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Etapas Del Desarrollo Cognitivo-1
Etapas Del Desarrollo Cognitivo-1
Facilitadora:
Integrantes:
Dra. Luisana Alvarez Alvarez Silvia
30.627.609
Acosta Edgar 31.447.170
Cabeza Freddy
28.760.897
Carreño Heidy 31.389.482
Morales Efrain 30.628.351
Rivero Abraham
28.001.978
Rivero Eliezer 29.558.775
Santollo America 29.782.829
Zamora Celeste 30.994.5
Marzo, 2024
Piaget marcó el inicio de las etapas del desarrollo del niño con el periodo
sensorio motor, desde el nacimiento el niño experimenta movimientos que van
sumando a su asimilación sensorio motriz. Durante las primeras semanas de
vida, el niño desarrolla reflejos como el de succión, que irá perfeccionando con
el tiempo. A partir de las dos o tres semanas, comienza a mostrar lo que Piaget
llamó "inteligencia práctica" a través de la manipulación de objetos, generando
esquemas de acción. Durante el primer año, se observa un marcado
egocentrismo en el niño, con casualidad implícita en sus actividades. Un
avance importante es la aparición del lenguaje, que permitirá al niño expresar
sus acciones y comenzar el proceso de socialización. Además, con la
interiorización de la palabra, el niño empieza a tener su propia interpretación de
las palabras, lo que contribuye al desarrollo del pensamiento.
Primer mes.
Segundo mes.
Tercer mes.
- Desarrollo sensorio motor: Sigue movimientos con los ojos y la cabeza, deja
de chupar al mismo tiempo, busca con la mirada de donde salen los sonidos,
distingue sonidos del habla, agita los brazos cuando ve un objeto interesante.
Cuarto mes.
Quinto mes.
Sexto mes.
Séptimo mes.
A los siete meses, el bebé muestra un desarrollo físico en el que comienza a
gatear, se arrastra con objetos, equilibra bien la cabeza y puede sentarse solo
durante algunos minutos. En términos de desarrollo sensorio motor, el bebé
puede agarrar juguetes, golpear objetos y explorar su cuerpo con la boca y las
manos. A nivel intelectual, el bebé muestra una mayor atención, aprende las
implicaciones de los actos familiares y empieza a imitar sonidos. En cuanto al
desarrollo social, el bebé desea participar en la interacción social, muestra
emociones ante el juego y comienza a demostrar preferencias y molestias.
También puede asustarse ante extraños y está aprendiendo el significado del
"no" según el tono de voz.
Octavo mes.
Noveno mes.
En el noveno mes, el desarrollo físico incluye gatear con una mano ocupada o
levantada, subir escaleras gateando y sentarse correctamente en una silla.
También puede comenzar a dar sus primeros pasos apoyándose en los
muebles. En términos de desarrollo sensoriomotor, puede aplaudir, golpear
objetos con su cuerpo, recoger y manipular dos objetos al mismo tiempo, hacer
una torre de dos bloques y escuchar conversaciones y tonos de cantos. En
cuanto al desarrollo intelectual, reconoce las dimensiones de los objetos, se
aburre con la misma estimulación, puede recordar juegos del día anterior,
seguir instrucciones sencillas y decir "papa" o "mama" como nombres
específicos. En el aspecto social, vive ansioso por ser aprobado, inicia el juego,
elige un juguete para jugar, puede ser sensible hacia otros niños y llora si ellos
lloran. También imita los sonidos del lenguaje y quiere jugar cerca de su madre.
Décimo mes.
Undécimo mes.
A los 11 meses, el desarrollo físico incluye estar de pie solo, caminar por ratos,
trepar escaleras y aprender a bajarlas de espalda. En cuanto al desarrollo
sensorio motor, recoge minuciosamente objetos, coloca y quita objetos dentro
de una caja, y levanta la tapa de una caja. A nivel intelectual, compara actos
realizados con cada lado de su cuerpo, asocia propiedades con cosas,
obedece órdenes y comprende el significado del "no". En el ámbito social, imita
movimientos de adultos, muestra culpa por sus acciones incorrectas y se
vuelve más dependiente de su madre.
Primer año.
En el primer año, el desarrollo físico del niño incluye estar de pie, caminar y
gatear. También muestra movimientos rotatorios en la bañera y prefiere
alimentarse solo. En cuanto al desarrollo sensoriomotor, utiliza y alcanza con
su mano preferida, encaja objetos y construye torres de bloques. Disfruta con el
agua en el lavamanos o en el baño. En el aspecto intelectual, el niño
desenvuelve juguetes, recuerda eventos por más tiempo, agrupa objetos por
forma y color, identifica animales en libros y comienza a desarrollar la
conciencia. En el desarrollo social, expresa emociones, muestra cariño hacia
personas y juguetes, se interesa por las actividades de los adultos, puede
negarse a comer nuevos alimentos o a ser alimentado por su madre, y todavía
le asustan los lugares y personas desconocidas.
Segundo año.
A los dos años de edad, el niño muestra un gran desarrollo motor, con
habilidad para subir y bajar, mantener buen equilibrio y saltar con los pies
juntos. En cuanto al desarrollo cognitivo, comienza a entender nociones de
tiempo y espacio, construye torres con cubos y reconoce partes de su cuerpo.
En el lenguaje, avanza en la comprensión y articula frases de tres o cuatro
palabras, además de usar posesivos y pronombres. En su desarrollo socio
afectivo, muestra habilidades en la alimentación autónoma, establece
relaciones con personas desconocidas, pero aún experimenta contradicciones
entre la independencia y dependencia, y puede comenzar a controlar sus
esfínteres rectales.
Tercer año.
Apego seguro.
El apego seguro se basa en la confianza y seguridad que el bebé recibe de su
figura de referencia. Respetando su crecimiento y proceso de maduración, el
bebé se adentra en su autodescubrimiento de nuevas habilidades. Así, el niño
contará con la confianza necesaria para mejorar sus habilidades y desarrollar
su autoestima. La figura de apego proporciona un ambiente seguro para el
desarrollo personal, sin forzar la adquisición de habilidades ni realizarlas por el
bebé. Es importante evitar caer en la sobreprotección para fomentar la
autonomía del niño.
Apego inseguro.
El apego ambivalente se da cuando la figura de referencia del niño no es
completamente confiable, lo que genera un ambiente inconsistente para el
pequeño. Esto provoca que el niño desarrolle cierto miedo a lo que pueda
suceder en cada momento y una falsa independencia. En algunos casos, el
niño puede parecer totalmente independiente, pero en realidad no lo es del
todo, o puede volverse excesivamente dependiente de un objeto, comida o
persona. Dentro del apego inseguro podemos diferenciar algunos subtipos:
Apego ambivalente/resistente.
Este se manifiesta por medio de niños que exploran muy poco el ambiente y
que no quieren separarse de su figura de apego. Cuando se produce esta
separación de la madre, a su regreso responden de manera ambivalente,
permaneciendo cerca, pero resistiéndose al contacto físico.
Apego evitativo.
Este se materializa en aquellos peques que no sienten malestar por la
separación e ignoran a la madre (o cuidador principal) a su regreso. Exploran
continuamente el ambiente y son muy sociables con extraños.
Apego desorganizado.
Este se despliega como una combinación de los dos anteriores, con un peque
que no muestra especial importancia a la separación de su madre y, a su
regreso, presenta conductas contradictorias.