Está en la página 1de 5

IMPORTANCIA DEL BONORUM POSSESSIO

Autor: Alonso David Peña Rodríguez C.I V-20.544.902

Previo a la instauración via pretoriana del testamento por Bonorum


possessio, este particular se regía conforme a las reglas del sistema civil, el cual
establecía como un orden de llamada a suceder basado en el parentesco
Agnaticio, en el cual se reconocían los herederos en el siguiente orden:

1.- Herederos de derecho propio:

hijos en potestad y la mujer unida al pater familiae mediante matrimonio


cum manu, siendo así que los hijos herederos de derecho propio suceden sin
necesidad de aceptar la herencia, aunque tienen el beneficium abstinendi

2. Agnados:

Sometidos en conjunto a un mismo pater familiae, así como los hermanos


del de cujus.

3.Gentiles:

Los varones pertenecientes a la misma gens.

La bonorum possessio en el Derecho Romano implicaba el derecho a tomar


posesión de la herencia de alguien que había fallecido. Era una forma de sucesión
que alteraba la secuencia hereditaria establecida por el jus civile tradicional. El
pretor concedía este derecho, permitiendo a los hijos que habían sido
emancipados, así como a los descendientes directos, a los parientes por
consanguinidad después de los parientes por agnación, y al final, al cónyuge que
quedaba podia acceder a los bienes del difunto.

Sistema de sucesión de la bonorum possessio o pretorio:

También llamado sine tabulas estuvo basado en el parentesco cognaticio, y


el orden de llamado a sucesión era el siguiente:
1.Liberi:

comprendía a los hijos y descendientes, incluyendo aun los emancipados.

2. Legítimos:

aquí se incluían a parientes los agnados próximos.

3.Cognados:

eran llamados a suceder los parientes por vinculo de consanguinidad y se


consideraban hasta el 7mo grado colateral.

4. Cónyuge.

Así mismo los libertos podían atender su llamada a la que concurre incluso el
patrono y sus herederos.

El sistema bonorum possessio sufrió reformas posteriores a su


implementación surtiendo los siguientes efectos:

Senadoconsulto Tertuliano:

Incluye a la madre a la herencia del hijo, previo a esto solo podía la madre
suceder si se encontraba bajo la manus del de cujus y lo hacía como si una
hermana se tratare, tras la promulgación de dicho senado consulto se
reconocieron los derechos sucesorios de la mujer.

Senadoconsulto Orficiano:

Previo a la promulgación de este senadoconsulto, la sucesion entre madre


e hijos se regía conforme a la ley decenviral, la cual establecia que los hijos solo
podían suceder a su madre en el supuesto que ella estuviera bajo la manus de su
conyugues, siendo así, estos eran considerados como hermanos, heredando
como agnados consanguíneos. El Senadoconsulto Orficiano modifico esto
permitiendo que los hijos e hijas heredaran de su madre en orden preferencial con
respecto a todos los agnados, esta disposición se extendió posteriormente a los
nietos en relación a su abuela difunta.

Este senadoconsulto representó un avance significativo en el


reconocimiento de la relación materno-filial en la herencia intestada, tanto en el
ámbito civil como en el pretorio, y reflejó un cambio en la percepción de las
relaciones familiares, favoreciendo a los cognados (parientes por sangre) sobre
los agnados (parientes por ley civil) en la sucesión intestada. llama a los hijos a la
herencia de la madre.

Justiniano añadió lo siguiente al orden de sucesión:

1. Descendientes

2. Ascendientes, distinguiendo de doble o de un solo vínculo

3. Parientes colaterales hasta 6 y 7 grado

4. Cónyuge viudo.

La bonorum possessio emergió como una necesidad a la justa repartición


de los bienes del de cujus en la sucesión y la vez como respuesta a la rigidez del
sistema sucesorio del ius civile, haciendo posible que parientes que no estaban
aun contemplados como causahabientes en el ius civile, pudiesen optar a la
posesión de los bienes hereditarios de manera legitima. El bonorum possessio
hacia que aquellos parientes que, aunque no poseían un título hereditario civil
adquirir por consideración del pretor derecho a la herencia.

La bonorum possessio fue una institución del Derecho Romano de suma


relevancia, debido a que significaba un avance considerable en el sistema
sucesorio de la época. Su importancia yace en los siguientes aspectos novedosos:

a) Permitía una flexibilización del Derecho Sucesorio: con su entrada en


vigencia se percibió una mayor flexibilidad de cara a la rigidez del ius civile,
muy particularmente en aquellos casos donde las vetustas leyes civiles no
tomaban en cuenta las dinámicas y cambiantes situaciones familiares que
se iban manifestando con el tiempo.

b) Protección de la Familia Cognaticia: se reconocieron y tutelaron los


derechos sucesorios de los parientes cognáticos que otrora no eran
tomados en consideración, es decir, aquellos unidos por vínculos
consanguíneos, tales como los hijos emancipados, que en épocas pasadas
fueron excluidos de la sucesión según el ius civile.

c) Auxilio a la Justicia: La bonorum possessio, poseía cualidades auxiliares y


correctoras, adjudicando protección posesoria a aquellos a quienes
pretendían acceder al derecho a una herencia legitima, aun cuando no
poseían de acuerdo al ius civile título hereditario.

d) Simplificación de Procedimientos: la bonorum possesio hacia de los


procedimientos sucesorios más una vía más ágil y expresa para reclamar la
posesión de bienes hereditarios de manera legitima, omitiendo la kafkiana
tarea que significaba la hereditatis petitio.

e) Transición hacia la Equidad: La bonorum possessio, en su época,


representó un avance y una evolución que llego a significar un sistema
sucesorio aún más equitativo y adaptado a la realidad social de aquel
entonces, dotando a la cognación y la voluntad sobre la mera agnación de
la relevancia que se merecia.

La bonorum possessio fue crucial para modificar el derecho sucesorio a las


reales necesidades sociales y familiares de la roma de aquel entonces, logrando
crear un hito histórico que se traduciría en un avance que logro un sistema más
justo y equitativo en la sucesión hereditaria pues permitía a ciertos individuos,
como los patronos de libertos, hacerse con la posesión de bienes hereditarios, aun
cuando no figurasen como herederos directos según el ius civile.

En el derecho sucesorio moderno, aunque la bonorum possessio tal y


como fue concebida, ya no existe ni está vigente, se pueden apreciar vestigios de
su espíritu que se pueden identificar en muchos principios que aún perduran hasta
nuestros días, por ejemplo, en el derecho actual, se reconoce la importancia de
proteger los derechos sucesorios de una espectro más ampliado de personas,
atendiendo a personas que van más allá de los herederos directos, incluyendo a
familiares colaterales en ocasiones inclusive a personas unidas con el difunto
mediante vínculos afectivos o económicos significativos.

La noción de que uno puede poseer bienes sin tener la propiedad total ha
evolucionado y se refleja en conceptos como el usufructo o el fideicomiso, donde
los derechos sobre los bienes pueden pertenecer a alguien sin que esta persona
sea el propietario absoluto.

En esencia, aunque las normativas y procedimientos han variado a lo


largo del tiempo, el legado de la bonorum possessio persiste en cómo el derecho
sucesorio contemporáneo intenta armonizar los intereses de todos los potenciales
beneficiarios de una herencia y en la manera en que se organiza la asignación de
los activos del fallecido.

También podría gustarte