - un universo
abierto.2
Miró a Yoongi y Jimin, que ambos tenían una sonrisa de oreja a oreja, a
continuación, a Hoseok y Seokjin, Lars y los otros vampiros ingleses
que sabía quién eran ahora, Leonard, Omar y Kylie. No sabía cómo lo
sabía, simplemente lo sabía - y el pequeño Jorge, que sonreía
fantásticamente. Eleanor y su padre estaban allí, oh padre, pero no
había... Jungkook.
Jungkook.
―Diferente?
―Los que están en el otro mundo de nuestra especie han visto esto.
―dijo ella a través de Jorge.― Tuvimos que asegurar nuestro linaje, el
talentoso medio-vampiro - mitad humano, tenía que convertirse en lo
que estaba destinado a ser.
―Tú y yo hablaremos muchas veces. Pero por ahora tenemos que salir.
—Los ojos de Jorge volvieron a la normalidad y el niño sonrió.
―Tú ves lo que ve Jorge! —Taehyung asintió con la cabeza y se puso las
manos en su pelo. Su mente estaba fracturada, fragmentada en mil
direcciones a toda velocidad: vistas, olores, recuerdos, cosas nuevas
como pensamientos de otras personas, escuchar la música de Dios sabe
hasta qué lejos, sabiendo que él puede controlar cosas como el fuego y
el agua. Jesús. Todo era demasiado. Le dolía la garganta, su ardor de
estómago, tenía barro en el pelo. Sacó un montón de barro y él lo miró
con curiosidad. Entonces se dio cuenta que tenía una mancha de color
rojo-negro en el pecho y un agujero en su camisa y él apestaba a
mercurio y, oh Dios, abrazó a su padre con una camisa venenosa.
―Más tarde, llévalo a Nueva York. ―dijo Jimin.― Pasen unos días a
solas, sin interrupción, sin presión o influencia. —Jungkook asintió.
[...]
Saltando por primera vez como un vampiro no fue menos difícil que la
primera vez como un ser humano. No fue doloroso, así, no físicamente.
Fue sólo que Taehyung, tenía un océano de fuerza y poderes que no
podía controlar, y el salto era uno de ellos.
Había tantas voces, ruidos, más voces, olores, y mas, y más voces
aparte de Jungkook y no podía concentrarse. Tenía hambre. Quería. Él
cerró los ojos y bloqueó todo lo demás. Concentró a su mente
multifacética en escuchar para una sola cosa: conversaciones en
callejones de drogas, violación o asesinato.
―Tú sabes dónde morder. ― Y con una flexión rápida de los dientes,
perforó la piel y estaba bebiendo.
―Mis manos todavía están temblando. No lo han hecho desde que fui
un ser humano. —Taehyung resopló.
―Así que vamos a tener un buen rato con estos nuevos poderes, sí? —
Jungkook suspiró y rodó para hacer frente a Taehyung.
― Creo que has tomado todo muy bien. Mejor que cualquier persona
que he visto.
―Yo soy notable a causa de lo que me hiciste. ― Dijo Taehyung. Los ojos
de Jungkook se abrieron.
―Me escuchaste en mi mente? —Taehyung llegó a lo más profundo de
la mente de Jungkook, viendo destellos de diferentes épocas y lugares
de hace mucho tiempo y muy lejanas, como fragmentos de primera de
una obra cinematográfica.
―Oh, Jesús. ―Taehyung jadeó. Él cerró los ojos. ―Tengo que aprender
a bloquear esto. Taehyung se rió.
―O no.
Fue un placer tan divino, tan crudo y tan completo. Él estaba dentro de
él, de todos los modos posibles. Era tan profundo en él, probó su sangre
en su lengua: Un sabor tan delicioso, tan perfectamente diseñado sólo
para él.
Y así lo hizo.
―Es verdad.
―Para siempre.
Esto sólo ocurrió una vez. La segunda vez que se alimentó con una
imagen mental de la vida y tiempos más felices, y en una hora el cuerpo
de este asesino de niños cayó al suelo, Taehyung aprendió solito a
bloquear los pensamientos. Otros creían que no podía ser posible para
él aprender estas cosas tan rápidamente, pero Taehyung solo se
encogió de hombros. Él le dijo a Jungkook,
―Él tiene tantas baratijas de los últimos 1.200 años. ―Taehyung dijo,
refiriéndose a la pared de artefactos en la sala de estar y su oficina.―
Ha hecho tantas cosas increíbles.
―Por qué?
―Debido al riesgo que representa para él, para ti, y Jimin. —Él negó con
la cabeza.
Jungkook.
Jungkook...
[...]
―Un kilt?
―Es mejor que seas muy tradicional bajo esa falda. —Todo el mundo se
rió y Jungkook se ruborizó.
―Jorge vio. Jorge vio. —Sehun puso su mano sobre el hombro del
muchacho,
silenciándolo como un padre haría con un hijo, y todos se rieron. Con el
tiempo, Kole se aclaró la garganta, volviendo a la ceremonia.
―Y yo te elegiría a ti.