Está en la página 1de 3

INTERNATIONAL BUSINESS:

Crisis en la cadena global de suministros

I. INTRODUCCIÓN

Una cadena de suministro es el conjunto de actividades encargadas en la elaboración y


distribución para llevar a cabo el proceso de venta de un producto en su totalidad. Se
encuentra compuesta principalmente por los fabricantes, proveedores, transportistas,
entre otros. Con el propósito que la mercancía logre llegar al cliente final en óptimas
condiciones. No obstante, puede generar un riesgo para la empresa, por la
interdependencia que existe en cada etapa de una cadena.

II. ORIGEN Y PROBLEMÁTICA ACTUAL

Empezando por su extensión a cadena global de suministros debido a la globalización,


generó un mayor grado de complejidad por tener que realizarse conexiones con varios
países o hasta continentes. Ante esta situación, las empresas toman medidas para poder
prevenir cualquier dificultad, sin embargo, no se tiene control de aquellos choques
imprevistos que puede pasar, como fue la pandemia del COVID-19, siendo nombrada
como la principal crisis en la cadena global de suministros del 2021. Al haber requerido
medidas restrictivas para poder frenar el avance del virus, perjudicó en la producción,
disminuyendo el proceso de este mismo, conllevando a una menor inversión.
La industria más afectada fue la de semiconductores. Se elevaron de manera abismal la
demanda de laptops, computadoras, entre otros dispositivos, para el uso principal de
clases virtuales o trabajo remoto debido al confinamiento que estaba existiendo en varios
países. Por el lado de la oferta, la gran inversión que se necesita la producción de estos
materiales se centra en tan solo cuatro empresas, así fue como generó una inestabilidad
en la oferta y demanda. De igual forma, este fenómeno perjudicó la logística marítima
comercial. Causando desvío de rutas, atraso en la carga y descarga, y la escasez de
contenedores. Esto siendo problema alarmante, debido que el transporte marítimo es una
de las etapas fundamentales en la cadena global de suministros.
Se es importante resaltar que los eslabones de producción y comercio de la cadena ya se
encontraban en inestabilidad desde antes que sucediera la pandemia, a causa por la
‘guerra’ comercial entre Estados Unidos y China. En el año 2019 se registró el menor
crecimiento del volumen transportado, solo aumentando un 0.5%. Para el 2020, el
periodo más fuerte COVID-19, las navieras se vieron con la obligación de disminuir su
oferta de buques por la disminución en la producción en bienes, debido al cierre de
fábricas, y la poca demanda que había. Debido a ello, alcanzando el índice más bajo desde
diciembre del 2008 en órdenes de exportación. No obstante, debido al proceso de las
vacunas y el de controlar esta pandemia, se observó antes de lo esperado una
recuperación en la demanda global.
Sin embargo, esto igual produjo un desbalance entre la demanda por transporte marítimo
y la restringida oferta de las navieras, generando la subida de precio en los fletes
marítimos, en especial los que se dirigían a China. Siendo registrado en setiembre del 2021
el precio más alto a nivel global de un contenedor, con medida de 40 pies a 10,377 dólares
estadounidense. Este impedimento en el flujo de producción generó inconvenientes,
viéndose afectado los insumos, bienes de capital, entre otros. Con el paso de los meses,
los tiempos de entrega se iban ralentizando, registrando su mínimo en el mes de octubre
del año 2021, debido al congestionamiento marítimo.
Aparte de los motivos mencionados, otros problemas habían estado surgiendo llegando a
afectar a la cadena global de suministro. Uno de ellos, son los recientes recortes de
energía en el país de China, generando que las industrias de acero, aluminio, magnesio y
cemento detengan su producción. Esto causa inconvenientes directamente hacia la
industria automotriz, debido a que China posee el 87% de la producción de magnesio,
siendo este un material vital para el sector.
Por el lado de Europa, se ha previsto que los inventarios del magnesio se terminen a fines
de año, ocasionando la parálisis en la producción de los automóviles. De igual forma, en el
ámbito del comercio se está registrando distintos problemas que pueden llegar a afectar.
La escasez de almacenes y un déficit de transportistas para la distribución nacional en
Reino Unido y Estados Unidos son algunos de los inconvenientes que están aconteciendo.
Cerca de 80 mil camioneros y 400 mil en EE. UU y Europa respectivamente. Esto consigue
afectar a una amplia variedad de sectores y servicios, desde industrias tecnológicas hasta
industrias farmacéuticas.

III. EFECTOS Y PERSPECTIVAS

La dificultad percibida en torno a la cadena de suministro influyó en revisar de manera


más minuciosa el proceso de producción offshore y de la política just in time. Los
beneficios, la rentabilidad y la eficacia que ocasionaba la producción de bienes en otros
países, fue todo lo contrario por la dificultad en poder traerlos de su país de origen. De
igual forma, la distribución de productos por pedidos bajo demanda, dejaron varadas a
varias empresas que no pueden conseguir mantener su stock.
Para mediados del año 2022, se espera que empiece a disminuir la intensidad de los
problemas que están conllevando en el riesgo a la cadena global de suministro. Teniendo
como perspectiva en la cadena de producción el aumento en su capacidad instalada, como
el de microprocesadores, y crecimiento en las ofertas laborales.
Finalmente, después de la etapa del proceso de las vacunas y un control a nivel mundial
de la pandemia, se espera una disminución en la presión de la demanda, el alivio de las
congestiones en los puertos; así mismo, se proyecta el despliegue de nuevas y modernas
embarcaciones, un mejor desarrollo en las infraestructura y logística portuaria.

También podría gustarte