Una evaluación de riesgos en el lugar de trabajo es un análisis detallado de los posibles
peligros que podrían causar daño o enfermedad a las personas, con el fin de determinar si se han tomado suficientes medidas de seguridad o si se necesitan más para prevenir lesiones. Es fundamental asegurarse de que nadie sufra daños o problemas de salud. Este proceso implica identificar los peligros, evaluar el riesgo, adoptar medidas de control de riesgos y revisar regularmente la evaluación. La evaluación de riesgos se lleva a cabo en cinco pasos: 1. Identificar los peligros. 2. Identificar quién puede resultar dañado y cómo. 3. Evaluar el riesgo y decidir las medidas de control de riesgos. Este paso consta de dos subpasos:
3.A: Identificar qué medidas ha adoptado ya para controlar los riesgos
3.B: Identificar qué otras medidas sería necesario adoptar Aqui las consideraciones y decisiones sobre las medidas de control de riesgos deberán respetar la «jerarquía de las medidas de control de riesgos» y seguir el siguiente orden:
Medida de control de riesgos 1: Eliminación o sustitución de los peligros
Medida de control de riesgos 2: Herramientas, equipo, tecnología y medidas técnicas Medida de control de riesgos 3: Métodos de trabajo seguros, prácticas, organización, información y formación Medida de control de riesgos 4: Higiene y bienestar Medida de control de riesgos 5: Equipos de protección personal Medida de control de riesgos 6: Vigilancia sanitaria/médica 4. Designar responsables de implementar las medidas de control. 5. Realizar un seguimiento y revisar la evaluación de riesgos, actualizándola según sea necesario. El empleador es generalmente responsable de organizar la evaluación de riesgos, asegurarse de que se realice correctamente y adoptar medidas de protección adecuadas. Esto puede implicar designar trabajadores competentes para llevar a cabo la evaluación o contratar servicios externos si es necesario. La participación activa de los trabajadores es fundamental en este proceso, ya que su conocimiento y experiencia pueden contribuir a identificar riesgos y soluciones efectivas. PELIGRO es cualquier cosa que pueda ocasionar un daño potencial, ya sea en detrimento de la salud o la seguridad de una persona, o un daño a una propiedad, equipo o entorno. FUENTE: Maquina en operación. SITUACION: Trabajos que requieren realizarse a tres metros de altura. ACTO: Usar baldes como base de trabajo. RIESGO es la posibilidad o probabilidad de que un peligro cause efectivamente una lesión, enfermedad o daño a una propiedad, equipo o entorno, junto con la indicación de la gravedad que podría tener este, incluidas cualesquiera consecuencias a largo plazo que podría acarrear. Riesgo de atrapamiento. Riesgo de caídas a distinto nivel. Teorías y Modelización de los Accidentes Las teorías y modelos de accidentes buscan comprender las causas subyacentes y los factores contribuyentes que conducen a los accidentes. Algunas de las principales teorías y enfoques de modelización incluyen: 1. Modelo del Dominó de Heinrich: Propone que los accidentes son el resultado final de una serie de factores, comenzando con un evento desencadenante y pasando por una serie de "dominós" que representan factores subyacentes como actos subestándar, condiciones inseguras y errores humanos. 2. Modelo del Factor Humano: Se centra en los errores humanos como principales causas de accidentes, incluyendo errores de percepción, decisión y ejecución. Este modelo destaca la importancia de la capacitación, el diseño de sistemas y la supervisión para mitigar los errores humanos. 3. Teoría del Error Activo y Latente: Distingue entre errores activos (cometidos directamente por las personas en el lugar de trabajo) y errores latentes (problemas sistémicos y condiciones subyacentes). Se enfoca en identificar y abordar los errores latentes antes de que causen errores activos y accidentes. 4. Modelo del Hombre-Máquina-Entorno: Considera la interacción entre el individuo, la maquinaria y el entorno de trabajo como factores clave en la seguridad. Destaca la importancia de diseñar sistemas que sean compatibles con las capacidades y limitaciones humanas. 5. Teoría de los Sistemas Dinámicos: Examina los sistemas complejos y dinámicos en los que operan las personas, reconociendo que los accidentes son el resultado de interacciones complejas entre diversos factores. Se centra en comprender cómo se desarrollan las situaciones peligrosas y cómo se pueden interrumpir. En general, estas teorías y modelos proporcionan marcos conceptuales para comprender la naturaleza multifacética de los accidentes y guiar la prevención mediante la identificación y mitigación de factores de riesgo en múltiples niveles, desde el diseño de sistemas hasta el comportamiento individual. Teoría del Método de Árbol de Causas La Teoría del Método del Árbol de Causas es una técnica utilizada para analizar y comprender las causas fundamentales de un problema o evento no deseado. Se basa en la idea de que los eventos no son simplemente el resultado de una causa única, sino que son el producto de una serie de factores interrelacionados. El proceso de árbol de causas implica: 1. Identificar el problema o evento no deseado. 2. Identificar las causas inmediatas y directas del problema. 3. Desarrollar un árbol de causas, que es una representación gráfica de las causas principales y sus relaciones. 4. Profundizar en las causas subyacentes y contribuyentes, creando ramificaciones adicionales en el árbol de causas. 5. Identificar las causas raíz, que son los factores fundamentales que originan el problema. 6. Desarrollar medidas correctivas y preventivas para abordar las causas raíz y evitar que el problema vuelva a ocurrir. METODOLOGIAS DE ANALISIS: Las metodologías de análisis en evaluaciones de riesgos son enfoques sistemáticos utilizados para identificar, evaluar y gestionar los riesgos en un entorno laboral. Estos métodos suelen incluir los siguientes pasos: 1. Identificación de peligros: Consiste en identificar todas las posibles fuentes de peligro en el lugar de trabajo, como maquinaria, sustancias químicas, procesos de trabajo, etc. 2. Evaluación de riesgos: Se analiza la probabilidad de que ocurra un evento peligroso y el impacto que podría tener en la seguridad y la salud de los trabajadores. Esto se realiza mediante la combinación de la probabilidad de ocurrencia y la gravedad del daño. 3. Medidas de control: Una vez identificados y evaluados los riesgos, se deben establecer medidas de control para reducir o eliminar estos riesgos. Estas medidas pueden incluir cambios en los procesos de trabajo, el uso de equipos de protección personal, capacitación de los trabajadores, entre otros. 4. Implementación de controles: Se ponen en práctica las medidas de control definidas, asegurándose de que se apliquen correctamente en el lugar de trabajo. 5. Monitoreo y revisión: Se lleva a cabo un seguimiento continuo de las medidas de control implementadas para garantizar su eficacia. Además, se revisan periódicamente las evaluaciones de riesgos para identificar nuevos peligros o cambios en los existentes, y ajustar las medidas de control en consecuencia. El Método de Ishikawa, también conocido como Diagrama de Espina de Pescado o Diagrama de Causa y Efecto, es una herramienta de análisis que ayuda a identificar y visualizar las posibles causas de un problema o efecto específico. Consiste en representar el problema o efecto en el extremo derecho de un diagrama y trazar líneas que representan diferentes categorías de causas potenciales que podrían contribuir a ese problema. Estas categorías suelen incluir personas, procesos, materiales, máquinas, entorno y métodos. A medida que se identifican las posibles causas dentro de cada categoría, se agregan ramas adicionales al diagrama para representar causas específicas. Esto ayuda a desglosar el problema en sus componentes individuales y a comprender mejor su naturaleza. El Método de Ishikawa facilita la identificación sistemática de las causas raíz de un problema, lo que permite a los equipos abordarlas de manera efectiva y tomar medidas correctivas adecuadas para resolver el problema en cuestión. La técnica de las 8 disciplinas, también conocida como 8D, es un método estructurado utilizado para resolver problemas, especialmente en el ámbito de la calidad y la gestión de procesos. Consiste en una serie de pasos secuenciales que ayudan a identificar, analizar y corregir problemas de manera sistemática. Los pasos principales de las 8 disciplinas son: 1. Formación del equipo: Se reúne un equipo multidisciplinario para abordar el problema y asignar roles y responsabilidades claras. 2. Descripción del problema: Se define y describe el problema de manera clara y específica, incluyendo su impacto y las áreas afectadas. 3. Acción inmediata: Se toman medidas inmediatas para contener el problema y evitar que se agrave. 4. Identificación de la causa raíz: Se utiliza análisis de causa raíz para identificar las causas subyacentes del problema. 5. Desarrollo de soluciones permanentes: Se generan y evalúan posibles soluciones para abordar la causa raíz del problema. 6. Implementación de soluciones: Se implementan las soluciones seleccionadas, asegurándose de que se lleven a cabo de manera efectiva y se monitorean sus resultados. 7. Prevención de recurrencias: Se establecen medidas preventivas para evitar que el problema vuelva a ocurrir en el futuro. 8. Reconocimiento del equipo: Se reconoce y celebra el trabajo del equipo, así como los logros alcanzados en la resolución del problema. El método "What If?" es una técnica de análisis de riesgos que se utiliza para identificar posibles escenarios adversos y evaluar sus consecuencias. Consiste en formular preguntas específicas sobre un proceso, situación o sistema, imaginando posibles eventos o fallos y analizando cómo podrían afectar a la seguridad o eficacia del sistema. Implica: 1. Formular preguntas específicas sobre un proceso o sistema. 2. Imaginar posibles eventos o fallos que podrían ocurrir. 3. Evaluar las consecuencias de estos eventos en términos de seguridad, eficacia o cumplimiento de objetivos. 4. Identificar medidas de control o acciones preventivas para mitigar los riesgos identificados. Este método es útil para explorar escenarios improbables, pero potencialmente peligrosos, así como para estimular el pensamiento creativo y fomentar la colaboración entre los miembros del equipo. El método AME/FMEA, que significa Análisis de Modo y Efectos de Falla, es una metodología utilizada para identificar y prevenir posibles fallos en un proceso, producto o sistema. Su objetivo principal es anticipar y mitigar los efectos negativos que podrían surgir debido a posibles fallas. Los pasos principales del método AME/FMEA son: 1. Identificación de modos de falla: Se identifican todos los posibles modos de falla que podrían ocurrir en el proceso, producto o sistema. 2. Análisis de efectos de falla: Se evalúan los posibles efectos que cada modo de falla identificado podría tener en el proceso, producto o sistema. 3. Evaluación de la gravedad: Se asigna una clasificación a la gravedad de cada efecto de falla identificado, determinando el impacto que tendría en el funcionamiento general. 4. Identificación de causas y controles existentes: Se analizan las posibles causas de cada modo de falla y se identifican los controles existentes para mitigar o prevenir estos fallos. 5. Evaluación de la probabilidad de ocurrencia: Se determina la probabilidad de que cada modo de falla ocurra, considerando factores como la frecuencia de uso, la experiencia pasada y otros datos relevantes. 6. Evaluación de la detección: Se evalúa la capacidad del sistema para detectar y corregir cada modo de falla antes de que cause un efecto negativo. 7. Cálculo del índice de prioridad de riesgo (IPR): Se calcula un índice de prioridad de riesgo para cada modo de falla multiplicando la gravedad, la probabilidad de ocurrencia y la detección. 8. Desarrollo de acciones correctivas: Se desarrollan e implementan acciones correctivas para abordar los modos de falla de mayor riesgo identificados durante el proceso AME/FMEA. APLICACIÓN DEL FMEA • Para disminuir la probabilidad de ocurrencia de fallas en proyectos de nuevos productos o procesos; • Para disminuir la probabilidad de fallas potenciales (que aún no hayan ocurrido) en productos o procesos en operación; • Para aumentar la confiabilidad de productos o procesos en operación a través del análisis de las fallas que ya ocurrieron; • Para disminuir los riesgos de errores y aumentar la calidad en los procedimientos Administrativos Un desvío es cuando llegamos a un puesto de trabajo y algo no se encuentra bien de lo que nosotros ya habíamos planteado. Riesgos en los puestos de trabajo pueden ser clasificados en varias categorías principales: 1. Riesgos físicos: Incluyen condiciones ambientales como ruido, vibraciones, temperatura extrema, radiación, iluminación inadecuada, entre otros, que pueden causar lesiones o enfermedades físicas. 2. Riesgos químicos: Se refieren a la exposición a sustancias peligrosas como productos químicos, gases, vapores o polvos que pueden provocar intoxicaciones, quemaduras, alergias, cáncer u otros problemas de salud. 3. Riesgos biológicos: Relacionados con la exposición a agentes biológicos como bacterias, virus, hongos, parásitos, que pueden causar enfermedades infecciosas o alergias. 4. Riesgos ergonómicos: Tienen que ver con la ergonomía del puesto de trabajo, incluyendo factores como la postura, el movimiento repetitivo, la carga física, la manipulación de cargas pesadas, que pueden provocar lesiones musculoesqueléticas o trastornos músculo-esqueléticos. 5. Riesgos psicosociales: Se refieren a aspectos del entorno laboral que pueden afectar la salud mental y el bienestar emocional de los trabajadores, como el estrés laboral, la carga emocional, el acoso, la violencia, la falta de apoyo social, entre otros. 6. Riesgos de seguridad: Relacionados con la seguridad física de los trabajadores, incluyendo la exposición a caídas, golpes, atrapamientos, cortes, incendios, explosiones u otros accidentes que pueden causar lesiones graves o fatales. Es fundamental identificar, evaluar y gestionar estos diferentes tipos de riesgos en los puestos de trabajo para proteger la salud y la seguridad de los trabajadores y prevenir accidentes laborales, enfermedades ocupacionales y otros problemas relacionados con el trabajo. Pasos para completar Análisis de Trabajo Seguro (ATS) o Procedimiento de Trabajo Seguro (PTS) es un proceso utilizado para identificar los riesgos asociados con una tarea específica y establecer medidas preventivas para garantizar que se realice de manera segura. Aquí tienes los pasos comunes para completar un ATS o PTS: 1. Identificación de la tarea: Identifica la tarea específica que será analizada. Esto puede incluir cualquier actividad o proceso que se realice en el lugar de trabajo, desde el manejo de maquinaria hasta la limpieza de áreas. 2. Desglose de la tarea: Divide la tarea en pasos o fases individuales. Esto implica identificar las acciones y actividades necesarias para completar la tarea desde el inicio hasta el final. 3. Identificación de los peligros: Examina cada paso de la tarea para identificar los posibles peligros o riesgos asociados. Esto puede incluir peligros físicos, químicos, biológicos, ergonómicos o psicosociales. 4. Evaluación de riesgos: Evalúa la probabilidad y el impacto de cada riesgo identificado. Determina la gravedad de los posibles daños o lesiones que podrían ocurrir y la probabilidad de que ocurran. 5. Desarrollo de medidas de control: Desarrolla medidas preventivas para controlar o eliminar los riesgos identificados. Esto puede incluir la implementación de controles técnicos, administrativos o de equipo de protección personal (EPP). 6. Documentación del ATS/PTS: Documenta todos los pasos anteriores en un formato claro y fácil de entender. Esto puede incluir una descripción detallada de la tarea, los riesgos identificados y las medidas de control recomendadas. 7. Capacitación y comunicación: Capacita a los trabajadores involucrados en la tarea sobre los riesgos identificados y las medidas de control recomendadas. Asegúrate de que todos comprendan cómo realizar la tarea de manera segura. 8. Implementación y seguimiento: Implementa las medidas de control recomendadas y monitorea regularmente su efectividad. Realiza ajustes según sea necesario para garantizar que la tarea se realice de manera segura en todo momento. 9. Revisión y actualización: Revisa periódicamente el ATS/PTS para identificar cualquier cambio en la tarea o los riesgos asociados. Actualiza el análisis según sea necesario para garantizar que siga siendo relevante y efectivo. Medidas de prevención Tareas: Un obrero en construcción: 1) -Levantamiento de andamios. Riesgos: (Choques, golpes, cortes y aprisionamientos). Medida preventiva: (Uso de EPI’s específicos, arneses y cuerdas en Y, amarrarse a puntos de anclaje fijos y superiores; Utilizar siempre herramientas pegadas al trabajador). 2) -Levantamiento de estructura. Riesgos: (Golpes en miembros superiores e inferiores, cortes en manos con la sierra circular, caídas sobre nivel, atrapamientos, sobre- esfuerzos. Derrumbes por falla en el calculo de dimensionado de los elementos estructurales de los encofrados. Caídas sobre nivel). Medidas preventivas: (Cumplir con todas las normas básicas de seguridad, los trabajadores deben estar informados y tener formación para las tareas a realizar). 3) -Cavar pozos. Riesgos (Desprendimientos de materiales, tierras, rocas). Medidas preventivas: (Evitar a toda costa trabajar bajo cargas elevadas. Cualquier desprendimiento o caída de algún material a cierta altura puede generar un daño importante). 4) -Limpiar escombros. Riesgos: (salpicaduras, contacto, inhalación, exposición a sustancias nocivas, contacto con sustancias cáusticas y/o corrosivas) Medidas preventivas: ( Equipo de Protección Individual (EPI): Esto incluye botas, guantes y casco. Gafas de seguridad, arnés, si el trabajo es en altura Mascarilla, evitar pisar zonas mojadas o resbaladizas. Barrer en el sentido del avance. 5) -Coloca refuerzos en las paredes laterales de las excavaciones. Riesgos: (Derrumbamiento del terreno o de edificios colindantes, atrapamientos e inundaciones). Medidas preventivas: (Sacar las rocas, rodados, escombros y todo material que se observe suelto en la superficie de las paredes de la excavación. Colocar rodapiés o cuñas en los niveles superiores de los talud, para evitar la caída de materiales o elementos sueltos dentro de la excavación).